SER Vuélvete más allá de tus pasados, no cuentes el tiempo por que no existe. El polvo luminoso que destella en la distancia es tu principio, es el alma sublimada que te contiene, que te llama desde las entrañas de lo que el mundo llama alma. La muerte, ha de enseñarnos a estar vivos, a dar fe de la movilidad de nuestras manos y la función inolvidable de nuestro enredo. No hemos sido delineados con tanta paciencia Y encendidos con tal dedicación Para rehusarnos a escoger al mundo como casa Y cerrar las puertas, apagar las luces Y quedar inmóviles bajo la cama. Eres responsable de las nubes que te circundan, Del sol que te alumbra, y de las estrellas que te recuerdan con ternura, eres parte del espíritu del mundo, como el mundo es una astilla entre tus uñas. No bajes, por que no hay profundidades, ni subas por que no hay escaleras que te lleven al destino ya alcanzado. Hazte fuego desde el ardor de tu mirada, no te olvides de ti NUNCA. No regreses sin llegar al otro lado de la llamada “verdad” Walter 02 de diciembre de 2007 03:06 PM