Infecciones Snc 3.1.docx

  • Uploaded by: Alejandra Cantillo
  • 0
  • 0
  • December 2019
  • PDF

This document was uploaded by user and they confirmed that they have the permission to share it. If you are author or own the copyright of this book, please report to us by using this DMCA report form. Report DMCA


Overview

Download & View Infecciones Snc 3.1.docx as PDF for free.

More details

  • Words: 2,227
  • Pages: 15
1

Universidad de la Costa: Neuropsicología

Programa: psicología Grupo: AN

Infecciones del sistema nervioso

Profesor: Mily Yecenia Ardila Romero

Estudiantes: Arcia Yubisais Cantillo Alejandra Herazo Valentina Jiménez Diola Pérez Lisette

2

Introducción El presente trabajo refiere a la temática de las infecciones del sistema nervioso, las cuales engloban un conjunto de enfermedades que requieren de atención urgente , ya que un retraso en su diagnóstico o en el tratamiento conllevaría a una alta tasa de complicaciones neurológicas, discapacidad y mortalidad. Para entender de forma más completa este grupo de patologías, es necesario mencionar que, los sintomas pueden ser inespecíficos, lo que dificulta y retrasa su diagnóstico, siendo fundamentalmente importante toda aquella información obtenida a través de la conversación entre el médico y el paciente, con la finalidad de realizar preguntas sobre la historia cl ínica, antecedentes familiares, etc. (anamnesis); además de la exploración física y exploraciones complementarias.

3

Objeivo general Conocer, especificar y definir cuáles son todas aquellas infecciones que interfieren en el buen funcionamiento tanto físico como mental del organismo; sabiendo que estas se pueden clasificar según diferentes huespedes, afectando de manera directa el funcionamiento del SNC.

Objetivos especificos 

4

Tabla de contenido 1. 2. 3.

5

Infecciones del sistema nervioso Las infecciones en el sistema nervioso pueden verse arraigadas, en múltiples ocasiones, por agentes infecciosos que impactan en él , a través de los oídos, garganta, nariz, sangre e incluso como consecuencia directa de operaciones quirúrgicas y traumatismos craneoencefálicos; de la misma forma, puede verse infectado por diferentes microorganismos, dentro de los cuales encontramos, bacterias, virus, hongos, protozoos y helmintos; a su vez, la manifestación clínica de estas infecciones puede ser aguda, subaguda o crónica dependiendo de su la etiología, la virulencia del microorganismo y la localización del proceso infeccioso. Las infecciones pueden afectar el tejido cerebral por varias razones. En primer lugar, pueden interferir en el flujo sanguineo cerebral, generando trombosis o hemorragias de los capilares; tienen, además, la capacidad para alterar seriamente el metabolismo de las celulas o las caracteristicas de la membrana celular,afectando las propiedades eléctricas de la misma. El edema que generalmente aparece como consecuencia de un infección puede abarcar diversas estructuras cerebrales, y alterar su función cerebral. La reacción de defensa del organismo contra la infección es fuente potencial de alteraciones en el sistema nervioso. La producción de pus (un fluido compuesto básicamente de células blancas) modifica el líquido extracelular y su producción puede incrementar la presión dentro del cerebro. Los procesos infecciosos pueden provocar daño cerebral debido a diversas razones:

6

I.

Interfieren el suministro de sangre, produciendo trombosis, hemorragia, u obturación completa de los vasos sanguineo.

II.

Pueden afectar las membranas de las neuronas alterando sus propiedades electricas o sus propiedades enzimaticas .

III.

Alteran el equilibrio metabolico de la glucosa y el oxigeno de la neurona, llegando a provocar su destrucción.

IV.

Provocan frecuentemente edema, que com prime el cerebro dentro de la caja craneal, lo que produce indirectamente un mayor riesgo de disfunción cerebral.

V.

Producen pus como resultado de la infección, lo que perjudica a las neuronas , ya que aumenta la presión intracraneal y se altera la estabilida d de los fluidos extracelulares.

