2009

Numerología 2009 Año de misterio, entrega, completitud y transformación Sin duda no se puede hablar del 2009 sin considerar que viene después del 2008. Tal vez esto parezca obvio, sin embargo es relevante porque el 2008 fue un año crucial en la disolución de patrones inservibles y la expansión de la libertad personal y el atreverse a vivir el propio destino de la manera que resultara más propia. En esta perspectiva, el 2009 se enmarca como cúspide de un proceso que se asienta el 2010 y como todos sabemos, finaliza el 2013 con la entrada desde el centro mismo del corazón de lleno y chapuzón en la era de acuario con todo su esplendor y luminosidad. Entonces, el 2009 viene a consagrar, a que todos los cambios sufridos o gozados en el 2008 se pulan y ajusten, se pongan en rodaje y se lancen a la vida sin más preparativos ni dudas. Este será, sin duda, el año de no dudar más, porque a diferencia del 2008, en que nos lanzamos a dejar de dudar como la opción ganadora, en el 2009 ya no hay opción. Es como si el 2008 hubiese sido un trampolín de consciencia y el 2009 es la entrada al agua y la zambullida en esta nueva consciencia que tal vez en un comienzo nos confunda, por lo sensibles que estaremos y lo mágicamente conectado que nos va a parecer todo, si es que estamos atentos. Es como si la lógica de la vida se nos revelara, el poder del corazón, y el sentido de lo que significa entregarse a lo que depare el destino, a lo que sea la voluntad de Dios, o al afán de

cada día, como cada uno quiera decirle. La sobra que arroje esta gran luz podrán ser la frustración y la confusión, que serán la otra cara de la moneda, la consecuencia de resistir lo que este año ofrece: percepción y confianza total, entrega. Así como dicen que no hay mejor ciego que el que no quiere ver, a veces el darse cuenta, el ver las cosas como son puede ser muy doloroso. Por eso muchas veces una forma de defendernos de aquello que nos aflige es no querer verlo, como si eso mitigara su efecto. Como este año la capacidad de ver será aumentada, es probable que esos velos se corran y se trasluzcan y finalmente se nos haga presente. La lucidez, que a veces puede ser molestosa e incómoda, se puede atenuar en la consciencia de lo sagrado de la vida, de la vida como una escuela, y de la vida como un reflejo de todo lo que la evolución de nuestra alma requería para aprender y evolucionar. Puesto muy en simple, el sentido del karma, la ley del karma que es una de las leyes organizadoras de la realidad, es que se pueda completar la experiencia, pudiendo ponernos en el lugar del otro, cuando vivimos una experiencia sin poder hacerlo. Así, si hoy cedemos el paso a otro vehículo, mañana nos ceden el paso, y al revés, si hoy no dejamos pasar a alguien, mañana no nos dejan pasar. Esto, que puede parecer fantástico, se hará mucho más fácil de observar, porque es como si el karma, que nadaba en las profundidades insondables de la mente universal regulando y ordenando, se asomara a la

superficie y está ahí, reconocible a simple vista. Y esto puede traer alivio y congoja. Por eso es importante no olvidar que el karma tiene antídoto, y es lo que llaman el Dharma, o camino de la rectitud, en que se actúa en sintonía con la vibración cósmica, y ya no desde un plano personal. El karma sólo actúa en un plano personal, y desaparece, se esfuma y se queda sin aire en el plano trascendente. Por eso será muy especial este año, en que después de haber reconectado con el niño interior y toda nuestra peculiaridad, nuestra originalidad como individuos, ahora la ponemos en juego como algo impersonal. Ponemos nuestra personalidad renovada y reluciente en juego y al servicio de nuestras interacciones en un modo impersonal. Y en esto se pondrá en juego toda nuestra historia personal, nuestros amigos de la infancia, parientes, y hasta nuestros antepasados. Y es que este año se activarán todos los contactos energéticos que tengamos o hayamos tenido, todos los lazos o encuentros en que hayamos estado involucrados a lo largo de nuestra historia cobrarán relevancia y aparecerán de alguna manera, se harán presentes en nosotros. La delicadeza y el cuidado tendrán un lugar muy especial, se refinará toda nuestra percepción y también nuestro impacto lo podremos regular mucho mejor. Para quienes se atrevan a “dejarse llevar” por los movimientos de la vida, este será un año inolvidable de profundo aprendizaje e insight, de comunión con la vida y de establecer un lazo duradero, incondicional con la

