Mamá, yo te pago internet by José A. Pérez-Robleda
mi compu es mi video teléfono fijo
El otro día recibí una videoconferencia de un amigo. En casa no tengo teléfono fijo así que doy ese uso a la computadora, mis amigos me ven conectado a skype y saben que en ese momento pueden llamarme. Cosa que no he consegido de otra gente.
No he podido enseñar a la familia La tecnofobia tiene que ver con una cuestión generacional, mis amigos y mis primos usan internet sin problemas. Pero mis tíos y mis primos ya mayores, sienten pánico ante la computadora: ¡¡¡tiene demasiados botones!!! Además creen que una computadora es demasiado cara para el uso que ellos van a darle, que desperdiciarían el potencial de aparato con sus escasos conocimientos. Los más mayores tiene clara su respuesta cuando quiero explicarles los beneficios: no desean aprender.
En el mundo existen otros como yo Me quedé pensando en el fenómeno de la inmigración y en la gran cantidad de personas que tienen que dejar su casa y dejar a su familia. Son personas que logran mejorar económicamente como para poder mandar dinero, a sus familias y que gastan mucho dinero en comunicarse con ellas.
Imaginé Que alguien desarrollará computadoras, de bajo coste con servicios limitados, p.e. que tuviese sólo ciertos programas instalados y sólo 4 botones para acceder a ellos. Una cosa muy simple. Podría incluso venir con una tarjeta de internet inalámbrico ya instada. Para conectarme donde quiera. Pero, eso sí, que estuviese equipada con webcam micrófono bocinas y todo lo necesario para comunicarse.
el negocio
Las compañías de Internet podría ofrecer estos aparatos a un coste razonable, digamos 1500 pesos, a quien haga un contrato por un periodo más o menos largo, digamos 18 meses. Y los familiares emigrados podrían contribuir económicamente a pagar la cuota mensual.
y yo por fin podré hablar con mi tía abuela Eustaquia.
Todo esto fue verdad y podría no suceder.