Enero 1@A Evodia exhorto, y a S�ntique exhorto, a que sean de la misma mente en el Se�or (Fili. 4:2).@A veces surgen malentendidos o dificultades en la congregaci�n, al igual que sucedi� en el primer siglo, cuando a�n quedaban ap�stoles. Quiz�s un anciano u otro hermano haga alg�n comentario que nos parezca poco amable, grosero o no�del todo cierto. Por otra parte, tal vez creamos que se est� actuando en contra de los principios b�blicos y que los ancianos, pese a estar al tanto del asunto, no�hacen nada por corregirlo. La�verdad es que posiblemente se haya tratado o se est� tratando el caso a la luz de las Escrituras, y que haya datos que nosotros desconocemos. De�todos modos, incluso si estuvi�semos en lo cierto, pensemos en lo que sucedi� en Corinto. En�aquella congregaci�n se toler� un mal grave durante un tiempo. Pero cuando Jehov� lo estim� oportuno, se encarg� de que el asunto se manejara firme y acertadamente (1�Cor. 5:1, 5, 9-11). Cabe preguntarse: �Si yo hubiera vivido en la antigua Corinto, �c�mo habr�a actuado entretanto?�. w07�15/4 2:13 Enero 2@Dirijan su coraz�n inalterablemente a Jehov� y s�rvanle solo a �l (1�Sam. 7:3).@La Biblia no�dice qu� edad ten�a Samuel cuando muri�, pero los sucesos que se relatan en el libro de Primero de Samuel abarcan unos ciento dos a�os, y Samuel fue testigo de la mayor parte de esos sucesos. En�Hebreos 11:32,�33 leemos que jueces y profetas rectos �efectuaron justicia�. Y,�en efecto, Samuel ayud� a algunos de sus contempor�neos a evitar o abandonar el mal camino (1�Sam. 7:2,�4). �De qu� maneras? Pues bien, �l fue fiel a Jehov� toda su vida (1�Sam. 12:2-5). No�temi� dar consejos firmes incluso al rey (1�Sam. 15:16-29). Adem�s, ya �envejecido y encanecido�, fue un ejemplo en lo que tiene que ver con orar a favor de otros. Tanto es as� que para �l era �inconcebible�[...] pecar contra Jehov� cesando de orar� por sus hermanos israelitas (1�Sam. 12:2,�23). Todo esto pone de relieve que los mayores pueden ejercer una influencia positiva en otros siervos de Jehov�. w07 1/6 2:13, 14 Enero 3@Tu palabra es una l�mpara para mi pie, y una luz para mi vereda (Sal. 119:105).@Las declaraciones y recordatorios de Dios nos ayudan a superar los obst�culos que puedan alzarse en nuestro camino. Cuando leemos la Biblia y nos dejamos guiar por ella, se cumplen en nosotros las palabras de Isa�as 30:21: �Tus propios o�dos oir�n una palabra detr�s de ti que diga: �Este es el camino. Anden en �l��. Pero observemos que Salmo 119:105 se�ala que la Palabra de Dios cumple dos funciones relacionadas. En�primer lugar, es una l�mpara para nuestro pie. Si al enfrentarnos a los problemas del d�a a d�a dejamos que los principios b�blicos gu�en nuestros pasos, tomaremos decisiones prudentes y evitaremos las trampas y los peligros de este mundo. En�segundo lugar, los recordatorios de Dios alumbran nuestra vereda; nos ayudan a elegir opciones que est�n en armon�a con nuestra esperanza de vivir para siempre en el Para�so que Dios ha prometido. As� podremos discernir si las consecuencias de cierto proceder ser�n buenas o malas (Rom. 14:21; 1�Tim. 6:9; Rev. 22:12). w07 1/5 1:4, 5 Enero 4@La Roca, perfecta es su actividad (Deu. 32:4).@�Le gusta pensar en c�mo ser� la vida en el Para�so? Quiz�s se imagine explorando este maravilloso planeta y descubriendo su infinita variedad de seres vivos. O tal vez se recree pensando en la satisfacci�n que sentir� al cuidar de la Tierra y colaborar para que se transforme en un bello parque. O es posible que se vea desarrollando sus talentos art�sticos en la pintura, la arquitectura, la m�sica o cualquier otro campo que, en vista del ajetreo de la vida actual, no�tiene tiempo de cultivar. En�cualquier caso, estima much�simo la esperanza de vivir lo que la Biblia llama �la vida que realmente lo es�, es decir, aquella para la cual nos hizo Jehov�, la vida eterna (1�Tim. 6:19). �Verdad que es un placer y un inestimable privilegio hablar de la esperanza b�blica? Sin embargo, muchas personas la rechazan diciendo que se trata de una ilusi�n, de un sue�o irreal en el que solo creen los ingenuos. w07�15/5 1:1, 2 Enero 5@Cualquiera que blasfema contra el esp�ritu santo no�tiene perd�n jam�s, sino que es culpable de pecado eterno (Mar. 3:29).@Los l�deres religiosos jud�os del siglo primero ve�an el esp�ritu de Dios en acci�n cuando Jes�s realizaba milagros que honraban a Jehov�, y sin embargo, atribu�an el poder de Cristo a
Satan�s. Seg�n Jes�s, los que blasfemaban de ese modo contra el esp�ritu santo de Dios comet�an un pecado que no�se perdonar�a �en este sistema de cosas ni�en el venidero� (Mat. 12:22-32). Blasfemar es emplear expresiones difamatorias, injuriosas o insultantes contra las personas o cosas sagradas. Como el esp�ritu santo procede de Dios, hablar contra ese esp�ritu es lo mismo que hablar contra Dios. Quienes hacen tal cosa y no�se arrepienten no�reciben perd�n. Los enemigos de Cristo cometieron el pecado de blasfemar contra el esp�ritu porque vieron que el esp�ritu de Jehov� estaba actuando mediante Jes�s y, aun as�, atribuyeron ese poder al Diablo. w07 15/7 1:8,�9 Enero 6@Se�or, �cu�ntas veces ha de pecar contra m� mi hermano y he de perdonarle yo? �Hasta siete veces? (Mat. 18:21.)@Jes�s respondi� a Pedro: �No�te digo: Hasta siete veces, sino: Hasta setenta y siete veces� (Mat. 18:22). Como vemos, el misericordioso est� dispuesto a perdonar �hasta setenta y siete veces�, o sea, sin l�mites. Jes�s dijo en el Serm�n del Monte: �Dejen de juzgar, para que no�sean juzgados; porque con el juicio con que ustedes juzgan, ser�n juzgados�[...]. Entonces, �por qu� miras la paja que hay en el ojo de tu hermano, pero no�tomas en cuenta la viga que hay en tu propio ojo? O,��c�mo puedes decir a tu hermano: �Perm�teme extraer la paja de tu ojo�; cuando �mira!, hay una viga en tu propio ojo?� (Mat. 7:1-4). En�otras palabras, para practicar la misericordia en la vida diaria hay que soportar las flaquezas de nuestros semejantes y no�criticarlos ni�juzgarlos con dureza. Jehov� nos perdon� la enorme deuda del pecado. �No�es l�gico, entonces, que nosotros �perdon[emos] a los hombres sus ofensas�? (Mat. 6:14,�15.) w07�15/9 2:13,�14 Enero 7@Escuchen�[...] la disciplina de un padre (Pro. 4:1).@En nuestra relaci�n con Jehov�, como en cualquier otra, no�basta con hablar; tambi�n hay que escuchar. Y�una forma de escuchar a Dios es estudiando la Biblia con la ayuda de las publicaciones del �esclavo fiel� (Mat. 24:45-47). Por eso, para que los hijos cultiven una amistad duradera con Jehov�, es fundamental fomentar en ellos el h�bito de estudiar su Palabra. �Qu� ayudar� a los hijos a desarrollar buenos h�bitos de estudio? Una vez m�s, no�hay nada mejor que el ejemplo de sus progenitores. Padres, �los ven sus hijos leyendo y estudiando la Biblia con regularidad? Claro, es probable que ustedes est�n muy ocupados cri�ndolos y no�sepan de d�nde sacar tiempo para leer y estudiar. Sin embargo, preg�ntense: ��Me�ven mis hijos pasando muchas horas delante del televisor?�. Si�este fuera el caso, �no podr�an dedicar parte de ese tiempo a su estudio personal y as� darles un buen ejemplo? w07�1/9 2:8,�9 Enero 8@Yo, Jehov�, amo la justicia (Isa. 61:8, Versi�n Moderna).@La justicia es la cualidad de quien act�a con rectitud e imparcialidad. Por el contrario, la injusticia caracteriza a quien trata a los dem�s de forma desigual y prejuiciada, caus�ndoles da�o sin que lo merezcan. Hace casi tres mil quinientos a�os, Mois�s afirm� respecto al Soberano Universal, Jehov�: �Todos sus caminos son justicia. Dios de fidelidad, con quien no�hay injusticia� (Deu. 32:4). M�s de siete siglos despu�s, Dios inspir� a Isa�as para que escribiera las�palabras que se mencionan en el texto de hoy. Posteriormente, en el siglo primero, Pablo dijo: ��Hay injusticia con Dios? �Jam�s llegue a ser eso as�!� (Rom. 9:14). Y�el ap�stol Pedro declar� en esa misma �poca: �Dios no�es parcial, sino que, en toda naci�n, el que le teme y obra justicia le es acepto� (Hech. 10:34,�35). Efectivamente, �Jehov� es amador de la justicia� (Sal. 37:28; Mal. 3:6). w07�15/8 1:1,�2 Enero 9@Alma, tienes muchas cosas buenas almacenadas para muchos a�os; p�salo tranquila, come, bebe, goza (Luc. 12:19).@Como bien indica la par�bola de Jes�s, la sensaci�n de seguridad que obtuvo el hombre rico fue solo eso, una sensaci�n. Por acertados que pudieran parecer sus planes, no�tuvo presente un factor esencial: cu�l era la voluntad de Dios. �l tan solo pensaba en s� mismo, en estar tranquilo, comer, beber y gozar de la vida. Cre�a que, por el hecho de tener �muchas cosas buenas�, tambi�n tendr�a �muchos a�os� para disfrutarlas. Pero, lamentablemente, no�sucedi� as�. Como Jes�s hab�a dicho, �hasta cuando uno tiene en abundancia, su vida no�resulta de las cosas que posee� (Luc. 12:15). Aquella misma noche, todo aquello para lo que tanto hab�a trabajado se vino abajo, pues
Dios le dijo: �Irrazonable, esta noche exigen de ti tu alma. Entonces, �qui�n ha de tener las cosas que almacenaste?� (Luc. 12:20). w07�1/8 2:7,�8 Enero 10@[Ana] se acerc� y empez� a dar gracias a Dios y a hablar acerca del ni�o (Luc. 2:38).@Piense en la profetisa del siglo primero de nombre Ana. A�sus 84�a�os, �nunca faltaba del templo, rindiendo servicio sagrado noche y d�a con ayunos y ruegos�. Por ser hija de un hombre que no�era levita, sino �de la tribu de Aser�, no�pod�a vivir literalmente en el templo. Imag�nese lo que deb�a suponerle estar en el templo todos los d�as desde la ofrenda de la ma�ana hasta la ofrenda de la tarde. Pero su devoci�n se vio ampliamente recompensada, pues tuvo el privilegio de estar all� cuando Jos� y Mar�a llevaron al ni�o Jes�s para presentarlo ante Jehov� seg�n estipulaba la Ley (Luc. 2:22-24, 36,�37; N�m. 18:6,�7). Hoy d�a tambi�n contamos con muchos hermanos mayores que se parecen a Ana en la asistencia regular a las reuniones, en las s�plicas sinceras a favor de la adoraci�n verdadera y en el deseo incontenible de predicar las buenas nuevas. w07 1/6 1:4,�5 Enero 11@Te elogiar� porque de manera que inspira temor estoy maravillosamente hecho (Sal. 139:14).@La naturaleza est� repleta de maravillas. �C�mo se originaron? Algunos piensan que se puede hallar la respuesta sin recurrir a un Creador inteligente. Otros consideran que descartar arbitrariamente la existencia de un Creador limita nuestra capacidad para comprender el mundo natural. Creen que los organismos terrestres son demasiado complejos, demasiado diversos y ��por qu� no?� demasiado maravillosos para ser producto de la casualidad. Muchas personas, entre ellas cient�ficos, sostienen que hay pruebas de que el universo es la obra de un Hacedor sabio, poderoso y benevolente. El�rey David del antiguo Israel estaba convencido de que este Hacedor merece ser alabado por sus formidables creaciones. Aunque vivi� mucho antes de esta era cient�fica, percibi� admirables ejemplos de la obra creativa de Dios a su alrededor. Solo ten�a que observar su cuerpo para quedar admirado ante el poder creador de Dios. w07�15/6 1:1,�2 Enero 12@Fe es la expectativa segura de las cosas que se esperan, la demostraci�n evidente de realidades aunque no�se contemplen (Heb. 11:1).@Si tenemos fe, estaremos seguros de que todo lo que Jehov� promete se cumplir� sin falta. Tan convincente es la prueba, o demostraci�n, de las realidades invisibles que se dice que la fe equivale a dicha demostraci�n. Por ejemplo, la existencia de las cosas creadas nos convence de que hay un Creador. Este es el tipo de fe que tendremos si seguimos andando por esp�ritu. En�contraste, la falta de fe es �el pecado que f�cilmente nos enreda� (Heb. 12:1). A�fin de evitar las obras de la carne, el materialismo y las doctrinas falsas que destruyen la fe, debemos dejarnos guiar por el esp�ritu de Dios (Col. 2:8; 1�Tim. 6:9,�10; 2�Tim. 4:3-5). Este genera en los siervos de Jehov� de la actualidad una fe como la que tuvieron los testigos precristianos y otras personas mencionadas en la Biblia (Heb. 11:2-40). Adem�s, nuestra �fe sin hipocres�a� puede fortalecer la fe de los dem�s (1�Tim. 1:5; Heb. 13:7). w07�15/7 2:19,�20 Enero 13@Tramaban hacerme da�o (Neh. 6:2).@Cuando los enemigos de Nehem�as se dieron cuenta de que sus ataques directos no�hab�an conseguido detener la reconstrucci�n del muro de Jerusal�n, recurrieron a otras t�cticas m�s sutiles. Por ejemplo, intentaron enga�ar a Nehem�as dici�ndole: �Ven, s�, y reun�monos�[...] en las aldeas�[...] de On�. Dado que la llanura de On� estaba situada entre Jerusal�n y Samaria, lo que en realidad le estaban proponiendo era reunirse con ellos en un punto intermedio para llegar a un acuerdo. Nehem�as pudo haber pensado: �Me parece buena idea; al fin y al cabo, es mejor hablar que pelear�. Pero no�acept�. �Por qu�? Porque, como �l mismo explic�, �tramaban hacer[le] da�o�. Intuyendo que era una trampa, no�se dej� enga�ar y cuatro veces les respondi� lo mismo: �No�puedo bajar. �Por qu� debe cesar la obra mientras yo [bajo a reunirme con] ustedes?�. Los enemigos no�lograron que Nehem�as cediera en su postura, y este sigui� centrado en la reconstrucci�n (Neh. 6:1-4). w07�1/7 2:12,�13 Enero 14@Jehov� es amador de la justicia (Sal. 37:28).@Por su amor a la justicia, Jehov� Dios se contuvo de eliminar a los rebeldes en Ed�n. �Por qu� decimos esto?
La�rebeli�n de Satan�s cuestion� la rectitud de la soberan�a divina. El�sentido de la justicia de Jehov� exig�a que el desaf�o de Satan�s recibiera una respuesta justa. La�ejecuci�n inmediata de los rebeldes, aunque merecida, no�hubiera proporcionado tal respuesta. Habr�a confirmado la infinita superioridad del poder de Jehov�, pero no�era su poder lo que se hab�a puesto en duda. Adem�s, Dios ya les hab�a expresado a Ad�n y Eva su prop�sito: que tuvieran hijos y llenaran la Tierra y la cuidaran y que tuvieran en sujeci�n a toda la creaci�n terrestre (G�n. 1:28). Si Jehov� hubiera eliminado sin m�s a Ad�n y Eva, su declaraci�n acerca del prop�sito para los seres humanos habr�a sido palabras vac�as. La�justicia de Jehov� nunca permitir�a tal resultado, pues su palabra siempre se cumple (Isa. 55:10,�11). w07 15/5 1:13,�14 Enero 15@No tengo a ning�n otro de disposici�n como la de �l, que genuinamente cuide de las cosas que tienen que ver con ustedes (Fili. 2:20).@El ap�stol Pablo incluy� este afectuoso elogio en su carta a los cristianos de Filipos del siglo primero. Hablaba de Timoteo, su joven compa�ero de viaje. Imaginemos c�mo se sinti� Timoteo ante esa confirmaci�n de afecto y confianza. Los j�venes con inclinaciones espirituales como Timoteo siempre han sido muy valiosos en el pueblo de Jehov� (Sal. 110:3). Hoy d�a, la organizaci�n de Dios tiene la dicha de contar con muchos j�venes que sirven de precursores, misioneros, voluntarios de construcci�n y betelitas. Tambi�n son dignos de encomio los j�venes celosos que participan en las actividades de la congregaci�n al tiempo que atienden otras obligaciones. Todos ellos disfrutan de verdadera satisfacci�n, la que proviene de ir tras metas que honran a Jehov�. Ciertamente, est�n �entren�ndo[se] con la devoci�n piadosa como mira� (1�Tim. 4:7,�8). w07 1/5 3:1,�2 Enero 16@Declarar� tu nombre a mis hermanos; en medio de la congregaci�n te alabar� (Heb. 2:12).@Millones de personas de todo el mundo se sienten arropadas y seguras de un modo excepcional en la congregaci�n cristiana. Tanto si cuenta con el apoyo de una familia unida como si no, usted puede y debe valorar todo cuanto Dios le ofrece mediante la congregaci�n. Claro est�, si ya pertenece a una congregaci�n de los testigos de Jehov�, seguramente dar� fe del afecto y la seguridad de que disfruta en ella. La�congregaci�n no�es un simple club social ni�una asociaci�n cultural o deportiva donde acuden personas con antecedentes e intereses comunes. Su�funci�n primordial es alabar a Jehov� Dios. �Ciertamente te elogiar� en la congregaci�n grande; entre un pueblo numeroso te alabar�, dice Salmo 35:18. w07�15/4 1:1,�2 Enero 17@[Los ap�stoles se regocijaron] porque se les hab�a considerado dignos de sufrir deshonra a favor del nombre de [Jes�s] (Hech. 5:41).@A los ap�stoles no�les hac�an felices los azotes ni�el dolor. M�s bien, se regocijaban porque comprend�an que hab�an sufrido ese maltrato por ser leales a Jehov� y por seguir los pasos de Jes�s (Hech. 16:25; 2�Cor. 12:10; 1�Ped. 4:13). Si afrontamos la oposici�n y la persecuci�n con la actitud adecuada, aumentar� nuestro aguante, lo que nos ayudar� a soportar los sufrimientos futuros (Sant. 1:2,�3). En�Romanos 5:3-5 leemos: �Alboroc�monos estando en tribulaciones, puesto que sabemos que la tribulaci�n produce aguante; el aguante, a su vez, una condici�n aprobada; la condici�n aprobada, a su vez, esperanza, y la esperanza no�conduce a la desilusi�n�. Ciertamente, los cristianos afrontaremos pruebas de fe mientras vivamos en este mundo malvado. Pero cuanto m�s aguante demostremos ahora, m�s preparados estaremos para lo que venga en el futuro. w07�15/8 2:14,�15 Enero 18@Yo, Jehov�, soy tu Dios, Aquel que te ense�a para que te beneficies a ti mismo, Aquel que te hace pisar en el camino en que debes andar (Isa. 48:17).@La obediencia a los preceptos divinos trae muchos beneficios. As�, al llevar una vida moral, respetar la santidad de la sangre y abstenernos del tabaco, nos libramos de algunas enfermedades. Adem�s, si obramos en armon�a con la verdad b�blica en otros aspectos de la vida, es probable que veamos los beneficios en sentido econ�mico y en nuestras relaciones sociales y familiares. Aunque estas recompensas pueden considerarse bendiciones de Dios que demuestran lo pr�cticas que son sus leyes, la principal raz�n por la que obedecemos a Jehov� es el amor. No�le servimos por motivos ego�stas (Job 1:9-11; 2:4,�5). Jehov� nos ha dado la libertad de elegir a
qui�n queremos obedecer, y nosotros hemos optado por obedecerle a �l porque deseamos complacerlo y porque nuestro objetivo es hacer lo correcto (Rom. 6:16,�17; 1�Juan 5:3). w07�15/6 2:15 Enero 19@Lo nombrar� sobre todos sus bienes (Luc. 12:44).@Meses antes de pronunciar la profec�a sobre la se�al de su presencia, en la que mencion� a un �esclavo� que lo representar�a en la Tierra, Jes�s ya hab�a aludido a dicho �esclavo�. En�esa ocasi�n se refiri� a �l con un vocabulario un tanto diferente que nos permite comprender mejor las tareas que realizar�a (Mat. 24:3-47). Jes�s dijo: ��Qui�n es verdaderamente el mayordomo fiel, el discreto, a quien su amo nombrar� sobre su servidumbre para que siga d�ndoles su medida de v�veres a su debido tiempo? Les digo en verdad: Lo�nombrar� sobre todos sus bienes� (Luc. 12:42,�44). En�este pasaje se llama al esclavo �mayordomo�, traducci�n de un t�rmino griego que designaba a �la persona que regentaba una casa o finca�. Adem�s de proporcionar �a su debido tiempo� alimento espiritual nutritivo, el grupo representado por �el mayordomo fiel� estar�a a cargo del entero cuerpo de siervos de Cristo y administrar�a �todos sus bienes�, o sea, todos los intereses de Cristo en la Tierra. w07�1/4 1:6,�7 Enero 20@Contin�en haci�ndose misericordiosos, as� como su Padre es misericordioso (Luc. 6:36).@Mediante Mois�s, Jehov� dio a los israelitas una ley compuesta por m�s de seiscientas reglas y normas. Es�cierto que Dios ped�a que las cumplieran todas, pero tambi�n consideraba esencial que fueran misericordiosos. As� se lo indic� Jes�s a los fariseos, quienes demostraban una notable falta de misericordia. En�dos ocasiones tuvo que recordarles que Dios hab�a dicho: �Quiero misericordia, y no�sacrificio� (Mat. 9:10-13; 12:1-7; Ose. 6:6). Es�m�s, hacia el final de su ministerio, les dijo: ��Ay de ustedes, escribas y fariseos, hip�critas!, porque dan el d�cimo de la hierbabuena y del eneldo y del comino, pero han desatendido los asuntos de m�s peso de la Ley, a saber: la justicia y la misericordia y la fidelidad� (Mat. 23:23). Estas palabras dejan claro que Jes�s conced�a mucha importancia a la misericordia. Si vemos los beneficios que produce esta cualidad, nos sentiremos motivados a manifestarla a mayor grado en nuestra vida. w07�15/9 1:1,�2 Enero 21@Efect�ense todos sus asuntos con amor (1�Cor. 16:14).@Muchos padres comprenden que tienen el deber de educar a sus hijos con amor. Y�ese es un deber que presenta dificultades especiales para los cristianos. �Cu�les son algunas de ellas? Hoy vivimos muy adentrados en los �ltimos d�as. Tal como estaba profetizado, en la sociedad actual es frecuente que el amor brille por su ausencia. Aun dentro de las familias, muchos carecen de �cari�o natural� y de �autodominio� y son �desagradecidos, desleales� y �feroces� (2�Tim. 3:1-5). Al�convivir d�a a d�a con personas as�, es posible que acabemos imitando su mal ejemplo en el trato que damos a nuestra propia familia. Adem�s, los padres luchan con la imperfecci�n heredada de Ad�n, que les lleva a perder los estribos, decir cosas que no�quieren y cometer errores de juicio (Rom. 3:23; Sant. 3:2,�8,�9). A�pesar de estas dificultades, los padres pueden lograr que sus hijos sean personas felices y espirituales siguiendo el consejo b�blico del texto de hoy. w07�1/9 1:1-3 Enero 22@Hasta cuando uno tiene en abundancia, su vida no�resulta de las cosas que posee (Luc. 12:15).@El dinero, las propiedades, el prestigio, un trabajo bien pagado y la familia son, para la mayor�a de la gente, un indicativo del �xito y un medio para asegurarse un buen futuro. A�la vista est� que el principal inter�s de muchas personas �sea que vivan en pa�ses ricos o pobres� es obtener ganancias materiales y progresar en la vida. En�cambio, su inter�s por las cuestiones espirituales, si es que lo tienen, est� decayendo r�pidamente. Esto es justo lo que predijo la Biblia. �En los �ltimos d�as se presentar�n tiempos cr�ticos, dif�ciles de manejar. Porque los hombres ser�n amadores de s� mismos, amadores del dinero,�[...] amadores de placeres m�s bien que amadores de Dios, teniendo una forma de devoci�n piadosa, pero resultando falsos a su poder.� (2�Tim. 3:1-5.) Al�estar rodeados de esta clase de personas, los cristianos verdaderos se ven constantemente presionados a adoptar esa mentalidad y estilo de vida. w07�1/8
1:1,�2 Enero 23@No se venguen, amados, sino c�danle lugar a la ira; porque est� escrito: �M�a es la venganza; yo pagar�, dice Jehov� (Rom. 12:19).@Pablo da una poderosa raz�n para no�vengarnos de quienes nos persiguen: debemos ser modestos. Quien procura desquitarse no�es modesto, pues se toma libertades indebidas al atribuirse un derecho que solo le pertenece a Dios (Mat. 7:1). Adem�s, al tomarse la justicia por su mano, demuestra que no�conf�a en la promesa que hace Jehov�: �Yo pagar�, es decir, �Yo le dar� a cada cual su merecido� (La Palabra de Dios para Todos). En�cambio, el cristiano verdadero conf�a en que Jehov� �har�[...] que se haga justicia a sus escogidos� (Luc. 18:7,�8; 2�Tes. 1:6-8). Con modestia, deja la venganza en manos de Dios (Jer. 30:23,�24; Rom. 1:18). Cuando nos vengamos de un enemigo, es f�cil que su coraz�n se endurezca, pero cuando lo tratamos con bondad, es probable que se ablande. w07�1/7 1:15,�16 Enero 24@Los jud�os [llegaron] a saber que [Jes�s] estaba all�, y vinieron, no�a causa de Jes�s solamente, sino tambi�n para ver a L�zaro, a quien �l hab�a levantado de entre los muertos (Juan 12:9).@La resurrecci�n ha quedado probada ante testigos oculares y est� documentada en la Palabra de Dios. En�la Biblia se narra con detalle c�mo ocho personas fueron resucitadas para seguir viviendo en la Tierra, milagros que no�se hicieron en secreto sino abiertamente, incluso ante testigos. Jes�s levant� a L�zaro �que hab�a estado muerto cuatro d�as� ante una multitud de dolientes, entre los que sin duda habr�a familiares, amigos y vecinos. Esta prueba de que Jes�s era el enviado de Dios fue tan contundente que sus enemigos religiosos no�la negaron; m�s bien, tramaron matar tanto a Jes�s como a L�zaro (Juan 11:17-44,�53; 12:10,�11). As� es, podemos estar convencidos de que la resurrecci�n es una realidad. Dios ha hecho constar en su Palabra estas resurrecciones a fin de consolarnos y fortalecer nuestra fe. w07 15/5 2:9 Enero 25@Si es posible, en cuanto dependa de ustedes, sean pac�ficos con todos los hombres (Rom. 12:18).@La paz �un aspecto del fruto del esp�ritu� puede definirse como un estado de tranquilidad y como la ausencia de disturbio. Nuestro Padre celestial es el Dios de la paz, y se nos asegura que �l �bendecir� a su pueblo con paz� (Sal. 29:11; 1�Cor. 14:33). Jes�s dijo a sus disc�pulos: �La paz les dejo, mi paz les doy� (Juan 14:27). �C�mo los ayudar�a esta paz? La�paz que Jes�s dio a sus disc�pulos les tranquiliz� la mente y el coraz�n, apaciguando sus temores. Y�cuando recibieron el esp�ritu santo prometido, sintieron una paz a�n mayor (Juan 14:26). Hoy en d�a, bajo la influencia del esp�ritu y en respuesta a nuestras oraciones, disfrutamos de la incomparable �paz de Dios�, que nos calma la mente y el coraz�n (Fili. 4:6,�7). Adem�s, el esp�ritu de Jehov� nos ayuda a ser pac�ficos con nuestros hermanos y tambi�n con las dem�s personas (1�Tes. 5:13). w07�15/7 2:11,�12 Enero 26@Jehov� est� al tanto de los d�as de los exentos de falta, y la mism�sima herencia de ellos continuar� aun hasta tiempo indefinido (Sal. 37:18).@Las circunstancias de David cambiaron muchas veces en el transcurso de los a�os. Pero �l siempre estuvo seguro de algo: de que el inter�s con que Jehov� cuida a sus siervos fieles nunca cambia. Hacia el fin de su vida, David compuso la canci�n que hoy conocemos como el Salmo 37. Imag�neselo en actitud reflexiva, acompa��ndose con el arpa y cantando estas palabras: �Por Jehov� los mism�simos pasos de un hombre f�sicamente capacitado han sido preparados, y en su camino �l se deleita. Aunque caiga, no�ser� arrojado abajo, porque Jehov� est� sosteniendo su mano. Un joven era yo, tambi�n he envejecido, y sin embargo no�he visto a nadie justo dejado enteramente, ni�a su prole buscando pan� (Sal. 37:23-25). Jehov� vio apropiado que en este salmo se aludiera a la edad avanzada de David, y eso da un significado mucho m�s profundo a sus sinceras palabras. w07 1/6 1:14 Enero 27@Lo que Dios ha unido bajo un yugo, no�lo separe ning�n hombre (Mat. 19:6).@Es cierto que todos los matrimonios tienen dificultades de vez en cuando, si bien en la mayor�a de los casos se trata de desacuerdos de escasa importancia. No�obstante, hay parejas que atraviesan problemas tan graves que amenazan los cimientos mismos de la relaci�n. Quiz�s hasta tengan que pedir ayuda a un superintendente cristiano casado y con experiencia. Pero estas situaciones no�son
prueba de que su matrimonio sea un fracaso. Simplemente subrayan la necesidad de ce�irse a los principios b�blicos. Jehov� es el Creador del g�nero humano y el Fundador de la instituci�n marital, as� que sabe mejor que nadie lo que necesitamos para tener un matrimonio feliz. La�pregunta es: �escucharemos los consejos de su Palabra? Si lo hacemos, no�nos arrepentiremos (Isa. 48:18). Seguir las pautas expuestas en la Biblia es la clave del �xito. w07 1/5 2:3-5 Enero 28@Jehov� es bueno para con todos, y sus misericordias est�n sobre todas sus obras (Sal. 145:9).@Dado que tenemos la obligaci�n de ser �imitadores de Dios�, es preciso que nosotros tambi�n �obremos lo que es bueno para con todos� (Efe. 5:1; G�l. 6:10). Por consiguiente, no�debemos centrar nuestras obras de misericordia �nicamente en nuestros hermanos en la fe. Aunque no�amamos �ni al mundo ni�las cosas que est�n en el mundo�, no�somos insensibles a las necesidades de la gente (1�Juan 2:15). Los cristianos no�dudamos en ayudar en la medida de lo posible a quienes se encuentran en apuros, sea por alg�n �suceso imprevisto� o por otras razones (Ecl. 9:11). Claro, son nuestras circunstancias individuales las que determinan qu� cosas podemos hacer y hasta qu� grado (Pro. 3:27). Adem�s, cuando brindamos ayuda material, tenemos mucho cuidado, pues, incluso con la mejor intenci�n del mundo, pudi�ramos fomentar la pereza sin darnos cuenta (Pro. 20:1,�4; 2�Tes. 3:10-12). Este hecho nos muestra que, si queremos realizar una verdadera obra de misericordia, tenemos que equilibrar los sentimientos de ternura y compasi�n con una actitud de prudencia y buen juicio. w07�15/9 2:15,�16 Enero 29@Oye, oh Dios nuestro, porque hemos llegado a ser objeto de desprecio; y haz que el oprobio de ellos vuelva sobre su propia cabeza (Neh. 4:4).@Arm�ndose de valor, Nehem�as dirigi� esta exhortaci�n al pueblo: �Reedifiquemos el muro de Jerusal�n�, a lo que ellos contestaron: �Levant�monos, y tenemos que edificar�. El�propio Nehem�as indica que �fortalecieron sus manos para la buena obra�. Luego describe la reacci�n de los enemigos: �Empezaron a escarnecernos� (Neh. 2:17-20). Nehem�as no�hizo el m�s m�nimo caso de las burlas y, en obediencia al mandato divino, no�se veng� (Lev. 19:18). Dej� las cosas en manos de Jehov�, quien hab�a declarado: �M�a es la venganza, y la retribuci�n� (Deu. 32:35). De�modo que Nehem�as y su pueblo siguieron �edificando el muro� sin dejarse distraer. De�hecho, �todo el muro vino a estar unido hasta la mitad de su altura, y el pueblo continu� teniendo coraz�n para trabajar� (Neh. 4:6). Como vemos, los enemigos de la adoraci�n pura no�lograron parar las obras. w07�1/7 2:5,�7 Enero 30@Jehov� es amador de la justicia (Sal. 37:28).@La justicia no�es com�n hoy d�a. Podemos ser objeto de injusticias en toda esfera de la vida, como en el trabajo, en la escuela, en el trato por parte de las autoridades civiles y hasta en el c�rculo familiar. Claro est�, las injusticias no�son algo nuevo. Le sobrevinieron a la familia humana cuando nuestros primeros padres violaron la ley de Dios, incitados por un �ngel que, al rebelarse, se convirti� en Satan�s. Desde luego, Ad�n, Eva y Satan�s actuaron injustamente cuando usaron mal la maravillosa facultad del libre albedr�o que Dios les hab�a concedido. Con sus malos actos condenaron a toda la humanidad a padecer enormes sufrimientos y a morir (G�n. 3:16; Rom. 5:12; Heb. 2:14). Durante los seis mil a�os que han pasado desde la rebeli�n en el jard�n de Ed�n, la injusticia ha caracterizado a la sociedad humana. Y�no es de extra�ar, pues Satan�s es el dios de este mundo (2�Cor. 4:4). �l es mentiroso y el padre de la mentira, un ser que calumnia y se opone a Jehov� (Juan 8:44). w07�15/8 1:2-4 Enero 31@La congregaci�n por toda Judea y Galilea y Samaria entr� en un per�odo de paz (Hech. 9:31).@Un uso de la palabra congregaci�n en la Biblia es el que designa a todos los cristianos de cierta zona geogr�fica. Como es natural, hab�a varios grupos de cristianos en la extensa zona mencionada en el texto de hoy, pero a todos ellos se les llam� colectivamente �la congregaci�n�. En�vista de la cantidad de personas que se bautizaron en el Pentecost�s del a�o�33 y poco despu�s, es l�gico pensar que tan solo en Jerusal�n y sus alrededores se congregaba m�s de un grupo (Hech. 2:41,�46,�47; 4:4; 6:1,�7). Herodes Agripa�I gobern�Judea hasta su muerte en el a�o�44, y seg�n 1�Tesalonicenses 2:14, queda claro que al menos para el a�o�50 ya hab�a varias congregaciones en la provincia. Por ello, cuando la
Biblia dice que Herodes empez� a �maltratar a algunos de la congregaci�n�, puede que se refiera a los diversos grupos que se reun�an en Jerusal�n (Hech. 12:1). w07�15/4 1:12 Febero 1@Contin�en morando con [sus esposas] de igual manera, de acuerdo con conocimiento, asign�ndoles honra como a un vaso m�s d�bil, el femenino, puesto que ustedes tambi�n son herederos con ellas del favor inmerecido de la vida (1�Ped. 3:7).@Nunca d� por sentado el amor de su esposa. Dele continuas muestras de cari�o. La�forma en que Jes�s trat� a la congregaci�n sirve de modelo para los esposos cristianos. �l fue amable, bondadoso y misericordioso con sus disc�pulos, incluso cuando en repetidas ocasiones manifestaron malas tendencias; de ah� que pudiera decir a sus oyentes: �Vengan a m�,�[...] porque soy de genio apacible y humilde de coraz�n, y hallar�n refrigerio para sus almas� (Mat. 11:28,�29). El�esposo cristiano imita a Jes�s y trata a su esposa de la misma manera como �l trat� a la congregaci�n. El�hombre que de veras ama a su esposa, y que lo demuestra con sus palabras y sus actos, ser� para ella una fuente de aut�ntico refrigerio y felicidad. w07 1/5 2:11,�12 Febero 2@Irrazonable, esta noche exigen de ti tu alma. Entonces, �qui�n ha de tener las cosas que almacenaste? (Luc. 12:20.)@En la par�bola de Jes�s acerca del hombre rico que tuvo abundantes cosechas, Dios calific� al hombre de �irrazonable� (Luc. 12:16-21). De�acuerdo con cierto diccionario b�blico, este adjetivo se aplica a quien �rechaza la dependencia en que se halla de Dios�. Esto nos recuerda las palabras que Jes�s dirigi� posteriormente a la congregaci�n primitiva de Laodicea: �Dices: �Soy rico y he adquirido riquezas y no�necesito absolutamente nada�, pero no�sabes que eres desdichado y lastimoso y pobre y ciego y desnudo� (Rev. 3:17). �Nos podr�a pasar lo mismo que al hombre de la par�bola? �Pudi�ramos caer en el error de trabajar arduamente para conseguir �muchas cosas buenas�, pero no�hacer lo necesario para llegar a vivir �muchos a�os�? (Juan 3:16; 17:3.) Seg�n la Biblia, �las cosas valiosas no�ser�n de ning�n provecho en el d�a del furor�, y �el que conf�a en sus riquezas... �l mismo caer� (Pro. 11:4,�28). w07�1/8 2:8-10 Febero 3@V�stanse de�[...] bondad (Col. 3:12).@La bondad se manifiesta cuando nos interesamos en los dem�s y les hacemos el bien con nuestras palabras y acciones. Tanto Jehov� como su Hijo son bondadosos (Rom. 2:4; 2�Cor. 10:1). Y�a los siervos de Dios y de Cristo se nos exhorta a serlo tambi�n (Miq. 6:8). A�veces nos enojamos, y con raz�n, cuando alguien nos habla de forma hiriente o nos trata con falta de consideraci�n. Pero aun en esos casos debemos mostrar bondad. �Est�n airados, y, no�obstante, no�pequen �dijo Pablo�; que no�se ponga el sol estando ustedes en estado provocado.� Y�agreg�: �H�ganse bondadosos unos con otros, tiernamente compasivos, y perd�nense liberalmente unos a otros, as� como Dios tambi�n por Cristo liberalmente los perdon� a ustedes� (Efe. 4:26,�32). Debemos ser bondadosos en especial con quienes est�n pasando por situaciones dif�ciles. Ahora bien, si alguien estuviera en claro peligro de dejar el camino de la �justicia y [la] verdad�, no�ser�a bondadoso de parte de los ancianos cristianos que, por miedo a herir sus sentimientos, no�le aconsejaran bas�ndose en la Biblia (Efe. 5:9). w07�15/7 2:15,�16 Febero 4@Encontr�monos�[...] en la casa del Dios verdadero, dentro del templo, y cerremos las puertas del templo; porque van a venir para matarte (Neh. 6:10).@Semaya recomend� a Nehem�as que corriera a esconderse en el templo para que no�lo asesinaran. Pero como Nehem�as no�era sacerdote, ocultarse en la casa de Dios habr�a sido un pecado. �Violar�a la Ley divina con tal de salvarse? No, sino que respondi�: �[�]Pudiera entrar [yo] en el templo y vivir? �No entrar�!�. �Por qu� no�cay� Nehem�as en la trampa? Porque sab�a que aunque Semaya era su hermano jud�o, �no era Dios quien lo hab�a enviado�; un verdadero profeta jam�s le habr�a aconsejado desobedecer la Ley de Jehov�. As�, Nehem�as evit� que sus mal�volos adversarios lo vencieran, y la reconstrucci�n del muro de Jerusal�n se complet� �en cincuenta y dos d�as� (Neh. 6:10-15; N�m. 1:51; 18:7). w07�1/7 2:15 Febero 5@La persona injusta en lo m�nimo es injusta tambi�n en lo mucho (Luc. 16:10).@�Estamos �andando en la integridad de nuestro coraz�n� aun �dentro de nuestra casa�, donde nadie nos ve? (Sal. 101:2.) En�efecto, nuestra integridad se
puede ver sometida a prueba en nuestra propia casa. A�os atr�s, el que quer�a ver im�genes obscenas ten�a que ir a locales de diversi�n inmoral; ahora, en los pa�ses donde las computadoras son comunes, bastan unos pocos clics del rat�n para acceder a tales im�genes. As� pues, �evitaremos mirar im�genes inmorales? (Job 31:1,�9,�10; Sal. 119:37; Pro. 6:24,�25; Mat. 5:28; Efe. 5:3-5.) �Y�qu� hay de los programas de televisi�n de contenido violento? �Sentimos lo mismo que nuestro Dios, cuya alma �ciertamente odia a cualquiera que ama la violencia�? (Sal. 11:5.) �O qu� decir del consumo excesivo de bebidas alcoh�licas en la intimidad? La�Biblia nos advierte que no�seamos dados a �mucho vino� (Tito�2:3; Luc. 21:34,�35; 1�Tim. 3:3, nota). w07�15/6 2:13 Febero 6@Imparte conocimiento a alguien justo, y aumentar� en saber (Pro. 9:9).@El progreso espiritual no�viene autom�ticamente con la edad. Por tanto, en vez de depender tan solo de los conocimientos adquiridos en el pasado, los siervos leales de Dios procuran �aumentar en saber� con el paso de los a�os. Mois�s ten�a 80�a�os cuando Jehov� le encomend� la misi�n de liberar a su pueblo (�xo. 7:7). En�su �poca, llegar a esa edad no�era muy com�n, pues �l escribi�: �En s� mismos los d�as de nuestros a�os son setenta a�os; y�[...] debido a poder�o especial son ochenta a�os� (Sal. 90:10). Sin embargo, Mois�s nunca pens� que era demasiado viejo para aprender. Despu�s de pasar d�cadas sirviendo a Dios, disfrutando de m�ltiples privilegios y encarg�ndose de pesadas responsabilidades, le rog� a Jehov�: �S�rvete hacerme conocer, por favor, tus caminos, para que te conozca� (�xo. 33:13). Mois�s siempre mantuvo el deseo de estrechar su relaci�n con Jehov�. w07 1/6 1:7 Febero 7@[Jehov�] limpiar� toda l�grima de sus ojos, y la muerte no�ser� m�s, ni�existir� ya m�s lamento ni�clamor ni�dolor (Rev. 21:4).@�Qu� promesa tan alentadora! Nada de lo que perdamos voluntaria o involuntariamente en este mundo por servir a Jehov� puede compararse con la maravillosa vida que �l conceder� a sus siervos fieles que aguantan el sufrimiento. Ning�n sufrimiento que a�n tengamos que aguantar impedir� que disfrutemos de la vida eterna en el nuevo mundo de Dios. Las condiciones que all� reinar�n compensar�n de sobra todo lo que hayamos padecido. Isa�as 65:17,�18 dice: �Las cosas anteriores no�ser�n recordadas, ni�subir�n al coraz�n. Pero albor�cense y est�n gozosos para siempre en lo que voy a crear�. Y�Santiago escribi�: �Pronunciamos felices a los que han aguantado� (Sant. 5:11). As� es, si aguantamos fielmente los sufrimientos, obtendremos muchos beneficios tanto ahora como en el futuro. w07�15/8 2:17,�18 Febero 8@Jehov� es ben�volo y misericordioso (Sal. 145:8).@De Jehov� se dice que es �el Padre de tiernas misericordias y el Dios de todo consuelo� (2�Cor. 1:3). Como vemos, la misericordia �cualidad que se manifiesta tratando a los dem�s con compasi�n� es un rasgo fundamental de la personalidad de Dios. Por tanto, para saber en qu� consiste la verdadera misericordia, debemos prestar atenci�n al ejemplo y a los mandatos de Jehov�. En�Isa�as 49:15, Jehov� pregunta: ��Puede una esposa olvidarse de su ni�o de pecho, de modo que no�tenga piedad al hijo de su vientre?�. En�hebreo, la palabra traducida aqu� �piedad� es de la misma familia que los t�rminos �misericordioso� y �misericordias� del pasaje de Salmo 145:8,�9, del cual se ha tomado el texto de hoy. En�Isa�as se establece una comparaci�n entre el sentimiento que mueve a Jehov� a actuar con misericordia y el tierno cari�o que siente una madre por su hijo reci�n nacido. Cuando el beb� llora porque necesita comida o cualquier otra cosa, despierta tal compasi�n en la madre que ella no�puede menos que ir a atenderlo. Pues bien, Jehov� siente esa misma ternura por aquellos a los que muestra misericordia. w07�15/9 1:3,�4 Febero 9@�Por qu�, oh Jehov�, te quedas parado a lo lejos? �Por qu� te quedas escondido en tiempos de angustia? (Sal. 10:1.)@En cierta ocasi�n, el profeta Habacuc pregunt�: ��Hasta cu�ndo, oh Jehov�, tengo que gritar por ayuda, sin que t� oigas? �Hasta cu�ndo clamar� a ti por socorro contra la violencia, sin que t� salves? �Por qu� me haces ver lo que es perjudicial, y sigues mirando simple penoso af�n?� (Hab. 1:2,�3). Tanto Habacuc como David, autor del salmo citado en el texto de hoy, eran hombres fieles que sent�an un gran respeto por Dios. �Se les reprendi� por plantear esas preguntas inquietantes? Al�contrario, Jehov� vio
oportuno que estos sinceros interrogantes aparecieran en su Palabra. Hoy d�a, la persona que se siente afligida por la maldad tal vez tenga verdadera hambre espiritual, o sea, anhele encontrar las respuestas que solo da la Biblia. Recordemos que Jes�s elogi� a aquellos que tuvieran �conciencia de su necesidad espiritual� (Mat. 5:3). Es�un gran honor ayudar a estas personas a encontrar la felicidad que Jes�s prometi�. w07 15/5 1:6,�7 Febero 10@Huye de los deseos que acompa�an a la juventud, mas sigue tras la justicia, la fe, el amor, la paz, junto con los que de coraz�n limpio invocan al Se�or (2�Tim. 2:22).@Es importante que busques compa��as edificantes dentro de la hermandad cristiana. Piensa, por ejemplo, en Timoteo. �l lleg� a ser bien conocido por los superintendentes de su propia congregaci�n y de la de Iconio, a unos 30�kil�metros de distancia (Hech. 16:1,�2). Trab� una estrecha amistad con Pablo, que era una persona muy din�mica (Fili. 3:14). Las cartas de Pablo indican que Timoteo se dejaba aconsejar y que estaba muy dispuesto a imitar la fe de otros cristianos (1�Cor. 4:17; 1�Tim. 4:6, 12-16). Pablo le escribi�: �T� has seguido con sumo cuidado y atenci�n mi ense�anza, el derrotero de mi vida, mi prop�sito, mi fe, mi gran paciencia, mi amor, mi aguante� (2�Tim. 3:10). De�igual modo, si buscas la amistad de personas espiritualmente fuertes, ellas te ayudar�n a cultivar metas espirituales (2�Tim. 2:20,�21). w07 1/5 3:8 Febero 11@El Cristo�[...] es cabeza de la congregaci�n, siendo �l salvador de este cuerpo (Efe. 5:23).@La Biblia a menudo distingue entre Jes�s y los ungidos, como en la frase �tocante a Cristo y la congregaci�n�. Jes�s es Cabeza de esta congregaci�n de cristianos ungidos. Pablo escribi� que Dios �lo hizo cabeza sobre todas las cosas en cuanto a la congregaci�n, la cual es su cuerpo� (Efe. 1:22,�23; 5:32; Col. 1:18,�24). Hoy, solo queda en la Tierra un resto peque�o de miembros ungidos de esta congregaci�n. Ahora bien, estamos convencidos de que su Cabeza, Jesucristo, los ama, tal como se expresa en Efesios 5:25: �Cristo tambi�n am� a la congregaci�n y se entreg� por ella�. Les tiene tanto cari�o porque, tal como �l hizo mientras estuvo en la Tierra, se afanan por ofrecer a Dios �sacrificio de alabanza, es decir, el fruto de labios que hacen declaraci�n p�blica de su nombre� (Heb. 13:15). w07�15/4 1:10 Febero 12@Es el tiempo se�alado para que el juicio comience con la casa de Dios. Ahora bien, si comienza primero con nosotros, �cu�l ser� el fin de los que no�son obedientes a las buenas nuevas de Dios? (1�Ped. 4:17.)@Malaqu�as predijo que �el Se�or verdadero� (Jehov�), acompa�ado de su �mensajero del pacto� (su Hijo, el reci�n entronizado Jesucristo), vendr�a a inspeccionar y juzgar Su��templo�, o sea, su casa espiritual de adoraci�n. Los hechos indican que en�1918 lleg� �el tiempo se�alado para que el juicio com[enzara] con la casa de Dios� (Mal. 3:1). Fue entonces cuando se examin� debidamente a todos los que afirmaban representar en la Tierra a Dios y su adoraci�n verdadera. Las iglesias de la cristiandad fueron rechazadas, ya que llevaban siglos ense�ando doctrinas que deshonraban a Dios y hab�an participado de lleno en las masacres de la primera guerra mundial. Por otro lado, el fiel resto de cristianos ungidos por esp�ritu fue sometido a prueba, refinado como con fuego y finalmente aprobado, llegando a ser para Jehov� �personas que present[an] una ofrenda de d�diva en justicia� (Mal. 3:3). w07�1/4 1:4 Febero 13@Hijo m�o, si tu coraz�n se ha hecho sabio, se regocijar� mi coraz�n (Pro. 23:15).@Jehov� ha encomendado a los padres la importante tarea de instruir a sus hijos (Pro. 1:8; Efe. 6:4). Y�el estudio de familia ense�a a los hijos que no�solo se adora a Dios en actos p�blicos, sino tambi�n en la intimidad del hogar (Deu. 6:6-9). Adem�s, un estudio de familia bien dirigido permite saber qu� piensan los hijos sobre cuestiones espirituales y morales. As�, mientras los ni�os todav�a son peque�os, pueden utilizarse publicaciones como el manual b�blico Aprendamos del Gran Maestro. En�casi todos los p�rrafos de este libro se pide al ni�o que exprese su opini�n acerca del tema que se est� tratando. Si los padres razonan con �l aprovechando los textos b�blicos que se citan, le estar�n ense�ando a desarrollar sus facultades perceptivas �para distinguir tanto lo correcto como lo incorrecto� (Heb. 5:14). w07�1/9 2:10-12
Febero 14@Aun hasta la vejez y canicie, oh Dios, no�me dejes, hasta que informe acerca de tu brazo a la generaci�n; a todos los que han de venir, acerca de tu poder�o (Sal. 71:18).@Los fieles miembros del �reba�o peque�o�, que abrigan la esperanza celestial, han brindado una preparaci�n esencial a los integrantes de las �otras ovejas�, quienes esperan vivir para siempre en la Tierra (Luc. 12:32; Juan 10:16). Este hecho se predijo en las palabras del texto de hoy. Los cristianos ungidos por esp�ritu se han mostrado m�s que dispuestos a capacitar a las otras ovejas a fin de que asuman mayores responsabilidades antes de dejarlas para ser glorificados junto con Jesucristo. Y�las personas mayores han recibido de Jehov� el privilegio de hablar de �l a los que est�n abrazando la adoraci�n verdadera (Joel 1:2,�3). No�solo ellos tienen ese honor, sino todos los miembros de las otras ovejas. Por esta raz�n, las otras ovejas se sienten impulsadas a transmitir el conocimiento b�blico que han aprendido de los ungidos a quienes deseen servir a Jehov� (Rev. 7:9,�10). w07 1/6 2:16,�17 Febero 15@Tienes que amar a Jehov� tu Dios con todo tu coraz�n y con toda tu alma y con toda tu mente y con todas tus fuerzas.�[...] Tienes que amar a tu pr�jimo como a ti mismo (Mar. 12:30,�31).@Aparte del deber moral, hay otra raz�n que nos mueve a no�vengarnos: el amor. En�la carta a los Romanos, Pablo ya hab�a empleado varias veces la palabra griega a?g�?pe para referirse al amor que Dios y Cristo nos tienen (Rom. 5:5,�8; 8:35,�39). Sin embargo, en el cap�tulo�12 utiliza ese t�rmino de forma distinta: ahora se refiere al amor que nosotros mostramos al pr�jimo. Aunque menciona primero que no�todos los cristianos tenemos los mismos dones espirituales, luego se�ala que hay una cualidad que s� debemos cultivar todos: �amor sin hipocres�a� (Rom. 12:4-9). Ciertamente, el amor al pr�jimo es la marca que nos distingue como cristianos verdaderos. Y�Pablo nos anima a asegurarnos de que ese amor sea sincero. w07�1/7 1:7 Febero 16@Sigan andando por esp�ritu y no�llevar�n a cabo ning�n deseo carnal (G�l. 5:16).@Hay un modo de librarse del miedo a pecar contra el esp�ritu santo de Jehov�. Consiste en hacer lo que aconsej� el ap�stol Pablo en el texto de hoy. Si nos dejamos guiar por el esp�ritu de Dios, no�nos dominar�n los malos deseos (Rom. 8:2-10).Cuando �andamos por esp�ritu�, la fuerza activa de Dios nos impulsa a obedecer a Jehov�. Demostramos las cualidades divinas en nuestro hogar, en el ministerio, en la congregaci�n y en todo otro lugar. El�fruto del esp�ritu se pone de manifiesto en la relaci�n con el c�nyuge, los hijos, los hermanos cristianos y las dem�s personas. Vivir �en cuanto al esp�ritu desde el punto de vista de Dios� nos ha permitido abandonar el pecado (1�Ped. 4:1-6). Y�si estamos bajo la influencia del esp�ritu, nunca cometeremos un pecado imperdonable. M�s bien, mantendremos una relaci�n estrecha con Dios. w07�15/7 2:1-4 Febero 17@T� mismo produjiste mis ri�ones; me tuviste cubierto en resguardo en el vientre de mi madre (Sal. 139:13).@Todos comenzamos nuestra existencia en el vientre materno como una sola c�lula, m�s peque�a que el punto que cierra esta oraci�n. Esta estructura microsc�pica era extremadamente compleja, un laboratorio de qu�mica en miniatura. Su�desarrollo fue muy r�pido. Al�cabo de dos meses, ya se hab�an formado los �rganos principales. Entre ellos se encuentran los ri�ones, que para el momento de nuestro nacimiento estaban listos para filtrar la sangre, eliminando las toxinas y el exceso de agua y reteniendo los nutrientes. Cuando ambos ri�ones funcionan bien, filtran el agua de toda la sangre (alrededor de cinco litros en un adulto) �cada cuarenta y cinco minutos! Los ri�ones tambi�n regulan el contenido mineral, la acidez y la presi�n de la sangre. Adem�s, realizan muchas otras funciones vitales. Con raz�n se ha llamado a los ri�ones �los maestros qu�micos del cuerpo�. w07�15/6 1:5,�6 Febero 18@El mundo va pasando, y tambi�n su deseo (1�Juan 2:17).@Saber lo que encierra el futuro debe tener profunda influencia en c�mo vivimos el presente. El�ap�stol Pedro escribi�: �Puesto que todas estas cosas as� han de ser disueltas, �qu� clase de personas deben ser ustedes en actos santos de conducta y hechos de devoci�n piadosa, esperando y teniendo muy presente la presencia del d�a de Jehov�[!]� (2�Ped. 3:11,�12). Nuestro modo de pensar y de vivir debe reflejar que estamos convencidos de que el mundo de verdad est� llegando a su fin. Los consejos
