Participante; Pedro Luis meregildo Anderson. Matricula 14-1688 Asignatura Estructura organizacional Facilitador Luz yberki escolástico
Fecha 14-3-2018 Nagua, república dominicana.
1- Un ensayo (texto reflexivo) acerca de la personalidad y los valores y su impacto en la productividad y las relaciones personales en la empresa, utilizar como referencia el libro de texto básico de la asignatura. La personalidad es la forma en que reacciona un individuo e interactúa con otros. La misma es importante y también los valores, porque a través de estos se pueden tomar decisiones para la mejor contratación de los individuos que van a trabajar en la organización. La personalidad influye en gran manera en lo que es la productividad de la empresa y en las relaciones entre los empleados ya que como sabemos cada persona es única y aunque tengan los mismos temperamentos reaccionaran diferentes a las situaciones aun sean las mismas. Algunas características de la personalidad que influye en el comportamiento del individuo dentro de la organización son:
Autoestima Maquiavelismo Narcisismo Auto monitoreo Propensión al riesgo Etc.…
Los valores por otro lado son principios que nos permiten orientar nuestro comportamiento en función de realizarnos como personas. Son creencias fundamentales que nos ayudan a preferir, apreciar y elegir unas cosas en lugar de otras, o un comportamiento en lugar de otro Los valores son importantes para el estudio del comportamiento organizacional debido a que dan el fundamento para la comprensión de las actitudes y Motivación de las personas, porque influyen en nuestras percepciones.
El ajuste persona–organización
Como en años recientes se ha extendido el interés hacia el ajuste entre las personas con las organizaciones así como con los trabajos. En la medida en que una organización se enfrente a un ambiente dinámico y cambiante, y requiera empleados capaces de cambiar de tareas con rapidez y que se muevan con facilidad de un equipo a otro más importante será que las personalidades de éstos se ajusten al conjunto de la cultura organizacional y no tanto a las características de un trabajo específico. El ajuste persona–organización plantea en esencia que las personas abandonan las organizaciones que no son compatibles con sus personalidades. Con el uso de la terminología de los Cinco Grandes, por ejemplo, se esperaría que las personas muy extrovertidas se ajustaran mejor a las culturas agresivas y orientadas a los equipos, que los individuos con mucha adaptabilidad se ajustaran a climas organizacionales de apoyo que a los que se centraran en la agresividad, y que las personas abiertas a las experiencias se acoplaran mejor a las organizaciones que hicieran énfasis en la innovación más que en la estandarización.