NATURALEZA Y MÉTODO
El hilo conductor será la persona cristiana El hombre incorporado a Cristo 1. INTRODUCCIÓN 2. EL SUJETO MORAL CRISTIANO 3. EL DINAMISMO DE LA LIBERTAD 4. NATURALEZA DE LA VIRTUD 5. EL CAMINO DE LA LIBERTAD 6. EL PECADO
I. INTRODUCCIÓN 1. LA NATURALEZA DE LA TEOLOGÍA MORAL 2. HISTORIA TEOLOGÍA MORAL
II. SUJETO MORAL CRISTIANO 3. EL MENSAJE MORAL CRISTIANO 4. EL FIN ÚLTIMO 5. A IMAGEN DE DIOS Y REDIMIDOS EN CRISTO 6. EL SEGUIMIENTO DE CRISTO
III. DINAMISMO DE LA LIBERTAD A. SENTIDO Y ALCANCE DE LA LIBERTAD 7. EL HOMBRE, SEÑOR DE SUS ACTOS 8. LAS PASIONES B. EL OBRAR MORAL 9. ESTRUCTURA DEL ACTO MORAL 10. ELEMENTOS DETERMINANTE DE LA MORALIDAD 11. EL ALCANCE DE LA MORALIDAD DE LOS ACTOS HUMANOS
IV. NATURALEZA DE LA VIRTUD Y ORGANISMO DE LAS VIRTUDES 12. EL CONCEPTO DE VIRTUD 13. VIRTUDES HUMANAS DEL CRISTIANO 14. LA DIVINIZACIÓN DEL CRISTIANO 15. EL CONOCIMIENTO DEL BIEN 16. PARA QUE EL BIEN SEA POSIBLE 17. AMAR Y REALIZAR EL BIEN
18. EL DOMINIO DE SÍ PARA PODER AMAR
V. EL CAMINO DE LA LIBERTAD A. LA LEY MORAL : REVELACIÓN DEL BIEN MORAL 19. EL DESIGNIO DEL DIOS SOBRE EL HOMBRE: LA LEY MORAL 20. LA LEY MORAL NATURAL 21. LEY MORAL SOBRENATURAL 22. LEY CIVIL Y LEY ECLESIÁSTICA B. LA CONCIENCIA O PERSONALIZACIÓN DEL BIEN 23. LA CONCIENCIA MORAL 24. LA CONCIENCIA LUGAR DE ENCUENTRO ENTRE LEY Y LIBERTAD 25. MODALIDADES DE LA CONCIENCIA
VI. EL PECADO Y LA CONVERSIÓN PERMANENTE 26. LA NOCIÓN CRISTIANA DE PECADO 27. LA NATURALEZA DEL PECADO 28. CAUSAS Y EFECTOS DEL PECADO 29. LA CONVERSIÓN DEL PECADOR
LA TEOLOGÍA COMO CIENCIA ES UNA, PERO LAS
DIVERSAS PERSPECTIVAS SOBRE SU OBJETO HACEN QUE SE PUEDA DIVIDIR DENTRO DE LA TEOLOGÍA MORAL SE SUELE DIVIDIR ENTRE FUNDAMENTAL: ESTUDIA LA MORALIDAD DEL ACTO HUMANO EN GENERAL O ESPECIAL: EL ACTO HUMANO EN CADA REALIZACIÓN PARTICULAR
1. Naturaleza de la Teología Moral Fundamental A. ¿Qué es Moral?
MORAL
LATIN MOS - MORES
COSTUMBRES
RELACIÓN ENTRE ÉTICA Y MORAL. Existen dos diferencias notables entre la Ética filosófica y la Moral cristina –en relación al método y —en relación al fin. Ambas se fundamentan en conceptos distintos como se observa en el siguiente diagrama.
ETICA FILOSÓFICA
TEOLOGÍA MORAL
ETIMOLOGÍA
Nace de la voz griega ήθος Nace de la voz latina ήθικα “mor, moris” =modo de =ética ser, costumbre
MÉTODO
Emplea el método filosófico, deduce y argumenta a favor de la vida moral sólo desde la razón.