b�blicos nos ayudar�n a decidir sabiamente qu� metas vamos a ponernos. Por ejemplo, Jes�s declar�: �Sigan, pues, buscando primero el reino y la justicia de Dios, y todas estas otras cosas les ser�n a�adidas� (Mat. 6:33). Son dignos de elogio los numerosos j�venes que demuestran su confianza en estas palabras emprendiendo el ministerio de tiempo completo. Otros Testigos �a veces familias enteras� se han mudado a pa�ses con una apremiante necesidad de proclamadores del Reino. w07 1/5 1:12,�13 Febero 19@Procedieron a contar las muchas cosas que Dios hab�a hecho mediante ellos (Hech. 14:27).@Mientras Pablo estaba en Antioqu�a, surgi� la cuesti�n de si los creyentes gentiles deb�an circuncidarse. Para resolver el asunto, se envi� a Pablo y Bernab� a �los ap�stoles y ancianos en Jerusal�n� (Hech. 15:1-3). Santiago, medio hermano de Jes�s pero no�ap�stol, fue el anciano cristiano que presidi� cuando �los ap�stoles y los ancianos se reunieron para ver acerca de este asunto� (Hech. 15:6). Tras deliberar con la ayuda del esp�ritu santo, llegaron a una conclusi�n acorde con las Escrituras y la enviaron por escrito a las congregaciones (Hech. 15:22-32). Los hermanos, al recibir estas instrucciones, las aceptaron y las pusieron en pr�ctica. �Con qu� resultado? Recibieron �nimo y fortaleza. La�Biblia informa: �Por lo tanto, en realidad, las congregaciones continuaron haci�ndose firmes en la fe y aumentando en n�mero de d�a en d�a� (Hech. 16:5). w07�15/4 2:7,�8 Febero 20@Yo soy el pastor excelente, y conozco a mis ovejas y mis ovejas me conocen a m� (Juan 10:14).@Jehov� Dios y su Hijo Jesucristo son pastores muy amorosos. Isa�as profetiz�: ��Mira! El�Se�or Soberano Jehov� mismo vendr� aun como un fuerte, y su brazo estar� gobernando para �l.�[...] Como pastor pastorear� su propio hato. Con su brazo juntar� los corderos; y en su seno los llevar�. Conducir� con cuidado a las que est�n dando de mamar� (Isa. 40:10,�11). Esta profec�a destaca el amor e inter�s con que pastorea Jehov� a su pueblo (Sal. 23:16). Tuvo su primer cumplimiento al regresar un resto jud�o a Jud� en el a�o 537 antes de nuestra era (2�Cr�. 36:22,�23). Y�tuvo otro cumplimiento cuando el Ciro Mayor, Jesucristo, liber� de �Babilonia la Grande� al resto ungido en�1919 (Rev. 18:2; Isa. 44:28). �l es el �brazo� mediante el cual Jehov� gobierna a las ovejas, junt�ndolas y pastore�ndolas con ternura. w07�1/4 2:1-3 Febero 21@[Echen] sobre [Dios] toda su inquietud, porque �l se interesa por ustedes (1�Ped. 5:7).@Cuando estamos sometidos a gran tensi�n, es normal que nos sintamos angustiados. Pero conseguiremos calmar hasta cierto grado la inquietud si tenemos presentes estas palabras de Jes�s: �Dejen de inquietarse respecto a su alma en cuanto a qu� comer�n o qu� beber�n, o respecto a su cuerpo en cuanto a qu� se pondr�n.�[...] Sigan, pues, buscando primero el reino y la justicia de Dios, y todas estas otras cosas les ser�n a�adidas� (Mat. 6:25,�33,�34). Por supuesto, nos esforzamos por resolver los problemas. Pero una vez que hemos hecho todo cuanto est� en nuestra mano, lo que nos ayuda es la oraci�n, no�la preocupaci�n (Sal. 37:5). Pablo escribi�: �No�se inquieten por cosa alguna, sino que en todo, por oraci�n y ruego junto con acci�n de gracias, dense a conocer sus peticiones a Dios; y la paz de Dios que supera a todo pensamiento guardar� sus corazones y sus facultades mentales mediante Cristo Jes�s� (Fili. 4:6,�7). w07�15/7 3:15,�16 Febero 22@Va a haber resurrecci�n (Hech. 24:15).@�En este mundo no�hay nada tan seguro como la muerte y los impuestos.� Estas palabras, escritas en�1789 por el pol�tico estadounidense Benjam�n Franklin, han impresionado a algunos por su rotundidad. No�obstante, numerosas personas hacen trampas y no�pagan impuestos. La�muerte, en cambio, parece mucho m�s segura, pues nadie por s� mismo escapa de sus garras; a la larga nos atrapa a todos (Pro. 27:20). Sin embargo, hay esperanza. La�Palabra de Dios nos ofrece la esperanza segura de la resurrecci�n, o sea, de ser levantados a la vida de nuevo. No�es una simple ilusi�n, y no�hay nada ni�nadie en el universo que pueda impedir a Jehov� convertirla en realidad. En�el caso de algunos que viven hoy, la muerte no�es tan inevitable como generalmente se cree. �Por qu� decimos esto? Porque una incontable �gran muchedumbre� de personas sobrevivir� a �la gran tribulaci�n� que se avecina (Rev. 7:9,�10,�14). De�ah� en adelante vivir�n con la mirada puesta en la eternidad. Por lo tanto, en su caso,
la muerte no�es algo tan seguro. Es�m�s, �la muerte ha de ser reducida a nada� (1�Cor. 15:26). w07 15/5 2:1,�2 Febero 23@No devuelvan mal por mal a nadie. Provean cosas excelentes a vista de todos los hombres (Rom. 12:17).@Por lo general, cuando un ni�o recibe un empuj�n de su hermano, su primera reacci�n es devolverlo. Por desgracia, no�solo los ni�os tienden a reaccionar as�. Muchos adultos act�an igual: cuando alguien les ofende, procuran vengarse. Claro, la mayor�a no�va a recurrir a los empujones, pero muchos s� devolver�n los golpes de maneras m�s sutiles. Puede que esparzan chismes sobre la persona que les ofendi� o busquen otras formas de perjudicarla. Pero aunque los m�todos var�en, la intenci�n es siempre pagar con la misma moneda. Es�cierto que todos sentimos en nuestro interior el impulso de vengarnos, pero los verdaderos cristianos luchamos por dominarlo y as� seguir la exhortaci�n del ap�stol Pablo que se menciona en el texto de hoy. El�contexto en el que se dijeron estas palabras �el cap�tulo�12 de Romanos� indica que quienes renuncian a vengarse hacen lo que deben, demuestran amor y act�an con modestia. w07�1/7 1:1,�2 Febero 24@[Dios] guard� en seguridad a No�, predicador de justicia, con otras siete personas cuando trajo un diluvio sobre un mundo de gente imp�a (2�Ped. 2:5).@La fe y la perseverancia de No� produjeron beneficios que se extienden hasta este mismo d�a. No� rondaba los 600 a�os de edad cuando construy� el arca, introdujo en ella a los animales y predic� a sus vecinos (G�n. 7:6). Gracias a su temor reverente, sobrevivi� junto con su familia al diluvio universal y lleg� a ser antepasado de todos los que hoy vivimos en la Tierra. Es�verdad que en sus tiempos la expectativa de vida era mayor. Sin embargo, No� permaneci� fiel incluso en sus �ltimos a�os, lo que result� en grandes bendiciones. �l ten�a cerca de 800 a�os cuando Nemrod comenz� a construir la torre de Babel oponi�ndose al mandato de Jehov� de �llen[ar] la tierra� (G�n. 9:1; 11:1-9). Pero No� no�tuvo nada que ver con aquella rebeli�n. La�fe y la perseverancia que manifest� son cualidades dignas de imitar por todos los siervos de Dios, prescindiendo de su edad (Heb. 11:7). w07 1/6 2:3,�4 Febero 25@El amor es sufrido (1�Cor. 13:4).@El verbo griego que se traduce �es sufrido� transmite la idea de tener paciencia y aguante y no�enojarse f�cilmente. �Por qu� deben los padres adoptar esa actitud? Como bien saben la mayor�a de ellos, existen muchas razones. Pensemos en algunas. Los ni�os no�suelen contentarse con pedir una sola vez lo que quieren. Aunque sus padres les den un rotundo �no�, siguen insistiendo, con la esperanza de hacerlos cambiar de opini�n. Cuando llegan a la adolescencia, presentan mil razones para que les dejen hacer cosas que son una locura (Pro. 22:15). Y�como todo el mundo, los chicos tropiezan una y otra vez con la misma piedra (Sal. 130:3). �Qu� ayudar� a los padres a demostrar paciencia y aguante? Tener presentes estas palabras del rey Salom�n: �La perspicacia del hombre ciertamente retarda su c�lera� (Pro. 19:11). Para poder comprender por qu� sus hijos act�an como lo hacen, el padre perspicaz debe recordar que en un tiempo �l tambi�n �hablaba como peque�uelo, pensaba como peque�uelo, razonaba como peque�uelo� (1�Cor. 13:11). w07�1/9 1:4,�5 Febero 26@Has obrado tontamente (1�Sam. 13:13).@El relato b�blico de Sa�l subraya lo vital que es obedecer. Al�principio fue un rey humilde y modesto, �peque�o a [sus] propios ojos�; pero despu�s sus decisiones se vieron dominadas por el orgullo y una manera de pensar equivocada (1�Sam. 10:21,�22; 15:17). En�cierta ocasi�n en que ten�a que enfrentarse con los filisteos en el campo de batalla, se le orden� esperar la llegada de Samuel, quien ofrecer�a sacrificios a Jehov� y le indicar�a qu� hacer. Al�ver que el profeta no�ven�a y que el pueblo empezaba a dispersarse, Sa�l �se puso a ofrecer el sacrificio quemado� (1�Sam. 13:9). Este acto desagrad� mucho a Jehov�. Cuando Samuel finalmente lleg�, el monarca trat� de justificar su desobediencia. Para Sa�l era m�s importante ofrecer aquel sacrificio que obedecer la orden de esperar a Samuel para que �l lo hiciera. La�desobediencia a Jehov� le cost� el reino. w07�15/6 2:8 Febero 27@As� pasa con el hombre que atesora para s�, pero no es rico para con Dios (Luc. 12:21).@Buscar tesoros escondidos no es tan solo un divertido juego de ni�os; en todas las �pocas ha habido personas que se han lanzado a la b�squeda de
tesoros reales. Por ejemplo, la famosa fiebre del oro del siglo XIX provoc� una oleada de cazatesoros hacia Australia, Canad�, Estados Unidos y Sud�frica. En su af�n por hacer fortuna, estuvieron dispuestos a dejar su hogar y sus seres queridos para irse a lugares distantes, desconocidos y a veces inh�spitos. Ciertamente, hay muchas personas que, a fin de conseguir riquezas, est�n dispuestas a correr grandes riesgos y hacer enormes sacrificios. Y aunque hoy d�a la mayor�a de la gente no se lanza a buscar tesoros, s� tiene que hacer grandes sacrificios para obtener el sustento. Ganarse la vida no es nada sencillo: exige mucho esfuerzo y suele resultar agotador. Es f�cil llegar a preocuparse tanto por la comida, la ropa y la vivienda que uno acabe desatendiendo, o hasta olvidando, las cosas m�s importantes (Rom. 14:17). w07 1/8 2:1, 2 Febero 28@La prole de los inicuos [...] en verdad ser� cortada. Los justos mismos poseer�n la tierra, y residir�n para siempre sobre ella (Sal. 37:28, 29).@El venidero ataque de Satan�s y sus secuaces contra los siervos de Dios constituir� su �ltima provocaci�n (Eze. 38:14-23). Jehov� predijo su propia reacci�n mediante Zacar�as: �El que los toca a ustedes est� tocando el globo de mi ojo� (Zac. 2:8). As� es, Jehov� reaccionar� de inmediato, como si alguien le hubiera metido el dedo en el ojo, y quitar� de la escena a los atacantes. De todos los habitantes de la Tierra, sus siervos son los m�s pac�ficos, amorosos, unidos y observantes de la ley, por lo que el ataque contra ellos ser� totalmente inmerecido e injusto. El gran �amador de la justicia� no lo tolerar� (Sal. 37:28). Su intervenci�n resultar� en la destrucci�n eterna de las personas que luchan contra su pueblo, en el triunfo de la justicia y en la salvaci�n de quienes le adoran a �l, el �nico Dios verdadero. �Qu� emocionante es saber que estos extraordinarios sucesos est�n a las puertas! (Pro. 2:21, 22.) w07 15/8 1:17, 18 Marzo 1@Felices son los misericordiosos (Mat. 5:7).@Lo m�s misericordioso que podemos hacer por las personas que no pertenecen a la congregaci�n cristiana es llevarles la verdad b�blica. �Por qu�? Porque viven en oscuridad espiritual. Como no conocen la mejor forma de afrontar los problemas ni tampoco tienen una esperanza de futuro bien fundada, la mayor�a de ellas se encuentran en un estado lamentable: �desolladas y desparramadas como ovejas sin pastor� (Mat. 9:36). Sin embargo, si aceptan la verdad b�blica, contar�n con �una l�mpara para [su] pie�, la Palabra de Dios, que les ayudar� a lidiar con las dificultades de la vida. La Biblia tambi�n ser� �una luz para [su] vereda�, pues les indicar� el prop�sito que Dios tiene para el futuro y les brindar� una magn�fica esperanza (Sal. 119:105). �Qu� gran honor es transmitir este maravilloso mensaje a quienes tanto lo necesitan! Este es el momento de dedicarnos con celo a predicar el Reino y hacer disc�pulos (Mat. 24:3-8, 21, 22, 36-41; 28:19, 20). w07 15/9 2:17, 19 Marzo 2@Ni una sola palabra de todas las buenas palabras que Jehov� su Dios les ha hablado ha fallado. Todas se han realizado para ustedes (Jos. 23:14).@Adem�s de ser un comandante militar din�mico e intr�pido que apoyaba a Mois�s, Josu� era un hombre �ntegro, un hombre de fe. Fue el caudillo al que Jehov� escogi� para conducir a la naci�n de Israel desde el terrible desierto por el que vagaba hasta una tierra que manaba leche y miel. Al final de su vida, Josu� dirigi� unas conmovedoras palabras de despedida a los ancianos de Israel. No hay duda de que aquellas palabras fortalecieron la fe de quienes las escucharon, y en nosotros pueden producir el mismo efecto. Josu� ten�a casi 110 a�os y hab�a vivido durante uno de los per�odos m�s emocionantes de la historia del pueblo de Dios. Hab�a sido testigo presencial de diversas obras poderosas de Jehov� y hab�a visto el cumplimiento de muchas de sus promesas. De ah� que pudiera decir con absoluta convicci�n las palabras del texto de hoy. w07 1/11 1:1, 3 Marzo 3@Toda la creaci�n sigue gimiendo juntamente y estando en dolor juntamente hasta ahora (Rom. 8:22).@Las injusticias graves que provoca la maldad han acompa�ado al hombre a lo largo de toda su historia. Y ahora la situaci�n es peor que nunca. �Por qu�? Porque este sistema de cosas malvado lleva ya muchas d�cadas en sus ��ltimos d�as� y, al acercarse a su fin, atraviesa �tiempos cr�ticos, dif�ciles de manejar� (2 Tim. 3:1-5). Los pasados cien a�os han sido testigos de injusticias a una escala sin precedentes. Para empezar, han sido los m�s
castigados por la guerra. Por ejemplo, algunos historiadores calculan que tan solo en la segunda guerra mundial murieron entre cincuenta y sesenta millones de personas, en su mayor�a civiles: hombres, mujeres y ni�os inocentes. Y desde el fin de aquella contienda han perecido en numerosos conflictos millones de v�ctimas, de nuevo mayormente civiles. Satan�s promueve tales injusticias porque le enfurece saber que Jehov� lo derrotar� por completo dentro de poco (Rev. 12:12). w07 15/8 1:4-6 Marzo 4@El amor [...] no se regocija por la injusticia, sino que se regocija con la verdad (1 Cor. 13:4, 6).@�C�mo pueden los padres ense�ar al hijo a amar la justicia y la verdad? Un paso fundamental es animarlo a expresar sus sentimientos con franqueza, aunque lo que diga no sea agradable. Como es natural, los padres se alegrar�n si sus comentarios revelan ideas y sentimientos que armonizan con los principios justos. Sin embargo, a veces oir�n palabras sinceras que evidenciar�n cierta inclinaci�n a la injusticia (G�n. 8:21). �C�mo responder�n en un caso as�? Su reacci�n espont�nea pudiera ser castigarlo de inmediato por decir esas cosas. Ahora bien, si act�an de ese modo, el hijo aprender� enseguida a decir �nicamente lo que cree que ser� del agrado de sus padres. Claro, si les habla con falta de respeto, los padres deben corregirlo cuanto antes, pero una cosa es ense�arle a comunicarse con educaci�n y otra muy distinta obligarle a responder como ellos quieren. w07 1/9 1:7, 15 Marzo 5@El terreno de cierto hombre rico produjo bien (Luc. 12:16).@En la par�bola de Lucas 12:16-21, Jes�s habl� de un hombre rico que, al no sentirse satisfecho con sus graneros llenos de cosas buenas, decide demolerlos para edificar otros mayores que le permitan seguir acumulando bienes. Cuando por fin cree que ha llegado el momento de descansar y disfrutar de la vida, Dios le dice que va a morir y que todo lo que tiene almacenado pasar� a otras manos. Jes�s no dijo que el hombre rico fuera una mala persona. M�s bien, parece que era trabajador y quer�a ahorrar para el futuro, tal vez pensando en el bienestar de su familia. En la actualidad, muchos siervos de Jehov� se encaran a situaciones similares a la del hombre rico. Los cristianos verdaderos se esfuerzan por ser honrados, cumplidores y concienzudos en su trabajo (Col. 3:22, 23). Pero a veces se les ofrece un ascenso o se les presentan nuevas oportunidades de negocios. �Qu� decisi�n tomar�n? w07 1/8 2:2-4, 6 Marzo 6@El hombre vino a ser alma viviente (G�n. 2:7).@Ad�n fue creado con un cuerpo y una mente perfectos. �Y qu� puede decirse del lugar donde viv�a? �Jehov� Dios plant� un jard�n en Ed�n, hacia el este, y all� puso al hombre que hab�a formado. As� Jehov� Dios hizo crecer del suelo todo �rbol deseable a la vista de uno y bueno para alimento.� (G�n. 2:8, 9.) El entorno en el que se hallaba Ad�n era ideal. Luego, Jehov� cre� una esposa perfecta para el hombre, lo que abr�a ante la pareja la posibilidad de disfrutar de una vida familiar feliz (G�n. 2:18, 21-23). La Biblia nos informa que, despu�s de eso, �los bendijo Dios y les dijo Dios: �Sean fruct�feros y h�ganse muchos y llenen la tierra y soj�zguenla�� (G�n. 1:28). Nuestros primeros padres gozar�an del hermoso privilegio de ir extendiendo el Para�so hasta que este cubriera todo el planeta. Adem�s, tendr�an hijos que ser�an felices y no padecer�an ning�n sufrimiento. �Qu� comienzo tan espl�ndido! (G�n. 1:31.) w07 15/8 2:1-3 Marzo 7@Toda cosa que respira... alabe a Jah (Sal. 150:6).@Tener un verdadero prop�sito en la vida significa tener una raz�n para vivir, unas metas claras y algo por lo que luchar. �Es eso posible? Claro que s�. El hecho de que estemos dotados de inteligencia, conciencia y raciocinio muestra que el Creador ten�a un prop�sito definido para nosotros: nos puso en la Tierra para algo. Por eso, solo quienes viven conforme al prop�sito del Creador pueden encontrarle verdadero prop�sito a la vida. La Biblia nos revela que el prop�sito que Dios tiene para el hombre abarca muchas cosas. Por ejemplo, sabemos que Dios nos ama desinteresadamente, como lo prueba el maravilloso dise�o del cuerpo humano (Sal. 40:5; 139:14). Por tanto, si queremos vivir de acuerdo con el prop�sito divino, tenemos que imitar a Dios y amar desinteresadamente a los dem�s (1 Juan 4:7-11). Otra cosa que tambi�n tenemos que hacer es obedecer sus mandamientos (Ecl. 12:13;
1 Juan 5:3). w07 1/10 1:2, 3 Marzo 8@Jehov� mismo ha establecido firmemente su trono en los cielos mismos; y sobre toda cosa su propia gobernaci�n real ha tenido la dominaci�n (Sal. 103:19).@Con estas palabras, el salmista se refiri� a la soberan�a de Dios. Por ser el Creador, �l tiene todo el derecho a ser el Soberano del universo. Sus primeros s�bditos fueron los seres espirituales que cre�: su Hijo unig�nito y, m�s tarde, los dem�s �ngeles (Col. 1:15-17). El profeta Daniel contempl� en una visi�n la corte celestial y la describi� como sigue: �El Anciano de D�as se sent�. [...] Hab�a mil millares que segu�an ministr�ndole, y diez mil veces diez mil que segu�an de pie directamente delante de �l� (Dan. 7:9, 10). Durante incontables milenios, Jehov� ��el Anciano de D�as�� ha ejercido su autoridad como Soberano sobre una inmensa y organizada familia de hijos espirituales. Estos le sirven, o ministran, haciendo la voluntad divina (Sal. 103:20, 21). w07 1/12 1:1, 2 Marzo 9@Te comprometer� conmigo en justicia y en derecho y en bondad amorosa y en misericordias (Ose. 2:19).@Aunque la misericordia de Jehov� no viola su justicia, �la altera de alg�n modo, tal vez templ�ndola para moderar sus efectos? De ninguna manera. Las palabras del texto de hoy no dejan lugar a dudas: Jehov� siempre ejerce su misericordia en armon�a con el resto de sus cualidades, entre ellas la justicia. �l es �un Dios misericordioso y ben�volo, [...] que perdona error y transgresi�n y pecado, pero [que] de ninguna manera dar� exenci�n de castigo� (�xo. 34:6, 7). As� pues, Jehov� es un Dios de misericordia y justicia. Refiri�ndose a �l, la Biblia declara: �La Roca, perfecta es su actividad, porque todos sus caminos son justicia� (Deu. 32:4). Ciertamente, tanto la justicia como la misericordia de Dios son perfectas. Ninguna de estas cualidades es superior ni templa a la otra para moderar sus efectos. M�s bien, ambas cualidades funcionan en perfecta armon�a. w07 15/9 1:13, 14 Marzo 10@Har� de Jerusal�n una piedra pesada para todos los pueblos (Zac. 12:3).@Una profec�a de Zacar�as revela por qu� se oponen las naciones a los cristianos verdaderos. �De qu� Jerusal�n se est� hablando aqu�? De la �Jerusal�n celestial�, el Reino al que los cristianos ungidos han sido llamados (Heb. 12:22). La predicaci�n del Reino como la �nica esperanza de la humanidad ha llegado a ser �una piedra pesada� para las naciones. Por eso, estas tratan de alzarla para librarse de ella, poniendo todo tipo de trabas a los proclamadores del Reino. Como resultado, han recibido �severos rasgu�os� y han acabado llenos de cortaduras. Hasta su reputaci�n ha quedado en entredicho, pues sus esfuerzos han acabado en un humillante fracaso. No pueden acallar a los siervos de Dios, quienes valoran much�simo el privilegio de proclamar las �buenas nuevas eternas� del Reino mesi�nico de Dios antes del fin de este sistema (Rev. 14:6). w07 15/12 3:9, 10 Marzo 11@Presten atenci�n a c�mo escuchan (Luc. 8:18).@Jesucristo estaba desempe�ando sus funciones de Gran Maestro y Formador de Disc�pulos cuando dijo a sus seguidores las palabras del texto de hoy. Estas tambi�n son aplicables a todos los ministros cristianos. En efecto, si uno presta atenci�n a las ense�anzas espirituales, podr� actuar en armon�a con ellas y ser un buen evangelizador. Es cierto que hoy no escuchamos la voz de Jes�s con los o�dos, pero s� podemos hacerlo leyendo las Escrituras, que nos cuentan las cosas que �l dijo e hizo. Si empleamos los mismos m�todos de ense�anza que Jes�s, estaremos cumpliendo la siguiente recomendaci�n del ap�stol Pablo: �Que su habla siempre sea con gracia, sazonada con sal, para que sepan c�mo deben dar una respuesta a cada uno� (Col. 4:6). No cabe duda de que para imitar a Jes�s al hacer disc�pulos, tenemos que esforzarnos. Sin embargo, solo as� conseguiremos ser mejores maestros, ya que aprenderemos a �dar una respuesta a cada uno� seg�n sus necesidades. w07 15/11 2:1, 3 Marzo 12@Prueben para ustedes mismos lo que es la buena y la acepta y la perfecta voluntad de Dios (Rom. 12:2).@�Deber�amos conformarnos con echar un simple �vistazo� a las verdades b�blicas? La expresi�n �las cosas profundas de Dios� se refiere a la sabidur�a divina que, aunque est� oculta para la mayor�a, ha sido revelada mediante el esp�ritu santo a los cristianos (1 Cor. 2:7, 10). �Qu� ilimitado campo de estudio nos ofrece la sabidur�a de Dios! Como es infinita,
nunca llegaremos a conocer por completo la forma de pensar y actuar de Jehov�. Pero si seguimos escudri�ando �las cosas profundas de Dios�, experimentaremos eternamente la misma alegr�a que sentimos al aprender las ense�anzas b�sicas de la Biblia. Pero �por qu� tenemos que aprender esas �cosas profundas�? Porque lo que fortalece nuestra fe no es solo conocer nuestras doctrinas, sino tambi�n las razones que las sostienen. Adem�s, si entendemos el porqu� de lo que Jehov� nos pide, estaremos m�s resueltos a obedecerlo. w07 1/11 2:2, 3 Marzo 13@Los de las naciones que no tienen [la] ley [de Dios] hacen por naturaleza las cosas de la ley (Rom. 2:14).@Quiz�s conozcamos a alguien que arriesg� su vida por sus semejantes. Eso fue lo que hicieron muchas personas al ocultar a extra�os durante la II Guerra Mundial. Otra demostraci�n de amor al pr�jimo tuvo lugar en tiempos de Pablo, cuando �l y 275 personas m�s naufragaron cerca de Malta, no muy lejos de Sicilia. Cuando llegaron a las playas, los lugare�os auxiliaron a aquellos desconocidos, desplegando �extraordinaria bondad humana� (Hech. 27:27�28:2). Y otra persona que, mucho antes, se interes� por el pr�jimo fue una ni�a israelita que viv�a cautiva en Siria. Seguramente no se expuso al peligro, pero hay que reconocer que se preocup� de verdad por el bienestar de su amo (2 Rey. 5:1-4). Adem�s, no olvidemos al buen samaritano, el personaje de una par�bola de Jes�s que por siglos ha tocado el coraz�n de gente de muy diversas culturas. A diferencia del sacerdote y el levita que no hicieron nada por un jud�o medio muerto, aquel samaritano se desvivi� por atenderlo (Luc. 10:29-37). A menudo, los seres humanos se ayudan unos a otros, aunque para ello tengan que hacer sacrificios personales. Por eso, no es de extra�ar que la bondad hacia los semejantes reciba el nombre de �humanidad�. w07 15/10 1:2, 3 Marzo 14@Hasta cuando uno tiene en abundancia, su vida no resulta de las cosas que posee (Luc. 12:15).@Debemos reflexionar en esa declaraci�n, pues en esta era materialista la gente asocia la riqueza y la prosperidad con la felicidad y el �xito. Con estas palabras, Jes�s destac� que una vida verdaderamente feliz y con sentido no depende de los bienes materiales, por muy abundantes que sean. Claro, es posible que algunos no compartan esta opini�n. Tal vez crean que los bienes materiales permiten disfrutar de una vida mucho m�s c�moda y agradable y, por tanto, hacen que valga la pena vivirla. Por eso, vuelcan sus esfuerzos en aquello que les permita adquirir todas las cosas que desean, pensando que de ese modo tendr�n una vida mejor. Sin embargo, quienes razonan as� olvidan lo que dijo Jes�s. Lo importante no era si estaba bien o mal vivir en la abundancia, sino que la vida del ser humano �no resulta de las cosas que posee�, o sea, de las que ya tiene. w07 1/8 1:11-13 Marzo 15@El gran d�a de Jehov� est� cerca (Sof. 1:14).@El gran d�a de Jehov� no es un d�a de veinticuatro horas. Es un per�odo m�s amplio en el que se ejecuta el juicio divino contra los malvados. La Biblia utiliza la expresi�n �d�a de Jehov� para referirse a distintas ocasiones en las que Dios ha ejecutado su juicio. Por ejemplo, a los residentes de Jerusal�n les sobrevino un �d�a de Jehov� cuando cayeron en manos de los babilonios, en el 607 antes de nuestra era (Sof. 1:4-7). Una ejecuci�n similar del juicio divino ocurri� en el a�o 70 de nuestra era cuando Dios utiliz� a los ej�rcitos romanos para castigar a la naci�n jud�a, que hab�a rechazado a su Hijo (Dan. 9:24-27; Juan 19:15). Pero la Biblia predice que habr� otro �d�a de Jehov�, un per�odo en el que �guerrear� contra [todas las] naciones� (Zac. 14:1-3). Por inspiraci�n divina, el ap�stol Pablo relacion� ese d�a con la presencia de Cristo, que comenz� con la coronaci�n de Jes�s como Rey celestial en 1914 (2 Tes. 2:1, 2). Dado que ese gran d�a est� cerca, ahora es el momento para que usted demuestre que est� listo. w07 15/12 1:1-3 Marzo 16@Como flechas en la mano de un hombre poderoso, as� son los hijos de la juventud (Sal. 127:4).@El rey Salom�n compar� los hijos a �flechas en la mano de un hombre poderoso�. Veamos c�mo puede aplicarse a los padres esta comparaci�n. El arquero dispone de poco tiempo para dirigir sus flechas, pues si quiere dar en el blanco, debe soltarlas muy r�pido. De igual modo, los padres disponen de un tiempo relativamente breve para cultivar en sus hijos amor sincero por Jehov�. A sus ojos, los ni�os crecen en apenas unos cuantos a�os, y luego se van de casa (Mat.
19:5). �Alcanzar�n estas �flechas� el objetivo deseado? En otras palabras, �continuar�n los hijos amando y sirviendo a Dios cuando dejen el hogar? La respuesta depender� de numerosos factores. Tres de ellos son: la destreza de los padres, el entorno familiar y la reacci�n de los hijos a la educaci�n que reciban. w07 1/9 2:2 Marzo 17@Busquen lo que es bueno, y no lo que es malo [...]. Odien lo que es malo, y amen lo que es bueno (Am�s 5:14, 15).@Hace aproximadamente veinticinco a�os, La Atalaya dio una amorosa advertencia sobre las series de televisi�n. Hablando del sutil efecto que pueden tener las populares telenovelas, la revista mencionaba: �Se emplea la b�squeda del amor para justificar cualquier tipo de conducta. Por ejemplo, cierta joven soltera que est� embarazada dice a una amiga: �Pero yo amo a V�ctor. No me importa. [...] �El llevar dentro de m� su hijo compensa todo lo que yo tenga que hacer!�. La suave m�sica de fondo dificulta el calificar de incorrecto el derrotero de ella. A la telespectadora tambi�n le agrada V�ctor. Siente compasi�n por la muchacha. �La comprende.� �Es asombrosa la manera como una razona�, declar� una telespectadora que m�s tarde recobr� el juicio. �Sabemos que la inmoralidad es incorrecta. [...] Pero me di cuenta de que mentalmente estaba participando en ello��. Pues bien, �qu� justificaci�n puede tener un cristiano para elegir entretenerse con personas a las que jam�s se le ocurrir�a invitar a su casa? w07 1/10 3:11-13 Marzo 18@La sabidur�a de arriba [...] [est�] llena de misericordia (Sant. 3:17).@Si damos buen uso a la lengua, demostramos que nos gu�a la sabidur�a que est� �llena de misericordia�. Ahora bien, si permiti�ramos que la envidia o la rivalidad nos dominaran y nos llevaran a presumir de nuestros logros, decir mentiras o hacer comentarios malintencionados, �qu� estar�amos dando a entender? Salmo 94:4 nos recuerda que �todos los practicantes de lo que es perjudicial siguen vanaglori�ndose�. Y no olvidemos que quien cuenta chismes echa a perder el buen nombre de gente inocente (1 Rey. 21:7-13; Sal. 64:2-4; Pro. 14:5). Por eso, despu�s de hablar del uso ego�sta de la lengua, Santiago agrega: �No es correcto, hermanos m�os, que estas cosas sigan ocurriendo de esta manera� (Sant. 3:10b). Como vemos, de la boca del misericordioso solo deber�an salir palabras puras, pac�ficas y razonables. Por su parte, Jes�s hizo la siguiente advertencia: �De todo dicho ocioso que hablen los hombres rendir�n cuenta en el D�a del Juicio� (Mat. 12:36). En vista de este hecho, �qu� importante es que todo lo que digamos refleje misericordia! w07 15/9 2:10, 11 Marzo 19@Maestro, di a mi hermano que divida conmigo la herencia (Luc. 12:13).@En una ocasi�n, cuando Jes�s hablaba de asuntos espirituales serios, cierto hombre lo interrumpi� con la petici�n del texto citado arriba. Probablemente, este hombre estaba pensando en c�mo podr�a obtener ciertas ventajas econ�micas. Tal vez quiso sacar partido a la autoridad de Jes�s y a su reputaci�n de juez justo (Isa. 11:3, 4; Mat. 22:16). En cualquier caso, su petici�n dejaba entrever un problema de fondo: una grave falta de aprecio por las cuestiones espirituales. �Y nosotros? �No deber�amos examinarnos a este respecto? En las reuniones cristianas, por ejemplo, es f�cil que nuestra mente divague o que nos pongamos a pensar en lo que haremos m�s tarde. En vez de eso, debemos escuchar atentamente la informaci�n que se presenta y buscar maneras pr�cticas de aplicarla en nuestra vida. As� mejoraremos nuestra relaci�n con nuestro Padre celestial, Jehov� Dios, y con nuestros hermanos cristianos (Sal. 22:22; Mar. 4:24). w07 1/8 1:3, 5 Marzo 20@[Dios] ha ejecutado juicio (Rev. 19:2).@El sellado final de los ungidos, �los esclavos de nuestro Dios�, est� a punto de completarse, de modo que los cuatro �ngeles est�n listos para soltar los vientos de destrucci�n. Cuando lo hagan, �qu� ocurrir� primero? Un �ngel responde: �Con lanzamiento veloz ser� arrojada abajo Babilonia la gran ciudad, y nunca volver� a ser hallada� (Rev. 7:13; 18:21). �Qu� alegr�a habr� en los cielos cuando eso ocurra, cuando se destruya al imperio mundial de la religi�n falsa! Para entonces, todas las naciones de la Tierra se habr�n aliado contra los siervos de Jehov�. �Conseguir�n acabar con estos fieles cristianos? No. Los ej�rcitos celestiales al mando de Cristo Jes�s se encargar�n de destruir a esos enemigos (Rev. 19:19-21). Y, por �ltimo, se arrojar�
al Diablo y sus �ngeles a un abismo simb�lico donde no har�n m�s da�o. Ya no podr�n enga�ar a la humanidad. �Qu� inmenso alivio significar� eso para la gran muchedumbre de sobrevivientes! (Rev. 7:9, 10, 14; 20:1-3.) w07 15/12 2:3, 4 Marzo 21@Tengo que declarar las buenas nuevas del reino de Dios, porque para esto fui enviado (Luc. 4:43).@Jes�s viaj� por todo Israel �predicando y declarando las buenas nuevas del reino de Dios� (Luc. 8:1). Tambi�n hizo muchos milagros: aliment� a multitudes, control� las fuerzas de la naturaleza, san� a enfermos y hasta levant� a muertos. De esta manera, Jes�s demostr� que Dios puede anular todo el da�o y el sufrimiento que ha causado la rebeli�n de Ed�n y as� �desbaratar las obras del Diablo� (1 Juan 3:8). Para que las buenas nuevas del Reino llegaran al mayor n�mero de personas, Jes�s prepar� a un grupo de disc�pulos fieles. Primero eligi� a sus doce ap�stoles y �los envi� a predicar el reino de Dios� (Luc. 9:1, 2). Posteriormente envi� a 70 disc�pulos m�s con el mensaje: �El reino de Dios se ha acercado a ustedes� (Luc. 10:1, 8, 9). w07 1/12 2:6, 7 Marzo 22@Vayan [...] y hagan disc�pulos de gente de todas las naciones (Mat. 28:19).@A fin de cumplir la voluntad de Jehov�, sus siervos a veces tienen que cultivar ciertas habilidades y actitudes. Por ejemplo, cuando Abrah�n y Sara obedecieron la orden de Jehov� de abandonar la pr�spera ciudad de Ur, se vieron obligados a desarrollar las cualidades y habilidades necesarias para vivir en tiendas de campa�a (Heb. 11:8, 9, 15). Josu�, por su parte, necesit� valor, confianza en Jehov� y un buen conocimiento de la Ley para introducir a los israelitas en la Tierra Prometida (Jos. 1:7-9). Y aunque es posible que Bezalel y Oholiab ya tuvieran algunas destrezas, sin duda las perfeccionaron gracias al esp�ritu de Dios; de este modo pudieron participar en la construcci�n del tabern�culo y en otras labores relacionadas, sirviendo tanto de trabajadores como de supervisores (�xo. 31:1-11). Siglos despu�s, Jesucristo dio a sus disc�pulos la comisi�n que encontramos en el texto de hoy. Era la primera vez que se conced�a a seres humanos el privilegio de realizar una obra de tal envergadura. w07 15/11 1:1, 2 Marzo 23@Estas palabras que te estoy mandando hoy tienen que resultar estar sobre tu coraz�n; y tienes que inculcarlas en tu hijo (Deu. 6:6, 7).@El verbo hebreo traducido �inculcar� significa �grabar�, �repetir, decir una y otra vez�. As� que los padres tendr�n que insistir en diversas ocasiones sobre el mismo asunto para que sus hijos aprendan a aplicar las leyes divinas. Ahora bien, el que los padres sean pacientes con sus hijos no quiere decir que les consientan todo. Un proverbio b�blico hace esta advertencia: �El muchacho que se deja a rienda suelta causar� verg�enza a su madre�. Y ese mismo proverbio indica c�mo impedir que esto ocurra: �La vara y la censura son lo que da sabidur�a� (Pro. 29:15). En ocasiones, los hijos van a cuestionar el derecho de sus padres a corregirlos. Pero las familias cristianas no son una democracia: para poder aplicar sus normas, los padres no tienen que pedir permiso a los hijos. Jehov�, quien es el Cabeza supremo de las familias, ha delegado en ellos la autoridad de educar y disciplinar con amor (1 Cor. 11:3; Efe. 6:1-4). w07 1/9 1:5, 6 Marzo 24@Dios [...] es rico en misericordia (Efe. 2:4).@La persona misericordiosa no se conforma con sentir compasi�n, sino que la demuestra actuando a favor de quienes necesitan ayuda. Veamos c�mo actu� Jehov� hace tres mil quinientos a�os, cuando sus siervos viv�an bajo el yugo egipcio. �l le dijo a Mois�s: �Indisputablemente he visto la aflicci�n de mi pueblo que est� en Egipto [...]. Y estoy procediendo a bajar para librarlos de la mano de los egipcios y para hacerlos subir de aquella tierra a una tierra buena y espaciosa, a una tierra que mana leche y miel� (�xo. 3:7, 8). Unos quinientos a�os despu�s de aquella liberaci�n, Jehov� les record�: �Yo fui [...] quien los fue librando de la mano de Egipto� (1 Sam. 10:18). Vez tras vez, los israelitas se metieron en graves aprietos. Y aunque su penosa situaci�n se deb�a a que hab�an desobedecido las justas normas divinas, Jehov� se compadec�a de ellos y acud�a en su auxilio (Jue. 2:11-16; 2 Cr�. 36:15). La historia de Israel ilustra c�mo responde el Dios de amor cuando sus siervos hacen frente a necesidades, peligros o dificultades. w07 15/9 1:5
Marzo 25@Ustedes son mis testigos [...], aun mi siervo a quien he escogido (Isa. 43:10).@Dios hab�a dirigido estas palabras a la naci�n de Israel. Sin embargo, el 11 de nis�n del a�o 33 de nuestra era, Jes�s anunci� que Dios hab�a rechazado a esa naci�n y ya no los consideraba su siervo. Dijo: �El reino de Dios les ser� quitado a ustedes y ser� dado a una naci�n que produzca sus frutos� (Mat. 21:43; 23:38). As� es, la casa de Israel no se hab�a portado como un esclavo de Jehov� que fuera fiel y discreto (Isa. 29:13, 14). Por eso, cuando aquel mismo d�a Jes�s pregunt� qui�n realmente era el esclavo fiel y discreto, lo que en realidad estaba preguntando era qu� naci�n fiel y discreta reemplazar�a a Israel en su papel de esclavo de Dios (Mat. 24:45). El ap�stol Pedro dio la respuesta cuando escribi� a la congregaci�n de cristianos ungidos: �Ustedes son [...] �una naci�n santa, un pueblo para posesi�n especial�� (1 Ped. 1:4; 2:9). Esta naci�n espiritual ��el Israel de Dios�� se convirti� en el nuevo esclavo de Jehov� (G�l. 6:16). w07 1/11 2:13 Marzo 26@Si alguno ministra, que ministre como dependiendo de la fuerza que Dios suministra (1 Ped. 4:11).@Si estamos muy absortos en las cosas de este mundo �sean negocios o actividades de otro tipo�, es posible que tengamos que hacer grandes cambios para dar prioridad al prop�sito de Dios. Esos cambios no suelen producirse de la noche a la ma�ana, por lo que el hecho de que fallemos en los primeros intentos no significa que hayamos fracasado. Jehov� merece que hagamos todo lo posible por servirle. Para cumplir con su prop�sito, no debemos escatimar esfuerzos ni ser perezosos (Heb. 6:11, 12). Aun as�, Jehov� no quiere que nos agotemos, ya sea en sentido f�sico, mental o emocional. Cuando reconocemos modestamente que no somos capaces de efectuar la voluntad de Dios por nuestras propias fuerzas, demostramos que somos equilibrados y, sobre todo, damos gloria a Jehov�. Es cierto que �l promete darnos las fuerzas necesarias para hacer su voluntad, pero no debemos extralimitarnos tratando de hacer cosas que �l no nos pide (2 Cor. 4:7). Para seguir sirviendo a Dios sin agotarnos, tenemos que administrar bien nuestras energ�as. w07 1/10 2:6, 7 Marzo 27@As� pasa con el hombre que atesora para s�, pero no es rico para con Dios (Luc. 12:21).@Al decir �as� pasa�, Jes�s indic� que lo que le sucedi� al hombre rico de la par�bola tambi�n les suceder� a quienes centran su vida �o sea, basan su esperanza y su seguridad� exclusivamente en los bienes materiales. El error radica en �no ser rico para con Dios�, y no tanto en �atesorar para s�. El disc�pulo Santiago hizo una advertencia similar: �Vamos, ahora, ustedes los que dicen: �Hoy o ma�ana iremos a tal ciudad y all� pasaremos un a�o, y negociaremos y haremos ganancias�, cuando el caso es que ustedes no saben lo que ser� su vida ma�ana�. �Qu� les aconsej�? �En vez de eso, deber�an decir: �Si Jehov� quiere, viviremos y tambi�n haremos esto o aquello�.� (Sant. 4:13-15.) Por muy rica que sea una persona, no lograr� nada a menos que sea rica para con Dios. w07 1/8 2:10, 11 Marzo 28@El Dios del cielo establecer� un reino que nunca ser� reducido a ruinas (Dan. 2:44).@Las desastrosas consecuencias de la rebeli�n que se produjo en Ed�n demuestran que solo Jehov�, por ser el Soberano Universal, tiene el derecho de gobernar y que su gobierno es el �nico justo. Satan�s se convirti� en �el gobernante de este mundo�, y durante los pasados miles de a�os se ha puesto de manifiesto que el sistema de gobierno creado por �l es perverso, injusto y violento: un completo desastre (Juan 12:31). La larga y calamitosa dominaci�n humana controlada por el Diablo tambi�n ha revelado que el hombre no tiene la capacidad de gobernar con justicia (Jer. 10:23). Por consiguiente, la �nica forma de gobierno que no est� condenada al fracaso es el gobierno de Dios, como ha quedado sobradamente demostrado en el transcurso de la historia. As� que Jehov� tiene motivos justificados para eliminar todos los dem�s gobiernos y reemplazarlos con el suyo. La dominaci�n demon�aca y humana dejar� de existir. El �nico gobierno que quedar� ser� el Reino celestial de Dios, y el mundo entero estar� bajo su dominio. w07 15/8 2:7, 8 Marzo 29@A menos que se acortaran aquellos d�as, ninguna carne se salvar�a; mas por causa de los escogidos aquellos d�as ser�n acortados (Mat. 24:22).@La
humanidad se enfrenta hoy a calamidades sin precedentes. Jes�s se refiri� a nuestro tiempo cuando advirti� a sus disc�pulos: �Habr� gran tribulaci�n como la cual no ha sucedido una desde el principio del mundo hasta ahora, no, ni volver� a suceder� (Mat. 24:21). Aunque no podemos verlas, las fuerzas celestiales est�n sujetando los vientos de esa gran tribulaci�n. Leamos la descripci�n que hizo el ap�stol Juan de la visi�n que recibi�: �Vi a cuatro �ngeles de pie sobre los cuatro �ngulos de la tierra, reteniendo los cuatro vientos de la tierra [...]. Y vi a otro �ngel que ascend�a del nacimiento del sol, teniendo un sello del Dios vivo; y clam� con voz fuerte a los cuatro �ngeles [...]: �No hagan da�o a la tierra ni al mar ni a los �rboles, hasta despu�s que hayamos sellado en la frente a los esclavos de nuestro Dios�� (Rev. 7:1-3). w07 15/12 2:1, 2 Marzo 30@Por cuanto la sentencia contra una obra mala no se ha ejecutado velozmente, por eso el coraz�n de los hijos de los hombres ha quedado plenamente resuelto en ellos a hacer lo malo (Ecl. 8:11).@Los hijos no solo deben conocer las reglas familiares, sino que tambi�n necesitan saber las consecuencias de desobedecerlas. Y una vez que comprendan a qu� se exponen, hay que hacer valer dichas normas. No se les hace ning�n favor si siempre se les advierte del castigo y luego nunca se aplica. Claro, los padres bondadosos tal vez decidan no aplicar el castigo en p�blico o cuando el joven est� con sus compa�eros, pues no quieren avergonzarlo. Ahora bien, los hijos tienen que saber que cuando los padres les dicen �s�, quieren decir que s�, y cuando les dicen �no�, quieren decir que no, y esto incluye las advertencias de que ser�n castigados. Entender este hecho contribuir� a que se sientan m�s seguros y a que respeten y quieran m�s a sus padres (Mat. 5:37). Obviamente, los padres bondadosos adaptar�n a las necesidades de cada hijo el castigo y la forma de administrarlo. w07 1/9 1:12, 13 Marzo 31@Los que est�n resueltos a ser ricos caen en tentaci�n y en un lazo y en muchos deseos insensatos y perjudiciales, que precipitan a los hombres en destrucci�n y ruina (1 Tim. 6:9).@Si perdemos de vista el verdadero prop�sito de nuestra existencia y dejamos de aferrarnos a �la vida de verdad�, corremos un serio peligro (1 Tim. 6:19). Pudi�ramos �ser arrebatados por las inquietudes y las riquezas y los placeres de esta vida� (Luc. 8:14). Si no dominamos nuestras �inquietudes en cuanto al sustento� y nuestros deseos de obtener bienes materiales, estos podr�an llevarnos a estar demasiado absortos en las cosas de este mundo (Luc. 21:34, nota). Lamentablemente, debido a que se han dejado arrastrar por el af�n de hacerse ricos, algunos �han sido descarriados de la fe y se han acribillado con muchos dolores�, llegando incluso a perder su valiosa relaci�n con Jehov�. �Qu� precio tan alto han pagado por no �asirse firmemente de la vida eterna�! (1 Tim. 6:10, 12; Pro. 28:20.) Pablo anima a �los que hacen uso del mundo� a �que no lo [usen] a plenitud� (1 Cor. 7:31). w07 1/10 1:14, 15 Abril 1@De veras s� considero tambi�n que todas las cosas son p�rdida a causa del sobresaliente valor del conocimiento de Cristo Jes�s mi Se�or (Fili. 3:8).@A los ojos de Pablo, las riquezas espirituales que hab�a obtenido mediante Cristo ten�an mucho m�s valor que todo lo que el mundo le pod�a ofrecer. Si nosotros, al igual que Pablo, tratamos de vivir de acuerdo con las normas divinas y no nos dejamos llevar por las ambiciones ego�stas, tambi�n podremos ser ricos a los ojos de Dios. La Biblia nos garantiza: �El resultado de la humildad y del temor de Jehov� es riquezas y gloria y vida� (Pro. 22:4). Este fue el caso de una mujer que estudi� en universidades de Francia, M�xico y Suiza, y ten�a ante s� una prometedora carrera profesional. �La vida me sonre�a; gozaba de prestigio y me llov�an oportunidades, pero en mi interior me sent�a vac�a, insatisfecha�, comenta. Entonces empez� a estudiar la Biblia. Renunci� a su puesto de trabajo y poco despu�s se bautiz�. Para estas fechas ya lleva veinte felices a�os en el ministerio de tiempo completo. w07 1/8 2:17, 18 Abril 2@Sigue reteniendo el modelo de palabras saludables que o�ste de m� (2 Tim. 1:13).@El conocimiento de �las cosas profundas de Dios� nos da fuerzas para resistir la tentaci�n de pecar y nos motiva a ser �celoso[s] de obras excelentes� (1 Cor. 2:10; Tito 2:14). Ahora bien, para entender cosas profundas hay que estudiar. No basta con leer una informaci�n superficialmente; hay que leerla con
detenimiento tratando de ver c�mo complementa lo que ya sabemos. Tenemos que captar las razones de lo que se dice. Cuando estudiamos la Biblia, tambi�n hemos de reflexionar en c�mo emplearemos lo aprendido para tomar buenas decisiones y ayudar al pr�jimo. Y dado que �toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa�, nuestro estudio debe abarcar �toda expresi�n que sale de la boca de Jehov� (2 Tim. 3:16, 17; Mat. 4:4). Es cierto que el estudio de la Biblia va a exigir mucho esfuerzo, pero tambi�n puede convertirse en un verdadero placer. Adem�s, entender �las cosas profundas de Dios� no es tan dif�cil. w07 1/11 2:3, 4 Abril 3@Dios juzgar� a los fornicadores y a los ad�lteros (Heb. 13:4).@Para entender que este vers�culo desaprueba el adulterio, no hace falta ser cristiano, o ni siquiera conocer lo m�s m�nimo la Biblia. Es evidente que Dios condena las relaciones sexuales entre una persona casada y otra que no sea su c�nyuge. Ahora bien, �qu� puede decirse de que dos personas solteras practiquen el sexo oral? Muchos adolescentes afirman que es algo inofensivo, pues no consideran que sea una relaci�n sexual. Hebreos 13:4 y 1 Corintios 6:9 dejan claro que Dios desaprueba tanto el adulterio como la fornicaci�n. �Qu� abarca este �ltimo t�rmino? En griego se utiliza la palabra porn�ia, que se refiere a cualquier acto sexual il�cito, es decir, a todo acto donde se emplean los �rganos genitales con fines er�ticos, sea de forma natural o pervertida, y fuera del marco de un matrimonio v�lido a los ojos de Dios. As� pues, aunque muchos j�venes de todo el mundo hayan o�do o llegado a creer que no hay nada malo en tener sexo oral, en realidad es una de las pr�cticas incluidas en la fornicaci�n. w07 15/10 2:7, 8 Abril 4@Este es mi Hijo, el amado, a quien he aprobado (Mat. 3:17).@En octubre del a�o 29 de nuestra era se produjo un suceso �nico en la historia. Fue tan importante que aparece en los cuatro Evangelios. Mateo lo relata as�: �Despu�s que Jes�s fue bautizado, inmediatamente sali� del agua; y, �mire!, los cielos se abrieron, y [Juan el Bautista] vio descender como paloma el esp�ritu de Dios que ven�a sobre [Jes�s]�. Luego, desde los cielos, una voz dijo las palabras del texto de hoy (Mat. 3:16; Mar. 1:9-11; Luc. 3:21, 22; Juan 1:32-34). Cuando Jes�s recibi� visiblemente el esp�ritu santo, qued� claro que �l era el Ungido, es decir, el Mes�as o Cristo (Juan 1:33). �Por fin hab�a aparecido la �descendencia� prometida! All�, ante Juan el Bautista, estaba la persona que recibir�a la magulladura de Satan�s en el tal�n y que, a su vez, magullar�a la cabeza del principal enemigo de Jehov� y su soberan�a (G�n. 3:15). w07 1/12 2:1, 2 Abril 5@En hacer tu voluntad, oh Dios m�o, me he deleitado (Sal. 40:8).@Hace falta tener un profundo amor por Jehov� para dirigirse a las personas y luego tratar de convencerlas de que lo adoren como el �nico Dios verdadero. Los israelitas pod�an demostrar que ten�an esa clase de amor obedeciendo los mandamientos de Dios, ofreci�ndole sacrificios gratos a sus ojos y alab�ndole con canciones (Deu. 10:12, 13; 30:19, 20; Sal. 21:13; 96:1, 2; 138:5). Los cristianos tambi�n demostramos que amamos a Dios obedeciendo sus normas. Pero otra forma en que lo hacemos es participando en la obra de hacer disc�pulos. Por eso, cuando le hablamos a la gente acerca de Jehov� y sus prop�sitos, debemos expresarnos con convicci�n y escoger palabras que revelen cu�nto apreciamos la esperanza que �l nos brinda (1 Tes. 1:5; 1 Ped. 3:15). Jes�s amaba profundamente a Jehov� y por esta raz�n disfrutaba mucho hablando de Sus prop�sitos, del Reino y de la adoraci�n verdadera (Luc. 8:1; Juan 4:23, 24, 31). w07 15/11 1:3, 4 - Lectura b�blica para la Conmemoraci�n: (Sucesos del 9 de nis�n) Lucas 19:29-44 Abril 6@Para esto he venido al mundo, para dar testimonio acerca de la verdad (Juan 18:37).@Por su manera de vivir, Jes�s dej� claro que no vino a la Tierra �nicamente para ser un gran maestro, hacer milagros o dar su vida por nosotros. Su principal objetivo fue apoyar la soberan�a de Jehov� y dar a conocer que Dios efectuar�a su voluntad mediante el Reino (Juan 14:6). El trabajo de Jes�s a favor del Reino no le agrad� nada a su adversario, Satan�s. Vali�ndose de la parte terrestre de su �descendencia� �tanto pol�tica como religiosa�, el Diablo trat� una y otra vez de silenciar a la �descendencia� de la mujer de Dios (G�n. 3:15). Desde que naci� hasta que muri�, Jes�s estuvo en el punto de mira de Satan�s y sus secuaces. Finalmente, en la primavera del a�o 33 lleg� el momento de permitir que
