FACULTAD DE DERECHO “Año
del Buen Servicio al Ciudadano”
DOCENTE
: BARRENO CELIS DERIKA MAGALY
ALUMNA
: OROZCO SANTAMARIA JANETH VALERIA
TEMA
: CAUSAS Y CONSECUENCIAS DE LA DELINCUENCIA JUVENIL EN EL DISTRITO DE JOSÉ LEONARDDO ORTÍZ.
CURSO
: COMPROMISO ÉTICO
CICLO
:
SECCIÓN
: “A”
I
PIMENTEL – 2017
RESUMEN: 12 HOMBRES SIN PIEDAD El video trata sobre un juicio de un homicidio en el que 12 hombres tienen que deliberar sobre el futuro de un muchacho, dictaminando si el chico es culpable o inocente del asesinato de su padre. Las pruebas apuntan a que el chico es culpable, por ello 11 de los 12 miembros del jurado opinan que es culpable pero el miembro número 8 tiene en cuenta diferentes argumentos que se han citado en el juicio y hace que surja la duda sobre la culpabilidad del chico. Poco a poco el miembro número 8 hace que los demás vayan cambiando de opinión y de que éstos se den cuenta de otros factores que no habían sido analizados en el juicio. En la película se observan diferentes tipos de comportamientos y de roles que van desempeñando cada miembro del jurado haciéndonos ver así características de su personalidad y cómo influye su vida a la hora de dictaminar la culpabilidad del acusado. En la película cada miembro del jurado se le asigna un número según su posición en la mesa desempeñando los siguientes tipos de roles:
Jurado 2
Hombre tímido y sin personalidad definida, duda constantemente y esto hace difícil que mantenga una opinión propia, se le persuade fácilmente por lo que su opinión será casi siempre la misma que la de la última persona que ha hablado.
Jurado 3
Es muy fuerte, rudo y testarudo hasta caer en lo sádico, es malhumorado y no le gusta escuchar otra opinión distinta a la de él.
Jurado 4
Hombre de buena posición económica, se desenvuelve y habla con elegancia, es muy analítico y cuadrado hasta cierto punto, su suerte en los negocios hace que se sienta en ocasiones superior a los demás.
Jurado 5
Un hombre gris, tímido y callado, de extracto social bajo acostumbrado a cumplir con las normas de la sociedad para la que labora, le cuesta trabajo relacionarse con la gente su falta de personalidad provoca que le falten al respeto.
Jurado 7
Fanfarrón, presumido, altanero, es de temperamento explosivo y siempre está seguro de lo que dice aunque en realidad es tan inculto que no sabe en realidad de lo que está hablando.
Jurado 8
Callado y analítico, siempre trata de ver el otro lado de la moneda, es de valores arraigados por lo que valora mucho la importancia de la vida, cree firmemente en la justicia y tratará de luchar siempre para conseguir que se cumpla.
Jurado 10
Un hombre amargado y molesto con la vida, es racista e intolerante, solo valora su vida y no respeta credo, sexo o edad, es un hombre frustrado que sabe que nunca será un hombre importante, por lo que se desquita con los más débiles.
Jurado 11
Refugiado europeo, habla con acento, es humilde y está agradecido con el país que le abrió las puertas, no tolera la injusticia y los malos tratos ya que él padeció esto durante la guerra, por lo que siempre está dispuesto a dialogar con tal de alcanzar un acuerdo justo. POR ELLO SE DA LA TOMA DE DECISIONES EN GRUPO: Donde vemos que la toma de decisiones, el aportar ideas desde un principio viene dado por la prisa de algunos, el calor, y el votar en público sin querer exponer nada sobre la mesa de las ideas que tiene cada uno. Pero al transcurso de la película, al haber un líder en número 3 que se encuentra en contra, y va dando una serie de ideas lo cual hace a las personas el preguntarse si está bien la primera votación que han votado. Una vez votado la segunda vez, vemos que alguien cambia de idea, lo que hace a las personas el iniciase a dar sus ideas sobre la actuación del imputado lo que hace que haya más ideas sobre si es culpable o inocente a la vez que hace a la gente discutir y sacar en grupo una idea discutida en común y democrática. Esta toma de decisión en grupo hace que se den unas ventajas como son:
Una mayor concentración de conocimientos, experiencias e información.
Una mayor variedad de puntos de vista.
Se facilita la aceptación de la solución final.
Se reducen los problemas de comunicación.
Y a mi criterio, en la toma de decisiones, efectivamente se intervienen prejuicios y estereotipos, no hay más que ver que muchos de los miembros del jurado coinciden, sin prueba alguna, en la culpabilidad del adolescente, alegando que ese tipo de personas ya se sabe de la calaña que son, catalogándolo como embustero y violento sin detenerse en ningún momento a analizar la trayectoria del mismo, su pasado, hechos, motivos que le han podido incitar a cometer semejante atrocidad. También se ve la influencia de los prejuicios, cuando creen sin más lo que los testigos dicen, el vecino de abajo que dice haber oído amenazar al hijo con matar al padre, la mujer que desde el tren dice haber visto el asesinato, en fin, que el jurado acepta como certeras, sin más, estas declaraciones sin detenerse a reflexionar si la testigo pudo ver a otra persona, si el vecino pudo oír otra cosa o puede estar mintiendo. El jurado actúa así condicionado por los estereotipos, es decir; el chaval es lo que es, un adolescente problemático capaz de cualquier cosa, y los testigos son testigos, lo que digan será la verdad no se equivocaran. Incluso el estereotipo viejo insignificante: se ve perfectamente como uno de los miembros del jurado que trata de mala manera y no tiene en cuenta la opinión del otro de los miembros de avanzada edad, por el hecho de ser una persona mayor, y considerarlo inepto por la edad que tiene. Finalmente, “Doce hombres sin piedad” es sobre todo una gran película que nos pone en guardia contra la gratuidad de los juicios que aplicamos en nuestra vida corriente y de los que nosotros mismos, a un nivel más interno, también somos víctimas a través de esa entidad psíquica que se erige en gestor de las identificaciones sufridas en nuestra infancia. La duda razonable es esa actitud que nos muestra el jurado 8 al ir más allá de las "evidencias" y descubrir cuantas veces estas se apoyan en una clara falta de reflexión,
desinterés, o que teñidas de prejuicios o personalismos perturban la posibilidad de ejercer una evaluación de los juicios desde la razón crítica propia de una consciencia ética. Y es de la misma manera que damos por sentado leyes y juicios que son ejercidas por nuestro propio decir sin que nuestro yo intente poner en duda sus fundamentos y la tiranía que ejercen sobre nosotros. Como los jurados 3 y 10 nos muestran con sus prejuicios, estas leyes y juicios que se afirman fuertemente no en sus argumentos sino en su rigidez y severidad apoyándose en amenazas, culpas y castigos que por lo contrario no debe ser apropiado para este tipo de situaciones dadas.