Resistencias Artisticas En Contra De La Reforma A La Ley 30 De 1992.pdf

  • Uploaded by: Sebastian Palacio Restrepo
  • 0
  • 0
  • June 2020
  • PDF

This document was uploaded by user and they confirmed that they have the permission to share it. If you are author or own the copyright of this book, please report to us by using this DMCA report form. Report DMCA


Overview

Download & View Resistencias Artisticas En Contra De La Reforma A La Ley 30 De 1992.pdf as PDF for free.

More details

  • Words: 57,378
  • Pages: 163
RESISTENCIAS ARTÍSTICAS CONTRA LA REFORMA DE LA LEY 30 DE 1992: MOVIMIENTO ESTUDIANTIL UDEA

JOHANA MARCELA VÉLEZ OCAMPO EDWIN ALEXANDER VILLEGAS CARDONA

Trabajo de grado para optar al título de Trabajador(a) Social

Asesor Jhon Mario Muñoz Lopera

UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES Y HUMANAS DEPARTAMENTO DE TRABAJO SOCIAL LINEA CULTURA POLÍTICA Y SOCIEDAD MEDELLIN 2013

2

DEDICATORIA

A mi hijo Johan por ser la inspiración, la fuerza y la felicidad que me permitió finalizar este proyecto. Hijo te adoro Johana Vélez

A mi madre Rosalba Cardona, por su comprensión, apoyo paciencia y colaboración, ya que siempre estuvo impulsándome en los momentos más difíciles de mi carrera.

A los docentes y estudiantes que hicieron parte de este proceso.

A mi compañera y amiga Johana Vélez por estar conmigo en el proceso de tesis, como apoyo mutuo en las buenas y malas y sobre todo en nuestra formación profesional. Edwin Villegas

3

TABLA DE CONTENIDO

Pág.

PRESENTACIÓN

6

JUSTIFICACIÓN DESDE TRABAJO SOCIAL

14

1.

16

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

1.1. El caso de la Universidad de Antioquia (Movimiento Estudiantil)

24

2.

MARCO TEÓRICO

32

3.

MARCO CONCEPTUAL

44

3.1. Medios Alternativos de Comunicación

44

3.2. Medios Ciudadanos de Comunicación

50

3.2.1. El Graffiti

56

3.2.2. El Performance

63

3.2.3. La Música

70

3.3. Movimiento Estudiantil

80

3.3.1. Movimiento Social

81

3.3.2. Movimiento Estudiantil o Activismo Estudiantil

84

3.4. Ley 30 de 1992

90

3.4.1. Reforma Ley 30 de 1992

93

4.

103

DOCUMENTO ANALÍTICO

4.1. Preparación De Los Estudiantes Para Enfrentar La Reforma De La Ley 30 De Educación Superior

110

4.2. Importancia De La MANE (Mesa Amplia Nacional Estudiantil) En El Desarrollo Del Movimiento Estudiantil Del 2011 Y 2012

112

4.3. Percepción De Las Movilizaciones Estudiantiles En El 2011

115

4.4. Elementos Novedosos Identificados En El Movimiento Estudiantil

119

4.5. Surgimiento De Lo Artístico En Las Movilizaciones

124

4.6. Medios Ciudadanos De Comunicación Utilizados Por Los Estudiantes, En El Marco Del Proyecto De Ley 112 De 2011

130

4

4.6.1. Graffiti

133

4.6.2. La Música

134

4.6.3. El Performance

137

4.7. Propósito De Las Movilizaciones Estudiantiles

138

4.8. Papel Ejercido Por Los Medios De Comunicación

140

4.9. Medios Ciudadanos De Comunicación, Como Estrategias De Resistencia Artística

145

CONCLUSIONES

152

BIBLIOGRAFIA

154

CIBERGRAFIA

161

5

TABLA DE ANEXOS

Anexo A: Historia Movimiento Estudiantil de la Universidad de Antioquia

Anexo B: Formato Preguntas Entrevista y Transcripción de entrevistas

Anexo C: Fotografías Marchas Estudiantiles, Universidad de Antioquia

Anexo D: Matriz de Análisis por Medio de Preguntas

6

PRESENTACIÓN “Primero Túnez, después fue Egipto, y más tarde en gran parte del norte de África y el medio oriente, luego en España, Irlanda, Grecia e Israel; cientos de miles de estudiantes, desempleados, trabajadores y ciudadanos del común colman plazas y parques, contra un orden económico internacional inicuo y que se encuentra en fase de declive. En América Latina los estudiantes de Puerto Rico, Colombia y otros países se movilizan bajo el norte de la lucha social en Chile que ya completa más de 3 meses de tomas y marchas estudiantiles, cuyo más reciente acto fue el paro obrero-estudiantil de 48 horas. Se trata de sucesos llevados a cabo en todo del mundo que no pueden ser presentados como aislados. Aunque variadas son sus manifestaciones, definitivamente tienen causas comunes. No son coincidencia si no que obedecen a las más genuinas respuestas de un mundo que no aguanta más, y que clama por auténticos estadios de bienestar y progreso, y en la que Colombia por supuesto no es la excepción”1.

En el 2011, Colombia se enfrentó a masivas movilizaciones estudiantiles, que obedecían a cambios estructurales proyectados al sistema educativo del país, por parte del gobierno de Juan Manuel Santos y su ministra de educación María Fernanda Campo; quienes en su proyecto de ley 112 de 2011, pretendían ubicar la educación pública como un ―servicio público‖, más no, como un ―derecho‖ garantizado por el Estado.

Diversas eran las razones para oponerse a este nuevo proyecto neoliberal, que numerosas personas reconocían; como la forma más ―descarada‖ de venderle la educación al sector productivo: la primera de ellas era la implementación del ánimo de lucro en la IES (Instituciones de Educación Superior) que degeneraría la educación superior a ―instituciones de garaje‖ donde la calidad sería precarizada y se instauraría un nuevo modelo educativo; el de responder a las demandas del mercado donde los profesionales harían el papel de ―hombres tuerca‖ y su raciocinio no sería necesario.

La segunda; la cobertura, que va íntimamente ligada con el ánimo de lucro, pero esta hace alusión a la precaria financiación de la que está siendo victima la educación en Colombia desde hace varios años, pero que al día de hoy con esta nueva propuesta, pretende el gobierno nacional, cesar su obligación y dejar a las universidades su financiación, acarreando los costos éstas, obviamente,

1

Declaración reunión Mesa Amplia Nacional de Estudiantes – MANE. Bogotá, Agosto 20 y 21 Universidad Distrital. [Online]: http://feucolombia.org/index.php?option=com_content&view=article&id=85:declaracion-reunion-mesaamplia-nacional-estudiantil-mane-del-20-y-21-de-agosto-de-2011&catid=39:quienessomos&Itemid=78

7

de los proyectos de extensión, de los postgrados, investigaciones, proyectos y de los pregrados. Que resultarían evidentemente, en el aumento de las matrículas y los ―servicios‖2 prestados por la institución y posteriormente en la privatización. Comprometiendo así mismo, la calidad, la autonomía, el bienestar y la debida oferta de la educación en el país.

La tercera; la deserción estudiantil, que ha venido presentando el país, en cuanto a educación superior se refiere, para este caso. Y es que la nueva modalidad de la ―demanda‖, que proponía este proyecto de ley, concedía recursos a los estudiantes con créditos condonables a 15 – 20 años por medio de bancos de segundo piso como el Icetex, en el que todo profesional saldría a laborar para pagar la deuda. En caso tal que éste no pudiera hacerlo, lo hacía la familia. Una razón más, para que estudiantes de bajos recursos deserten de la educación y que personas con más recursos, se queden con los cupos de las instituciones públicas y la educación quede en manos de la clase alta.

La cuarta razón, la calidad académica, en la cual se buscaba formar estudiantes en el arte de la ―mecánica corporal‖ y no ―cerebral‖, para ser profesionales ―aptos‖ y ―líderes‖ en el sector productivo, una forma más de ser parte de las dinámicas de mercado, esta vez vendiendo la capacidad de los estudiantes de ser críticos, creadores e imaginadores sociales, al capital financiero.

Las razones anteriormente expuestas, fueron el detonante de las luchas estudiantiles. Sin embargo, no fueron los únicos motivos que llevaron a los universitarios a librarlas, es decir, no se podrían delimitar las resistencias estudiantiles a sólo el marco de la reforma de educación superior. Los estudiantes también peleaban por un orden establecido, por las imposiciones del gobierno de turno, por el sistema capitalista, por el modelo neoliberal; obviamente por la ley 30 y su reforma, pero sobretodo, se luchaba por cambiar el actual sistema educativo, buscando la creación de uno nuevo para el país, por medio de la una nueva propuesta ―alternativa‖ hecha por los estudiantes, los trabajadores y los profesores colombianos.

2

Se habla de “servicios”, porque desde el proyecto de ley 112 de 2012, el derecho a la educación es visto como un servicio, más no como un derecho.

8

En esta lucha por la educación, los universitarios, comenzaron a evidenciar la necesidad de articular a sus movilizaciones, asambleas, debates, foros y otros; expresiones, estrategias y acciones no violentas de resistencia artística, en cierta medida, innovadoras e hibridadas; que permitieran transmitir de forma correcta su mensaje, pero al mismo tiempo convocar a la población colombiana para que además de sumarse a sus disputas, legitimara su actuación ante el gobierno de Santos y su proyecto de reforma a la educación superior.

