Estereotipo Wki

  • October 2019
  • PDF

This document was uploaded by user and they confirmed that they have the permission to share it. If you are author or own the copyright of this book, please report to us by using this DMCA report form. Report DMCA


Overview

Download & View Estereotipo Wki as PDF for free.

More details

  • Words: 4,743
  • Pages: 8
Estereotipo Ir a la navegaci�nIr a la b�squeda No debe confundirse con estereotipia. El jud�o errante, 1852, grabado de Gustave Dor�, caricatura basada en estereotipos. Un grabado neerland�s del siglo XVIII de los pueblos del mundo, que representa a los habitantes de Asia, Am�rica y �frica como salvajes. Abajo est�n mostrando un ingl�s, un neerland�s, un alem�n y un franc�s. Se conoce con el nombre de estereotipo (del griego: ste?e?? [stere�s], �s�lido�, y t?p?? [typos], �impresi�n, molde�)1? a la percepci�n exagerada y con pocos detalles, simplificada, que se tiene sobre una persona o grupo de personas que comparten ciertas caracter�sticas, cualidades y habilidades, que busca �justificar o racionalizar una cierta conducta en relaci�n a determinada categor�a social�.2? Regularmente los estereotipos son basados en prejuicios que la sociedad establece conforme su ideolog�a de �modelo a seguir� de conducta o caracter�sticas f�sicas, estos van cambiando conforme el paso del tiempo. El t�rmino se usa a menudo en un sentido negativo, consider�ndose que los estereotipos son creencias il�gicas que limitan la creatividad y que s�lo se pueden cambiar mediante el razonamiento personal sobre ese tema. Los estereotipos son alegatos comunes del pasado. Incluyen una amplia variedad de alegaciones sobre diversos grupos raciales y predicciones de comportamiento basadas en el estatus social o la riqueza. Son esquemas de pensamiento o esquemas ling��sticos pre construidos que comparten los individuos de una misma comunidad social o cultural.3? Existe una tripartici�n que nos permite entender c�mo funcionan los estereotipos en las sociedades. Por un lado existe un componente cognitivo que nos permite reconocer un estereotipo porque encuadra con conocimientos previos que ya tenemos sobre el mismo, es una categor�a que nos permite identificar y reconocer f�cilmente a ciertos grupos. Por otro lado tambi�n existe un componente afectivo, donde entran en juego los sentimientos que experimentamos en relaci�n con ese estereotipo, que pueden ser de prejuicio u hostilidad, o bien, ser positivos. Finalmente en todo estereotipo hay un componente comportamental que supone llevar a la pr�ctica acciones asociadas a esos sentimientos experimentados frente a ciertos estereotipos. Por ejemplo, cuando se le niega un trabajo a alguien por pertenecer a un grupo determinado. Estos tres componentes no necesariamente aparecen todos juntos, uno puede asociar a unos grupos caracter�sticas negativas sin sentir hostilidad o reticencia hacia el mismo y sin excluirlos de �mbitos sociales como el trabajo. Representar a alguien con ciertas caracter�sticas remite a un estereotipo, manifestar desprecio u hostilidad por su grupo de pertenencia se relaciona con un prejuicio, y finalmente llevar adelante acciones sobre la base de esos prejuicios supone una discriminaci�n.4? �ndice 1 Uso com�n 2 En medios de comunicaci�n 2.1 Definici�n y evoluci�n de su significado 2.2 Estereotipos en la literatura infantil 2.3 Estereotipos en los medios de comunicaci�n 2.4 Estereotipos en la publicidad 2.5 Estereotipos en el cine 2.6 Recomendaciones para la eliminaci�n de estereotipos 3 En inform�tica 4 En la cultura de Internet

