UNA NANA DE AMOR
Una na na de amor se oye a la luz de la aurora, la lleva el viento, la arrullan trova y danza. Se abre la rosa y perfuma el aire, la rosa roja que en tu pecho arde. ¡será tu corazón arpegio al viento! Llevaras eternamente en tu pecho rosas rojas y en primavera estará siempre tu vida aún que cubiertas de nieve estén las cimas. Llevaras en ti el rumor del viento y el misterio del agua, el humus bendito de la tierra y la fuerza feraz de selvas vírgenes. Esa será la herencia de tu Padre y de tu Madre, la luz de la aurora que señala un nuevo día. Nada será mayor que tu, niña de mi alma; Arde en tu pecho el corazón del mundo y eres arpegio en la garganta de la vida…