dimensión trascendente en su cosmovisión o estilo de vida. Esto puede traer experiencias de rudeza, de cambios inesperados, y de confusión por los cambios o por aprehensión ante la falta de control que se requiere. Una clave para no trancarse, dispersarse o distraerse este año es ir de a poco, a veces incluso aparentemente demasiado lento. Tómate todo el tiempo que necesites, lo peor será apurarte , querer hacer las cosas rápido o pensar que puedes saltarte pasos. No te saltes ningún paso, haz cada cosa con cuidado y dedicación en el orden que se requiere y no te preocupes si esto parece lento. Este es un año para hacer las cosas bien. Y ese cuidado, esa dedicación que le ponemos a las cosas se va a expandir como olas en el agua, la inversión será bien pagada. Por eso este es un año para confiar en la sabiduría de cada uno, y cultivarla en la constancia y en cada momento apelando a ella y a que se manifieste, partiendo de la base que está y sólo necesita de tu respaldo y paciencia para que se manifieste. Me atrevería a decir que este va a ser un año de las mujeres, al menos, de lo femenino. La delicadeza, los detalles, la belleza y el cuidado estarán a flor de piel. Así también lo misterioso, puede ser un año en que se develen secretos, o que se aclaren misterios o que aparezcan tesoros perdido, barcos encallados en las profundidades del mar. Este es un excelente año para que termines los proyectos que tienes a medias, para que desarrolles y cultives ese

talento que te acompaña fiel y que nunca le has dado el espacio para desarrollarlo. Y ante todo, es el año para que apliques tu intuición, te bases y guíes en tu conexión con la vida como método infalible. Como decía San Juan de la Cruz: “para asegurarte que vas por el camino correcto, cierra tus ojos y anda a oscuras.” Este año será práctico, en el sentido que tendrás la experiencia de ser tú mismo en tu dimensión espiritual, lo trascendente en ti, en lo cotidiano, la rutina, como un amanecer que de a poco ilumina un paisaje que estaba ahí, que era parte de ti y en el que habitabas hace años y que ahora cada vez con más claridad percibes y palpas. Dicen que en la era de acuario todo se sabe, y no hay secretos, eso corre lo mismo para tu ser interior, tu personalidad, tu historia familiar y tu alma. Este es el año de encontrarte cara a cara con tu alma, reconocerte en ella y alzar el vuelo con estas alas que da la espiritualidad. Estamos llegando a la era de acuario, o más bien la era de acuario se está manifestando en nosotros, y es hora de encontrarnos con quienes son nuestros compañeros de ruta, agradecer todas las enseñanzas que nos da la vida, en sus distintos modos, y convertirnos en nuestro propio maestro. Nuestra consciencia, nuestra conexión, y nuestra dedicación debieran ser el sustento de nuestro crecimiento y evolución como seres humanos de ahora en adelante, y en este 2009, todas las experiencias nos van a llevar hacia allá, hacia el fin de la dualidad, hacia

el cese de la ilusión, en la cristalización de nuestra propia consciencia liberada en la comprensión del proceso vivo que es la vida y cómo se va desplegando en cada uno de nosotros. Esto afectará nuestras relaciones, y nuestra forma de relacionarnos, y ante todo, nuestra forma de relacionarnos con nosotros mismos. Ese será el mayor cambio y la revolución que se viene. Eso de “ama a tu prójimo como a ti mismo”, cobrará sentido sobre la base de un profundo amor y valoración del propio ser. En realidad, siempre hemos tratado a los otros como a nosotros, y ha sido la falta de amor propio, de auto valoración, lo que nos ha llevado a tratar mal a los demás. Ahora, con esta oportunidad de encuentro con nosotros mismos, ese amor podrá tener lugar y sustento y podrá expresarse en las relaciones y en los ambientes y la tolerancia y el respeto podrán brotar como algo tan natural como la respiración en los corazones de quienes toleren este cambio, de ser yo y al mismo tiempo dejar de ser sólo yo. Bueno, queda lo misterioso, lo difícil de poner en palabras, lo que ya cabe en lo poético por lo personal de la vivencia como cada uno le dará sentido, lo experimentará y lo nombrará en su particular idioma, marco de referencia, filosofía de vida, etc. Un año muy íntimo y personal, y al mismo tiempo universal, cósmico y trascendente. ¿parece contradictorio? Esa es una clave medular para este año, ojo con las apariencias, busca las esencias.