 Su clasificación depende del tipo de huésped infeccioso, y estos pueden ser virales, bacterianas, micóticas y parasitaria. Infecciones virales: un virus es un agregado encapsulado de ácido nucleico que puede estar constituido de DNA o RNA. Los virus llamados neurotrópicos tienen proclividad por el sistema nervioso, como es el caso de los que producen la poliomelitis y la rabia. Los virus pantrópicos, como el del herpes simple, atacan todo el cuerpo, incluyendo el sistema nervioso. Las células del sistema nervioso presentan una susceptibilidad diferencial a los diferentes virus, la cual depende de la presencia de receptores espe cíficos en la membrana sobre los cuales se fija el virus. Los efectos del virus sobre el sistema nervioso dependerán de la susceptibilidad diferencial que presentan las células al virus. Si se fija en

7

las meninges, se presenta una meningitis; si compromete células parenquimatosas del cerebro o la medula, puede dar origen a trastornos aún más severos como la encefalitis y poliomelitis, respectivamente (Ardila & Rosselli, 2007) Las infecciones víricas se manifiestan por: afectación neurológica por VIH, Encefalitis herpética, Meningitis vírica, Encefalitis aguda, Virus de la varicela zoster, Poliomielitis, Kuru, y Rabia, entre otras.  Infecciones bacterianas: la palabra bacterium se refiere a cualquier microorganismo generalmente de una sola célula, que no posee clorofila y que se multiplica por simple división celular. Las infecciones bacterianas del sistema nervioso son resultantes de una invasión de estos microorganismos generalmente por vía sanguínea. Las infecciones bact erianas producen principalmente meningitis, y en ocasiones pueden formar abscesos cerebrales que se inician como pequeños focos de bacteria purulenta (productora de pus) que causa la necrosis (muerte) de las células de la región afectada. A medida que las bacterias se multiplican y destruyen el número mayor de células, el absceso actúa como una masa que ocupa espacio e incrementa la presión intracraneana. Las infecciones bacterianas se manifiestan por: Meningitis bacteriana, Absceso cerebral, Absceso epidural, Empiema subdural, Lepra, Botulismo, Tétanos, Difteria, Brucelosis, entre otras.  Infecciones micóticas: Son producidas por hongos que llegan al sistema nervioso. El sistema nervioso central es usualmente resistente a las

8

infecciones micóticas, sin embargo, estas defensas pueden romperse en personas que sufren enfermedades importantes como tuberculosis y leucemia. Las infecciones micóticas se manifiestan por: Criptococosis, Aspergilosis, Candidiasis, Mucormicosis, Histoplasmosis, Coccidiomicosis, Blastomicosis, entre otras.  Infecciones parasitarias: Se le llama parásito al organismo que vive a expensas de otro (el huésped). Diferentes tipos de parásitos pueden invadir el sistema nervioso central; los más importantes son la malaria, que puede producir el paludismo cerebral; las amebas, que al ingresar al cerebro pueden producir una encefalitis y abscesos cerebrales; y el cisticerco, que puede producir signos neurológicos focales y un deterioro cognoscitivo generalizado. Las infecciones parasitarias se manifiestan por: Toxoplasmosis, Malaria cerebral, Tripanosomiasis, Enfermedad de Lyme, Leptospirosis, Neurosífilis, Amebiasis, entre otras. Las infecciones se pueden ver por una clasificación específica, como lo hemos mencionado anteriormente, éstas a su vez, son contraídas por diferentes vías, manifestando una gran cantidad de infecciones. A lo largo de nuestro trabajo resaltaremos tres tipos de in fecciones siendo estas las más comunes.