Argumenta el valor moral de los actos humanos desde la razón y los datos que ofrece la Biblia, la vida y la enseñanza de Jesús
FIN
La ética filosófica propone que el hombre a través de un actuar correcto se perfecciona como persona y alcanza la felicidad en su existencia terrena
Para la teología moral la perfección sobrenatural considera que el cristiano es hijo de Dios por la gracia, que le ayuda a orientar su vida a conseguir la felicidad temporal y alcanzar la bienaventuranza de la vida eterna.
Diferencias entre Etica filosófica y Moral cristiana: 1
Método: la filosofía argumenta sólo desde la razón, mientras que la teología moral, utilizando también la razón, argumenta a partir de los datos que le ofrece la Revelación, especialmente la vida y la enseñanza de Jesús.
2
Fin: la primera se propone que el hombre se perfeccione como persona y sea feliz en su existencia terrena, mientras que la segunda persigue la perfección sobrenatural (de un hijo de Dios por la gracia) y busca la felicidad terrena y de la vida eterna.
3
Para la Teología, la “racionalidad” y la “sociabilidad” en que se funde la Etica filosófica tienen su origen en que el hombre ha sido creado a imagen y semejanza de Dios, y el NT enseña que el bautizado es hijo de Dios (vida nueva).
MOSMORIS, mor
êthos: carácter
ada, habitació n
“Lugar interior” “Morada que el hombre porta en sí mismo”
Forma de ser la persona, al go interior “
ÉTICA (del griego: ηθος / εθος): • dos significados: residencia, lugar donde se habita lugar o morada interior y fundamento de la praxis • dos formas de escritura: con ε : modo de ser, carácter, personalidad con η : costumbre, forma de vida, actitud interior
El vocablo griego además de costumbre, significa
también morada o lugar habitual; talante o modo de ser, pensar o sentir; moral o moralidad. Cuando Aristóteles escribe la Ética a Nicómaco se refiere sobre todo a este último significado. De este modo comprendemos que la ética no consiste simplemente en la descripción de los comportamientos, sino que se esfuerza por analizar el talante, carácter, modo de ser y actuar del ser humano, para comprender lo que es bueno o malo, precisamente en cuanto propio del ser humano. No dato externo, en los comportamientos visibles, sino que trata de adentrarse en los caracteres propios de la persona, en su morada interior. No se queda en una descripción de sus actos o de su modo de ser, sino que trata de ofrecer una guía para el comportamiento humano.
Aristóteles, S. Tomás y otros muchos, utilizaron la referencia al
término “bien”, “lo bueno”, contrapuesto a “mal”, “lo malo”. Y así nos referimos frecuentemente a la dimensión moral en el lenguaje coloquial: “ha actuado bien”, “fue un acto bueno”, “es una buena persona”. Bueno/malo puede ser aplicado a un acto, a una actitud, a una persona, a un grupo... Otro término interesante en el lenguaje común es el de “moralidad”. Entre sus diversas acepciones podemos destacar las siguientes. Moralidad como conformidad con los principios y preceptos morales; como cualidad de las acciones humanas que las hace buenas o malas; moralidad también como la dimensión o estructura moral de la persona. En sentido negativo, se suele hablar de “in-moral” o “inmoralidad”. Se oye frecuentemente decir que “fulano es un inmoral”, o que “creo que ese acto es inmoral”, o que “hacer eso es una inmoralidad”, etc .. En todos esos casos, nos referimos a actos, actitudes, individuos... que son vistos como negativos, contrarios al bien, es decir “malos”. Pero no en relación con un bien físico, económico, social... sino en otro orden diverso: el orden del bien de la persona en cuanto persona .
Ética o Moral: un mismo objetivo que el hombre sea capaz de ser artesano de su propia historia, de hacerse a sí mismo, llegando a ser, en libertad, lo que está llamado a ser. se trata de una tarea en búsqueda de respuesta a los tres grandes interrogantes existenciales
TODA ÉTICA
SELLO CRISTIANO
- comportamiento humano concepción antropológica - libre y responsable creacionista – encarnacionista: - orientación positiva de la persona-Hombre = imagen y semejanza de Dios - en busca de la realización del bien moral - salvado y redimido por Cristo
TEOLOGÍA MORAL FUNDAMENTAL reflexión ético-teológica sobre la experiencia moral vivida en la fe evangélica EDUCADOR – PASTOR • Transmite siempre más que desde su palabra, con su vida • Necesidad de síntesis personal coherente • Abierto a su propia formación moral como condición indispensable
b) Teología La reflexión sobre la moral que vamos a emprender no se habrá de reducir a consideraciones de tipo psicológico, social o filosófico. Todos esos elementos pueden entrar como ayudas para comprender mejor el fenómeno de la moralidad. Pero a nosotros nos interesa aquí hacer un estudio de carácter teológico. Teología significa, en sentido estricto, esfuerzo de comprensión del misterio de Dios a la luz de su propia revelación al hombre. Pero significa también el análisis de cualquier realidad en su relación con Dios. Si antes decía que la moralidad constituye nuestro “objeto material”, ahora podemos especificar su “objeto formal” precisamente constituido por la dimensión teológica de nuestro estudio.