Este marcó, es un caldo de cultivo propicio para visibilizar el renacer de un movimiento, como es el estudiantil de la Universidad de Antioquia, sin desconocer el movimiento colombiano; que se encontraba en cierta medida ―ausente‖ de las luchas sociales y encasillado en la reivindicación de situaciones particulares, propias del campus universitario que opacaban los grandes logros y las grandes movilizaciones del 71, esas inmensas reyertas cargadas de ideologías y un romanticismo revolucionario, que llevaron a los jóvenes de esta época a derrocar el plan básico con el programa mínimo de los estudiantes colombianos. Caso no muy contrario al actual con la reforma a la ley 30, en la que los estudiantes se la vienen jugando con el programa mínimo actual y la construcción de una nueva ley alternativa de educación para el país.

Además, el estudio del movimiento estudiantil de la universidad de Antioquia, es pertinente para la coyuntura actual, debido al proceso pendiente que tienen los estudiantes de terminar el borrador de la nueva ley alternativa de educación, la cual tendrá su exposición de motivos en la ciudad de Medellín, para los días 20 y 21 de abril de 2013. Convirtiendo a esta investigación en un texto apto para conocer las nuevas formas de resistencia artísticas que han venido utilizando los universitarios para defender el derecho a la educación.

Estas resistencias artísticas, son evidenciadas en el texto como nuevas, innovadoras, hibridadas, reformateadas y novedosas. No queriendo decir con ello, que son producto de las movilizaciones del año 2011, sino que son el resultado consciente de los estudiantes universitarios de retomar las estrategias clásicas y adaptarlas a la nueva realidad colombiana, en un intento por legitimar su actuar tan criminalizado en el país y convocar a la sociedad para que se una a sus luchas.

9

Del mismo modo, estas resistencias artísticas fueron una estrategia más para, de alguna forma, obligar a los medios masivos de comunicación; a jugar el mismo juego de los estudiantes; comunicar, concientizar, mostrar la noticia verazmente y hacer partícipes a la comunidad colombiana para que se pensaran la educación como el pilar fundamental de este país. Sin detrimento, como en algunas ocasiones del 2011 se vio, de deslegitimar la protesta estudiantil, focalizar pequeños brotes de violencia e incluso adjudicarles participación de grupos guerrilleros, para ensombrecer el surgimiento de un movimiento estudiantil pacífico y artístico.

En esta medida, el movimiento estudiantil de la UdeA muestra su capacidad de unirse al movimiento popular; entre ellos Marcha Patriótica, el Congreso de los Pueblos, el Polo Democrático, el Partido Verde, Juventudes religiosas, el Movimiento Progresista, algunos sectores liberales y un significativo sector de estudiantes independientes, unos sin partido y otros abstencionistas. Sin excluir, claro está, la participación de docentes, trabajadores, padres de familia, y estudiantes de secundaria, que se unieron a favor de la lucha estudiantil por una educación gratuita y de calidad para las futuras generaciones. Un logro, indiscutible para el movimiento estudiantil nacional, del cual hizo parte el movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia por medio de la creación de la Marea (Mesa Amplia Regional de Estudiantes de Antioquia) y luego su articulación a la Mesa Amplia Nacional Estudiantil (MANE).

En este sentido, rescatar la memoria de los sucesos del 2011 y parte de 2012, es importante, porque permite recordarle a las personas que los estudiantes de la Universidad de Antioquia, son eso, estudiantes que luchan día a día por tener una educación gratuita y de calidad, no unos criminales a sueldo como se les ha querido mostrar.

Es un intento por legitimar un sector de la sociedad que ha sido estigmatizado y criminalizado por no estar de acuerdo con las políticas económicas de un Estado neoliberal, que busca encasillar la educación en términos de la producción para alcanzar unos estándares globales. Asimismo, es una apuesta por redimir la historia del movimiento estudiantil3, en la medida que

3

Consultar la historia del Movimiento Estudiantil de la Universidad de Antioquia desde 1920, hasta el 2012. Anexo A

10

son pocos los escritos sobre el tema, que quizá ha generado apatía, por todas las implicaciones que se le vienen haciendo a este movimiento desde hace varias décadas.

En tanto, este escrito permite, para la situación actual, una forma diferente de ver el movimiento y poder entender la lucha que se les viene en camino a los estudiantes con el sueño de radicar en el congreso de la república, su ley alternativa de educación para el país, que se comenzará a implementar con una marcha a nivel nacional el 21 de marzo de 2013 y luego con la exposición de motivos en la ciudad de Medellín.

En cuanto a los objetivos de esta producción escrita. La investigación pretende hacer un análisis de la importancia que tienen los medios ciudadanos artísticos de comunicación, particularmente del graffiti, el performance y la música; como medios de resistencia no violenta, utilizados por el movimiento estudiantil de la universidad de Antioquia, en contra del proyecto de ley 112 de 2012, en defensa del derecho a la educación pública y por el sueño de forjar un nuevo modelo educativo para el país.

Para lograrlo, fue necesario identificar las estrategias artísticas, culturales y políticas que han marcado el cambio en la mirada del papel que ha desempeñado el movimiento estudiantil de la UdeA, a la hora de enfrentarse al proyecto de ley 112 de 2011, que puedan identificarse como actos de resistencia no violenta, tomando como punto de partida y de referencia su contexto y actuación a través de la historia.

Asimismo, se hizo pertinente analizar la intencionalidad y el significado que tiene para el movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia, la utilización de manifestaciones artísticas como el graffiti, el performance y la música como medios de comunicación que legitiman su actuación y su postura política desde la no violencia.

La metodología utilizada para alcanzar lo anterior, fue de corte cualitativo; por permitir una aproximación global de la situaciones sociales exploradas, en la medida que se pudo describir, comprender y analizar a partir de los conocimientos de estudiantes, expertos en el tema de resistencia y editores de prensa alternativa, los acontecimientos en torno a la reforma de la ley 30

11

de educación superior de 1992, desde su forma de pensar, de sentir y de interpretar la coyuntura que estaba atravesando el país en el año 2011.

Desde este ámbito, estos actores o individuos, se dieron a la tarea de interactuar con otros miembros de su contexto social compartiendo el significado y el conocimiento que tienen de sí mismos y de su realidad. (Bonilla, 1997: 3). Implicando esto, una transformación de la realidad social, en tanto se vincularon a diversos procesos con otros grupos y movimientos que los llevaron a adquirir experiencias y vivencias propias de su interacción.

Por ende, desde lo cualitativo, se hizo un especial énfasis y una marcada valoración de lo subjetivo y propio de cada uno de los partícipes de esta investigación, en cuanto a su relación con el entorno local, con su contexto, con su cultura para comprender la lógica o la forma de ver el mundo de estos mismos, y como esto repercutió en el movimiento y en su actuar frente a la sociedad4 y frente al gobierno nacional.

También, la investigación cualitativa permitió, hacer una aproximación detallada de las realidades, luchas, estrategias y resistencias de las y los jóvenes pertenecientes al movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia, es decir, fue posible un acercamiento a los sujetos y conocer su trasegar en el movimiento, pero desde su postura, desde su visión, desde su sentir.

Como orientación metodológica que permitió interpretar la asignación de símbolos, que al igual tienen un significado, en el lenguaje hablado, escrito e interactuado de los estudiantes de la universidad de Antioquia, se retomaron los postulados más importantes del interaccionismo simbólico5; en aras de comprender el proceso de creación y asignación de significados que se le dio a las resistencias artísticas utilizadas en contra del proyecto de ley 112 de 2011.

4

En palabras de José María Serbia (2007:131) “la perspectiva cualitativa se orienta a la búsqueda de la comprensión de los discursos personales y grupales que los sujetos expresan en contextos espontáneos (como ocurre en los procesos sociales de construcción de los deseos, previos al acto individual del consumo), allí es donde estos traslucen las creencias, deseos y valores que subyacen a sus prácticas sociales”. 5

“Blumer puntualiza, además, que el IS se apoya en tres premisas básicas que constituyen su enfoque metodológico: 1. Los seres humanos actúan en relación con los objetos del mundo físico y de otros seres de su ambiente sobre la base de los significados que éstos tienen para ellos. 2. Estos significados se derivan o brotan de la interacción social (comunicación, entendida en sentido amplio) que se da en medio de los individuos. La

12

Entonces, el interaccionismo simbólico hace referencia, en este caso, a la interacción de los estudiantes con el contexto, interpretaciones, significados, símbolos, construcciones simbólicas, entre otros, que frente a una problemática, en este caso la reforma a la ley 30 de 1992, nos permitió una mirada diferente e incluso una orientación y construcción dinámica de la situación, donde se pudo concebir a los sujetos como actores y partícipes del proceso. Este enfoque teórico y metodológico, brindo herramientas para la lectura y el análisis de la dimensión simbólica, los procesos de interacción y de comunicación del movimiento estudiantil de la UdeA, con otros movimientos, agremiaciones y personas del común.