9

Meningitis Es una infección que hace que las membranas protectoras del sistema nervioso se hinchen. La inflamación del cerebro y la médula espinal puede afectar a todas las partes de su cuerpo. La fiebre y otros síntomas pueden aparecer de repente y progresar muy rápido, causando efectos devastadores. Meningitis bacteriana: Es una infección causada por diversas bacterias como el Streptococus Pneumoniae o la Hemophilus influenzae, que afecta a la aracnoides y la piamadre provocando un aumento en el número de leucocitos en el LCR. Se presentan 5 a 10 casos por cada 100.000 habitantes, con una tasa de mortalidad elevada, entre el 10 -15%. Produce fiebre, cefalea, convulsiones, fotofobia, movimientos oculares dolorosos, rigidez de nuca, vómitos, dolor de cuello, petequias, estupor y coma. Las secuelas neuropsicológicas pueden oscilar desde la recuperación total hasta la presencia de déficit crónicos en atención, memoria, lenguaje o en la actividad perceptivo -motora. En algunos casos, la infección es yatrógena, es decir, que se introduce en el curso de una intervención quirúrgica cerebral o raquídea, la colocación de una derivación ventriculoperitoneal, que es una cirugía para tratar el exceso de líquido cefalorraquídeo (LCR) en las cavidades (ventrículos) del cerebro (hidrocefalia); o, en raras ocasiones, por una aguja de punción lumbar. Cada vez más la infección es nosocomial, es decir, adquirida en las instituciones hospitalarias. La meningitis viral puede hacernos enfermar mucho, pero a menudo no deja efectos duraderos. La meningitis bacteriana en cambio es mucho más seria, progresa rápidamente y puede causar daño permanente o inc luso poner en

10

peligro la vida, el diagnóstico y el tratamiento rápidos pueden ayu dar a prevenir algunos de los posibles efectos secundarios a largo plazo. Cualquiera puede contraer meningitis, pero es más común en bebés, niños y adolescentes. Absceso cerebral. Es una colección de material purulento dentro del cerebro, que suele estar asociado al edema, constituyendo un proceso necrótico. Cuando los microorganismos se multiplican y destruyen más células cerebrales, el absceso se comporta como una masa que crece y que al extenderse produce aumento en la presión intracraneal. Hay que sospechar de su presencia ante cualquier paciente con clínica sugestiva de proceso expansivo intracerebral y que cuente entre sus antecedentes un proceso séptico local producido por otiti s, sinusitis o traumatismo craneal abierto. Los abscesos se inician por la presencia de un pequeño foco de bacterias purulentas que producen necrosis de la región afectada. Puede ser de localización cerebral pero también epidural, subdural o medular, con unas tasas de mortalidad que oscilan entre el 10 -40%. El síntoma más habitual es la cefalea de intensidad moderada de localización hemicraneal, aunque también son frecuentes las convulsiones y la alteración en el nivel de conciencia, desde la letargia hasta el coma.

Imagen obtenida por RM donde se observan varias lesiones en forma de anillo que corresponden a abscesos cerebrales

11

Encefalitis por herpes simple. La encefalitis producida por el herpes simple es la enfermedad viral más frecuente del sistema nervioso. Su incidencia es de 1 caso por cada 300.000 personas al año, afectando a todos los grupos de ed ad. Hasta la llegada del Aciclovir (fármaco) provocaba hasta un 70% de fallecimientos, aunque este índice ha descendido a menos del 20% de los casos. Tras varios días de fiebre, cefalea y náuseas, el paciente presenta trastornos en la percepción olfatoria, afasia, crisis y alteraciones de carácter junto con estado de obnubilación, afectando a los lóbulos temporales internos y al lóbulo frontal. (Portellano, 2005) Muchas de las infecciones del sistema nervioso se derivan de infecciones originadas en otras partes del cuerpo y por ello se asocian con síntomas como fiebre, malestar general e hipotensión. Desde el punto de vista neuropsicológico, generalmente se evidencia un síndrome confusional agudo, caracterizado por desorientación temporo-espacial, defectos atencionales, fallas en la memoria y, en ocasiones, agitación psicomotora. Entre los síntomas observados en casos de hipertensión endocraneana se incluyen cefalea, vértigo, náusea y convulsiones. En casos de encefalitis por herpes simple son frecuentes las alteraciones comportamentales (vg., desinhibición, impulsividad) y las alteraciones graves de la memoria. El tratamiento varía según el tipo de infección. Las enfermedades virales son difíciles de tratar y por lo general se espera a que la enfermedad siga su curso. En caso de rabia se administra la vacuna antirrábica con el fin de

