Menor de 8 años es derivado desde establecimiento educacional, por inasistencias reiteradas y problemas conductuales caracterizados por molestar a sus compañeros en clases y en recreos, por lo que es excluido de juegos; y no obedecer instrucciones de profesora en clases. La familia se encuentra constituida por sus padres y él. Sus papás trabajan la mayor parte del día, por lo que el niño pasa gran parte de la tarde, solo en casa, y por lo general no hay quien se encargue de su cuidado, ya que no tienen familiares en la región. A veces la mamá ha solicitado a su vecina que lo cuide, pero últimamente esta no accede, ya que el niño muestra conductas agresivas con sus hijos y suele desobedecer las órdenes que se le dan. La madre presenta una escolaridad de octavo básico, trabaja esporádicamente cuidando adultos mayores y vendiendo mercadería, contando con un bajo ingreso económico. El padre presenta una escolaridad de enseñanza media incompleta, trabajando como taxista, el ingreso familiar se encuentra determinado principalmente por lo percibido por él, lo que ha generado conflictos en la pareja. El padre utiliza como estrategia de control de la conducta del hijo reprimendas, prohibiciones, instigación física. Al entrevistarlo señala que “Una palmada bien dada, y de vez en cuando, no daña a los niños. Si los padres no tienen mano dura, no obtendrán el respeto de sus hijos”, mientras que la madre refiere que “Si los golpes resultaron con uno, también deberían funcionar con los niños de esta generación”.