Dios se ha revelado a sí mismo, y ha revelado también su plan de
salvación para el hombre. El “quiere que todos los hombres se salven” (1 Tm 2,4). Ahora bien, esa salvación no consiste en adquirir una serie de conocimientos, ni se realiza únicamente en el paso a la vida eterna. La salvación revelada y ofrecida por Dios pasa también a través del vivir, del actuar de cada hombre.
La teología moral habrá de ocuparse por lo tanto de la vida de la persona humana en su relación con Dios y con los demás, a la luz de la revelación de su plan de salvación para el hombre. Nuestra teología, naturalmente, es “cristiana”. Y esto significa que nosotros sabemos que la revelación y la salvación ofrecida por Dios tiene un nombre: Jesucristo.. En Cristo, Verbo de Dios encarnado, el cristiano encuentra la verdad que ilumina genuinamente su entendimiento para discernir entre el bien y el mal; en El, Hijo de Dios hecho hombre, encuentra el camino para guiar su propia vida por la senda recta que lleva hacia al Padre, y por ello mismo hacia la realidad más auténtica de su propio ser; en El, Redentor del hombre, participa de la misma vida divina, que vivifica todo su humano vivir y alcanza su plenitud en la vida eterna.
El cristiano ha recibido una nueva vida: es hijo de Dios, Cristo vive en él. Jn 15, 4: “el que me ama está en mí y yo en él”. Esta nueva riqueza de vida implica un nuevo modo de comportarse.
Veritatis splendor 19: “Seguir a Cristo es el fundamento esencial y original de la moral cristiana... No se trata solamente de escuchar una enseñanza y de cumplir un mandamiento, sino de algo mucho más radical: adherirse a la persona misma de Jesús, compartir su vida y su destino”.
Nuestra teología es también “católica”. Es decir, hecha
y vivida en comunión con la Iglesia Católica, en sintonía con su doctrina, tanto dogmática como moral. Esa participación en la comunión de la Iglesia constituye el sustrato mismo de la teología, como su “humus”; así como su iluminación y garantía de autenticidad.
FUNDAMENTO MORALIDAD Cabría una ética no religiosa sobre la base de una concepción racional de la dignidad de la persona humana. Pero es difícil fundamentar valores universales válidos para todos los pueblos y que todos se sientan obligados a practicarlos, sin recurrir a Dios. Pío XI rechazó los intentos de separar la moral de la religión (nazismo) Pío XII: “Cuando temerariamente se niega a Dios, todo principio de moralidad queda vacilando y perece, la voz de la naturaleza calla o al menos se debilita paulatinamente” (Summi pontificatus 21).
Juan XXIII: “La base de los preceptos morales es Dios. Si se niega la idea de Dios, estos preceptos necesariamente se desintegran por completo” (Mater et magistra 208).
c) Fundamental El estudio de teología moral que nos disponemos a
realizar no habrá de consistir en el análisis de los diversos y complejos problemas morales que aparecen aquí y allá en la vida de la persona o de la sociedad. Dejamos esa tarea a la “teología moral especial”, con sus diversas ramificaciones. A nosotros nos corresponde poner los fundamentos.
Se solía denominar a esta disciplina con el título de
“teología moral general”. Pero parece mejor el término en uso actualmente. Hay que evitar desde el inicio la impresión de que nos tengamos que quedar en “generalidades”, en consideraciones vagas y poco relacionadas con la vida real. Al contrario, lo que vamos a considerar en nuestro estudio constituye el fundamento mismo de toda nuestra vida moral y la base sobre la cual se podrá luego construir el edificio estructurado de la reflexión moral especial (en el campo de la moral sexual, de los problemas relacionados con el respeto de la vida, de los problemas sociales, etc.).