El lenguaje, como elemento fundamental dentro de esta teoría ayudo a la comprensión de diálogos entre los sujetos, pero también diálogos que tienen que ver con la forma de actuar del movimiento, es decir, como este movimiento social, intercambió, aprehendió y construyó situaciones, decisiones, reacciones, sentimientos, formas de vida, de expresión verbal y corporal, de comportamiento tanto individual como grupal, que les permitió concientizarse de las necesidades, potencialidades y alcances del movimiento en su actuar. Además de detectar amenazas, beneficios y posibilidades de su accionar en la arena pública, que al ponerse en el lugar de la otra persona, hace que su capacidad reflexiva aumente, permitiéndoles mejores resultados en sus luchas y resistencias.

De ahí la importancia de resaltar desde el Interaccionismo simbólico categorías tales como: La Intersubjetividad, las interacciones, las motivaciones, el lenguaje, el mundo simbólico, los significados, los procesos de comunicación grupal y la socialización dentro del movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia, que permitió evidenciar y analizar las estrategias artísticas de resistencia civil no armada que éste utilizó como mecanismo de legitimación ante el otro u otros.

comunicación es simbólica, ya que nos comunicamos por medio del lenguaje y otros símbolos; es más, al comunicarnos creamos o producimos símbolos significativos. 3. Estos significados se establecen y modifican por medio de un proceso interpretativo: “el actor selecciona, modera, suspende, reagrupa y transforma los significados a la luz de la situación en que se encuentra y la dirección de su acción…; los significados son usados y revisados como instrumentos para la guía y formación de la acción”. Citado en MARTÍNEZ Miguélez, Miguel. La Etnometodología y el Interaccionismo Simbólico. Sus aspectos metodológicos específicos. [Online: http://prof.usb.ve/miguelm]

13

Dentro de esta metodología fueron utilizadas herramientas como el análisis documental; siendo consultados periódicos de corte conservador, liberal y alternativos; para reconstruir la historia del movimiento estudiantil y poder hacer el análisis de las resistencias artísticas utilizadas por este movimiento a través de la historia, y poderlas confrontar con las actuales, e identificar en qué medida éstas eran novedosas. Asimismo se rastrearon producciones científicas; en primer lugar para constatar el problema de investigación, es decir, que éste no fuera estudiado científicamente con anterioridad; y segundo, en aras de ratificar y complementar la información brindada por las noticias periodísticas

La entrevista en profundidad, fue otra de las herramientas que permitieron la generación de información, pero desde los mismos sujetos, desde los mismos partícipes del movimiento, en ―genérico‖6, contra reforma ley 30. Estos sujetos, fueron las fuentes claves, identificados con antelación, que permitieron hacer un contraste de la información teórica con la real y poder producir unos hallazgos que dieron como resultado la explicación a este ―nuevo‖ fenómeno de las resistencias artísticas.

Las fuentes fueron variadas, es decir, las personas que hicieron parte de este proceso fueron definidas desde tres realidades y concepciones del movimiento estudiantil diferentes, en la medida, que permitían realizar una lectura de contexto y de la problemática más diversa y acertada. De este modo, fueron entrevistadas personas pertenecientes al movimiento estudiantil de la universidad de Antioquia, personas que pertenecían a prensa alternativa y personas especialistas en el tema de resistencia.

6

Se hace alusión al término “genérico” para constatar, que el movimiento estudiantil de la universidad de Antioquia y el colombiano, no basaron sus luchas únicamente en contra del proyecto de ley 112 de 2011, sino que también se peleaba por cuestiones estructurales como; el modelo neoliberal, el capitalismo, la diferencia de clases, el sistema educativo, el sistema de salud, entre otras.

14

JUSTIFICACIÓN DESDE TRABAJO SOCIAL La investigación, cuando se compromete a liberar a la verdad de su confinamiento Ideológico, es verdaderamente un espacio de resistencia y de esperanza. Se trata de una actividad fundamental para subsidiar la construcción de alternativas críticas Para el enfrentamiento de la cuestión social que escape a la mistificación neoliberal; Para subsidiar la formulación de políticas sociales alternativas, a los dogmas oficiales, a la Actuación de los movimientos de las clases sociales subalternas y así también, para subsidiar La formulación de propuestas profesionales que fortalezcan la ruptura con el conservadurismo Y afirmen el compromiso con el trabajo, los derechos y la democracia. Marilda Villela Iamamoto

Conocer las diferentes dimensiones en que se ha constituido la Universidad de Antioquia por medio del movimiento estudiantil y sus formas de resistir ante un estado poco coherente en sus políticas durante la historia, es pensar que a través de esta investigación, los trabajadores sociales se asumen como pensadores críticos, donde ponen todo el valor subjetivo plasmado en este tipo de indagaciones, con la mirada hacia el abordaje de próximos pensadores sociales, que quieran seguir ampliando y dándole una mirada más profunda y crítica a su propio pensamiento.

La investigación, desde el campo de las luchas reivindicativas de derechos, para el Trabajo Social, permite afianzar su surgimiento y razón de ser, en la medida, en que indagaciones como estas, reclaman a generaciones futuras de trabajadoras y trabajadores sociales, un sentido ético y político que lleven a la construcción de una identidad profesional y un sentido crítico; que les permita intervenir en escenarios donde hace su aparición la cuestión social.

En tanto, este tipo de proyectos representan la imagen de Trabajo Social; desde aquí, se pueden mostrar unos valores que legitiman la profesión socialmente, delimitando y priorizando los objetivos de ésta y su intervención en pro de las clases populares, es decir, en pro del pueblo; en pro de acciones reivindicativas que van en búsqueda de mejoras para las poblaciones menos favorecidas, como es el caso del movimiento estudiantil de la universidad de Antioquia; un sector de la sociedad, que va en búsqueda del derecho a la educación. Quien más que los profesionales de Trabajo Social debe hacer parte de este tipo de escenarios. Es de recordar, que escenarios son indisociables de la profesión.

estos

15

Es así, como el horizonte al que apunta esta investigación; es abrir espacios de construcción científico social que estimulen y apunten a diferentes visiones y concepciones que se tiene hoy, desde el orden capitalista, en respuesta a unos abordajes desde la transformación social; que induzcan a otros a involucrarse en el camino de pensarse diferente desde las ciencias sociales.

16

1. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

El movimiento estudiantil no es un movimiento nuevo ni salido de la nada, ha aparecido innumerables veces en la escena pública cuando se trata de la búsqueda y legitimación de sus derechos. Durante la historia, el movimiento estudiantil ha atravesado procesos basados en luchas políticas y discursos de izquierda7, en el sentir por lo público, y que de alguna forma fue respaldado por el frente nacional en la constante disputa, que desde este momento hasta la actualidad, siempre ha ido en contra de las políticas neoliberales.

Es por esto, que el movimiento estudiantil construye expresiones de libertad política por medio de diferentes formas de expresión simbólica, que representan el discurso de lo cotidiano y que con el tiempo van transformándose. Mostrando con ello, su descontento, incertidumbre y la decisión de impulsar cambios a través de la protesta, marcando un ciclo más de éstas vinculadas normalmente con la situación de crisis social y política del país.

Se hace necesario entonces, hablar del movimiento estudiantil colombiano actual, y de su actuación y estrategias de resistencia artísticas en la esfera pública. Para ello, se hace necesario asumir un compromiso con su historia, con sus dinámicas y con su contexto a la hora de luchar; pues no es gratuito, el hecho que éste movimiento haya aparecido innumerables veces en la arena política como un actor que pretendía transformar los procesos de participación social.

Los jóvenes que hacen parte del movimiento estudiantil, han tratado, por medio de sus luchas, defender un patrimonio público como lo es la educación y para llegar a ello, según su historia, han sido asesinados, masacrados, encarcelados y hasta desaparecidos, por oponerse a la ganancia de ―otros‖, que hacen parte del gran capital financiero. Por esto, es necesario hacer mención de las luchas ejecutadas por los estudiantes, en un intento por reconstruir el pasado, que permita hacer un análisis de los medios de resistencia históricos y los actuales, donde se pueda mostrar el protagonismo de estas personas en la ―consecución del reconocimiento de derechos y el

7

en Colombia por el sólo hecho de pertenecer a la izquierda o pensar diferente, a quien lo haga, se ha ganado el prototipo de guerrillero, insurgente, anárquico, entre otros

17

empoderamiento de los estudiantes como sujetos capaces de pensar, exigir, discernir y negociar‖ (Echeverri y Gaviria, 2007:5)

Las principales apariciones del movimiento estudiantil colombiano, datan desde mediados del siglo XX, mostrando sus primeros visos de resistencia y de organización a partir de las ideas implementadas por el movimiento de Córdoba8, éste, con la bandera de la Reforma Universitaria fundó el movimiento estudiantil americano, el programa por la participación estudiantil en el gobierno de casas de altos estudios, la autonomía universitaria (lucha contra el monopolio del sistema educativo por parte del Estado Argentino y la iglesia), la docencia libre y la extensión universitaria (Barros y Valdés, 1918:1), que generó una profunda influencia en los movimientos de todo el continente, incluido el colombiano, en el cuál se empezaron a avizorar :

En 1921 la llegada de los ecos de la reforma de Córdoba de la mano de Germán Arciniegas; 1922 el Primer Congreso Nacional de Estudiantes, en donde se discutió sobre los derechos políticos del estudiantado, además de la fiesta y el himno del estudiante colombiano; en 1923 nacía la universidad libre; en 1924 se da la huelga de la lista, hecha por estudiantes de medicina, por la libre asistencia a clase (influencia de la reforma cordobesa); una de las más grandes huelgas se da en 1927 contra la United Fruit Company dados los hechos de las masacres en las bananeras9; ya para el 3 de agosto de 1928, en Ibagué, se dio el tercer Congreso Nacional de Estudiantes donde se hacia una fuerte discusión sobre la reforma universitaria con cátedra libre, autonomía universitaria y creación de la llamada universidades populares para socializar la educación; (Borrero, 2008:181)