5 Estereotipo de grupo 5.1 Ejemplos de estereotipo de grupo 6 V�ase tambi�n 7 Referencias 8 Bibliograf�a 9 Enlaces externos Uso com�n Estereotipo de villano. Est�n constituidos por ideas, prejuicios, actitudes, creencias y opiniones preconcebidas, impuestas por el medio social y cultural, que se aplican de forma general a todas las personas pertenecientes a una categor�a, nacionalidad, etnia, edad, sexo, orientaci�n sexual, procedencia geogr�fica, etc�tera. En la literatura y el arte, los estereotipos no son clich�s o personajes o situaciones predecibles. Por ejemplo, un diablo estereotipo es malvado, con cuernos, cola, y tridente. Originalmente un estereotipo era una impresi�n tomada de un molde de plomo que se utilizaba en imprenta en lugar del tipo original. Este uso desemboc� en una met�fora sobre un conjunto de ideas preestablecidas que se pod�an llevar de un lugar a otro sin cambios (al igual que era posible con el tipo portable). En la �tica y valores humanos se usan estereotipos que ayudan y contribuyen a la forma de representar los problemas que se presentan en la sociedad diaria y continuamente en todo el mundo. En medios de comunicaci�n Los medios de comunicaci�n cumplen un rol fundamental en la construcci�n y la reproducci�n de estereotipos. A partir de las im�genes e ideas que circulan en los medios, el p�blico accede a ciertos estereotipos que los mismos reproducen y construyen a la vez. Ciertos formatos como la publicidad y los programas dirigidos al p�blico infantil usan los estereotipos ya que los mismos permiten un mensaje eficaz, pues son r�pidamente identificados y reconocidos. Tal y como se�alan Ruth Amossy y Anne Herschberg Pierrot, �La visi�n que nos hacemos de un grupo es el resultado de un contacto repetido con representaciones enteramente construidas o bien filtradas por el discurso de los medios. El estereotipo ser�a principalmente resultado de un aprendizaje social�.5? Incluso lo que percibimos en la vida cotidiana (y no solamente a trav�s de los medios) tambi�n utiliza nuestros conocimientos e ideas previas, y por tanto nunca es totalmente objetivo sino que est� moldeado por la cultura a la que pertenecemos y desde la que percibimos la realidad. Definici�n y evoluci�n de su significado La palabra estereotipo, formada por los vocablos griegos stere�s (s�lidos) y typos (car�cter, tipo o modelo), es un neologismo creado en el siglo XVIII en el �mbito de la tipograf�a para designar un conjunto de tipos s�lidos o fijos. En concreto apareci� en Francia en 1796 �ster�otype�, traducida como estereotipo que se usa como adjetivo y sustantivo para describir el molde s�lido o algo impreso con el procedimiento de los tipos fijos. La expansi�n de la palabra fue pareja a la r�pida difusi�n de la t�cnica y surgieron equivalentes, casi id�nticos, en la gran mayor�a de lenguas modernas. En Espa�a se usa el t�rmino �estereotipo� para el objetivo y �estereotipa� para el proceso. El �ltimo t�rmino evoluciona a �estereotipia�, el cual fue reconocido por la Real Academia Espa�ola en 1843. El significado original y sus derivados fueron extendi�ndose a un concepto cada vez m�s figurativo. Por tanto, apareci� una nueva acepci�n que supone un puente entre su origen tipogr�fico y su significado actual dentro de las ciencias sociales; tal acepci�n se refiere a cualquier cosa que se repita sistem�ticamente de la misma