Moral fundamental no solamente en cuanto que hay
que estudiar los fundamentos, los conceptos y realidades base de la vida moral y de la realidad moral del cristiano. Es fundamental también en el sentido de que en ella hay que “fundar” la reflexión moral misma: sus fuentes, su validez y legitimidad, su sentido más profundo, anclado en Dios. En este sentido, por ejemplo, no bastará con recurrir a la Escritura o el Magisterio para iluminar ciertos temas, sino que habrá que fundar críticamente el recurso a esas instancias como fuentes aptas para la reflexión moral.
Moral fundamental, finalmente, en cuanto que lo que
se pretende en el curso no es simplemente dar unos cuantos principios generales que luego habrían de ser aplicados al pie de la letra en las diversas circunstancias. Emergerán, sí, algunos principios importantes; pero lo más importante será aprender a juzgar moralmente el actuar humano a la luz de la razón y de la fe, para poder guiar nuestra vida personal e iluminar a los demás en su camino.
DEFINICIÓN Parte de la ciencia teológica que estudia los actos
humanos a la luz de la razón iluminada por la fe, para ordenarlos a la perfección del hombre y a la visión amorosa de Dios, como felicidad verdadera y plena por medio de la gracia Reflexión científica, a partir de los datos que ofrece la Revelación sobre la actividad moral humana como respuesta a la vocación cristiana
Es aquella parte de la Teología que estudia los actos humanos, considerándolos en orden a su fin sobrenatural. Es como la ciencia de la felicidad porque muestra los caminos que a ella conducen.
VS 29
“Estad siempre dispuestos a dar razón de vuestra esperanza a todo el que os la pidiera. Pero hacedlo siempre con dulzura y respeto” (1 Pe. 3, 15)
Ciencia que acoge e interpela la divina Revelación y responde a la vez a las exigencias de la razón humana… Reflexión que concierne la moralidad, o sea, el bien y el mal de los actos humanos y de la persona que los realiza; abierta a todos los hombres Teología por reconocer el principio y el fin del comportamiento moral en Aquel con “sólo Él es
bueno”
TEOLOGÍA MORAL
(Santo Tomás, ST, I-II, 5, 8)
2. El método de la Teología Moral Fundamental a) La búsqueda del método
En toda ciencia la cuestión del método tiene una importancia determinante. También la Teología Moral, en cuanto saber sistemático requiere una dilucidación sobre su propia metodología.
Siempre problema con la casuística - PREPARAR CONFESORES, DUDAS DE
CONCIENCIA - PERO ES COMO SI ESPECIALIZAMOS UN ARQUITECTO EN REPARAR GOTERAS LEGALISMO QUEDARSE EN LOS MÍNIMOS
Desde mediados del siglo diecinueve se dio un paulatino
cambio de perspectiva, en el que se fue acentuando cada vez más el carácter propiamente cristiano, evangélico, espiritual, de la reflexión y de la vida moral. Ese lento movimiento se vino acelerando a mitad de nuestro siglo, hasta desembocar de algún modo en la celebración del Concilio Vaticano II. Aunque el Concilio no emanó ningún documento específicamente dedicado a la moral en general (como estaba previsto en un inicio), el nuevo enfoque de la moral permeó muchos de sus documentos, especialmente la constitución sobre “la Iglesia en el mundo de hoy”, Gaudium et Spes.. A partir del Concilio, pues, se ha originado un proceso profundamente renovador de la Teología Moral y de su metodología. Naturalmente, ha habido intentos muy variados y de muy diverso valor. Ese movimiento de búsqueda sigue vivo hoy día; y no podemos decir que se ha configurado ya un método perfecto y definitivo. En realidad no se podrá dar nunca por
b) Nuestro método de Teología Moral Fundamental El punto de partida de nuestro método será cuanto
pidió el Vaticano Il al hablar de la renovación de la enseñanza de la moral: “Aplíquese un cuidado especial en perfeccionar la teología moral, cuya exposición científica, más nutrida de la doctrina de la Sagrada Escritura, explique la grandeza de la vocación de los fieles en Cristo, y la obligación que tienen de producir su fruto para la vida del mundo en la caridad” (OT, 16).
EL Concilio pide, pues, que se dé un enfoque positivo a
la Teología Moral, la cual habrá de consistir, no en la exposición de unos preceptos y normas o en ofrecer un instrumento para discernir los diversos tipos y grados de pecados... Se tratará, más bien, de explicar la grandeza de la vocación de los fieles en Cristo.
