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Profesor tutor Creo que un acierto del IPN fue establecer el Programa Institucional de Tutorías. Sin embargo, no es bien entendido por profesores ni bien aprovechado por los alumnos. He escuchado compañeros que hablan de sus alumnos tutorados como sus “hijos adoptados” temporales. Pero no, un profesor tutor no sustituye a los padres de un alumno, tal vez entendido por algunos como ponerse de su parte en todo momento y “regañarlo” de vez en cuando. También he escuchado a estudiantes referirse al profesor tutor como quien le explica las dudas que tienen de cierta materia. Se confunde profesor tutor con profesor asesor que apoya al estudiante en las dudas que tiene de cierta materia (unidad de aprendizaje). El concepto que tengo de profesor tutor es el de un docente al que el estudiante le tiene confianza para comentarle las dudas o dificultades académicas que tiene. La labor del docente es aclararle, explicarle y orientarle sobre las dudas académicas que le manifiesta el estudiante, de acuerdo a su competencia y canalizarlo hacia las personas o instancias que correspondan cuando lo que le plantea el estudiante van más allá de su competencia. Al docente también le corresponde preguntar al estudiante sobre sus planes de desarrollo académico en el plantel y cuando egrese, de la carrera que piense estudiar (El CECyT sigue siendo vocacional, en el sentido de que es la antesala de la carrera que se piense cursar y ejercer. Lo que se aprenda o deje de aprender aquí facilitará o complicará los primeros semestres de la carrera). El docente está en condiciones de comentarle al estudiante si lo que planea hacer tiene sentido y es factible o hay aspectos que no está tomando en cuenta y que pueden afectar el cumplimiento de lo planeado. El profesor no ordena al estudiante lo que debe hacer, ni lo regaña. Le hace

comentarios y sugerencias al estudiante, pero las decisiones son del estudiante, quien escucha, reflexiona y decide qué de lo que le dijo el profesor es pertinente y, en consecuencia, digno de tomar en cuenta en las decisiones que a él le competen y que realiza.

Para aquellos estudiantes que adeuden una o más materias, el profesor tutor puede ayudarles a definir un plan de acción para que, durante el semestre, además de trabajar y no descuidar las materias que está cursando, se dé el espacio para preparar sus adeudos en ETS. Las sesiones que tenga con el profesor le pueden servir para mantener el ritmo de trabajo adecuado. Pero, el estudiante debe tener claro que el compromiso de trabajo es con él mismo, no con el profesor. Si no cumple el plan de acción, a quien le está fallando es a él mismo, no al profesor.

La pertinencia de que un estudiante tenga un profesor tutor no es sólo para aquellos alumnos que adeuden alguna materia. También puede ser útil para los estudiantes brillantes (o “mataditos”) que no reprueban materias. Les puede servir para precisar su plan de desarrollo académico y profundizar su conocimiento en aquellos temas que les resulten más afines a sus intereses.

Por último, si alguno de ustedes está interesado que sea su profesor tutor, díganmelo en la clase o búsquenme en el cubículo de la Academia de Matemáticas.

Saludos: Profesor José Luis Torres Guerrero