el Adversario magullara en el tal�n al Hijo del hombre (Mat. 20:18, 19; Luc. 18:31-33). w07 1/12 2:8, 9 - Lectura b�blica para la Conmemoraci�n: (Sucesos del 10 de nis�n) Lucas 19:45-48; Mateo 21:18, 19; 21:12, 13 Abril 7@Ustedes, �qui�n dicen que soy? (Mat. 16:15.)@Jes�s acostumbraba escuchar a los dem�s y los animaba a dar su opini�n. Cuando Marta perdi� a su hermano L�zaro, Jes�s le dijo: �Todo el que vive y ejerce fe en m� no morir� jam�s�. Acto seguido, le pregunt�: ��Crees t� esto?�. Y sin duda escuch� la respuesta de Marta: �S�, Se�or; yo he cre�do que t� eres el Cristo, el Hijo de Dios� (Juan 11:26, 27). �Qu� contento debi� de sentirse Jes�s ante tal muestra de fe! En otra ocasi�n, al ver que muchos de sus disc�pulos decid�an abandonarle, Jes�s quiso saber cu�l era el parecer de sus ap�stoles, de modo que les dijo: �Ustedes no quieren irse tambi�n, �verdad?�. Ante aquello, Sim�n Pedro le contest�: �Se�or, �a qui�n nos iremos? T� tienes dichos de vida eterna; y nosotros hemos cre�do y llegado a conocer que t� eres el Santo de Dios� (Juan 6:66-69). �Cu�nto tuvieron que complacer estas palabras a Jes�s! Ciertamente, uno se siente igual cuando oye a un estudiante de la Biblia hacer comentarios que evidencian su fe. w07 15/11 2:4-6 - Lectura b�blica para la Conmemoraci�n: (Sucesos del 11 de nis�n) Lucas 20:1-47 Abril 8@Todos [los] caminos [de Jehov�] son justicia (Deu. 32:4).@La Biblia dice acerca de Ad�n: �Por medio de un solo hombre el pecado entr� en el mundo�. Tambi�n se�ala que �el salario que el pecado paga es muerte�. Por tanto, todos los seres humanos merecemos la muerte (Rom. 5:12; 6:23). En vista de este hecho, �cu�nto agradecemos que Jehov� sea misericordioso al juzgarnos a los seres humanos! No obstante, no debemos confiarnos y pensar que tenemos garantizada la misericordia divina. �l nunca pasa por alto sus normas perfectas de justicia cuando ejerce misericordia. En nuestro caso, Jehov� ha mostrado misericordia al hacer posible que nos libremos de la condena a muerte que conlleva el pecado heredado. Tal misericordia est� en perfecta armon�a con la justicia divina. Para poder perdonar nuestros pecados sin quebrantar sus normas de justicia, Jehov� suministr� el sacrificio redentor de su Hijo, Jesucristo. Sin duda, esta es la mayor demostraci�n de misericordia de toda la historia (Mat. 20:28; Rom. 6:22, 23). w07 15/9 1:10, 12 - Lectura b�blica para la Conmemoraci�n: (Sucesos del 12 de nis�n) Lucas 22:1-6; Marcos 14:1, 2, 10, 11 Abril 9@Demuestren estar listos (Mat. 24:44).@Cuando Jes�s hizo esta declaraci�n, �l mismo estaba listo para una gran prueba: sacrificar su vida por nosotros (Mat. 20:28). �C�mo se prepar� Jes�s, y qu� nos ense�a su ejemplo? �l amaba de todo coraz�n a Jehov� y sus justas normas. Hebreos 1:9 dice de Jes�s: �Amaste la justicia, y odiaste el desafuero. Por eso Dios, tu Dios, te ungi� con el aceite de alborozo m�s que a tus socios�. Jes�s se mantuvo leal a su Padre celestial porque lo amaba. Si sentimos por Dios un amor semejante y vivimos de acuerdo con sus principios, �l nos proteger� (Sal. 31:23). Tal amor y obediencia nos preparan para el gran d�a de Jehov� (Mat. 22:37-39). w07 15/12 1:4-6 - Lectura b�blica para la Conmemoraci�n: (Sucesos del 13 y el 14 de nis�n) Lucas 22:7-65; Marcos 14:12-16 Abril 10@Ciertamente este era Hijo de Dios (Mat. 27:54).@�Qu� nos viene a la mente cuando recordamos la lenta y dolorosa muerte de Jes�s? Tal vez que �l estuvo dispuesto a dar su vida en sacrificio por la humanidad pecadora (Mat. 20:28; Juan 15:13). Puede que tambi�n nos llene de admiraci�n el gran amor que demostr� Jehov� al hacer posible ese sacrificio (Juan 3:16). O es probable que nos sintamos como aquel oficial del ej�rcito romano que dijo lo que leemos en el texto de hoy. Pero recordemos las �ltimas palabras que pronunci� Jes�s: ��Se ha realizado!� (Juan 19:30). �Qu� se hab�a realizado? �No vino Jes�s a la Tierra principalmente para zanjar la cuesti�n de la soberan�a de Jehov�? �Y no es cierto que, seg�n la Biblia, la �descendencia� sufrir�a una prueba de fuego a manos del Diablo a fin de limpiar el nombre de Jehov�? (G�n. 3:15; Isa. 53:3-7.) Pues bien, Jes�s cumpli� perfectamente con esa important�sima misi�n. �Qu� gran victoria! w07 1/12 2:10 Lectura b�blica para la Conmemoraci�n: (Sucesos del 14 de nis�n) Lucas 22:66-71 Abril 11@La bendici�n de Jehov�... eso es lo que enriquece, y �l no a�ade dolor con ella (Pro. 10:22).@Cuando Jehov� bendice a sus siervos, siempre les da lo mejor (Sant. 1:17). Por ejemplo, la tierra que Jehov� les dio a los israelitas era
una �tierra que mana[ba] leche y miel�. Aunque tambi�n se hab�a dicho algo semejante de Egipto, la tierra de los israelitas era diferente por lo menos en un aspecto fundamental. �[Es] una tierra de la que Jehov� tu Dios est� cuidando�, dijo Mois�s al pueblo. En otras palabras, la raz�n por la que los israelitas prosperar�an era porque Jehov� los cuidar�a. Y as� fue: cuando se manten�an fieles a Jehov�, recib�an de �l un sinf�n de bendiciones y su vida era visiblemente mejor que la de las naciones vecinas. Est� claro, pues, que la bendici�n de Jehov� �es lo que enriquece�. �Qu� importante es, por tanto, estrechar nuestra relaci�n con Dios! (N�m. 16:13; Deu. 4:5-8; 11:8-15.) w07 1/8 2:12, 13 Abril 12@Esta es la confianza que tenemos para con �l, que, no importa qu� sea lo que pidamos conforme a su voluntad, �l nos oye (1 Juanx 5:14).@Dios se propuso que los seres humanos vivieran felices y en paz entre s� y con el resto de la creaci�n (G�n. 1:26; 2:15). Pero �qu� necesitamos para sentirnos felices, seguros y en paz? Igual que un ni�o necesita la presencia de sus padres para sentirse contento y protegido, nosotros necesitamos tener una buena relaci�n con nuestro Padre celestial. Dicha relaci�n dar� verdadero sentido y prop�sito a nuestra vida (Heb. 12:9). Dios hace posible esa relaci�n permitiendo que nos acerquemos a �l y escuchando nuestras oraciones (Sant. 4:8). Si nosotros, por nuestra parte, �andamos con Dios� fielmente y llegamos a ser sus amigos, podremos darle alabanza y alegrar su coraz�n (G�n. 6:9; Pro. 23:15, 16; Sant. 2:23). No puede haber otro prop�sito m�s importante en la vida. El salmista lo expres� con estas palabras: �Toda cosa que respira... alabe a Jah� (Sal. 150:6). w07 1/10 1:4 Abril 13@En cuanto al fruto de la justicia, su semilla se siembra en condiciones pac�ficas para los que est�n haciendo la paz (Sant. 3:18).@�C�mo pueden los padres lograr que reine la paz en el hogar? Ante todo, deben fortalecer su v�nculo matrimonial. Si se aman y respetan, les ser� m�s f�cil ense�ar a sus hijos a amar y respetar a otros, especialmente a Jehov� (G�l. 6:7; Efe. 5:33). Como puede verse, el amor y el respeto propician la paz en el hogar. Adem�s, cuando los c�nyuges disfrutan de una relaci�n pac�fica, est�n mejor preparados para afrontar cualquier problema que surja en la familia. Pero, claro est�, en el mundo actual no hay ni matrimonios ni familias perfectas. Por eso, los padres no siempre manifiestan el fruto del esp�ritu en su relaci�n con los hijos (G�l. 5:22, 23). Cuando esto sucede, �qu� deben hacer? Padres, si admiten sus errores, probablemente ver�n que sus hijos no se los toman en cuenta. w07 1/9 2:13, 14 Abril 14@Su clamor por ayuda sigui� subiendo al Dios verdadero a causa de la esclavitud (�xo. 2:23).@Cuando los israelitas eran esclavos en Egipto, clamaron a Dios por ayuda y �l los escuch� (�xo. 2:24, 25). Estando Mois�s frente a una zarza ardiente, Jehov� le dijo: �Estoy procediendo a bajar para librarlos de la mano de los egipcios y para hacerlos subir de aquella tierra a una tierra buena y espaciosa, a una tierra que mana leche y miel� (�xo. 3:8). �Qu� emocionante debi� ser para Mois�s ver que Jehov� cumpl�a aquella promesa! (�xo. 12:29-32.) Aquella liberaci�n abri� la puerta para que Jehov� adoptara a Israel como su naci�n escogida. Tambi�n glorific� a Jehov� probando que es Aquel que cumple sus promesas, cuya palabra nunca falla. Adem�s, demostr� que �l es muy superior a todos los dem�s dioses. Si leer acerca de esa liberaci�n ya fortalece nuestra fe, imag�nese lo que debi� ser vivir aquella experiencia. Jehov� es, sin ninguna duda, �el Alt�simo sobre toda la tierra� (Sal. 83:18). w07 1/11 1:5, 6 Abril 15@Demuestran que la sustancia de la ley est� escrita en sus corazones (Rom. 2:15).@En su carta a los Romanos, Pablo indic� que todas las personas somos responsables ante Dios, pues �desde la creaci�n del mundo� su existencia y cualidades se manifiestan en las obras que vemos a nuestro alrededor (Rom. 1:1820; Sal. 19:1-4). Hasta los pueblos que no contaban con �las sagradas declaraciones formales de Dios� ten�an el deber de reconocer la existencia del Creador (Rom. 2:8-13; 3:2). Una raz�n muy importante por la que todos debemos reconocer la existencia de Dios y actuar en consecuencia es que estamos dotados en nuestro interior de un sentido del bien y del mal. Pablo escribi�: �Siempre que los de las naciones que no tienen ley hacen por naturaleza las cosas de la ley� (Rom. 2:14). Notemos que no dijo �si alguna vez�, como si fuera algo que ocurre
solo en muy contadas ocasiones. �l dijo �siempre que� (equivalente de �cuando�), lo que da a entender que sucede con cierta frecuencia. En efecto, muchas personas �hacen por naturaleza las cosas de la ley�, lo cual significa que, movidas por su sentido moral, obran en armon�a con la ley escrita de Dios. w07 15/10 1:5-7 Abril 16@�Qui�n de ustedes, por medio de inquietarse, puede a�adir un codo a la duraci�n de su vida? (Mat. 6:27.)@Nuestro sustento no requiere mucho. En realidad, basta con un poco de comida, algo de ropa y un lugar donde dormir. Los ricos tienen de todo mientras que los pobres tienen que trabajar duro para conseguir tan solo lo b�sico. Sin embargo, esta diferencia desaparece cuando la vida llega a su fin: todo se queda en nada (Ecl. 9:5, 6). As� pues, una vida plena no puede ni debe reducirse sencillamente a lo que uno posee o puede adquirir. Seamos ricos o pobres, no tenemos completo control de cu�nto tiempo viviremos ni de si estaremos vivos ma�ana. La Biblia muestra con claridad que solo Jehov� es �la fuente de la vida� y que �nicamente �l puede otorgar a los fieles �la vida que realmente lo es�, �la vida eterna�, una vida sin fin en el cielo o en la Tierra (Sal. 36:9; 1 Tim. 6:12, 19). w07 1/8 1:13, 14 Abril 17@�Qu� bueno y qu� agradable es que los hermanos moren juntos en unidad! (Sal. 133:1.)@Satan�s se vale de las diferencias personales para causar divisiones en el pueblo de Jehov�. Hay quienes han ca�do en esta trampa permitiendo que las diferencias personales alteren la paz, la unidad y la prosperidad espiritual del pueblo de Jehov�. Durante la primera guerra mundial, Satan�s atac� frontalmente a la parte terrestre de la organizaci�n de Jehov� en un intento de destruirla. Pero no tuvo �xito (Rev. 11:7-13). Desde entonces, ha tratado sutilmente de romper la unidad del pueblo de Dios. Si nosotros dejamos que las diferencias personales nos separen, podr�amos estar sigui�ndole el juego a Satan�s, pues estar�amos impidiendo que el esp�ritu santo fluya libremente en nuestra vida y en la congregaci�n. Esto le complacer�a mucho a Satan�s, pues sabe que cualquier alteraci�n de la paz y unidad de la congregaci�n afecta la predicaci�n (Efe. 4:27, 30-32). w07 1/10 3:15, 16 Abril 18@Jehov� est� de mi parte; no temer� (Sal. 118:6).@Pronto seremos testigos de sucesos impresionantes relacionados con la soberan�a universal de Jehov�, es decir, con la vindicaci�n de su derecho a gobernar. Y pensemos en lo siguiente: si nos mantenemos leales a Jehov� y firmes a favor de su soberan�a, tendremos la oportunidad de contribuir a que su nombre se santifique y su prop�sito se cumpla. �Verdad que este ser� un gran honor? �Estamos preparados para estos acontecimientos tan importantes? �Tenemos fe en el poder salvador de Jehov�? �Confiamos en que �l vendr� en nuestra ayuda en el momento justo y del mejor modo imaginable? Al responder a estas preguntas personales, tengamos presente lo que el ap�stol Pablo escribi� a los cristianos de Roma: �Todas las cosas que fueron escritas en tiempo pasado fueron escritas para nuestra instrucci�n, para que mediante nuestro aguante y mediante el consuelo de las Escrituras tengamos esperanza� (Rom. 15:4). w07 15/12 2:5, 6 Abril 19@Toda la creaci�n sigue gimiendo juntamente y estando en dolor juntamente hasta ahora (Rom. 8:22).@Jehov� no es el culpable de los muchos sufrimientos que nos afligen desde hace tanto tiempo (2 Sam. 22:31). Parte de la culpa la tienen los seres humanos, porque ellos �han obrado ruinosamente, han obrado detestablemente en su trato� (Sal. 14:1). Nuestros primeros padres lo ten�an todo. Lo �nico que deb�an hacer para conservarlo era obedecer a Jehov�, pero ambos optaron por independizarse de �l. Como se apartaron del Creador, �l dej� de mantenerlos en un estado perfecto, de modo que su salud fue deterior�ndose hasta que finalmente murieron. Y todos sus descendientes hemos heredado la imperfecci�n (G�n. 3:17-19; Rom. 5:12). Pero el �ngel que se convirti� en Satan�s tambi�n estuvo implicado en el origen del sufrimiento. �l indujo a Ad�n y Eva a independizarse de Jehov�, dici�ndoles que as� ser�an �como Dios, conociendo lo bueno y lo malo� (G�n. 3:5). w07 15/8 2:4-6 Abril 20@�Se�or, ten misericordia de nosotros, Hijo de David! (Mat. 20:31.)@Un d�a, cuando Jes�s estaba saliendo de Jeric�, dos ciegos sentados a la orilla del camino le pidieron un milagro: que les devolviera la vista. Jes�s accedi� a su
s�plica, pero no lo hizo de forma fr�a e impersonal: �Enternecido, Jes�s les toc� los ojos, y ellos inmediatamente recibieron la vista� (Mat. 20:30-34). En efecto, eran la ternura y la misericordia lo que impulsaba a Jes�s a ayudar milagrosamente a muchos ciegos, endemoniados, leprosos y padres de hijos enfermos (Mat. 9:27; 15:22; 17:15; Mar. 5:18, 19; Luc. 17:12, 13). Los ejemplos de Jehov� Dios y de Jesucristo nos ense�an que la misericordia abarca dos aspectos. Por un lado, implica sentir compasi�n, ternura y empat�a por quienes necesitan ayuda. Y por otro, implica actuar para aliviarles el sufrimiento. Ambos aspectos son inseparables. Cuando la Biblia habla de la misericordia, se refiere por lo general a la expresi�n positiva, o activa, de esa cualidad, es decir, a las acciones a favor de quienes necesitan ayuda. w07 15/9 1:6, 7 Abril 21@El que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede estar amando a Dios, a quien no ha visto (1 Juanx 4:20).@Si los padres ense�an a los hijos a amar a sus hermanos cristianos, tambi�n les estar�n ense�ando a amar a Dios. Preg�ntense: ��Cu�l es el tono dominante de mis comentarios sobre la congregaci�n? �Es un tono positivo, o cr�tico?�. Para determinarlo, presten mucha atenci�n a lo que dicen sus hijos sobre las reuniones y los miembros de la congregaci�n. Los comentarios de ellos seguramente reflejar�n lo que piensan ustedes. Ahora bien, �c�mo lograr�n que sus hijos amen a sus hermanos espirituales? Peter, un padre con dos chicos adolescentes, dice: �Desde que los ni�os eran peque�os, hemos invitado a nuestra casa a hermanos espiritualmente maduros para comer y pasar un buen rato todos juntos. Nuestros hijos saben que una vida de servicio a Dios produce mucha felicidad, pues han crecido rodeados de gente que ama a Jehov�. w07 1/9 2:15, 16 Abril 22@Mantengan abiertos los ojos y gu�rdense de toda suerte de codicia (Luc. 12:15).@La codicia es m�s que un simple deseo de poseer dinero u otras cosas, que podr�an tener una utilidad y un prop�sito correctos. De acuerdo con varios diccionarios, se podr�a definir como un deseo distorsionado que se centra en bienes materiales o inmateriales, sea que pertenezcan a otra persona o no. A veces se manifiesta en un apetito insaciable de conseguir cosas por el mero hecho de tenerlas, independientemente de si uno las necesita o de c�mo repercutir� eso en los dem�s. La persona codiciosa permite que el objeto deseado acapare su mente y sus acciones hasta el grado de convertirse en su dios. Ahora bien, recordemos que el ap�stol Pablo equipar� la codicia a la idolatr�a y dijo que las personas dominadas por la avidez no heredar�an el Reino de Dios (Efe. 5:5; Col. 3:5). Es interesante destacar que Jes�s previno contra �toda suerte de codicia�. �Por qu�? Porque la codicia puede adoptar diversas formas. w07 1/8 1:7-9 Abril 23@Esta viuda, aunque pobre, ech� m�s que todos ellos (Luc. 21:3).@No todos podemos servir a Dios como evangelizadores de tiempo completo. Si la salud, la edad u otros problemas limitan el servicio que usted le puede ofrecer a Dios, no se desanime. Jehov� valora mucho su fidelidad y lo que pueda darle de todo coraz�n (Luc. 21:2). Adem�s, no debemos subestimar los efectos que puede tener en los dem�s nuestra participaci�n en la predicaci�n, por limitada que esta nos parezca. Imaginemos, por ejemplo, que hemos estado predicando un rato y no hemos encontrado a nadie que demuestre inter�s en nuestro mensaje. Pero es posible que horas o hasta d�as despu�s las personas sigan hablando de nuestra visita, incluso las que no nos abrieron la puerta. Es cierto que no todos responder�n al mensaje de las buenas nuevas, pero algunos s� lo har�n (Mat. 13:19-23). Otras personas tal vez respondan m�s adelante, motivadas por alg�n cambio en su vida o en las condiciones mundiales. Sea como fuere, siempre que damos el m�ximo en la predicaci�n, estamos haciendo la voluntad de Dios. Lo que es m�s, �somos colaboradores de Dios� (1 Cor. 3:9). w07 1/10 2:9 Abril 24@Llegu� a tener envidia de los jactanciosos, cuando ve�a la mism�sima paz de los inicuos (Sal. 73:3).@En cierto momento de su vida, Asaf �el escritor del Salmo 73� se desanim� espiritualmente. Observ� la prosperidad material de los inicuos y se fij� en que, seg�n las apariencias, estaban contentos con su vida y no sufr�an ninguna calamidad. No acababa de entender por qu� a los malos parec�a irles tan bien mientras que los justos padec�an tantos sufrimientos. Aquel fiel de la antig�edad termin� comprendiendo lo que les espera a los malvados: Jehov� al
final les ajustar� las cuentas (Sal. 73:17-19). En su debido momento, Jehov� cumplir� sin falta su prop�sito de eliminar de la Tierra la maldad y las injusticias que esta provoca (Sal. 37:9). Y este es un hecho en el que ning�n cristiano leal deber�a dejar de meditar. No podemos perder de vista que Jehov� va a acabar con quienes se opongan a su voluntad y va a recompensar a los que vivan en armon�a con ella (Sal. 11:4-7). w07 15/8 1:9-12 Abril 25@Tuyo es el reino, oh Jehov�, Aquel que tambi�n te alzas como cabeza sobre todo (1 Cr�. 29:11).@Despu�s de crear a los �ngeles, Jehov� extendi� sus dominios creando un vasto y complejo universo f�sico, que inclu�a la Tierra (Job 38:4, 7; Sal. 148:5, 6). Al crear a la primera pareja de seres humanos, Dios ejerci� su autoridad de una nueva forma. Adem�s de darles todo lo necesario para que gozaran de una vida feliz y con sentido, Jehov� les otorg� control sobre la creaci�n animal. En otras palabras, deleg� en ellos cierto grado de autoridad (G�n. 1:2628; 2:8, 9). Ad�n y Eva ten�an la posibilidad de vivir para siempre en una Tierra paradis�aca (G�n. 2:15-17). Pues bien, �qu� aprendemos de todo lo dicho? En primer lugar, que Jehov� siempre ha ejercido su soberan�a sobre toda la creaci�n. En segundo lugar, que es un gobernante bueno y considerado que otorga dignidad a sus s�bditos. Y por �ltimo, que si lo reconocemos como nuestro Soberano y le obedecemos, recibiremos bendiciones eternas. w07 1/12 1:3-5 Abril 26@Hemos o�do por nosotros mismos (Juan 4:42).@En una ocasi�n, Jes�s dio testimonio a una samaritana junto al pozo de Jacob, en la localidad de Sicar. Jes�s no monopoliz� la conversaci�n, sino que dej� que la mujer se expresara. Al escucharla atentamente, pudo observar que le interesaba el tema de la adoraci�n, y por ello le dijo que Dios buscaba personas dispuestas a adorarlo con esp�ritu y verdad. Como Jes�s hab�a demostrado respeto e inter�s, ella corri� a hablar de �l a sus vecinos, y �muchos de los samaritanos de aquella ciudad pusieron fe en �l a causa de la palabra de la mujer� (Juan 4:5-29, 39-41). De igual modo, hoy, cuando llegamos a un hogar, podemos entablar una conversaci�n diciendo algo as�: �Me gustar�a saber su opini�n sobre [un asunto en particular]�. Y cuando nuestro oyente se exprese, debemos escucharlo y luego hacer alg�n comentario sobre lo que ha dicho o formular una pregunta pertinente. A continuaci�n, ser�a bueno indicarle con tacto lo que dice la Biblia sobre ese asunto. w07 15/11 2:7, 8 Abril 27@Todas las cosas son limpias a los limpios (Tito 1:15).@�Qu� quiso decir Pablo con las palabras del texto de hoy? Los �limpios� de los que est� hablando son cristianos que han conseguido que su manera de pensar y su conciencia moral est�n en armon�a con las normas de la Palabra de Dios. Estos cristianos reconocen que hay muchos asuntos que no se condenan directamente en la Biblia y que algunas conciencias pudieran verlos de una forma y otras de diferente manera. En vez de erigirse en jueces de los dem�s, reconocen que esas cosas que Dios no condena �son limpias�. Por lo tanto, en esos aspectos de la vida sobre los que no hay ninguna norma espec�fica en la Biblia, no esperan que todos vayan a pensar igual que ellos. Imaginemos el caso de una cristiana cuyo esposo no comparte, por el momento, su fe. Un familiar del marido se va a casar y el enlace tendr� lugar en un templo de la cristiandad. (O un familiar de �l, quiz�s uno de los padres, ha fallecido y se va a celebrar el funeral en una iglesia.) La pareja est� invitada, y el esposo desea que su mujer lo acompa�e. �Qu� le dicta la conciencia a ella? w07 15/10 2:9, 10 Abril 28@En s� mismos los d�as de nuestros a�os son setenta a�os; y si debido a poder�o especial son ochenta a�os, sin embargo su insistencia est� en penoso af�n y cosas perjudiciales; porque tiene que pasar r�pidamente, y volamos (Sal. 90:10).@Todos los seres humanos �ricos y pobres� somos imperfectos, y como muestra el texto de hoy, todos acabamos igual (Job 14:1, 2; 1 Ped. 1:24). Las personas que no han cultivado una buena relaci�n con Dios suelen adoptar la mentalidad que mencion� el ap�stol Pablo, a saber, �comamos y bebamos, porque ma�ana hemos de morir� (1 Cor. 15:32). Hay otros que, al observar que la vida es fugaz e incierta, buscan en los bienes materiales la sensaci�n de seguridad y estabilidad que les falta. Tal vez piensen que pueden dar cierto grado de protecci�n a su vida reuniendo muchas cosas materiales, tangibles. Por eso, trabajan sin descanso a fin
de acumular riquezas, creyendo equivocadamente que as� se sentir�n seguros y felices (Sal. 49:6, 11, 12). w07 1/8 1:15 Abril 29@[Oc�pense] en orar en toda ocasi�n (Efe. 6:18).@Los hijos pueden aprender mucho sobre Jehov� escuchando las oraciones de sus padres. Por poner un caso: �qu� aprender�n al verlos orando antes de cada sesi�n de estudio b�blico y dando gracias a Dios antes de cada comida? Probablemente concluir�n que Jehov� satisface nuestras necesidades �tanto espirituales como f�sicas�, y por eso merece que le demos las gracias. Se trata, sin duda, de lecciones muy valiosas (Sant. 1:17). Ahora bien, los padres conseguir�n todav�a m�s si oran con sus hijos en otras ocasiones y mencionan asuntos espec�ficos que interesen a los distintos miembros de la familia. As�, les ense�ar�n a ver a Jehov� como parte de la familia y a comprender que se preocupa por cada uno de sus miembros (1 Ped. 5:6, 7). Padres, �oran ustedes a diario con sus hijos? �Podr�an ayudarles a ver a Jehov� como un amigo que se preocupa por lo que necesitan emocionalmente, y no solo f�sica y espiritualmente? (Fili. 4:6, 7.) w07 1/9 2:5, 6 Abril 30@Obremos lo que es bueno para con todos, pero especialmente para con los que est�n relacionados con nosotros en la fe (G�l. 6:10).@Santiago 2:15, 16 nos dice: �Si un hermano o una hermana est�n en estado de desnudez y carecen del alimento suficiente para el d�a, y sin embargo alguno de entre ustedes les dice: �Vayan en paz, mant�nganse calientes y bien alimentados�, pero ustedes no les dan las cosas necesarias para su cuerpo, �de qu� provecho es?�. La religi�n verdadera nos ense�a a preocuparnos unos por otros y a atender a los m�s necesitados. No nos permite contentarnos con desearle a nuestro hermano que todo le vaya bien. Es preciso que, movidos por la ternura y la compasi�n, satisfagamos sus necesidades m�s apremiantes (1 Juanx 3:17, 18). Podemos hacerlo preparando comidas para los enfermos, ech�ndoles una mano a los hermanos mayores con sus tareas, proporcionando transporte a las reuniones cristianas a los que lo precisen, ayudando con generosidad a quienes lo merezcan y realizando muchas otras obras de misericordia (Deu. 15:7-10). w07 15/9 2:3-5 Mayo 1@El mar [...] y el Hades entregaron los muertos que hab�a en ellos, y fueron juzgados individualmente seg�n sus hechos (Rev. 20:13).@En alg�n momento del D�a del Juicio se abrir�n rollos que, junto con la Biblia, servir�n de base para juzgar a todos los que vivan en la Tierra. De este modo se determinar� si son dignos de recibir la vida eterna (Rev. 20:12). Durante el D�a del Juicio, todos los habitantes de la Tierra tendr�n suficiente tiempo para demostrar de qu� lado est�n en la cuesti�n de la soberan�a universal. Cada uno tendr� que decidir si apoyar� al Reino de Dios y permitir� que el Cordero lo gu�e a �fuentes de aguas de vida� o si, por el contrario, se opondr� al Reino y se negar� a someterse a �l (Rev. 7:17; Isa. 65:20). Para el fin de ese d�a, toda persona habr� tenido la oportunidad de tomar su propia decisi�n, libre de la influencia del pecado heredado y de un mundo perverso. Nadie podr� decir que el juicio final de Jehov� habr� sido injusto. Solo los malvados ser�n destruidos para siempre (Rev. 20:14, 15). w08 15/1 5:16 Mayo 2@Las cosas que fueron el objeto de mi cari�o estuvieron con los hijos de los hombres (Pro. 8:31).@Algunas personas que acaban de aprender las verdades b�blicas sienten gran amor por Dios. Impulsadas por esta cualidad, hablan sobre Jehov� y el Reino con tanta seguridad que logran convencer a muchos para que examinen las Escrituras (Juan 1:41). En efecto, lo que m�s nos motiva a los cristianos a participar en la obra de hacer disc�pulos es el amor a Dios. Por consiguiente, mantengamos vivo dicho amor siendo constantes en la lectura y meditaci�n de la Biblia (1 Tim. 4:6, 15; Rev. 2:4). No cabe duda de que el amor a Jehov� contribuy� a que Jesucristo ense�ara con tanto celo. Pero esa no fue la �nica raz�n por la que tuvo tan buenos resultados al predicar el Reino. Jes�s siempre se preocup� por la gente y mostr� mucho inter�s en ella. Era tan amoroso y compasivo como su Padre, lo cual atra�a a la gente a la adoraci�n del �nico Dios verdadero. Personas de todo tipo lo escuchaban porque se interesaba de verdad por ellas y por su situaci�n (Luc. 7:36-50; 18:15-17; 19:1-10). w07 15/11 1:5-7 Mayo 3@Venga tu reino. Efect�ese tu voluntad, como en el cielo, tambi�n sobre la
tierra (Mat. 6:10).@Bajo el dominio del Reino celestial de Dios disfrutaremos del gobierno que anhelan todas las personas que aman la justicia. Salmo 145:16 se cumplir� entonces en su sentido m�s pleno: �[T�, Jehov�,] est�s abriendo tu mano y satisfaciendo el deseo de toda cosa viviente�. Por su parte, Isa�as 32:1 promete: ��Mira! Un rey [Jesucristo en los cielos] reinar� para justicia misma; y en cuanto a pr�ncipes [los representantes terrestres de Cristo], gobernar�n como pr�ncipes para derecho mismo�. Y acerca del Rey Jesucristo, Isa�as 9:7 predice: �De la abundancia del regir principesco y de la paz no habr� fin, sobre el trono de David y sobre su reino a fin de establecerlo firmemente y sustentarlo por medio del derecho y por medio de la justicia, desde ahora en adelante y hasta tiempo indefinido�. �Se ve usted a s� mismo viviendo bajo ese gobierno justo? w07 15/8 1:13, 14 Mayo 4@En aquel d�a �es la expresi�n de Jehov� herir� con aturdimiento todo caballo y con locura a su jinete; y sobre la casa de Jud� abrir� mis ojos (Zac. 12:4).@Jehov� promete que, figurativamente, cegar� y herir� �con aturdimiento� a quienes luchen contra sus valerosos mensajeros del Reino. Y sin duda ha cumplido su palabra. Por ejemplo, en un pa�s donde la adoraci�n verdadera estaba proscrita, los adversarios no pudieron impedir que el alimento espiritual llegara a manos de los siervos de Dios. A este respecto, un peri�dico hasta lleg� a afirmar que los testigos de Jehov� usaban globos para introducir publicaciones b�blicas en el pa�s. En realidad, Dios estaba cumpliendo su promesa: �Abrir� mis ojos, y [a] todo caballo de los pueblos herir� con p�rdida de la vista�. Ciegos de ira, los enemigos del Reino no saben qu� direcci�n tomar. Por otra parte, nosotros tenemos la certeza de que Jehov� proteger� a su pueblo y velar� por su bienestar (2 Rey. 6:15-19). w07 15/12 3:11 Mayo 5@Jehov� disciplina a quien ama; de hecho, azota a todo aquel a quien recibe como hijo (Heb. 12:6).@El ap�stol Pablo dijo: �El amor es [...] bondadoso� (1 Cor. 13:4). Los buenos padres disciplinar�n a sus hijos de forma coherente y bondadosa. As� imitar�n a Jehov�. No obstante, hay que se�alar que la disciplina que menciona la Biblia no se limita al castigo, sino que se centra en la educaci�n y formaci�n para la vida. �Qu� prop�sito tiene esa disciplina? Pablo contesta: �A los que han sido entrenados por ella, da fruto pac�fico, a saber, justicia� (Heb. 12:11). Por lo tanto, �qu� logran los padres que ense�an a sus hijos con bondad y de acuerdo con las instrucciones divinas? Prepararlos para que de adultos amen la paz y la justicia. Si los hijos aceptan �la disciplina de Jehov�, adquirir�n sabidur�a, conocimiento y discernimiento, cualidades mucho m�s valiosas que el oro y la plata (Pro. 3:11-18). Por otro lado, no es ninguna muestra de bondad privar a los hijos de la disciplina que necesitan. w07 1/9 1:7, 8 Mayo 6@Tendr�n que abr�rseles los ojos y tendr�n que ser como Dios, conociendo lo bueno y lo malo (G�n. 3:5).@Satan�s convenci� a Ad�n y Eva para que se rebelaran contra Jehov�. Su rebeli�n fue un ataque directo contra la soberan�a de Jehov�. �Por qu� puede decirse eso? Porque cuando Satan�s le dijo a Eva que no morir�a si com�a del fruto prohibido, en realidad estaba insinuando que Jehov� hab�a mentido y que, por tanto, no era digno de confianza. Satan�s tambi�n dio a entender que a Ad�n y Eva les ir�a mejor si desobedec�an a Dios y se independizaban de �l (G�n. 3:1-6). Es obvio que aquella rebeli�n fue un claro desaf�o al derecho que Dios tiene a gobernar. Ahora bien, �c�mo reaccionar�a Jehov�? Para demostrar que ten�a pleno control de la situaci�n, juzg� de inmediato a los rebeldes y dict� sentencia contra ellos. En el caso de Ad�n y Eva, determin� que no merec�an la vida eterna y los expuls� del jard�n de Ed�n (G�n. 3:16-19, 22-24). w07 1/12 1:7, 8 Mayo 7@Si contin�an mostrando favoritismo, est�n obrando un pecado (Sant. 2:9).@Si favorecemos indebidamente a una persona porque tiene dinero o prestigio, corremos el peligro de volvernos menos sensibles al �clamor [...] del de condici�n humilde� (Pro. 21:13). Ciertamente, el favoritismo puede ahogar nuestros sentimientos de misericordia. As� pues, si queremos practicar la misericordia, debemos tratar a todos con imparcialidad. Ahora bien, �quiere decir lo anterior que no se puede tener nunca una consideraci�n especial con nadie? Ni mucho menos. Pensemos en el caso de Epafrodito, colaborador de Pablo. El ap�stol escribe a los cristianos de
Filipos: �Sigan teniendo aprecio a hombres [como Epafrodito]�. �Por qu� motivo? �Porque a causa de la obra del Se�or lleg� a estar muy pr�ximo a la muerte, al exponer su alma al peligro, para compensar de lleno la ausencia de ustedes aqu� para prestarme servicio personal.� (Fili. 2:25, 29, 30.) Sin lugar a dudas, Epafrodito hab�a desempe�ado su servicio fielmente y por ello merec�a que lo trataran con mucha consideraci�n. En efecto, las personas espirituales merecen nuestro reconocimiento (1 Tim. 5:17). Tener consideraci�n con ellas no es ninguna muestra de favoritismo. w07 15/9 2:8, 9 Mayo 8@El Cordero [...] los pastorear�, y los guiar� a fuentes de aguas de vida (Rev. 7:17).@La Palabra de Dios identifica a los cristianos ungidos que atienden los intereses de Cristo en la Tierra como �el esclavo fiel y discreto�. Cuando Jes�s, el Amo, inspeccion� a este �esclavo� en 1918, vio que estaba cumpliendo fielmente su deber de suministrar el �alimento al tiempo apropiado�, de modo que con mucho gusto lo nombr� �sobre todos sus bienes� (Mat. 24:45-47). Los bienes de Jesucristo, el Rey entronizado por Jehov�, abarcan todos los intereses del Reino en la Tierra. Entre ellos se encuentra la �gran muchedumbre� que el ap�stol Juan observ� en una visi�n y que describi� de la siguiente manera: ��Miren!, una gran muchedumbre, que ning�n hombre pod�a contar, de todas las naciones y tribus y pueblos y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos de largas ropas blancas; y hab�a ramas de palmera en sus manos� (Rev. 7:9). w08 15/1 5:1, 2 Mayo 9@No de pan solamente debe vivir el hombre, sino de toda expresi�n que sale de la boca de Jehov� (Mat. 4:4).@Como parte de su prop�sito para el ser humano, Dios quiere que cuidemos bien de nosotros mismos y de nuestras familias, tanto en sentido f�sico como espiritual. Ahora bien, necesitamos equilibrio para que los intereses materiales no eclipsen los intereses espirituales, que son los m�s importantes (Mat. 6:33). Lamentablemente, muchas personas centran su vida casi por completo en adquirir cosas materiales. Pero no es sensato pensar que las cosas materiales pueden satisfacer todas nuestras necesidades. Una encuesta reciente efectuada entre millonarios asi�ticos revela que muchos de ellos �viven preocupados y no se sienten seguros a pesar de la posici�n social y el sentido del logro que les ha proporcionado su riqueza� (Ecl. 5:11). Jes�s habl� del �poder enga�oso de las riquezas� (Mar. 4:19). �En qu� sentido son enga�osas? Porque parece que dan felicidad, pero no es as�. w07 1/10 1:5, 6 Mayo 10@Todos los que estaban correctamente dispuestos para vida eterna se hicieron creyentes (Hech. 13:48).@El libro b�blico de Hechos contiene el emocionante relato de c�mo los primeros cristianos respondieron a la profec�a de Jes�s de que las buenas nuevas del Reino se predicar�an por toda la Tierra habitada (Mat. 24:14). Predicadores entusiastas abrieron el camino, y muchos siguieron sus pasos. A ra�z de la celosa labor que los disc�pulos de Jes�s efectuaron en Jerusal�n, miles de personas, incluida �una gran muchedumbre de sacerdotes�, se unieron a la congregaci�n cristiana del siglo primero (Hech. 2:41; 4:4; 6:7). Hoy, al igual que en el siglo primero, �todos los que [est�n] correctamente dispuestos para vida eterna� responden al mensaje de la verdad. Jehov� atrae a tales personas a su organizaci�n (Ageo 2:7). �No le emociona saber que los proclamadores del Reino dirigieron m�s de seis millones de estudios b�blicos en el a�o de servicio 2007? w08 15/1 3:1, 3, 4 Mayo 11@El gozo de Jehov� es [una] plaza fuerte (Neh. 8:10).@Para Jes�s, obedecer a su Padre era un placer (Sal. 40:8). Si tenemos su misma disposici�n obediente e imitamos su generosidad, seremos felices al servir a Dios (Hech. 20:35). Las oraciones fervientes a Dios prepararon a Jes�s para las pruebas de fe que afrontar�a. De hecho, cuando Juan lo bautiz�, Jes�s estaba orando, y antes de seleccionar a sus ap�stoles, pas� toda la noche hablando con su Padre (Luc. 6:1216). �Acaso no nos conmovemos al leer en la Biblia las sinceras oraciones de Jes�s en su �ltima noche en la Tierra? (Mar. 14:32-42; Juan 17:1-26.) Y usted, �le da a la oraci�n la misma importancia? Ac�rquese con frecuencia a Jehov� y t�mese todo el tiempo necesario. Pida la gu�a del esp�ritu santo y, en cuanto la perciba, ac�ptela. Una relaci�n s�lida con nuestro Padre celestial es vital en estos
tiempos cr�ticos en los que el gran d�a de Dios se acerca con rapidez. Sin falta, pues, acerqu�monos a�n m�s a Jehov� mediante la oraci�n (Sant. 4:8). w07 15/12 1:7, 8 Mayo 12@Has escondido estas cosas de los sabios e intelectuales y las has revelado a los peque�uelos (Mat. 11:25).@Nadie debe pensar que jam�s entender� �las cosas profundas de Dios� solo porque nunca fue el primero de la clase (1 Cor. 2:10). Cuando Jes�s estuvo en la Tierra, �a qui�nes revel� Jehov� su prop�sito? No fue a los sabios e intelectuales, sino a �hombres iletrados y del vulgo� que con humildad se dejaron ense�ar por Su siervo, Jes�s. Eran como ni�os en comparaci�n con quienes hab�an recibido una educaci�n superior (Hech. 4:13). De manera similar, Jehov� utiliza hoy su esp�ritu para dirigir a su organizaci�n. Esta, a su vez, transmite el entendimiento b�blico al pueblo de Dios, el cual sirve a Jehov� en unidad (Hech. 20:28; Efe. 4:3-6). Por todo el mundo, las congregaciones siguen un programa similar de estudio que les permite repasar el conjunto de ense�anzas b�blicas cada pocos a�os. As�, mediante la congregaci�n, el esp�ritu santo ayuda a las personas a desarrollar la actitud humilde que necesitan para entender �las cosas profundas de Dios� (Hech. 5:32). w07 1/11 2:5, 6 Mayo 13@Mi conciencia da testimonio conmigo en esp�ritu santo (Rom. 9:1).@La Biblia indica que la conciencia es la facultad que tenemos de contemplar y evaluar personalmente nuestras acciones. Por decirlo as�, es una voz interior que nos se�ala si determinada conducta est� bien o est� mal. Pues bien, esta voz tal vez nos hable por adelantado cuando vayamos a tomar decisiones que tengan implicaciones morales. En tal caso, la conciencia pudiera ayudarnos a evaluar los actos futuros y mostrarnos c�mo nos sentir�amos si los llev�ramos a cabo. Pero es m�s frecuente que la conciencia entre en juego despu�s que uno ha actuado. Por ejemplo, cuando viv�a como fugitivo, huyendo de Sa�l, David tuvo ante s� la oportunidad de hacer algo irrespetuoso contra aquel rey ungido por Dios, y de hecho lo hizo. Pero luego �el coraz�n de David [estuvo] hiri�ndolo� (1 Sam. 24:15; Sal. 32:3, 5). Aunque en este relato no aparece la palabra conciencia, sin duda el dolor que sinti� David no era otra cosa que el efecto de su propia conciencia. De igual modo, a todos nos remuerde a veces la conciencia. Cuando uno obra en armon�a con su conciencia, siente paz y satisfacci�n. w07 15/10 1:9, 10 Mayo 14@H�ganse imitadores de Dios, como hijos amados (Efe. 5:1).@Jehov� no solo est� �listo para perdonar�, sino que tambi�n concede �el verdadero perd�n� (Sal. 86:5; 130:4). Una forma de demostrar que somos hijos amados de Jehov� es imit�ndolo. Todos somos pecadores y necesitamos desesperadamente su perd�n. Por eso, debemos tener cuidado si nos damos cuenta de que nos cuesta perdonar a alguien. Podr�amos acabar como el esclavo de la par�bola de Jes�s que se neg� a perdonar la deuda de otro esclavo. Cuando se enter� su amo �que le hab�a perdonado a �l una deuda much�simo mayor�, lo mand� encerrar en prisi�n. Jes�s concluy� su par�bola diciendo: �Del mismo modo tambi�n tratar� mi Padre celestial con ustedes si no perdonan de coraz�n cada uno a su hermano� (Mat. 18:21-35). Meditemos en esta ilustraci�n y pensemos cu�ntas veces nos ha perdonado Jehov� a nosotros. De seguro, eso nos animar� a resolver cualquier diferencia personal que tengamos con nuestros hermanos (Sal. 19:14). w07 1/10 3:18 Mayo 15@Como flechas en la mano de un hombre poderoso, as� son los hijos de la juventud (Sal. 127:4).@Por mucha destreza que tenga un arquero, no dar� en el blanco si la flecha est� torcida. En el caso de los padres, si ven que el hijo tiene una forma de pensar �torcida�, deben esforzarse por enderezarlo, como si de una flecha se tratara. Pero, a fin de cuentas, es el hijo quien tiene que decidir si prefiere dejar que el mundo lo tuerza o que Jehov� haga �derechas [sus] sendas� (Pro. 3:5, 6; Rom. 12:2). Aunque los padres tienen la gran responsabilidad de criar a sus hijos en �la disciplina y regulaci�n mental de Jehov�, es el hijo, en �ltimo t�rmino, quien tiene que decidir qu� har� de adulto (Efe. 6:4). As� pues, j�venes, �aceptar�n las amorosas ense�anzas de sus padres? Si lo hacen, estar�n eligiendo el mejor modo de vivir y, m�s importante a�n, alegrar�n el coraz�n de Jehov� (Pro. 27:11). w07 1/9 2:2, 17, 18 Mayo 16@Feliz es el hombre que sigue aguantando la prueba, porque al llegar a ser
aprobado recibir� la corona de la vida (Sant. 1:12).@Muchos de nosotros esperamos vivir para siempre en un para�so terrestre libre de enfermedades, pesares y muerte. En nuestro caso, �nos beneficia de alg�n modo aguantar el sufrimiento? Aunque es obvio que no deseamos soportar dolores ni angustias, estas experiencias pulen nuestro car�cter y contribuyen, en �ltimo t�rmino, a que seamos felices. As� lo indica la Palabra inspirada de Dios en diversos pasajes. �Hasta si sufrieran por causa de la justicia, son felices.� �Si a ustedes los est�n vituperando por el nombre de Cristo, son felices.� (1 Ped. 3:14; 4:14.) �Felices son ustedes cuando los vituperen y los persigan y mentirosamente digan toda suerte de cosa inicua contra ustedes por mi causa. Regoc�jense y salten de gozo, puesto que grande es su galard�n en los cielos.� (Mat. 5:11, 12.) Lo que nos produce felicidad es saber que estamos sufriendo porque hacemos la voluntad de Jehov�. w07 15/8 2:12-14 Mayo 17@Sigue vigilando el ministerio que aceptaste en el Se�or, [para] que lo cumplas (Col. 4:17).@Los cristianos tenemos una enorme responsabilidad hacia las personas que nos rodean, pues las decisiones que tomen ahora significar�n vida o muerte para ellas cuando llegue �la gran tribulaci�n� (Rev. 7:14). Proverbios 24:11 nos dice: �Libra a los que est�n siendo llevados a la muerte; y a los que van trastabillando a la matanza, �oh, que los retengas!�. Si no cumplimos con la responsabilidad de informar a la gente sobre la decisi�n que debe tomar, se nos podr�a considerar culpables de su muerte. De hecho, ese pasaje b�blico a�ade: �En caso de que digas: ��Mira! No sab�amos de esto�, aquel mismo que est� avaluando los corazones, �no lo discernir�?, y aquel mismo que est� observando tu alma, �no lo sabr�, y ciertamente pagar� al hombre terrestre conforme a su actividad?�. Est� claro que los siervos de Jehov� no podremos excusarnos diciendo que �no sab�amos� del peligro con que se enfrenta hoy la humanidad (Pro. 24:12). w08 15/1 1:1 Mayo 18@Lev�ntense, salgan de en medio de mi pueblo, [...] y vayan, sirvan a Jehov� (�xo. 12:31).@Retrocedamos al a�o 1513 antes de nuestra era. Jehov� ya ha golpeado con nueve plagas a los egipcios. Y ahora le revela a Mois�s que asestar� un golpe final a aquella naci�n. El 14 de abib (nis�n), el primog�nito de todo hombre egipcio y de todo animal tendr� que morir. Sin embargo, las familias israelitas se librar�n de esa plaga si obedecen al pie de la letra las instrucciones que Dios le da a Mois�s. Deben salpicar la sangre de un cordero sobre los postes y la viga superior de la puerta de sus casas, y quedarse dentro de ellas. �Qu� ocurre esa noche? Dejemos que Mois�s mismo conteste: �Sucedi� que a medianoche Jehov� hiri� a todo primog�nito en la tierra de Egipto�. Inmediatamente, el fara�n llama a Mois�s y Aar�n, y les dice las palabras del texto de hoy (�xo. 12:1-7, 29, 37, 38). w07 15/12 2:7, 8 Mayo 19@As� pasa con el hombre que atesora para s�, pero no es rico para con Dios (Luc. 12:21).@La expresi�n �rico para con Dios� tambi�n se vierte �rico ante Dios� (N�car-Colunga) o �rico a los ojos de Dios� (Biblia de Am�rica). Por lo general, los que son ricos materialmente se preocupan por la imagen que proyectan ante los dem�s, quieren ser importantes a los ojos de los hombres, y suelen reflejarlo en su modo de vivir. Para impresionar a los dem�s, recurren a lo que la Biblia denomina �la exhibici�n ostentosa del medio de vida de uno� (1 Juan 2:16). Por su parte, los que son ricos para con Dios cuentan con su aprobaci�n, su favor y su inmensa bondad inmerecida, y tienen una estrecha relaci�n personal con �l. Desde luego, estar en una situaci�n tan privilegiada les proporciona una sensaci�n de bienestar y seguridad muy superior a la que se puede obtener de las riquezas materiales. Por eso, hacen todo lo posible por participar de lleno en las actividades que, a los ojos de Dios, realmente merecen la pena y tienen valor (Isa. 40:11). w07 1/8 2:14, 15 Mayo 20@No se dej� que quedara ni siquiera uno solo de entre ellos (�xo. 14:28).@La promesa de Jehov� de liberar a los israelitas de Egipto y darles la Tierra Prometida llevaba impl�cita la promesa de protegerlos. Recordemos que el fara�n, cegado por la ira, sali� tras Israel con un poderoso ej�rcito que contaba con centenares de carros. Seguro que, en su arrogancia, se sent�a muy confiado, y m�s a�n cuando crey� que los israelitas se encontraban acorralados entre las monta�as y el mar. Pero Dios intervino para proteger a su pueblo. Con ese fin
situ� entre los dos campamentos una nube que deten�a el avance de los egipcios. Por el lado de estos hab�a oscuridad, mientras que por el lado de los israelitas hab�a luz. Entonces Mois�s alz� su vara, y las aguas del mar Rojo se dividieron. Lo que para los israelitas fue una v�a de escape, para los egipcios se convirti� en una trampa mortal. Jehov� acab� con el poderoso ej�rcito del fara�n, protegiendo as� a su pueblo de caer en sus manos (�xo. 14:19-28). w07 1/11 1:7 Mayo 21@Sea que est�n comiendo, o bebiendo, o haciendo cualquier otra cosa, hagan todas las cosas para la gloria de Dios (1 Cor. 10:31).@Los cristianos verdaderos valoramos la vida y deseamos vivirla de una forma que glorifique a Dios. Si nos concentramos en predicar las buenas nuevas del Reino y ense�ar a las personas a obedecer todas las cosas que Jes�s mand�, se abrir�n ante nosotros nuevas oportunidades para ampliar nuestro servicio (Mat. 24:14; 28:19, 20). Aparte de colaborar con la congregaci�n local, existe la posibilidad de servir donde haya mayor necesidad de ayuda: en otro territorio, en un campo de lengua extranjera o incluso en otro pa�s. �Qu� rasgo del servicio escoger� usted? Como siervo dedicado de Jehov�, busque siempre su gu�a y la de su organizaci�n. El �buen esp�ritu� de Dios le ayudar� a tomar la decisi�n correcta (Neh. 9:20). Una asignaci�n suele llevar a otra, y por lo general, la experiencia y las habilidades que uno adquiere en un lugar pueden ser �tiles despu�s en otras asignaciones. w07 1/10 2:11, 12 Mayo 22@El que retiene su vara odia a su hijo, pero el que lo ama es el que de veras lo busca con disciplina (Pro. 13:24).@Seg�n muestran los estudios, los hijos que se cr�an sin disciplina coherente suelen ser ego�stas e infelices. Sin embargo, los que viven en hogares donde los comprenden y, al mismo tiempo, les ponen l�mites firmes aprovechan m�s la educaci�n escolar, tienen mejores relaciones sociales y son m�s felices en l�neas generales. Como vemos, cuando los padres disciplinan a sus hijos, en realidad los est�n tratando con bondad. Pero �qu� deben hacer los padres cristianos para disciplinar a sus hijos con amor y bondad? Deben ense�arles claramente qu� normas tienen que cumplir. Por ejemplo, desde su m�s tierna infancia, les ense�ar�n que deben obedecer los principios b�blicos fundamentales y participar en las diversas facetas de la adoraci�n verdadera (�xo. 20:12-17; Mat. 22:37-40; 28:19; Heb. 10:24, 25). Tienen que dejarles claro que esas normas cristianas no admiten discusi�n. w07 1/9 1:8, 9 Mayo 23@Predica la palabra (2 Tim. 4:2).@Jes�s no era conocido principalmente como un realizador de milagros o curaciones, sino como maestro (Mar. 12:19; 13:1). Para �l, lo m�s importante era declarar las buenas nuevas del Reino de Dios, y lo mismo se puede decir de sus seguidores hoy d�a. Los cristianos hemos recibido la comisi�n de seguir haciendo disc�pulos, y para ello les ense�amos a observar todas las cosas que Jes�s mand� (Mat. 28:19, 20). A fin de cumplir nuestra comisi�n de hacer disc�pulos, nos esforzamos cada d�a por mejorar la calidad de nuestra ense�anza. El ap�stol Pablo subray� la importancia de ser un buen maestro cuando escribi� lo siguiente a Timoteo, uno de sus compa�eros de predicaci�n: �Presta constante atenci�n a ti mismo y a tu ense�anza. Persiste en estas cosas, pues haciendo esto te salvar�s a ti mismo y tambi�n a los que te escuchan� (1 Tim. 4:16). Al hablar de ense�anza, Pablo no se refer�a al simple hecho de llenar la mente del estudiante de informaci�n. El ministro cristiano competente logra llegar al coraz�n de las personas y motivarlas a hacer cambios en su vida. w08 15/1 2:1, 2 Mayo 24@Si solo en esta vida hemos esperado en Cristo, de todos los hombres somos los m�s dignos de l�stima (1 Cor. 15:19).@�Qu� triste ser�a que nuestra �nica esperanza fuera la de vivir en este mundo de Satan�s! �Comamos y bebamos, porque ma�ana hemos de morir�, dicen quienes piensan que esta vida es todo lo que hay (1 Cor. 15:32). Pero hay algo m�s: �Hay nuevos cielos y una nueva tierra que esperamos seg�n [la] promesa [de Dios], y en estos la justicia habr� de morar� (2 Ped. 3:13). Cuando llegue ese momento, los cristianos podr�n disfrutar de �la vida de verdad�, �la vida eterna� en perfecci�n, ya sea en los cielos o en la Tierra bajo el amoroso gobierno del Reino de Dios (1 Tim. 6:12). El Reino de Dios es el �nico gobierno capaz de resolver definitivamente todos los problemas. Por ello, no hay mejor labor en la vida que la de promover los intereses del Reino (Juan 4:34).
