Casi todos nuestros sueños tienen una característica común: no siguen las leyes de la lógica que gobierna nuestro pensamiento cuando estamos despiertos. Las categorías de tiempo y espacio se pasan por alto. Vemos vivas a personas que han muerto; presenciamos acontecimientos que han sucedido hace muchos años. Soñamos que están ocurriendo simultáneamente dos hechos que no pueden en realidad producirse al mismo tiempo. Tampoco hacemos mucho caso a las leyes del espacio. Somos en nuestros sueños creadores de un mundo en el que el tiempo y el espacio, que limitan todas las actividades de nuestro cuerpo carecen de poder. ¿Qué es la realidad? ¿Cómo sabemos que lo que soñamos es irreal y que lo que nos ocurre en la vida diaria es real? PAGS 1617. Todos los mitos y todos los sueños tienen algo en común, todos ellos son escritos en el mismo idioma, el lenguaje simbólico. PAG19. El lenguaje simbólico es un lenguaje en el que las experiencias internas, los sentimientos y los pensamientos son expresados como si fueran experiencias sensoriales, acontecimientos del mundo exterior. Es un lenguaje que tiene toda lógica distinta del idioma convencional que hablamos a diario, una lógica en la que no son el tiempo y el espacio las categorías dominantes, sino la intensidad y la asociación. Es el único lenguaje universal que elaboró la humanidad, igual para todas las culturas y para toda la historia. Es un lenguaje que tiene su propia gramática y su sintaxis, un lenguaje que es preciso entender si se quiere conocer el significado de los mitos, los cuentos de hadas y los sueños. PAG 20. Para los hombres del pasado, los que pertenecieron a las grandes culturas del Este y del Oeste. Para ellos, los mitos y los sueños figuraban entre las expresiones mentales más significativas y no entenderlas equivalía a la ignorancia. PAG 20. En la civilización moderna, los sueños fueron considerados como simples tonterías, indignas de que pensaran en ellas hombres adultos dedicados a ocupaciones tan importantes como la de construir máquinas y que se reputaban de realistas porque no veían más que la realidad de las cosas que podían dominar y manejar. PAG 21. LIMITACIONES PAGS 22-23 SIMBOLO: Algo que representa otra cosa. Símbolos que son expresiones sensoriales de la vista, el oído, el olfato y el tacto cuyas otras cosas representan sensaciones internas, sentimientos o pensamientos. Es algo exterior a nosotros; lo que simboliza es algo interior a nosotros. PAG 26-27 SIMBOLO CONVENCIONAL, ACCIDENTAL, UNIVERSAL
ANTROPOLOGÍA Y EXPERIENCIAS DEL SUEÑO El sueño es el deambular nocturno del alma pg7 Para la mayoría de las sociedades, los sueños establecen una comunicación entre el mundo de acá y el otro mundo, del cual revelarían las intenciones, y todas ellas imaginaron medios para paliar el carácter eminentemente aleatorio de esta comunicación. Los mitos se proyectan en los sueños y los seres o actos del sueño son expresados en lenguaje mítico. A veces, soñar permitiría transformar el conocimiento simbólico y mitológico en experiencia. Paradójicamente, el sueño da la prueba de la realidad de los mitos, que en ocasión de un sueño, puede cobrar vida.
Las famosas claves de los sueños ofrecen el ejemplo de filtración más radical. Ellas reducen las múltiples imágenes o mensajes oníricos, en unidades mínimas, a las cuales se hace corresponder unas interpretaciones según acoplamientos que obedecen a ciertas reglas de pensamiento simple. PAG10. En todas las culturas, ha sido instituido un uso social del sueño, haciendo de esta experiencia, eminentemente individual, una forma de comunicación no solamente con el otro mundo, sino también entre seres humanos. Además, unas sociedades ven en unas formas específicas de sueños, las pruebas de una comunicación entre el soñador, las personas soñadas y el mundo sobrenatural que les manipula. El estudio de los sueños en las sociedades tradicionales plantea el problema de las relaciones interindividuales.