La Empresa Sensual Enamora a tus clientes y colaboradores para conseguir resultados extraordinarios Jesus Vega
Reseña Compañías como Google, Apple e Inditex cuentan con legiones de consumidores fieles que han sido seducidos por sus productos. En un mundo altamente competitivo, la capacidad de atraer y seducir a clientes y colaboradores es vital para el éxito de las compañías. En este interesante libro, Jesús Vega de la Falla, ex director de Recursos Humanos de Inditex, explica cómo las grandes marcas y sus líderes han conquistado millones de clientes, gracias a sus atributos sensuales. getAbstract recomienda esta obra a directores de mercadotecnia, diseñadores de productos, pequeños empresarios y a todos aquellos profesionales que deseen conocer cómo desarrollar su sensualidad para los negocios. En este resumen usted aprenderá
Qué es la Empresa Sensual; Cómo seducir a sus colaboradores y clientes y Cuáles son las características del líder de una Empresa Sensual. Ideas fundamentales
Muchas compañías exitosas se distinguen de la competencia por sus sensualidad y capacidad de seducción. Los líderes de las empresas deben ser capaces de conectar emocionalmente con colaboradores y clientes. La sensualidad en las empresas, como en el mundo natural, permite sobrevivir y triunfar en el medio. Las empresas sensuales deben ocuparse en mantener el interés y la pasión de sus clientes por sus productos. En un entorno altamente competitivo, precio y calidad no son suficientes para distinguirse de la competencia: es necesario cuidar el diseño, la imagen y el detalle en todos los niveles. Sin enormes inversiones se pueden crear oficinas y puntos de venta que seduzcan a través de los sentidos. Humildad, confianza, pasión y participación se cuentan entre los principales atributos que distinguen a las empresas sensuales. Las compañías deben ser fuente de realización personal para sus colaboradores. Las compañías sensuales son abiertas, transparentes y muestran sus emociones. Los líderes de las empresas sensuales deben ser excelentes contadores de historias.
Resumen ¿Sensualidad y negocios? Aunque la asociación entre empresa y sensualidad puede resultar extraña, la realidad es que muchas de las empresas más exitosas de la actualidad han logrado distinguirse de su competencia gracias a la seducción que ejercen sobe sus clientes y colaboradores. Compañías como Google, Apple, Starbucks e Inditex cuentan con legiones de consumidores fieles que han sido seducidos. Estas compañías han entendido que los factores de calidad y precio no son suficientes para triunfar en el mercado actual. La manera en cómo se hacen las cosas es más importante que nunca. Las nuevas compañías deben satisfacer las emociones y los sentidos de sus clientes. Hoy día, las empresas que deseen triunfar deben asumir que la solemnidad y el desapego emocional que caracterizaron al mundo de los negocios en el pasado son ahora contraproducentes. Para conectar emocionalmente con los clientes y equipos de trabajo, los nuevos líderes empresariales necesitan desarrollar su encanto y poder de seducción, tal y como lo hacen los líderes mundiales más carismáticos. Además de ingresos y dividendos económicos, las compañías deben proveer satisfacción personal a sus empleados. El mundo de las compañías frías, distanciadas e impersonales llegó a su fin. “Cuando se afirma que empresa y religión son los últimos reductos de la solemnidad es porque se piensa que existían otros reductos solemnes que ya no lo son tanto”. Antes, sólo los vendedores podían ejercer la simpatía. Hoy, todos los profesionales, empezando por los directores, deben integrar la dimensión emocional a su desempeño. Al seducir a sus colaboradores, los nuevos líderes están en posibilidad de obtener la máxima creatividad y eficacia de un equipo, sin necesidad de depender del talento individual de uno o dos profesionales, cuyos servicios son por lo general muy costosos. Antes de gastar grandes sumas en los supuestos talentos del mundo empresarial, es recomendable desempeñar una gestión creativa que promueva equipos competitivos y unidos. “Creo que en la mayoría de las empresas existe un enorme depósito de talento que, por no ser extraído o estimulado, poco a poco se va apagando (aunque nunca desaparece)”. Contrario a lo que se cree, el talento no es algo escaso. No vale la pena gastar grandes cantidades en consultores, si