Uno de los sucesos que marcó indeleblemente el movimiento estudiantil colombiano, en 1929, fue la muerte del estudiante de derecho de la Universidad Nacional (Bogotá), Gustavo Bravo

8

En 1921 llega a Colombia los ecos de la reforma de Córdoba, de la mano de Germán Arciniegas, que empieza a dictar conferencias sobre el manifiesto de Córdoba en 1923. Arciniegas, estudiante y boy scout, fue el “fundador de la voz de la juventud en 1917, la primera Federación de Estudiantes Colombianos en 1921, de la Casa del Estudiante y de la Revista Universidad en 1923” (Borrero, 2008:179) 9 En la masacre de las bananeras lo huelguistas caídos se reportan en: “la información reportó cuarenta y siete muertos; los organizadores del movimiento mil quinientos”, mientras otros dirían que esto sobrepasa a miles de cadáveres (Borrero,2008: 182)

18

Pérez (o Paéz), en la marcha contra la masacre de las bananeras en 1927. En ésta, los estudiantes llevaban pancartas con calaveras pintadas y racimos de banano en sus manos para hacer referencia a dicha masacre. Para frenarla, el gobierno de Abadía Méndez, arremete contra los estudiantes dispersándolos a bala, dando una de ellas en la espalda de Bravo, quien fallece y es inhumado el 8 de junio, dándose así la instauración del día del estudiante caído. (Camelo, 2000:3)

Durante el período que va de 1929 hasta 1954, el movimiento estudiantil, con muy raras excepciones, no tiene una presencia significativa en el panorama nacional debido, en parte, a su falta de organización y por otra a la represión estatal. Su reaparecimiento se da entonces bajo la dictadura del general Gustavo Rojas Pinilla como un hito histórico, donde los estudiantes se comienzan a plantear en serio la necesidad de la organización y el rechazo a las políticas gobiernistas. Dadas estas circunstancias de represión gubernamental contra el estudiantado, durante las marchas del 8 y 9 de junio de 1954 en la conmemoración del estudiante caído; el gobierno, acalla los manifestantes con una nueva arremetida, donde son asesinados 12 estudiantes, entre ellos Uriel Gutiérrez alumno de Medicina y heridos 50 más. (Borrero, 2008:188) Es entonces, bajo la ―dictadura‖ de Rojas Pinilla que se forman organizaciones como la JUCO (Juventud Comunista), la FUC (Federación Universitaria Colombiana) y la FEC (Federación de Estudiantes Colombianos), organizaciones activas en la lucha contra el régimen militar - estatal, y de significativa importancia en su caída. No gratuitamente fueron catalogados como los ―héroes de la democracia‖ y para otros como los ―mártires de la democracia”, después de las pérdidas humanas dentro del movimiento. (Villanueva, 2006:4)

Ya para los años 60, surge la figura del cura Camilo Torres, con una influencia arrasadora sobre el movimiento estudiantil, por sus pretensiones de agrupar toda la izquierda colombiana en un Frente Unido, es decir, un frente amplio donde se agruparan los estudiantes, los campesinos y los obreros, Igualmente despertó, una creciente simpatía entre los desposeídos. Durante su auge logró generar cierta tranquilidad entre la oligarquía, pero cuando se creía que todo estaba en su lugar, Camilo Torres se vincula a la guerrilla del ELN (Ejército de Liberación Nacional) de un afianzamiento altamente estudiantil. Torres, murió poco después en su primer combate.

19

Convirtiéndose en mártir, pero dejó un legado que se empezó a difundir en casi todas las universidades del país, generando en centenares de jóvenes, una convicción de la lucha a través de la insurgencia y las armas. (Posada, 2001:59)

Para noviembre de 1963, en la búsqueda de la autonomía, nacionalidad y organización del movimiento estudiantil, se conforma la Federación Universitaria Nacional (FUN), consolidada en las movilizaciones de la universidad Industrial de Santander, y que a pesar de tener ésta un carácter corporativo, empezaron a confluir en ella organizaciones políticas como: la Unión Nacional de Estudiantes (UNEC), la juventud comunista (JUCO), las Juventudes del Movimiento Revolucionario Liberal (JMRL), y la Confederación de Estudiantes Universitarios de Colombia (CEUC)10. Asimismo dentro de la FUN se encontraban grupos armados como el Movimiento Obrero Estudiantil Campesino (MOEC). (Uribe, 1998:573) En julio de 1968 se empieza a conocer dentro de las universidades el tema del ―Plan Básico para las Universidades Latinoamericanas‖, como una propuesta hecha desde el informe de Rudolph Atcon, que se da después de varias misiones extranjeras que recorrieron el país para valorar la realidad de la educación superior en Colombia (Laphan, Fishbein, Misión Médica Unitaria). También hacen parte de estos, el repudio a la guerra de Vietnam, la visita al país de Nelson Rockefeller y el movimiento estudiantil de 1968 en Francia, que tuvo un efecto innegable en toda América Latina e hizo revivir las teorías del ―Manifiesto de Córdoba‖, sobre la autonomía, y las libertades de los estudiantes (Restrepo, 2004:8).

Del mismo modo, influenció el levantamiento de la primavera de Praga en Checoslovaquia que buscaba modificar aspectos totalitaristas y burocráticos del régimen soviético; la masacre del 2 de octubre en Tlatelolco, México, ejecutada por el gobierno de este país, en la plaza de las tres culturas contra los estudiantes; Llenaron de argumentos al movimiento estudiantil de esta época, para continuar su lucha contra los gobiernos y las injusticias sociales reprimidas con violencia.

10

En la CEUC, se agrupaban a los estudiantes que hacían parte de las universidades privadas como la Pontificia Universidad Javeriana y la Universidad de los Andes

20

Lo anterior conllevó a una agitación del movimiento estudiantil, que le hizo pensar en la posibilidad de reconstruir los consejos estudiantiles, así como la búsqueda de apoyo de otros sectores populares, en especial el obrero, ya que se compartían propósitos, además de su manejo en el movimiento de masas. Lo que se pretendía con este tipo de vinculaciones y movilizaciones, era en primer lugar la derogatoria del plan básico, presentado por la Ascún en 1967, con la intensión de mantener ―las formas internas de poder en las universidades y adecuar las estrategias educativas a las demandas del modelo económico de desarrollo, masificar el ingreso de estudiantes, fortalecer la enseñanza científica y la tecnológica y diversificar las ofertas educativas‖ (Vélez, 2006:35); En segundo lugar, la instauración de un gobierno universitario representado únicamente por estudiantes, profesores y egresados; tercero la liquidación de los consejos superiores; cuarto la expulsión de las fundaciones norteamericanas y los cuerpos de paz de los claustros universitarios y quinto, la creación de organizaciones corporativas.

Por otro lado, se integran sucesos que venían ocurriendo en el contexto mundial durante el siglo XX: la Guerra fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética, la influencia de la revolución cultural impulsada por Mao Tse Tung en China, cuyo triunfo en 1939 mostró la rápida expansión de las ideas marxistas; la victoria de la revolución cubana con Fidel Castro en 1959, también con una enorme repercusión, originariamente orientada contra la tiranía que vivía el país, y con otros intereses como la propagación del marxismo; dando lugar a las motivaciones que engendrarían los movimientos guerrilleros en Colombia, unos de influencia soviética, otros bajo la orientación china y otros según el modelo Castrista11.

En 1971, se dan las mayores movilizaciones y luchas que ha dado el movimiento estudiantil y quizá la más recordada hasta el momento en la historia del país, liderada por jóvenes estudiantes que tenían la capacidad de concientización y acción, llevando a desencadenar una reflexión y deliberación crítica a nivel nacional sobre la situación adversa que atravesaba la universidad. Se inician entonces, grandes levantamientos que llevan como bandera el derrocamiento del plan

11

Paráfrasis, ZULUAGA, María Paola. El movimiento estudiantil: ayer y hoy. Domingo, 09 de octubre de 2011. En: de la urbe radio [Online] http://delaurbedigital.udea.edu.co/index.php/de-la-urbe-radio/2341-el-movimiento-estudiantilayer-y-hoy

21

básico por medio del denominado ―Programa Mínimo de los Estudiantes Colombianos‖ que contenía seis puntos básicos:

1. La abolición de los Consejos Superiores Universitarios. Por su participación en ellos de gremios y el clero. Asimismo un sistema democrático para la elección de autoridades universitarias tanto en el ámbito público como en el privado; 2. Cumplimiento en cuanto a la asignación y control de recursos, al igual que el congelamiento de matrículas; 3. Conformación de una comisión que estudiara el carácter del rector de la Universidad Nacional en la educación superior, liquidación del ICFES (Instituto Colombiano de Fomento a la Educación Superior), financiación estatal a la educación, financiación a la investigación científica y la revisión de todos los contratos que se hicieren con entidades extranjeras; 4. Retiro definitivo de la fuerza pública de la Universidad del Valle y ruptura con la Fundación para la educación superior – FES; 5. Legalización del derecho de crear organizaciones gremiales en cualquier tipo de establecimiento educativo y 6. Reapertura de la facultad de sociología en la Universidad Javeriana12.

