Quench the Embers By Michael McCurley Last day at the campsite. Ask the questions, Bank the fires? Raise the flames or let them die? The waiting embers glow. We know the answers but warmer thoughts from chilly nights, give us pause to break the peace. Leaving seems much harder than we thought, when the stars shined and we were sure that we would have forever. But somewhere a rule reminds us both of obligations left undone, and mundane duties call us back again. The fire’s out. The trip is done. We pack in silence and think alone. Quench the embers.
Apagan las Ascuas Por Michael McCurley Último día del campo. Hace las preguntas, ¿Bajar los fuegos? ¿Levantar las llamas o dejarlas morir? Esperan las ascuas brillantes. Conocemos las respuestas, pero pensamientos más cálidos de noches más fríos nos da pausa para romper ese paz. Partiendo parece mucho más difícil que pensábamos cuando brillaban las estrellas y estábamos seguros que compartíamos una eternidad. Pero una regla por allí nos recuerda a ambos de obligaciones sin terminar y quehaceres mundanos que nos llaman de regreso otra vez. Se apaga el fuego. El viaje ya termina. Empacamos en silencio, pensadores solitarios. Apagan las ascuas.