Romanos Clase 3
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- Words: 1,821
- Pages: 66
Un Estudio de la Epístola a los Romanos CLASE 3
Romanos 1:16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.
Tres “misiones” del apóstol Pablo
Romanos 1:14 A griegos y a no griegos, a sabios y a no sabios soy deudor
Tres “misiones” del apóstol Pablo
ADMISIÓN
Romanos 1:14 A griegos y a no griegos, a sabios y a no sabios soy deudor
Tres “misiones” del apóstol Pablo
Romanos 1:15 Así que, en cuanto a mí, pronto estoy a anunciaros el evangelio también a vosotros que estáis en Roma.
Tres “misiones” del apóstol Pablo
REMISIÓN
Romanos 1:15 Así que, en cuanto a mí, pronto estoy a anunciaros el evangelio también a vosotros que estáis en Roma.
Tres “misiones” del apóstol Pablo
Romanos 1:16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y
Tres “misiones” del apóstol Pablo
SUMISIÓN
Romanos 1:16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y
Pablo había experimentado en su
vida el poder transformador del Evangelio de Jesucristo. El Evangelio no es solamente energía (ενέ ̓ ργειαν) capaz de hacer algo. Es poder dinámico (δύναμις) que opera cambios y transformaciones de otra manera imposibles.
El gran poder del Evangelio radica en
la revelación de la justicia de Dios Romanos 1:17 Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.
El gran poder del Evangelio radica en
la revelación de la justicia de Dios Justicia (δικαιοσύνη) de Dios es
esencialmente aquella perfección de su carácter por la cual él actúa siempre de acuerdo con las normas santas que Él mismo ha establecido.
La justicia de Dios no es algo
abstracto, separado de la vida humana. Es una fuerza que busca realizarse en la vida humana.
La justicia de Dios no es algo
abstracto, separado de la vida humana. Es una fuerza que busca realizarse en la vida humana. La justicia de Dios se revela o
manifiesta, se proyecta de la esencia divina, y se realiza entre los hombres
Isaías 56:1 Así dijo Jehová: Guardad derecho, y haced justicia; porque cercana está mi salvación para venir, y mi justicia para manifestarse.
Salmo 24:3 ¿Quién subirá al monte de Jehová? ¿Y quién estará en su lugar santo?
Salmo 24:4 El limpio de manos y puro de corazón; El que no ha elevado su alma a cosas vanas, Ni jurado con engaño.
Salmo 24:5 El recibirá bendición de Jehová, Y justicia del Dios de salvación.
En estos pasajes observamos que la
salvación está estrechamente ligada con su justicia.
Según Pablo, la justicia de Dios se
revela o manifiesta en distintas formas. Muchas veces no reconocemos el obrar de la justicia de Dios, especialmente cuando contemplamos la injusticia que en este mundo abunda.
En la Epístola a los Romanos se
pueden observar cuatro maneras en que la justicia de Dios se revela:
1. La justicia de Dios se puede ver en la fidelidad con que Él cumple sus promesas Romanos 3:3 ¿Pues qué, si algunos de ellos han sido incrédulos? ¿Su incredulidad habrá hecho nula la fidelidad de Dios?
1. La justicia de Dios se puede ver en la fidelidad con que Él cumple sus promesas Romanos 3:4 De ninguna manera; antes bien sea Dios veraz, y todo hombre mentiroso; como está escrito: “Para que seas justificado en tus palabras, Y venzas cuando fueres juzgado.”
2. Su justicia se manifiesta también en el castigo por el pecado, especialmente en el gran castigo en el día del juicio final. Romanos 2:5 Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios,
3. La manifestación más grande de la justicia de Dios se llevó a cabo en la muerte de Cristo en el Calvario, pues esa muerte satisfizo todas sus demandas, haciendo posible la salvación del hombre
Romanos 3:25 a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados,
Romanos 3:26 con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús.
4. La manifestación de la justicia divina que constituye la justificación por la fe Romanos 1:17 Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.
