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(10) Después del fracaso de La Luisa y San Pedro, Luperón creó un cardón de pequeños cantones, para cubrir el paso del rio Ozama y Yabacao, y dificultar las comunicaciones, entre Monte Plata y Guanuma y San Carlos; y Guerra y Santo Domingo; eficazmente apoyado por Adón, cuya audacia había llegado al extremo de atacar con sus guerrillas, al vapor correo español Magestad, durante los días 9 y 10 de enero, en las riberas del Ozama, en la ruta de Santo Domingo a Yabacoa, matando e hiriendo parte de la gente que estaba a bordo. Uno de los últimos episodios de la guerra de Restauración en el que se hace mención del General Marcos Evangelista Adón, es en el de la Batalla de paso del Muerto, en la que perdiera la vida ese intrépido General Juan Suero, que combatió al lado de las fuerzas españolas, pero que por su valor extraordinario se destaca entre los valientes dominicanos. A comienzos del 1864 Luperón había ocupado a Monte Plata, Boya y Bayaguana, arrollando las columnas enemigas. Ordeno al General Manzueta avanzar sobre San Cristóbal y Bani, y al General Marcos Adón ocupar La Victoria, para impedir al enemigo la navegación del rio Ozama con el Yabacao y sus influentes. El General Suero fue herido, y murió al día siguiente, 19 de marzo, (viernes santo). Con la perdida de tan destacado General, comenzó a debilitarse la resistencia española, pues cuatro meses más tarde, había de morir el General Pedro Santana, 9 de julio. Al siguiente año, 1865 salían de Santo Domingo las últimas fuerzas de ocupación de Isabel Segunda. En los hechos que siguieron a la anexiona, el General Marcos Evangelista Adón, tuvo preponderante participación, pues a poco de salir

(11) Los últimos españoles de Santo Domingo; los Generales Adón y Manzueta, tomaron el poder en la capital, desconociendo su gobierno en la ciudad de Santiago de los Caballeros. El General José María Cabral, fue llamado por los Generales, para que con el titulo de pacificador de la Patria, se hiciera cargo del gobierno. El país estaba agotado, por las vicisitudes que había pasado en 21 años, desde la ocupación de Haití; y Cabral no pudo consolidar su Gobierno. Por lo ya expuesto, dio lugar a un movimiento a favor de Buenaventura Báez, movimiento que fue tomando cuerpo, hasta que el mismo Cabral se decidió dejar el poder, y el mismo tomo parte de la comisión que fue a Curazao a buscar el ídolo de los baecista. Esta actitud de Cabral disgusto a Luperón, y fueron muchos los que manifestaron su descontento, porque Báez siempre estuvo al servicio de la causa española. Meriño, en un famoso discurso le echo en cara su falta de patriotismo. Porque cuando aquí se luchaba por la Restauracion, el vagaba por playas extranjeras, y lo conmino a gobernar con honradez, no pena de ser llevado a las barras del senado. Esto sucedía mientras Báez tomaba posesión de la Presidencia, y cuando pasaron al Palacio Nacional para hacer el brindis de rigor, nótese la ausencia de Meriño, y cuando alguien le dijera a Báez que Mariño no estaba presente, Báez le contesto: yo no he caminado estas calles descalzo vendiendo palomas, porque mi padre me dejo en un banco de Inglaterra muchos miles de libras esterlinas. Con esto aludía el origen humilde de Meriño, que en sus años mozos se había dedicado a esa actividad.

(12) Al día siguiente Meriño fue expulsado. No pudo Báez sostenerse en el poder, pues el descontento era muy grande, y a los seis meses Pimentel marchó sobre la Capital, y desde San Carlos, apoyado por Marcos Evangelista Adón, tomó el poder mientras Báez se asilaba en la delegación del consulado francés. Conociendo Adón los planes de Pimentel, que pensaba en eliminar a Cabral y a Luperón; asalto la comandancia de armas y la Fuerza, por sorpresa, y antes que la gente de Pimentel pudiera moverse, ya estaban engrillados y encarcelados. Dijo Yaqui Núñez del Risco, en su sección Cultura son sabrosura, que en ese instante. Marcos Evangelista Adón era el hombre más importante del país, pues era dueño absoluto del gobierno. Con esa acción de Marcos Evangelista Adón, volvió Cabral al poder para gobernar desde el 29 de septiembre del 1866 hasta el 31 de enero del 1868. Fue durante este periodo que Cabral formo los Batallones Restauración y Ozama, poniendo este ultimo bajo el comando del General Marcos E. Adón, ascendido a General de división. Al finalizar los dos años de Gobierno de Cabral, volvió al poder Buenaventura Báez, y unas de la primeras medidas tomada por el nuevo mandatario, fue la de apresar a Marcos Adón, y conducirlo esposado al presidio. Allí permaneció algún tiempo. Y contaba Doña Bernarda, que acostumbraba ir toda las semanas a la cárcel en compañía de su hija Runalda, a llevarle al General , comida, ropa limpia y otros menesteres, que cuando los guardias de la cárcel la veían llegar, se decían: ahí viene la diabla, la madre del diablo. Pero esta situación no duro lo que Báez hubiera querido, pues una noche, logro Adón fugarse, y cuando llego a los suyos, les dijo: estas manos no volverán a esposarlas el Presidente Báez.