12

producir inmunidad antes de que la infección alcance el cerebro; una vez que se inicia la enfermedad, el desenlace es inevitablemente fatal. El tratamiento para las infecciones bacterianas consiste en la aplicación de antibiótico. Importancia del líquido cefalorraquídeo. Es la vía para determinar qué infecciones están presentes en nuestro SNC, constituyendo un pilar fundamental en el diagnóstico; así como el conocimiento de la sensibilidad y la especificidad de cada uno de la s pruebas bacteriológicas como, la prueba de reacción en cadena de la polimerasa (PCR), la cual consiste en una técnica de laboratorio que permite amplificar pequeños fragmentos de ADN para identificar gérmenes microscópicos que causan enfermedades; la determinación de anticuerpos, y los antígenos, son de gran importancia en el plan diagnóstico. Las características iniciales del análisis citoquímico pueden orientar a un diagnóstico específico, aunque se requiere la confirmación de éste por otros medios. Sin embargo, una buena correlación clínica inicial es suficiente para tomar una conducta terapéutica. Afectación neurológica en el VIH El virus del VIH sida, además de infectar las células del sistema inmunitario, puede infectar también las células del sistema nervioso central; apareciendo afectación neurológica como consecuencia de la infección directa de las células del cerebro o debido a infecciones oportunistas, 1o tumores que afecten al sistema nervioso (Portellano, 2005).

13

En algunos individuos seropositivos que aún no han desarrollado el SIDA se puede observar un bajo rendimiento en algunas pruebas neuropsicológicas, especialmente en tareas de atención, memoria, velocidad de procesamiento, denominación o coordinación motora. Así mismo, esta infección se puede ver complicada con un proceso de demencia progresivo (complejo demencia sida, CDS), considerado como una modalidad de encefalitis subaguda o crónica producida por este virus, que se manifiesta en fases avanzadas de inmunosupresión, presentando alteraciones cognitivas, conductuales y motoras diversas; para algunos pacientes que desarrollaron la enfermedad, el cuadro de demencia puede ser su único síntoma. Estos pacientes presentarán un deterioro similar al que se observa en otras demencias subcorticales.

14

Conclusión

15

Referencias Ardila, A., & Rosselli, y. M. (2007). Neuropsicología clínica. México, D, F.: El manual moderno. Codina, M. G., Cueto, M. d., & Vicente, J. E. (2010). Diagnóstico microbiológico de las infecciones del sistema nervioso central. Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica, 1-38. Gastón, I., Muruzábal, J., & Maraví, P. Q. (2008). Infecciones del sistema nervioso central en urgencias. Anales del Sistema Sanitario de Navarra, 99-113. Portellano, J. A. (2005). Introducción a la neuropsicología. Madrid: McGraw-Hill/Interamericana de España, S. A. U. R, M. C., T, M. L., S, I. S., S, F. F., C, C. P., & B, y. S. (2007). Enfermedad de Hansen: Revisión a propósito de un caso. Pontificia Universidad Católica, 1-6. Sánchez, C. L., & Pineda, y. F. (s.f.). Guía de atención de la lepra. Obtenido de Guías de promoción de la salud y prevención de enfermedades en la salud pública: http://www.medinformatica.net/TERAPEUTICA-STAR/Lepra_GuiaMPSindependiente_guias18.pdf

Related Documents

58 Infecciones Snc
June 2020 8
Infecciones Snc 3.1.docx
December 2019 7
05 Snc
May 2020 23
Patologias Snc
April 2020 21
Snc Fede
November 2019 24
Snc Lavalin
May 2020 18

More Documents from ""

Ps_mc_c,h,h,j..docx
November 2019 8
Infecciones Snc 3.1.docx
December 2019 7
December 2019 10
April 2020 75
Calculo Del Ptu.docx
June 2020 18