los problemas pueden resolverse con la creatividad y compromiso de los colaboradores de la compañía. En el ámbito internacional se ha normalizado una guerra abierta por atraer talentos, sin considerar el talento que ya existe en el interior. La formación tampoco debe sobreestimarse. Antes de invertir en formación para la planta, es necesario considerar si tal aprendizaje podría realizarse con los recursos humanos propios de la empresa, a través de prácticas o dinámicas colectivas en el propio campo de acción. En muchas ocasiones, es mejor fomentar el enriquecimiento del conocimiento práctico, así como el intercambio de experiencias y aprendizajes entre los mismos colaboradores. “El nuevo orden, en mi opinión, claramente influenciado por la incorporación de la mujer a las esferas de poder, no es tan autoritario”. La era de la Empresa Sensual La sensualidad en el mundo natural aparece en estados avanzados de evolución, como una forma refinada de la sexualidad. La sensualidad influye en la atracción y en la
reproducción humana. La Empresa Sensual es una fase más evolucionada de las empresas, que están ahora en mejores condiciones para sobrevivir. “La Empresa Sensual crea una relación similar: seduce, enamora y mantiene la pasión”. Hoy, los consumidores tienen más opciones de compra. Cuentan con total libertad para elegir a sus proveedores entre miles de opciones, a veces en todo el mundo. Los trabajadores también poseen la opción de emigrar y ofrecer sus servicios en diferentes empresas. Es más difícil atraer y fidelizar clientes y colaboradores, y las empresas deben centrarse en ello. Se debe buscar generar relaciones emocionales con los clientes. Algunos factores han favorecido la aparición de las empresas sensuales:
Crisis de la autoridad – Los grupos sociales de la actualidad tienden a ser más democráticos, y menos jerárquicos. En las empresas, la política, e incluso en la vida familiar, los individuos están menos supeditados al control de otros. Esto significa más libertad y democracia. Como consecuencia, las compañías se vuelven menos rígidas y las decisiones menos unidireccionales. Una comunicación efectiva se hace aún más imprescindible. Ahora se debe ganar por medio de la seducción no de la autoridad. El nuevo rol de la mujer – Con los cambios sociales que conllevaron la difusión del uso de la píldora anticonceptiva y las conquistas del feminismo, las mujeres se incorporaron más al mundo laboral. Desde entonces, poco a poco han ganado más espacios en las compañías. Esta inclusión de lo femenino en el mundo empresarial ha modificado las relaciones. La llegada de la sensualidad a la dinámica empresarial se debe en gran medida a la presencia de las mujeres en puestos directivos. El debilitamiento del valor añadido – El precio y la calidad ya no son factores de diferenciación suficientes respecto a la competencia. Es necesario distinguirse por su diseño, imagen y atención. “Facilitar el reconocimiento de la empresa implica trasmitir connotaciones positivas; en otras palabras, aumentar la notoriedad de la empresa”. “Emoción y sensualidad en la empresa” En una sociedad más compleja, hedonista y libre, la aparición de la empresa sensual era cuestión de tiempo. Los líderes sensuales tienen la capacidad de generar respuestas emocionales en quienes les rodean. Se trata de mantener la pasión en las personas, de manera que la intensidad y el interés crezcan como en las relaciones amorosas. Es importante generar relaciones de afectividad con los clientes a través de los productos y servicios. Mientras más fuerte sea el lazo emocional, la relación será más duradera. El cliente debe sentir que es tratado como una persona y no como un número. “Después de haber conquistado los derechos económicos y políticos, a la clase media le faltaba una revolución pendiente: la conquista de la belleza”. Seducir no significa mentir o engañar, sino usar los atributos personales para que las empresas hagan sentir a sus clientes deseados. Este principio debe abarcar todos los aspectos de la compañía. Contrario a lo que se cree, la publicidad no es el único medio para aumentar las ventas. Inditex, por ejemplo, no paga publicidad. Sus tiendas son la publicidad: son espacios creados para seducir a las personas a través del servicio y los estímulos sensoriales, de manera que la publicidad se vuelve innecesaria como mecanismo de atracción.