El Ministro de Educación para esa época, Luis Carlos Galán, se manifestó a favor de algunos puntos del Programa Mínimo, para iniciar el diálogo con los estudiantes y llegar a una concertación; pero se presentaron toda clase de dificultades y el conflicto se prolongó durante los años 1971-1972, en el marco de fuertes tensiones políticas y sociales. Del mismo modo las intensas movilizaciones coincidieron con el gobierno de Misael Pastrana Borrero, quién manejó el movimiento estudiantil y todo tipo de movilización; con el estado de sitio, la mano dura y la criminalización de la protesta social. Imponiendo para el caso de las universidades la designación de rectores con un alto grado de restricción que les exigía el restablecimiento del orden interno, utilizando la fuerza si fuere necesario; a lo que los estudiantes denominaron la ley de los ―rectores policías‖.

Del mismo modo, a este tipo de manifestación estudiantil, el gobierno respondía con decretos de orden público (58013 - 58114) y acciones de fuerza, encaminadas a la expulsión de estudiantes,

12

Programa mínimo estudiantil, 1971, citado en crisis universitaria colombiana El decreto 580 de 1971, en su artículo numero 1, decreta “la suspensión de las tareas docentes y académicas de los centros de Educación Superior y Media, de nivel nacional, departamental o municipal”. En su artículo numero 2, 13

22

represión, cierre, militarización de las universidades, allanamientos, detenciones, golpizas, consejos verbales de guerra y hasta amenazas en cuanto a la prestación del servicio militar. Llevando a convertir el problema universitario en uno de orden público, avanzando con ello, paralelamente, una campaña de desprestigio contra las universidades públicas, a través de los diferentes medios hegemónicos y masivos de comunicación. (Uribe, 1998:577).

Este tipo de represión, lo único que generó en los estudiantes fue agregarle más demandas al gobierno, extendiendo los conflictos y las mismas manifestaciones del movimiento, que ya no sólo luchaban por lo estipulado en el programa mínimo, sino también por la libertad de los detenidos, el reintegro de los expulsados injustamente, investigaciones por los allanamientos por fuera de la ley, reapertura de las universidades clausuradas, la eliminación de la bota militar de las instituciones educativa, entre otras, que a la larga llevó al recrudecimiento del conflicto y la eternización de éstas peleas hasta la actualidad.

Libradas las peleas y manifestaciones, el movimiento estudiantil, logra para 1972 el tan anhelado, pero corto cogobierno universitario, implementado en la Universidad Nacional y en

la

Universidad de Antioquia por sólo tres meses, pues en Mayo de 1972, es cambiado el Ministro de Educación Galán por Juan Jacobo Muñoz, quién se pronunció y dictó la eliminación de los Consejos Superiores Universitarios. (Moncayo, 2005:44)

A pesar de tantas problemáticas y contiendas realizadas por los estudiantes, Julio Cesar Turbay Ayala, en su gobierno (1978 - 1992), expidió el decreto 80 de 1980, por el cual se organiza el sistema de educación post – secundaria o superior; en el cual, queda definitivamente erradicado la participación democrática de estudiantes y profesores en el gobierno de la universidad, dejando la dirección de éstas al consejo superior15, al rector y al consejo académico (artículo 56)

se faculta para “la suspensión de tareas aquí ordenada cuando los estudiantes o profesores de dichos centros promuevan o realicen, en el recinto de éstos o en lugares públicos, actos que atenten contra el orden público o dificulten su restablecimiento, tales como paros temporales o indefinidos o asambleas que impidan la vida académica normal de las Universidades y Colegios; actividades extra-académicas que conduzcan a los mismos resultados; e inciten o participen en manifestaciones y otros actos lesivos del orden público”. 14 El decreto 581 de 1971, decreta en su artículo numero 1. La suspensión de las “tareas docentes y académicas de la Universidad Nacional de Colombia (Seccional de Bogotá)” 15 El consejo superior universitario, según esta ley, es el máximo órgano de dirección universitaria, integrado básicamente por: el ministro de educación, el gobernador del departamento, un miembro designado por el presidente

23

“Doce años después la ley 30 de 199216, agregó dos representantes más en el Consejo Superior: un exrector y un representante del sector productivo. Es decir, se consolidó el control político de las universidades, mediante la supremacía de los sectores externos, sobre la representación de la comunidad universitaria”17. Esto pudo verse reflejado en los estudiantes, que Luego de muchos levantamientos, tuvo escasas apariciones en la escena pública, llegando a un periodo de calma y neutralidad, debido a la represión, restricción y control gubernamental, hasta los acontecimientos del 28 de mayo de 1992, cuando el movimiento estudiantil se suma a la turba de trabajadores que marchaban en contra de la política económica de Cesar Gaviria y la imposición de la ley 30. A esta marcha asistieron las principales organizaciones de obreros como la CUT (Central Unitaria de Trabajadores), CGTDC (Confederación General de Trabajadores Democráticos de Colombia), CTC (Central de Trabajadores de Colombia), Fenaltrase (Federación de Trabajadores al Servicio del Estado) y el movimiento estudiantil (El Colombiano, 1992:3A)

El movimiento estudiantil, continúo sus luchas en contra del gobierno de Uribe y su denominada política de seguridad democrática, en la que acuso a los estudiantes de terroristas; las protestas fueron continuadas y criminalizadas durante todo el período de su gobierno y de su reelección. Para el año 2010, cuando se da el nombramiento del nuevo presidente de la República Juan Manuel Santos, quien tiene una ideología básicamente similar a la del presidente Álvaro Uribe, pero con nuevos intereses; se da la consolidación de un pacto entre países como el TLC (Tratado de Libre Comercio) y el cambio radical a la ley que regula la educación superior en Colombia, ley 30 de 1992 (radicado en el proyecto de ley 112 de 2011).

Dado esto, se empezó a generar en el país un sinnúmero de movilizaciones por parte de sectores como, los trabajadores, la salud, los maestros, paradójicamente el tránsito de Medellín y en

de la república, un decano designado por el consejo académico, un profesor, un estudiante, un egresado, el rector de la institución con voz pero sin voto. (decreto 80 de 1980, artículo 57) 16 Después de ser consultada exhaustivamente esta fecha, y según lo que demuestran varios autores como Borrero (2008:259), aunque la ley 30 de 1992 no satisfizo las necesidades del estudiantado y de otros sectores careció de reacciones por parte de estos para controvertirla, asimismo, en la prensa del colombiano y el tiempo, no fue posible encontrar noticias que hablaran sobre tales luchas. 17 ORDÓÑEZ B., Luis Aurelio. De Los Contestatarios De Ayer A Los Indignados De Hoy. Fenalprou (Federación Nacional de Profesores Universitarios. Por la Defensa de la Universidad Pública). 2011. [Online] http://www.fenalprou.org.co/debate-ley-30/academia/368-de-los-contestatarios-de-ayer-a-los-indignados-de-hoy.html

24

especial los estudiantes, que no sólo quisieron mostrar la inconformidad hacia estos hechos, sino a toda la trayectoria de injusticias que se han dado en el país a lo largo de los años.

La influencia de estas marchas no sólo se dio por lo que acontecía en el país, también se alimentó de casos análogos como la toma de chile por el movimiento estudiantil, en protesta por el aumento de las matrículas. Y otras movilizaciones que se articularon de alguna forma a la indignación universal que recorre varios países con manifestaciones en los países árabes (Túnez, Egipto, Sahara Occidental, etc. denominada la primavera árabe), Nueva York (los indignados de Wall Street ), París, Lisboa, Washington, Berlín, Atenas, Marruecos, entre otros, que exigían el cambio global, haciendo cuestiones al poder político, la voracidad del capital financiero y los nocivos impactos sociales que ha dejado el modelo neoliberal18. (El colombiano, 2011:4a)

La movilización estudiantil colombiana se alimentó de este contexto para reintegrarse de nuevo a la disputa por la educación y mostrar que aún no ha desaparecido, y que si en algún momento se había perdido de vista y sus intereses se habían fraccionado, éste era el momento para reivindicarse con sus ideales y enfrentar la reforma de educación superior del presidente Santos y la ministra de educación María Fernanda Campo, llegando a hacerla desmontar, después de que esta ley ya estaba radicada en el congreso, que además de ser una lucha ganada, fue un hecho histórico, único y trascendental en el país.

1.1. El caso de la Universidad de Antioquia (Movimiento Estudiantil)

La universidad de Antioquia, al igual que muchas instituciones de educación superior en Colombia, ha figurado en la lista de instituciones donde los estudiantes han debatido y luchado a favor de la educación pública en el país; y aunque se habían sumido en un prolongado letargo y en la reivindicación de pequeñas situaciones institucionales. En el 2011, este letargo parecía haberse disipado y evidenciado un movimiento estudiantil más vivo que nunca, otra vez, a favor de las luchas sociales y la legitimación de su accionar.

18

elevada concentración del ingreso, precarización laboral y desempleo generalizado, entre sus catastróficas consecuencias.

25

Para llevarlo a cabo, los estudiantes se dotaron de estrategias y expresiones de resistencia artísticas, que en el transcurso de esta investigación serán analizadas en contraste con las estrategias pasadas, que permite tomar un referente a la hora de develar el cambio en las formas de expresarse en lo público, no solamente desde la violencia, sino desde lo pacífico, lo artístico y lo no convencional.