Al hacerlo, cultivamos una hermosa relaci�n con nuestro Padre celestial. w07 1/10 1:10, 11 Mayo 25@Har� a los jeques de Jud� como una vasija de fuego entre los �rboles (Zac. 12:6).@La expresi�n �los jeques de Jud� se refiere a los superintendentes ungidos del pueblo de Dios. A estos, Jehov� los llena de celo ardiente para defender los intereses de su Reino en la Tierra. En cierta ocasi�n, Jes�s dijo a sus disc�pulos: �Vine a prender un fuego en la tierra� (Luc. 12:49). Jes�s dej� claro que el Reino de Dios era una cuesti�n de m�xima importancia. Como resultado, se encendi� una acalorada pol�mica en toda la naci�n jud�a (Mat. 4:17, 25; 10:5-7, 17-20). De igual modo, en nuestros d�as, los que siguen tras los pasos de Cristo provocan incendios espiritualmente hablando, �como una vasija de fuego entre los �rboles y como una antorcha de fuego en una hilera de grano reci�n cortado�. En 1917, por ejemplo, el libro The Finished Mystery (El misterio terminado) present� una denuncia ardiente de la hipocres�a de la cristiandad, lo que provoc� la furiosa reacci�n del clero. M�s recientemente, el tratado Noticias del Reino n�m. 37, titulado ��Se acerca el fin de la religi�n falsa!�, ha hecho que muchas personas adopten una postura con respecto al Reino de Dios, sea a favor o en contra. w07 15/12 3:12 Mayo 26@No debes desear [...] cosa alguna que pertenezca a tu semejante (�xo. 20:17).@La Biblia contiene numeros�simos ejemplos de personas que pecaron gravemente, empujadas por una forma u otra de codicia. Satan�s fue el primero en codiciar algo que pertenec�a a otro: la gloria, honra y autoridad que solo Jehov� merece (Rev. 4:11). Eva codici� el derecho a la autodeterminaci�n; por ello, creyendo que pod�a ser independiente de Dios, se dej� enga�ar y as� encamin� a la humanidad hacia el pecado y la muerte (G�n. 3:4-7). Del mismo modo, los demonios fueron �ngeles que, descontentos con �su posici�n original, [...] abandonaron su propio y debido lugar de habitaci�n� para obtener algo que no les correspond�a (Jud. 6; G�n. 6:2). Pensemos tambi�n en Balaam, Ac�n, Guehaz� y Judas Iscariote. Como no estaban satisfechos con lo que ten�an, dejaron que su insaciable deseo de bienes materiales los llevara a abusar de la confianza que se hab�a depositado en ellos. Actuar as� los condujo a la perdici�n. w07 1/8 1:9 Mayo 27@Desde los d�as de Juan el Bautista hasta ahora el reino de los cielos es la meta hacia la cual se adelantan con ardor los hombres, y los que se adelantan con ardor se asen de �l (Mat. 11:12).@Durante tres a�os y medio, Jes�s se concentr� en predicar las buenas nuevas del Reino a la naci�n jud�a. Despu�s del arresto de Juan el Bautista, mostr� que otras personas pod�an tener la esperanza de participar en el gobierno celestial cuando dijo las palabras del texto de hoy. Justo antes de hablar de los que �se asir�an� del Reino de los cielos, Jes�s hizo esta interesante afirmaci�n: �En verdad les digo: Entre los nacidos de mujer no ha sido levantado uno mayor que Juan el Bautista; mas el que sea de los menores en el reino de los cielos es mayor que �l� (Mat. 11:11). �Por qu� dijo eso? Porque la esperanza de formar parte del Reino solo se ofreci� de lleno a los fieles a partir del derramamiento del esp�ritu santo en el Pentecost�s del a�o 33, y para ese entonces Juan el Bautista ya hab�a muerto (Hech. 2:1-4). w08 15/1 4:4, 5 Mayo 28@[Cristo] aprendi� la obediencia por las cosas que sufri� (Heb. 5:8).@Jesucristo est� muy capacitado para su labor como Rey del Reino celestial de Dios. �l hab�a pasado much�simo tiempo junto a su Padre haciendo su voluntad, actuando como �obrero maestro� (Pro. 8:22-31). Y cuando Jehov� dispuso que viniera a la Tierra, Jes�s lo acept� de buena gana. Una vez aqu�, se centr� en hablar a la gente sobre la soberan�a y el Reino de Jehov�. De hecho, nos dej� un magn�fico ejemplo de sumisi�n absoluta a dicha soberan�a (Mat. 4:17; 6:9). Jes�s sufri� persecuci�n y finalmente fue ejecutado. Adem�s, durante su ministerio pudo ver el lamentable estado en que se halla la humanidad. Las experiencias que tuvo durante su vida en la Tierra lo ayudaron a ser m�s comprensivo y misericordioso. �l conoci� de primera mano las circunstancias que afectan a la humanidad. Pod�a compadecerse de quienes sufr�an y entender mejor cu�nto necesitaban que �l acudiera en su auxilio (Mat. 9:36; 11:28-30; Heb. 2:17, 18; 4:14-16). w07 15/8 2:9, 10
Mayo 29@Yo les he puesto el modelo, que, as� como yo hice con ustedes, ustedes tambi�n deben hacerlo (Juan 13:15).@Jes�s siempre puso en pr�ctica lo que ense�aba, dejando as� un buen ejemplo para los padres. Por tanto, los padres que quieren infundir en sus hijos amor por Jehov� deben predicar con el ejemplo (1 Juan 3:18). El ejemplo que den los padres es important�simo. Veamos por qu�. �C�mo llegaron ellos a amar a Dios? Observando el ejemplo de Jes�s. De igual modo, los hijos aprender�n a amar a Jehov� imitando a sus padres. Recordemos que las compa��as pueden tener dos efectos en el ni�o: o lo fortalecen, o �echan a perder [sus] h�bitos �tiles� (1 Cor. 15:33). Pues bien, durante buena parte de su vida �en especial durante sus primeros a�os�, los amigos m�s �ntimos e influyentes del ni�o son sus padres. De ah� que estos deban preguntarse: ��Soy una buena �compa��a� para mi hijo? �Lo motiva mi ejemplo a cultivar �h�bitos �tiles�? �Qu� ejemplo le doy en cuestiones fundamentales como la oraci�n y el estudio de la Biblia?�. w07 1/9 2:3, 4 Mayo 30@La ley de su Dios est� en su coraz�n; sus pasos no vacilar�n (Sal. 37:31).@El crecimiento espiritual del cristiano debe ser un proceso continuo, y lo mismo deber�a ocurrir con el desarrollo de su capacidad de escuchar y responder a los dictados de su conciencia. Pongamos una situaci�n hipot�tica. Hasta hace poco, Marcos participaba en pr�cticas relacionadas con cosas prohibidas en la Biblia. Ahora que se ha bautizado, su conciencia ya no le permite hacerlo. Lo que es m�s, evita de forma escrupulosa hasta cosas remotamente similares a las que Dios proh�be. Pero, al mismo tiempo, le cuesta trabajo entender que haya quienes rechacen cosas que �l encuentra perfectamente aceptables, por ejemplo, ciertos programas de televisi�n. Con el tiempo, Marcos profundiza sus conocimientos y estrecha su relaci�n con Dios (Col. 1:9, 10). Como resultado, su voz interior recibe una buena formaci�n. Por esta raz�n, aunque antes se negaba a realizar algunas cosas �remotamente similares a las que Dios proh�be�, ahora comprende que no todas eran contrarias a la voluntad divina. Adem�s, decide evitar los programas que antes hab�a considerado aceptables. En efecto, su conciencia se ha refinado. w07 15/10 2:16, 17 Mayo 31@Tengo otras ovejas, que no son de este redil (Juan 10:16).@La gran muchedumbre, que est� incluida entre las �otras ovejas� de las que habl� Jes�s, tiene la esperanza de vivir para siempre en un para�so terrestre. Sus miembros conf�an, adem�s, en que Jes�s �los guiar� a fuentes de aguas de vida� y en que Dios les �limpiar� toda l�grima de los ojos�. Por esta raz�n, �han lavado sus ropas largas y las han emblanquecido en la sangre del Cordero� (Rev. 7:14, 17). Debido a que ejercen fe en el sacrificio de Jes�s, a los ojos de Dios es como si llevaran ropas blancas. Al igual que en el caso de Abrah�n, Dios los declara justos como sus amigos. En vista de ello, los miembros de esta creciente gran muchedumbre de otras ovejas conf�an en que podr�n sobrevivir a la destrucci�n de este mundo en la gran tribulaci�n (Sant. 2:23-26). Pueden acercarse a Jehov� y tienen la maravillosa posibilidad de sobrevivir como grupo al Armaged�n (Sant. 4:8; Rev. 7:15). w08 15/1 5:3, 4 Junio 1@Hablen confortadoramente a las almas abatidas, den su apoyo a los d�biles (1 Tes. 5:14).@Adem�s de dar apoyo y est�mulo en su propia congregaci�n, los cristianos del siglo primero tambi�n organizaban misiones para socorrer a los creyentes de otros lugares. Recordemos el caso de los cristianos de Antioqu�a de Siria. Cuando el profeta �gabo predijo que �una gran hambre estaba para venir sobre toda la tierra habitada�, �qu� hicieron? �Resolvieron, cada uno de ellos seg�n los medios que ten�a, enviar una ministraci�n de socorro a los hermanos que moraban en Judea.� Y �por mano de Bernab� y de Saulo� hicieron llegar aquella ayuda a los ancianos de la zona (Hech. 11:28-30). �Qu� puede decirse de nuestros tiempos? �El esclavo fiel y discreto� establece comit�s para socorrer a nuestros hermanos afectados por huracanes, terremotos, tsunamis y otras cat�strofes naturales (Mat. 24:45). Dedicando tiempo, trabajo y recursos a estas labores de socorro, sin duda demostramos misericordia a nuestros hermanos. w07 15/9 2:6, 7 Junio 2@En la parte final de los d�as [...,] la casa de Jehov� llegar� a estar firmemente establecida por encima de la cumbre de las monta�as, [...] y a ella
tendr�n que afluir todas las naciones (Isa. 2:2).@En la ma�ana del viernes 2 de octubre de 1914, Charles Taze Russell �que en aquel entonces dirig�a a los Estudiantes de la Biblia� entr� con pasos firmes en el comedor del Betel de Brooklyn (Nueva York). Antes de sentarse, anunci� entusiasmado: �Los tiempos de los gentiles han terminado; el d�a de sus reyes ha pasado�. Una vez m�s hab�a llegado el momento para que Jehov�, el Soberano del universo, actuara a favor de su pueblo. Y eso fue lo que hizo. Tan solo cinco a�os despu�s, Jehov� liber� a su pueblo de �Babilonia la Grande�, el poderoso imperio mundial de la religi�n falsa (Rev. 18:2). Aunque pocos tenemos la edad suficiente para haber experimentado aquella emocionante liberaci�n, s� podemos ver con claridad sus efectos. Jehov� restaur� la adoraci�n pura y uni� a los que deseaban adorarlo, tal como lo hab�a predicho mediante el profeta Isa�as. w07 1/11 1:11, 12 Junio 3@Ustedes no saben lo que ser� su vida ma�ana. Porque son una neblina que aparece por un poco de tiempo y luego desaparece (Sant. 4:14).@El inter�s de Jes�s por la santificaci�n del sagrado nombre de Jehov� le ayud� a estar listo para las pruebas que tuvo que enfrentar. De hecho, ense�� a sus disc�pulos a orar: �Santificado sea tu nombre� (Mat. 6:9). Si de verdad deseamos que el nombre de Dios se santifique, o se tenga por sagrado, nos esforzaremos por no deshonrarlo de ninguna manera. De ese modo estaremos mejor preparados para el gran d�a de Jehov�. Pregunt�monos: si el d�a de Jehov� llegara ma�ana, �de verdad estar�amos listos? Todos deber�amos analizar nuestra vida y comprobar si hay actitudes o conductas que tengamos que cambiar. Dada la brevedad e incertidumbre de esta vida, todos los d�as debemos esforzarnos por estrechar nuestra relaci�n con Jehov� (Ecl. 9:11, 12). w07 15/12 1:9, 10 Junio 4@Se humill� y se hizo obediente hasta la muerte, s�, muerte en un madero de tormento. Por esta misma raz�n, tambi�n, Dios lo ensalz� a un puesto superior y bondadosamente le dio el nombre que est� por encima de todo otro nombre (Fili. 2:8, 9).@Por su fidelidad y lealtad, Jes�s fue resucitado, no como ser humano, sino como �esp�ritu dador de vida� (1 Cor. 15:45; 1 Ped. 3:18). Jehov� le dijo a su Hijo glorificado: �Si�ntate a mi diestra hasta que coloque a tus enemigos como banquillo para tus pies� (Sal. 110:1). Estos �enemigos� son Satan�s �el cabecilla de la rebeli�n� y todos los que componen su �descendencia�. Como Rey del Reino mesi�nico de Jehov�, Jesucristo dirigir� la destrucci�n de todos los rebeldes del cielo y de la Tierra (Rev. 12:7-9; 19:11-16; 20:1-3, 10). Entonces se cumplir� totalmente la profec�a de G�nesis 3:15, as� como estas palabras de la oraci�n modelo de Jes�s: �Venga tu reino. Efect�ese tu voluntad, como en el cielo, tambi�n sobre la tierra� (Mat. 6:10). w07 1/12 2:11 Junio 5@�No nos ard�a el coraz�n [...]? (Luc. 24:32.)@Poco despu�s de la resurrecci�n de Cristo, dos de sus disc�pulos caminaban de Jerusal�n a Ema�s. El Evangelio se�ala: �Mientras iban conversando y hablando, Jes�s mismo se acerc� y se puso a andar con ellos; pero se impidi� que los ojos de ellos lo reconocieran. �l les dijo: ��Qu� asuntos son estos que consideran entre ustedes mientras van andando?�. [...] Cleopas le dijo: ��Moras t� solo como forastero en Jerusal�n y por eso no sabes las cosas que han ocurrido en ella en estos d�as?�. Y �l les dijo: ��Qu� cosas?��. Ellos le contaron que Jes�s el Nazareno, conocido por sus ense�anzas y milagros, hab�a sido ejecutado, aunque algunos afirmaban que se hab�a levantado de entre los muertos. El Gran Maestro escuch� a Cleopas y a su compa�ero, y luego les explic� lo que necesitaban saber, �[abri�ndoles] por completo [el sentido de] las Escrituras� (Luc. 24:13-27, 32). w07 15/11 2:9 Junio 6@Vayan, por lo tanto, y hagan disc�pulos de gente de todas las naciones (Mat. 28:19).@Si empleamos nuestro tiempo, energ�as y talentos en la predicaci�n del Reino y la obra de hacer disc�pulos �en lugar de utilizarlos para prosperar econ�micamente�, estaremos haciendo una buena inversi�n, una que nos proporcionar� cuantiosos beneficios espirituales. Veamos el caso de un cristiano que reside en un pa�s asi�tico. �l ten�a un trabajo muy bien pagado como t�cnico inform�tico, pero le ocupaba casi todo el tiempo y se sent�a espiritualmente empobrecido. As� que, en lugar de tratar de obtener un ascenso, opt� por dejar el empleo y ponerse a hacer helados y a venderlos en la calle. �Por qu� tom� esa decisi�n? Porque
quer�a tener m�s tiempo para atender sus necesidades y responsabilidades espirituales. Aunque sus anteriores compa�eros se burlaron de la decisi�n que hab�a tomado, veamos c�mo le fue. �Lo cierto es que he salido ganando econ�micamente �dijo�. Ahora vivo m�s feliz porque no tengo las tensiones ni las preocupaciones de antes. Y m�s importante a�n, me siento m�s cerca de Jehov�.� w07 1/8 2:15, 16 Junio 7@Haz la obra de evangelizador, efect�a tu ministerio plenamente (2 Tim. 4:5).@Como Jehov� valora la vida, insta a sus siervos a hacer todo lo que puedan por salvar al mayor n�mero posible de personas. Todos los ministros de Dios debemos dar a conocer el mensaje de salvaci�n que contiene la Biblia. Nuestra labor se parece a la del vigilante que da la alarma para avisar de alg�n peligro inminente. No queremos que la sangre de quienes perezcan �est� sobre nuestras cabezas� (Eze. 33:1-7). Por lo tanto, es fundamental que sigamos esforz�ndonos por �predica[r] la palabra� (2 Tim. 4:2). Los sucesos mundiales indican que vivimos en �la conclusi�n del sistema de cosas� y que el fin est� muy cerca. La humanidad enfrenta las terribles condiciones que, seg�n Jes�s y sus disc�pulos, servir�an para identificar �los �ltimos d�as�. Ciertamente, estos son �tiempos cr�ticos, dif�ciles de manejar�, incluso para quienes tratamos de seguir las normas b�blicas (Mat. 24:3, 6-8, 12; 2 Tim. 3:1-5). w08 15/1 1:2, 4 Junio 8@Saulo, por su parte, aprobaba el asesinato de [Esteban] (Hech. 8:1).@Quiz�s alguien diga: �Con que uno se gu�e por los dictados de su conciencia, ya es suficiente�. Pues bien, es verdad que debemos escuchar a la conciencia, pero tambi�n es cierto que esta pudiera transmitirnos un mensaje muy enga�oso. En efecto, la voz del �hombre que somos interiormente� tal vez nos desoriente (2 Cor. 4:16). Veamos el caso de Esteban, devoto cristiano �lleno de gracia y de poder�. Algunos jud�os se lo llevaron fuera de Jerusal�n para matarlo a pedradas. Junto a esos homicidas, �aproba[ndo] el asesinato�, se encontraba Saulo de Tarso, quien tiempo despu�s ser�a el ap�stol Pablo. Parece que aquellos jud�os estaban tan convencidos de estar haciendo lo correcto que no les molestaba para nada la conciencia. Y lo mismo debi� de ocurrir con Saulo, ya que m�s tarde estaba �respirando todav�a amenaza y asesinato contra los disc�pulos del Se�or�. Es obvio que se hab�a deformado la voz de su conciencia (Hech. 6:8; 7:57-60; 9:1). �Por qu�? Saulo seguramente estaba condicionado por el compa�erismo con jud�os que odiaban a Jes�s. w07 15/10 1:11, 12 Junio 9@Jehov� ciertamente salvar� las tiendas de Jud� primero (Zac. 12:7).@En el antiguo Israel, las tiendas eran parte del paisaje, pues las sol�an utilizar los pastores y los labradores. Ellos ser�an los primeros que necesitar�an protecci�n en caso de que una naci�n enemiga atacara la ciudad de Jerusal�n. La expresi�n �las tiendas de Jud� indica que el resto ungido de nuestro tiempo no est� morando en ciudades fortificadas. Por as� decirlo, moran en campo abierto, donde defienden sin temor los intereses del Reino mesi�nico. Jehov� de los ej�rcitos salvar� a �las tiendas de Jud� primero�, pues constituyen el blanco principal de los ataques de Satan�s. Verdaderamente, la historia prueba que Jehov� est� defendiendo a estos embajadores ungidos del Reino que moran en �tiendas� en campo abierto. Les impide que �tropiecen� en el sentido de que los hace fuertes y valientes como David, el rey guerrero (Zac. 12:8). w07 15/12 3:13, 14 Junio 10@Lev�ntate, cruza este Jord�n, t� y todo este pueblo, a la tierra que les voy a dar a ellos, a los hijos de Israel (Jos. 1:2).@Despu�s de cruzar el mar Rojo, los israelitas vagaron por un �desierto grande y terrible, lleno de serpientes y escorpiones venenosos; una tierra seca donde no hab�a agua� (Deu. 8:15, La Palabra de Dios para Todos). Durante los a�os que estuvieron en el desierto, Jehov� protegi� a su pueblo, tal como lo hab�a protegido del ej�rcito egipcio. �Y qu� sucedi� cuando los israelitas entraron en la Tierra Prometida? Aunque tuvieron que enfrentarse a los poderosos ej�rcitos cananeos, Jehov� le dijo a Josu�: �Nadie se plantar� con firmeza delante de ti en todos los d�as de tu vida. Tal como result� estar con Mois�s resultar� estar contigo. No te desamparar� ni te dejar� enteramente� (Jos. 1:5). Estas palabras de Jehov� tampoco fallaron. En unos seis a�os, Josu� derrot� a 31 reyes y conquist� gran parte de la Tierra
Prometida (Jos. 12:7-24). Sin el cuidado protector de Jehov�, aquello habr�a sido imposible. w07 1/11 1:8 Junio 11@La bendici�n de Jehov�... eso es lo que enriquece, y �l no a�ade dolor con ella (Pro. 10:22).@Una forma de cumplir con el prop�sito de Dios es emprendiendo el ministerio de tiempo completo. �Por qu� no lo intenta? Si lo hace, le aguardan incontables bendiciones. Si sus circunstancias no se lo permiten por el momento, quiz�s pueda hacer algo para cambiarlas. Ore a Dios como hizo Nehem�as cuando anhelaba emprender una importante misi�n: �Jehov�, por favor, [...] otorga �xito a tu siervo� (Neh. 1:11). Luego, con plena confianza en el �Oidor de la oraci�n�, act�e en armon�a con su petici�n (Sal. 65:2). Recuerde: si quiere que Jehov� bendiga sus esfuerzos por servirle m�s de lleno, usted tiene que haberse esforzado primero. Una vez que haya decidido emprender el ministerio de tiempo completo, no permita que nada lo detenga. Conforme vaya pasando el tiempo, ir� adquiriendo experiencia y se sentir� cada vez m�s feliz. �Qu� agradecido estar� entonces de haber servido a Jehov� y al pr�jimo y de haber vivido en total conformidad con el prop�sito de Dios! (Mat. 24:21; Rev. 7:14, 15.) w07 1/10 2:14, 15, 17 Junio 12@A los que son ricos en el presente sistema de cosas da �rdenes de que no sean altaneros, y de que cifren su esperanza, no en las riquezas inseguras, sino en Dios, que nos proporciona todas las cosas ricamente para que disfrutemos de ellas (1 Tim. 6:17).@Cifrar nuestra esperanza en las riquezas no es una buena idea, ya que estas son �inseguras�. El patriarca Job, por ejemplo, era muy rico. Pero cuando las desgracias le sobrevinieron s�bitamente, sus riquezas no le sirvieron de nada, pues lo perdi� todo de la noche a la ma�ana. M�s bien, fue su fuerte relaci�n con Dios lo que lo sostuvo a trav�s de todas sus pruebas y aflicciones (Job 1:1, 3, 20-22). Abrah�n, por su parte, no dej� que sus numerosos bienes le impidieran aceptar una dif�cil comisi�n de Jehov�. Y como recompensa, lleg� a ser �padre de una muchedumbre de naciones� (G�n. 12:1, 4; 17:4-6). Ambos hombres �como muchos otros� son ejemplos dignos de imitar. As� pues, seamos j�venes o mayores, todos debemos examinarnos para ver a qu� concedemos verdadera importancia en nuestra vida y en qu� ciframos nuestra esperanza (Efe. 5:10; Fili. 1:10). w07 1/8 1:16, 17 Junio 13@Hay nuevos cielos y una nueva tierra que esperamos seg�n su promesa, y en estos la justicia habr� de morar (2 Ped. 3:13).@Los �nuevos cielos� (el Reino celestial de Dios en manos de Cristo) ya han comenzado a gobernar. Y en estos �ltimos d�as se est� reuniendo a las personas que forman el n�cleo de la �nueva tierra� (la nueva sociedad terrestre de personas justas). Son ya casi siete millones, repartidas en 100.000 congregaciones de unos 235 pa�ses y territorios. Todas ellas han aprendido los caminos justos de Jehov� y, como resultado, disfrutan de una unidad mundial que se basa en el amor cristiano. Su unidad es la m�s notable y duradera de la historia de la humanidad, y supera a cualquier v�nculo que pueda unir a los s�bditos de Satan�s. Tal amor y unidad es un anticipo de los d�as felices que est�n por venir en el nuevo mundo de Dios, un mundo que ser� gobernado con rectitud y justicia (Isa. 2:2-4; Juan 13:34, 35; Col. 3:14). w07 15/8 1:15, 16 Junio 14@Estos hombres que han trastornado la tierra habitada est�n presentes aqu� tambi�n (Hech. 17:6).@Los misioneros del siglo primero ayudaron a muchas personas a abrazar el cristianismo. Por ejemplo, Felipe fue a Samaria y all� encontr� muchedumbres dispuestas a escucharlo (Hech. 8:5-8). Pablo viaj� largas distancias con diversos compa�eros para llevar el mensaje cristiano a Chipre, ciertas regiones de Asia Menor, Macedonia, Grecia e Italia, y el resultado fue que multitudes de jud�os y de griegos se hicieron creyentes en varias de las ciudades donde predic� (Hech. 14:1; 16:5; 17:4). Tito cumpli� con una asignaci�n de servicio en Creta (Tito 1:5). Pedro dio testimonio en Babilonia, y para cuando escribi� su primera carta (entre los a�os 62 y 64), la obra cristiana ya estaba difundida por el Ponto, Galacia, Capadocia, el distrito de Asia y Bitinia (1 Ped. 1:1; 5:13). �Qu� tiempos tan emocionantes! Aquellos cristianos predicaron con tanto celo que sus enemigos dijeron que hab�an �trastornado la tierra habitada�
(Hech. 28:22). w08 15/1 3:2 Junio 15@Fara�n [...] ciertamente correr� tras ellos (�xo. 14:4).@El fara�n, convencido de que ha cometido un error dejando marchar a los israelitas, sale tras ellos en feroz persecuci�n. Al divisar al ej�rcito egipcio, los israelitas se aterrorizan. Mois�s les dice: �No tengan miedo. Est�n firmes y vean la salvaci�n de Jehov�, que �l ejecutar� para ustedes hoy� (�xo. 14:5-14). Al mandato de Jehov�, Mois�s extiende la mano. El relato prosigue: �Jehov� empez� a hacer que el mar se retirara por un fuerte viento del este durante toda la noche [...]. Por fin los hijos de Israel fueron por en medio del mar sobre tierra seca�. Los perseguidores se lanzan tras ellos, pero Jehov� siembra la confusi�n en el campamento egipcio. Luego le dice a Mois�s: �Extiende tu mano sobre el mar, para que las aguas se vuelvan sobre los egipcios�. Cuando esto sucede, la destrucci�n es tan completa que ni un solo soldado queda con vida (�xo. 14:21-28; Sal. 136:15). w07 15/12 2:11, 12 Junio 16@�Eso no, por favor, Jehov�! (G�n. 19:18.)@En ocasiones, los padres deciden que la familia entera llegue a un acuerdo sobre algunas normas que se seguir�n en el hogar. Si se les permite intervenir en el di�logo, es muy probable que los j�venes est�n m�s dispuestos a obedecer. Por ejemplo, si se ve la necesidad de fijar la hora de volver a casa, una opci�n es que la determinen directamente los padres. Tambi�n es posible que los padres acepten la hora que les propongan sus hijos, siempre y cuando no haya principios b�blicos en juego. Ahora bien, �no ser�a eso desentenderse y no ejercer la autoridad parental? Repasemos la forma tan amorosa en la que Jehov� ejerci� su autoridad en el caso de Lot, su esposa y sus hijas (G�n. 19:17-22). Cuando Lot pidi� huir a una ciudad cercana, Jehov� lo escuch� y decidi� mostrarle consideraci�n. Padres, cuando vayan a establecer reglas para la familia, �habr� ocasiones en las que puedan tener en cuenta las inquietudes de sus hijos? w07 1/9 1:10, 11 Junio 17@Tus propios o�dos oir�n una palabra detr�s de ti que diga: �Este es el camino. Anden en �l� (Isa. 30:21).@Jehov� es nuestro Magn�fico Instructor (Isa. 30:20). Mediante la parte visible de su organizaci�n, instruye a sus siervos terrestres para que sepan c�mo cumplir su comisi�n de predicar. Por ejemplo, las congregaciones celebran semanalmente la Escuela del Ministerio Teocr�tico, la cual ha sido concebida para ayudar a los matriculados a convertirse en proclamadores eficaces del Reino de Dios. El principal libro de texto de dicha escuela es la Biblia. La Palabra inspirada de Dios no solo nos indica qu� debemos ense�ar, sino qu� m�todos de ense�anza son m�s efectivos. La Escuela del Ministerio Teocr�tico nos recuerda vez tras vez que para ser mejores maestros tenemos que basar nuestra ense�anza en la Biblia, utilizar h�bilmente las preguntas, ense�ar con sencillez e interesarnos sinceramente en los dem�s. w08 15/1 2:4 Junio 18@Pondr� enemistad entre ti y la mujer, y entre tu descendencia y la descendencia de ella. �l te magullar� en la cabeza y t� le magullar�s en el tal�n (G�n. 3:15).@Con las palabras del texto de hoy, Jehov� indic� su intenci�n de nombrar a una �descendencia� que aplastar�a a Satan�s y a sus aliados y que probar�a que �l tiene todo el derecho a gobernar (Sal. 2:7-9; 110:1, 2). Aquella descendencia result� ser Jesucristo y un grupo de disc�pulos que gobernar�an con �l. Todos ellos juntos forman el Reino mesi�nico de Dios (Dan. 7:13, 14, 27; Mat. 19:28; Luc. 12:32; 22:28-30). Sin embargo, nada de esto se supo desde el principio. De hecho, el ap�stol Pablo dijo que el desarrollo de aquella primera profec�a fue un �secreto sagrado [...] guardado en silencio por tiempos de larga duraci�n� (Rom. 16:25). Durante siglos, hombres y mujeres de fe esperaron con anhelo que se revelara ese �secreto sagrado� y que, de acuerdo con esa primera profec�a, se vindicara la soberan�a de Jehov� (Rom. 8:19-21). w07 1/12 1:9, 10 Junio 19@El que ama el dinero nunca se satisface con lo que tiene (Ecl. 5:10, La Palabra de Dios para Todos)@�Es posible ir tras metas materialistas y al mismo tiempo servir a Dios de todo coraz�n? No, no es posible. Jes�s explic�: �Nadie puede servir como esclavo a dos amos; porque u odiar� al uno y amar� al otro, o se apegar� al uno y despreciar� al otro. No pueden ustedes servir como esclavos a Dios y a las Riquezas�. De ah� que exhortara a sus seguidores a que en vez de
acumular bienes materiales en la Tierra, acumularan �tesoros en el cielo�. En otras palabras, deb�an hacerse un buen nombre ante Dios. Jes�s les dio esta garant�a: �Su Padre sabe qu� cosas necesitan ustedes hasta antes que se las pidan� (Mat. 6:8, 19-25). Pablo dijo a Timoteo: �A los que son ricos [...] da �rdenes de que [...] cifren su esperanza, no en las riquezas inseguras, sino en Dios, que nos proporciona todas las cosas ricamente para que disfrutemos de ellas; [...] que sean liberales, listos para compartir, atesorando para s� con seguridad un fundamento excelente para el futuro, para que logren asirse firmemente de la vida que realmente lo es�, o �la vida de verdad�, como dice el Nuevo Testamento de Jos� Mar�a Valverde (1 Tim. 6:17-19). w07 1/10 1:6, 7 Junio 20@El dios de este sistema de cosas ha cegado las mentes de los incr�dulos (2 Cor. 4:4).@No deber�amos concluir que �las cosas profundas� tienen que ser cosas dif�ciles de entender. Es cierto que este conocimiento est� oculto para la mayor�a de las personas. Pero no se debe a que la sabidur�a de Dios sea muy dif�cil de adquirir, sino a que la gente �enga�ada por Satan�s� rechaza la ayuda que Jehov� suministra mediante su organizaci�n (1 Cor. 2:10; 2 Cor. 4:3). El cap�tulo 3 de la carta de Pablo a los Efesios nos muestra que �las cosas profundas de Dios� abarcan muchas verdades b�blicas bien conocidas por la mayor�a de los siervos de Jehov�, como la identidad de la Descendencia prometida, el Reino mesi�nico y la esperanza celestial de un grupo de personas escogidas de entre la humanidad. Adem�s, Pablo mencion� su comisi�n de �hacer ver a los hombres c�mo se administra el secreto sagrado que desde el pasado indefinido ha estado escondido en Dios� (Efe. 3:5-9). w07 1/11 2:7, 8 Junio 21@Present[en] una defensa ante todo el que les exija raz�n de la esperanza que hay en ustedes (1 Ped. 3:15).@Para determinar las creencias religiosas de una persona, pudi�ramos preguntarle: ��Qu� le parece a usted? �Habr� alguien que nos escuche cuando oramos?�. La respuesta que nos d� tal vez revele detalles significativos sobre su manera de pensar y su formaci�n religiosa. Si tiene inclinaciones espirituales, quiz�s consigamos profundizar m�s pregunt�ndole: ��Habr� oraciones que Dios rechace?�. Esta pregunta, u otra por el estilo, seguramente dar� pie a una conversaci�n distendida. Si resulta adecuado incluir alg�n comentario de la Biblia, debemos hacerlo con delicadeza, sin atacar sus creencias. Si la persona disfruta conversando con nosotros, es m�s probable que quiera volver a recibirnos. Pero �y si nos hace una pregunta que no sabemos responder? Lo mejor es quedar en regresar m�s tarde, cuando hayamos investigado el asunto y estemos listos para dar �raz�n de [nuestra] esperanza [...] con genio apacible y profundo respeto� (1 Ped. 3:15). w07 15/11 2:10 Junio 22@Se les suministrar� ricamente la entrada en el reino eterno de nuestro Se�or y Salvador Jesucristo (2 Ped. 1:11).@Los cristianos ungidos de nuestros d�as han sido considerados dignos de recibir un reino, por lo que esperan con anhelo reinar sobre la Tierra durante el D�a del Juicio. Y es esta esperanza lo que los impulsa a responder a la exhortaci�n que sus hermanos del siglo primero recibieron de Pedro: �Hagan lo sumo por hacer seguros para s� su llamamiento y selecci�n; porque si siguen haciendo estas cosas no fracasar�n nunca� (2 Ped. 1:10). Los miembros de la gran muchedumbre se alegran mucho de que sus hermanos ungidos tengan esa esperanza y est�n decididos a darles todo su apoyo. Como amigos de Dios, desean hacer lo m�ximo posible en su servicio hoy d�a. Y durante el D�a del Juicio, en el que Jes�s los guiar� a fuentes de aguas de vida, apoyar�n con entusiasmo y de todo coraz�n las disposiciones de Jehov�. �Qu� felices se sentir�n cuando finalmente se les considere dignos de servir a Jehov� en la Tierra por toda la eternidad! (Rom. 8:20, 21; Rev. 21:1-7.) w08 15/1 5:17, 18 Junio 23@Mantengan abiertos los ojos y gu�rdense de toda suerte de codicia, porque hasta cuando uno tiene en abundancia, su vida no resulta de las cosas que posee (Luc. 12:15).@Desde luego, fue muy apropiado que Jes�s iniciara esta advertencia contra la codicia con las palabras �Mantengan abiertos los ojos�. �Por qu�? Porque a las personas les resulta muy f�cil reconocer la codicia en los dem�s, pero raras veces la reconocen en s� mismas. El ap�stol Pablo indica, de todas formas, que �el amor al dinero es ra�z de toda suerte de cosas perjudiciales� (1 Tim. 6:9, 10). Y
el disc�pulo Santiago se�ala que un deseo impropio, �cuando se ha hecho fecundo, da a luz el pecado� (Sant. 1:15). De ah� que, siguiendo la recomendaci�n de Jes�s, debamos �mantener abiertos los ojos�. Ahora bien, el objetivo no es descubrir si los dem�s encajan en la descripci�n del codicioso, sino hacernos un examen de conciencia a fin de averiguar cu�les son los verdaderos deseos de nuestro coraz�n. De esta forma �nos guardaremos de toda suerte de codicia�. w07 1/8 1:10 Junio 24@Constituir� a tu descendencia como las part�culas de polvo de la tierra (G�n. 13:16).@A Abrah�n se le prometi� que su descendencia se multiplicar�a y ser�a �como las estrellas de los cielos� (G�n. 22:17). Dicho de otro modo, en tiempos de Abrah�n ning�n ser humano ten�a forma de saber exactamente cu�ntas personas compondr�an dicha descendencia espiritual. No obstante, con el tiempo se revel� la cantidad precisa: 144.000, adem�s de Jes�s (Rev. 7:4; 14:1). La Palabra de Dios dice: �[Abrah�n] puso fe en Jehov�; y �l procedi� a cont�rselo por justicia� (G�n. 15:5, 6). Es verdad que ning�n ser humano es totalmente justo (Sant. 3:2). Pero como Abrah�n ten�a tanta fe, Jehov� lo consider� justo e incluso dijo que era su amigo (Isa. 41:8). Quienes componen junto con Jes�s la descendencia espiritual de Abrah�n tambi�n han sido declarados justos, y esto les reporta bendiciones a�n mayores que las que recibi� Abrah�n. w08 15/1 4:6, 7 Junio 25@Observa, oh hijo m�o, el mandamiento de tu padre, y no abandones la ley de tu madre (Pro. 6:20).@Es cierto que los hijos deben obedecer a los padres. Sin embargo, para ayudarles a razonar por s� solos es muy �til la buena comunicaci�n. Vincent, padre de cuatro hijas, comenta: �Muchas veces analiz�bamos a fondo los pros y los contras de una situaci�n; de este modo nuestras hijas pod�an ver por ellas mismas lo que daba mejores resultados. As� aprendieron a pensar bien las cosas� (Pro. 1:1-4). Como es obvio, no hay nadie que pueda seguir a la perfecci�n los consejos de la Biblia sobre la crianza de los hijos. Pero ustedes, padres, pueden tener la seguridad de que sus hijos apreciar�n mucho que se preocupen por educarlos con paciencia y aguante, as� como con bondad y amor. Sin duda alguna, Jehov� los bendecir� por haberse esforzado tanto (Pro. 3:33). Ahora bien, lo que m�s quieren los padres cristianos es que sus hijos lleguen a amar a Jehov� tanto como ellos. w07 1/9 1:16, 17 Junio 26@Y mir�ndolo, Jes�s sinti� amor por �l (Mar. 10:21).@Tanto se interesaba Jes�s en las personas que llegaba a privarse del descanso necesario con tal de ense�arles las buenas nuevas (Mar. 6:30-34). Y fueron precisamente ese inter�s y ese amor tan profundos los que hicieron de �l el mejor maestro a la hora de atraer a la gente a la adoraci�n verdadera. El ap�stol Pablo tambi�n se interesaba profundamente por la gente a la que predicaba. Por ejemplo, a las personas que hab�an abrazado el cristianismo en Tesal�nica les dijo: �Teni�ndoles tierno cari�o, nos fue de mucho agrado impartirles, no solo las buenas nuevas de Dios, sino tambi�n nuestras propias almas, porque ustedes llegaron a sernos amados�. El resultado del inter�s y el cari�o de Pablo fue que algunos tesalonicenses �se volvieron de sus �dolos [...] para servir como esclavos [al] Dios vivo� (1 Tes. 1:9; 2:8). Si nosotros nos interesamos de verdad en los dem�s, tal como lo hicieron Jes�s y Pablo, puede que tambi�n tengamos la satisfacci�n de ver c�mo las buenas nuevas tocan el coraz�n de los que est�n �correctamente dispuestos para vida eterna� (Hech. 13:48). w07 15/11 1:8, 9 Junio 27@Sigan andando por esp�ritu (G�l. 5:16).@Si tenemos siempre presente a Jehov�, �l nos guiar� con su esp�ritu santo. El esp�ritu santo de Jehov� desempe�� un papel fundamental en la construcci�n del tabern�culo en el desierto. Jehov� nombr� a Bezalel artesano y constructor principal, y prometi� llenarlo �del esp�ritu de Dios en sabidur�a y en entendimiento y en conocimiento y en habilidad para toda clase de artesan�a� (�xo. 31:3-5). Junto con otros hombres �sabios de coraz�n�, Bezalel y su asistente, Oholiab, realizaron esta extraordinaria obra. Adem�s, el esp�ritu de Jehov� impuls� a �todo el de coraz�n dispuesto� a aportar generosas contribuciones (�xo. 31:6; 35:5, 30-34). Ese mismo esp�ritu impulsa hoy a los siervos de Dios a hacer todo lo posible por el Reino (Mat. 6:33). Independientemente de las habilidades que tengamos, necesitamos pedir esp�ritu santo y seguir su gu�a, pues solo de ese modo lograremos cumplir con la tarea que
Jehov� nos ha encargado (Luc. 11:13). w08 15/2 1:16, 17 Junio 28@No ten�an esperanza (Efe. 2:12).@La inmensa mayor�a de las personas ignora el verdadero significado de los sucesos mundiales. Cuando sufren la p�rdida de un ser querido u otras desgracias, quedan destrozadas. Viven sin esperanza, pues no saben exactamente por qu� suceden estas cosas ni cu�l es la soluci�n. �Babilonia la Grande�, el imperio mundial de la religi�n falsa, no ha sido de mucho consuelo. Al contrario, con �el vino de su fornicaci�n� ha dejado a la humanidad tambaleante, confundida espiritualmente. Como si de una prostituta se tratara, ha seducido y controlado a �los reyes de la tierra�. Y adem�s se ha valido de doctrinas falsas y pr�cticas espiritistas para conseguir que las masas se mantengan sumisas a sus amos pol�ticos. De este modo, la religi�n falsa ha obtenido gran poder e influencia, pero a costa de rechazar por completo la verdad religiosa (Rev. 17:1, 2, 5; 18:23). w08 15/1 1:5, 6 Junio 29@Todas las cosas que fueron escritas en tiempo pasado fueron escritas para nuestra instrucci�n (Rom. 15:4).@En la Biblia encontramos ejemplos de quienes amoldaron su vida al prop�sito de Dios, y de quienes no lo hicieron. Tales ejemplos son �tiles para personas de todas las edades, culturas y circunstancias (1 Cor. 10:6, 11). Nemrod edific� grandes ciudades, pero estaba en oposici�n a Jehov� (G�n. 10:8-12). No obstante, hubo muchos otros que s� vivieron en conformidad con el prop�sito de Dios. Por ejemplo, Mois�s no permiti� que su posici�n como miembro de la nobleza egipcia fuera lo primordial en su vida. Al contrario, �l consideraba las responsabilidades que Dios le hab�a asignado �como riqueza m�s grande que los tesoros de Egipto� (Heb. 11:26). El m�dico Lucas probablemente ayud� a Pablo y a otras personas a combatir sus problemas de salud, pero la labor m�s importante de su vida fue la de evangelizador y escritor b�blico. Y a Pablo no se le recuerda como experto en la Ley, sino como misionero, �ap�stol a las naciones� (Rom. 11:13). w07 1/10 1:16 Junio 30@�No deber�a yo sentir l�stima por N�nive la gran ciudad, en la cual existen m�s de ciento veinte mil hombres? (Jon. 4:11.)@Residir en una regi�n puede llevarnos a hablar con cierto acento o emplear expresiones caracter�sticas de la zona (Mat. 26:73). De igual modo, la exposici�n a un determinado ambiente y cultura suele dejar huella en la conciencia de las personas. Sin duda, esto es lo que tuvo que haberles ocurrido a los asirios. Aquel antiguo pueblo era conocido por su esp�ritu militarista, como se ve en numerosos relieves de piedra donde aparecen torturando a los cautivos (Nah. 2:11, 12; 3:1). La Biblia indica que, en tiempos de Jon�s, los habitantes de la ciudad asiria de N�nive desconoc�an �la diferencia entre su mano derecha y su izquierda�. En otras palabras, carec�an de un buen criterio para juzgar lo que estaba bien o mal a los ojos de Dios. �Cu�nto deb�a de afectar este ambiente a la conciencia de los ninivitas desde su m�s tierna infancia! (Jon. 3:4, 5; 4:11.) Hoy, igualmente, la actitud de quienes nos rodean tal vez influya en nuestra conciencia. w07 15/10 1:13 Julio 1@Pondr� enemistad entre ti y la mujer (G�n. 3:15).@Dios hab�a prometido que la �mujer� �la cual representa a la parte celestial de su organizaci�n� tendr�a descendencia y que esta magullar�a la cabeza de la serpiente. Sin embargo, pasaron miles de a�os y la �mujer� de Dios segu�a sin tener una descendencia capaz de acabar con Satan�s y sus obras. Por eso, el profeta Isa�as la describi� como una mujer �est�ril� y �herida en esp�ritu� (Isa. 54:1, 5, 6). Llegado el momento, Jes�s naci� en Bel�n. Con todo, fue despu�s de su bautismo �tras ser ungido con esp�ritu santo y engendrado como hijo espiritual de Dios� cuando Jehov� anunci�: �Este es mi Hijo� (Mat. 3:17; Juan 3:3). Por fin hab�a aparecido la parte principal de la �descendencia� de la mujer. Posteriormente tambi�n se ungi� y se engendr� por esp�ritu a otros disc�pulos de Jes�s. Despu�s de tanto tiempo angustiada por ser est�ril, la �mujer� de Jehov� al fin pod�a �clama[r] gozosamente� (Isa. 54:1; G�l. 3:29). w07 1/11 2:10, 11 Julio 2@�Qu� te parece, Sim�n? �De qui�nes reciben los reyes de la tierra contribuciones o la capitaci�n? �De sus hijos, o de los extra�os? (Mat. 17:25.)@En regiones del mundo tan distintas como �frica, Europa oriental y Latinoam�rica se est� hablando mucho de la presencia cada vez mayor de nuevas religiones. En tales
lugares pudieran comenzarse muchas conversaciones diciendo: �Me llama la atenci�n que existan tantas religiones. Al mismo tiempo, tengo la esperanza de que la religi�n verdadera pronto unir� a la gente de todas las naciones. �Le atrae esa idea?�. Al mencionar aspectos de nuestra esperanza que despierten la curiosidad de las personas, quiz�s logremos que expresen su parecer. Tambi�n ser� m�s f�cil que nos contesten si les hacemos preguntas que solo admitan dos respuestas. Y una vez que respondan, contestemos nosotros la pregunta con un vers�culo o dos de la Biblia (Isa. 11:9; Sof. 3:9). Si los escuchamos con inter�s y nos fijamos en su reacci�n, podremos determinar el tema que trataremos en la pr�xima visita. w07 15/11 2:16 Julio 3@He puesto a Jehov� enfrente de m� constantemente. Porque �l est� a mi diestra, no se me har� tambalear (Sal. 16:8).@Las Escrituras mencionan a muchas personas que participaron en el cumplimiento del prop�sito divino. Por supuesto, sus historias no se incluyeron en la Biblia tan solo para entretenernos, sino para acercarnos m�s a Dios (Sant. 4:8). Todos tenemos mucho que aprender de los personajes m�s conocidos de la Biblia, como Abrah�n, Sara, Mois�s, Rut, David, Ester y el ap�stol Pablo. No obstante, hay otros personajes menos conocidos de los que tambi�n podemos aprender mucho. Si meditamos en lo que la Biblia relata sobre ellos, nos sentiremos impulsados a actuar como el salmista que escribi� las palabras del texto de hoy. Ahora bien, �c�mo hemos de entender estas palabras? En el campo de batalla, el soldado por lo general portaba la espada con la mano derecha y el escudo con la izquierda, de modo que dejaba descubierta la diestra, o costado derecho. Pero si un compa�ero le cubr�a ese lado, quedaba protegido. De la misma manera nos proteger� Jehov� si lo tomamos en cuenta y le obedecemos. w08 15/2 1:1-3 Julio 4@Jehov� es el que marcha delante de ti. �l mismo continuar� contigo. [...] No tengas miedo ni te aterrorices (Deu. 31:8).@Si somos humildes al andar en los caminos de Jehov�, �l nos dar� las fuerzas y el valor que necesitamos (Deu. 31:6, 7, 23). Enoc, el s�ptimo en la l�nea geneal�gica de Ad�n, anduvo valientemente con Dios y se comport� con rectitud en medio de sus malvados contempor�neos (G�n. 5:21-24). Jehov� le dio fuerzas para declarar un en�rgico mensaje de juicio que condenaba sus perversas palabras y acciones (Jud. 14, 15). �Tenemos nosotros el mismo valor para proclamar los juicios de Dios? Aquella sentencia divina contra la gente malvada se cumpli� cuando lleg� el Diluvio. De ah� que el mensaje prof�tico de Enoc nos aliente hoy d�a, pues la sociedad malvada que nos rodea tambi�n ser� destruida en breve por mir�adas de santos �ngeles (Rev. 16:14-16; 19:11-16). En respuesta a nuestras oraciones, Jehov� nos dar� valor para proclamar sus mensajes, tanto los de condena como los de esperanza en el Reino y sus bendiciones. w08 15/2 2:11, 12 Julio 5@La palabra de Dios es viva, y ejerce poder (Heb. 4:12).@Jes�s, el maestro m�s grande que ha pisado la Tierra, siempre bas� sus ense�anzas en las Escrituras (Mat. 21:13; Juan 6:45; 8:17). En vez de ense�ar sus propias ideas, habl� en nombre de Aquel que lo hab�a enviado (Juan 7:16-18). Y ese es el ejemplo que imitamos. De modo que todo lo que digamos al predicar de casa en casa o al dirigir estudios b�blicos debe centrarse en la Palabra de Dios (2 Tim. 3:16, 17). Ning�n razonamiento nuestro �por agudo que sea� podr� jam�s igualar la efectividad y el poder de las Escrituras inspiradas. No olvidemos que la Biblia tiene gran autoridad. Por tanto, sin importar el asunto que estemos tratando, la mejor manera de ayudar al estudiante a comprenderlo es pedirle que lea lo que dicen las Escrituras. Desde luego, lo anterior no significa que el maestro cristiano no necesite prepararse para dirigir un estudio b�blico. Al contrario, debe elegir de antemano y con mucho cuidado los vers�culos que �l mismo o su estudiante leer�n directamente de la Biblia. w08 15/1 2:5, 6 Julio 6@El hombre es declarado justo por fe (Rom. 3:28).@Los cristianos ungidos son declarados justos porque ejercen fe en el sacrificio redentor de Jes�s (Rom. 3:24). A los ojos de Jehov� quedan absueltos de su pecado, por lo que pueden ser ungidos con esp�ritu santo para ser hijos espirituales de Dios y hermanos de Jesucristo (Juan 1:12, 13). Adem�s, llegan a formar parte del nuevo pacto y