forma, sin variaci�n. En resumen, los t�rminos referidos a la estereotipia se refieren en principio a las impresiones salidas de un molde y poco a poco van siendo aplicadas a todo lo que parece salido de un molde, ya hecho, invariable.6? Otras definiciones se refieren a estereotipo como una imagen o idea aceptada com�nmente por un grupo o sociedad con car�cter inmutable1? y una imagen convencional o una idea preconcebida que no tiene una base racional. Se trata de una concepci�n popular sobre un grupo de personas y constituye una forma de categorizar grupos de gentes de acuerdo con sus apariencias, comportamientos y costumbres.7? Con los estereotipos no suele cumplirse la ley de causa y efecto, m�s bien suele suceder a la inversa. Adem�s normalmente parecen seguir una l�gica, pero cuando se analizan se descubre que son irracionales e inveros�miles. La imagen creada suele ser una manera de emitir un juicio de valor acerca de un grupo, normalmente basados en raza, profesi�n o sexo.7? Es frecuente atribuir la creaci�n de estos estereotipos a la sociedad, pero realmente los medios de comunicaci�n son grandes veh�culos para difundirlos. En cierto modo los medios de comunicaci�n refuerzan las opiniones generales haciendo uso de la exposici�n y reiteraci�n de ideas coexistentes. Los estereotipos tienen cierta conexi�n con las condiciones sociales, esto les suma fuerza. Al poder localizar en ellos un grano de verdad, su divulgaci�n se hace efectiva. A pesar de que no todos aceptan los estereotipos como verdad, acostumbran a estar aprobados por grandes colectivos. El estereotipo es verdadero y falso al mismo tiempo y est� basado en los prejuicios de un grupo hacia otro. El discurso publicitario es una fuente inagotable de estereotipos. Los mensajes publicitarios usan estereotipos ic�nicos para instalarnos en un universo on�rico al que accederemos, por supuesto, tras la adquisici�n del producto anunciado.8? Estereotipos en la literatura infantil El primer relato que se conoce cuenta la historia de dos hermanos, Anup y Bata, en un papiro de hace unos 3250 a�os. Seg�n un estudio de Kurt Ranke el relato ha sufrido m�s de 700 versiones distintas. La mitolog�a griega es la gran portadora de personajes y leyendas que, evolucionadas a trav�s de los siglos y bajo la influencia de las distintas culturas y tradiciones, son el origen de muchos de los cuentos que hoy conocemos. En Espa�a el origen del cuento est� influenciado por la cultura �rabe, que introdujo gran cantidad de relatos, los cuales fueron recopilados por Don Juan Manuel, regente de Castilla, en su obra El conde Lucanor o libro de los ejemplos. En la obra encontramos una caracter�stica propia de estos relatos, la moraleja que serv�a para dar una respuesta moral a las dudas que se iban planteando. El cuento infantil, independientemente de la �poca, lleva impl�cito en sus personajes estereotipos que reflejan los aspectos culturales de la �poca de la que provienen. Los personajes son representaciones del bien o del mal como ejemplo para imitar o repudiar, debido a su car�cter moralizador. Los valores de los personajes cambian a lo largo del tiempo y se adaptan a las estructuras socioculturales del momento. El h�roe y el villano de los cuentos de Charles Perrault o de los Hermanos Grimm poseen cualidades o defectos distintos entre s�, y adem�s, tambi�n distan de las cualidades que se consideran hoy en d�a. La posible interpretaci�n de algunos personajes comunes es la siguiente: La bruja: representa la parte regresiva de todo ser humano, el mal que ha de ser destruido y combatido. La madrastra: representa la destrucci�n dentro de la familia y da cabida a la heroicidad en el ni�o o la ni�a desamparado. La princesa: la doncella indefensa que ha de ser protegida y/o rescatada.

El lobo: el miedo a la noche y a la oscuridad. Durante siglos, en la antig�edad cl�sica existi� la creencia de que hab�a mujeres capaces de transformarse a voluntad y de transformar a otros en animales, se las llamaba brujas y la imagen estereotipada de los cuentos las define como viejas amargadas y mal�volas. La mayor�a de los cuentos maravillosos provienen de relatos antiguos campesinos sometidos al r�gimen feudal. Los valores sociales de esta constituyen el valor y el respeto por el orden establecido, donde la para la clase baja se encarna en el joven campesino capaz de superar conseguir la mano de la princesa.

