Se Caldea Rebeldia Social Y Politica

SE CALDEA REBELDIA SOCIAL Y POLITICA Carlos A. Rodríguez Díaz Coordinador Liberales Plan B Como es de público conocimiento, en el segundo semestre de este año, el gobierno ha tenido que afrontar el paro camionero que duró 16 días; el de los trabajadores de la Drummond 6 días; el de la justicia, 44 días; el de los maestros del Estado, 8 días; El de los corteros de caña, 33 días; El de los trabajadores de la mina de níquel, 30 días; El de los funcionarios de la Dian y de la Registraduría, que empezaron el jueves anterior. El 23 de octubre se realizará un paro laboral de 24 horas, por la negativa del gobierno de solucionar las demandas de los trabajadores. En el último año se han reestructurado 45 entidades estatales, de las cuales, 28 aprobó por decreto; a 7, les falta recogerle las firmas; a la de la Dian, solo le falta la firma del presidente y 10 se devolvieron porque requieren partidas adicionales. Es preciso señalar, que con las reformas de 412 entidades, desde el 2002, se suprimieron 40 mil cargos. Además, el 14 de octubre, los indígenas del Cauca, decidieron una movilización para reclamar por la no violencia en su contra, por la recuperación de tierras, la muerte de 1.200 personas de sus comunidades y el desplazamiento de 52.000 indígenas. La protesta se ha extendido a 16 departamentos. Podría decir, que no hay articulación sindical, en modo alguno. Los paros surgen por el incumplimiento de acuerdos gubernamentales y por el desespero de los trabajadores, que evidencian, la necesidad de volver a tener el ministerio de trabajo, pues no se posee interlocución y solo aparece, cuando hay medidas de hecho. Por ello, hoy los derechos sociales están en ollas de vapor. Lo cierto es que, en la humanidad se presentan los precipitados históricos, y lo acontecido, pude ser el principio de uno, que ligado al despertar de la Obamania, puede generar una energía, cargada de optimismo y encaminada hacia un nuevo gobierno, de carácter progresista. A veces, no se sabe como, pero se juntan contradictorias causas, que unificadas alcanzan imposibles. Sin duda alguna, el despertar comentado, está influyendo en el tratamiento de los conflictos. Si comparamos la actitud de otrora, intransigente del gobierno y el tratamiento de guerra que inclusive le dio al cierre de hospitales, con la de ahora, encontramos una marcada diferencia. Antes se imponía, Hoy, por lo menos se habla. A nivel político, la prepotencia gubernamental empezó a hacer estragos, púes no pudo persuadir a los Uribistas de la comisión primera del Senado, de que votaran afirmativamente, la reforma de la justicia y ante tal negativa parlamentaria, el 13 de octubre, retiró el proyecto. Luego, a renglón seguido, es decir, el 16 de octubre, en una importante alianza, representantes, Liberales, Uribistas y Polistas en la Cámara, se negaron a aprobar el presupuesto del año 2009, que pese a la caída de 310 mil millones de pesos, frente al inicial, por la desaceleración de importaciones, continuó con los gastos de funcionamiento como si nada estuviera pasando y por no contener prioridades sociales.

La reelección también se agrieta, puesto que Cambio Radical, uno de sus principales coequiperos, anunció su voto en contra y empiezan a fraguarse, puntos de encuentro en la perspectiva de acuerdos, para la creación de una Gran Coalición Política, que asuma con visión de poder , el gobierno a partir del 2010. Es preciso estar alertas y ejercer un control político a la conmoción interior, porque en su afán, el gobierno, puede aprovecharla para realizar las reformas a través de decretos, argumentando incertidumbre económica y agitación social. El caldeamiento de los ánimos, es resultado de la ausencia de diálogo social eficaz, soportada en una arrogancia que diluye el Estado Social de Derecho, para dar paso a perfiles autoritarios, que de no detenerlos, viabilizaran tortuosos caminos que frenarán la protesta social y acallarán la oposición política. Por esta razón, se hace imperativo fortalecer las posturas unitarias y la movilización social, cerrando filas en torno de la defensa del Estado Social de Derecho. Bogotá, octubre 21 de 2008