componen una nueva naci�n, �el Israel de Dios� (G�l. 6:16; Luc. 22:20). Como consecuencia de todas estas cosas que Dios hace por ellos, los cristianos ungidos no tienen la esperanza de vivir para siempre en la Tierra. Sacrifican esa posibilidad por el gozo indescriptible de colaborar con Jes�s durante el D�a del Juicio y gobernar con �l en los cielos (Rom. 8:17). En el Pentecost�s del a�o 33, unos ciento veinte hombres y mujeres fieles recibieron la oportunidad de formar parte del grupo que gobernar� con Jes�s durante el D�a del Juicio. Todos los disc�pulos reunidos en aquella ocasi�n fueron bautizados con esp�ritu santo y as� se convirtieron en los primeros cristianos ungidos. w08 15/1 4:8, 9 Julio 7@Est�n firmes y vean la salvaci�n de Jehov� (�xo. 14:13).@�Qu� aprendemos del �xodo de Israel? Que debemos obedecer a Jehov� sin importar lo que nos pida. Los israelitas obedecieron sus instrucciones preparando todos los detalles para la Pascua y qued�ndose dentro de sus casas la noche del 14 de nis�n. Y cuando por fin salieron de Egipto, lo hicieron �en orden de batalla� (�xo. 13:18). De igual manera, hoy es de suma importancia que sigamos las instrucciones que recibimos mediante �el esclavo fiel y discreto� (Mat. 24:45). Tenemos que prestar mucha atenci�n a la �palabra� de Dios que o�mos detr�s de nosotros: ��Este es el camino. Anden en �l�, en caso de que ustedes se fueran a la derecha o en caso de que se fueran a la izquierda� (Isa. 30:21). Conforme nos acercamos a la gran tribulaci�n, es muy posible que recibamos algunas instrucciones concretas. Solo tendremos un viaje seguro a trav�s de esos d�as de angustia si avanzamos al mismo paso que los dem�s siervos leales de Jehov�. w07 15/12 2:14, 15 Julio 8@Mediante tu descendencia ciertamente se bendecir�n todas las naciones de la tierra (G�n. 22:18).@Poco a poco, Jehov� fue revelando detalles del �secreto sagrado del reino de Dios� a diversas personas (Mar. 4:11). Una de ellas fue Abrah�n, a quien se le llam� �amigo de Jehov� (Sant. 2:23). Dios le prometi� que lo convertir�a en �una naci�n grande�, y m�s adelante dijo las palabras del texto de hoy (G�n. 12:2, 3; 17:6; 22:17). Mediante Jacob, un nieto de Abrah�n, Jehov� predijo: �El cetro no se apartar� de Jud�, ni el bast�n de comandante de entre sus pies, hasta que venga Sil�; y a �l pertenecer� la obediencia de los pueblos� (G�n. 49:10). Estas palabras predec�an la llegada de alguien llamado Sil�, que significa �Aquel de Quien Es� o �Aquel a Quien Pertenece�. Solo �l tendr�a el derecho de recibir �el cetro� y �el bast�n de comandante� (s�mbolos de soberan�a y de poder) para gobernar a todos �los pueblos�. w07 1/12 1:11, 13 Julio 9@�Cu�n dif�cil les ser� a los que tienen dinero entrar en el reino de Dios! (Mar. 10:23.)@Jes�s recomend� a sus seguidores un estilo de vida sencillo que les permitir�a concentrarse en la formaci�n de disc�pulos (Mat. 6:22-24, 33). Ahora bien, �por qu� se necesita esp�ritu de sacrificio para hacer disc�pulos? Porque ense�ar todas las cosas que Jes�s mand� exige mucho de uno. Los buenos formadores de disc�pulos se esfuerzan por dar clases b�blicas semana tras semana a las personas interesadas en el mensaje. Algunos hasta deciden trabajar menos horas para tener m�s posibilidades de encontrar a tales personas. Miles de cristianos aprenden otro idioma para predicar a determinados grupos �tnicos de su zona. Incluso hay quienes dejan su hogar y se mudan a otra regi�n o pa�s a fin de aumentar su participaci�n en la siega (Mat. 9:37, 38). Todo lo anterior requiere esp�ritu de sacrificio. w07 15/11 1:10, 11 Julio 10@El alimento s�lido pertenece a personas maduras, a los que mediante el uso tienen sus facultades perceptivas entrenadas para distinguir tanto lo correcto como lo incorrecto (Heb. 5:14).@Cuando entendemos mejor alguna cuesti�n b�blica, nos sentimos muy felices, pues vemos que nuestra fe se fortalece. Por esa raz�n, estudiar la Biblia �y no solo leerla� puede llegar a ser todo un placer. As� pues, al leer las publicaciones cristianas, h�gase preguntas como las siguientes: ��Aporta esta explicaci�n algo nuevo a lo que yo ya sab�a? �Puedo pensar en otros textos b�blicos o argumentos que apoyen las conclusiones de este art�culo?�. Si le surge alguna pregunta que requiera buscar m�s informaci�n, ap�ntela y d�jela pendiente para un trabajo de investigaci�n futuro. F�jese bien en los argumentos b�blicos empleados para llegar a las conclusiones que se presentan. As� entrenar� sus �facultades perceptivas�. w07 1/11 2:14, 15
Julio 11@Jes�s sinti� amor por �l (Mar. 10:21).@Jes�s imit� a su Padre y mostr� cualidades como la humildad y el amor. A fin de cumplir con la comisi�n de venir a la Tierra, Jes�s �se despoj� a s� mismo y tom� la forma de un esclavo y lleg� a estar en la semejanza de los hombres� (Fili. 2:7). Esta fue una muestra de gran humildad. Adem�s, nunca menospreci� a las personas ni les exigi� de manera arrogante que le escucharan porque �l hab�a venido del cielo. A diferencia de los mes�as falsos, no andaba pregonando a los cuatro vientos que �l era el Mes�as. Jes�s tambi�n mostr� amor, uno de los rasgos m�s sobresalientes de su Padre celestial (1 Juan 4:8). Era esa cualidad la que lo mov�a a ense�ar a la gente. Pensemos en el caso de cierto gobernante joven que se le acerc�. Jes�s �sinti� amor por �l� y quiso ayudarlo, aunque finalmente el joven no estuvo dispuesto a deshacerse de sus bienes para seguirlo. w08 15/2 3:17-19 Julio 12@El que ejerce fe en el Hijo tiene vida eterna (Juan 3:36).@Los cristianos del siglo primero sab�an que �Dios no es parcial, sino que, en toda naci�n, el que le teme y obra justicia le es acepto� (Hech. 10:34, 35). Cualquier persona puede disfrutar de una buena relaci�n con Jehov� siempre y cuando ejerza fe en el sacrificio redentor de Jes�s (Juan 3:16). En efecto, la voluntad divina es que �hombres de toda clase se salven y lleguen a un conocimiento exacto de la verdad� (1 Tim. 2:3, 4). No estar�a bien que los proclamadores de las buenas nuevas prejuzg�ramos a la gente por su raza, apariencia, religi�n, posici�n social o cualquier otra raz�n. Pensemos en lo siguiente: �verdad que estamos agradecidos de que la persona que nos habl� por primera vez de las verdades b�blicas no se dejara llevar por ning�n prejuicio? As� pues, �por qu� negarle a la gente la oportunidad de escuchar un mensaje que pudiera salvarle la vida? (Mat. 7:12.) w08 15/1 3:5, 6 Julio 13@Hablando la verdad, por el amor crezcamos en todas las cosas en aquel que es la cabeza, Cristo (Efe. 4:15).@En la mayor�a de las congregaciones encontramos ejemplos de todas las fases del desarrollo cristiano. As�, hallamos bastantes personas que son nuevas en la fe. Su conciencia tal vez se queda muda ante algunos asuntos, mientras que ante otros grita. Estos hermanos tienen que afinar su voz interior de acuerdo con la gu�a de Jehov� y aprender a responder mejor a los dictados de su conciencia, y para ello seguramente necesitan tiempo y ayuda (Efe. 4:14). Felizmente, en las congregaciones tambi�n suele haber muchos hermanos con conocimiento profundo, experiencia al aplicar los principios b�blicos y una conciencia en sinton�a con la voluntad de Dios. �Qu� alegr�a poder estar con esos hermanos �limpios� que ven como moral y espiritualmente �limpias� todas las cosas que el Se�or acepta! (Tito 1:15; Efe. 5:10.) Pong�monos todos la meta de alcanzar ese nivel de desarrollo espiritual y de mantener una buena conciencia, en armon�a con el conocimiento exacto de la verdad y la devoci�n a Dios (Tito 1:1). w07 15/10 2:18 Julio 14@[Jehov�] mismo te librar� de la trampa del pajarero (Sal. 91:3).@Todos los cristianos verdaderos nos enfrentamos a un temible enemigo de inteligencia y astucia sobrehumanas. En el texto de hoy se le llama �el pajarero�. �De qui�n se trata? Este poderoso enemigo no es otro que Satan�s. Al igual que un astuto cazador de p�jaros, el Diablo trata de enga�ar y entrampar a los siervos de Jehov�. El pajarero de tiempos b�blicos ten�a que preparar trampas eficaces si quer�a atrapar aves. Pues bien, al comparar a Satan�s con un pajarero, la Biblia nos ayuda a comprender mejor sus m�todos. El Diablo nos estudia a cada uno por separado. Primero se fija en c�mo somos y en qu� h�bitos tenemos y, despu�s, nos tiende sutiles trampas con el objetivo de capturarnos vivos (2 Tim. 2:26). Caer en sus trampas puede llevarnos a la ruina espiritual y, finalmente, a la destrucci�n. De modo que si queremos escapar de este �pajarero�, nos conviene conocer sus trampas. w07 1/10 3:1, 2 Julio 15@El que muestra favor al de condici�n humilde le presta a Jehov�, y �l le pagar� su trato (Pro. 19:17).@A Jehov� le agrada mucho que lo imitemos a �l y a su Hijo tratando con misericordia a nuestro pr�jimo (1 Cor. 11:1). Haciendo esto, tambi�n animaremos a los dem�s a ser misericordiosos, pues la misericordia genera misericordia (Luc. 6:38). La misericordia engloba otras muchas virtudes, como el amor, la generosidad y la bondad. Recordemos que son los sentimientos de
compasi�n, ternura y empat�a los que motivan las obras de misericordia. En el caso de Jehov�, �l demuestra misericordia siendo tardo para la c�lera, teniendo paciencia con los pecadores y d�ndoles tiempo para arrepentirse, sin que esto suponga nunca violar sus normas de justicia (2 Ped. 3:9, 10). Como vemos, la misericordia y la gran paciencia van de la mano. En vista de las cualidades que engloba la misericordia �entre ellas algunos aspectos del fruto del esp�ritu�, una buena manera de cultivar todas estas valiosas cualidades es siendo misericordiosos (G�l. 5:22, 23). De ah� la importancia de que nos esforcemos por actuar siempre con misericordia. w07 15/9 1:17, 18 Julio 16@Lo que procede del hombre es lo que contamina al hombre (Mar. 7:20).@Los misioneros de nuestros d�as, as� como los cristianos que se mudan a donde hay m�s necesidad de proclamadores, tienen que adaptarse en muchos casos a un nivel de vida inferior al que ten�an. Pero no podemos siquiera imaginar el contraste entre las circunstancias de Jes�s en la Tierra y sus circunstancias en el cielo. Vivir entre humanos imperfectos en un mundo corrompido era algo muy distinto a lo que �l estaba acostumbrado (Mar. 7:21-23). Hasta tuvo que lidiar con las rivalidades que surg�an entre sus disc�pulos m�s allegados (Luc. 20:46; 22:24). Con todo, Jes�s siempre manej� a la perfecci�n las situaciones que enfrent� mientras fue humano. Adem�s, cuando era beb�, no comenz� a hablar de manera milagrosa; tuvo que aprender poco a poco, como cualquier otro ni�o. Jes�s emple� por lo menos una de �las lenguas de los hombres�, tan distintas a las �de los �ngeles� (1 Cor. 13:1). Y aun as�, ning�n ser humano ha podido superar sus palabras llenas de gracia (Luc. 4:22). w08 15/2 3:4, 5 Julio 17@Procurar� aniquilar a todas las naciones que vienen contra Jerusal�n (Zac. 12:9).@�Por qu� procura Jehov� �aniquilar a todas las naciones�? Porque se obstinan en oponerse al Reino mesi�nico. Est�n condenadas a la destrucci�n por perseguir y maltratar al pueblo de Jehov�. Pronto, los agentes terrestres de Satan�s lanzar�n un ataque final contra los verdaderos siervos de Dios, un ataque que conducir� a la situaci�n mundial que la Biblia llama Har�Maged�n (Rev. 16:1316). En respuesta, el Juez Supremo saldr� en defensa de sus siervos y santificar� su nombre ante las naciones (Eze. 38:14-18, 22, 23). Satan�s no tiene ning�n arma que pueda debilitar la fe o apagar el celo que nos caracterizan. Nuestra paz espiritual, que proviene de conocer el poder salvador de Dios, es �la posesi�n hereditaria de los siervos de Jehov� (Isa. 54:17). Nadie puede arrebatarnos la paz y prosperidad espiritual que disfrutamos (Sal. 118:6). w07 15/12 3:15, 16 Julio 18@Hablo estas cosas as� como el Padre me ha ense�ado (Juan 8:28).@Jes�s bas� su ense�anza en lo que hab�a aprendido directamente de Jehov� y en lo que dec�an las Santas Escrituras (Luc. 4:16-21). Y nosotros imitamos su ejemplo cuando seguimos su gu�a y nos basamos en la Palabra de Dios al ense�ar. As�, todos hablaremos de lo mismo y tendremos la misma forma de pensar, lo que sin duda fortalecer� nuestra unidad (1 Cor. 1:10). �El esclavo fiel y discreto� suministra publicaciones b�blicas para ayudarnos a impartir la misma ense�anza en todo el mundo y cumplir nuestra comisi�n de predicar. �Verdad que estamos muy agradecidos por ello? (Mat. 24:45; 28:19, 20.) Una de dichas publicaciones es el libro Ense�a, editado en 179 idiomas. Estudiar las Escrituras con el libro Ense�a puede cambiar la actitud de las personas, incluso de quienes se oponen a nosotros. Durante el a�o de servicio 2007, los testigos de Jehov� dirigieron 6.561.426 estudios b�blicos, muchos de ellos con el libro Ense�a. Y usted, �est� usando esta publicaci�n con sus estudiantes? w08 15/2 4:10-12 Julio 19@Ser�n testigos de m� (Hech. 1:8).@El fiel apoyo de las otras ovejas a los ungidos fue predicho por el profeta Isa�as, quien escribi�: �Esto es lo que ha dicho Jehov�: �Los trabajadores no retribuidos de Egipto y los mercaderes de Etiop�a y los sabeos, hombres de alta talla, se pasar�n ellos mismos aun a ti, y tuyos llegar�n a ser. Detr�s de ti andar�n�� (Isa. 45:14). Los cristianos que tienen la esperanza terrenal andan, por decirlo as�, detr�s de la clase del esclavo y su Cuerpo Gobernante, siguiendo su gu�a. Como �trabajadores no retribuidos�, las otras ovejas emplean de buena gana sus energ�as y recursos para apoyar la labor mundial de predicaci�n que Cristo encarg� a sus seguidores ungidos
en la Tierra (Rev. 12:17). A la vez que apoya a sus hermanos ungidos, la gran muchedumbre est� recibiendo preparaci�n para conformar el n�cleo de la sociedad humana que vivir� en la Tierra despu�s del Armaged�n. w08 15/1 5:6, 7 Julio 20@Cristo sufri� por ustedes, dej�ndoles dechado para que sigan sus pasos con sumo cuidado y atenci�n (1 Ped. 2:21).@Hoy d�a, millones de personas est�n deseando vivir para siempre en paz y seguridad en una Tierra hecha un para�so, y por eso disfrutan de hablar de su esperanza con la gente (Sal. 37:11; 2 Ped. 3:13). �Es usted uno de estos evangelizadores? Si as� es, ha tomado una excelente decisi�n. Ahora bien, cada uno de nosotros deber�a tener siempre presentes las palabras del texto de hoy. �No le parece interesante que aqu� Pedro resalte los sufrimientos de Jes�s, y no el entusiasmo con el que predicaba ni su gran habilidad como maestro? El ap�stol sab�a de lo que hablaba, pues fue testigo ocular del sufrimiento que Cristo estuvo dispuesto a soportar a fin de someterse a la soberan�a de Jehov� y demostrar que Satan�s es un mentiroso. Y nosotros, �c�mo podemos seguir los pasos de Jes�s? Pregunt�monos: ��Cu�nto estoy dispuesto a sufrir para apoyar la soberan�a de Jehov�? �Demuestran mi vida y mi ministerio que para m� lo m�s importante es defender la soberan�a divina?� (Col. 3:17). w07 1/12 2:12, 13 Julio 21@Tu manto no se desgast� sobre ti, ni se te hinch� el pie estos cuarenta a�os (Deu. 8:4).@Jehov� les hab�a asegurado a los israelitas que los alimentar�a y cuidar�a. Poco despu�s de liberarlos de Egipto, les prometi�: �Voy a hacer que llueva pan para ustedes desde los cielos; y el pueblo tiene que salir y recoger cada cual su cantidad d�a por d�a�. Fiel a su palabra, Dios les suministr� aquel �pan del cielo�. �Cuando alcanzaron a ver[lo] los hijos de Israel, empezaron a decirse unos a otros: ��Qu� es?�.� Era man�, el pan que Jehov� les hab�a prometido (�xo. 16:4, 13-15). Durante los cuarenta a�os que estuvieron en el desierto, Jehov� los cuid�, d�ndoles comida y agua. Incluso se encarg� de que sus mantos no se desgastaran y de que no se les hincharan los pies (Deu. 8:3). Josu� fue testigo presencial de todo aquello. Era evidente que Jehov� hab�a liberado, protegido y alimentado a sus siervos, tal como les hab�a prometido. w07 1/11 1:9, 10 Julio 22@Todos ustedes sean [...] de mente humilde (1 Ped. 3:8).@Para ser amigos de Dios, tenemos que ser �de mente humilde� (Sal. 138:6). La importancia de la humildad se destaca en una par�bola registrada en el cap�tulo 9 de Jueces. En ella, el olivo, la higuera y la vid representaron a hombres honorables que nunca buscaron reinar sobre sus hermanos israelitas. En cambio, el cambr�n represent� el reinado de un asesino �vido de poder: el orgulloso Abim�lec, quien finalmente sufri� una muerte violenta (Jue. 9:8-15, 22, 50-54). �Verdad que es mucho mejor ser �de mente humilde�? En el siglo primero de nuestra era, mientras el rey Herodes Agripa pronunciaba un discurso p�blico, la multitud reunida grit�: ��Voz de un dios, y no de un hombre!�. Como Herodes no rechaz� aquellas alabanzas ni �dio la gloria a Dios�, fue herido por un �ngel de Jehov� y muri� de manera espantosa (Hech. 12:20-23). Pues bien, �qu� se espera de nosotros si somos buenos oradores o maestros h�biles de la Biblia? Que le demos el m�rito a Dios por lo que nos permite hacer (1 Cor. 4:6, 7; Sant. 4:6). w08 15/2 2:9, 10 Julio 23@Tus propios o�dos oir�n una palabra detr�s de ti que diga: �Este es el camino. Anden en �l� (Isa. 30:21).@Aunque es cierto que no podemos cambiar el pasado, s� tenemos la opci�n de elegir buenas amistades y un ambiente beneficioso para nuestra conciencia. Para ello es fundamental que frecuentemos la compa��a de siervos devotos que lleven a�os esforz�ndose por imitar a su Padre celestial. Una magn�fica oportunidad de hacerlo es asistir a las reuniones de la congregaci�n y conversar con otros cristianos antes y despu�s del programa. Adem�s, podemos fijarnos en la manera de pensar y actuar de nuestros hermanos en la fe. Ellos prestan mucha atenci�n tanto a lo que han aprendido de la Biblia como a los dictados de su conciencia, la cual refleja como un eco la manera de pensar y actuar de Dios. Si nos aprovechamos de estos medios, moldearemos nuestra conciencia seg�n los principios b�blicos y as� reflejaremos mejor la imagen de Dios. En resumen, debemos esforzarnos por afinar nuestra voz interior para ponerla de acuerdo con los principios de nuestro Padre y, adem�s, hemos de absorber las
buenas influencias de nuestros hermanos cristianos. �Qu� lograremos de este modo? Tendremos una conciencia m�s confiable, lo que nos animar� a�n m�s a escucharla. w07 15/10 1:18 Julio 24@No te afanes por obtener riquezas. Cesa de tu propio entendimiento. �Has hecho que tus ojos les echen un vistazo, cuando no son nada? Porque sin falta se hacen para s� alas como las de un �guila y vuelan (Pro. 23:4, 5).@La expresi�n �la vida de verdad� pudiera transmitir a la mayor�a de la gente una imagen de placeres y lujos, como cuando se dice: ��Esto s� que es vida!�. Una revista de noticias asi�tica se�ala: �Quienes ven pel�culas o programas de televisi�n aprenden a desear lo que ven, a so�ar con lo que podr�an tener�. Muchas personas solo viven para conseguir riquezas y una buena posici�n social, aunque para ello tengan que sacrificar su juventud, su salud, su familia y sus valores espirituales. Pocos se paran a pensar que esa buena vida que fomentan los medios de comunicaci�n no es m�s que un reflejo del �esp�ritu del mundo�, la forma de pensar que impulsa a la mayor�a de la gente a actuar en contra del prop�sito de Dios (1 Cor. 2:12; Efe. 2:2). �Con raz�n hay tantas personas que no se sienten contentas! (Pro. 18:11.) w07 1/10 1:8 Julio 25@Yo, s�, yo, he instalado a mi rey sobre Si�n, mi santa monta�a (Sal. 2:6).@El Salmo segundo se refiere prof�ticamente a la coronaci�n de Jes�s en el monte Si�n celestial (Sal. 110:1, 2). Sin embargo, este salmo tambi�n indica que hay un per�odo en que a los gobernantes de la Tierra y a sus s�bditos se les concede la oportunidad de someterse a Cristo. Se les insta a que �ejerzan perspicacia� y a que se dejen �corregir�. Durante ese tiempo, �felices son todos los que se refugian en [Jehov�]� sirvi�ndole a �l y a su Rey nombrado. Y, como vemos, se les brinda esa oportunidad durante la presencia de Jes�s como Rey (Sal. 2:10-12). No obstante, los incr�dulos no entender�an estos asuntos ni reconocer�an a Jes�s como su futuro Rey. Por otra parte, Jes�s dijo que sus disc�pulos ver�an la se�al de su presencia tan claramente como si vieran un �rel�mpago [...] [que] resplandece desde una parte debajo del cielo hasta otra parte debajo del cielo� (Luc. 17:24-29). w08 15/2 5:7-9 Julio 26@Empezaron a regocijarse y a glorificar la palabra de Jehov�, y todos los que estaban correctamente dispuestos para vida eterna se hicieron creyentes (Hech. 13:48).@�Podr�a proponerse leer en un a�o las Escrituras de principio a fin, d�ndose tiempo para meditar? Leyendo unos cuatro cap�tulos por d�a, en un a�o completar� sus 1.189 cap�tulos. Los reyes de Israel deb�an leer la Ley de Jehov� �todos los d�as de su vida�, y seguramente Josu� hizo lo mismo (Deu. 17:14-20; Jos. 1:7, 8). �Qu� importante es que los pastores espirituales lean a diario la Palabra de Dios! Esto, sin duda, les ayudar� a impartir �la ense�anza saludable� (Tito 2:1). La proximidad del d�a de Jehov� deber�a motivarle a asistir con regularidad a las reuniones cristianas y a participar en ellas tanto como pueda (Heb. 10:24, 25). De este modo podr� afinar sus habilidades como un predicador del Reino que busca a las personas de buen coraz�n para ayudarlas. w07 15/12 1:11, 12 Julio 27@S� bondadoso contigo mismo, Se�or (Mat. 16:22).@A diario nos enfrentamos a todo tipo de pruebas y decisiones. �C�mo deber�amos reaccionar en cada caso? Por ejemplo, �qu� haremos si nos vemos tentados a hacer algo que pudiera amenazar nuestra integridad cristiana? Cuando Pedro le sugiri� que fuera bondadoso consigo mismo, Jes�s exclam�: ��Ponte detr�s de m�, Satan�s! [...] Porque no piensas los pensamientos de Dios, sino los de los hombres� (Mat. 16:21-23). Y cuando surge la posibilidad de progresar en nuestra profesi�n o elevar nuestro nivel econ�mico a costa del bienestar espiritual, �reaccionamos como lo hizo Jes�s? Cuando �l se dio cuenta de que algunos que hab�an visto sus milagros �estaban a punto de venir y prenderlo para hacerlo rey�, se alej� r�pidamente de ellos (Juan 6:15). Jes�s se daba perfecta cuenta de que hab�a algo m�s importante que su seguridad o su conveniencia. Por encima de todo, quer�a hacer la voluntad de su Padre y apoyar la soberan�a divina (Mat. 26:50-54). w07 1/12 2:14, 15 Julio 28@Conf�a en Jehov� con todo tu coraz�n (Pro. 3:5).@Tenemos que confiar en Dios, sobre todo si el ma�ana parece tan sombr�o que llegamos a deprimirnos. Pensemos en Noem�, quien se hallaba en Moab cuando la muerte le arrebat� a su
esposo y a sus dos hijos. No obstante, ella nunca dej� de confiar en Jehov�. �Y qu� giro dio su vida por esperar en �l! Su nuera Rut, que hab�a quedado viuda, se cas� con Boaz y dio a luz un hijo. Adem�s, Noem� tuvo la dicha de criar a su propio nieto. El relato se�ala: �Las vecinas le dieron nombre [al ni�o], diciendo: �Le ha nacido un hijo a Noem�. Y empezaron a llamarlo por nombre Obed. �l es el padre de Jes�, padre de David� (Rut 4:14-17). Cuando Noem� resucite, se encontrar� con Rut y se enterar� de que su nuera fue antepasada del Mes�as (Mat. 1:5, 6, 16). Igual que a Noem�, a nosotros nos resulta imposible saber c�mo se resolver�n nuestros problemas. Por eso, confiemos siempre en Jehov�, tal como nos exhorta el texto de hoy. w08 15/2 1:14, 15 Julio 29@He llegado a aborrecer esta vida m�a (G�n. 27:46).@Cuando los problemas nos deprimen, necesitamos m�s que nunca el �nimo y las fuerzas que Dios da. Pensemos en Isaac y Rebeca. Cuando su hijo Esa� se cas� con dos mujeres hititas, estas �fueron una fuente de amargura de esp�ritu� para ellos (G�n. 26:34, 35). Isaac tom� cartas en el asunto y envi� a Jacob lejos a buscar esposa entre los siervos de Dios. Jehov� les dio a Isaac y Rebeca la sabidur�a, la entereza y las fuerzas para continuar fieles. Y lo mismo har� por nosotros si se lo pedimos (Sal. 118:5). Siglos despu�s, una ni�a israelita que serv�a en la casa del comandante del ej�rcito sirio, Naam�n, se arm� de valor para hablar a su ama y decirle que si Naam�n iba a Israel, el profeta de Jehov� lo curar�a. El hombre fue a Israel y se cur� milagrosamente (2 Rey. 5:1-3). Esta ni�a es un ejemplo animador para los j�venes que le piden valor a Jehov� para predicar a profesores, compa�eros y dem�s personas. w08 15/2 2:13, 14 Julio 30@Ustedes [...] recibieron la Ley seg�n fue transmitida por �ngeles, pero no la han guardado (Hech. 7:53).@En el siglo primero, los l�deres religiosos jud�os malinterpretaron el prop�sito de la Ley. La norma con respecto al s�bado es un buen ejemplo (Mar. 3:4-6). Los escribas y los fariseos �[desatendieron] los asuntos de m�s peso de la Ley, a saber: la justicia y la misericordia y la fidelidad� (Mat. 23:23). A pesar de todo, Jes�s no se dio por vencido; continu� proclamando la verdad. Jesucristo era un hombre muy dispuesto. Su amor por las personas lo impulsaba a ayudarlas, y nunca perdi� el esp�ritu evangelizador. Gracias a que fue fiel a Jehov� mientras estuvo en la Tierra, �vino a ser responsable de la salvaci�n eterna para todos los que le obedecen�. Adem�s, �por cuanto �l mismo ha sufrido al ser puesto a prueba, puede ir en socorro de los que [como nosotros] est�n siendo puestos a prueba� (Heb. 2:18; 5:8, 9). w08 15/2 3:7, 8 Julio 31@Deseamos comportarnos honradamente en todas las cosas (Heb. 13:18).@Un rasgo notable de Jes�s es que siempre practicaba lo que predicaba. Como los Testigos lo imitamos, nuestra conducta es ejemplar, y as� lo reconocen muchas personas. Veamos un ejemplo. A un hombre de negocios de Nueva Zelanda le abrieron el autom�vil y le robaron el malet�n. Un polic�a le dijo: �La �nica posibilidad de recuperar sus pertenencias es que un testigo de Jehov� se las encuentre�. Pues bien, una Testigo encontr� el malet�n. Cuando el due�o, una vez que fue notificado, se present� en la casa de la hermana, descubri� con alivio que no hab�a desaparecido un documento sumamente importante. La hermana le dijo: �Era mi obligaci�n devolverle sus pertenencias, sobre todo porque soy testigo de Jehov�. El hombre se qued� boquiabierto, pues record� lo que le hab�an dicho esa misma ma�ana. w08 15/2 4:14 Agosto 1@Ejerzan paciencia, [...] hermanos, hasta la presencia del Se�or (Sant. 5:7).@Muchos de los productos que cultiva el agricultor tardan en crecer. Lo mismo sucede con los frutos que los cristianos cultivamos en la gente: la comprensi�n de la Palabra de Dios, el amor a Jehov� y el esp�ritu cristiano. As� pues, tenemos que ser pacientes. Santiago escribi�: ��Miren! El labrador sigue esperando el precioso fruto de la tierra, aguard�ndolo con paciencia hasta que recibe la lluvia temprana y la lluvia tard�a. Ustedes tambi�n ejerzan paciencia; hagan firme su coraz�n, porque se ha acercado la presencia del Se�or� (Sant. 5:7, 8). Santiago anim� a sus hermanos en la fe a tener �paciencia [...] hasta la presencia del Se�or�. El propio Jes�s demostr� esta cualidad con sus disc�pulos, pues cada vez
que no entend�an algo, se lo explicaba con mucha paciencia, fuera directamente o vali�ndose de ilustraciones (Mat. 13:10-23; Luc. 19:11; 21:7; Hech. 1:6-8). Hoy en d�a vivimos en la presencia del Se�or. Sin embargo, sigue siendo necesario que ense�emos con paciencia a la gente, pues as� lograremos que lleguen a ser disc�pulos de Cristo (Juan 14:9). w07 15/11 1:13 Agosto 2@Sea cual sea el arma que se forme contra ti, no tendr� �xito (Isa. 54:17).@D�cadas atr�s, en un peque�o pa�s monta�oso del sureste de Europa, un gobierno de ideolog�a comunista y atea hizo cuanto pudo por aplastar a un grupo de valerosos cristianos. Pero ni las torturas, ni los campos de trabajos forzados, ni las campa�as de desprestigio pudieron acabar con ellos. �Qui�nes eran? Los testigos de Jehov� de Albania. Aunque reunirse y predicar les resultaba extremadamente dif�cil, su persistencia durante d�cadas ha honrado el cristianismo y ha glorificado el nombre de Jehov�. En el a�o 2006, con motivo de la dedicaci�n de la nueva sucursal albanesa, un Testigo que se ha mantenido fiel por muchos a�os dijo: ��Por m�s que Satan�s lo intente, �l siempre pierde y Jehov� gana!�. La historia confirma que nada de lo que el mundo de Satan�s pueda hacer lograr� que los siervos dedicados de Jehov� dejen de adorar a su Dios. w07 15/12 3:1, 2 Agosto 3@De ning�n modo pasar� esta generaci�n hasta que sucedan todas estas cosas (Mat. 24:34).@Es verdad que Jes�s emple� la palabra generaci�n con un sentido negativo cuando se dirig�a a las personas malvadas de su d�a o cuando hablaba de ellas (Mat. 12:39; 17:17; Mar. 8:38). Pero �se refiri� necesariamente a tales personas cuando pronunci� las palabras que leemos en Mateo 24:34? Recuerde que los cuatro ap�stoles conversaron con �l �privadamente� (Mat. 24:3). Puesto que Jes�s no emple� t�rminos negativos cuando les habl� de �esta generaci�n�, seguramente los ap�stoles entendieron que ellos y los dem�s disc�pulos formaban parte de la �generaci�n� que no pasar�a. Jes�s dijo que sus disc�pulos, que pronto iban a ser ungidos con esp�ritu santo, ser�an quienes podr�an llegar a ciertas conclusiones cuando vieran ocurrir �todas estas cosas� (Mat. 24:32, 33). De modo que Jes�s debi� de haberse referido a sus disc�pulos cuando declar�: �De ning�n modo pasar� esta generaci�n hasta que sucedan todas estas cosas�. w08 15/2 5:11-13 Agosto 4@Al Se�or de los ej�rcitos, a �l deb�is reverenciar (Isa. 8:13, Universidad de Navarra).@La actitud reverente que el esp�ritu santo fomenta en nosotros nos impulsa a tener siempre presente a Jehov�. Sime�n, un siervo de Dios que viv�a en Jerusal�n para el tiempo en que Jes�s naci�, demostr� precisamente esa actitud de respeto y devoci�n (Luc. 2:25-38). A su avanzada edad, Sime�n segu�a �espera[ndo] la consolaci�n de Israel�, pues ten�a fe en las profec�as mesi�nicas. Mediante su esp�ritu, Dios le hab�a asegurado que vivir�a para ver al Mes�as, y eso fue lo que ocurri�. Cierto d�a del a�o 2 antes de nuestra era, Jes�s fue presentado en el templo por Mar�a, su madre, y por Jos�, su padre adoptivo. Lleno de esp�ritu santo, Sime�n empez� a profetizar acerca del Mes�as y predijo el dolor que iba a sufrir Mar�a al ver a Jes�s clavado en un madero de tormento. Pero �imag�nese la alegr�a de Sime�n al tomar en sus brazos al �Cristo de Jehov�! Este hombre reverente es sin duda un excelente ejemplo para los siervos de Dios de la actualidad. w08 15/2 1:18 Agosto 5@Huyan de la fornicaci�n. [...] El que practica la fornicaci�n peca contra su propio cuerpo (1 Cor. 6:18).@Nuestras publicaciones emplean el sistema de preguntas y respuestas. Sin duda, la mayor�a de las personas que estudian la Biblia con nosotros encontrar�n enseguida la respuesta a las preguntas de cada p�rrafo. No obstante, el maestro perspicaz no se conforma con recibir la respuesta correcta. Tal vez el estudiante pueda explicar lo que la Biblia ense�a sobre la fornicaci�n, por ejemplo. Pero plante�ndole preguntas con tacto, el maestro ser� capaz de averiguar lo que en verdad opina sobre este asunto. Entre otras cosas, pudiera preguntarle: ��Por qu� condena la Biblia las relaciones sexuales fuera del matrimonio? �Qu� piensa usted de esta prohibici�n divina? �Cree que sirve de algo obedecer las normas morales de Dios?�. Es muy probable que las respuestas del estudiante revelen lo que hay en su coraz�n. w08 15/1 2:8 Agosto 6@Segu� persiguiendo a la congregaci�n de Dios (G�l. 1:13).@Antes de convertirse en el ap�stol Pablo, Saulo era un fariseo que persegu�a sin piedad a
los cristianos porque cre�a sinceramente que estaban equivocados. Desde el punto de vista humano deb�a de parecer casi imposible que se hiciera cristiano. Pero Jes�s vio algo bueno en su coraz�n y lo escogi� para una comisi�n especial. Con el tiempo, Saulo lleg� a ser uno de los miembros m�s activos y celosos de la congregaci�n cristiana del siglo primero. �Qu� aprendemos del caso de Saulo? Es posible que en nuestro territorio haya ciertos grupos de personas que parezcan hostiles al mensaje. Pues bien, aunque nosotros dudemos que alguno de sus integrantes llegue a abrazar el cristianismo, intentemos siempre razonar con ellos. A veces acaba escuchando el mensaje quien menos nos imaginamos. Recordemos que nuestra comisi�n es seguir predicando a todos �sin cesar� (Hech. 5:42). w08 15/1 3:8, 9 Agosto 7@Siempre estaremos con el Se�or (1 Tes. 4:17).@Los ungidos que quedan en la Tierra est�n absolutamente convencidos de que, si se mantienen fieles, recibir�n pronto su recompensa celestial. Los millones de miembros de las otras ovejas, por su parte, ven la fe de estos hermanos y concuerdan con el ap�stol Pablo, que dijo de los ungidos de Tesal�nica: �Nosotros mismos nos gloriamos de ustedes entre las congregaciones de Dios a causa del aguante y la fe de ustedes en todas sus persecuciones y las tribulaciones que est�n soportando. Esto es prueba del justo juicio de Dios, que conduce a que se les considere dignos del reino de Dios, por el cual verdaderamente est�n sufriendo� (2 Tes. 1:3-5). En el momento en que fallezca el �ltimo ungido �ocurra este suceso cuando ocurra�, el gobierno celestial de Dios quedar� completo. �Cu�nta alegr�a causar� eso en el cielo y en la Tierra! w08 15/1 4:17, 18 Agosto 8@�Miren!, una gran muchedumbre, que ning�n hombre pod�a contar, de todas las naciones y tribus y pueblos y lenguas (Rev. 7:9).@Para los a�os treinta era evidente que ya se hab�a empezado a recoger a las �otras ovejas� (Juan 10:16). Primero fueron miles, luego centenares de miles, y ahora incluso se cuentan por millones las personas que se han puesto de parte de la adoraci�n pura. Actualmente hay m�s de 6.700.000. Al liberar a su pueblo de Babilonia la Grande, Jehov� abri� la puerta para el espectacular crecimiento que hoy vemos por todo el mundo. Todav�a queda pendiente otro acto de liberaci�n, uno cuyos efectos se ver�n en toda la faz de la Tierra. Con una imponente manifestaci�n de poder, Jehov� eliminar� a todos sus adversarios, liberando as� a su pueblo para que entre en un nuevo mundo de justicia. Imag�nese la alegr�a de ver el fin de la maldad y los comienzos de la era m�s gloriosa de toda la historia. �Ser� algo maravilloso! (Rev. 21:1-4.) w07 1/11 1:13, 14 Agosto 9@�Ay de la tierra[!] (Rev. 12:12.)@En el libro de Revelaci�n se representa a Jes�s montado en un caballo blanco y recibiendo una corona (Rev. 6:1-8). Se dice de �l que sale �venciendo y para completar su victoria�. A continuaci�n, el relato muestra que le siguen varios jinetes en caballos de distintos colores. Prof�ticamente, tales jinetes representan la guerra, la escasez de alimentos y las epidemias. De hecho, estamos viendo el cumplimiento de esta profec�a ahora, en nuestro propio tiempo. El cap�tulo 12 de Revelaci�n da m�s detalles respecto a la instauraci�n del Reino de Dios en los cielos. Por ejemplo, nos habla de una batalla que se pelea en la regi�n invisible. Satan�s y sus fuerzas demon�acas son arrojados a la Tierra. El relato nos dice que, en ese momento, el Diablo siente gran c�lera, �sabiendo que tiene un corto espacio de tiempo� (Rev. 12:7-12). Est� claro, pues, que tras la instauraci�n del Reino de Cristo en los cielos habr�a un per�odo marcado por calamidades cada vez mayores para la Tierra y sus habitantes. w08 15/2 5:5, 6 Agosto 10@Sean obedientes a los que llevan la delantera entre ustedes (Heb. 13:17).@Los compa�eros de los cristianos ungidos, las otras ovejas, demuestran su fe de diversas maneras. En primer lugar, ayudan a los ungidos a proclamar las buenas nuevas del Reino de Dios (Mat. 24:14; 28:19, 20). En segundo lugar, se someten con agrado a la direcci�n del Cuerpo Gobernante (Zac. 8:23). En tercer lugar, viven de acuerdo con los justos principios de Dios, con lo que tambi�n demuestran su apoyo a sus hermanos ungidos. Se esfuerzan por manifestar �amor, gozo, paz, gran paciencia, benignidad, bondad, fe, apacibilidad [y] autodominio�
(G�l. 5:22, 23). Es cierto que en nuestros d�as estas cualidades son poco comunes, a diferencia de lo que sucede con �las obras de la carne�. Aun as�, los miembros de la gran muchedumbre est�n resueltos a abstenerse de �fornicaci�n, inmundicia, conducta relajada, idolatr�a, pr�ctica de espiritismo, enemistades, contiendas, celos, arrebatos de c�lera, altercaciones, divisiones, sectas, envidias, borracheras, diversiones estrepitosas, y cosas semejantes a estas� (G�l. 5:19-21). w08 15/1 5:8, 9 Agosto 11@Si ustedes, aunque son inicuos, saben dar buenos regalos a sus hijos, �con cu�nta m�s raz�n dar� el Padre en el cielo esp�ritu santo a los que le piden! (Luc. 11:13.)@A medida que cultive las cualidades cristianas, probablemente los dem�s se den cuenta de que usted est� �andando por esp�ritu santo� y manifestando su fruto (G�l. 5:16, 22-25). �Puede mencionar algo en concreto que sea prueba de que usted y su familia se han vestido de la nueva personalidad? (Col. 3:9, 10.) Por ejemplo, en la congregaci�n y fuera de ella, �se le conoce por sus acciones bondadosas? (G�l. 6:10.) El estudio regular de las Escrituras le permitir� desarrollar cualidades cristianas como estas y as� estar preparado para el d�a de Jehov�. �Qu� puede hacer si tiene mal genio y se da cuenta de que necesita m�s autodominio? Esta cualidad es parte del fruto que el esp�ritu santo puede producir en usted. Por lo tanto, p�dale a Jehov� su esp�ritu. Recuerde que Jes�s dijo: �Sigan pidiendo, y se les dar�; sigan buscando, y hallar�n� (Luc. 11:9). w07 15/12 1:13, 14 Agosto 12@�C�mo podr�a yo cometer esta gran maldad y realmente pecar contra Dios? (G�n. 39:9.)@Jos� conoc�a la norma divina: el matrimonio es una uni�n en la que solo hay lugar para un hombre y una mujer que forman �una sola carne�. Adem�s, tuvo que haberse enterado del incidente de su abuela Rebeca con Abim�lec. Cuando este rey descubri� que era una mujer casada, comprendi� que ning�n hombre de su reino deb�a unirse a ella, pues quien lo hiciera cometer�a un pecado y acarrear�a culpa a su pueblo. Y Jehov� dio su bendici�n, lo que revel� su punto de vista acerca del adulterio. Sin duda, el conocimiento que ten�a Jos� de estos asuntos contribuy� a que la voz de su conciencia resonara a�n con m�s fuerza y lo moviera a rechazar la inmoralidad sexual (G�n. 2:24; 12:17-19; 20:1-18; 26:7-14). Hoy d�a disponemos de la Biblia completa para aprender la manera de pensar y sentir de nuestro Padre, lo que incluye qu� cosas aprueba y cu�les proh�be. Cuanto m�s familiarizados estemos con las Escrituras, m�s f�cil nos ser� acercarnos a Dios y copiar su ejemplo. Y, por consiguiente, lo que nos diga la conciencia reflejar� cada vez mejor la manera de pensar de nuestro Padre y estar� en sinton�a con su voluntad (Efe. 5:1-5). w07 15/10 1:16, 17 Agosto 13@Reinar� sobre la casa de Jacob para siempre (Luc. 1:33).@Hacia el a�o 2 antes de nuestra era, en Nazaret, una ciudad galilea del norte de Palestina, una joven virgen llamada Mar�a recibe la visita del �ngel Gabriel. ��Mira! �le dice �l�, concebir�s en tu matriz y dar�s a luz un hijo, y has de ponerle por nombre Jes�s. Este ser� grande y ser� llamado Hijo del Alt�simo; y Jehov� Dios le dar� el trono de David su padre.� (Luc. 1:31, 32.) Por fin se hab�a acercado el momento de que se revelara el �secreto sagrado�. Estaba a punto de aparecer la parte principal de la �descendencia� prometida (Mar. 4:11; G�n. 3:15; G�l. 4:4; 1 Tim. 3:16). Es cierto que Satan�s le magullar�a el tal�n, pero la �descendencia� le magullar�a la cabeza a Satan�s y as� acabar�a de una vez por todas con �l y sus secuaces. Tal �descendencia� tambi�n demostrar�a que, mediante el Reino de Dios, se reparar� todo el da�o que el Diablo ha causado y se vindicar� la soberan�a de Jehov� (Heb. 2:14; 1 Juan 3:8). w07 1/12 1:18, 19 Agosto 14@El temblar ante los hombres es lo que tiende un lazo, pero el que conf�a en Jehov� ser� protegido (Pro. 29:25).@El Diablo sabe que nos importa la opini�n que la gente tiene de nosotros y utiliza eso para desequilibrarnos y hacernos caer en su trampa. Una manera de conseguirlo es haci�ndonos �temblar ante los hombres� (Eze. 33:8; Sant. 4:17). Tomemos por caso al adolescente que, presionado por sus compa�eros de estudios, fuma un cigarrillo. Seguramente no ten�a la menor intenci�n de fumar cuando sali� de casa ese d�a para ir a clase. Sin embargo, ah� est�, haciendo algo que da�a su salud y desagrada a Dios (2 Cor. 7:1). �C�mo cay�
en la trampa? Tal vez se junt� con quien no deb�a y tem�a que lo rechazaran. Por tanto, j�venes, no se dejen enga�ar por el �pajarero� (Sal. 91:3). Si no quieren caer en sus trampas y ser capturados vivos, no cedan en lo m�s m�nimo. Recuerden siempre el consejo b�blico de evitar las malas compa��as (1 Cor. 15:33). w07 1/10 3:5, 6 Agosto 15@Acu�rdate, ahora, de tu Magn�fico Creador en los d�as de tu mocedad (Ecl. 12:1).@�Eres un joven que ya ha dedicado su vida a Jehov�? �Tienes alrededor de 18 a�os y ya has terminado tus estudios o est�s a punto de hacerlo? Es probable que a�n no tengas responsabilidades familiares importantes. Si as� es, �qu� piensas hacer con tu vida? Puesto que le has prometido a Jehov� que har�s su voluntad, �qu� decisiones te ayudar�n a lograrlo? Muchos j�venes han organizado sus asuntos a fin de ser precursores, y tal decisi�n les ha brindado muchas satisfacciones (Sal. 110:3). Por otra parte, puede que usted sea un adulto joven que trabaje a tiempo completo y que tenga pocas obligaciones aparte de la de mantenerse a s� mismo. �Ha pensado en aumentar su participaci�n en el ministerio? (Sal. 34:8; Pro. 10:22.) En algunos territorios queda todav�a mucho por hacer para llevar el mensaje de la verdad a todas las personas. �Pudiera hacer ciertos cambios en su vida para ampliar su servicio? Por ejemplo, �le es posible mudarse a una zona donde se necesiten m�s proclamadores del Reino? w08 15/1 1:16, 17 Agosto 16@[Ser�n] puestos a prueba plenamente (Rev. 2:10).@Entre las armas que se han empleado contra los siervos de Dios figuran proscripciones, multitudes violentas, condenas de prisi�n y leyes ideadas para perjudicarlos (Sal. 94:20). Por ejemplo, una sucursal de los testigos de Jehov� inform� que, en el transcurso de un solo a�o, hubo 32 casos en que siervos de Dios fueron atacados mientras llevaban a cabo su ministerio. Adem�s, en 59 ocasiones la polic�a detuvo a Testigos �ancianos y j�venes, hombres y mujeres� que estaban predicando. A algunos los trataron como a delincuentes: les tomaron las huellas, los fotografiaron y los pusieron tras las rejas. A otros los amenazaron con hacerles da�o. En cierto pa�s se han documentado m�s de mil cien casos de testigos de Jehov� que han sido arrestados, multados y golpeados. De hecho, m�s de doscientos de tales casos se produjeron el d�a en que se reunieron para conmemorar la muerte de Jes�s. Sin embargo, Jehov� ha usado su esp�ritu para salvar a su pueblo (Zac. 4:6). w07 15/12 3:3, 4 Agosto 17@Dejen que los ni�itos vengan a m�, y no traten de detenerlos. Porque el reino de Dios pertenece a los que son as� (Luc. 18:16).@Jes�s no se interesaba solo en los adultos. Tambi�n se fijaba en los ni�os, y por eso sab�a a qu� jugaban y qu� cosas dec�an. A veces hasta los invitaba a acercarse a �l (Luc. 7:31, 32). Entre las multitudes que escuchaban a Jes�s hab�a muchos peque�os. Y cuando unos jovencitos se pusieron a aclamarlo como Mes�as, �l no solo repar� en ese hecho, sino que mostr� que estaba predicho en las Escrituras (Mat. 14:21; 15:38; 21:15, 16). Hoy, igualmente, son muchos los ni�os que llegan a ser disc�pulos de Jes�s. �C�mo pueden ayudarlos sus padres? Si queremos ayudar a nuestros hijos a crecer espiritualmente, es preciso que los escuchemos. Hemos de averiguar si tienen puntos de vista contrarios a la voluntad de Jehov�. Sin importar lo que nos digan, debemos responderles haciendo comentarios positivos. Luego podemos utilizar textos b�blicos que les ayuden a entender c�mo ve Jehov� los asuntos. w07 15/11 2:17, 18 Agosto 18@Haz secretas las palabras y sella el libro, hasta el tiempo del fin. Muchos discurrir�n, y el verdadero conocimiento se har� abundante (Dan. 12:4).@Estamos viviendo en el tiempo del fin, y tal como se predijo, el verdadero conocimiento se ha hecho abundante. Hoy d�a, con la ayuda del esp�ritu santo, personas de todas partes de la Tierra que aman la verdad pueden adquirir un conocimiento exacto del Dios verdadero y de sus prop�sitos. La Biblia es el libro m�s difundido del mundo, y tambi�n existen muchas publicaciones para ayudarnos a entender las valiosas verdades que esta contiene. F�jese, por ejemplo, en el �ndice del manual de estudio �Qu� ense�a realmente la Biblia? Algunos de sus cap�tulos son ��Cu�l es la verdad acerca de Dios?�, ��D�nde est�n los muertos?�, ��Qu� es el Reino de Dios?� y ��Por qu� permite Dios el sufrimiento?�. El hombre se ha planteado estas preguntas desde hace miles de a�os, y ahora, por fin, ya se
puede saber la respuesta. Pese a siglos de ignorancia y de ense�anzas ap�statas difundidas por la cristiandad, las verdades de la Palabra de Dios han prevalecido, y hoy sirven de alimento a quienes desean servir a Jehov�. w07 1/11 1:17, 18 Agosto 19@La misericordia se alboroza triunfalmente sobre el juicio (Sant. 2:13).@Santiago habla aqu� de la misericordia con la que cada siervo de Jehov� debe tratar a su pr�jimo. Pues bien, �en qu� sentido se alboroza triunfalmente la misericordia sobre el juicio? En el sentido de que cuando el cristiano tenga que rendirle cuentas, Jehov� recordar� sus obras de misericordia y lo perdonar� tomando como base el sacrificio redentor de su Hijo (Rom. 14:12). Sin duda, una de las razones por las que David fue tratado con misericordia cuando pec� con Batseba es que �l mismo hab�a sido misericordioso (1 Sam. 24:4-7). Por otro lado, �al que no practica misericordia se le har� su juicio sin misericordia� (Sant. 2:13a). No deber�a sorprendernos, por tanto, que la lista de individuos a los que Jehov� considera �merecedores de muerte� incluya a los �despiadados�, o faltos de misericordia (Rom. 1:31, 32). En su Serm�n del Monte, Jes�s dijo: �Felices son los misericordiosos, puesto que a ellos se les mostrar� misericordia� (Mat. 5:7). Sus palabras son muy claras y contundentes: quien quiera recibir la misericordia divina tiene que ser misericordioso. w07 15/9 1:19, 20 Agosto 20@Estas cosas siguieron aconteci�ndoles como ejemplos, y fueron escritas para amonestaci�n de nosotros (1 Cor. 10:11).@David fue comandante militar, m�sico y compositor, pero lo m�s notable es que fue �un hombre agradable [al] coraz�n [de Jehov�]� (1 Sam. 13:14). A Daniel no lo conocemos por su trabajo como funcionario del gobierno babilonio, sino por su servicio leal como profeta de Jehov�. Ester, m�s que por ser reina de Persia, sobresale por su fe y valor. Pedro, Andr�s, Santiago y Juan fueron h�biles pescadores, pero los recordamos m�s como ap�stoles de Jes�s. Y el mejor ejemplo de todos es el propio Jes�s, quien para nosotros no es �el carpintero�, sino �el Cristo� (Mar. 6:3; Mat. 16:16). Todos estos siervos de Dios ten�an bien claro que su vida no deb�a girar en torno a sus talentos, sus bienes o su posici�n social, sino en torno a su servicio a Dios. Sab�an que el prop�sito m�s noble y m�s gratificante que existe es el de ser siervos de Dios. w07 1/10 1:16, 17 Agosto 21@Por esta raz�n te dej� en Creta, para que corrigieras las cosas defectuosas e hicieras nombramientos de ancianos (Tito 1:5).@A fin de llevar a t�rmino esa comisi�n, Tito tendr�a que lidiar con un problema en el que estaban implicadas las conciencias de algunos cretenses. Pablo primero le explic� a Tito las cualidades que deb�a reunir todo var�n que fuera a servir como anciano en una congregaci�n. Luego le se�al� que en la isla hab�a �muchos hombres ingobernables, habladores sin provecho y enga�adores de la mente�, que andaban corrompiendo �casas enteras, ense�ando cosas que no [deb�an]�. Por esta raz�n, Tito frecuentemente tendr�a que censurarlos (Tito 1:10-14; 1 Tim. 4:7). El ap�stol le dijo que aquellos individuos ten�an �contaminada tanto la mente como la conciencia�. Seg�n el t�rmino original traducido �contaminada�, la idea es que se hab�an �manchado�, tal como queda una hermosa prenda de vestir al deste�irse otra (Tito 1:15). Algunos de esos hombres tal vez fueran de origen jud�o, ya que Pablo dice que �se [adher�an] a la circuncisi�n�. Aunque las congregaciones actuales ya no tienen que hacer frente a los defensores de esa doctrina, todav�a podemos aprender mucho sobre la conciencia examinando los consejos de Pablo a Tito. w07 15/10 2:1, 2 Agosto 22@Ancho y espacioso es el camino que conduce a la destrucci�n (Mat. 7:13).@Jes�s dijo que la mayor�a de la gente va por el camino ancho que conduce a la destrucci�n. Algunas personas se encuentran en ese camino porque han rechazado deliberadamente lo que ense�a la Biblia. Pero muchas otras est�n en �l porque han sido enga�adas; se les ha hecho creer que ese es el modo de vivir que complace a Dios. Jes�s dijo que sus seguidores dar�an a conocer las buenas nuevas del Reino y har�an disc�pulos (Mat. 28:19, 20). Para los verdaderos cristianos, participar en la predicaci�n es una manera fundamental de demostrar su lealtad a Dios y su fe. Eso explica por qu� los primeros disc�pulos de Jes�s no dejaron de predicar ni siquiera cuando sufrieron oposici�n. M�s bien, le pidieron a Jehov� que les diera