(13) Esa misma noche partió para el exilio, en unión de su hermano Manuel que lo acompaño en todas sus vicisitudes. Llego a Curazao, donde pudo uniese al General Luperón, y desde allí formaron planes para una invasión por el sur, en combinación con el Coronel Francisco Javier Heredia y los hermanos Andrés y Timoteo Ogando, el Coronel Heredia fue descubierto, y fusilado por conspirar contra el gobierno. Luperón partió para Venezuela, a gestionar la ayuda que le había prometido al Presidente de esa nación, y mientras tanto, dice el Doctor Nestos Caro, que Adón estaba impaciente, y no quiso esperan mejores tiempo, y zarpó en una goleta holandesa que anclo en la bahía de ansses-a-pitre, en territorio haitiano, frente a las costa de Pedernales. Después de muchos inconvenientes, Adón pudo penetrar en territorio Dominicano, para unirse al grupo de los hermanos Ogando en la loma de Panzo, donde tenían establecido su campamento. Tan pronto como Báez se enterara de la presencia de Adón en tierras Dominicanas, despacho el

grueso

de su poderío militar hacia el sur, en

persecución de los rebeldes, teniendo esto que replegarse en Haití, allí se reunieron los Generales Azules, amparados del favor que les brindaba el Presidente Haitiano Nissage Saget. El día 11 de marzo del 1868 se celebro el pacto de Saint Marc, San Marcos, entre los Generales Cabral y Luperón, este convenio consistía en que ambos emprenderían la lucha por el derrocamiento de Báez, por separado; El General José María Cabral, se haría cargo de de las operaciones en el sur, y Gregorio Luperón en el norte y este de la República, y el primero llegara a la Capital, aguardaría al otro, para entre ambos decidir, cual ocuparía la Presidencia de la nación. Luperón partió hacia el norte, y con él el General Marcos E. Adón.

(14) Desde el Vapor Telégrafo que había comprado Luperón en San Thomas, bombardearon a Manzanillo y

Puerto Plata, pero sin poder desembarcar,

siguieron toda la costa rumbo a Samana. Al llegar a la bahía, Luperón despacho dos columnas, una a Sabana de la Mar, al mando del General Dámaso Mañón y la otra Samana comandada por el General Marcos Evangelista Adón. Dámaso fue hecho preso, para ser mas tarde fusilados junto a los hermanos Manzueta; Eusebio y Leandro, y Aniceto Gonzales. Esta ejecución se llevo a cabo el día 12 de noviembre del 1873. Pero Adón tuvo mejor suerte, y se apodero del poblado de Samana. Luperón desembarco, y desconociendo el compromiso que tenía con Cabral, formo el siguiente gobierno presidido por el: General Marcos Evangelista Adón, como ministro de interior y policía, General Manuel de Jesús Ricardo, como ministro de justicia, General Belisario Curiel, ministro de hacienda, y el General Silvano Lora Acosta, como ministro de guerra. Pero todo esto duro muy poco, la guerra en el mar resultaba muy costosa, y a Luperón le faltaban recursos económicos y hombre. Entonces resulto lo inesperado, el factor imponderable. Luperón mando a apagar las calderas del Telégrafo, mientras la tripulación hacia leña en la costa, cuando fue atacado por sorpresa por dos goletas del gobierno baecista remolcada por un vapor norte americano. Derrotado Luperón, perdió en esa acción al General Belisario Curiel, quien cayó prisionero y fue fusilado por órdenes del Presidente Báez. Entonces Luperón se vio obligado a navegar rumbo a Barahona, donde se habían apoderado del pueblo. Al pasar por Azua, apreso dos goletas del gobierno y se las llevo, con el propósito de que el General Cabral le suministrara gente para una invasión por Boca de Yuna.

(14) La historia de este soldado de la patria, de este paladín de la libertad, puede resumirse en una década de intenso batallar; cinco años contra la anexión y cinco contra la dictadura de Buena Ventura Báez. Y todo para morir como Duarte en el destierro, y como Duarte rodeado de miseria. AL GENERAL DE DIVISION MARCOS EVANGELISTA ADON Héroe de la restauración Encarnas de la patria, la epopeya, Y en dos lustros heroicos de su historia Conquistaste los lauros y las glorias De los Duartes, los Sánchez y las mellas.

Porque fue esa jornada la más bella Que puso a prueba, en la inmortal contienda, Y escribió con ribetes de leyenda El valor de los hijos de quisqueya……

El diez de enero difundió tu fama Caben las aguas de la ría Ozama, Para siempre tenerte en la memoria,

Y rendirte orgulloso un homenaje, Por tu hombría, tu hazaña y tu coraje, Hoy se levanta un pueblo la victoria. Raúl Gonzales L.