sobre �poca lo �nica mejora pruebas y

En el siglo XVIII, con la Revoluci�n Industrial, surgen nuevos h�roes y villanos m�s acordes con el hombre de ciudad que ha dejado de lado el campo. Aparecen piratas, pistoleros, bandidos� como nuevos h�roes que se enfrentan al orden establecido y el villano pasa a ser un elemento propio del sistema como lo es la sociedad burguesa, las costumbres acomodadas o el ej�rcito. El siglo XX, debido a su car�cter b�lico proporciona nuevos elementos, por ejemplo la influencia americana propone nuevos villanos, personalizados en japoneses y alemanes contra los que el h�roe ha de luchar para defender la libertad del mundo. El cuento ha evolucionado desde aquellos villanos de anta�o a villanos con car�cter m�s cotidiano como puede ser el profesor de colegio o el bullying dentro de las aulas o fuera. El cuento ha pasado a integrarse dentro de la vida real.9?10? Estereotipos en los medios de comunicaci�n Trancart (1996), en diversos estudios en medios de comunicaci�n franceses (prensa, radio y TV), descubri� que una de cada dos mujeres es citada sin que conste su profesi�n, mientras que en el caso de los hombres esto s�lo ocurre en una de cada diez ocasiones. Tal y como dice Mart�n Serrano (1995), �uno de los esquemas que m�s se repiten en la televisi�n es el de las mujeres asociadas con el cuerpo, y los hombres con la cabeza�. As� se demuestra en programas televisivos como por ejemplo La Ruleta de la Suerte, en los que la mujer se presenta como un simple objeto de belleza. �Por desgracia y en un gran porcentaje de los casos, cuando la mujer aparece en im�genes, lo hace en muchas ocasiones representado a ciertos estereotipos que han resistido al paso del tiempo y que siguen estando presentes en la mayor�a de las sociedades. As�, nos podemos encontrar con la mujer en el papel de seductora, aludiendo a conceptos relacionados con la belleza, el erotismo, y la provocaci�n, o como serpiente tentadora. En definitiva, en el sujeto convertido en objeto�. En Estados Unidos, The National Federation of Press (Gallagher, 2001) muestra c�mo las mujeres han visto incrementar su porcentaje de ocupaci�n de puestos de direcci�n o de toma de decisiones en solo un 1% cada a�o desde 1977. Por su parte, el profesor David Weaver llega a la conclusi�n de que las periodistas americanas hab�an conseguido ganancias significativas en materia de control editorial en los �ltimos tiempos. Se observa tambi�n c�mo, a pesar de que en las aulas de los colegios y universidades de periodismo en Estados Unidos las mujeres superaban en n�mero a la presencia masculina, �un dato que tambi�n se observa en Espa�a� segu�an teniendo una presencia minoritaria en las salas de prensa y especialmente, en los puestos de direcci�n. En Francia, en Gallagher (2001) se afirma que en el periodismo franc�s la condici�n femenina es una restricci�n para acceder a responsabilidades en el periodismo. Se�ala que la distancia con respecto a las grandes responsabilidades en este �mbito profesional y a las columnas importantes se traduce en menos probabilidades de encontrase con gente famosa, facilitando en cambio un mayor acceso a personajes m�s an�nimos y reportajes menos brillantes, lo que en resumen produce un periodismo

tipificado como guarda relaci�n tienen acceso a que se topan en

femenino. Es decir, que lo que las mujeres escriben no siempre con la sensibilidad femenina, sino que en muchas ocasiones no escribir algo distinto, debido a las estructuras de poder con las esta profesi�n jerarquizada.

En Reino Unido, en Gallagher (2001) se apunta c�mo los hombres que estudian periodismo consiguen m�s r�pidamente un trabajo en los medios que las mujeres. Esto ha llevado a que algunas compa��as adopten pol�ticas y programas de acci�n para equilibrar esta situaci�n, pero puntualiza que esta adopci�n es m�s com�n en radio y televisi�n que en prensa y que ocurre m�s a menudo en medios de comunicaci�n p�blicos que en el sector medi�tico privado. En Sud�frica, Green (2001) recuerda c�mo en un estudio de igualdad laboral realizado una d�cada despu�s de la proclamaci�n del final del apartheid, el n�mero de personas negras que ocupaban cargos de poder en el mundo acad�mico y administrativo solo ascend�a a un 10 % del total. Lo sorprendente del estudio era que entre el 90 % restante correspondiente a personas blancas que ostentaban esos puestos de alto escalaf�n hubiera una ausencia casi total de mujeres blancas en las estructuras de poder y en la universidad. Siete a�os despu�s del fin del apartheid y bajo la nueva ley de igualdad para con los negros y las mujeres, s�lo se encuentra con tres mujeres que ocupen el puesto de editoras en peri�dicos del pa�s, dos de ellas de raza blanca y la otra negra. Tambi�n destaca que bajo un gobierno con mayor�a negra dirigiendo el pa�s, la mayor�a de los negocios y profesiones est�n controladas por manos blancas. En Australia, en 1996 se llev� a cabo un estudio que desvelaba que el 23 % de las mujeres periodistas de los medios hab�an dejado sus trabajos por motivos que ten�an que ver con la discriminaci�n que ven�a sufriendo el g�nero femenino en su promoci�n laboral. Asimismo, en 1991 The International Federation of Journalism (IFJ) admiti� que el 27 % de los periodistas que trabajaban en los medios eran mujeres, en 2001 ya superaban el 38 %, sin embargo este estudio tambi�n reconoce diferencias significativas en funci�n del pa�s analizado. Por ejemplo, mientras que en Finlandia y Tailandia estaban cerca del 50 %, en Sri Lanka y Togo las mujeres periodistas no llegaban casi a un 6 % (Peters, 2001). En relaci�n con la presencia de la mujer en los distintos medios de comunicaci�n, como es por ejemplo la radio, los locutores est�n por encima de las mujeres, sobre todo durante la ma�ana. Seg�n afirma Cramer, las mujeres est�n prefiriendo trabajar en los telediarios que en los informativos de la radio. En lo que respecta a los medios de comunicaci�n en l�nea, a pesar de la revoluci�n acontecida en este medio, las grandes multinacionales de la comunicaci�n parecen haber perdido la oportunidad de revolucionar la organizaci�n y la cultura de las salas de redacci�n, sobre todo, por lo que se refiere a la igualdad de g�nero en los puestos directivos (Thiel Stern, 2006). La mayor�a de las entrevistadas no piensan que la escasez de mujeres en los puestos directivos del medio en l�nea se deba a sexismo o discriminaci�n. Aun as�, la insuficiente representaci�n de la mujer es problem�tico. Los altos cargos son tan pocos y cuesta tanto acceder a ellos que no hay �suficiente pastel para repartir�.11? Estereotipos en la publicidad Los estereotipos en la publicidad son ideas simplificadas de la realidad que han sido aceptadas por la sociedad o por un grupo de personas determinado. No tratan simplemente de vendernos el producto al que hacen referencia, sino que nos venden el �xito social o la competitividad. Muchas veces en un principio pueden resultar forzados o incluso c�micos, pero al final acaban siendo aceptados. El anuncio publicitario debe ser representado con un vocabulario t�pico, que refleje los valores y argumentos en que se sustenta el estereotipo de la marca. As� se crear�n