Dado lo anterior, es ineludible la realización de un esbozo histórico del movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia, pues resulta imposible no mostrar su recorrido a través del tiempo y de los acontecimientos que se dan en sus realidades anexas, ya que el movimiento estudiantil no está desvinculado del contexto.

En principio, sería un error aducir, el inicio de las disputas estudiantiles, a la implementación del modelo norteamericano desarrollado en la universidad colombiana en los sesentas con el apoyo de las fundaciones estadounidenses, pues estas, no fueron las únicas razones para el desenvolvimiento y estallido de este movimiento, y aunque tuvo cierta influencia, no fue lo que desató el conflicto y sus sucesivos enfrentamientos.

Lo que se venía presentando en el mundo en el siglo XX; hizo que el movimiento estudiantil de la UdeA se permeara de las ideologías del ―manifiesto de Córdoba‖, en la búsqueda por la autonomía universitaria, la libertad de cátedra, la gratuidad de la educación y el aislamiento de la universidad del sistema y la iglesia. Asimismo, se evidenciaba un encanto por la revolución cultural de los jóvenes comunistas chinos. También eran ejemplo de luchas las desarrolladas en Francia en 1968, las de la Unión Soviética y la revolución Cubana de ámbito Latinoamericano. (Vélez, 2006:35) Formando la postura política de los estudiantes para enfrentarse a la realidad colombiana que instaba para esos días la violencia incontrolada por el bipartidismo, los gobiernos represivos, el capitalismo en pleno furor, la intervención estadounidense, la violación de derechos humanos, entre otros.

Con los sucesos anteriores y la apertura de La ciudadela universitaria al público en el 68, se empezaron a justificar y concentrar diferentes ideologías políticas dentro del claustro, con prevalencia de la izquierda y una tendencia que hacía parte del ambiente revolucionario que se

26

vivía en el mundo. Se empiezan a evidenciar entonces, un movimiento de carácter ideológico, con objetivos definidos, confrontaciones conceptuales y con un espíritu de renovación. Que se consideraban totalmente diferentes, de muchos de los movimientos recientes que carecen de ideología o en los que la ideología se reduce a defender intereses particulares (Restrepo, 2004:11).

Los estudiantes para esa época, se influenciaban de las teorías e ideologías de Karl Marx, León Trotsky, el Che Guevara, Fidel Castro, Mao Tse Tung quienes eran objetos de amores y desamores entre ellos, fragmentando el movimiento debido la discriminación que se manejaba por pertenecer al uno o al otro. Aunque no faltaba la contraparte, los que estaban en la derecha muchas veces representados por Álvaro Uribe Vélez (liberal) y Fabio Valencia Cossio (conservador). Quienes asistían a las asambleas en el teatro Camilo Torres para defender su postura, pero que eran callados y silenciados por las turbas de izquierda19. Cuando se empezó a desarrollar el movimiento por el ―Programa Mínimo de los Estudiante Colombianos‖ sobre las exigencias inmediatas que éstos hacían al gobierno colombiano; en la organización estudiantil de la Universidad de Antioquia, ya no tenían importancia los representantes de los partidos tradicionales, pues se empezaba a notar una alta representatividad y con cierto predominio del Movimiento Obrero Independiente Revolucionario (MOIR), dividido del anterior Movimiento Obrero Estudiantil de Colombia (MOEC), donde se notaba la expresión estudiantil al máximo en la Juventud Patriótica (JUPA), el partido comunistas, representado éste en la Juventud Comunista (JUCO), la revolución socialista de tendencia trotskista, los denominados Comandos Camilistas con influencia de los cristianos y del ELN, por último el PCML (Partido Comunista Marxista Leninista), que había sido el brazo político del EPL (Ejército Popular de Liberación). Todo esto mostrando, las divisiones y fracturas políticas del movimiento estudiantil de la UdeA, pero que en últimas, logró unificarse en torno a objetivos comunes como el derrocamiento del Plan Básico y la lucha de la autonomía universitaria nacional, en 1971 (Uribe, 1998:576).

19

ZULUAGA, María Paola. El movimiento estudiantil: ayer y hoy. Domingo, 09 de octubre de 2011. En: de la urbe radio [Online] http://delaurbedigital.udea.edu.co/index.php/de-la-urbe-radio/2341-el-movimiento-estudiantil-ayer-y-hoy

27

Para 1972, se da la corta experiencia del ―Cogobierno‖ (sólo tres meses) donde se reemplazaron los Consejos Superiores por Consejos Universitarios, permitiendo que las decisiones ya no fueran tomadas por unos pocos, sino que los voceros la única función que tenían era la de representatividad de los estudiantes y que para efectos de toma de decisiones, se tenían que consultar y tomar en cuenta a los demás incidentes. Esta lucha por el cogobierno universitario dio como resultado la unión de estudiantes y profesores en un mismo bando. Asimismo, la caída del cogobierno llevo de nuevo a la implementación de los rectores policías o rectores autocráticos dentro de la institución, suspendió la participación de estudiantes y profesores en los consejos superiores y restableció la asistencia del Ministro de Educación. (Pardo, Urrego, 2011:7)

Sin embargo, el fracaso del cogobierno, vigorizó al movimiento estudiantil dándole nuevos aires de radicalidad en su posición, mostrando un punto de quiebre entre un movimiento visto por participación a un movimiento que peleaba por la sustitución, en su conjunto, de todo el sistema político, situando el movimiento estudiantil en la perspectiva de la revolución socialista.

Acontecimientos como los del 8 y 9 de junio de 1973 aún perviven en la memoria de los estudiantes. En esta fecha, es asesinado por un agente del DAS el estudiante de Economía Luis Fernando Barrientos; que desata varios incidentes en la ciudadela universitaria en la que es incinerado el bloque administrativo y varios buses de la ciudad, en repudio por los actos de violencia y represión por parte del Estado y sus órganos de control (Uribe, 1998:580).

Para el año de 1991 con la nueva carta constitucional, se avizora la reforma de la ley de educación post-secundaria, decreto 80 de 1980. Doce años después del decreto 80 y a uno de la redacción de la constitución política de Colombia, es instaurada para 1992 la ley 30 de educación superior, en la cual, se vio totalmente eliminada la posibilidad del cogobierno.

A partir de esta fecha, se empieza a fortalecer el movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia, organizando nuevamente sus protestas y plasmando su descontento por la nueva ley. Una de las más importantes se da el 28 de mayo, cuando se unen a la marcha de los trabajadores y se dan enfrentamientos con la fuerza pública. En los sucesos del 10 de junio y 13 de octubre se

28

encuentran varios estudiantes heridos debido al enfrentamiento con las autoridades, al igual que en los años de 1993 y 1994, por la implementación de dicha ley.(Echeverri y Gaviria, 2007:60)

Para el año 2010 se inician después de varios años de aparente calma, nuevamente las luchas estudiantiles en la Universidad de Antioquia ésta vez, teniendo como foco, el nuevo sistema de identificación masivo de la institución, TIP (Tarjeta Integrada Personal), que pretendía unificar las identidades de toda la población universitaria en un solo modelo de carnet; con el objetivo de impedir la entrada de personal desconocido a las instalaciones del campus, pues se les adjudicaba el ingreso y venta de drogas al interior, llegando a ser éste, un negocio muy lucrativo para unos, pero peligroso y de desprestigio de la institución para otros .

El descontento se hizo notorio entre los estudiantes, que inmediatamente actuaron contra esta medida institucional, en un principio, con discusiones acaloradas dentro de las asambleas, que posteriormente fueron convertidas en mítines y algunas veces con actos en contra de tal norma, como el daño de material para realizar dicho carnet. Lo anterior conllevó al cierre de la universidad por un mes y la presencia constante en el exterior de la policía y el ESMAD. Hecho que llevó a nuevas protestas y nuevos descontentos dentro del movimiento y otros tantos estudiantes, aseguraban que en vez de ser una institución para la educación, se había convertido, quizás, en una institución carcelaria de máxima seguridad20.

El anterior contexto muestra las experiencias en las que se desenvolvió no solamente el movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquía, sino también el colombiano, mostrando un activismo quizá desfragmentado, pero que en últimas terminaba en las manos con grandes victorias, no sin antes sentir en su organización pérdidas significativas que hicieron más difíciles sus logros.

Este movimiento, en la mayoría de ocasiones, ha estado supeditado a la lucha por lo público, por el restablecimiento de derechos, que llevaban en torno asuntos como: La autonomía universitaria, con la eliminación de los Consejos Superiores, sacando de las discusiones y dinámicas de los

20

En las salidas de la institución se podían observar carteles que hacían hincapié a ésta situación uno de ellos y que llama la atención es: “bienvenidos a la universidad de máxima seguridad de Antioquia”.

29

claustros a los gremios y la religión; establecimiento de un sistema democrático universitario; la financiación adecuada de la educación superior por parte del Estado, como de la investigación científica; libertad de pensamiento ideológico, así como de agremiación; desmilitarización de los universidades, en cuanto al asedio constante de la bota militar dentro de las instituciones; reivindicación de los derechos fundamentales de todos los estudiantes; reapertura de las instituciones educativas, clausuradas para reprimir el movimiento de masas de los estudiantes.

