El Tabaco

Alexande r mora

Todos los izquierdos reservados 2008 [email protected]

…¿como podría ser posible al menos pensar, que el fumar te pueda perjudicar?

El cigarrillo El fumar no es nocivo para la salud. ¡Ja!; ¿quién ha dicho eso?, ¡no es cierto, son mentiras, te están engañando!, no quieren que seas quien crees que eres; todos esos anuncios publicitarios que alegan estar en contra del tabaco, o el cigarrillo, no es mas que una profunda envidia que han creado aquellos… por no poder estar en donde tú estas, donde tú has llegado, fíjate lo que has conseguido; !si¡, ya te has dado cuenta de lo que has conseguido, te has dado cuenta que con el cigarrillo te vuelves adulto; con un cigarrillo sostenido con tus dedos, en tu mano derecha, no estas aparentando nada; con tu cigarrillo creas tu imagen, proyectas ante los demás y ante tu pareja una firme seguridad y sabia convicción de alguien que es maduro, alguien que sabe lo que quiere, que ha conseguido muchas metas en su vida; cuando te ven fumando, no solo ven todo la representación de lo que has logrado, sino que también están percibiendo para ellos mismos un ejemplo que tu has materializado y logrado con esfuerzo, y que con experiencias vivificadoras han sido forjadas gracias a tu característica y única relación que has logrado inculcarte tú y tu aliado el cigarrillo. Fumar y fumar, no debes hacer otra cosa, no tampoco debes dejar de hacerlo; sabes muy bien que tu imagen es muy valiosa y no puedes permitirte el lujo de perderla, cuando fumas estas siendo parte de un selecto grupo social, y con ello logras adquirir muchos beneficios que otorga el cigarrillo, ya que él es quien te abre las puertas ante situaciones que sin él, tu no serias capaz de afrontar; solo imagínate tratar de mostrarte ante los demás sin fumar...solo imagínate tu, allí, parado siendo tu mismo; sin ninguna representación, sin ninguna etiqueta social que te sitúe como dependiente de la relación segura y provechosa entre tú y tu cigarrillo, sin ser perteneciente a la élite que conforma el ser orgullosamente fumador; solo imagínalo, no serias capaz de llevar una vida así, no podrías soportarlo, es imposible que vivas sin fumar, y no trates de dejar de consumirlo, no lo puedes dejar, no necesitas dejarlo, eres uno con él, y sabrás que tu haces parte de él y que él hace parte de ti, y ese despertar, ese momento, será cuando trates de dejarlo, porque allí, precisamente allí sabrás lo ligado que estas con él; y te preguntaras: ¿como sabré sobre esta íntima relación?, pues en ese momento de ilusoria separación entre tu y el cigarrillo,

Alexande r mora

Todos los izquierdos reservados 2008 [email protected]

sentirás ansias, necesidad de volver a fumar, de querer tener en tu boca e inhalar ese vapor, delicioso, calido y acido para tu paladar, y que es de gran prioridad para satisfacer la demanda que exige esa idea que se ha fortificado en tu mente, gracias a tu esfuerzo reforzante día tras día por fumar; allí en ese instante de verdadera consciencia, te darás cuenta de tu necesaria dependencia por el cigarrillo. Con esto has logrado que sea una actividad habitual; se repetirá cada vez que sea necesario entablar la relación intima entre tu y lo que has denominado tu mejor compañero, y que también éste ha hecho parte de tu realización como persona, en un mundo en donde el que con su imagen y su rectificación de sus hábitos no seria digno de esta oportunidad que el cigarrillo te ofrece, que es el de fijarte una personalidad única e incambiable, en donde tu le permites administrar tu comportamiento y tus decisiones tanto mentales como físicas. Es falso que el tabaco produce dependencia, es falso que el tabaco destruye tu sistema respiratorio, todo ello es solo una farsa, el tabaco no puede dañarte, tu y el han creado lo que ahora eres, ¿como podría un amigo dañarte?, tu lo has conocido profundamente, tu sabes que es él, tu le has visto por dentro y no has encontrado nada perjudicial, puesto que si hubiese algo en él que te hiciese daño ya lo habrías notado en ti, y por ende ya dejarías de considerarlo parte de tu habitual forma de ser; ninguna de las partes que constituyen tu cigarrillo es perjudicial para tu salud, y te las voy a recordar, es imposible que el fumar te pueda dañar, ¿cómo se puede llegar a pensar eso?; !es inconcebible¡. Un cigarrillo contiene: 2 gramos de tabaco, 12 mgs. de alquitrán, 0,9 mgs. de nicotina, 12 mgs de monóxido de carbono. Como puedes ver, son sustancias que tu conoces muy bien, puesto que cada vez que fumas, por ende sabes lo que estas consumiendo, ya que tu no permitirías que algo que no sabes de que esta hecho o cual es su procedencia, lo dejarías entrar en tu organismo, y por demás, quienes hacen los cigarrillos siempre han estado interesados en tu salud, ellos nunca querrán que tu sufras algún padecimiento debido al excelente producto que venden, si fuese dañino no lo venderían, o si alguna sustancia que el cigarrillo tuviese fuese dañina, ellos serian los primeros en sacar de circulación su producto, como sabes, para los que fabrican los cigarrillos, tu salud es mas importante que el dinero que puedan adquirir por las masivas ventas; por lo tanto, jamás te ofrecerían un producto nocivo; fíjate ahora en esto, el tabaco es un producto vegetal, el alquitrán, que es una sustancia parecida al betún, grasosa, oscura y de olor fuerte, que se obtiene de la destilación de ciertas materias orgánicas, principalmente de la hulla, turba, huesos y de algunas maderas resinosas, es como lo sabes procedente de fuentes que conoces, como ya te lo dije; observa ahora la nicotina, es un compuesto orgánico, un potente veneno como sabes de sobra, pero como tu no lo vas a ingerir, pues no habrá ningún problema con él, es usado en múltiples insecticidas, en bajas concentraciones la nicotina es un estimulante, y ahí es donde es beneficioso para ti, ya que éste compuesto