unos estereotipos definidos que no aparecen con tanta simplicidad en la realidad. En definitiva, la publicidad es una de las principales responsables de los estereotipos, ya que a trav�s de muchas estrategias comerciales consiguen establecer modelos de conducta que las personas tratar�n de imitar, nos hace creer que si consumimos el producto anunciado conseguiremos obtener las mismas caracter�sticas. En el mundo publicitario encontramos diferentes tipos de estereotipos, aunque el principal es el sexo. �ste se utiliza para todo tipo de productos e incluso para aquellos que no tienen nada que ver con �l. Se trata de un est�mulo que el receptor acoge de forma positiva y r�pida. El rol de la mujer en la publicidad ha sido altamente estereotipado, represent�ndola siempre como esposa, madre, ama de casa o incluso como mujer objeto. Se muestra la imagen de mujer dependiente y d�bil pero, ante todo, bella. De esta forma, la mujer es representada no s�lo como objeto de deseo del var�n sino, como afirma Garc�a Oyarzun (2014), como parte del consumo del objeto publicitado. A pesar de que la objetivaci�n de la mujer sigue siendo abundante en la publicidad, actualmente tambi�n empiezan a aparecer ejemplos de la mujer superwoman que no necesita la ayuda del hombre. En el hombre el estereotipo establecido ejerce mayor presi�n social hacia una imagen que refleje fuerza, agresividad, dominio, valent�a, pero sin descuidar tampoco su aspecto f�sico. A su vez, son mostrados como poco profundos y muy superficiales, esencialmente incompetentes.12?13? Sin embargo, tanto en el caso de los hombres como en el de las mujeres uno de valores m�s explotados es la belleza. Los creativos publicitarios recurren siempre a modelos atractivos para llamar la atenci�n del p�blico y con ello pretenden que el p�blico crea que, al consumir su producto o servicios, su f�sico ser� tal y como se muestra en la publicidad y que de esa forma su vida ser� mejor. En muchos casos, esa necesidad generada de alcanzar el ideal f�sico mostrado en la publicidad da lugar a trastornos alimenticios (anorexia, bulimia) y otros problemas psicol�gicos, sobre todo en adolescentes, que son un blanco f�cil para este tipo de presiones. Dentro de la publicidad infantil el estereotipo que m�s se desarrolla es el de los roles de g�nero, marcando supuestas diferencias entre chicos y chicas. Las ni�as suelen ser representadas como obedientes, delicadas y ordenadas, que ayudan a la madre en el hogar asumiendo responsabilidades desde una edad muy temprana. Del mismo modo todos los juguetes enfocados para las ni�as tienen relaci�n con el mundo de la cosm�tica y el hogar. Por el contrario, los ni�os suelen mostrarse como inquietos y rebeldes, aunque a su vez son emprendedores. Y de esa forma los juguetes para ni�os suelen tener que ver con el mundo de la construcci�n, el autom�vil o incluso campos m�s agresivos como la guerra. Tambi�n se suele usar a los ni�os como gancho para vender productos a los adultos, vali�ndose de la simpat�a o ternura que producen.12? En ocasiones la publicidad tambi�n fomenta ciertos estereotipos raciales. De esta forma, la mayor�a de las veces pueden llegar a subestimar una raza sobre otra, como sucedi� en el anuncio de una cadena de comida r�pida en Alemania, que indign� a los mexicanos.14? Adem�s, el f�sico ideal que muestra la publicidad tiene tambi�n ciertos componentes raciales. Esto sucede porque, por norma general, los modelos utilizados no s�lo comparten entre s� su delgadez y belleza, sino que suelen ser personas con rasgos cauc�sicos, piel blanca y, muchas veces, pelo rubio y ojos claros. Esto ayuda a fomentar la idea de que hay una raza m�s perfecta o superior que el resto.12? En resumen, el uso de estereotipos es negativo cuando empiezan a convertirse en prejuicios y condicionantes. Actualmente este problema est� empezando a cambiar ya que los consumidores tienen m�s consciencia sobre este fen�meno pero, aun as�, la gran mayor�a sigue siendo manipulada por los anunciantes.

