D090218 Hitler, Un Chabacano Zampabollos

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INTERNACIONAL

JUEVES 19š2š2009

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Sarkozy destaca que España destruye empleo cinco veces más rápido El presidente francés anuncia un paquete de ayudas por 2.600 millones de euros JUAN PEDRO QUIÑONERO CORRESPONSAL PARÍS. Acosado por las consecuencias sociales de la crisis y los disturbios en el departamento de ultramar de la Guadalupe, el presidente Nicolas Sarkozy anunció ayer 2.600 millones de euros de ayudas a las clases medias, advirtiendo que «no debemos caer en los errores del pasado: la única solución para salir pronto de la crisis es valorizar la justicia, el trabajo y el esfuerzo». Sarkozy recibió ayer a la patronal y los sindicatos para discutir las fórmulas que él propone para salir de la crisis: «No debemos cometer los mismos errores del pasado, cuando las subidas del salario mínimo daban poder adquisitivo inmediato creando más paro poco más tarde. Las reformas son indispensables para salir fortalecidos de la crisis». Tras tal declaración de principios, el presidente anunció a la patronal y los sindicatos un paquete de 2.600 millones de euros de ayudas directas e indirectas. «Se trata de medidas de justicia social. Cuando las grandes empresas cotizadas en bolsa anuncian grandes beneficios, es mi obligación pedir que los trabajadores participen en alguna medida en la riqueza que ellos han contribuido a producir». En su intervención ante los representantes de empresarios y trabajadores, el presidente francés reconoció que la situación es «seria» y «difícil»,

pero destacó que es «incluso más dura para nuestros socios». Y enumeró a continuación los males de las economías de Japón, Reino Unido y Estados Unidos, para terminar recordando que «España ha perdido 500.000 empleos en el cuarto semestre de 2008, cinco veces y media más que en Francia en el mismo periodo». El gobierno de Sarkozy anunció que tomará de inmediato una serie de medidas de ayuda dirigidas esencialmente a las clases medias. Se aumentará hasta el 75 por ciento del salario mínimo las ayudas a los trabajadores que estén en paro parcial. Se crea un fondo de ayuda social inmediata dotado de unos 2.500 o 3.000 millones de euros. Se concederá una prima excepcional de 500 euros a los parados que puedan justificar entre uno o dos meses de trabajo. Se conceden primas de 150 euros a los 3 millones de familias que se benefician de ayudas escolares, y «bonos» de 200 euros para ayuda a las familias menos favorecidas. El anuncio de estas ayudas constituye un intento de apaciguar el clima antes de una nueva jornada de protesta sindical, convocada el próximo mes de marzo. Sarkozy recibirá hoy a representantes políticos y sindicales de la Guadalupe, para intentar negociar fórmulas de salida de una crisis que ayer se cobró el primer muerto.

Adolf Hitler con varios de sus colaboradores en Immola, Finlandia, el 4 de julio de 1942

HITLER, UN CHABACANO ZAMPABOLLOS

En un informe de la época descubierto en Inglaterra el Führer aparece como un bulímico, flatulento que se mordía las uñas y se tocaba la nariz en la mesa POR RAMIRO VILLAPADIERNA CORRESPONSAL BERLÍN. Que Hitler sufriera de gases no explica en absoluto su «solución final» para con los hebreos de Europa, aunque hasta Norman Mailer ceda a la tentación explicar freudianamente al canciller alemán. Se sabe que su extracción era baja, su cultura mínima (para la época) y sus modos, criminales, pero un informe perdido revela ahora que también sus modales eran eminentemente groseros. Posiblemente no lo haga más repulsivo, pero hay cons-

tancia cercana de que Adolf Hitler (1889-1945) padecía desórdenes digestivos con resultado de flatulencias, se tocaba la nariz en la mesa ignorando las conversaciones de sus comensales, se mordía las uñas distraídamente en público y sus accesos de cólera tenían sumidos en el pavor a sus auxiliares. El informe llamado «Copia secreta, Nummer 173», que ha aparecido medio siglo después en la casa de un viejo agente del sur de Inglaterra, aporta características humanas apenas conocidas y poco halagüeñas, del hombre que quiso fundar el

AFP

«Reich de los Mil Años». Así lo aseguraba ayer a los medios Richard Westwood-Brookes, quien procederá a subastar el documento en los próximos meses. El autócrata era literalmente un zampabollos, alternados éstos con infusiones, lo que le provocaba el malestar intestinal. Aparte, «comía mecánicamente», no probaba la carne, sólo comía hortalizas hervidas, bebía un par de cervezas, no tomaba café y tenía prohibido fumar en su presencia. Las cercanas observaciones asumen que Hitler mantendría relaciones de orden «masoquista pasivo» con las mujeres, dijo en su entorno que no se había casado a fin de que una familia no interfiriese en su deber hacia la nación, y habría mostrado «inclinaciones» hacia su lugarteniente, Rudolph Hess. El informe fue recabado por un teniente coronel alemán que permaneció algunos meses en el cuartel general del Führer en Rastenburg, Prusia Oriental.