Alexande r mora

Todos los izquierdos reservados 2008 [email protected]

del cigarrillo te dará la dosis de placer que necesitas para mantener tu ritmo habitual que requiere la ansiosa necesidad y amistosa que se ha decretado en tu mente: fumar. También es la nicotina quien afianza tu relación con el cigarrillo, haciéndose íntimos e inseparables, y por ultimo te recuerdo esta ultima sustancia, el monóxido de carbono, bueno con ésta talvez no se deba permanecer expuestos por períodos prolongados a concentraciones elevadas por esta sustancia, ya que el dióxido de carbono tiene la capacidad de unirse fuertemente a la hemoglobina, que es la proteína de los glóbulos rojos que contienen el hierro y la cual se encarga de transportar el oxigeno; cuando se combina el dióxido de carbono con la hemoglobina, pues empieza a reducirse la oxigenación al organismo, y talvez algunas células mueran por la carencia de oxigeno, pero bueno, no hay de que alarmarse, tu tienes millones y millones de células, y estas creando más para reemplazar todas aquellas que mueran por falta de oxigenación, y si llegasen a notarse algunas fallas en tu salud, eso seria a largo plazo, se empezaría a notar cuando tu cuerpo ya no tenga la suficiente capacidad para auto regenerar sus células. Bueno nadie cambiaria esos instantes placenteros que ofrece el cigarrillo por unas minúsculas células que ni siquiera se ven, y que tampoco sabrás que hacen, y si algo le sucede al organismo, pues sucederá mucho tiempo después; lo importante es que eres consciente y sabes que todo esto ocurre porque lo has elegido y quieres que ocurra, ya que eres conocedor de tus decisiones. Pero lo mas importante de tu relación con el cigarrillo, es ese gran lazo de hermandad, en donde cada uno, tanto tu como el cigarrillo se dan mutuamente lo necesario para existir; tu necesitas del cigarrillo y el cigarrillo necesita de ti, tu has decidido que él sea tu huésped, y para poder llevar acabo esta labor en la cual tu te ofreces sin ningún impedimento y ofreces tu cuerpo como hospedaje, es necesario para esto que estés dispuesto a donar ciertas partes de tu cuerpo a esta fraterna unión. Los pulmones, las vías respiratorias, el corazón y otros órganos son aquellos en los cuales el cigarrillo tendrá que tomar el control para su subsistencia, y gracias a que estos tienen una gran resistencia ante el hostil ambiente en el cual tendrán que estar involucrados, éstos pueden lograr soportar muchos años sin que se note la degeneración y cansancio e incapacidad por regenerar sus tejidos, pero este suficiente y necesario tiempo le da la oportunidad al cigarrillo para poder existir, ya que gracias a tu solidaridad para con él, le das esa maravillosa oportunidad de estar junto a quien lo considera tan importante como para otorgar parte de su cuerpo en sacrificio por estar junto a quien considera un verdadero hermano de sangre. Fuma, sigue fumando, es lo único que necesitas saber. El agradecimiento del cigarrillo para contigo es inconmensurable, no existen palabras para resaltar tan gran muestra de concordia y sacrificio por un gran amigo como lo es por siempre tu cigarrillo.

Alexande r mora

Todos los izquierdos reservados 2008 [email protected]