Romanos 1:18 Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad;
La justicia de Dios se revela. Una de
las maneras en que se muestra es revelando la ira de Dios.
Satanás también muestra su ira
Satanás también muestra su ira
Apocalipsis 12:12 ¡Ay de los moradores de la tierra y del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, sabiendo que tiene poco tiempo.
La ira de Dios es mucho más terrible
que la ira de Satanás, así como Dios es mucho más poderoso que el diablo
Sabemos reconocer algunas
manifestaciones de la ira de Dios Terremotos Inundaciones Desastres naturales (actos de
Dios)
Pero la ira de Dios se manifiesta
diariamente entre nosotros, y muchas veces no nos damos cuenta
Pero la ira de Dios se manifiesta
diariamente entre nosotros, y muchas veces no nos damos cuenta Y a menudo atribuimos a Satanás las
manifestaciones de la ira divina
Romanos 1:18 Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad;
Romanos 1:18 Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad; A nuestro alrededor vemos manifestaciones de la ira de Dios
Romanos 1:19 porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó.
Romanos 1:20 Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.
Romanos 1:20 Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa. excusa Dios es justo, y nadie puede acusarle de injusticia
Romanos 1:21 Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido.
Romanos 1:22 Profesando ser sabios, se hicieron necios,
Romanos 1:23 y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles.
Romanos 1:24 Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, en las concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios cuerpos,
Romanos 1:24 Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, inmundicia en las concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios cuerpos,
Manifestación de la ira de Dios
Romanos 1:25 ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén.
Romanos 1:26 Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza,
Romanos 1:26 Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza,
Manifestación de la ira de Dios
Romanos 1:27 y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío.
Romanos 1:28 Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen;
Romanos 1:28 Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, reprobada para hacer cosas que no convienen;
Manifestación de la ira de Dios
Romanos 1:29 estando atestados de toda injusticia, fornicación, perversidad, avaricia, maldad; llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades;
Romanos 1:30 murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres,
Romanos 1:31 necios, desleales, sin afecto natural, implacables, sin misericordia;
Romanos 1:32 quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que también se complacen con los que las practican.
A fin de establecer la necesidad de
justificación, Pablo mira al mundo que le rodea.
En los próximos versículos, hasta el
capítulo dos y una buena parte del tres, él está sencillamente analizando cómo es la humanidad, tomando las dos aparentes divisiones de dicha humanidad.
Alguien ha dicho acertadamente:
"Sólo hay dos clases de personas, los justos y los injustos, y la clasificación siempre la hacen los justos.”
El apóstol comienza por los injustos,
aquellos a los que llamamos "mala gente” y “los desechados de la sociedad”.
La palabra impiedad que es usada
aquí en Romanos 1:18 denota todo pecado en la esfera de nuestras relaciones con Dios
Injusticia es todo pecado en la
esfera de nuestras relaciones con los hombres. Pablo dice que la ira de Dios “se manifiesta”, es decir, está continuamente manifestándose o revelándose.
Un vistazo a nuestro mundo nos
revela la necesidad de justicia. La justicia del hombre (por ejemplo, la justicia romana) no alcanza a erradicar los males sociales. Lo único que puede hacer es castigar, pero no cambiar.
Pero no todo el mundo acepta la
necesidad de justificación. Puede ser necesaria para las “malas personas”, pero las “buenas personas” no lo necesitan. Ellas confían en su buen comportamiento, o en la religión que practican.
Para unificar al mundo bajo la justicia
divina, hay que primero unificarlo bajo la realidad del pecado. “Todos pecaron” es la sentencia de Dios.
Para unificar al mundo bajo la justicia
divina, hay que primero unificarlo bajo la realidad del pecado. “Todos pecaron” es la sentencia de Dios. Pablo se dedicará a ello en los
próximos dos capítulos.
Para unificar al mundo bajo la justicia
divina, hay que primero unificarlo bajo la realidad del pecado. “Todos pecaron” es la sentencia de Dios. Pablo se dedicará a ello en los
próximos dos capítulos. Nosotros lo veremos en la próxima
clase.
