Momento. Que llegue para mí un momento un instante, al menos, de los que se dicen “existen” de aquellos que el ser humano rememora guarda, cela, comparte -bajo un montón de conceptos subjetivosde carácter: amargo, dulce o sencillo; para paladares gustos. Para estos momentos, emociones. Una prueba de existencia. Una marioneta no ama sus hilos, ama el show, y aunque mis vestiduras no vayan acorde a sus prejuicios aquellas telas son extensiones más de mi piel, por consiguiente lógica un buen momento merece el mejor bronceado. Exento de preparaciones, y sus ingredientes variados extendido en el tiempo, durante algo descrito como: únicamente lo necesario, lo justo, lo que tenía que durar. Más no importará lo fuerte que uñas y dientes se aferren a él cuando el momento llega… Acumulamos experiencia en el momento en que existe un inicio y un final, acumulamos. Al final, ¿qué es lo que queda?, hablo del restante. Luego de ‘ser’ durante mi momento, ¿cómo aparentar el resto del tiempo de rutina?, acostumbrarse a dejar de ser, acostumbrarse a esperar el momento. Que llegue para mi otro.
Thierry Cortes, 21 años. Bucaramanga, Santander- Colombia. cell: +57 304 375 0048 Facebook: https://www.facebook.com/AndresfeCortes