Los Demonios
Los demonios son seres espirituales caídos que actúan bajo la dirección del príncipe de los demonios, Satanás.
Los demonios son seres espirituales caídos que actúan bajo la dirección del príncipe de los demonios, Satanás. Debemos conocer quiénes son y qué hacen. Si vamos a derrotar al enemigo es necesario conocerlo.
En la Biblia no hay una frase que diga específicamente: “los demonios existen”, pero contiene innumerables ejemplos de su existencia. Jesús los expulsó (por ejemplo, Mateo 4:24) y dio poder y autoridad a sus discípulos para expulsarlos también.
Mateo 10:1 Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus inmundos, para que los echasen fuera, y para sanar toda enfermedad y toda dolencia.
Jesús se irritó con sus discípulos cuando no pudieron echar fuera el demonio que atormentaba a un muchacho (Mateo 17:14-21)
Hay muchas interpretaciones erróneas en cuanto a su identidad: Que son los espíritus de los seres humanos malos que han muerto; que son los espíritus de una raza pre Adámica; que son los espíritus de los “gigantes” de Génesis 6, etc.
La mejor interpretación posible es que se trata de ángeles caídos. Fueron creados por Dios, y aparentemente arrastrados por Satanás en su rebelión.
Colosenses 1:16 Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él.
No todos los ángeles caídos son demonios. Algunos están encadenados, esperando su juicio (2 Pedro 2:4). En cambio, los demonios están muy cerca de los hombres, y tratan de habitar en el alma de ellos.
Promueven la idolatría
1 Corintios 10:14 Por tanto, amados míos, huid de la idolatría.
Promueven la idolatría
1 Corintios 10:19 ¿Qué digo, pues? ¿Que el ídolo es algo, o que sea algo lo que se sacrifica a los ídolos?
Promueven la idolatría
1 Corintios 10:20 Antes digo que lo que los gentiles sacrifican, a los demonios lo sacrifican, y no a Dios; y no quiero que vosotros os hagáis partícipes con los demonios.
Promueven la idolatría
1 Corintios 10:21 No podéis beber la copa del Señor, y la copa de los demonios; no podéis participar de la mesa del Señor, y de la mesa de los demonios.
Causan enfermedades, tanto mentales como físicas.
Marcos 5:15 Vienen a Jesús, y ven al que había sido atormentado del demonio, y que había tenido la legión, sentado, vestido y en su juicio cabal.
Causan enfermedades, tanto mentales como físicas.
Lucas 13:11 y había allí una mujer que desde hacía dieciocho años tenía espíritu de enfermedad, y andaba encorvada, y en ninguna manera se podía enderezar.
Causan enfermedades, tanto mentales como físicas.
Lucas 13:12 Cuando Jesús la vio, la llamó y le dijo: Mujer, eres libre de tu enfermedad.
Causan enfermedades, tanto mentales como físicas.
Lucas 13:16 Y a esta hija de Abraham, que Satanás había atado dieciocho años, ¿no se le debía desatar de esta ligadura en el día de reposo?
Causan enfermedades, tanto mentales como físicas. No todas las enfermedades son causadas por demonios, así como no todos los demonios causan enfermedades.
Difunden doctrina falsa
1 Timoteo 4:1 Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios;
Hacen milagros mentirosos
Apocalipsis 16:14 Pues son espíritus de demonios, que hacen señales.
Imparten fuerza sobrehumana
Marcos 5:2 Y cuando salió él de la barca, en seguida vino a su encuentro, de los sepulcros, un hombre con un espíritu inmundo,
Imparten fuerza sobrehumana
Marcos 5:3 que tenía su morada en los sepulcros, y nadie podía atarle, ni aun con cadenas.
Imparten fuerza sobrehumana
Marcos 5:4 Porque muchas veces había sido atado con grillos y cadenas, mas las cadenas habían sido hechas pedazos por él, y desmenuzados los grillos; y nadie le podía dominar.
Luchan contra los creyentes bajo las órdenes de Satanás
Efesios 6:11 Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo.
Luchan contra los creyentes bajo las órdenes de Satanás
Efesios 6:12 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.