Romanos 1:16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.
Tres “misiones” del apóstol Pablo
Romanos 1:14 A griegos y a no griegos, a sabios y a no sabios soy deudor
Tres “misiones” del apóstol Pablo
ADMISIÓN
Romanos 1:14 A griegos y a no griegos, a sabios y a no sabios soy deudor
Tres “misiones” del apóstol Pablo
Romanos 1:15 Así que, en cuanto a mí, pronto estoy a anunciaros el evangelio también a vosotros que estáis en Roma.
Tres “misiones” del apóstol Pablo
REMISIÓN
Romanos 1:15 Así que, en cuanto a mí, pronto estoy a anunciaros el evangelio también a vosotros que estáis en Roma.
Tres “misiones” del apóstol Pablo
Romanos 1:16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y
Tres “misiones” del apóstol Pablo
SUMISIÓN
Romanos 1:16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y
Pablo había experimentado en su
vida el poder transformador del Evangelio de Jesucristo. El Evangelio no es solamente energía (ενέ ̓ ργειαν) capaz de hacer algo. Es poder dinámico (δύναμις) que opera cambios y transformaciones de otra manera imposibles.
El gran poder del Evangelio radica en
la revelación de la justicia de Dios Romanos 1:17 Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.
El gran poder del Evangelio radica en
la revelación de la justicia de Dios Justicia (δικαιοσύνη) de Dios es
esencialmente aquella perfección de su carácter por la cual él actúa siempre de acuerdo con las normas santas que Él mismo ha establecido.
La justicia de Dios no es algo
abstracto, separado de la vida humana. Es una fuerza que busca realizarse en la vida humana.
La justicia de Dios no es algo
abstracto, separado de la vida humana. Es una fuerza que busca realizarse en la vida humana. La justicia de Dios se revela o
manifiesta, se proyecta de la esencia divina, y se realiza entre los hombres
Isaías 56:1 Así dijo Jehová: Guardad derecho, y haced justicia; porque cercana está mi salvación para venir, y mi justicia para manifestarse.
Salmo 24:3 ¿Quién subirá al monte de Jehová? ¿Y quién estará en su lugar santo?
Salmo 24:4 El limpio de manos y puro de corazón; El que no ha elevado su alma a cosas vanas, Ni jurado con engaño.
Salmo 24:5 El recibirá bendición de Jehová, Y justicia del Dios de salvación.
En estos pasajes observamos que la
salvación está estrechamente ligada con su justicia.
Según Pablo, la justicia de Dios se
revela o manifiesta en distintas formas. Muchas veces no reconocemos el obrar de la justicia de Dios, especialmente cuando contemplamos la injusticia que en este mundo abunda.
En la Epístola a los Romanos se
pueden observar cuatro maneras en que la justicia de Dios se revela:
1. La justicia de Dios se puede ver en la fidelidad con que Él cumple sus promesas Romanos 3:3 ¿Pues qué, si algunos de ellos han sido incrédulos? ¿Su incredulidad habrá hecho nula la fidelidad de Dios?
1. La justicia de Dios se puede ver en la fidelidad con que Él cumple sus promesas Romanos 3:4 De ninguna manera; antes bien sea Dios veraz, y todo hombre mentiroso; como está escrito: “Para que seas justificado en tus palabras, Y venzas cuando fueres juzgado.”
2. Su justicia se manifiesta también en el castigo por el pecado, especialmente en el gran castigo en el día del juicio final. Romanos 2:5 Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios,
3. La manifestación más grande de la justicia de Dios se llevó a cabo en la muerte de Cristo en el Calvario, pues esa muerte satisfizo todas sus demandas, haciendo posible la salvación del hombre
Romanos 3:25 a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados,
Romanos 3:26 con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús.
4. La manifestación de la justicia divina que constituye la justificación por la fe Romanos 1:17 Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.
Romanos 1:18 Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad;
La justicia de Dios se revela. Una de
las maneras en que se muestra es revelando la ira de Dios.