Estereotipos en el cine Un ejemplo de estereotipo en el cine es la actriz Salma Hayek (siempre le dan papeles que representan a un personaje de origen latino).15? Seg�n un estudio realizado por el Observatorio de Cultura y Comunicaci�n de la Fundaci�n Alternativas, el cine producido por los grandes estudios de Estados Unidos representa aproximadamente entre el 70% y el 80% del mercado mundial. Este mismo estudio afirma que Hollywood domina el imaginario colectivo. Este imperialismo cultural deriva en un mercado cinematogr�fico �especialmente el occidental� con referencias y estereotipos comunes.16? Con respecto a Espa�a, la mejor cuota de mercado de la historia del cine nacional fue la obtenida en 2014, con un 25,5 %, m�s de 6 puntos porcentuales por encima de la obtenida en 2013 (19,2 %).17?18? Dentro de este porcentaje el cine de autor no tiene apenas cabida. Esta limitaci�n contribuye al fomento del consumo de cine elaborado al estilo hollywoodiense, m�s rentable en t�rminos econ�micos. De este modo, a la hora de hablar de estereotipos en el cine se habla principalmente de aquellos que aparecen reflejados en el cine norteamericano y que, por extensi�n, llegan a mayor n�mero de poblaci�n. Como apunta Parini, �el estereotipo �en sus diferentes formas y significados� representa un instrumento y una soluci�n a la exigencia objetiva, presente en los medio de comunicaci�n, de reducir una complejidad que no es f�cil de difundir�.19? Pero recurrir al estereotipo refuerza los t�picos, generalmente alejados de la realidad a la que aparenta representar, ya que, para P�rez Serrano �el cine contribuye a la formaci�n, mantenimiento o eliminaci�n de estereotipos, seg�n apoyen o no las creencias aceptadas socialmente. Adem�s, general modelos que influyen en la creaci�n de la identidad social�.20? Estereotipos culturales �Durante gran parte del siglo, la teor�a del cine en Europa y Norteam�rica parece haber vivido de la ilusi�n de ser totalmente ajena a toda raza�. Esta frase del te�rico Robert Stam (1999) define no solo la teor�a, sino tambi�n una realidad.21? En lo que al cine norteamericano respecta, los principales papeles representados por los asi�ticos son el de mafioso y el de experto en artes marciales �o ambos a la vez, generalmente�. Por su parte, los latinos suelen ser pobres con un especial talento para bailar, seducir o embaucar o traficantes y personas allegadas a estos. Los afroamericanos aparecen representados por personajes graciosos, con car�cter y/o buena voz. Los rusos suelen aparecer como agentes, ex agentes secretos o mafiosos dispuestos a poner en peligro la seguridad mundial. Al pueblo jud�o lo representan como un colectivo avaro y codicioso, mientras que los �rabes, como terroristas. Los occidentales de piel clara suelen ser los protagonistas de las pel�culas y desempe�an diferentes roles, tambi�n estereotipados, fundamentalmente en torno al g�nero. Cabe mencionar aqu� al h�roe americano, firme defensor de lo correcto, la libertad y la justicia y algunos de los t�picos m�s frecuentes en torno a los europeos: los alemanes se relacionan con la cerveza y un gran tama�o, los espa�oles con la fiesta y el flamenco �y a veces con los trajes de mexicano� y los italianos con la seducci�n, la mafia, la pasta y la Vespa. En definitiva, el reflejo que hace el cine comercial no es el del individuo, sino el de los t�picos. Si dirigimos la mirada hacia el cine espa�ol, Gordillo conclu�a en un trabajo sobre el di�logo intercultural en el cine espa�ol contempor�neo que �el cine espa�ol muestra actualmente unas relaciones interculturales deficientes entre el oriundo y el inmigrante que llega huyendo de la pobreza, debido �sobre todo� a la mirada etnoc�ntrica y a los prejuicios sociales y culturales de car�cter negativo�.22?