VOCACIÓN En nuestro estudio subrayaremos por tanto la visión de
la vida moral como respuesta a una vocación. Será ese el eje y el enfoque de todo el tratado. Veremos cómo, efectivamente, la vida moral de la persona humana (y no sólo de los “fieles”) consiste en el fondo en una respuesta a la llamada que Dios le hace a través de su misma realidad creatural y a través del don de la redención que se hace presente de manera eminente en la vida de la Iglesia.
SEGUIMIENTO DE CRISTO La vocación, según el texto de OT, es vocación en
Cristo. La persona de Cristo será central en nuestra reflexión moral. En Jesucristo veremos la norma suprema de la moralidad, así como la inspiración de fondo y la principal motivación para vivir en plenitud la propia dimensión moral, cuya meta última es, precisamente, la vida eterna en Cristo.
NI OPIO DEL PUEBLO NI INDIVIDUALISMO Pero esa vida moral, respuesta a la vocación divina en
Cristo, implica obligación de producir frutos para la vida del mundo en la caridad. No es una moral individualista ni intimista. La vida moral del cristiano ha de incidir en la configuración de un mundo cada vez mejor, más humano, más concorde con el plan de Dios.
EL texto conciliar habla de exposición científica, la cual
debe ser más nutrida de la Sagrada Escritura. No bastará, por lo tanto, hacer unas cuantas consideraciones piadosas, ni analizar “casos” de moral a la luz de algunos principios previamente asumidos. No será tampoco suficiente entremezclar más o menos caóticamente una serie de intuiciones o de reflexiones morales; ni coser una detrás de otra las opiniones o sentencias de algunos autores... La ciencia requiere una elaboración sistemática, una fundación apropiada, un iter o camino (cfr. el origen de la palabra “método”) ordenado, orientado en función de un núcleo unificador. En nuestro caso, ese núcleo será la realidad de la vida moral como respuesta a una vocación divina..
La especulación habrá de tomar en cuenta esos
elementos, pero habrá de servirse de la razón, no solamente como instrumento de análisis e interpretación de esas primeras “fuentes”, sino también como “fuente” de reflexión moral ella misma. Efectivamente, la ciencia moral, que estudia la realidad de la persona humana, sus actos y actitudes, sus condicionamientos y su misma realización como persona, la razón humana aporta una luz propia (don del mismo Dador de la luz de la Revelación), sobre todo con la contribución de la filosofía y con la ayuda de las llamadas ciencias humanas (como la psicología, la sociología, etc.).
ANTROPOLOGÍA CRISTIANA Existe una íntima relación entre Etica y Antropología: la conducta que se proponga y exija el hombre depende del concepto que se tenga de él. Antropología cristiana:
1
El hombre refleja en su mismo ser la “imagen” de Dios (creación). Ha de actuar conforme a esta dignidad.
2
Novedad de la gracia bautismal: nos hace hijos de Dios en el Hijo, partícipes de la naturaleza divina, nos identifica con Cristo. Por eso debemos actuar como Cristo actuó, seguir sus pasos.
Otras características de la antropología cristiana:
a
Unidad de la persona: el hombre es persona en la unidad de cuerpo y espíritu. “Su unión constituye una única naturaleza” (CCE 365).
b
La naturaleza humana ha sido herida por el pecado original. “Ignorar que el hombre posee una naturaleza herida, inclinada al mal, da lugar a graves errores en el dominio de la educación, de la política, de la acción social y de las costumbres “ (CCE 407).
c
El hombre ha sido redimido y elevado a la vida divina. La adopción filial hace al hombre “capaz de obrar rectamente y de practicar el bien. (...) El discípulo alcanza la perfección de la caridad, la santidad. La vida moral, madurada en la gracia, culmina en vida eterna” (CCE 1709).