Satanás también muestra su ira
Satanás también muestra su ira
Apocalipsis 12:12 ¡Ay de los moradores de la tierra y del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, sabiendo que tiene poco tiempo.
La ira de Dios es mucho más terrible
que la ira de Satanás, así como Dios es mucho más poderoso que el diablo
Sabemos reconocer algunas
manifestaciones de la ira de Dios Terremotos Inundaciones Desastres naturales (actos de
Dios)
Pero la ira de Dios se manifiesta
diariamente entre nosotros, y muchas veces no nos damos cuenta
Pero la ira de Dios se manifiesta
diariamente entre nosotros, y muchas veces no nos damos cuenta Y a menudo atribuimos a Satanás las
manifestaciones de la ira divina
Romanos 1:18 Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad;
Romanos 1:18 Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad; A nuestro alrededor vemos manifestaciones de la ira de Dios
Romanos 1:19 porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó.
Romanos 1:20 Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.
Romanos 1:20 Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa. excusa Dios es justo, y nadie puede acusarle de injusticia
Romanos 1:21 Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido.
Romanos 1:22 Profesando ser sabios, se hicieron necios,
Romanos 1:23 y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles.
Romanos 1:24 Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, en las concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios cuerpos,
Romanos 1:24 Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, inmundicia en las concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios cuerpos,
Manifestación de la ira de Dios
Romanos 1:25 ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén.
Romanos 1:26 Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza,
Romanos 1:26 Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza,
Manifestación de la ira de Dios
Romanos 1:27 y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío.
Romanos 1:28 Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen;
Romanos 1:28 Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, reprobada para hacer cosas que no convienen;
Manifestación de la ira de Dios
Romanos 1:29 estando atestados de toda injusticia, fornicación, perversidad, avaricia, maldad; llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades;
Romanos 1:30 murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres,
Romanos 1:31 necios, desleales, sin afecto natural, implacables, sin misericordia;
Romanos 1:32 quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que también se complacen con los que las practican.
A fin de establecer la necesidad de
justificación, Pablo mira al mundo que le rodea.
En los próximos versículos, hasta el
capítulo dos y una buena parte del tres, él está sencillamente analizando cómo es la humanidad, tomando las dos aparentes divisiones de dicha humanidad.
Alguien ha dicho acertadamente:
"Sólo hay dos clases de personas, los justos y los injustos, y la clasificación siempre la hacen los justos.”
El apóstol comienza por los injustos,
aquellos a los que llamamos "mala gente” y “los desechados de la sociedad”.
La palabra impiedad que es usada
aquí en Romanos 1:18 denota todo pecado en la esfera de nuestras relaciones con Dios
Injusticia es todo pecado en la
esfera de nuestras relaciones con los hombres. Pablo dice que la ira de Dios “se manifiesta”, es decir, está continuamente manifestándose o revelándose.
Un vistazo a nuestro mundo nos
revela la necesidad de justicia. La justicia del hombre (por ejemplo, la justicia romana) no alcanza a erradicar los males sociales. Lo único que puede hacer es castigar, pero no cambiar.
Pero no todo el mundo acepta la
necesidad de justificación. Puede ser necesaria para las “malas personas”, pero las “buenas personas” no lo necesitan. Ellas confían en su buen comportamiento, o en la religión que practican.
Para unificar al mundo bajo la justicia
divina, hay que primero unificarlo bajo la realidad del pecado. “Todos pecaron” es la sentencia de Dios.
Para unificar al mundo bajo la justicia
divina, hay que primero unificarlo bajo la realidad del pecado. “Todos pecaron” es la sentencia de Dios. Pablo se dedicará a ello en los
próximos dos capítulos.
Para unificar al mundo bajo la justicia
divina, hay que primero unificarlo bajo la realidad del pecado. “Todos pecaron” es la sentencia de Dios. Pablo se dedicará a ello en los
próximos dos capítulos. Nosotros lo veremos en la próxima
clase.
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