Todo este panorama llevó a una infinidad de problemáticas entre Estado y estudiantes, que permeó la realidad del movimiento estudiantil pasado, forjando una historia que debe ser estudiada para la comprensión de las dinámicas del movimiento estudiantil actual. Pero éste no debe ser el único objetivo con que se estudie el movimiento, sino también el hecho de ser un hito histórico donde se observa el papel de la juventud como sector social que reivindicó derechos, una generación que no debe ser olvidada y su página no debe ser pasada en blanco y más si se está hablando desde el ámbito de las ciencias sociales, que es desde donde más se deben reivindicar este tipo de actuaciones.

En la actualidad el movimiento estudiantil, sigue consolidando luchas para la reivindicación del derecho a la educación, la autonomía universitaria, su financiación y la no privatización de ésta, y que para alcanzar sus ideales y defender lo que por derecho se le otorgó, debe salir a las calles en multitudes, con sentido, para exigirlo. Estas multitudes en su mayoría están integradas por estudiantes de diferentes instituciones, pero que para efectos de esta investigación, sólo se tendrá en cuenta el movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia.

Éste movimiento, hizo lo posible por lograr un cambio radical en lo que el gobierno del Presidente santos quiso denominar, reforma a la ley 30 de 1992. Para lograrlo, se armaron, pero de aerosoles, pinturas, instrumentos musicales, pancartas y más importante que todo, su voz, con la que hicieron escuchar su clamor ante la población en general, que de alguna forma, estaba siendo informada por los medios masivos de comunicación, quienes mostraban en sus titulares y el entorno de la noticia, un sesgo de lo que en realidad estaba ocurriendo, limitando la noticia en muchas ocasiones, a lo que pudo entorpecer de una u otra forma las movilizaciones, pero que

30

para el contexto de las marchas eran casos aislados que no determinaban efecto alguno, dentro de sus objetivos21.

Es desde este punto, donde se empieza a mostrar la eficacia que tienen los medios masivos de comunicación a la hora de informar y mostrar una realidad parcializada que sólo le confiere sentido a quienes quieren mostrarla desde su posición, pero que los estudiantes, en este caso, no contentos con lo que estos medios hegemónicos quieren mostrar, se han apropiado de lo que autores como Chantal Mouffe y Clemencia Rodríguez (2009:17) suelen denominar ―medios ciudadanos de comunicación‖; Que son aquellos medios, que facilitan el cambio de sujetos y colectividades en ―ciudadanos‖; y que no solamente se refieren a los mecanismos de transfusión y difusión de mensajes, sino también medios que abren espacios de comunicación donde todos y todas tienen derecho hablar y a ser escuchados, dándoles la oportunidad de tomar el poder en sus manos y designar el mundo y su realidad en sus propias palabras. Al igual que les permite activar procesos que llevan a re-codificar su contexto y su identidad, creando para ellos una nueva representatividad ante lo público.

Esta representatividad ante lo público o el esparcimiento en la arena pública, se la han venido jugando hoy, los y las estudiantes con su innovadora forma de enfrentarse a su realidad y más específicamente al gobierno de Santos, recurriendo a actividades culturales tales como: ―el abrazatón‖, ―besatón‖, ―video foros‖, ―graffitis‖, ―performance‖, ―cabalgatas‖, música, noche de antorchas, marchas,

entre otros. Que en un principio quisieron ser deslegitimados por el

gobierno, esperando una respuesta violenta y desorganizada por parte del estudiantado, pero que al final, resultaron sorprendidos por la manera pacífica y organizada en la que transcurrieron todas las movilizaciones, en las cuales se escuchaba a viva vos, ―sin violencia, sin violencia, sin violencia‖, para apaciguar cualquier foco de ímpetu revoltoso. Todo esto dio como resultado, la victoria de los estudiantes en cuanto a la retirada de dicha ley del congreso.

21

Los titulares y noticias del canal Caracol, RCN, Hora 13, etc.; de los periódicos el tiempo, el mundo y el colombiano; asimismo emisoras radiales, los cuales fueron estudiados y escuchados cautelosamente, mostraron que sus noticias estaban sesgadas y poco mostraban de lo que en realidad acontecía y que en muchos casos mostraron en sus portadas dichas noticias porque eran las que estaban vendiendo la información en el momento.

31

Para efectos de lo que se pretende expresar en el presente informe, sólo se tendrán en cuenta los medios ciudadanos de comunicación artísticos como el performance, la música y el graffiti (político). Como medios propicios para alcanzar la legitimación y reivindicación de derechos y que de alguna forma, han sido utilizados para sus logros, por el movimiento estudiantil colombiano, con énfasis en la universidad de Antioquia.

Para soportar esta investigación, se han tenido en cuenta producciones científicas que hablan del movimiento estudiantil desde su nacimiento hasta la actualidad, y de la forma como han actuado frente a problemáticas que atentan contra los derechos de los ciudadanos, además de las influencias internas y externas del país, sin dejar a un lado los influjos teóricos que dan cuerpo a sus disputas. Estos autores han llevado a cabo una labor de reconocimiento y respeto por la historia de los movimientos sociales, en especial el movimiento estudiantil colombiano y particularmente el de la Universidad de Antioquia22.

Para mostrar los alcances que pretende esta indagación, se planteo la pregunta de ¿Cómo la resistencia civil – no armada –desde los medios ciudadanos de comunicación artísticos, ha ayudado a la visualización y legitimación de la postura política de los integrantes del movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia, en la lucha por el derecho a la educación, en el marco de la reforma a la ley 30 comprendido en los años 2011 y 2012? Que trata de indagar sobre las nuevas formas de resistencia artística del movimiento estudiantil, teniendo en cuenta las luchas anteriores, para confrontarlas y deducir si en realidad son tan innovadoras, o se vienen practicando desde hace muchos años.

22

Dado lo anterior, se mencionaran algunos de ellos y las producciones más representativas frente al tema del movimiento estudiantil: María Teresa Uribe de Hincapié; Universidad de Antioquia: historia y Presencia 1998. Alfonso Borrero Cabal; La Universidad: Estudio Sobres sus Orígenes, Dinámicas y Tendencias (Historia Universitaria: Los Movimientos Estudiantiles) 2008. Consuelo Posada; Los Años Setenta en la Universidad de Antioquia 2001. Darío Vélez Botero; El Movimiento Político en la Universidad de Antioquia 1974 – 1994 (El Movimiento Profesoral Y El Movimiento Estudiantil En La UdeA) 2006. Entre otros.

32

2. MARCO TEÓRICO El imperialismo no sólo produce ganadores y perdedores, sino que la subyacente explotación que produce aquellas divergencias de intereses también provoca resistencia, rebelión y quizás un nuevo ciclo de revoluciones. J. Petras

Las prácticas del poder son tan antiguas como las mismas relaciones sociales entre individuos, pero a través del tiempo, a estas prácticas de poder y de sumisión siempre le han surgido distintas formas de oposición y de revelación de aquellos que quieren decidir por sí mismos. Estas personas, a costa incluso de sus propias vidas, han querido elegir para sí y para quienes están a su lado, una vida diferente a la que le han querido plantear y obligar incluso desde su nacimiento. A estas formas de revelarse ante el poder establecido se le han denominado resistencias; que no son más que el acto o los actos de ir en contra de aquellas acciones de coerción, sumisión y dominación de los otros.

En palabras de Jaime Rafael Nieto (2008:12):

La resistencia como práctica que convoca a los sujetos colectivos en contra del poder es tan antigua como las prácticas del poder mismo. La historia con toda su variedad de contextos como afirma Marx, y Engel en el manifiesto comunista (…) reconoce que el sentido de la resistencia equivale a contraponerse a las diferentes formas de poder conocidos de dominación y sublevación

Desde este momento y según lo que cuenta la historia se puede evidenciar que los hombres han luchado incansablemente por sus sueños, ideales, convicciones y sobretodo porque sus voces sean escuchadas y respetadas no solamente por el ―otro‖ inmediato sino, por los encargados de la dirección del Estado. Estos ―ciudadanos‖, son quienes tienen el poder de delegar, en un Estado democrático, parte de sus derechos políticos, a los gobernantes, para que sean representados y manejados de la mejor forma posible. Es por esta razón, que cuando la población ―civil‖ se ve amedrentada, amenazada o ignorada por quienes los representan, deciden asumir acciones para salvaguardar sus derechos civiles y políticos.

33

Estas acciones son vistas desde la resistencia civil, como un conjunto de métodos o medios de lucha política colectiva, sustentada en un elemento de fuerza moral legítimo, es decir, que no hace uso de la violencia y que está dirigida contra poderes abusivos, llevando al ciudadano a resistirse a la opresión y convocando a la no cooperación y desobediencia del ciudadano cohesionado. (Zambrana, 2011:57) “Normalmente la resistencia civil, se ve proyectada hacia instancias jurídicas como el Estado, fuerzas político militares, contra o paraestatales, fuerzas de ocupación extranjera e incluso en las confrontaciones entre diferentes grupos de interés dentro de una misma sociedad”. (Pardo, 2005: 24)

Como se dijo antes, este conjunto de métodos que no hacen uso de la violencia se hacen evidentes hoy más que nunca con la defensa y legitimación de derechos laborales, de salud, educativos, de petición de libertades, democracias participativas y en contra de la financiación de intereses estatales y privados transnacionalistas a nivel mundial. Tales son los casos de Túnez, Egipto, Sahara Occidental conocidos como ―primavera árabe‖ (2010); las protestas en Grecia (2010 2011); en España con el 15 M o el movimiento de los Indignados (2011); en Nueva York con los Ocuppy Wall Street; las huelgas en

China (2011); y especialmente por la educación, las

movilizaciones estudiantiles en Puerto Rico, Chile y Colombia (2011 - 2012); que han llevado a cabo acciones no violentas para llevar conseguir sus objetivos.