2. FUENTES DE LA TEOLOGÍA MORAL Las fuentes de la moral son todas las realidades en las
que se basa esta ciencia, y de las que obtiene su fundamento. Son las siguientes:
a. La Sagrada Escritura Que por ser la misma Palabra de Dios, es la
primera y principal fuente de la moral cristiana. Para que el hombre supiera con certeza y sin error las normas de su conducta, Dios estableció, tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, prescripciones de orden moral
No sólo contiene normas morales
Nos propone un modelo concreto, una persona
Cristo
Fuentes: Sagrada Escritura y Tradición. La moral cristiana es una moral revelada. Dios creó al hombre y a la mujer: sabe lo que es bueno y malo para ellos. Las acciones son buenas o malas no porque Dios lo determina, sino que Dios las impone o prohibe porque son buenas o malas para la persona. Las leyes morales de la Biblia brotan de la misma naturaleza humana: el mal deteriora al ser humano, y por eso Dios lo prohibe; el bien le perfecciona, y por eso Dios se lo impone. Jesús inauguró un modo nuevo de vivir, de forma que la imitación de Jesús es la esencia de la vida moral cristiana.
b. La Tradición Cristiana Fuente complementaria de la Sagrada Escritura. Como
es sabido, no todas las verdades reveladas por Dios están contenidas en la Biblia. Muchas de ellas fueron reveladas oralmente por el mismo Cristo o por medio de los Apóstoles, inspirados por el Espíritu Santo, y han llegado hasta nosotros trasmitidas por la Tradición. La Tradición se manifiesta de modos distintos, y es infalible sólo cuando está reconocida y sancionada por el Magisterio de la Iglesia. Los principales cauces a través de los cuales nos llega la Tradición son
Los Santos Padres Conjunto de escritores de los
primeros siglos de la Iglesia, que por su antigüedad, su doctrina, la santidad de su vida y la aprobación de la Iglesia merecen ser considerados como auténticos testigos de la fe cristiana.
Los teólogos Autores posteriores a la época patrística que se dedican al estudio científico y sistemático de las verdades relacionadas con la fe y las costumbres.
La misma vida de la Iglesia desde sus inicios, a través de la liturgia y del sentir del pueblo cristiano
c. El Magisterio de la Iglesia Que por expresa
disposición de Cristo custodia e interpreta legítimamente la Revelación divina, y tiene plena autoridad para imponer leyes a los hombres, con la misma fuerza que si vinieran directamente de Dios.
El Magisterio de la Iglesia garantiza que las enseñanzas reveladas no se adulteran con el tiempo. Dei Verbum, 10: “La Tradición, la Escritura y el Magisterio de la Iglesia, según el plan prudente de Dios, están unidos y ligados, de modo que ninguno puede subsistir sin los otros, y cada uno según su carácter, y bajo la acción del único Espíritu Santo, contribuye eficazmente a la salvación de las almas”. Cierto que la teología moral necesita otras ciencias (derecho, psicología, medicina, etc.). Destaca la antropología: importancia de la concepción que se tenga del hombre.
La razón natural Subsidiariamente puede hablarse también de otras
fuentes, entre las que ocupa un lugar preeminente la razón natural, destacando la maravillosa armonía entre las normas de la moral sobrenatural contenidas en la divina Revelación, y las que propugna el orden ético puramente natural. la Revelación y la razón nunca pueden contradecirse y que la razón puede prestar valiosa ayuda p ara la inteligencia de los misterios de la fe
2. RELACIÓN DE LA MORAL CON OTRAS PARTES DE LA TEOLOGÍA La teología se divide para estudiarla, pero es una
unidad, si quitamos un elemento dogmático se resiente la moral, y viceversa, cuántas crisis de fe las ha motivado una conducta desviada Dogmática vs moral: la primera es especulativa lo que se debe creer y la moral lo que hay que hacer, aunque siempre la teología es a la vez especulativa y práctica
El cristiano no sólo cree, sino que vive. Teología Dogmática Teología Moral Pero Dogmática y Moral forman una sola ciencia: la vida del creyente está conforme con lo que cree, y sus creencias se encarnan en la vida.
Dado que el hombre es social por naturaleza, la vida moral no afecta sólo a la vida personal del individuo, sino también a su actitud en la convivencia humana.
