MOLE LA MEJOR CONVENCIÓN Por: Marcos Campos Nava Actualmente en nuestro país las convenciones de cómics más importantes (y lo cual se lo han ganado al paso de varios años) son las famosas TNT (centro de convenciones de Tlatelolco) y LA MOLE (Expo Reforma de la Ciudad de México), la primera con una historia que empezó en el año 2000 y que a la fecha han dado fruto a 13 convenciones; pero particularmente hoy quisiera hablarles de la segunda, es decir La Mole, conocida así cariñosamente desde su primera versión en el año 1998 debido a que su emblema simbólico es el personaje del cómic americano “Los 4 fantásticos” que lleva el mismo nombre. La Mole en sus inicios tuvo que competir contra 2 ya desaparecidas convenciones, que en su momento fueron reconocidas a nivel internacional, La MECyF (desaparecida justo en 1998) y la CONQUE (desaparecida en el 2000). La Mole vino a ocupar entonces un lugar hasta entonces no cubierto por las anteriores convenciones, pues hasta ese lejano año de 1998 apenas empezaba el “famosos boom” de la animación japonesa y manga en nuestro país; pues aunque la Mole desde sus inicios y hasta ahora tiene lugar para todas las corrientes de comics, desde americano, europeo y también a los autores nacionales, no cabe duda que su principal mercado es el de los llamados (a veces en tono despectivo) otakus, es decir los fanáticos de la animación japonesa. La Mole se convirtió en líder en cuanto a exposición venta e intercambio de productos relacionados con el famoso “anime Japonés” en sus primeras versiones, muy al sur de la Ciudad, en la Alberca Olímpica, en la Delegación de Coyoacán; revolucionó la forma de ver el Cosplay (disfraces de personajes) con su famoso “bailongo”, el cual ya es una tradición; en la Mole iniciaron los concursos de Karaoke, al más puro estilo de los bares orientales, le dio importancia por primera vez a los actores de doblaje de nuestro país, con lo cual inició también el reconocido “show de voces” todo
un deleite, porque podíamos escuchar a Homero Simpson discutiendo con Goku y con Sailor Moon, y hasta el pitufo filósofo metía su cuchara. Inició las proyecciones de anime y los concursos de Cosplay. Cuando en el año 2000, inicia la TNT en el inmenso Centro de Convenciones Tlatelolco, eso deslumbró a la mayoría de los otakus (me incluyo), nunca habíamos visto tal concentración de tiendas especializadas sólo en productos japoneses, ahora sí excluyendo prácticamente al resto de comic, incluido la historieta mexicana. Nos dio la impresión que revolucionó las Convenciones al traer por primera ocasión grupos japoneses a tocar en nuestro país al igual que exponentes internacionales de Cosplay. Pero al paso del tiempo y tras cada nueva convención, me convenzo más que la TNT se ha quedado corta en cuanto espacio; cada vez es más difícil caminar entre sus pasillos, la acústica del lugar es pésima para conciertos, a los dibujantes mexicanos los relegan a rincones del lugar; en fin que no cabe duda que visitar La Mole es sinónimo de poder caminar tranquilamente sin sentir que corres el peligro de ser aplastado por la muchedumbre, poder sentarte tranquilamente a ver una conferencia o el concurso de karaoke y sentir la atmósfera de nostalgia que se respira; es sin duda una mejor opción. Además para comodidad de las personas de provincia, desde hace varias emisiones, la Mole se mudó a un lugar muy céntrico cerca de reforma. Esperemos que el evento organizado en la pasada semana de la juventud sea el inicio de algo que tal vez parece UTÓPICO; que en Pachuca contemos con un evento tan reconocido a nivel nacional como la Mole y la TNT. Si deseas saber más sobre convenciones de comics y todo lo relacionado, escribe a la dirección de la revista o a
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Afiche conmemorativo a una de las ya decenas de versiones de la convención de comics LA MOLE
La TNT es tan famosa, que de diversos estados de la República se organizan tours para visitarla