“Si tienes que elegir entre precio y diseño, elige precio y diseño”. El cultivo de la belleza es un rasgo de sofisticación cultural. A todos les agrada rodearse de belleza. El aspecto es lo primero que percibimos de las personas. Es por ello que la imagen es fundamental durante la seducción. Una buena imagen es muestra de pulcritud y de voluntad por dar lo mejor de sí mismo. En los productos, la imagen y diseño determinará el éxito. A través de su imagen las compañías deben transmitir su identidad, hacerse notorias en el mercado. “Y recuerda: la imagen no lo es todo. Pero el fondo tampoco lo es”. Imagen y atributos Las empresas deben proyectar una identidad que refleje su dimensión emocional y humana. Las tiendas, los centros de servicio, el diseño de los productos y hasta el atuendo de los colaboradores de la empresa deben estar a tono con la imagen que se desea proyectar. Apple es el ejemplo paradigmático de una gestión de la imagen, la cual abarca productos, espacios y hasta la imagen pública de sus directores ejecutivos. La imagen corporativa de algunas compañías tecnológicas permite a sus colaboradores mantener un estilo más informal y desenfadado, como el que proyectaba Steve Jobs (ropa casual, barba sin rasurar). Sus instalaciones son más similares a un campus que a unas oficinas de Wall Street. Dicho estilo es consecuente con la identidad de la compañía. Es importante recordar que la imagen es sólo el primero de los atributos y que la vulgaridad no es admisible en ningún caso. “En ocasiones, se pide a los profesionales que trabajan para los clientes actitudes o comportamientos que no son coherentes con la forma en la que se los trata a ellos dentro de las empresas”. Se recomienda que las oficinas y sedes corporativas sean espacios funcionales y estéticos donde haya estímulos para los sentidos de colaboradores y clientes: fragancias, pinturas, música, tapizados, etc. Las cafeterías de Starbucks basan su éxito en el deleite sensual de sus clientes. De manera análoga, muchas compañías exitosas han conquistado a sus empleados con instalaciones y servicios en sus oficinas (café, salas de videojuegos, restaurantes). Aun sin grandes inversiones se pueden realizar modificaciones en los espacios con instalaciones que marquen una diferencia y seduzcan. “Si la humildad nos da la capacidad de crecer desde la complicidad con el resto de las personas, la confianza nos otorga la capacidad de crecer desde la complicidad con nosotros mismos”. Sin importar el giro de la compañía, en la medida de lo posible, los productos deben tener una presentación e imagen impecables. En un mundo hedonista caracterizado por la búsqueda del placer, las compañías deben hacer que sus productos proporcionen deleite en todos sentidos. Acceder a los productos con una alta calidad de diseño solía ser un privilegio de unos pocos. Sin embargo, hoy día gran parte de los consumidores demandan calidad en la presentación, en las formas y el detalle. “Te deseo. Sí, te lo estoy diciendo a ti, lector o lectora. Llevo mucho tiempo pensando en ti. Cierro los ojos por la noche y todavía estás ahí, en mi mente”. Valores sensuales
Para lograr el impacto deseado durante la seducción, la imagen debe acompañarse de inteligencia, manifestada en una dirección original, auténtica y plural; que promueva la expresión libre de todos los colaboradores y que estimule la generación de ideas y propuestas colectivas. Los líderes deben evitar los abusos de cualquier parte, la apatía y el pesimismo. Además, deben mostrar siempre el ejemplo y ser modelo de toda la planta. Las empresas sensuales deben fomentar valores que las lleven al éxito:
Humildad – En un entorno competitivo es necesario aprender y transformarse de manera constante. Las compañías y sus colaboradores necesitan poseer la humildad que les permita aprender de sus errores y ser autocríticos, sobre todo al tratar con los clientes. Confianza – Los equipos de trabajo y los líderes deben proyectar confianza a sus clientes y colaboradores. Se debe conservar una actitud abierta y segura ante los desafíos, ser siempre positivo, libre de prejuicios y dispuesto a romper paradigmas Pasión – Para lograr resultados extraordinarios y sobrepasar las expectativas, son necesarios líderes y colaboradores apasionados. La pasión crea equipos eficientes. Participación – Cuando las decisiones se toman de manera participativa, todo el equipo se involucra con el proyecto. Es por eso que deben crearse las vías para la participación. Es innegable que un equipo apasionado y participativo puede generar tantas o más soluciones creativas que un solo ejecutivo o una consultora especializada. “El divorcio en la empresa, que normalmente afecta la relación empresa-empleado, pero que también puede afectar la relación cliente-empresa, es una situación lamentable pero necesaria”. “Claves de sensualidad empresarial” Cada vez que un cliente nuevo compra un producto, debe iniciarse una relación emocional con él. Se debe generar apego al producto y un deseo que deberá mantenerse. Los líderes de las empresas sensuales se caracterizan por inspirar deseo y al mismo tiempo ser determinados a la hora de perseguir sus propios anhelos. “Sí, el amor está bien. Pero, por favor, no olvides que el sexo (ganar dinero) también es divertido”. Los colaboradores deben poder realizarse personalmente en la empresa. Para ello se necesitan proyectos apasionantes, un buen salario y un trato respetuoso. Las compensaciones son fundamentales para generar colaboradores satisfechos. Además de ser una cuestión de justicia, brindar mejores condiciones retributivas que la competencia le permitirá exigir un rendimiento mucho mayor en su planta. Por otra parte, mientras más seductores sean los proyectos para sus colaboradores, estos serán más fieles. Un proyecto apasionante puede ser un factor definitivo para la motivación profesional. Las compañías en este nuevo contexto deben ser más abiertas y transparentes. Sus líderes deben expresarse de manera sincera. Es mejor exhibir un rostro humano sin ocultar las debilidades. La gente valora esa sinceridad y responde de la misma manera. Google es un ejemplo de una compañía que se abre y muestra su humanidad. En los escándalos que han rodeado a la empresa, sus líderes han sabido dar la cara y ser directos sobres sus intenciones y posturas, algunas de ellas, polémicas. Esta es la manera en que la empresa mira a los ojos de sus clientes, sin evadir responsabilidades.
Las compañías deben ser generosas con sus clientes y confiar en ellos. Zara, por ejemplo, tiene una política de devolución y cambio de productos a favor del cliente. Las compañías deben también poder generar misterio. Esta es una de las mejores estrategias de venta. Además de aumentar el deseo, muchas veces el misterio redunda en publicidad gratuita. El mejor ejemplo es la expectación que rodea siempre el lanzamiento de los productos Apple. Loa líderes de las empresas sensuales deben ser excelentes contadores de historias. Deben poder generar discursos que generen pasión en las personas y las hagan sentirse parte de algo importante. Sus historias deben poder excitar la imaginación y las emociones de quienes escuchan, ser sinceras y románticas. Los líderes deben tratar a las personas de forma directa y crear intimidad. Deben hacer sentir valioso a cada uno de los colaboradores. Mientras más auténtico sea el líder, mayor será su capacidad para movilizar y atraer a otros seductores. Finalmente, las empresas sensuales deben ser fieles a sí mismas y no atentar contra sus propios principios e identidad. Si lo hacen, corren el riesgo de destruir todo el trabajo que han realizado y la imagen que han construido. Los clientes y colaboradores sólo serán fieles si los líderes saben mantenerse firmes en sus valores y cumplir las promesas.