Moral vs espiritualidad Un gran error es separarlas ascética y mística Antes del concilio la moral se ocupaba de
mandamientos y pecados y la espiritualidad de cómo llegar a la perfección No hay unanimidad qué ámbito le corresponde a cada asignatura, la teología espiritualidad debería estudiar las diferentes espiritualidades dentro de la común vocación cristiana
Moral vs pastoral Teología pastoral es el estudio teológica de la Iglesia en la realización histórica de cada época La moral se centra en la existencia concreta de la persona Cuando se estudien los temas que no se descuide la dimensión pastoral, la fundamentación de la moral debe estar anclada en la eclesiología y por tanto en la pastoral
El punto de partida: ¿la razón o la fe? La moral: ¿a qué preguntas responde? ¿Ética de la fe, afirmando la trascendencia del misterio? ¿Dicotomía entre la “vivencia de la gente” y lo que la Iglesia expone como doctrina? Histórica reducción de la moral a la práctica penitencial Gigantesco pluralismo socio-cultural como dificultad para la pastoral
global y totalizante búsqueda del ser “alguien coherente” Pregunta por la situarse ante el otro identidad personal desde la propia individualidad referencia a tres variables: agere sequitur esse o los demás o el tiempo ¿quién soy? Pregunta por la a mayor claridado el espacio a mayor claridad identidad personal sobre la propia existencia,existencia, mejor sobre la propia conocimiento mejor conocimiento sobre la actuación debida sobre la actuación debida y opcionalidad alternatividad
¿QUIÉN SOY?
¿QUÉ DEBO HACER?
Pregunta prescriptiva por el “deber ser” esse sequitur agere
¿QUÉ SENTIDO TIENE LA VIDA? Pregunta de “existencialidad”
cada decisión que exige autodefinición: o definición de sí mismo ante sí y los demás o cambia el rumbo de la propia vida el quehacer procede del ser y lo ilumina
universo de los por qué – para qué comprensión de lo particular desde lo universal experiencia de infinitud de nuestros deseos y finitud de su realización soñadores en la experiencia del límite: o más preguntas que respuestas o capacidad de asombro
más fuerte en la adolescencia relación a la dimensión psicológica de la persona humana
más fuerte en el adulto relación a la dimensión ética como búsqueda de realización de lo correcto
más fuerte en la ancianidad relación a la dimensión religiosa en sentido amplio: situación en y desde la totalidad
Teología Moral Fundamental SUMA TEOLÓGICA
MORAL GENERAL
ESPECIAL
fundamental
particular
“La ciencia moral, cuyo objeto son los actos humanos, debe exponerse primero en universal, y después en particular” (ST, I-II, q-6c)
categorías básicas de la moral sobre los problemas concretos doble desafío
CASUÍSTICA Mandamientos | Sacramentos
1. Fundamentar la exigencia ética cristiana 2. Atender a las categorías básicas de la moral
TEOLOGÍA MORAL CIENCIA PRÁCTICA Por su objeto y por su fin la Teología es eminentemente
práctica. Cuando trata sobre el bien, el fin último no intenta decir qué son sino que se pongan en práctica Tenemos un ejemplo práctico insuperable: Cristo, su vida es nuestro modelo
Es una ciencia eminentemente práctica Ayuda al hombre a guiar sus actos. El hombre necesita de esa orientación,
para adecuar su conducta a la Ley de Dios.
Nociones claves de la Moral Fundamental
La libertad: sin ella las acciones no serían ”morales”, pues no se podrían imputar a la persona. La conciencia: al modo como la razón elabora juicios teóricos sobre si algo es verdad o error, de modo semejante, la conciencia emite “juicios prácticos” acerca de la bondad o malicia de un acto. La norma moral: el cristiano debe orientar su conducta en orden a cumplir las normas morales que Dios dictó a la humanidad (desde el Decálogo hasta el mandamiento nuevo del amor).
La Moral tiene que armonizar libertad-conciencia-norma.
La pregunta moral
Maestro bueno, qué he de hacer para alcanzar la Vida Eterna? Mt. 19,16
“En cualquier campo de la vida personal, familiar, social y política, la moral -que se basa en la verdad y que a través de ella se abre a la auténtica libertad- ofrece un servicio original insustituible y de enorme valor no sólo para la persona y para su crecimiento en el bien, sino también para la sociedad y su verdadero desarrollo” (Veritatis splendor 101).
“El hombre de hoy escucha más a gusto al que da testimonio que al que enseña, y si escucha al que enseña, lo escucha porque da testimonio” PABLO VI, EN 41
“Urge recuperar y presentar una vez más el verdadero rostro de la fe cristiana, que no es simplemente un conjunto de proposiciones que se han de acoger y ratificar con la mente, sino un conocimiento de Cristo vivido personalmente, una memoria viva de sus mandamientos, una verdad que se ha de hacer vida.” JUAN PABLO II, VS 88