(15) Pero

Cabral no quiso deshacerse de su gente, y Luperón se marcho muy

disgustado con Cabral. Por intrigas de Báez, el Telégrafo fue declarado por el Presidente de los Estados Unidos Ulises Grant, quien hacia gestiones con Báez para el arrendamiento de la Bahía de Samana, como vapor pirata, y Luperón tuvo que venderlo en Turk-island. Marcos Adón, disgustado también se fue a Jazmel, con su hermano Manuel, y allí permaneció hasta la hora de su muerte, el día 19 de febrero del

1872, a

cocecuencia de una afección hepática que padecía desde algún tiempo atrás. A la caída de Báez 1874, Manuel retorno a la patria en deplorable situación económica. SEMBLANZA En un comentario de Jazmel, yacen los restos de un patriota, que para los hijos de la Victoria, es tan grande como aquellos benefactores que empinados sobre los pedestales de la patria, reciben la reverencia de los dominicanos, su memoria levantándose del olvido, embellece las páginas de las historia. La historia de este soldado de la patria, de este paladín de la libertad, puede resumirse en una década de intenso batallar; cinco años contra la anexión y cinco contra la dictadura de Báez. Y todo para morir como Duarte en el destierro, y como duarte rodeado de miseria.

_____________________ Raúl Gonzales L.

ADON, MARCOS EVANGELISTA. (1872) Santo Domingo-Haití). Político militar t restaurador. Nació en la sección La Victoria, de Santo Domingo. Se destaco como hombre de armas. Junto a sus hermanos Anbrioso y Santiago, lucho en la Guerra Restauradora, iniciada el 16 de agosto de 1864 contra el gobierno anexionista de España, que desde 1861 mantenía su dominio en el país. Lucho en los ejércitos restauradores de Yamasa, Monte Plata y La Victoria por su gran actividad en esta campaña alcanzo el rango de general. Fue jefe de las tropas que vencieron los españoles en aquella región. Llego a ser munícipe en la zona y, en plena guerra, fundó el poblado de La Victoria, que logro convertir en Municipio. Terminada la Gesta Restauradora en 1865 en la cual los dominicanos derrotaron a los españoles. Adón fue nombrado comandante de armas en Santo Domingo, cargo de desempeño hasta 1868. Al ocupar Buenaventura Báez la presidencia de la República a fines de 1865. Se declaro oposicionista y acérrimo enemigo de este. Así, al tomar Báez la presidencia de nuevo en 1868 tras el derrocamiento de José María Cabral, presidente restaurador que había gobernado de 1866 hasta 1868 le toco a Marcos Evangelista tomar el camino del exilio. Se embarco al extranjero, pero continuo la lucha contra el baecismo. Regreso a su país tiempo más tarde y formo parte del grupo que dirigía Luperón contra el gobierno de Buenaventura Báez. Fue el primero de ese grupo que piso la zona sur del país en pos de la lucha. Más tarde enfermo y se estableció en la ciudad haitiana de Jacmel, donde murió. Una calle de la ciudad de Santo Domingo lleva su nombre.

BIOGRAFIA DEL GENERAL MARCOS EVANGELISTA ADON El 25 de Abril del 1835, nace en los predios de Mata- Mamón, el General Marcos Evangelista Adón, es el cuarto hijo del matrimonio de José Lino Adón y Bernarda Abad. Hizo sus estudios primarios en la ciudad Capital, bajo el mescenato de su medio hermano Enrique Adón. Luego se dedica a cultivar sus predios, y en estas faenas se encontraba, cuando las tropas españolas de la Anexión desembocaban en Santo Domingo, Al enterarse de ese suceso, se presento ante el señor Pedro Bello, Jefe del Puesto Cantonal, y apoderándose esas armas formo sus guerrillas para combatir a los españoles. En

la Sabana de Ferregus tiene su primer

encuentro con los españoles donde es derrotado. Desde entonces se dedico a atacar por sorpresa, las embarcaciones españolas que llevaban pertrecho y alimentos a sus cuarteles de Monte Plata y Guanuma por los ríos Ozama y yabacao. El 10 de Enero del 1863, derroto el Barco Español ´´majestad´´, siendo este su más resonante triunfo. En conmemoración a esta fecha fundo al siguiente año, con el presbiterio Francisco Díaz Báez

el poblado de La Victoria, con el nombre

original de ´´San Antonio de la Victoria del Rincón del Ozama´´ Casó con Doña Escolástica Prensa con la que procreo dos hijos Narcisa y Luciano. Después de la ocupación española, y restaurada la soberanía nacional se dedico, en unión de los General Cabral y Luperón, a combatir la tiranía Báez. Tomo por asalto la población de Samana, y allí formo Luperón su gobierno, nombrándole Secretario de Estado de lo Interior y Policía. Estuvo preso en el gobierno de Báez, y se fugo de la cárcel y partió para Curazao, allí se reunió con Luperon, y mientras este salía para Venezuela en busca de ayuda, zarpo en una goleta holandesa, desembarcando en la Bahía de Anse –epetrí, en Haití, para unirse a los Hermanos Generales Andrés y Timoteo Ogando, que desde las lomas de panzo, combatían a Báez. Derrotados de panzo por los gobiernista, se refugió en Jasmel en Haití, donde murió, víctima de la miseria y una dolencia del hígado, el día 19 de febrero del año 1872. Allí reposan sus restos.