Es el control o la dominación temporaria de un ser humano por parte de un demonio.
Es el control o la dominación temporaria de un ser humano por parte de un demonio. Un creyente no puede ser poseído por un demonio.
1 Corintios 6:19 ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?
1 Juan 4:4 Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo.
Si el demonio no puede poseer a un creyente, puede molestarlo.
Si el demonio no puede poseer a un creyente, puede molestarlo. Es la actividad externa que los demonios ejercen tanto sobre los creyentes como los que no lo son, oponiéndose al obrar de Dios en ellos.
Algunos demonios están libres, causando daño a las personas. Otros están aprisionados (2 Pedro 2:4)
Algunos demonios están libres, causando daño a las personas. Otros están aprisionados (2 Pedro 2:4) Algunos de los que están presos parece que serán liberados durante la tribulación (Apocalipsis 9:1–11)
Aparentemente todos serán encerrados con Satanás durante el Milenio, pero serán liberados después del Milenio (Apocalipsis 20:7–8) en la lucha final de Satanás contra Dios.
Serán arrojados al lago de fuego eterno.
Serán arrojados al lago de fuego eterno. Mateo 25:41 Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.
Serán arrojados al lago de fuego eterno. Apocalipsis 20:10 Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.
Los apóstoles poseían autoridad para echar fuera demonios
Los apóstoles poseían autoridad para echar fuera demonios Mateo 10:1 Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus inmundos, para que los echasen fuera, y para sanar toda enfermedad y toda dolencia.
Los apóstoles poseían autoridad para echar fuera demonios Hoy en día no están los apóstoles para que ejerzan su autoridad sobre los demonios, pero contamos con la palabra apostólica que sí tiene autoridad en sí misma
Por eso, al tratar un caso de posesión o influencia de demonios es importante citar la Palabra de Dios en voz alta, porque es la verdad de Dios, y porque es la Espada del Espíritu que tiene el poder para derrotar a los demonios que son mentirosos y que están liderados por Satanás, el padre de la mentira
Como los demonios no leen nuestra mente, debemos mencionar en voz alta que Jesucristo ya derrotó a los demonios por medio de su muerte.
Colosenses 2:15 Y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz
Cuando sospechamos actividad demoníaca en una persona, debemos recurrir a la oración de fe. Para los apóstoles éste era el recurso supremo.
Cuando sospechamos actividad demoníaca en una persona, debemos recurrir a la oración de fe. Para los apóstoles éste era el recurso supremo. Marcos 9:29 Y les dijo: Este género con nada puede salir, sino con oración y ayuno.
También debemos tratar con el pecado de la persona afectada, y predicarle la persona y la obra de Cristo, para que sea salva. ¿De qué le sirve a alguien ser librado de un demonio si va a pasar la eternidad en el infierno?
Jesús enseñó que los demonios, al ser expulsados, vagan buscando otras víctimas, pero que pueden regresar a la persona de la que salieron.
Mateo 12:43 Cuando el espíritu inmundo sale del hombre, anda por lugares secos, buscando reposo, y no lo halla.
Mateo 12:44 Entonces dice: Volveré a mi casa de donde salí; y cuando llega, la halla desocupada, barrida y adornada.
Mateo 12:45 Entonces va, y toma consigo otros siete espíritus peores que él, y entrados, moran allí; y el postrer estado de aquel hombre viene a ser peor que el primero.
También pueden ser aprisionados en el abismo Lucas 8:31 Y le rogaban [los demonios] que no los mandase ir al abismo.
En conclusión, los creyentes estamos libres de la posesión demoníaca, pero no de la influencia demoníaca.
En conclusión, los creyentes estamos libres de la posesión demoníaca, pero no de la influencia demoníaca. Debemos vivir en una auténtica atmósfera de santidad y según la verdad de Dios, que son otras tantas barreras contra estos espíritus pecaminosos y mentirosos.
No olvidemos que la lucha contra los demonios ya fue ganada por Cristo en la cruz, y que es su victoria la que posibilita nuestra victoria.
Dr. Pablo Manzewitsch