Miv – U1 - Actividad 1. Análisis Estructural De Un Cuento.docx

Nombre: Joana Gómez Ortega Matricula: A07125999 Nombre del curso: MIV – U1 - Actividad 1. Análisis estructural de un cuento Nombre de la actividad: documento Word Nombre del tutor: Valeria Edith Aguilar Rodríguez Fecha de entrega: 07/03/201

Un señor con unas alas enormes

Esta historia lo relata el pobre estado de un viejo ángel que durante una tormenta cae en el patio de una casa. Los propietarios de la casa lograron abusar de la paciencia de este ser increíble y le llevan para un gallinero tratándolo como una atracción de un circo. El visitante causa un alboroto porque la gente cree que se trata de un ángel, y los dueños de la casa ven la oportunidad de un negocio al cobrar a cada persona para verlo. Logran hacerse de buen dinero, pero al tiempo llega otra novedad al pueblo y el “ángel” deja de ser una novedad. Este se queda en la casa y vagabundea en ella de aquí para allá, molestando a los dueños hasta que pasado el tiempo le salen a las nuevas y un buen día decide irse volando hasta perderse ante los ojos de la mujer que era la duela, que lo observaba con alivio.

Tema: las creencias de algunos pueblos junto con la pobreza, a veces se relaciona con la ignorancia. Trama: un viejo con alas cae en la casa de Pelayo y Elisenda debido a una fuerte tormenta que hubo, ellos se preguntaban que podría ser aquel ser, y acudieron a una vecina que tenía conocimientos en eso, a lo que ella les dijo que era un “ángel”, ellos por temor lo encerraron en un gallinero. El visitante le causa una gran inquietud, y empiezan a venir más gente para verlo, al ver como todo esto Elisenda se le ocurrió la idea de cobrar para que lo vieran, las personas creían que como es un ángel, les resolvería sus vidas, pero lo aparición de otro ser (una mujer con cuerpo de araña), hizo que la gente se olvidara del ángel. Finalmente, durante un frío invierno, le empiezan a salir plumas nuevas, y logra abandonar ese lugar. Presentación: un día en la playa Elisenda se encontraba cuidando a su niño enfermo, mientras que Pelayo (su esposo), estaba matando y recolectando cangrejos en su patio. Nudo: Pelayo encuentra a un señor muy viejo con grandes alas tirado en su patio, pero no se podía ni levantar debido al peso de sus alas que estaban dañadas. Entonces Pelayo acude a la vecina sabia, a lo que ella les dice que es un ángel que llego para recoger a su hijo. En aquel momento Pelayo lo llevó al gallinero y lo encierran, y todo el pueblo va a ver al ángel a tirarle comida como si fuera un animal. El padre del pueblo va a visitar al ser, pero él no pensaba que era un ángel porque tenía el aspecto de un humano, pero al momento de comunicarse no conocía el lenguaje de Dios.

Clímax: no saben qué hacer con él ni que criatura sea, y empiezan a investigar con las demás personas del pueblo, hasta que les dicen que se trata de un supuesto ángel, que venía por su hijo enfermo. Cuando del padre lo ve no considera de acuerdo con sus conocimientos que se tratase de un ángel. Sin embargo, la gente del pueblo piensa lo contrario y movidos por su fe le empiezan a pedir milagros. Narrador: el omnisciente porque conoce todo los pensamientos y sentimientos de los personajes. Describe la incredulidad del párroco y los actos de la fe de los pueblerinos. Ambiente: es un pueblito costero por donde había pasado un temporal fuerte, donde su principal actividad es la pesca, y cualquier motivo extraño es de atención, se desarrolla por momentos en un ambiente mágico al hablar del ángel con alas, y la mujer con cuerpo de araña. Tiempo: crónica, porque va de principio a fin sin manejar distintos tiempos. Personaje principal: el viejo con alas enormes, porque es de quien se habla toda la historia del relato, de su carácter, de su actitud, y de su mejora, asimismo del momento de que se va de ese lugar. Secundarios: Pelayo, Elisenda, y el Párroco. Terciarios o ambiental: la mujer araña, la vecina el pueblo y el hijo del Párroco. Desenlace: por la estructura del relato es cerrado. Porque no define un final exacto más bien deja abierta la posibilidad de imaginar qué pasará con el ángel. Por criterio de valores es bueno: cada quien logró su bienestar y todo siguió tan normal como antes.