fuerzas para seguir �hablando [su] palabra con todo denuedo�. �l les respondi� llen�ndolos de esp�ritu santo, y as� pudieron hablar la palabra de Dios con valor (Hech. 4:18, 29, 31). w08 15/1 1:7, 8 Agosto 23@H�ganse imitadores de m�, as� como yo lo soy de Cristo (1 Cor. 11:1).@El ap�stol Pablo imit� al m�s grande de los misioneros, Jesucristo. Por eso exhort� a sus hermanos a que lo imitaran a �l del mismo modo como �l hab�a imitado al Cristo. De hecho, Jes�s mismo exhort� a sus ap�stoles a imitarlo. Despu�s de darles una perfecta demostraci�n de humildad lav�ndoles los pies, dijo: �Les he puesto el modelo, [...] as� como yo hice con ustedes, ustedes tambi�n deben hacerlo� (Juan 13:12-15). Hoy, de igual modo, los cristianos debemos imitar a Jes�s tanto en lo que decimos y hacemos como en las cualidades que manifestamos (1 Ped. 2:21). Recordamos que un misionero es aquel que es enviado para evangelizar, es decir, para llevar buenas nuevas a la gente. Aunque a nosotros no se nos haya enviado como misioneros a un pa�s lejano, s� podemos tener el mismo esp�ritu evangelizador. �C�mo lo logramos? Imitando el entusiasmo con el que Jes�s predicaba las buenas nuevas. En el a�o 2007, 6.957.854 publicadores del Reino efectuaron �la obra de evangelizador� en 236 pa�ses y territorios (2 Tim. 4:5). w08 15/2 4:1, 2 Agosto 24@Dios [...] ha prestado atenci�n a la voz de mi oraci�n (Sal. 66:19).@Si tenemos siempre presente a Jehov�, �l contestar� nuestras oraciones (Sal. 65:2). Una prueba de ello es el caso del siervo de mayor edad de Abrah�n, quien seguramente era Eliezer. Este hombre viaj� a Mesopotamia por orden de su amo en busca de una esposa para Isaac, una mujer que sirviera a Jehov�. Acudi� a Dios, le pidi� ayuda y, al ver que Rebeca se ofrec�a para dar de beber a sus camellos, supo reconocer la respuesta divina. Debido a que era un hombre de oraci�n, encontr� a la que llegar�a a ser la amada esposa de Isaac (G�n. 24:12-14, 67). �No deber�amos tener esa misma confianza en que Jehov� contestar� nuestras oraciones? Por otra parte, las circunstancias tal vez nos obliguen a ser breves al orar. En una ocasi�n, el rey persa Artajerjes not� que su copero, Nehem�as, estaba triste, y quiso saber por qu�. Nehem�as or� �al instante [...] al Dios de los cielos�. Su oraci�n tuvo que ser corta y en silencio, pero Jehov� la contest�, y Nehem�as recibi� el respaldo del rey para reconstruir las murallas de Jerusal�n (Neh. 2:18). Como vemos, hasta las oraciones breves hechas en silencio dan resultados. w08 15/2 1:4, 5 Agosto 25@Toda Escritura es inspirada de Dios (2 Tim. 3:16).@Jehov� estim� conveniente que se hiciera un relato escrito del ministerio terrestre de Jes�s. Tambi�n decidi� que quedara constancia de Su relaci�n con los cristianos ungidos del siglo primero, as� como de los consejos que les daba. Por eso inspir� la redacci�n de las Escrituras Griegas Cristianas, que se a�adieron a las ya existentes Escrituras Hebreas. Estas �ltimas �las Escrituras Hebreas� se escribieron en principio para el Israel natural, durante el per�odo en que este disfrut� de una relaci�n especial con Dios. Y las Escrituras Griegas Cristianas se escribieron principalmente para �el Israel de Dios�, compuesto por los que han sido ungidos para ser hermanos de Cristo e hijos espirituales de Dios (G�l. 6:16). Ahora bien, tal como los no israelitas pod�an beneficiarse mucho del estudio de las Escrituras Hebreas, as� tambi�n los cristianos que no son ungidos obtienen beneficios incalculables al estudiar y aplicar los consejos de las Escrituras Griegas. w08 15/1 4:11 Agosto 26@Conf�a en Jehov� con todo tu coraz�n (Pro. 3:5).@Aunque quiz� no comprendamos del todo por qu� se toman ciertas decisiones en la organizaci�n de Jehov�, tenemos muchas razones para confiar en la gu�a que Dios nos da mediante su fiel conducto de comunicaci�n. A veces puede parecer que nuestros enemigos se est�n saliendo con la suya. Desde nuestro limitado punto de vista, tal vez no veamos el cuadro completo. Sin embargo, Jehov� puede intervenir en el momento justo. Podemos confiar en que �l est� con su pueblo para guiarlo, protegerlo y liberarlo. Tenemos sobradas razones para confiar en esta promesa: �[Jehov�] no dejar� a los que le son leales. Hasta tiempo indefinido ciertamente ser�n guardados� (Sal. 37:28). Nunca olvidemos que a los siervos de Dios de hoy d�a
tambi�n nos respaldan poderosas fuerzas ang�licas. Con su apoyo, podemos �estar firmes y ver la salvaci�n de Jehov� (�xo. 14:13). Tambi�n nos ayudar� a �estar firmes� llevar puesta la armadura espiritual que Pablo describi� (Efe. 6:11-18). w07 15/12 2:16-18 Agosto 27@El cetro no se apartar� de Jud�, ni el bast�n de comandante de entre sus pies, hasta que venga Sil� (G�n. 49:10).@El primer descendiente de Jud� que escogi� Jehov� para reinar sobre su pueblo fue un pastor: David, el hijo de Jes� (1 Sam. 16:1-13). Pese a que cometi� graves errores y pecados, David contaba con la aprobaci�n de Jehov�, pues era un hombre leal que apoyaba la soberan�a divina. Dios hizo un pacto con �l y en este revel� m�s detalles sobre la profec�a de Ed�n. �Ciertamente levantar� tu descendencia despu�s de ti, que saldr� de tus entra�as �le dijo Jehov�; y realmente establecer� con firmeza su reino.� Esa �descendencia� no pod�a limitarse a Salom�n, el hijo y sucesor de David, ya que Dios tambi�n declar�: �Establecer� el trono de su reino firmemente hasta tiempo indefinido�. Seg�n el pacto dav�dico, la prometida �descendencia� del Reino vendr�a del linaje de David (2 Sam. 7:12, 13). w07 1/12 1:13, 14 Agosto 28@Sobre el le�n joven y la cobra pisar�s; hollar�s al leoncillo crinado y a la culebra grande (Sal. 91:13).@El salmista compara a Satan�s con un le�n joven y con una cobra, lo cual nos ayuda a entender mejor c�mo act�a. Al igual que un le�n, Satan�s a veces ataca frontalmente vali�ndose de la persecuci�n o de leyes que perjudican a los siervos de Jehov� (Sal. 94:20). Aunque estos ataques directos quiz�s hagan que algunos cristianos abandonen el pueblo de Jehov�, a menudo tienen el efecto contrario: los siervos de Dios se unen todav�a m�s. Pero �qu� hay de los ataques m�s sutiles, como los de una cobra? El Diablo emplea su inteligencia sobrehumana para lanzar mortales ataques a traici�n, como hace una serpiente venenosa desde su escondrijo. As� ha envenenado la mente de algunos siervos de Jehov� hasta el punto de lograr que hagan su voluntad y no la de Dios. Claro, esto ha tenido lamentables resultados. Afortunadamente, nosotros no estamos en ignorancia de los designios de Satan�s (2 Cor. 2:11). w07 1/10 3:3, 4 Agosto 29@Sus hermanos, de hecho, no ejerc�an fe en �l (Juan 7:5).@Una cualidad que nos ayuda a hacer disc�pulos es la paciencia. Esto es as� porque, aunque nuestro mensaje cristiano exige que las personas act�en con urgencia, en muchos casos les tomar� bastante tiempo ponerse de parte de la verdad (1 Cor. 7:29). Algunas personas que valoran la verdad necesitan que les dediquemos m�s tiempo de lo habitual para que puedan cambiar sus puntos de vista, actitudes y prioridades. Jes�s no se impacient� porque su medio hermano Santiago tardara en hacerse disc�pulo. Aunque parece que Santiago conoc�a bien la labor evangelizadora de Jes�s, por alguna raz�n no se decid�a a dar ese paso. Sin embargo, debi� hacerlo en el a�o 33, en el breve per�odo transcurrido entre la muerte de Cristo y el Pentecost�s. Llegamos a esta conclusi�n porque, como dan a entender las Escrituras, en ese per�odo ya se estaba reuniendo junto con su madre, sus hermanos y los ap�stoles para orar (Hech. 1:13, 14). Santiago progres� espiritualmente y m�s tarde asumi� importantes funciones en la congregaci�n cristiana (Hech. 15:13; 1 Cor. 15:7). w07 15/11 1:12, 14 Agosto 30@En cualquier ciudad o aldea [...], busquen hasta descubrir qui�n en ella es merecedor (Mat. 10:11).@Jes�s era perfecto y pod�a distinguir en el acto qui�n merec�a recibir su ense�anza y qui�n no. Claro, a nosotros nos cuesta mucho m�s trabajo encontrar a quienes est�n �correctamente dispuestos para vida eterna� (Hech. 13:48). Como los ap�stoles, tenemos que buscar personas dispuestas a o�r y aprender la verdad b�blica. Podemos encontrarlas escuchando cuidadosamente a todos nuestros interlocutores y fij�ndonos bien en la actitud de cada uno de ellos. Despu�s de conversar con quienes demuestran cierto inter�s en las buenas nuevas del Reino, �qu� debemos hacer? Seguir pensando en sus necesidades espirituales. Algo que nos permitir� continuar ayud�ndolos es anotar lo que nos ha revelado la conversaci�n. Cada vez que volvamos a visitarlos, tenemos que escucharlos con atenci�n para comprender mejor sus creencias, actitudes y circunstancias personales. w07 15/11 2:11, 12 Agosto 31@Ustedes ni han o�do su voz en ning�n tiempo ni visto su figura (Juan
5:37).@Jehov� dot� a Ad�n y Eva de conciencia, y todos los seres humanos hemos heredado de ellos dicha facultad. G�nesis 1:27 se�ala que estamos hechos a la imagen de Dios. Por supuesto, no somos como Dios f�sicamente, ya que �l es un esp�ritu y nosotros somos de carne y hueso. M�s bien, el que estemos hechos a su imagen quiere decir que tenemos en nuestro interior sus mismas cualidades, entre ellas el sentido moral caracter�stico de la conciencia. En vista del origen de estas cualidades, si queremos educar nuestra voz interior y lograr que sea m�s confiable, tenemos que conocer mejor al Creador y acercarnos a �l. La Biblia indica que, en el sentido m�s amplio del t�rmino, Jehov� es el Padre de la humanidad entera (Isa. 64:8). Por eso, todos deber�amos estar deseosos de acercarnos cada vez m�s a �l y aprender sus normas y criterios (Sant. 4:8). Nosotros no hemos o�do literalmente la voz de Dios, pero s� podemos lograr que su palabra se convierta en parte de nosotros, lo que nos permite asimilar la forma de sentir y actuar de Jehov�. w07 15/10 1:14, 15 Septiembre 1@Si alguien quiere venir en pos de m�, rep�diese a s� mismo y tome su madero de tormento y s�game de continuo (Mat. 16:24).@En cierta ocasi�n, el ap�stol Pedro le dijo a Jes�s: ��Mira! Nosotros hemos dejado todas las cosas y te hemos seguido� (Mat. 19:27). En efecto, cuando Pedro, Andr�s, Santiago y Juan recibieron la invitaci�n de seguirlo, dejaron sus redes sin pensarlo dos veces. Renunciaron al negocio de la pesca e hicieron del ministerio su ocupaci�n principal. Seg�n el Evangelio de Lucas, Pedro dijo: ��Mira! Nosotros hemos dejado nuestras propias cosas y te hemos seguido� (Luc. 18:28). La mayor�a de nosotros no hemos tenido que dejar atr�s todas nuestras cosas para seguir a Jes�s. Lo que s� tuvimos que hacer fue �repudiarnos a nosotros mismos� para llegar a ser disc�pulos suyos y siervos devotos de Jehov�. Y esto nos ha tra�do muchas bendiciones (Mat. 19:29). Imitar el esp�ritu evangelizador de Cristo nos llena de satisfacci�n, sobre todo si contribuimos, aunque solo sea un poco, a que alguien conozca a Dios y a su amado Hijo. w08 15/2 4:4 Septiembre 2@Llegue a ser conocido de todos los hombres lo razonables que son ustedes (Fili. 4:5).@En espa�ol, es dif�cil transmitir con un solo t�rmino todo el sentido de la palabra griega que aqu� se traduce �lo razonables�. Una obra de consulta se�ala: �El vocablo lleva impl�cita la idea de estar dispuesto a ceder en los derechos de uno y de tratar a la gente con consideraci�n y amabilidad�. As� pues, tiene el sentido de ser razonable y flexible, de no insistir en aplicar la ley al pie de la letra ni exigir los derechos propios. Tambi�n tiene el sentido de someterse a quienes tienen autoridad. Una manera en que demostramos que somos razonables es someti�ndonos a la autoridad de Jesucristo (Efe. 5:23). Otra es siendo flexibles con las personas que nos rodean. Estar dispuestos a ceder cuando es necesario tiene muchos beneficios. Pensemos, por ejemplo, en lo que sucede cuando conducimos. Hay ocasiones, quiz� al llegar al cruce con una calle principal, en que es necesario ceder el paso a otros conductores por razones de seguridad y para no entorpecer la circulaci�n. w08 15/3 1:2, 3 Septiembre 3@Paga al Alt�simo tus votos (Sal. 50:14).@Los votos que se intercambian el d�a de la boda son un asunto serio que conlleva gran responsabilidad (Deu. 23:21). Pensemos en el caso de Jeft�, quien fue juez en Israel durante el siglo XII antes de nuestra era. Jeft� le hizo este voto a Jehov�: �Si t� sin falta das a los hijos de Amm�n en mi mano, entonces tiene que suceder que el que venga saliendo, que salga de las puertas de mi casa a mi encuentro cuando yo vuelva en paz de los hijos de Amm�n, tiene que llegar a ser entonces de Jehov�, y tengo que ofrecer a ese como ofrenda quemada�. Al llegar a su casa en Mizp�, quien sali� a recibirlo era su �nica hija. Entonces, Jeft� dijo: �He abierto mi boca a Jehov�, y no puedo volverme atr�s� (Jue. 11:30, 31, 35). �l cumpli� su promesa a Jehov�. Es cierto que el voto de Jeft� era distinto a los votos matrimoniales. No obstante, el hecho de que �l lo cumpliera sirve de ejemplo a las parejas cristianas. w08 15/3 2:5, 6 Septiembre 4@Me he entumecido y he quedado aplastado hasta grado extremo; he rugido por causa del gemido de mi coraz�n. Mi propio coraz�n ha palpitado pesadamente, me ha dejado mi poder, y la luz de mis propios ojos tampoco est�
conmigo (Sal. 38:8, 10).@�Est� usted atravesando alguna situaci�n angustiosa? Si as� es, puede estar seguro de que no es el �nico. Millones de personas tienen que enfrentar a diario terribles presiones en este mundo perverso. Para algunas de ellas, el sufrimiento es casi insoportable. A los cristianos no nos sorprende el que haya tantas aflicciones hoy d�a, pues comprendemos que la predicha se�al de la presencia de Jes�s incluye �dolores de angustia� (Mar. 13:8; Mat. 24:3). El t�rmino griego que se traduce �dolores de angustia� se emplea para referirse al intenso dolor que la mujer experimenta durante el parto. Esta imagen describe a la perfecci�n la magnitud del sufrimiento que padece la humanidad en estos tiempos �cr�ticos, dif�ciles de manejar [o �fieros�]� (2 Tim. 3:1, nota). w08 15/3 3:1, 2 Septiembre 5@Su adversario, el Diablo, anda en derredor como le�n rugiente, procurando devorar a alguien (1 Ped. 5:8).@Puesto que somos imperfectos, no es nada f�cil cultivar el fruto del esp�ritu, evitar las obras de la carne y resistir la presi�n del mundo de Satan�s. Aun as�, no nos damos por vencidos; no vamos a permitir que ni nuestras debilidades y tropiezos ni las limitaciones f�sicas nos desanimen tanto que nuestra fe se debilite y nuestro amor por Jehov� se enfr�e. Estamos seguros de que Jehov� va a proteger a la gran muchedumbre cuando sobrevenga la gran tribulaci�n. De todas maneras, nos mantenemos en guardia, pues sabemos que el verdadero enemigo es el Diablo y que �l no se rinde con facilidad. Por ejemplo, se ha valido de ap�statas y de otros medios para tratar de hacernos creer que las ense�anzas del esclavo son falsas. Pero ese m�todo no le ha dado muchos resultados. Tambi�n ha recurrido a la persecuci�n, y, aunque en ocasiones s� ha logrado poner trabas a la obra, lo que generalmente sucede es que la persecuci�n termina fortaleciendo la fe de los hermanos. w08 15/1 5:10, 11 Septiembre 6@�Qu� ser� la se�al de tu presencia? (Mat. 24:3.)@A diferencia de los incr�dulos, los disc�pulos de Jes�s no solo ver�an la se�al de su presencia, sino que tambi�n comprender�an su importancia. �Aprender�an� al contemplar los distintos aspectos de esa se�al y, por tanto, �sabr�an� su verdadero significado. No tendr�an ninguna duda de que ��l est� cerca, a las puertas� (Mat. 24:32, 33). Es verdad que tanto los jud�os incr�dulos como los fieles cristianos ungidos del siglo primero vieron un cumplimiento limitado de las palabras de Jes�s. No obstante, solo sus disc�pulos ungidos �aprendieron� de aquellos sucesos, es decir, comprendieron su verdadero significado. La clase Juan de nuestros d�as ha comprendido lo que realmente significa la se�al. Como grupo, estos ungidos componen en tiempos modernos la �generaci�n� de contempor�neos que no pasar� �hasta que sucedan todas estas cosas� (Mat. 24:34). Esto parece indicar que algunos hermanos ungidos de Cristo a�n estar�n vivos en la Tierra cuando comience la predicha gran tribulaci�n. w08 15/2 5:1, 14, 15 Septiembre 7@�Sientes celos por m�? No, �quisiera yo que todo el pueblo de Jehov� fueran profetas [...]! (N�m. 11:29.)@La Biblia nos habla de personas que se destacaron por su car�cter apacible o manso, como por ejemplo Mois�s. Pese a la gran responsabilidad que ten�a, se dice que �l �era con mucho el m�s manso de todos los hombres que hab�a sobre la superficie del suelo� (N�m. 12:3). Y recordemos que Jehov� le dio fuerzas para que llevara a cabo su voluntad. A Jehov� le complace utilizar a personas apacibles para cumplir su prop�sito. Es obvio, pues, que a los seres humanos imperfectos s� nos es posible manifestar la �apacibilidad que pertenece a la sabidur�a� (Sant. 3:13). Pero �c�mo podemos demostrarla a mayor grado? La apacibilidad forma parte del fruto del esp�ritu santo de Jehov� (G�l. 5:22, 23). Por lo tanto, pid�mosle a Jehov� que nos d� su esp�ritu y esforc�monos por manifestar su fruto. Podemos tener la seguridad de que �l nos ayudar� a ser m�s apacibles. El salmista nos da una raz�n poderosa para manifestar esta cualidad cuando garantiza que Dios �ense�ar� a los mansos Su camino� (Sal. 25:9). w08 15/3 4:7, 8 Septiembre 8@A menos que uno nazca de nuevo, no puede ver el reino de Dios (Juan 3:3).@Aunque nos interesa saber lo que opinan las personas a quienes predicamos, no queremos incomodarlas. Por eso, seguimos el ejemplo de Jes�s. �l no somet�a a nadie a un interrogatorio implacable. M�s bien, empleaba preguntas que hac�an pensar. Adem�s, escuchaba con amabilidad a las personas sinceras y consegu�a que
estuvieran tranquilas y a gusto (Mat. 11:28). Todo el mundo se sent�a con la libertad de mencionarle sus preocupaciones (Mar. 1:40; 5:35, 36; 10:13, 17, 46, 47). En nuestro caso es igual: si queremos que nuestros oyentes sean francos y nos expresen sus opiniones acerca de la Biblia y sus ense�anzas, tenemos que evitar los interrogatorios. Adem�s de emplear h�bilmente las preguntas, podemos entablar conversaciones haciendo una afirmaci�n interesante y luego fij�ndonos en qu� reacci�n provoca. Por ejemplo, cuando Nicodemo escuch� las palabras del texto de hoy, no pudo menos que reaccionar con asombro y seguir escuchando a Jes�s (Juan 3:4-20). Si adoptamos esta t�cnica, es f�cil que las personas se animen a conversar. w07 15/11 2:14, 15 Septiembre 9@Que no [haya] divisi�n en el cuerpo, sino que sus miembros [tengan] el mismo cuidado los unos de los otros (1 Cor. 12:25).@�Recordamos c�mo nos sentimos cuando nos separamos de este mundo perverso y empezamos a relacionarnos con el pueblo de Jehov�? Seguramente, el trato cari�oso y atento de los hermanos nos hizo sentir muy felices. �Qu� contraste tan grande notamos con la rudeza, la malicia y la agresividad que caracterizan a quienes est�n bajo el control de Satan�s! En efecto, hab�amos entrado en un para�so espiritual donde reinan la paz y la unidad (Isa. 48:17, 18; 60:18; 65:25). Sin embargo, con el paso del tiempo puede que empecemos a tener una imagen distorsionada de los hermanos. A causa de nuestra imperfecci�n, tal vez miremos con lupa sus defectos y pasemos por alto sus cualidades espirituales. Dicho de otro modo, puede que dejemos de verlos como los ve Jehov�. Si alguna vez nos sucede esto, esforc�monos por tener la imagen clara que Jehov� tiene de ellos (�xo. 33:13). w08 15/3 5:1, 2 Septiembre 10@Jehov� mismo da la sabidur�a (Pro. 2:6).@En el Para�so, los resucitados podr�n darnos detalles del pasado que ahora desconocemos. All� estar� Enoc, que nos explicar� c�mo reuni� el valor para declarar el mensaje de Jehov� a los imp�os (Jud. 14, 15). No hay duda de que No� nos contar� todo lo que supuso construir el arca. Abrah�n y Sara nos revelar�n c�mo se sintieron al abandonar Ur y vivir en tiendas. Imag�nese a Ester relatando con todo lujo de detalles c�mo defendi� a su pueblo y frustr� el complot de Ham�n (Est. 7:1-6). Y a Jon�s recordando los tres d�as que pas� en el vientre del gran pez, o a Juan el Bautista dici�ndonos lo que sinti� cuando bautiz� a Jes�s (Luc. 3:21, 22; 7:28). �Cu�ntas cosas interesantes descubriremos! Durante el Reinado de Mil A�os de Cristo, tal vez usted tenga la dicha de ense�ar a algunos resucitados �el mism�simo conocimiento de Dios� (Pro. 2:1-5). w07 15/12 1:21, 22 Septiembre 11@Si alguien quiere venir en pos de m�, rep�diese a s� mismo y tome su madero de tormento y s�game de continuo (Mar. 8:34).@Al igual que Jes�s, debemos tener siempre presente la cuesti�n de la soberan�a, pues de lo contrario podr�amos fallarle a Jehov�. F�cilmente podr�amos caer en las trampas de Satan�s, un especialista en despertar el deseo por lo prohibido, como qued� demostrado en el caso de Eva (2 Cor. 11:14; 1 Tim. 2:14). Por otra parte, cuando participamos en el ministerio, nuestro objetivo no es �nicamente que la gente llegue a conocer el mensaje b�blico o las bendiciones del Reino de Dios. Ante todo, queremos que comprendan la cuesti�n de la soberan�a de Jehov�. �Est�n dispuestos a ser cristianos verdaderos, a tomar su �madero de tormento� y sufrir por causa del Reino? �Est�n listos para unirse a los que apoyan la soberan�a de Jehov� y demostrar as� que Satan�s es un mentiroso? (Pro. 27:11.) �Qu� gran privilegio tenemos! No solo podemos apoyar la soberan�a divina, sino que tambi�n podemos ayudar a otros a hacer lo mismo (1 Tim. 4:16). w07 1/12 2:15, 16 Septiembre 12@Jehov� [...] ve lo que es el coraz�n (1 Sam. 16:7).@Una de las razones por las que visitamos vez tras vez a las personas es que tanto su actitud como sus circunstancias pueden cambiar. Es posible que, despu�s de nuestra �ltima visita, algunas de ellas hayan contra�do una enfermedad grave, se hayan quedado sin trabajo o hayan perdido a un ser querido (Ecl. 9:11). O quiz�s ciertos sucesos mundiales las hayan impulsado a pensar seriamente en su futuro. Cualquiera de esas cosas puede hacer que respondan positivamente al mensaje, aunque antes hubieran sido indiferentes o incluso se hubieran opuesto a �l. Por lo tanto, no nos retraigamos de dar a conocer las buenas nuevas en toda ocasi�n oportuna. El ser
humano tiende a encasillar y prejuzgar a los dem�s. Jehov�, en cambio, se fija en las personas individualmente y ve las buenas cualidades que cada una puede desarrollar. Tratemos de imitarlo en nuestro ministerio. Hay muchas experiencias que demuestran que cuando tenemos una actitud positiva hacia toda persona a quien predicamos, obtenemos buenos resultados. w08 15/1 3:11, 12 Septiembre 13@El alimento s�lido pertenece a personas maduras (Heb. 5:14).@Los maestros capaces transmiten la informaci�n de manera sencilla, clara y precisa, y de esta forma evitan complicar la verdad innecesariamente. De modo que no hace falta que a�adamos detalles que no vienen al caso ni que comentemos todo aspecto de los textos que leemos. M�s bien, destaquemos solo lo que sea indispensable para dejar claro el asunto en cuesti�n. A medida que la persona progrese en su estudio, ir� comprendiendo verdades b�blicas cada vez m�s profundas. �Cu�nta informaci�n se ha de analizar en cada sesi�n de estudio? No hay una respuesta �nica, pues las aptitudes y circunstancias del maestro y del estudiante son distintas en cada caso. Sea como sea, recordemos que nuestro objetivo es ayudar al estudiante a desarrollar una fe s�lida. Por lo tanto, debemos darle suficiente tiempo para leer, comprender y aceptar las verdades de la Palabra de Dios. Sin embargo, una vez que el estudiante haya comprendido una idea, pasemos a la siguiente (Col. 2:6, 7). w08 15/1 2:9, 10 Septiembre 14@Resplandezca la luz de ustedes delante de los hombres (Mat. 5:16).@�Se desanimaron los disc�pulos cuando la oposici�n se torn� violenta? De ning�n modo (Hech. 5:28, 29, 40-42). La mayor�a de los siervos de Dios de la actualidad no sufrimos palizas ni somos encarcelados por predicar las buenas nuevas. Sin embargo, todos encaramos alg�n tipo de prueba o dificultad. Por ejemplo, puede que nuestra conciencia educada por la Biblia nos impulse a actuar de un modo que no est� bien visto por la gente o que llame la atenci�n por ser diferente a lo habitual. Los compa�eros de trabajo y de estudios o los vecinos tal vez piensen que somos raros porque basamos nuestras decisiones en los principios b�blicos. No obstante, su reacci�n no debe desanimarnos. En este mundo sumido en la oscuridad espiritual, los cristianos tenemos que �resplandece[r] como iluminadores� (Fili. 2:15). Quiz�s haya personas sinceras que vean nuestras buenas obras, reconozcan su valor y, como resultado, den gloria a Jehov�. w08 15/1 1:9, 10 Septiembre 15@�Qui�n nos separar� del amor del Cristo? (Rom. 8:35.)@Si alguna vez se nos persigue, podemos estar seguros de que Jehov� no nos abandonar� (Rom. 8:38, 39). Pensemos en Aristarco y Gayo, colaboradores de Pablo que tuvieron que enfrentarse a cientos o quiz� miles de personas en el teatro de �feso. La turba se hab�a formado a instancias de Demetrio, uno de los plateros del lugar que vio amenazado su pr�spero negocio a causa de la predicaci�n de Pablo. Aristarco y Gayo seguramente pensaron que iban a morir, pero el principal funcionario p�blico de la ciudad consigui� apaciguar a la muchedumbre (Hech. 19:23-41). Si nosotros hubi�ramos salido de una situaci�n como esa, �habr�amos buscado una forma de vida menos arriesgada? Nada indica que Aristarco y Gayo se acobardaran. Aristarco sab�a que pod�an ser perseguidos por proclamar las buenas nuevas, pues la predicaci�n de Pablo hab�a generado disturbios en su ciudad, Tesal�nica (Hech. 17:5; 20:4). Pero como �l y Gayo andaban en los caminos de Jehov�, contaban con el valor y la fortaleza que �l les daba para resistir la persecuci�n. w08 15/2 2:16, 17 Septiembre 16@Oren unos por otros (Sant. 5:16).@La Biblia tambi�n nos exhorta a que oremos �unos por otros�, aunque no siempre veamos de inmediato una respuesta clara a nuestras oraciones. Por ejemplo, Epafras, �un fiel ministro del Cristo�, or� insistentemente por sus hermanos en la fe. Pablo escribi� lo siguiente desde Roma: �Epafras, que es de entre ustedes [colosenses], esclavo de Cristo Jes�s, les env�a sus saludos, y siempre est� esforz�ndose a favor de ustedes en sus oraciones, para que al fin est�n de pie completos y con firme convicci�n en toda la voluntad de Dios. [...] Se empe�a mucho a favor de ustedes� (Col. 1:7; 4:12, 13). Aunque no nos entrometemos en asuntos ajenos, es probable que sepamos de familiares o amigos que est�n pasando por una prueba dif�cil (1 Ped. 4:15). Una buena manera de ayudarlos es pedir por ellos en nuestras oraciones. A Pablo le
hicieron mucho bien las oraciones de sus hermanos, y las nuestras pueden tener el mismo efecto en los dem�s (2 Cor. 1:10, 11). w08 15/2 1:6, 7 Septiembre 17@Hijo, tus pecados son perdonados (Mar. 2:5).@La actitud de Jes�s atra�a a las personas a su mensaje. Por ejemplo, su amor y su humildad hac�an que los mansos lo buscaran. �l los trataba con compasi�n y los consolaba con palabras llenas de bondad; a muchos incluso los cur� (Mar. 2:1-12). Nosotros podemos ser buenos evangelizadores si cultivamos y manifestamos las mismas cualidades que Jes�s. Por eso, imitemos a nuestro Maestro y prediquemos con entusiasmo. Cuando algunos se hicieron disc�pulos de Jes�s en el siglo primero, Pedro pregunt�: ��Qu� habr� para nosotros, realmente?�. Jes�s le respondi�: �Todo el que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o hijos, o tierras, por causa de mi nombre, recibir� muchas veces m�s, y heredar� la vida eterna� (Mat. 19:27-29). Eso es precisamente lo que recibiremos si continuamos imitando a Jesucristo, el m�s grande de todos los misioneros. w08 15/2 4:15, 17, 18 Septiembre 18@Hijos, sean obedientes a sus padres en todo (Col. 3:20).@La Biblia se�ala cu�l es el papel de cada miembro de la familia. El hombre es cabeza de su esposa y el principal responsable de educar a los hijos. La mujer debe reconocer la autoridad de su esposo, y los hijos deben esforzarse por ser obedientes y as� agradar al Se�or. Todos los miembros de la familia pueden contribuir a la unidad y la paz del hogar si est�n dispuestos a ceder. Pero deben ser equilibrados, pues en algunas ocasiones se puede ceder, mientras que en otras est� mal hacerlo. Por ejemplo, pensemos en El�, sumo sacerdote de Israel. Sus hijos, Hofn� y Fineh�s, eran �hombres que no serv�an para nada [y] no reconoc�an a Jehov�. Pero �l no los corrigi� ni los disciplin�. Como resultado, siguieron obrando mal, y al final Jehov� decidi� que merec�an morir. Cuando a El� se le inform� que hab�an muerto, �l tambi�n falleci�. �Qu� final tan lamentable! (1 Sam. 2:12-17, 22-25, 34, 35; 4:17, 18.) w08 15/3 1:18, 19 Septiembre 19@�C�mo tiene este hombre conocimiento de letras, cuando no ha estudiado en las escuelas? (Juan 7:15.)@�Recibi� Jes�s alg�n tipo de preparaci�n antes de ser ungido como Mes�as? S�, pero no en las escuelas rab�nicas ni bajo la tutela de alg�n prestigioso l�der religioso (comp�rese con Hechos 22:3). Entonces, �por qu� era tan buen maestro? Independientemente de cu�nto haya aprendido Jes�s de su madre, Mar�a, y de su padre adoptivo, Jos�, su capacitaci�n principal provino de la Fuente m�s acreditada que existe. Jes�s afirm� al respecto: �No he hablado de mi propio impulso, sino que el Padre mismo, que me ha enviado, me ha dado mandamiento en cuanto a qu� decir y qu� hablar� (Juan 12:49). Observe que el Hijo recibi� instrucciones precisas en cuanto a qu� ense�ar. No hay duda de que antes de venir a la Tierra Jes�s pas� mucho tiempo recibiendo preparaci�n de su Padre. �Puede haber mejor capacitaci�n que esa? w08 15/2 3:9, 10 Septiembre 20@Esto es excelente y acepto a vista de nuestro Salvador, Dios, cuya voluntad es que hombres de toda clase se salven y lleguen a un conocimiento exacto de la verdad (1 Tim. 2:3, 4).@La voluntad de Jehov� es que gente de todas las naciones lo adore. Por eso ha dispuesto que se declaren �buenas nuevas eternas [...] a toda naci�n y tribu y lengua y pueblo� (Rev. 14:6). Adem�s, Jes�s dijo: �El campo es el mundo� (Mat. 13:38). �Qu� implica todo esto para usted y su familia? No todos podemos ir a pa�ses distantes para predicar el mensaje del Reino. Pero tal vez podamos llevar dicho mensaje a la gente de otras naciones que viva en nuestro territorio. �Estamos atentos a las oportunidades de dar testimonio a toda clase de personas, y no solo a aquellas a las que les hemos predicado por a�os? �Por qu� no nos proponemos llegar a quienes no han recibido a�n un testimonio cabal? (Rom. 15:20, 21.) w08 15/3 5:16, 17 Septiembre 21@Perseveren en la oraci�n (Rom. 12:12).@Es fundamental que las familias cristianas estudien juntas regularmente. Ahora bien, puede que no sea f�cil establecer un estudio de familia y llevarlo a cabo todas las semanas. Un esposo reconoce lo siguiente: �Si pudi�ramos volver atr�s y cambiar algo, fijar�amos un horario de estudio desde el principio de nuestro matrimonio y nos esforzar�amos por cumplirlo�. Y a�ade: �Es maravilloso ver la emoci�n que siente mi esposa cuando estudiamos juntos y encontramos alguna joya espiritual�. Orar
juntos tambi�n es importante. Una relaci�n estrecha con Jehov� fortalece los lazos de los c�nyuges que lo adoran juntos (Sant. 4:8). Un cristiano menciona: �Cuando se comete un error que molesta al otro, es bueno pedirle perd�n de inmediato y mencionar el asunto cuando se ora en pareja, por leve que parezca el error. Esta es una manera de demostrar pesar sincero� (Efe. 6:18). w08 15/3 2:11, 12 Septiembre 22@Esta no es la sabidur�a que desciende de arriba, sino que es la terrenal, animal, demon�aca (Sant. 3:15).@El disc�pulo Santiago dijo que los celos y el esp�ritu de contradicci�n son �terrenales� porque son carnales y no reflejan ninguna espiritualidad. Tambi�n calific� estas actitudes de �animales�, pues son el resultado de tendencias carnales y se parecen a las caracter�sticas de las criaturas irracionales. Y por �ltimo dijo que eran �demon�acas� porque reflejan las actitudes de los esp�ritus malignos. Todos los miembros de la congregaci�n deber�amos analizar nuestra propia conducta y esforzarnos por eliminar esas actitudes negativas. Y en particular deben hacerlo los superintendentes, como maestros de la congregaci�n que son. Sin embargo, hay que reconocer que no es nada f�cil eliminarlas; nuestra imperfecci�n y la influencia del mundo nos lo dificultan. Pero los siervos de Dios nos sujetamos a los consejos de la Biblia y contamos con la ayuda de la hermandad mundial; por eso podemos seguir adelante (Sal. 73:23, 24). w08 15/3 4:15, 16 Septiembre 23@Nos hallamos perplejos, pero no absolutamente sin salida (2 Cor. 4:8).@La Palabra de Dios, la Biblia, puede ayudarnos a sobrellevar cualquier problema. Es �provechosa para ense�ar, para censurar, para rectificar las cosas, para disciplinar en justicia, para que el hombre de Dios sea enteramente competente y est� completamente equipado para toda buena obra� (2 Tim. 3:16, 17). La Palabra de Dios le permite al cristiano lidiar con las preocupaciones de la vida, pues lo convierte en alguien �enteramente competente� y �completamente equipado�. El significado literal del t�rmino griego que se traduce por �completamente equipado� es �aprovisionado por completo� o �preparado y a punto�. En la antig�edad, dicha palabra pod�a utilizarse para referirse a un barco que se equipaba con todo lo necesario para un viaje o a una m�quina que estaba lista para efectuar la tarea para la que hab�a sido concebida. De igual modo, Jehov� nos suministra mediante su Palabra lo necesario para enfrentar todo lo que se atraviese en nuestro camino. Por eso podemos decir: �Si Dios lo permite, podr� soportarlo con su ayuda�. w08 15/3 3:16, 17 Septiembre 24@Feliz es todo el que teme a Jehov�, que anda en sus caminos (Sal. 128:1).@La felicidad. �Qui�n no la desea? Claro, seguramente todos concordamos en que una cosa es desear y buscar la felicidad, y otra muy distinta, alcanzarla. Con todo, la felicidad est� a nuestro alcance. La clave est� en tener respeto reverencial por Dios y andar en sus caminos, es decir, hacer su voluntad. Y esto se reflejar� en nuestra personalidad y conducta. Por ejemplo, los que temen a Jehov� son como �l: dignos de confianza. Jehov� cumpli� todas las promesas que le hizo al antiguo Israel (1 Rey. 8:56). De las promesas que nosotros pudi�ramos hacer, la dedicaci�n a Dios es la m�s importante, y para cumplir con ella debemos orar con frecuencia. Imitemos al salmista David, quien or�: �T� mismo, oh Dios, has escuchado mis votos. [...] As� que ciertamente celebrar� tu nombre con melod�a para siempre, para [pagar] mis votos d�a tras d�a� (Sal. 61:5, 8; Ecl. 5:4-6). Si queremos ser amigos de Dios, tenemos que ser confiables (Sal. 15:1, 4). w08 15/2 2:1-3 Septiembre 25@No pertenece al hombre [...] dirigir su paso (Jer. 10:23).@Mientras el pueblo de Israel y su rey se sometieran a la soberan�a divina, Jehov� los proteger�a y bendecir�a. Esto fue lo que ocurri� durante el reinado de Salom�n, el cual se distingui� por una paz y prosperidad inigualables. Adem�s, este reinado ilustr� c�mo ser� la vida bajo el Reino de Dios, cuando no quede rastro de la influencia de Satan�s y ya se haya vindicado la soberan�a de Jehov� (1 Rey. 4:20, 25). Pero, por desgracia, la mayor�a de los reyes del linaje de David no estuvieron a la altura de los requisitos divinos, y el pueblo cay� vez tras vez en la trampa de la idolatr�a y la inmoralidad. Al final, Jehov� permiti� que los babilonios destruyeran este reino en el a�o 607 antes de nuestra era. Es cierto
que el reino de Jud�, con sus reyes del linaje de David, dej� de existir, tal como le hab�a ocurrido antes al reino de Israel. Sin embargo, esto no prob� que Jehov� no tuviera el derecho a gobernar o que no pudiera hacerlo bien. Al contrario, puso al descubierto los lamentables resultados de independizarse de Dios y dejarse llevar por Satan�s (Pro. 16:25). w07 1/12 1:16, 17 Septiembre 26@Consider�monos unos a otros para incitarnos al amor y a las obras excelentes, sin abandonar el reunirnos (Heb. 10:24, 25).@Estar dispuestos a ceder no significa ser desleales a la fe cristiana y a los principios divinos. �Qu� postura adoptaron los primeros cristianos cuando los l�deres religiosos les ordenaron que dejaran de ense�ar acerca de Jes�s? Pedro y el resto de los ap�stoles contestaron con valor: �Tenemos que obedecer a Dios como gobernante m�s bien que a los hombres� (Hech. 4:18-20; 5:28, 29). Lo mismo sucede hoy: cuando �las autoridades superiores� intentan obligarnos a dejar de predicar las buenas nuevas, no nos detenemos, aunque s� actuamos con m�s discreci�n. Si imponen restricciones a la predicaci�n de casa en casa, buscamos otras maneras de hablar con las personas y seguir cumpliendo con nuestra comisi�n divina. Y si proscriben nuestras reuniones, nos reunimos en grupos peque�os para no llamar la atenci�n (Rom. 13:1). w08 15/3 1:12 Septiembre 27@Dios no es injusto para olvidar la obra de ustedes y el amor que mostraron para con su nombre (Heb. 6:10).@Jehov� puede leer el coraz�n, pero nosotros no. Nosotros no conocemos todos los motivos de los dem�s. Por consiguiente, debemos esforzarnos por imitar a Jehov� y no concentrarnos en las imperfecciones humanas, que con el tiempo desaparecer�n. �Verdad que ser�a bueno que as� lo hici�ramos? De este modo contribuiremos en gran medida a que haya relaciones pac�ficas entre los hermanos (Efe. 4:23, 24). Pongamos una comparaci�n. Pensemos en una casa que se ve en muy mal estado. La mayor�a de la gente, al ver el aspecto que presenta, cree que lo mejor es derrumbarla. Pero entonces alguien se da cuenta de que la estructura de la casa es s�lida y la restaura. Nosotros podemos hacer algo parecido con nuestros hermanos: en vez de fijarnos en sus defectos superficiales, �podemos ver sus buenas cualidades y su potencial de crecimiento espiritual? En tal caso llegaremos a amarlos por su belleza espiritual, tal como lo hace Jehov�. w08 15/3 5:8, 9 Septiembre 28@H�ganse bondadosos unos con otros, tiernamente compasivos, y perd�nense liberalmente unos a otros (Efe. 4: 32).@Supongamos que existe una relaci�n tensa entre otro cristiano y usted. Si as� fuera, haga cuanto pueda por zanjar las diferencias (Sal. 133:1). Siga la exhortaci�n de Jes�s de Mateo 5:23, 24 o la de Mateo 18:15-17, seg�n sea el caso. Si el Sol ya se ha puesto y usted todav�a est� enojado, no espere m�s para solucionar el problema. A menudo, lo �nico que se necesita es querer perdonar (Efe. 4:25, 26). Los casados deben ser �tiernamente compasivos� y perdonarse siempre que sea preciso. Si usted necesita ser m�s cari�oso y compasivo con su c�nyuge, esfu�rcese por lograrlo buscando la gu�a de Dios y su Palabra. A fin de mejorar la relaci�n y de evitar la infidelidad, �hay algo que deba hacer para cumplir con 1 Corintios 7:1-5? Sin duda este es un aspecto en el que los c�nyuges necesitan ser �tiernamente compasivos�. w07 15/12 1:15, 16 Septiembre 29@Sig[an] andando de una manera digna de Dios, que los llama a su reino y gloria (1 Tes. 2:12).@A los cristianos del siglo primero se les declar� justos y se les ungi� con esp�ritu santo a fin de que en un futuro pudieran recibir la herencia celestial; su ungimiento no los convert�a en reyes mientras a�n estaban en la Tierra. Pero parece que algunos de ellos no lo entend�an de ese modo, pues empezaron a buscar protagonismo entre sus hermanos ungidos, a comportarse como si fueran reyes sobre ellos. Por eso Pablo les dijo: �Ustedes ya est�n hartos, �verdad? Ya son ricos, �verdad? Han empezado a reinar sin nosotros, �verdad? Y verdaderamente desear�a yo que hubieran empezado a reinar, para que nosotros tambi�n rein�ramos con ustedes� (1 Cor. 4:8). El ap�stol les record� a los ungidos de su d�a: �No que seamos nosotros amos sobre la fe de ustedes, sino que somos colaboradores para su gozo� (2 Cor. 1:24). w08 15/1 4:10, 12 Septiembre 30@Arroja tu carga sobre Jehov� mismo, y �l mismo te sustentar�. Nunca
permitir� que tambalee el justo (Sal. 55:22).@A algunos cristianos les provocan mucha tensi�n emocional las experiencias traum�ticas que vivieron en el pasado. Otros cristianos sufren fobias, que se definen como un miedo obsesivo hacia ciertos objetos o situaciones. Por ejemplo, quiz�s les d� miedo hablar en p�blico o hasta asistir a una reuni�n. Imaginemos lo dif�cil que se les hace comentar en las reuniones cristianas o tener una intervenci�n en la Escuela del Ministerio Teocr�tico. Aun as�, demuestran aguante, y todos apreciamos much�simo su presencia y participaci�n. Algo que puede ayudar a la persona a sobrellevar los problemas emocionales es descansar y dormir m�s. Quiz�s sea aconsejable tambi�n seguir un tratamiento m�dico. Sin embargo, confiar en Dios y orarle de continuo resulta especialmente eficaz. Sin falta, pues, �confiemos en Jehov� con todo nuestro coraz�n� (Pro. 3:5, 6). w07 15/7 3:5, 7, 8 Octubre 1@El oprobio mismo ha quebrantado mi coraz�n, y la herida es incurable. Y segu� esperando que alguien se condoliera, pero no hubo nadie; y consoladores, pero no hall� ninguno (Sal. 69:20).@Adem�s de tener que hacer frente a los problemas que afligen a la humanidad en general, nosotros tenemos un �adversario, el Diablo�, quien est� empe�ado en acabar con nuestra fe (1 Ped. 5:8). F�cilmente podr�amos llegar a identificarnos con David, el compositor del salmo citado arriba. �Quiso decir David con estas palabras que hab�a perdido toda esperanza? De ninguna manera. Observemos lo que dijo m�s adelante en el mismo salmo: �Jehov� est� escuchando a los pobres, y realmente no desprecia a los suyos que son prisioneros� (Sal. 69:33, nota). Hay ocasiones en las que podr�amos sentirnos prisioneros, por decirlo as�, de nuestras angustias y aflicciones. Tal vez creamos, y con raz�n, que los dem�s no entienden lo que estamos pasando. Pero al igual que a David, nos ser� de gran consuelo saber que Jehov� comprende a la perfecci�n nuestra angustia (Sal. 34:15). w08 15/3 3:3, 4 Octubre 2@Conf�a en Jehov� con todo tu coraz�n (Pro. 3:5).@Los padres cristianos se toman muy en serio su obligaci�n b�blica de mantener a la familia (1 Tim. 5:8). Sin embargo, Satan�s quiere desequilibrarlos en este aspecto, y a veces lo consigue. Algunos cristianos ceden a la presi�n de sus jefes para que trabajen m�s horas y se pierden habitualmente las reuniones. O temen pedir d�as libres para asistir a todas las sesiones de la asamblea de distrito y adorar a Dios con sus hermanos en la fe. Pues bien, la clave para no caer en esta trampa es �conf[iar] en Jehov� (Pro. 3:6). Otra cosa que nos permitir� mantener el equilibrio es recordar que somos miembros de la casa de Jehov� y que �l se ha comprometido a cuidarnos. Padres, �est�n convencidos de que Jehov� los va a ayudar a ustedes y su familia de una u otra forma, si hacen su voluntad? �O caer�n en la trampa del Diablo y, por temor al hombre, har�n lo que �l quiere? (Sal. 91:3.) w07 1/10 3:7 Octubre 3@Yo, Jehov�, soy [...] Aquel que te ense�a para que te beneficies (Isa. 48:17).@Para que nuestra labor de ense�anza sea productiva, tenemos que llegar al coraz�n. El estudiante debe comprender que lo que est� aprendiendo es aplicable a �l y puede beneficiarle. Debe entender que si sigue los consejos de las Escrituras, su vida mejorar� (Isa. 48:18). Imaginemos que estamos analizando Hebreos 10:24, 25, donde se anima a los cristianos a reunirse a fin de fortalecerse espiritualmente y disfrutar del amor y el cari�o de los hermanos. Si el estudiante no asiste todav�a a las reuniones, podr�amos explicarle brevemente c�mo se llevan a cabo y qu� temas se analizan. Tambi�n podr�amos mencionarle que las reuniones forman parte de nuestra adoraci�n y que todos nos beneficiamos cuando asistimos a ellas. Luego invit�moslo a acompa�arnos. Claro, lo que debe mover al estudiante a seguir los mandatos de la Biblia es su deseo de obedecer a Jehov�, no el de complacer a la persona con quien estudia (G�l. 6:4, 5). w08 15/1 2:12, 13 Octubre 4@Mant�nganse alerta (Mar. 13:37).@Ya han pasado m�s de nueve d�cadas desde 1914, a�o en que Jes�s fue coronado en los cielos. Y por dif�cil que resulte, debemos estar listos y mantenernos alerta. Algo que nos ayuda a lograrlo es comprender que, aunque no lo veamos, Cristo ya est� presente ejerciendo su autoridad de Rey. Esto tambi�n nos mantiene en expectativa, sabiendo que pronto, �a la hora que menos pensemos�, vendr� para destruir a sus enemigos (Luc. 12:40).