Para Rodrigo Alsina, catedr�tico de Teor�as de la Comunicaci�n de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, �dentro del cine espa�ol encontramos una profunda falta de informaci�n sobre las etnias, culturas y pueblos que empiezan a vivir en nuestras ciudades. En realidad, una de las causas del rechazo social y del racismo es el desconocimiento de la otra cultura, que da lugar al estereotipo, una de las marcas que se presentan al reflejar los rasgos del di�logo intercultural en el cine espa�ol. Aunque los estereotipos ayudan a ordenar y dar sentido a los hechos que desbordan nuestro conocimiento, son un problema cuando se utilizan para fundamentar ideas y opiniones supuestamente serias. Los prejuicios y los estereotipos siempre se utilizan para analizar la realidad y debemos de ser conscientes de ello�.23? Estereotipos de g�nero Art�culo principal: Estereotipos de g�nero Para Williams y Best, �uno de los estereotipos que a lo largo de la historia se ha mantenido con m�s fuerza y fiabilidad es el del sexo. En m�ltiples trabajos, algunos ya cl�sicos y otros m�s cercanos se encuentran descripciones de los grupos de hombres y de mujeres que engloban caracter�sticas similares en contextos tan diversos como Am�rica del Norte y del Sur, Asia, �frica, Europa y Australia. Estas descripciones retratan a las mujeres como sensibles, c�lidas, dependientes y orientadas a la gente, en tanto que a los hombres se les ve dominantes, independientes, orientados hacia el trabajo y agresivos�.24? La industria cinematogr�fica moderna representa a la mujer a trav�s de un estereotipo en el que se ajusta al canon de belleza, que viste por lo general con ropa seductora y cuyo rol se encuentra entre ser el objeto de deseo o una acompa�ante fiel, tierna y comprensiva de la figura masculina protagonista. Las mujeres mayores o poco atractivas solo optan a papeles secundarios o se ven relegadas a papeles como el de bruja o se�ora de la limpieza cuando, por el contrario, los hombres de su misma condici�n s� optan a papeles protagonistas y aparecen siempre rodeados de atractivas j�venes que, en palabras de Gila y Guil Sevilla, o se enamoran de ellos o se venden a su poder�o. Las mismas autoras reconocen, no obstante, que �existe cine espa�ol y europeo que escapa a estos t�picos�, pero que �su influencia es much�simo menor al ser significativamente menos visto por los espectadores�.25? Sin embargo, la sociedad est� viviendo un empoderamiento de la mujer en las �ltimas d�cadas, lo que augura algunos cambios en la industria cinematogr�fica, si seguimos el criterio de Gonz�lez Gabald�n, que manifiesta que �una forma concreta de cambio del estereotipo se produce al modificarse los roles de un grupo y cuando esto sucede los estereotipos se adaptan r�pidamente y pasan a reflejar los nuevos desempe�os�.26? En la actualidad se busca derribar los modelos femeninos superficiales planteados en los medios de comunicaci�n para combatir los estereotipos que tratan a la mujer como objeto en lugar de sujeto. Varios autores consideran que un enfoque hol�stico de concienciaci�n a todos los niveles sobre el binomio sociedad-industria cinematogr�fica no solo permitir�a seguir avanzando en direcci�n a la restituci�n de la integridad de la figura de la mujer con pleno derecho, sino que direccionar�a el uso de una herramienta de difusi�n como es la industria del cine hacia motivos superiores, universales y ejemplarizantes para la sociedad que los estrictamente mercantiles.27

Related Documents

Estereotipo Wki
October 2019 18
Atmosfera Wki
October 2019 21
Ultramonatismo Wki
October 2019 19
Renacimiento Wki
October 2019 17
Posromanticismo Wki
October 2019 3
Aristoteles Wki
October 2019 12