Entender el significado de la presencia de Cristo debe intensificar nuestro sentido de urgencia. Sabemos que Jes�s ya est� presente y que ha estado reinando invisiblemente en los cielos desde 1914. Por lo tanto, debemos estar m�s decididos que nunca a participar de lleno en la obra que �l profetiz� cuando dijo: �Estas buenas nuevas del reino se predicar�n en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones; y entonces vendr� el fin� (Mat. 24:14). w08 15/2 5:16, 17 Octubre 5@Entender�s el temor de Jehov�, y hallar�s el mism�simo conocimiento de Dios (Pro. 2:5).@Es mucho lo que los padres pueden hacer para estimular el inter�s de sus hijos por los asuntos espirituales. Jam�s deben subestimar la capacidad de los ni�os para captar cosas profundas. Tal vez podr�an encargarles que investiguen alg�n tema y luego hacerles preguntas en el estudio de familia sobre lo que han aprendido. Este estudio tambi�n es un buen momento para ensayar con ellos c�mo defender sus creencias y c�mo probar que lo que han aprendido es la verdad. As� es, el estudio profundo de la Palabra de Dios puede acercarnos m�s a Jehov�. La propia Biblia muestra por qu� es tan valioso: �La sabidur�a es para una protecci�n lo mismo que el dinero es para una protecci�n; pero la ventaja del conocimiento es que la sabidur�a misma conserva vivos a sus due�os� (Ecl. 7:12). De modo que vale la pena esforzarse por entender mejor las cosas espirituales. w07 1/11 2:16, 18 Octubre 6@El mundo va pasando, y tambi�n su deseo (1 Juan 2:17).@Satan�s, �el gobernante de este mundo�, no pudo con Jesucristo (Juan 12:31; 14:30). Y est� claro que usted no desea que el Diablo y su mundo lo controlen. Por consiguiente, tome muy en serio las palabras del ap�stol Juan: �No est�n amando ni al mundo ni las cosas que est�n en el mundo� (1 Juan 2:15). Padres, �est�n ayudando a sus hijos a �mantenerse sin mancha del mundo�? (Sant. 1:27.) Al igual que un pescador enrolla el hilo para atraer hacia s� a un pez, a Satan�s le encantar�a atraer a sus hijos, y para ello utiliza varios m�todos. Existen agrupaciones y otras organizaciones concebidas para que los j�venes encajen en el mundo de Satan�s. Sin embargo, los siervos de Jehov� ya pertenecemos a la �nica organizaci�n que resistir� el fin de este malvado sistema de cosas. De modo que todos debemos animar a los j�venes cristianos a tener �mucho que hacer en la obra del Se�or� (1 Cor. 15:58). Y los padres cristianos, en particular, tienen que ayudar a sus hijos a fijarse metas que los preparen para el d�a de Jehov�. Solo as� disfrutar�n de una vida feliz y gratificante que honre a Dios. w07 15/12 1:18, 19 Octubre 7@Estoy con ustedes todos los d�as hasta la conclusi�n del sistema de cosas (Mat. 28:20).@La cifra de 144.000 cristianos ungidos no se alcanz� en el siglo primero. El llamamiento sigui� adelante hasta llegar a los tiempos modernos. Despu�s que Jes�s empez� a reinar, en 1914, se sucedieron r�pidamente varios acontecimientos. En primer lugar, Jes�s elimin� de los cielos todo rastro de oposici�n al gobierno divino (Rev. 12:10, 12). Despu�s dio atenci�n a la obra de recoger a los miembros restantes de su gobierno con el fin de completar la cantidad de 144.000. Al parecer, para mediados de la d�cada de 1930 dicha labor ya estaba muy avanzada, pues muchos de los que respond�an al mensaje no ten�an el deseo de ir al cielo. El esp�ritu no estaba dando testimonio con ellos de que eran hijos de Dios (comp�rese con Romanos 8:16). Tales personas se identificaban, m�s bien, con las �otras ovejas�, quienes tienen la esperanza de vivir para siempre en un para�so terrestre (Juan 10:16). w08 15/1 4:13, 14 Octubre 8@Esto es lo que el amor de Dios significa: que observemos sus mandamientos (1 Juan 5:3).@Veamos una disposici�n de la Ley mosaica que destaca la raz�n por la que debemos ceder. Bajo dicha Ley, los esclavos hebreos ten�an que ser liberados en el s�ptimo a�o de su servidumbre o en el a�o de Jubileo, lo que llegara primero. No obstante, el esclavo pod�a renunciar a su libertad (�xo. 21:5, 6). �Por qu� habr�a de hacerlo? Por amor. As� es, si su amo lo hab�a tratado bien, el amor pod�a impulsarlo a continuar bajo su autoridad. De igual modo, nuestro amor por Jehov� nos impulsa a dedicarnos a �l y a vivir de acuerdo con esa dedicaci�n (Rom. 14:7, 8). Esta clase de amor no busca sus propios intereses (1 Cor. 13:4, 5). En el trato con quienes nos rodean, el amor hace que cedamos y que antepongamos su bienestar al nuestro. En efecto, velamos por sus intereses en vez de dejarnos dominar por el ego�smo (Fili. 2:2, 3). w08 15/3 1:5, 6
Octubre 9@El cuerpo es uno, pero tiene muchos miembros (1 Cor. 12:12).@Tal como los �rganos del cuerpo son distintos entre s�, as� tambi�n los miembros de la congregaci�n tienen caracter�sticas y aptitudes muy distintas. Pero Jehov� acepta esa variedad. �l ama y valora a todos los miembros de la congregaci�n. Por eso Pablo nos aconseja que nosotros �[tengamos] el mismo cuidado los unos de los otros� (1 Cor. 12:25). No obstante, hay que reconocer que a veces nos resulta dif�cil seguir ese consejo, sobre todo cuando la personalidad de alguien es muy diferente de la nuestra. Puede que tengamos la tendencia de concentrarnos en los defectos de los hermanos. Eso ser�a comparable a utilizar una c�mara con un lente que permite enfocar a una persona muy de cerca: solo podr�amos ver una parte muy reducida de ella. Jehov�, en cambio, ve a los hermanos como si fuera a trav�s de un lente gran angular, con el que puede captarse la imagen tanto de la persona como de aquello que la rodea. Jehov� ve a la persona en su totalidad, lo que incluye todas sus buenas cualidades. Por lo tanto, esforc�monos por imitar a Jehov� y as� contribuiremos a que haya un esp�ritu de amor y unidad en la congregaci�n (Efe. 4:1-3; 5:1, 2). w08 15/3 5:3, 4 Octubre 10@Cobramos denuedo por medio de nuestro Dios para hablarles las buenas nuevas de Dios con mucho luchar (1 Tes. 2:2).@Es indudable que necesitamos valor para predicar sin cesar el mensaje del Reino. Algunas personas, entre ellas familiares, intentar�n desanimarnos recurriendo a la burla o a otros m�todos (Mat. 10:36). Otra de las razones por las que pudi�ramos perder el entusiasmo es que la gente sea indiferente al mensaje del Reino o casi nunca est� en su casa. Otros se enfrentan a la vejez y la mala salud, las cuales limitan su participaci�n en la obra de predicar. Si a usted le sucede as�, no se desanime. Jehov� conoce muy bien sus limitaciones y valora mucho todo lo que puede hacer (2 Cor. 8:12). Sin importar cu�l sea el problema que encare �oposici�n, indiferencia al mensaje o mala salud�, haga todo lo posible dentro de las circunstancias por dar a conocer las buenas nuevas (Pro. 3:27). w08 15/1 1:11-13 Octubre 11@Los que est�n esperando en Jehov� recobrar�n el poder (Isa. 40:31).@Satan�s est� utilizando cada vez m�s la t�ctica del des�nimo. Los cristianos del siglo primero ya sab�an lo peligroso que es el des�nimo. Se les hab�a exhortado a considerar �con sumo cuidado y atenci�n� el ejemplo de Cristo, quien hab�a �aguantado tal habla contraria de pecadores en contra de sus propios intereses�. �Y por qu� deb�an hacerlo? �Para que no [fueran] a cansarse y a desfallecer en sus almas.� (Heb. 12:3.) �Ha sentido usted alguna vez el deseo de rendirse? �Le embargan de vez en cuando los sentimientos de fracaso? Si as� es, no deje que Satan�s se aproveche de esa circunstancia para entorpecer su servicio a Jehov�. Estudie la Biblia con esmero, ore fervientemente, asista a todas las reuniones y busque la compa��a de sus hermanos cristianos. Todo esto lo fortalecer� e impedir� que �desfallezca en su alma�. Jehov� ha prometido que ayudar� a sus siervos a recobrar el poder, y sus promesas nunca fallan. Mant�ngase ocupado en el servicio del Reino; evite las distracciones que roban tiempo; conc�ntrese en ayudar a los dem�s. As� obtendr� las fuerzas que necesita para aguantar a pesar del des�nimo (G�l. 6:1, 2). w08 15/1 5:11, 12 Octubre 12@No [vigilen] con inter�s personal solo sus propios asuntos, sino tambi�n con inter�s personal los de los dem�s (Fili. 2:4).@Debemos preocuparnos por el bienestar de nuestros hermanos, tanto en tiempos de paz como de persecuci�n. Cuando nos persiguen, desempe�amos nuestra labor con cautela y no traicionamos a los hermanos dando sus nombres u otros datos a los perseguidores. Hay otras formas de demostrar que nos preocupamos por el bienestar de los dem�s. Si alg�n hermano est� pasando necesidad, quiz�s podr�amos tenderle la mano (Efe. 4:28; Sant. 2:14-17). En la congregaci�n de Jope, en el siglo primero, hab�a una cristiana muy generosa llamada Dorcas. Esta cristiana �abundaba en buenos hechos y en d�divas de misericordia�. Al parecer confeccionaba ropa para las viudas necesitadas. Su muerte, ocurrida en el a�o 36 de nuestra era, caus� gran congoja entre aquellas viudas. Pero Dios la resucit� mediante el ap�stol Pedro (Hech. 9:36-42). �Verdad que nos alegra tener a tantas hermanas generosas entre nosotros? w08 15/2 2:18, 19
Octubre 13@Nosotros hemos dejado nuestras propias cosas y te hemos seguido (Luc. 18:28).@Valmir, un brasile�o que se dedicaba a la explotaci�n de oro en el centro de Surinam, era alcoh�lico y llevaba una vida inmoral. Mientras se encontraba en cierta ciudad, los testigos de Jehov� le predicaron. Comenz� a estudiar la Biblia con ellos todos los d�as, efectu� grandes cambios y no tard� en bautizarse. Cuando vio que su trabajo le hac�a dif�cil vivir de acuerdo con su nueva fe, vendi� su lucrativo negocio y regres� a Brasil para ayudar a su familia a encontrar tesoros espirituales. Del mismo modo, muchos inmigrantes que aprenden la verdad en pa�ses ricos deciden renunciar a su empleo y regresar a su pa�s de origen a fin de dar a conocer sus creencias a familiares y otras personas. Todos estos publicadores del Reino demuestran verdadero esp�ritu evangelizador. As� mismo, muchos Testigos se mudan a zonas de su pa�s donde la necesidad de proclamadores del Reino es mayor. Tal vez nosotros no estemos en condiciones de hacerlo, pero de todas formas podemos imitar a Jes�s y esforzarnos al m�ximo en el ministerio. w08 15/2 4:4-6 Octubre 14@Obedecer es mejor que un sacrificio (1 Sam. 15:22).@Si tenemos siempre presente a Jehov�, le obedeceremos en todo, y como resultado recibiremos abundantes bendiciones (Deu. 28:13). En efecto, debemos estar prestos a obedecer a Jehov�. Pensemos en la actitud que demostraron las cinco hijas de Zelofehad, que vivieron en el tiempo de Mois�s. La costumbre entre los israelitas era que la herencia familiar pasara a los hijos, y no a las hijas. Pero como Zelofehad muri� sin hijos varones, Jehov� orden� que se entregara la herencia a sus hijas. Sin embargo, hab�a una condici�n que respetar: deb�an casarse exclusivamente con hombres de la tribu de Manas�s, de modo que la herencia no pasara a ninguna otra tribu (N�m. 27:1-8; 36:6-8). Las hijas de Zelofehad estaban seguras de que las cosas saldr�an bien si obedec�an a Dios. La Biblia se�ala: �Tal como Jehov� hab�a mandado a Mois�s, de esa manera lo hicieron las hijas de Zelofehad� (N�m. 36:1012). Hoy d�a los cristianos solteros que son espirituales hacen lo mismo: conf�an en Dios y lo obedecen cas�ndose �solo en el Se�or� (1 Cor. 7:39). w08 15/2 1:9, 10 Octubre 15@Tus recordatorios me son de inter�s intenso (Sal. 119:99).@El profeta Micaya recibi� una impresionante visi�n de una reuni�n que Jehov� tuvo con sus �ngeles. Jehov� pregunt� qui�n de ellos podr�a enga�ar a Acab, el malvado rey de Israel, para provocar su ca�da. Acto seguido, escuch� las sugerencias de varios de sus hijos espirituales. Cuando uno de ellos dijo que �l se encargar�a, Jehov� le pregunt� c�mo planeaba hacerlo. La propuesta le pareci� bien, de modo que lo comision� para que la llevara a cabo (1 Rey. 22:19-23). �Qu� pueden aprender de este relato todos los miembros de las familias cristianas? Es bueno que el jefe de familia tome en cuenta las ideas y sugerencias de su esposa y sus hijos. Ellos, por su lado, deben entender que una vez que hayan expresado sus opiniones o preferencias, deben ceder, es decir, deben respetar la decisi�n que �l tome, pues Dios le ha conferido esa autoridad. �Qu� agradecidos estamos de que nuestro amoroso y sabio Padre nos recuerde la importancia de estar dispuestos a ceder! w08 15/3 1:20, 21 Octubre 16@Todas las cosas que quieren que los hombres les hagan, tambi�n ustedes de igual manera tienen que hac�rselas a ellos (Mat. 7:12).@Las parejas cristianas deben evitar las pr�cticas degradantes en sus relaciones �ntimas. Por otra parte, Pablo aconsej�: �Que el esposo d� a su esposa lo que le es debido; pero que la esposa haga lo mismo tambi�n a su esposo. La esposa no ejerce autoridad sobre su propio cuerpo, sino su esposo; as� mismo, tambi�n, el esposo no ejerce autoridad sobre su propio cuerpo, sino su esposa�. Entonces el ap�stol pas� a dar estas claras instrucciones: �No se priven de ello el uno al otro, a no ser de com�n acuerdo por un tiempo se�alado, para que dediquen tiempo a la oraci�n�. Pero a�adi�: �Vuelvan a juntarse, para que no siga tent�ndolos Satan�s por su falta de regulaci�n� (1 Cor. 7:3-5). Al mencionar la oraci�n, Pablo dio a entender cu�les deben ser las prioridades del cristiano. Pero tambi�n dej� claro que los cristianos casados deben tener presentes las necesidades f�sicas y emocionales de su c�nyuge. w08 15/3 2:13, 14 Octubre 17@[�]Qu� ser� la se�al de tu presencia y de la conclusi�n del sistema de cosas? (Mat. 24:3.)@Hace casi dos mil a�os, cuatro ap�stoles de Jes�s que
conversaban a solas con su Maestro en el monte de los Olivos le hicieron la pregunta que leemos en el texto de hoy. Dicha pregunta contiene dos expresiones muy interesantes: �tu presencia� y �la conclusi�n del sistema de cosas�. �Qu� significa cada una de ellas? La expresi�n �la conclusi�n del sistema de cosas� se refiere al per�odo de tiempo que precede al fin del sistema de cosas y que, adem�s, lo incluye. La parous�a, o presencia, de Cristo comenz� cuando Jes�s fue coronado Rey en los cielos, en 1914, y se extiende hasta abarcar la �gran tribulaci�n�, durante la cual vendr� para destruir a los malvados (Mat. 24:21). Puede decirse que el per�odo de �la conclusi�n del sistema de cosas� corresponde, o corre paralelo, al per�odo denominado la presencia de Cristo. w08 15/2 5:1-3 Octubre 18@La respuesta, cuando es apacible, aparta la furia, pero la palabra que causa dolor hace subir la c�lera (Pro. 15:1).@Quiz�s la crianza que recibimos nos dificulte comportarnos de manera apacible. Puede incluso que la gente que nos rodea nos incite a hacer todo lo contrario dici�ndonos que el fuego se combate con fuego. Pero �es esta una actitud sabia? Si de repente algo empezara a arder en su casa, �con qu� tratar�a de apagar el fuego: con alg�n tipo de combustible, o con agua? Con el combustible solo lograr�a avivar el fuego, mientras que con el agua seguramente conseguir�a extinguirlo (Pro. 15:18). As� pues, la pr�xima vez que un hermano o cualquier otra persona nos irrite, reaccionemos con apacibilidad, y as� demostraremos que somos verdaderamente sabios (2 Tim. 2:24). Hoy d�a, mucha gente suele ser todo menos amable, mansa y pac�fica. Por eso el cristiano encuentra tantas personas rudas y arrogantes alrededor suyo. Consciente de este hecho, Santiago dio advertencias a los hermanos para que no se dejaran corromper por dicha actitud (Sant. 3:14-18). w08 15/3 4:9, 10 Octubre 19@El que oye la palabra y capta el sentido de ella [...] lleva fruto (Mat. 13:23).@Si queremos hacer disc�pulos, es fundamental que tengamos amor a Dios, inter�s en la gente, esp�ritu de sacrificio y paciencia. Pero tambi�n debemos cultivar nuestras habilidades como maestros, pues solo as� lograremos explicarnos de manera clara y sencilla. Por ejemplo, el Gran Maestro, Jesucristo, pronunci� muchas frases que impresionan por su sencillez. Probablemente recordemos las siguientes: �Acumulen para s� tesoros en el cielo�, �No den lo santo a los perros�, �La sabidur�a queda probada justa por sus obras� y �Paguen a C�sar las cosas de C�sar, pero a Dios las cosas de Dios� (Mat. 6:20; 7:6; 11:19; 22:21). Sin embargo, Jes�s no solo instru�a con dichos breves. Cuando era oportuno, daba explicaciones m�s largas, aunque igualmente claras. Nosotros podemos imitar su forma de ense�ar. w07 15/11 1:14, 15 Octubre 20@Los ojos de Jehov� est�n hacia los justos, y sus o�dos est�n hacia su clamor por ayuda (Sal. 34:15).@Nunca olvidemos la maravillosa promesa de Jehov� de librar pronto a la humanidad de todas sus angustias (Sal. 34:19; 37:9-11; 2 Ped. 2:9). Pero no solo nos librar� de las dificultades presentes, sino que nos dar� la oportunidad de vivir para siempre. �Cu�nto anhelamos que llegue el d�a en que ya no existan las terribles condiciones de este mundo malvado! (Sal. 55:6-8.) Hasta entonces, tenemos que seguir aguantando. Aguantemos fielmente y de este modo demostraremos que Satan�s es un mentiroso. Oremos sin cesar y reflexionemos en el ejemplo de hermanos que est�n pasando por dificultades parecidas a las nuestras, pues as� obtendremos las fuerzas necesarias. Estudiemos la Palabra de Dios a fin de ser enteramente competentes y estar completamente equipados. Y nunca dejemos de confiar en que �el Dios de todo consuelo� nos cuidar� con ternura (2 Cor. 1:3). w08 15/3 3:18, 19 Octubre 21@No retengas el bien de aquellos a quienes se les debe, cuando sucede que est� en el poder de tu mano hacerlo (Pro. 3:27).@Ha habido muchos publicadores que han tenido buenos resultados al predicar a familiares no creyentes, aunque pareciera improbable que respondieran al mensaje. Joyce, de Estados Unidos, es un buen ejemplo de ello. Esta hermana tiene un cu�ado que hab�a estado preso varias veces desde su adolescencia. �La gente dec�a que era un caso perdido porque traficaba con drogas, robaba y hac�a muchas otras cosas malas �nos cuenta ella�. Pero aun as�, yo siempre le hablaba de las verdades b�blicas. No dej� de hacerlo durante treinta y siete a�os.� La paciencia y tes�n de Joyce se vieron
recompensados cuando su cu�ado finalmente empez� a estudiar la Biblia con los testigos de Jehov� y efectu� cambios dr�sticos en su vida. Hace poco se bautiz� a la edad de 50 a�os. Joyce dice: �Su bautismo me hizo llorar de alegr�a. �Qu� contenta estoy de no haber perdido las esperanzas de que cambiara!�. w08 15/1 3:15, 16 Octubre 22@Lo que prometes en voto, p�galo (Ecl. 5:4).@Jeft� hizo un voto: si Jehov� le daba la victoria sobre los ammonitas, �l presentar�a �como ofrenda quemada� al primero que saliera a recibirlo cuando regresara de la batalla. Pero quien sali� a su encuentro fue la �nica hija que ten�a. A pesar de todo, ambos demostraron su fe en Jehov�. Jeft� cumpli� su voto y su hija lo apoy�. Aunque el matrimonio y los hijos eran dones muy preciados en Israel, la hija de Jeft� estuvo dispuesta a permanecer soltera, y por ello tuvo el honor de servir en el santuario mismo de Jehov� (Jue. 11:28-40). Ana, una mujer temerosa de Dios, tambi�n demostr� que era digna de confianza. Ella le hizo una promesa solemne a Jehov�: le dijo que si le daba un hijo, se lo entregar�a para que le sirviera. Al poco tiempo qued� embarazada y dio a luz a Samuel. Una vez que destet� al ni�o, lo present� a Jehov� en Sil� y se lo dej� para que le sirviera �todos los d�as de su vida� (1 Sam. 1:11). As�, Ana cumpli� su voto, y lo hizo aun sin saber que con el tiempo tendr�a m�s hijos (1 Sam. 2:20, 21). w08 15/2 2:3-5 Octubre 23@Las cosas que fueron el objeto de mi cari�o estuvieron con los hijos de los hombres (Pro. 8:31).@Desde el d�a en que fue creado, Jes�s tuvo una relaci�n muy �ntima con Jehov� (Pro. 8:22). Mientras estaba en los cielos, observ� c�mo trataba su Padre a los seres humanos y se dio cuenta de lo que sent�a por ellos. Por eso imit� tan bien el amor que Dios tiene por la humanidad. La preparaci�n de Jes�s incluy� observar la manera en que Jehov� actuaba cuando surg�an dificultades. Tomemos el caso de los tercos israelitas. Nehem�as 9:28 dice de ellos: �En cuanto ten�an descanso, volv�an a hacer lo que es malo delante de ti [Jehov�], y los dejabas a la mano de sus enemigos, quienes los pisoteaban. Entonces se volv�an y clamaban a ti por socorro, y t� mismo o�as desde los mismos cielos y los librabas conforme a tu abundante misericordia, vez tras vez�. Como hab�a trabajado con su Padre y lo hab�a observado de cerca, Jes�s pudo mostrar la misma compasi�n por la gente de su territorio (Juan 5:19). w08 15/2 3:11, 12 Octubre 24@Ser�n objeto de odio de parte de todas las naciones por causa de mi nombre (Mat. 24:9).@A lo largo de los a�os, los testigos de Jehov� de muchos pa�ses han sido v�ctimas de una oposici�n implacable y hasta de cruel persecuci�n. Pero Jehov� no ha abandonado a su pueblo (Rom. 8:31). Su Palabra nos garantiza que �sea cual sea el arma que se forme contra [nosotros]�, nada podr� detener nuestra obra de predicar el Reino y hacer disc�pulos (Isa. 54:17). Pese al odio del mundo, los testigos de Jehov� estamos predicando activamente en 236 pa�ses y territorios, lo cual es prueba indiscutible de que nuestro Dios nos ha protegido de quienes quieren acabar con nosotros o, por lo menos, hacernos callar. �Recuerda el nombre de algunos l�deres pol�ticos o religiosos de nuestros tiempos que hayan oprimido al pueblo de Dios? �Qu� ha sido de ellos? �D�nde est�n ahora? La mayor�a han quedado reducidos a la nada, como fue el caso del fara�n del tiempo de Mois�s y Josu�. �Y los siervos fieles de Dios que han perdido la vida? Est�n protegidos en la memoria de Jehov�. w07 1/11 1:15, 16 Octubre 25@Al ver las muchedumbres, [Jes�s] se compadeci� de ellas (Mat. 9:36).@Jes�s sent�a un intenso deseo de ayudar a todo el mundo, y por eso no predic� tan solo en un lugar. Seg�n un relato b�blico, �emprendi� un recorrido de todas las ciudades y aldeas� (Mat. 9:35). �C�mo podemos manifestar nosotros ese mismo inter�s? Algunos publicadores se han propuesto dar testimonio en lugares de su territorio donde no se predica a menudo, por ejemplo, en zonas comerciales, parques, terminales de autobuses o entradas de edificios residenciales de dif�cil acceso. Otros se han esforzado por aprender un nuevo idioma para llevar el mensaje a gente de otra etnia que se ha mudado recientemente a su �rea o que todav�a no ha recibido testimonio de forma regular. El solo hecho de aprender a saludar a esas personas en su lengua materna les demostrar� lo mucho que nos interesamos en ellas. w08 15/3 5:18, 19
Octubre 26@Si alguna persona quiere ir al tribunal contigo y hacerse due�o de tu prenda de vestir interior, deja que se lleve tambi�n tu prenda de vestir exterior; y si alguien bajo autoridad te obliga a una milla de servicio, ve con �l dos millas (Mat. 5:40, 41).@Jes�s se�al� en el Serm�n del Monte que es necesario ceder ante quienes tienen autoridad. La consideraci�n hacia nuestros semejantes y el deseo de ayudarlos tambi�n nos impulsar�n a recorrer �dos millas�, es decir, a hacer m�s de lo que se nos pide (1 Cor. 13:5; Tito 3:1, 2). Ahora bien, aunque es bueno que estemos dispuestos a ceder, jam�s debemos hacerlo ante los ap�statas. Hemos de adoptar esta firme y clara postura a fin de preservar la pureza de las ense�anzas b�blicas y la unidad de la congregaci�n. Pablo dijo lo siguiente acerca de �los falsos hermanos�: �A estos no cedimos a manera de sumisi�n, no, ni por una hora, para que la verdad de las buenas nuevas continuara con ustedes� (G�l. 2:4, 5). Los brotes de apostas�a son poco comunes, pero cuando surge alguno, los cristianos fieles se mantienen firmes a favor de la justicia. w08 15/3 1:13, 14 Octubre 27@Por la presunci�n solo se ocasiona una lucha, pero con los que consultan juntos hay sabidur�a (Pro. 13:10).@Muchas parejas conservan recuerdos entra�ables de su noviazgo. �Qu� emocionante era ir conoci�ndose mejor cada d�a! Cuanto m�s tiempo pasaban juntos, m�s cari�o se ten�an. Sin embargo, la realidad es que, cuando una pareja finalmente se casa, tiene que hacer cambios. Y si el matrimonio ha sido arreglado por los padres, sin duda tambi�n hay que hacerlos. Un cristiano reconoce lo siguiente sobre los inicios de su matrimonio: �Lo que m�s trabajo nos cost� al principio fue entender que ya no �ramos solteros. Nos tom� tiempo poner a los amigos y a la familia en el lugar que les correspond�a�. Otro esposo, que lleva treinta a�os casado, comprendi� enseguida que ten�a que ser razonable y �pensar en plural�. Hasta el d�a de hoy, antes de aceptar una invitaci�n o de comprometerse para hacer algo, consulta con su esposa y toma en cuenta su sentir. En estas ocasiones conviene que los c�nyuges est�n dispuestos a ceder. w08 15/3 2:7 Octubre 28@La sabidur�a de arriba es primeramente casta, luego pac�fica, razonable, lista para obedecer, llena de misericordia y buenos frutos, sin hacer distinciones por parcialidad, sin ser hip�crita (Sant. 3:17).@Los cristianos hacemos bien en analizar las cualidades que son resultado de �la sabidur�a de arriba�. Una de ellas es la castidad. La castidad es una virtud que implica pureza, tanto en las acciones como en los motivos. Por lo tanto, se espera que los cristianos rechacemos todo lo malo de inmediato, que esa sea nuestra reacci�n autom�tica. Cuando el m�dico nos golpea con un martillito el tend�n que tenemos justo bajo la rodilla, la pierna se extiende al instante de forma autom�tica. Es un acto reflejo; no nos ponemos a pensar si vamos a realizarlo o no. De igual modo, cuando se presentan tentaciones, el cristiano que tiene el coraz�n puro y la conciencia educada por la Biblia rechaza autom�ticamente lo malo (Rom. 12:9). En las Escrituras encontramos ejemplos de personas que reaccionaron de tal modo, como Jos� �el hijo de Jacob� y Jes�s (G�n. 39:7-9; Mat. 4:8-10). w08 15/3 4:17 Octubre 29@Dense a conocer sus peticiones a Dios; y la paz de Dios que supera a todo pensamiento guardar� sus corazones (Fili. 4:6, 7).@�Es posible tener paz interior cuando nos acosan los problemas? S�, porque sabemos que Jehov� entiende lo que estamos pasando. Adem�s, �l nos asegura que pronto �el gobernante de este mundo ser� echado fuera� (Juan 12:31). �Qu� reconfortados nos sentimos! Pero �basta con darle a conocer nuestros problemas a Jehov�? No; debemos hacer algo m�s. Despu�s de orar, tenemos que actuar en conformidad con lo que pedimos. Cuando el rey Sa�l envi� hombres a la casa de David para matarlo, este or� as�: �L�brame de mis enemigos, oh Dios m�o; contra los que se levantan contra m� quieras protegerme� (Sal. 59:1). Pero adem�s de orar, David escuch� a su esposa y huy� (1 Sam. 19:11, 12). Nosotros tambi�n podemos pedir que se nos d� sabidur�a para comprender c�mo podemos afrontar nuestra situaci�n e incluso hacer que mejore (Sant. 1:5). w08 15/3 3:10, 12, 13 Octubre 30@Sigan bendiciendo a los que los persiguen (Rom. 12:14).@Pensemos en el consejo de Pablo registrado en el texto de hoy. �C�mo podemos obedecerlo? Jes�s mand� a sus disc�pulos: �Contin�en amando a sus enemigos y orando por los que los
persiguen� (Mat. 5:44; Luc. 6:27, 28). Por lo tanto, podemos seguir el consejo del ap�stol orando por nuestros opositores, rog�ndole a Jehov� que, si alguno nos persigue por ignorancia, le abra los ojos a la verdad (2 Cor. 4:4). Quiz�s nos sintamos raros pidi�ndole a Dios que bendiga a nuestros enemigos. Sin embargo, cuanto m�s nos esforcemos por adoptar el modo de pensar de Cristo, m�s f�cil se nos har� amarlos (Luc. 23:34). Entre las personas que han orado por sus perseguidores figura Esteban, cuya petici�n no qued� sin respuesta. No mucho despu�s del Pentecost�s del a�o 33, los enemigos de la congregaci�n cristiana lo apresaron, lo sacaron de Jerusal�n a rastras y lo apedrearon. Pero antes de morir, �l clam�: �Jehov�, no les imputes este pecado� (Hech. 7:58�8:1). w07 1/7 1:10, 11 Octubre 31@El coraz�n del justo medita para responder (Pro. 15:28).@La clave para ense�ar con sencillez y claridad en el ministerio est� en la buena preparaci�n. El ministro cristiano que no se prepara tiende a hablar demasiado. Dice todo lo que sabe sobre cada tema, de modo que las ideas principales terminan perdi�ndose en un mar de palabras. En cambio, quien se prepara bien piensa de antemano en el estudiante, medita en el tema que van a analizar y explica solo lo necesario (1 Cor. 2:1, 2). Tiene presente lo que ya sabe la persona y qu� puntos debe destacar durante el estudio. Quiz�s conozca muchos detalles interesantes, pero como son innecesarios los omite, y as� gana en claridad. Cuando damos clases de la Biblia, debemos permitir que la persona d� su opini�n o explique el asunto que estemos analizando. Para ello tendremos que controlarnos, sobre todo si nos encanta explicar las verdades b�blicas. w07 15/11 1:16, 17 Noviembre 1@Estos hombres que han trastornado la tierra habitada est�n presentes aqu� tambi�n, y [...] act�an en oposici�n a los decretos de C�sar (Hech. 17:6, 7).@En el siglo primero, los cristianos eran a menudo v�ctimas de comentarios maliciosos, e incluso se les tildaba de malhechores. Las palabras de Hechos 16:20, 21 son un ejemplo t�pico de tales acusaciones: �Estos hombres est�n turbando much�simo a nuestra ciudad [...] y est�n publicando costumbres que no nos es l�cito adoptar ni practicar, puesto que somos romanos�. En otra ocasi�n, los adversarios religiosos incitaron a las autoridades a tomar medidas contra los seguidores de Cristo, como muestra el texto de hoy. Al ap�stol Pablo lo llamaron �individuo pestilente� y lo acusaron de ser el l�der de una secta que �promov�a sediciones por toda la tierra habitada� (Hech. 24:2-5). En consecuencia, no nos sorprende que los cristianos verdaderos de hoy hayan sido el blanco de comentarios maliciosos, calumnias y campa�as difamatorias. w07 15/12 3:5, 6 Noviembre 2@O�, pero no pude entender (Dan. 12:8).@Despu�s del Armaged�n resucitar�n multitudes de injustos, y a todos ellos habr� que darles a conocer los caminos de Jehov� (Hech. 24:15). No solo habr� que explicarles qu� es el sacrificio redentor de Jes�s; tambi�n habr� que ense�arles a ejercer fe en ese sacrificio, pues �nicamente as� podr�n beneficiarse de �l. Deber�n abandonar cualquier creencia falsa que hayan tenido, as� como su anterior estilo de vida. Adem�s, ser� necesario que se vistan de la nueva personalidad que distingue a los verdaderos cristianos (Efe. 4:22-24; Col. 3:9, 10). Los siervos fieles de Dios que murieron antes de que Jes�s llevara a cabo su ministerio en la Tierra tambi�n tendr�n mucho que aprender cuando resuciten. Descubrir�n la identidad del Mes�as prometido que tanto esperaban pero no alcanzaron a conocer. �Se imagina qu� alegr�a y qu� privilegio ser� explicarle a Daniel c�mo se cumplieron las profec�as que �l mismo escribi�, pero que no pudo entender? (Dan. 12:9.) w08 15/1 5:13, 14 Noviembre 3@Si estamos viviendo por esp�ritu, sigamos andando ordenadamente tambi�n por esp�ritu (G�l. 5:25).@Si andamos por esp�ritu santo, no caeremos en la apostas�a. Y solo si nos mantenemos alerta en sentido espiritual, continuaremos disfrutando de la bondad inmerecida de Jehov� y seguiremos �andando en la verdad� (3 Juan 3, 4). Por lo tanto, estemos resueltos a rechazar toda apostas�a, para as� mantener una relaci�n fuerte con nuestro Padre celestial. Pablo incluy� la idolatr�a y las sectas en la lista de �obras de la carne�, en la que tambi�n figuran la fornicaci�n y la conducta relajada. Pero explic�: �Los que pertenecen a Cristo Jes�s han fijado en un madero la carne junto con sus pasiones y deseos� (G�l. 5:19-21, 24). �Qu� cualidades produce la fuerza activa de Dios en quienes
viven y andan por esp�ritu? �El fruto del esp�ritu �indic� el ap�stol� es: amor, gozo, paz, gran paciencia, benignidad, bondad, fe, apacibilidad, autodominio.� (G�l. 5:22, 23.) w07 15/7 2:5, 6 Noviembre 4@No olviden el hacer bien y el compartir cosas con otros, porque dichos sacrificios le son de mucho agrado a Dios (Heb. 13:16).@Aprender a vivir con los achaques de la edad puede resultar dif�cil. Con todo y eso, es posible demostrar devoci�n a Dios. Barzilai el galaadita es un buen ejemplo a este respecto. A la edad de 80 a�os fue extraordinariamente hospitalario con David y su ej�rcito, d�ndoles comida y alojamiento durante la rebeli�n de Absal�n. David le ofreci� la oportunidad de formar parte de la corte. Ante aquello, Barzilai respondi�: �Tengo ochenta a�os de edad hoy. [...] Pero aqu� est� tu siervo Kimham [...;] hazle lo que sea bueno a tus ojos� (2 Sam. 17:27-29; 19:31-40). Al igual que Barzilai, muchas personas mayores de hoy manifiestan un esp�ritu desinteresado y generoso. Hacen lo que pueden por apoyar la adoraci�n pura, sabiendo que �dichos sacrificios le son de mucho agrado a Dios�. �Qu� bendici�n tener entre nosotros a siervos tan leales! w07 1/6 1:12, 13 Noviembre 5@Tus ojos vieron hasta mi embri�n, y en tu libro todas sus partes estaban escritas (Sal. 139:16).@David, el escritor de estas palabras, no sab�a nada de c�lulas ni de genes, pues ni siquiera dispon�a de un microscopio; sin embargo, vio en el desarrollo de su propio cuerpo una prueba de planificaci�n previa. Quiz�s conociera algo sobre el desarrollo del embri�n y concluyera que cada paso deb�a de obedecer a un plano y un horario preexistentes. Po�ticamente dijo que este plan �estaba escrito en el libro de Dios�. Las instrucciones para la formaci�n de nuestro cuerpo se hallan �escritas� en la estructura qu�mica del ADN. Cada vez que las c�lulas se dividen para producir c�lulas nuevas o reemplazar las que est�n gastadas, el ADN transmite dichas instrucciones, lo que nos permite seguir vivos y conservar b�sicamente la misma apariencia. �Qu� extraordinario ejemplo del poder y sabidur�a de nuestro Hacedor celestial! w07 15/6 1:9-11 Noviembre 6@Ustedes son los que con constancia han continuado conmigo en mis pruebas (Luc. 22:28).@Desde la d�cada de 1930 ha habido unas cuantas personas que han recibido el llamamiento celestial. �A qu� se debe esto? En algunos casos pudiera deberse a que est�n reemplazando a cristianos ungidos que se han vuelto infieles (comp�rese con Revelaci�n 3:16). Pablo, por ejemplo, conoc�a personalmente a varios cristianos que hab�an dejado la verdad (Fili. 3:17-19). No obstante, parece que no todos los que han recibido la esperanza celestial desde los a�os treinta son reemplazos de ungidos que se han vuelto infieles. Por lo visto, Jehov� ha querido asegurarse de que haya cristianos ungidos entre nosotros durante todo el per�odo de los �ltimos d�as de este sistema de cosas, hasta la destrucci�n de �Babilonia la Grande� (Rev. 17:5). Y podemos estar seguros de que, en el momento designado por Dios, se completar� la cantidad de 144.000 ungidos y de que todos ellos ocupar�n finalmente su puesto en el gobierno celestial. w08 15/1 4:15, 16 Noviembre 7@Sigue vigilando el ministerio que aceptaste en el Se�or, [para] que lo cumplas (Col. 4:17).@El ap�stol Pablo dirigi� esta exhortaci�n a alguien en particular, a un cristiano llamado Arquipo. No sabemos ni qui�n era Arquipo ni cu�les eran sus circunstancias, pero est� claro que hab�a aceptado un ministerio. Si nosotros nos hemos dedicado a Jehov�, tambi�n hemos aceptado un ministerio. �Lo �vigilamos� o examinamos de continuo para asegurarnos de que lo estamos cumpliendo? Antes de bautizarnos dimos el paso de dedicar nuestra vida a Jehov� mediante una ferviente oraci�n, y as� demostramos que est�bamos resueltos a cumplir su voluntad. De modo que hacemos bien en preguntarnos: ��De verdad es lo m�s importante en mi vida cumplir la voluntad de Dios?�. Es posible que tengamos varias responsabilidades b�blicas, como la de proveer lo necesario para nuestra familia; si as� es, Jehov� espera que las atendamos (1 Tim. 5:8). Pero �c�mo utilizamos el tiempo y las energ�as restantes? �Cu�l es nuestra prioridad en la vida? (2 Cor. 5:14, 15.) w08 15/1 1:14, 15 Noviembre 8@Que el aguante tenga completa su obra (Sant. 1:4).@Aunque le pidamos ayuda a Jehov�, puede ser que las adversidades no terminen de inmediato, sino que
duren bastante tiempo. Si as� sucede, �qu� puede ayudarnos a aguantar? Recordemos que servir a Jehov� fielmente a pesar de las dificultades es una prueba de que lo amamos (Hech. 14:22). No olvidemos que Satan�s acus� a Job ante Dios de este modo: ��[...] Si Job te obedece, es por puro inter�s! T� siempre lo proteges a �l y a su familia; cuidas todo lo que tiene, y bendices lo que hace. �Sus vacas y ovejas llenan la regi�n! Pero yo te aseguro que si lo maltratas y le quitas todo lo que tiene, �te maldecir� en tu propia cara!� (Job 1:9-11, Traducci�n en lenguaje actual). Sin embargo, Job se mantuvo �ntegro y as� demostr� que dicha acusaci�n era falsa. Si nosotros aguantamos las adversidades, tambi�n demostramos que Satan�s es un vil mentiroso. Adem�s, cuando aguantamos, nuestra confianza en Jehov� y nuestra esperanza se fortalecen. w08 15/3 3:14 Noviembre 9@Cuando vieron a los hermanos, los animaron (Hech. 16:40).@Otra manera de demostrar nuestra preocupaci�n por los dem�s es brind�ndoles palabras de aliento (Rom. 1:11, 12). Veamos c�mo Silas, el compa�ero de Pablo, fue una fuente de est�mulo para quienes lo rodeaban. Cuando se resolvi� la cuesti�n de la circuncisi�n en el a�o 49, el Cuerpo Gobernante envi� emisarios desde Jerusal�n con cartas a todas las congregaciones. Silas y Judas fueron a Antioqu�a junto con Pablo y Bernab�, y all� �animaron a los hermanos con muchos discursos, y los fortalecieron� (Hech. 15:32). M�s tarde, Pablo y Silas fueron encarcelados en Filipos. Pero un terremoto les dio la oportunidad de dar testimonio, y como resultado, el carcelero y su casa aceptaron el cristianismo. Antes de dejar la ciudad, Pablo y Silas dieron aliento a los hermanos. Esforc�monos por imitar su ejemplo y animar a los dem�s, sea al hacer comentarios, al dar discursos o al predicar con entusiasmo. Y si tiene �alguna palabra de est�mulo� que decirle a alguien, no lo dude: d�gasela (Hech. 13:15). w08 15/2 2:20, 21 Noviembre 10@El superintendente, por lo tanto, debe ser [...] razonable (1 Tim. 3:2, 3).@Uno de los requisitos que deben cumplir los superintendentes es el de ser flexibles. Esto es especialmente necesario cuando se re�nen para tratar asuntos de congregaci�n. Antes de tomar decisiones, cada uno puede expresarse libremente, aunque no hace falta que todos opinen. Despu�s de escuchar los principios b�blicos que se citan en la reuni�n, alg�n anciano podr�a cambiar de opini�n. As� es, en vez de cerrarse a las ideas de los dem�s y aferrarse a puntos de vista personales, el anciano maduro cede. Es probable que al principio haya opiniones distintas, pero la oraci�n y la reflexi�n, junto con una actitud modesta y flexible, promover�n la unidad entre los ancianos (1 Cor. 1:10; Efe. 4:1-3). El superintendente cristiano debe esforzarse por respetar las directrices divinas en todo lo que hace, pues as� tratar� a los dem�s con consideraci�n y amabilidad. w08 15/3 1:15, 16 Noviembre 11@La mujer verdaderamente sabia ha edificado su casa, pero la tonta la demuele con sus propias manos (Pro. 14:1).@Tanto el esposo como la esposa deben hablar con franqueza y entender que cuando no hay ternura en las relaciones �ntimas suelen surgir problemas (Fili. 2:3, 4; comp�rese con Mateo 7:12). Cuando hay desacuerdos, la buena conducta, el trato bondadoso y la disposici�n a cooperar pueden mejorar la situaci�n (1 Ped. 3:1, 2). El amor a Jehov� y al c�nyuge, junto con una actitud flexible, ayudar�n en gran manera al matrimonio en este aspecto. Hay otros campos en los que el esposo considerado tambi�n trata a su esposa con respeto. Por ejemplo, toma en cuenta sus sentimientos, hasta en asuntos menores. Sin embargo, un cristiano que lleva casado cuarenta y siete a�os admite: �Esto es algo en lo que todav�a puedo mejorar�. A las esposas cristianas se les anima a tenerle profundo respeto a su esposo (Efe. 5:33). Si una esposa habla mal de su marido o expone sus defectos en p�blico, dif�cilmente podr�a decirse que lo est� respetando. w08 15/3 2:14, 15 Noviembre 12@La sabidur�a de arriba es [...] pac�fica (Sant. 3:17).@La sabidur�a de arriba nos mueve a ser personas pac�ficas, es decir, a evitar las actitudes agresivas y las acciones que perturban la paz. Santiago a�ade al respecto: �En cuanto al fruto de la justicia, su semilla se siembra en condiciones pac�ficas para los que est�n haciendo la paz� (Sant. 3:18). Fij�monos en la expresi�n �los que est�n haciendo la paz�. �Somos conocidos en la congregaci�n como personas que
promueven la paz o, m�s bien, que la perturban? �Discutimos con frecuencia y ofendemos a los dem�s? �Nos molestamos por cualquier cosa? �Insistimos en que se nos acepte como somos, o nos esforzamos humildemente por eliminar rasgos de nuestra personalidad que molestan, y con raz�n, a otras personas? �Tenemos fama de que hacemos lo posible por promover la paz y de que enseguida perdonamos y olvidamos los errores ajenos? Si nos hacemos un autoexamen sincero, tal vez descubramos que debemos mejorar en esta manifestaci�n de �la sabidur�a de arriba�. w08 15/3 4:17, 18 Noviembre 13@Se le har� estar en pie, porque Jehov� puede hacer que est� en pie (Rom. 14:4).@Jes�s era muy consciente de que los humanos imperfectos somos propensos a criticar a los dem�s. Por eso exhort�: �Dejen de juzgar, para que no sean juzgados� (Mat. 7:1). Observemos que no dijo �no juzguen�, sino �dejen de juzgar�. �l sab�a que muchos de sus oyentes ya ten�an la costumbre de criticar. �Hemos adoptado nosotros esa costumbre? Si as� es, esforc�monos por cambiar y as� evitaremos que se nos juzgue. En realidad, �qui�nes somos nosotros para juzgar a un siervo nombrado a quien Jehov� est� utilizando o para decir que ese hermano no deber�a formar parte de la congregaci�n? Puede que un hermano tenga ciertas deficiencias, pero si Jehov� sigue acept�ndolo, �por qu� habr�amos de rechazarlo nosotros? (Juan 6:44.) �Acaso no creemos que Jehov� est� dirigiendo su organizaci�n y que si es necesario hacer algunos cambios, �l los har� en su debido momento? w08 15/3 5:5 Noviembre 14@Ni una sola palabra de todas las buenas palabras que Jehov� su Dios les ha hablado ha fallado (Jos. 23:14).@Poco antes de que Mois�s sacara a los israelitas de Egipto, Jehov� se identific� a s� mismo con la expresi�n: �Yo resultar� ser lo que resultar� ser� (�xo. 3:13-15). Con estas palabras, Jehov� dio a entender que llegar�a a ser todo lo que fuera necesario a fin de llevar a cabo sus prop�sitos con respecto a su pueblo escogido. De este modo los israelitas llegaron a conocer a Jehov� en su papel de Salvador, Guerrero, Proveedor y Cumplidor de promesas, as� como en otras funciones (�xo. 15:2, 3; 16:2-5). De la misma manera puede suceder con nuestros estudiantes de la Biblia. Cuando su fe y su aprecio los motiven a poner en pr�ctica lo que est�n aprendiendo, ver�n la necesidad de pedirle a Jehov� que les d� valor, sabidur�a y gu�a. Y al ver c�mo �l les responde, llegar�n a conocerlo en su papel de Protector, Proveedor generoso y Consejero sabio y confiable (Sal. 55:22; 63:7; Pro. 3:5, 6). w08 15/1 2:14, 15 Noviembre 15@Predica la palabra, oc�pate en ello urgentemente en tiempo favorable, en tiempo dificultoso; censura, corrige, exhorta, con toda gran paciencia y arte de ense�ar (2 Tim. 4:2).@Nuestra comisi�n de predicar y hacer disc�pulos es cada d�a m�s urgente. Todos los a�os responden al mensaje miles de hombres y mujeres que est�n correctamente dispuestos para la vida eterna. Pero �el gran d�a de Jehov� est� cerca�, lo que significa que quienes a�n est�n en la oscuridad espiritual �van trastabillando a la matanza� (Sof. 1:14; Pro. 24:11). Todav�a podemos ayudar a estas personas. Pero para ello es fundamental que imitemos a los cristianos del siglo primero, que �continuaban sin cesar ense�ando y declarando las buenas nuevas acerca del Cristo, Jes�s� (Hech. 5:42). Por consiguiente, sigamos su ejemplo: continuemos predicando pese a las adversidades, prestemos atenci�n a nuestro �arte de ense�ar� y demos testimonio a todo tipo de personas con imparcialidad. As�, tendremos la aprobaci�n de Dios y cosecharemos muchas bendiciones (G�l. 6:9). w08 15/1 3:19, 20 Noviembre 16@Hagan todas las cosas para la gloria de Dios (1 Cor. 10:31).@Debemos tener cuidado de que nuestras palabras y acciones no hagan tropezar a nadie (Efe. 4:29). Si amamos al pr�jimo, no haremos nada que estorbe el progreso espiritual de las personas que tienen culturas y antecedentes distintos a los nuestros. A menudo eso exige que estemos dispuestos a ceder (1 Cor. 10:32, 33). El amor a Jehov� nos ayuda a vencer el orgullo. Tras una discusi�n que tuvieron los ap�stoles acerca de qui�n era el m�s importante, Jes�s puso a un ni�o en medio de ellos y les dijo: �Cualquiera que reciba a este ni�ito sobre la base de mi nombre, a m� me recibe tambi�n, y cualquiera que me recibe a m�, recibe tambi�n al que me envi�. Porque el que se porta como uno de los menores entre todos ustedes es el que es grande�
(Luc. 9:48; Mar. 9:36). A algunos de nosotros tal vez nos resulte muy dif�cil portarnos como �uno de los menores�, pues la imperfecci�n y la inclinaci�n al orgullo pueden hacer que queramos sobresalir. La humildad, en cambio, nos ayudar� a ceder y dar honra a los dem�s (Rom. 12:10). w08 15/3 1:7, 8 Noviembre 17@Caleb [...] ha seguido plenamente a Jehov� (Deu. 1:36).@Los cristianos debemos imitar a Caleb, un israelita que obedeci� a Jehov� en todo. Despu�s de que el pueblo de Israel fuera liberado de Egipto en el siglo XVI antes de nuestra era, Mois�s envi� a doce esp�as a Cana�n. Pero solo dos de ellos, Josu� y Caleb, instaron a la gente a confiar en Jehov� y a entrar en aquella tierra (N�m. 14:6-9). Unos cuarenta a�os despu�s, tanto Caleb como Josu� �que fue elegido por Dios para guiar al pueblo a la Tierra Prometida� estaban a�n con vida, siguiendo fielmente a Jehov�. En cambio, todo parece indicar que los otros diez esp�as murieron durante los cuarenta a�os que Israel pas� vagando en el desierto (N�m. 14:31-34). Si �[seguimos] plenamente a Jehov�, �l nos ayudar�, tal como ayud� al fiel y obediente Caleb. As� es, si le obedecemos en todo, aun en medio de grandes dificultades, Jehov� nos otorgar� su favor. Ahora bien, seguir a Dios como lo hizo Caleb, a lo largo de toda una vida, no es nada f�cil. Pero, sin importar las dificultades que afrontemos, obedezcamos a Dios en todo y teng�moslo siempre presente. w08 15/2 1:11, 13 Noviembre 18@Dios es mayor que nuestro coraz�n y conoce todas las cosas (1 Juan 3:20).@Si hemos cometido un pecado grave pero hemos dado los pasos que demuestran que estamos arrepentidos de verdad, nos consuelan las siguientes palabras del salmista: �[Jehov�] no ha hecho con nosotros aun conforme a nuestros pecados; ni conforme a nuestros errores ha tra�do sobre nosotros lo que merecemos. Porque as� como los cielos son m�s altos que la tierra, su bondad amorosa es superior para con los que le temen. Tan lejos como est� el naciente del poniente, as� de lejos ha puesto de nosotros nuestras transgresiones. Como un padre muestra misericordia a sus hijos, Jehov� ha mostrado misericordia a los que le temen. Pues �l mismo conoce bien la formaci�n de nosotros, y se acuerda de que somos polvo� (Sal. 103:10-14). Nuestro coraz�n �no nos condena[r�]� si confiamos en Jehov�, amamos a nuestros hermanos y no practicamos deliberadamente el pecado (1 Juan 3:19-22). w07 15/7 1:4-6 Noviembre 19@Cesen de amoldarse a este sistema de cosas (Rom. 12:2).@En cierta ocasi�n, cuando Jes�s estaba hablando a una muchedumbre, un hombre lo interrumpi� para hacerle la siguiente petici�n: �Maestro, di a mi hermano que divida conmigo la herencia�. En respuesta, Jes�s dio al hombre �y a todos los que estaban escuchando� una importante advertencia. Primero, les aconsej� que evitaran la codicia y, luego, para reforzar esta idea y hacerles pensar, cont� una par�bola. De modo que si queremos beneficiarnos del consejo de Jes�s, nos conviene analizar lo que dijo para ver c�mo aplicarlo en nuestra vida (Luc. 12:13-21). Antes de que el hombre lo interrumpiera, Jes�s estaba hablando sobre el peligro de caer en la hipocres�a, sobre tener valor para �confesar uni�n� con el Hijo del hombre y sobre la ayuda que da el esp�ritu santo (Luc. 12:1-12). Pero en medio de una disertaci�n tan profunda, el hombre lo interrumpi� bruscamente para pedirle que actuara de �rbitro en una disputa por bienes materiales. w07 1/8 1:2-4 Noviembre 20@Un compa�ero verdadero ama en todo tiempo (Pro. 17:17).@Dios espera que seamos leales a nuestros amigos. Jonat�n, hijo del rey Sa�l, entabl� una s�lida amistad con David. Cuando se enter� de que el muchacho hab�a matado a Goliat, �la misma alma de [�l] se lig� con el alma de David, y [�l] empez� a amarlo como a su propia alma� (1 Sam. 18:1, 3). Fue Jonat�n quien le advirti� que Sa�l quer�a matarlo, y cuando David huy�, se reunieron para hacer un pacto. M�s tarde, Jonat�n defendi� a David ante su padre, lo que casi le cost� la vida. Aun as�, volvi� a buscar a su amigo para reafirmar los lazos que los un�an (1 Sam. 20:24-41; 23:16-18). Jonat�n muri� en una batalla contra los filisteos (1 Sam. 31:6). Abatido, David cant�: �Estoy angustiado por ti, hermano m�o, Jonat�n, muy agradable me fuiste. M�s maravilloso me fue tu amor que el amor procedente de mujeres� (2 Sam. 1:26). Se trataba de un profundo cari�o fraternal que carec�a de connotaciones sexuales. S�, David y Jonat�n eran verdaderos amigos. w08 15/2 2:7,
8 Noviembre 21@Todos ellos ser�n ense�ados por Jehov� (Juan 6:45).@Tal como Jes�s aprovech� la preparaci�n que recibi� de su Padre, nosotros podemos aprovechar el programa de educaci�n que Jehov� ha instaurado en nuestros d�as (Isa. 54:13). Hoy contamos con escuelas especializadas en preparar a los proclamadores del Reino. Seguramente todos hemos mejorado de una forma u otra gracias a las sesiones semanales de la Escuela del Ministerio Teocr�tico de nuestra congregaci�n. Los precursores tienen adem�s la oportunidad de asistir a la Escuela del Servicio de Precursor. Algunos ya han ido a dicha escuela por segunda vez. Los ancianos y siervos ministeriales pueden asistir a la Escuela del Ministerio del Reino a fin de mejorar su ense�anza y la atenci�n que dan a sus hermanos. Y si son solteros, pueden ir tambi�n a la Escuela de Entrenamiento Ministerial, que los capacita para apoyar a los publicadores en el ministerio. Adem�s, un gran n�mero de hermanos y hermanas que han recibido asignaciones misionales han pasado por la Escuela B�blica de Galaad de la Watchtower. w08 15/2 4:7 Noviembre 22@�Ay de los que son sabios a sus propios ojos [...]! (Isa. 5:21.)@No todo aquel a quien el mundo considera sabio lo es realmente a los ojos de Dios. Por ejemplo, Job habl� con unos hombres que cre�an tener esa cualidad y lleg� a la siguiente conclusi�n: �[Yo] no hallo a ning�n sabio entre ustedes� (Job 17:10). El ap�stol Pablo, por su parte, escribi� sobre algunos hombres que rechazaban el conocimiento de Dios: �Aunque afirmaban que eran sabios, se hicieron necios� (Rom. 1:22). Entonces, �qu� se requiere para ser verdaderamente sabios y, como resultado, recibir el favor divino? Proverbios 9:10 se�ala: �El temor de Jehov� es el comienzo de la sabidur�a, y el conocimiento del Sant�simo es lo que el entendimiento es�. La persona sabia debe tener un temor sano de Dios y respetar sus leyes. Y esto implica m�s que simplemente reconocer que Dios existe y que ha establecido normas. El disc�pulo Santiago escribi�: �Que muestre por su conducta excelente sus obras� (Sant. 3:13). As� es, la verdadera sabidur�a debe reflejarse en todo lo que hacemos y decimos. w08 15/3 4:2, 3 Noviembre 23@As� pasa con el hombre que atesora para s�, pero no es rico para con Dios (Luc. 12:21).@El malvado sistema de Satan�s induce a las personas a desear cosas materiales. Este deseo puede infiltrarse de tal modo en la vida del cristiano que poco a poco ahogue la palabra y la haga �infruct�fera� (Mar. 4:19). La Biblia nos anima a estar satisfechos teniendo sustento y abrigo (1 Tim. 6:8). Sin embargo, por no seguir este consejo, muchos caen en la trampa del Diablo. �Ser� que su orgullo los hace creer que deben mantener cierto estilo de vida? �Y qu� hay de nosotros? �Permitimos que nuestro deseo de poseer cosas desplace a un segundo lugar la adoraci�n verdadera? (Ageo 1:2-8.) Es triste reconocer que, en tiempos de estrechez econ�mica, algunos han sacrificado su espiritualidad por mantener el nivel de vida al que estaban acostumbrados. �Justo la actitud materialista que hace feliz a Satan�s! w07 1/10 3:8, 9 Noviembre 24@Con sabidur�a se edifica la casa, y con discernimiento resulta firmemente establecida (Pro. 24:3).@A veces, el matrimonio une a dos personas de distintos or�genes y culturas. Es sobre todo en esos casos cuando debe haber comunicaci�n franca. Para comprender mejor a su c�nyuge, f�jese en c�mo les habla a sus propios familiares. A menudo, lo que revela el interior de una persona no es lo que dice, sino la manera en que lo hace. Y mucho se puede aprender tambi�n de lo que no se dice (Pro. 16:24; Col. 4:6). El discernimiento es esencial para la felicidad. Por otro lado, tambi�n es importante ser flexible al escoger los pasatiempos y actividades recreativas, tal como han descubierto un gran n�mero de matrimonios. Tal vez uno de los c�nyuges era muy aficionado a los deportes u otras diversiones cuando era soltero. �No convendr�a ahora hacer alg�n cambio? (1 Tim. 4:8.) Hay que recordar que los casados necesitan tiempo para realizar juntos actividades espirituales y de otro tipo (Mat. 6:33). w08 15/3 2:8, 9 Noviembre 25@No [hagan] nada movidos por esp�ritu de contradicci�n ni por egotismo, sino [consideren] con humildad mental que los dem�s son superiores a ustedes, no vigilando con inter�s personal solo sus propios asuntos, sino tambi�n con inter�s personal los de los dem�s (Fili. 2:3, 4).@La humildad nos ayuda a
tener la debida actitud hacia los miembros de la congregaci�n. Si nos interesamos en ellos y nos fijamos en sus buenas cualidades, nos ser� m�s f�cil verlos como los ve Jehov�. De esta manera, lograremos fortalecer los lazos de amistad que nos unen a todos los hermanos, sea cual sea su raza o nacionalidad. Los sucesos mundiales de los �ltimos tiempos han obligado a much�simas personas a emigrar a otros pa�ses. Como consecuencia, algunas ciudades tienen ahora gente de muy diversas nacionalidades. Un buen n�mero de inmigrantes se han interesado en la verdad b�blica y ya est�n adorando a Jehov� junto con nosotros. Son verdaderamente personas �de todas las naciones y tribus y pueblos y lenguas� (Rev. 7:9). El resultado ha sido que muchas congregaciones se han vuelto m�s internacionales. w08 15/3 5:10, 11 Noviembre 26@[Echen] sobre [Dios] toda su inquietud, porque �l se interesa por ustedes (1 Ped. 5:7).@Durante la dedicaci�n del templo de Jerusal�n, Salom�n le rog� a Jehov� que oyera la oraci�n de las personas sinceras que se dirigieran a �l para darle a conocer �su propia plaga y su propio dolor� (2 Cr�. 6:29-31). Salom�n estaba seguro de que no solo oir�a las s�plicas de los afligidos, sino que tambi�n las contestar�a. As� mismo, nosotros podemos acercarnos a Jehov� en oraci�n para hablarle de todo lo que nos causa aflicci�n. Y nos consuela saber que �l nos entiende y que se preocupa por nosotros. As� es, a Jehov� le importa lo que nos pasa. Jes�s resalt� as� la ternura con la que su Padre nos cuida: ��No se venden dos gorriones por una moneda de poco valor? Sin embargo, ni uno de ellos cae a tierra sin el conocimiento de su Padre. [...] Por lo tanto, no tengan temor: ustedes valen m�s que muchos gorriones� (Mat. 10:29-31). w08 15/3 3:5, 6 Noviembre 27@Han sido edificados sobre el fundamento de los ap�stoles y profetas (Efe. 2:20).@Jes�s fue compasivo con sus disc�pulos. La noche anterior a su muerte, los ap�stoles, a quienes tanto quer�a, �lo abandonaron y huyeron� (Mat. 26:56; Juan 13:1). �El ap�stol Pedro hasta lo neg� tres veces! Aun as�, Jes�s les dej� la puerta abierta para que regresaran. Por eso le dijo a Pedro: �He hecho ruego a favor de ti para que tu fe no desfallezca; y t�, una vez que hayas vuelto, fortalece a tus hermanos� (Luc. 22:32). Y efectivamente, �los ap�stoles y profetas� llegaron a ser el fundamento del Israel espiritual. Adem�s, las piedras de fundamento del muro de la Nueva Jerusal�n llevan el nombre de los doce fieles ap�stoles del Cordero, Jesucristo. Hoy d�a, los cristianos ungidos y sus compa�eros de las �otras ovejas� conforman una floreciente organizaci�n que se dedica a predicar el Reino y que cuenta con la bendici�n de Dios (Juan 10:16; Rev. 21:14). w08 15/2 3:13 Noviembre 28@As� como eran los d�as de No�, as� ser� la presencia del Hijo del hombre (Mat. 24:37).@El hecho de que la palabra griega parous�a se refiera a un espacio de tiempo prolongado armoniza con lo que Jes�s dijo sobre su presencia (Mat. 24:38, 39). Observe que Jes�s no compar� su presencia al tiempo relativamente breve que dur� el Diluvio de No�. M�s bien, la compar� al per�odo mucho m�s largo que culmin� con el Diluvio. Durante este per�odo, No� construy� el arca y predic� a la gente hasta el momento en que por fin lleg� el Diluvio. Aquellos sucesos tuvieron lugar a lo largo de muchas d�cadas. Del mismo modo, la presencia de Cristo abarca tanto los sucesos que anteceden a la gran tribulaci�n como la gran tribulaci�n misma (2 Tes. 1:6-9). Otras profec�as b�blicas muestran claramente que la presencia de Cristo se refiere a un espacio de tiempo prolongado, y no simplemente al momento en que vendr� a destruir a la gente mala. w08 15/2 5:4, 5 Noviembre 29@Si ustedes tienen en el coraz�n amargos celos y esp�ritu de contradicci�n, no anden haciendo alardes y mintiendo contra la verdad (Sant. 3:14).@Santiago habl� con mucha franqueza sobre las caracter�sticas que son totalmente opuestas a la sabidur�a verdadera. Los �celos� y el �esp�ritu de contradicci�n� (�esp�ritu de discordia�, Torres Amat) son actitudes carnales, no espirituales. Veamos un ejemplo de lo que ocurre cuando dominan esas actitudes. En Jerusal�n se encuentra la Iglesia del Santo Sepulcro, construida sobre una extensi�n de terreno que comprende los lugares donde supuestamente se ejecut� y enterr� a Jes�s. Pues bien, hay seis grupos llamados cristianos que se reparten el
control de dicha iglesia, y la relaci�n entre ellos ha estado siempre marcada por las disputas. En el a�o 2006, la revista Time mencion� que un tiempo atr�s se hab�a producido un incidente en el que los monjes estuvieron �pele�ndose durante horas [...] y llegaron a golpearse mutuamente con enormes candelabros�. Tanto desconf�an los unos de los otros que han encomendado la llave de la iglesia a un musulm�n. En la verdadera congregaci�n cristiana jam�s deber�an producirse tales manifestaciones extremas del esp�ritu de discordia. w08 15/3 4:11, 12 Noviembre 30@Entrena al muchacho conforme al camino para �l; aun cuando se haga viejo no se desviar� de �l (Pro. 22:6).@Cuando a la ense�anza b�blica se le suman la voz de la experiencia y un largo historial de aguante, se produce un efecto que puede ser determinante para que los j�venes crezcan con una fe s�lida. Los mayores no deben subestimar nunca la enorme influencia positiva que pueden tener en los miembros de su familia y en sus hermanos cristianos. Jos�, hijo de Jacob, realiz� en su vejez un sencillo acto de fe que tuvo un profundo efecto en millones de siervos verdaderos de Jehov� que vivieron despu�s. Ten�a 110 a�os cuando �dio mandato respecto a sus huesos�, a saber, que cuando los israelitas por fin abandonaran Egipto, se los llevaran con ellos (Heb. 11:22; G�n. 50:25). Ese mandato fue para los israelitas un motivo m�s de esperanza durante los largos a�os de dura esclavitud que sufrieron tras la muerte de Jos�, pues les garantizaba que un d�a vendr�a su liberaci�n. w07 1/6 2:9, 10 Diciembre 1@Est� libre para casarse con quien quiera, pero solo en el Se�or (1 Cor. 7:39).@Por inspiraci�n, el ap�stol cristiano Pablo mand� que las viudas que quisieran volver a casarse lo hicieran �solo en el Se�or�. Este no era un concepto nuevo para los cristianos que hab�an pertenecido al juda�smo. La Ley que Jehov� dio a Israel estipulaba claramente que no deb�an �formar ninguna alianza matrimonial� con los habitantes de las naciones vecinas, que eran paganas. Jehov� les advirti� del peligro que corr�an si desobedec�an esta norma divina: �Porque [el que no es israelita] apartar� a tu hijo de seguirme, y ellos ciertamente servir�n a otros dioses; y la c�lera de Jehov� realmente se encender� contra ustedes, y �l ciertamente te aniquilar� de prisa� (Deu. 7:3, 4). �Qu� espera Dios de sus siervos de tiempos modernos? Simple y llanamente, que se casen solo con quienes est�n �en el Se�or�, o sea, con cristianos dedicados y bautizados. w08 15/3 2:4 Diciembre 2@Si hubiera cometido pecados, se le perdonar� (Sant. 5:15).@Si tememos haber pecado contra el esp�ritu santo, aliment�monos sin cesar de la Palabra de Dios. Adem�s, sigamos asistiendo a las reuniones y participando en la predicaci�n del Reino. De este modo estaremos �saludables en fe� y libres de angustia (Tito 2:2). Quienes teman haber pecado contra el esp�ritu hacen bien en preguntarse: ��He blasfemado contra el esp�ritu santo? �Estoy verdaderamente arrepentido de mi pecado? �Tengo fe en que Dios perdona? �Soy un ap�stata que ha rechazado la luz espiritual?�. Al hacerse esas preguntas, lo m�s probable es que se den cuenta de que no han blasfemado contra el esp�ritu santo de Dios ni se han vuelto ap�statas. Si se han arrepentido y tienen fe en el perd�n divino, est� claro que no han pecado contra el esp�ritu santo. w07 15/7 1:17, 19, 20 Diciembre 3@Cesen de amoldarse a este sistema de cosas; m�s bien, transf�rmense rehaciendo su mente (Rom. 12:2).@En vez de permitir que el esp�ritu del mundo moldeara su mente, los cristianos de Roma deb�an rehacerla adoptando el modo de pensar de Cristo (1 Cor. 2:16; Fili. 2:5). Hasta el d�a de hoy, esa es la norma que debe gobernar la conducta de todos los cristianos verdaderos. Al igual que aquellos cristianos ungidos de Roma, agradecemos profundamente todas las muestras de compasi�n que Dios nos ha dado y que sigue d�ndonos d�a a d�a. La gratitud que sentimos nos impulsa a servir a Dios con todas nuestras fuerzas, recursos y talentos. Tambi�n nos mueve a esforzarnos al m�ximo por librarnos de la mentalidad del mundo y adoptar la forma de pensar de Cristo. Cuando tenemos la mente de Cristo, lo demostramos en el trato que damos tanto a los hermanos como a los no creyentes (G�l. 5:25). Si pensamos como Cristo, por ejemplo, sentiremos la obligaci�n moral de combatir los deseos de vengarnos (1 Ped. 2:21-23). w07 1/7 1:5, 6
Diciembre 4@No hay ni griego ni jud�o, circuncisi�n ni incircuncisi�n, extranjero, escita, esclavo, libre, sino que Cristo es todas las cosas y en todos (Col. 3:11).@Jehov� considera valiosa toda vida humana, y lo mismo tenemos que hacer nosotros. Si vemos a las personas como las ve Jehov�, les daremos testimonio sin importar cu�l sea su modo de vivir o sus circunstancias. No las pasaremos por alto por el hecho de que no tengan hogar, de que presenten un aspecto desali�ado o de que sean conocidas por llevar una vida inmoral. Y si alguien nos trata mal, no nos formaremos opiniones negativas sobre toda la gente de su nacionalidad o grupo �tnico. A Pablo lo trataron mal algunos individuos, pero eso no hizo que dejara de predicar a la gente del mismo origen que ellos (Hech. 14:5-7, 19-22). �l confiaba en que algunas personas responder�an al mensaje. Por tanto, debemos ver a todas las personas, sean de nuestra nacionalidad o no, de la forma debida: como las ve Jehov�. Si tratamos as� a nuestros hermanos, contribuiremos a la paz y la unidad de la congregaci�n (Job 34:19). w08 15/3 5:19-21 Diciembre 5@Con este prop�sito el Hijo de Dios fue manifestado, a saber, para desbaratar las obras del Diablo (1 Juan 3:8).@Hay varios factores que garantizan la resurrecci�n. El principal es que es parte esencial del prop�sito de Jehov�. Recordemos que Satan�s indujo al hombre a pecar, lo que tuvo como inevitable consecuencia la muerte. De ah� que Jes�s dijera del Diablo: �Ese era homicida cuando principi� (Juan 8:44). Pero Jehov� prometi� que su �mujer� �su organizaci�n en el cielo comparada a una esposa� tendr�a una �descendencia� que aplastar�a la cabeza de �la serpiente original�, lo cual significa que eliminar�a a Satan�s (G�n. 3:1-6, 15; Rev. 12:9, 10; 20:10). A medida que Jehov� iba revelando su prop�sito concerniente a la Descendencia mesi�nica, qued� claro que esta har�a m�s que acabar con Satan�s. La muerte por el pecado que heredamos de Ad�n encabeza la lista de las obras que Jehov� quiere que Jesucristo desbarate, o deshaga (Hech. 2:22-24; Rom. 6:23). w07 15/5 2:4 Diciembre 6@El amor nunca falla (1 Cor. 13:8).@A los disc�pulos de Jes�s se nos identifica por el amor que nos tenemos (Juan 13:34, 35). De hecho, se nos manda que �nos amemos unos a otros� (1 Juan 3:23). Pablo dice que el amor es sufrido y bondadoso. No es celoso, no se vanagloria, no se porta indecentemente ni busca sus propios intereses. Tampoco se siente provocado ni lleva cuenta del da�o. Se regocija con la verdad, y no con la injusticia. Todo lo soporta, lo cree, lo espera y lo aguanta (1 Cor. 13:4-7). Si permitimos que el esp�ritu de Dios genere amor en nosotros, esta cualidad sin duda estar� presente en nuestra relaci�n con Dios y en el trato con nuestros semejantes (Mat. 22:37-39). El ap�stol Juan escribi�: �El que no ama permanece en la muerte. Todo el que odia a su hermano es homicida, y ustedes saben que ning�n homicida tiene la vida eterna como cosa permanente en �l� (1 Juan 3:14, 15). Si nos guiamos por el esp�ritu santo, manifestaremos amor a Dios, a nuestros hermanos en la fe y a otras personas. w07 15/7 2:7, 8 Diciembre 7@Hago todas las cosas por causa de las buenas nuevas (1 Cor. 9:23).@Los cristianos verdaderos consideramos que hacer la voluntad de Dios es un compromiso para toda la vida. Por lo general, algunos de los primeros pasos que hay que dar son leer la Biblia a diario, matricularse en la Escuela del Ministerio Teocr�tico, participar en la predicaci�n y progresar hacia el bautismo. A medida que vamos progresando, siempre tenemos presentes estas palabras del ap�stol Pablo: �Reflexiona sobre estas cosas; h�llate intensamente ocupado en ellas, para que tu adelantamiento sea manifiesto a todos� (1 Tim. 4:15). Ese adelantamiento no es una forma de buscar la autopromoci�n, sino una se�al de que hemos decidido hacer la voluntad de Dios abnegadamente. Con nuestro progreso demostramos que permitimos que Dios dirija nuestros pasos en todo aspecto de la vida. Y nadie puede negar que �l lo hace infinitamente mejor que cualquiera de nosotros (Sal. 32:8). Ahora bien, titubear o preocuparse demasiado por uno mismo puede entorpecer el progreso del cristiano en el servicio a Dios (Ecl. 11:4). Por eso, para que sintamos verdadero gozo al servir a Dios y al pr�jimo, primero tenemos que vencer nuestros temores. w07 1/10 2:2-4 Diciembre 8@Todas estas cosas te las dar� si caes y me rindes un acto de adoraci�n
(Mat. 4:9).@Tras mostrarle �todos los reinos del mundo y su gloria�, el Diablo le hizo a Jes�s la descarada oferta que aparece en el texto de hoy. Jes�s sab�a que el Diablo ten�a pleno control sobre �todos los reinos del mundo�. Pero rechaz� su oferta y as� dej� claro de qu� lado estaba en la cuesti�n de la soberan�a. ��Vete, Satan�s! �le dijo�. Porque est� escrito: �Es a Jehov� tu Dios a quien tienes que adorar, y es solo a �l a quien tienes que rendir servicio sagrado�.� (Mat. 4:810.) Para Jes�s, lo m�s importante era defender la soberan�a de Jehov�, y lo demostr� en cada momento de su vida. �l sab�a perfectamente que para demostrar que Dios ten�a el derecho a ser el Soberano, deb�a mantenerse fiel hasta su muerte a manos de Satan�s (Mat. 16:21; 17:12). Tambi�n ten�a que dar a conocer que el Reino de Dios ser�a el instrumento con el que Jehov� someter�a al rebelde Satan�s y restaurar�a la paz y el orden en toda la creaci�n (Mat. 6:9, 10). w07 1/12 2:4, 5 Diciembre 9@No es bueno que el hombre contin�e solo. Voy a hacerle una ayudante (G�n. 2:18).@Una parte fundamental del prop�sito de Dios para la humanidad era que los matrimonios tuvieran hijos y llenaran la Tierra (G�n. 1:28). �Voy a hacerle una ayudante [al hombre], como complemento de �l�, dijo Jehov�. Entonces hizo que Ad�n cayera en un sue�o profundo, y de su cuerpo perfecto tom� una costilla, a partir de la cual cre� a una mujer perfecta, Eva. Cuando Jehov� se la llev� al hombre, este dijo: �Esto por fin es hueso de mis huesos y carne de mi carne. Esta ser� llamada Mujer, porque del hombre fue tomada�. Eva realmente complementaba a Ad�n, pues, pese a que ambos hab�an sido creados perfectos, a la imagen de Dios, cada uno ten�a caracter�sticas y cualidades distintas del otro. Como hemos visto, fue Jehov� quien instituy� el matrimonio. Y Ad�n y Eva no tuvieron ning�n problema en aceptar esta instituci�n divina mediante la cual recibir�an apoyo el uno del otro (G�n. 1:27; 2:21-23). w08 15/3 2:1, 2 Diciembre 10@Tenemos la liberaci�n por rescate mediante la sangre de ese [Jes�s], s�, el perd�n de nuestras ofensas, seg�n las riquezas de su bondad inmerecida (Efe. 1:7).@Si tememos haber pecado contra el esp�ritu santo, recordemos que Jehov� perdona a los pecadores que se arrepienten. Algo fundamental es orar con sinceridad a Dios. Si hemos pecado, supliqu�mosle a Jehov� que tenga en cuenta nuestra imperfecci�n heredada e historial de fiel servicio y que nos perdone sobre la base del sacrificio redentor de Jes�s y de su gran misericordia. �Y si alguien ha pecado pero es incapaz de orar porque el pecado le ha enfermado en sentido espiritual? El disc�pulo Santiago escribi� sobre tal cristiano: �Que llame a s� a los ancianos de la congregaci�n, y que ellos oren sobre �l, unt�ndolo con aceite en el nombre de Jehov�. Y la oraci�n de fe sanar� al indispuesto, y Jehov� lo levantar�. Tambi�n, si hubiera cometido pecados, se le perdonar� (Sant. 5:14, 15). w07 15/7 1:16, 17 Diciembre 11@Ustedes, tambi�n, ens�nchense (2 Cor. 6:13).@Puede que tengamos que esforzarnos para tener la debida actitud hacia todos los hermanos de nuestra congregaci�n. No olvidemos que el ap�stol Pedro nos exhorta a mostrarnos �cari�o fraternal sin hipocres�a� y �[amarnos] unos a otros intensamente desde el coraz�n� (1 Ped. 1:22). Pero la realidad es que nos puede resultar dif�cil manifestar amor y cari�o sincero en un ambiente multinacional, pues quiz�s la cultura de algunos hermanos sea muy diferente de la nuestra, lo mismo que su origen �tnico y su nivel educativo y econ�mico. �Le cuesta trabajo entender por qu� algunos de ellos piensan o reaccionan de cierta forma? Posiblemente a ellos les pase lo mismo con usted. Sea como sea, a todos se nos manda lo siguiente: �Tengan amor a toda la asociaci�n de hermanos� (1 Ped. 2:17). Tal vez tengamos que cambiar nuestra forma de pensar a fin de �ensanchar� nuestro amor hacia todos los hermanos. w08 15/3 5:12, 13 Diciembre 12@Va a haber resurrecci�n (Hech. 24:15).@Cuando la muerte nos separa de alg�n familiar, esa enorme p�rdida puede producir mucha angustia (G�n. 23:2). Hasta Jes�s, que era un hombre perfecto, �cedi� a las l�grimas� al morir su amigo L�zaro (Juan 11:35). De modo que es natural sentirse triste cuando la muerte nos arrebata a un ser amado. No obstante, los cristianos sabemos que habr� una resurrecci�n. Por eso �no nos apesadumbramos como los que no tienen esperanza� (1 Tes. 4:13). La confianza total en �el Dios de todo consuelo� nos permitir�
asimismo sobrellevar la p�rdida (2 Cor. 1:3, 4). Tambi�n nos ser� de provecho reflexionar en el ejemplo de una viuda de tiempos b�blicos llamada Ana. Ella hab�a perdido a su esposo cuando apenas llevaba siete a�os casada. Sin embargo, a sus 84 a�os a�n acud�a al templo para servir a Jehov� (Luc. 2:36-38). El hecho de llevar una vida de plena devoci�n le ayud� sin duda a sobreponerse al dolor y la soledad. De igual modo, nuestra participaci�n regular en las actividades cristianas nos ayudar� a soportar el dolor de haber perdido a un ser amado. w07 15/7 3:9, 11 Diciembre 13@Dios es amor (1 Juan 4:8).@Con estas significativas palabras, la Biblia subraya la cualidad sobresaliente de Jehov�, la cualidad m�s atrayente y consoladora para todos aquellos a quienes inquieta la maldad. Jehov� ha demostrado amor en todo lo que ha hecho para eliminar la terrible carga que el pecado ha supuesto para su creaci�n. Por amor, dio una esperanza a la descendencia pecadora de Ad�n y Eva, permiti�ndole acercarse a �l en oraci�n y obtener su aprobaci�n (G�n. 3:15). Por amor, Dios ofreci� un sacrificio expiatorio que abrir�a las puertas para lograr el perd�n completo de los pecados y recuperar la vida eterna en perfecci�n (Juan 3:16). Y por amor, Jehov� ha sido paciente con la humanidad y ha dado a la mayor cantidad posible de personas la oportunidad de rechazar a Satan�s y elegirlo a �l como su Soberano (2 Ped. 3:9). Puesto que Jehov� es justo, sabio y amoroso, sabemos a ciencia cierta que pronto acabar� con todo el sufrimiento. Es m�s, �l ha prometido que lo har� (Rev. 21:3, 4). w07 15/5 1:17, 18 Diciembre 14@El pueblo continu� sirviendo a Jehov� todos los d�as de Josu� y todos los d�as de los ancianos que extendieron sus d�as despu�s de Josu� y que hab�an visto toda la gran obra de Jehov� que �l hab�a hecho por Israel (Jue. 2:7).@Cuando Mois�s ten�a 80 a�os de edad, conoci� a Josu�, un hombre mucho m�s joven que por los siguientes cuarenta a�os fue su servidor personal (N�m. 11:28). Josu� lo acompa�� al monte Sina� y lo esper� hasta que descendi� con las tablas del Testimonio (�xo. 24:12-18; 32:15-17). �Qu� gran caudal de buenos consejos y sabidur�a debi� hallar Josu� en el anciano Mois�s! Josu�, por su parte, infundi� �nimo a la naci�n de Israel todos los d�as de su vida. Sin embargo, tras la muerte de Josu� y los dem�s ancianos, comenz� un per�odo de trescientos a�os de vacilaci�n entre la adoraci�n verdadera y la falsa, per�odo que se prolong� hasta los d�as del profeta Samuel. w07 1/6 2:11, 12 Diciembre 15@Tienen que poner cuidado en hacer justamente como les ha mandado Jehov� su Dios (Deu. 5:32).@El mundo est� impregnado del esp�ritu de independencia y desobediencia. El ap�stol Pablo explic� la raz�n en su carta a los cristianos de �feso: �En un tiempo [ustedes] anduvieron conforme al sistema de cosas de este mundo, conforme al gobernante de la autoridad del aire, el esp�ritu que ahora opera en los hijos de la desobediencia� (Efe. 2:1, 2). En efecto, Satan�s, el �gobernante de la autoridad del aire�, ha infectado al mundo entero con el esp�ritu de desobediencia. Lo hizo en el siglo primero, y lo sigue haciendo con m�s intensidad a�n desde que fue expulsado del cielo, para el tiempo de la primera guerra mundial (Rev. 12:9). Los cristianos, sin embargo, sabemos que Jehov� Dios merece nuestra obediencia incondicional por ser el Creador y Sustentador de la vida (Hech. 4:24; Rev. 4:11). w07 15/6 2:1, 2 Diciembre 16@Estos mismos hombres siguen subvirtiendo casas enteras, ense�ando cosas que no deben (Tito 1:11).@Es posible que, con razonamientos enga�osos, algunos hombres de Creta defendieran la observancia de ciertas normas diet�ticas y de pureza ritual de la Ley. Tal vez hasta agregaran a la Ley puntos de su propia cosecha y recurrieran a historias fabulosas del juda�smo y mandatos de origen humano (Mar. 7:2, 3, 5, 15; 1 Tim. 4:3). Esa forma retorcida de razonar hab�a deteriorado su capacidad de juicio y su sentido moral; en otras palabras, les hab�a deformado la conciencia. As� lo indic� Pablo con la frase: �A los contaminados y sin fe nada les es limpio� (Tito 1:15). Como vemos, su voz interior se hab�a distorsionado tanto que ya no serv�a de gu�a confiable ni para dirigir sus acciones ni para evaluar los asuntos. Pero ellos iban a�n m�s all�, pues juzgaban a sus hermanos en cuestiones en las que un cristiano pudiera decidir algo y otro pudiera tomar una determinaci�n muy diferente. En este sentido, aquellos cretenses no ve�an como limpias cosas que realmente lo eran (Rom. 14:17; Col.
2:16). Aseguraban conocer a Dios, pero con sus obras demostraban lo contrario (Tito 1:16). w07 15/10 2:4, 5 Diciembre 17@Regoc�jense conmigo, porque he hallado mi oveja (Luc. 15:6).@Hacer disc�pulos es un trabajo de equipo. Todos los cristianos colaboramos en la b�squeda de personas que puedan llegar a ser disc�pulos de Jes�s. Y cuando empiezan a asistir a las reuniones en el Sal�n del Reino, cada uno de los presentes contribuimos a que crezca su aprecio por la adoraci�n verdadera (1 Cor. 14:24, 25). De ah� que todos los cristianos nos alegremos de que anualmente decidan hacerse disc�pulos cientos de miles de personas. A muchos hermanos fieles les encantar�a ayudar a alguien a conocer a Jehov� y la adoraci�n verdadera, pero, aunque ponen todo su empe�o, no lo consiguen. Si ese es su caso, siga cultivando su amor por Jehov�, inter�sese en la gente, demuestre esp�ritu de sacrificio, tenga paciencia y desarrolle sus habilidades como maestro. Por encima de todo, expr�sele a Jehov� su deseo de ense�ar la verdad a alguien (Ecl. 11:1). Recuerde que todo lo que realiza en el servicio de Jehov� contribuye al �xito de la obra de hacer disc�pulos y glorifica a Dios. w07 15/11 1:19, 20 Diciembre 18@Pastoreen el reba�o de Dios bajo su custodia, no como obligados, sino de buena gana; tampoco por amor a ganancia falta de honradez, sino con empe�o (1 Ped. 5:2).@Los miembros mayores de la congregaci�n agradecen el valioso apoyo de los m�s j�venes y los tratan con dignidad. Por su parte, los j�venes respetan a los mayores por sus a�os de experiencia en el servicio de Jehov� (1 Tim. 5:1, 2). Los superintendentes buscan hombres capacitados a quienes confiar ciertas responsabilidades y los preparan para que les ayuden a cuidar el reba�o de Dios (2 Tim. 2:1, 2). Todos los cristianos deben hacer caso de la exhortaci�n que por inspiraci�n dio Pablo: �Sean obedientes a los que llevan la delantera entre ustedes, y sean sumisos [literalmente, �est�n cediendo debajo�, nota], porque ellos est�n velando por las almas de ustedes como los que han de rendir cuenta; para que ellos lo hagan con gozo y no con suspiros, por cuanto esto les ser�a gravemente da�oso a ustedes� (Heb. 13:17). w08 15/3 1:16, 17 Diciembre 19@Esto es prueba del justo juicio de Dios (2 Tes. 1:5).@El hecho de que Dios haya fijado un d�a para juzgar a la humanidad es, sin duda, un asunto muy serio (Hech. 17:30, 31). Este juicio, que Dios ha encargado a Jesucristo resucitado, puede significar la vida o la muerte para los seres humanos. El D�a del Juicio durar� mil a�os, y ser� Jes�s, el Rey del Reino de Dios, quien presida el juicio en nombre de su Padre. Pero Jes�s no estar� solo. Jehov� escoge a seres humanos para que reinen y juzguen junto con �l durante ese per�odo (comp�rese con Lucas 22:29, 30). Hace casi cuatro mil a�os, Jehov� sent� las bases para ese D�a del Juicio cuando hizo un pacto con su fiel siervo Abrah�n, pacto que al parecer entr� en vigor en el a�o 1943 antes de nuestra era (G�n. 22:17, 18). Por supuesto, Abrah�n no capt� del todo lo que significar�a para la humanidad dicho pacto. Pero hoy nosotros comprendemos, al examinar sus t�rminos, que la descendencia de Abrah�n desempe�a un papel fundamental en el cumplimiento del prop�sito de Dios de juzgar a la humanidad. w08 15/1 4:1-3 Diciembre 20@Soy representante de [...] �l, y [�l] me ha enviado (Juan 7:29).@�En qui�n piensa usted cuando escucha la palabra misionero? Como testigos de Jehov�, lo m�s seguro es que nos vengan a la mente los misioneros que el Cuerpo Gobernante env�a a predicar las buenas nuevas por toda la Tierra (Mat. 24:14). Estos cristianos dedican desinteresadamente su tiempo y energ�as a la noble tarea de ense�ar a la gente c�mo acercarse a Jehov� y tener una relaci�n especial con �l (Sant. 4:8). Jes�s fue enviado a la Tierra para que diera �testimonio acerca de la verdad�, y podemos decir que �l fue el m�s grande y el mejor de los misioneros (Juan 18:37). Su �xito al proclamar las buenas nuevas del Reino fue tan rotundo que hasta la fecha seguimos benefici�ndonos de su labor misional. �C�mo nos beneficiamos? Por ejemplo, todos nosotros, seamos o no misioneros, podemos imitar en nuestro ministerio los m�todos de ense�anza que �l empleaba. w08 15/2 3:1, 2 Diciembre 21@Una revelaci�n por Jesucristo, que Dios le dio, para mostrar a sus esclavos las cosas que tienen que suceder dentro de poco. Y �l envi� a su �ngel y mediante este la present� en se�ales a su esclavo Juan (Rev. 1:1).@El ap�stol Juan
es un ejemplo de fidelidad pese a los cambios de circunstancias y la edad avanzada. Tras servir a Dios por casi setenta a�os, fue desterrado a la isla de Patmos �por hablar acerca de Dios y por dar testimonio de Jes�s� (Rev. 1:9). Pero su labor a�n no hab�a acabado. De hecho, todos los escritos de Juan que llegaron a formar parte de la Biblia datan de los �ltimos a�os de su vida. Mientras estaba en Patmos, recibi� las impresionantes visiones de Revelaci�n, las cuales transcribi� cuidadosamente (Rev. 1:2). Seg�n se cree, el emperador romano Nerva lo puso en libertad, y hacia el a�o 98, quiz�s ya con 90 � 100 a�os de edad, escribi� el Evangelio y las tres ep�stolas que llevan su nombre. w07 1/6 1:15 Diciembre 22@Hazme conocer tus propios caminos, oh Jehov� (Sal. 25:4).@El ap�stol Pablo comprend�a la importancia de amar a quienes ense�aba, y as� lo demostr� en su manera de actuar (1 Tes. 2:7, 8). Nosotros tambi�n podemos demostrar que nos interesamos sinceramente en cada uno de nuestros estudiantes. �C�mo? Dedicando tiempo a conocerlos mejor. Al hablar con ellos de los principios b�blicos, lo m�s seguro es que nos vayamos familiarizando con sus circunstancias. Quiz�s notemos que en algunos aspectos de su vida ya est�n aplicando lo que han aprendido, mientras que en otros todav�a necesitan hacer cambios. Si les explicamos c�mo pueden poner en pr�ctica los principios b�blicos, les mostraremos amor y los ayudaremos a convertirse en aut�nticos disc�pulos de Cristo. Lo m�s importante es orar con el estudiante y pedir por �l en la oraci�n. A la persona debe quedarle claro que nuestro objetivo es ayudarla a conocer �ntimamente a su Creador, acercarse a �l y seguir su beneficiosa gu�a. w08 15/1 2:16-18 Diciembre 23@Tienen que llegar a ser una sola carne (G�n. 2:24).@Cuando el hombre se casa, deja a su padre y a su madre, y lo mismo se puede decir de la mujer. Aun as�, el mandato divino de honrar a padre y a madre no deja de ser v�lido despu�s que los hijos se casan. Por eso, lo m�s probable es que la pareja siga pasando tiempo con la familia de uno y de otro. Un cristiano que lleva veinticinco a�os casado observa: �A veces no es f�cil compaginar los deseos y necesidades del c�nyuge con los de los padres y hermanos de ambos. El texto de G�nesis 2:24 me ha sido muy �til para decidir qu� debo hacer. S� que hay obligaciones que cumplir con los familiares y que se les debe lealtad, pero este vers�culo me ha ense�ado que mi esposa est� primero�. Por su parte, los padres cristianos que saben ceder reconocen que sus hijos casados han formado su propia familia y que en esta el principal responsable es el esposo. w08 15/3 2:10 Diciembre 24@Dios es para nosotros refugio y fuerza, una ayuda que puede hallarse prontamente durante angustias (Sal. 46:1).@�C�mo nos ayuda Dios? Puede ser que Jehov� decida eliminar alg�n problema que nos agobie. O quiz�s decida, m�s bien, darnos las fuerzas para aguantarlo (1 Cor. 10:13). Pero tanto en un caso como en el otro, podemos contar con su ayuda. �Qu� hemos de hacer para recibir la ayuda divina? Recordemos que Pedro nos aconseja que �echemos sobre Jehov� toda nuestra inquietud�. Esto significa dejar que �l se encargue de nuestros problemas, es decir, procurar no inquietarnos m�s por ellos y esperar con paciencia que Dios satisfaga nuestras necesidades (1 Ped. 5:7; Mat. 6:25-32). Tambi�n significa confiar en �l y no en nuestras propias fuerzas o conocimientos. Claro, para ello se necesita humildad. Al humillarnos �bajo la poderosa mano de Dios�, reconocemos la posici�n inferior que ocupamos (1 Ped. 5:6). Y esto, a su vez, nos hace m�s f�cil sobrellevar todo lo que Jehov� permite que nos ocurra. Aunque nos gustar�a que nuestros problemas se solucionaran de inmediato, confiamos en que �l sabr� precisamente cu�ndo y c�mo ayudarnos (Sal. 54:7; Isa. 41:10). w08 15/3 3:7, 8 Diciembre 25@La sabidur�a de arriba es primeramente casta, luego pac�fica, razonable, lista para obedecer, llena de misericordia y buenos frutos, sin hacer distinciones por parcialidad, sin ser hip�crita (Sant. 3:17).@Santiago dijo que �la sabidur�a de arriba� se refleja en un car�cter razonable. �Se nos conoce por nuestra disposici�n a ceder cuando no hay principios b�blicos en juego y por no insistir en que se hagan las cosas a nuestra manera? �Se nos considera personas agradables y accesibles? Todo eso es una indicaci�n de que hemos aprendido a ser razonables. Si todos nos esforzamos por demostrar a mayor grado las cualidades que Santiago mencion�, reinar� la armon�a en la congregaci�n (Sal. 133:1-3). En
efecto, cuando somos apacibles, pac�ficos y razonables, mejoran las relaciones entre nosotros. Adem�s, demostramos que tenemos �la sabidur�a de arriba�. w08 15/3 4:17, 19, 20 Diciembre 26@V�stanse de amor (Col. 3:14).@Hay quienes dicen: �No es que tenga prejuicios, pero...�, y entonces mencionan defectos que son comunes, seg�n ellos, a determinado grupo �tnico. �Alguna vez nos ha pasado eso? Tal actitud revelar�a que a�n no nos hemos liberado de ciertos prejuicios arraigados. Ser�a bueno que nos pregunt�ramos: ��Me esfuerzo por conocer mejor a gente de otras culturas?�. Si nos autoexaminamos de ese modo, tal vez se nos haga m�s f�cil aceptar a hermanos de todas las culturas y sentir cari�o por ellos. Los ap�stoles Pedro y Pablo, por ejemplo, tuvieron que cambiar su forma de pensar (Hech. 10:9-35; G�l. 1:13-20). No hay duda de que nosotros tambi�n podemos cambiar de actitud con la ayuda del esp�ritu de Jehov�. Por lo tanto, si descubrimos que a�n conservamos ciertos prejuicios, hagamos lo posible por desarraigarlos y as� �observar la unidad del esp�ritu en el v�nculo unidor de la paz� (Efe. 4:3-6). w08 15/3 5:13-15 Diciembre 27@No [...] hablo por m� mismo (Juan 14:10).@Cuando comparamos la manera de ense�ar de Jes�s con la de los l�deres religiosos jud�os, vemos claramente que la de �l era superior. Los escribas y fariseos �[hab�an] invalidado la palabra de Dios a causa de su tradici�n�. En cambio, Jes�s nunca difundi� sus propias ideas, sino las de su Padre (Mat. 15:6). Lo mismo debemos hacer nosotros. Adem�s, Jes�s practicaba lo que predicaba. Por ejemplo, Jes�s inst� a sus disc�pulos a �acumular [...] tesoros en el cielo� (Mat. 6:19-21). �Viv�a �l conforme a estas palabras? S�. �l viv�a con sencillez (Luc. 9:58). Lo que m�s le importaba era proclamar las buenas nuevas del Reino. Con su ejemplo demostr� que es posible vivir libre de las inquietudes que agobian a quienes acumulan tesoros en la Tierra. Y nosotros, �seguimos el consejo de Jes�s y acumulamos tesoros en el cielo? w08 15/2 3:14-16 Diciembre 28@Se puso de pie para leer (Luc. 4:16).@La ense�anza basada en la Biblia rinde frutos cuando va acompa�ada de esfuerzo sincero (2 Tim. 3:16, 17). Tenemos el caso de Saulo, un ni�o de Guatemala que naci� con una discapacidad mental leve. Una de las maestras de Saulo le recomend� a su madre que no lo presionara para que aprendiera a leer, as� que Saulo dej� la escuela sin saber leer. Sin embargo, un Testigo le ense�� con la ayuda del folleto Apl�cate a la lectura y a la escritura. Con el tiempo, Saulo progres� tanto que empez� a pronunciar discursos en la Escuela del Ministerio Teocr�tico. Un d�a, su madre se encontr� en la predicaci�n con la anterior maestra de Saulo. Le cont� que su hijo hab�a aprendido a leer, y la maestra le pidi� que regresara la semana siguiente con �l. Cuando Saulo fue a verla, ella le pregunt�: ��Qu� me vas a ense�ar, Saulo? �. �l empez� a leerle un p�rrafo del libro �Qu� ense�a realmente la Biblia?, y la maestra exclam�: ��No puedo creer que ahora t� me est�s ense�ando a m�!�. Con l�grimas en los ojos, le dio un abrazo. w08 15/2 4:9, 10 Diciembre 29@Si errores fuera lo que t� vigilas, oh Jah, oh Jehov�, �qui�n podr�a estar de pie? Porque hay el verdadero perd�n contigo (Sal. 130:3, 4).@El caso del rey Manas�s de Jud� evidencia hasta qu� punto Jehov� est� dispuesto a perdonar. Este monarca hizo lo que era malo a los ojos de Jehov�. Levant� altares a Baal, ador� a �todo el ej�rcito de los cielos� e incluso construy� altares para adorar a dioses falsos en dos patios del templo. Hizo pasar a sus hijos por el fuego y promovi� las pr�cticas espiritistas. Pero m�s adelante, mientras se hallaba en cautiverio, se arrepinti� y or� humildemente a Dios una y otra vez. Como resultado, Jehov� lo perdon� y lo coloc� de nuevo en su trono en Jerusal�n, desde donde foment� la adoraci�n verdadera (2 Cr�. 33:2-17). Siglos despu�s, el ap�stol Pedro pec� gravemente al negar a Jes�s (Mar. 14:30, 66-72). Sin embargo, como Pedro se arrepinti� de todo coraz�n, Jehov� lo perdon� (Luc. 22:62; Hech. 2:1436). Si Jehov� perdon� a Pedro, �por qu� no va a hacer lo mismo con los cristianos de la actualidad que se arrepienten de coraz�n? w07 15/7 1:14, 15 Diciembre 30@�Ay de los que dicen que lo bueno es malo y lo malo es bueno, los que ponen oscuridad por luz y luz por oscuridad, los que ponen amargo por dulce y dulce por amargo! (Isa. 5:20.)@Una t�ctica de Satan�s para entrampar a la gente consiste en socavar su sentido innato de lo que est� bien y lo que est� mal. La
misma actitud que hab�a en Sodoma y Gomorra domina gran parte de la industria del entretenimiento actual. Hasta algunos noticieros de televisi�n y art�culos de revistas serias realzan la violencia y alimentan un morboso inter�s por el sexo. De hecho, buena parte del entretenimiento nubla la capacidad de la gente �para distinguir tanto lo correcto como lo incorrecto� (Heb. 5:14). No olvidemos, sin embargo, lo que Jehov� advirti� por boca del profeta Isa�as y que se cita en el texto de hoy: ��Ay de los que dicen que lo bueno es malo y lo malo es bueno[!]�. Pues bien, �ha conseguido Satan�s corromper nuestra forma de pensar con este entretenimiento da�ino? Los cristianos debemos hacernos un autoexamen a este respecto (2 Cor. 13:5). w07 1/10 3:10 Diciembre 31@Est�n airados, y, no obstante, no pequen; que no se ponga el sol estando ustedes en estado provocado (Efe. 4:26).@Cuando este consejo se lleva a la pr�ctica, ayuda a solucionar o incluso a evitar los conflictos matrimoniales. Pero �y si un cristiano cree que no tom� la mejor decisi�n al escoger a su c�nyuge? Tal vez sienta que en su relaci�n ya no existe el cari�o que ve en otras parejas. Aun as�, le ser� �til recordar el punto de vista de Dios sobre el v�nculo matrimonial. Bajo inspiraci�n, Pablo aconsej� a los cristianos: �Que el matrimonio sea honorable entre todos, y el lecho conyugal sea sin contaminaci�n, porque Dios juzgar� a los fornicadores y a los ad�lteros� (Heb. 13:4). En definitiva, los matrimonios cristianos pueden ser felices. Es cierto que deben esforzarse por manifestar cualidades cristianas, como la disposici�n a ceder. Pero en las congregaciones de los testigos de Jehov� de todo el mundo hay un sinn�mero de matrimonios que demuestran que s� es posible lograrlo. w08 15/3 2:16-18