Como se puede notar, el contexto colombiano actual no es distinto a esta realidad ya que los ciudadanos son agredidos constantemente por acciones relacionadas con el manejo del país por parte del Estado y otros actores, fuera del rango de los derechos. Dadas estas circunstancias, las personas toman todas las armas (pacíficas y creativas) que tengan a su alcance para poder defender y reclamar sus derechos, que de alguna forma están siendo vulnerados constantemente por quienes hacen parte del poder. Pero su actuar está siendo reivindicado en la medida que se están empezando a utilizar estrategias artísticas para lograr su cometido.

Para aclarar lo anterior, no sólo las luchas donde se utiliza la resistencia civil, son luchas en contra de las decisiones y acciones del Estado o del gobierno, puede haber otro tipo de actores relacionados con estas circunstancias. Sin embargo, como éste estudio se centra en las decisiones

34

tomadas por un gobierno de turno y los conflictos con éste, los actores a los cuales se les aplicara la resistencia, será el encargado del Estado colombiano, el gobierno de Santos.

Por lo regular estas estrategias artísticas son llevadas a cabo mediante acciones no violentas, y realmente quienes las aplican no quieren la violencia. Sin embargo, muchas veces los gobiernos y sus fuerzas opresoras obligan a recurrir a ella cuando le cierran a los ciudadanos todas la vías pacíficas de las cuales acogerse, manteniendo los ciudadanos, su actitud de la no violencia hasta un límite (generalmente hasta el propio aguante), pero más allá de esté límite detona la violencia: muchas veces para responder a una agresión de las fuerzas represoras del Estado o simplemente porque no quedó otra salida, es decir las vías pacíficas están obstruidas23. Según Gandhi24, estas acciones no violentas pueden distinguir entre resistencia pasiva y resistencia activa: En la resistencia pasiva hay una cierta dimisión a la violencia, pero argumenta, que esta se puede dar por miedo a la respuesta del adversario. Sin embargo, la resistencia pasiva no es una forma de lucha, sino una forma de no enfrentar o desafiar el orden establecido, en muchas ocasiones permitiendo que esto se empeore hasta el punto en que finalmente explote de la manera menos esperada. Empero, no quiere decir que no se resista, si se admite la resistencia, pero desde el ámbito de la clandestinidad. Ejemplo de ello es el viejo proverbio etíope: ―Cuando el gran señor pasa, el campesino sabio hace una gran reverencia

y

silenciosamente se echa un pedo‖ (Scott, 2000:9).

. En la resistencia activa, por el contrario, hay una renuncia a ejercer la violencia pero al mismo tiempo, una decisión de enfrentar la violencia que se desata por la protesta emprendida. Esta no puede fundarse en el miedo, pues el que la protesta no sea violenta no implica que el otro no sea

23

MOVIMIENTO CIUDADANO POR LA DEMOCRACIA. Resistencia Civil Pacifica: el poder activo de los ciudadanos. [Online]http://www.psicosocial.net/gl/centro-de-documentacion/doc_details/200-resistencia-civil-pacificael-poder-activo-de-los-ciudadanos. Pág. 15 24 Idem. Pág. 17

35

violento, por el contrario, muchas de estas acciones no violentas llevan al otro a actuar violentamente25 No obstante Gandhi (citado en, Movimiento Ciudadano por la Democracia)26 aclara: Si la resistencia pasiva es el arma de los débiles, la resistencia activa es el arma de los fuertes (...) puesto a escoger entre esta actitud y la de tomar las armas, prefiero infinitamente la de tomar las armas, porque en esta pasividad autodestruye la dignidad. Afortunadamente hay otra opción que no es la de tomar las armas, sino la de la defensa no-violenta, la resistencia activa.

Al igual que Gandhi, Gene Sharp, ha sido considerado uno de los líderes en la lucha por medio de las acciones no violentas, incluso lo han considerado el creador de la corriente pragmatista dentro de los teóricos de la no-violencia. Éste, ha mirado en las acciones no violentas contra regímenes opresores, una respuesta a los problemas y una forma eficaz de actuar en la política; en la medida en que éstas permiten ejercer el poder con eficacia. Pero esta eficacia va de la mano con la concepción que toda estructura de poder está basada en la obediencia de los sujetos, pero en caso tal, que estos no obedecieren las ordenes de los dirigentes, es decir, los líderes, no tendrían poder (Sharp, 1968:37).

Según Sharp, todas las estructuras efectivas de poder poseen unos sistemas mediante los cuales extraen u obliga la obediencia de los individuos. Entre ellos se incluyen las instituciones como los juzgados, el senado, la policía, el ejército (instituciones coercitivas), etc. Sharp, también dimensiona la obediencia por medio de la cultura, influyendo en ella de una forma disimulada e implícita que los subordinados no se den cuenta de ello y vendiéndoles la idea que el poder es ―monolítico‖ (sólo una persona puede ejercer el poder). Luego dimensiona el miedo como otra de las forma de hacer obedecer a las personas, en tanto que aquellas que desobedezcan se deben enfrentar a un sistema de sanciones como la prisión, pena de muerte, multas, entre otras. Pero el juego del que tiene el poder no termina allí, pues quien obedece se hace merecedor a recompensas

25

MOVIMIENTO CIUDADANO POR LA DEMOCRACIA. Resistencia Civil Pacifica: el poder activo de los ciudadanos. [Online]http://www.psicosocial.net/gl/centro-de-documentacion/doc_details/200-resistencia-civil-pacificael-poder-activo-de-los-ciudadanos Pág. 16 - 17 26 Idem. Pág. 16

36

entre ellas títulos, riqueza, propiedades, fama, etc.27 (Sharp, 1968:29)

Uno de los métodos de la acción no violenta más retomados por diversos autores en escritos sobre ciudadanías, acciones no violentas o formas de protestas social, ha sido el ―Judo Político‖; el judo político tal y como el deporte, utiliza dentro de sus estrategias la fuerza del atacante para desestabilizarlo y hacer que pierda el equilibrio, en el caso de las acciones no violentas, se utiliza la represión del atacante, en este caso el gobierno, para hacerle perder su legitimidad ante la población, es decir, el agresor espera una reacción violenta por parte de quienes en este caso se movilizan, para poder atacarlos con más fuerza, pero como su respuesta es de aguante y pacífica, y no se halla ninguna forma de violencia, el agresor es sorprendido y desarmado para poder reprimir dichas acciones (Sharp, 1968:41).

el intento de aplicar la represión contra la resistencia civil puede volverse contra los que la emplean (…) La represión, asegura Sharp, si se topa con una no violencia disciplinada, hará que aumente fácilmente la simpatía entre la población general hacia los resistentes y la antipatía y el desprecio hacia el régimen (Sharp, citado en Randle, 1998:116).

Del mismo modo, Sharp (1968:41) identifica tres tipos de acciones no violentas; la primera es la protestas y la persuasión, la segunda la no cooperación (en los niveles social, económico y político) y la tercera intervención no violenta. Para el caso de este estudio se retomará la primera de ellas porque explica acertadamente la acción del movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia en contra de la reforma de la ley 30 de educación.

La protesta y la persuasión; hacen alusión a los actos no violentos utilizados por los resistentes, tienen un alto contenido simbólico y llevan implícito la capacidad de convencimiento y sobre todo van más allá de una simple palabra o expresión verbal. Es una forma de dar a conocer la inconformidad generalizada de una población particular ante el agresor o adversario, pretendiendo

27

Poder Político = Fuentes de Poder = Obediencia Civil ¿por qué obedece la gente? (la obediencia es el corazón del poder político) (Sharp, 1968: 26)

37

con esto cambiar o corregir lo que los hace inconformes y quizá llegar hasta el punto de hacer lo que el grupo que se queja exige. Dentro de éste tipo de acciones no violentas, Sharp ha encontrado 54 acciones típicas de protesta y persuasión y las ha agrupado en diez subgrupos, de los cuales sólo se retomaran tres; los actos públicos simbólicos, drama y música, y asambleas públicas (Sharp, 1968:43).

Dentro de los actos públicos simbólicos, se pueden mencionar algunas de las acciones utilizadas por el Movimiento Estudiantil, dentro de ellas se destacan; uso de símbolos, entrega de objetos simbólicos, desnudos de protesta, luces simbólicas (antorchas, linternas y velas), exposición de retratos de líderes o héroes, pinturas de protesta, ruidos simbólicos (tonaditas simbólicas con silbatos, matracas, sirenas, etc.). Para el caso del drama y la música; se acentúan las obras cortas, comedias, teatro, música y canciones. Y por último las acciones más formales y comunes las asambleas públicas, que definen; asambleas de protestas o apoyo, mítines de protesta, foros con exponentes diversos e informados (Sharp, 1968:45)

Sharp (Citado en Randle, 1998:117-118), dimensiona también unos mecanismos sociológicos del cambio, haciendo alusión al cambio de estrategias y de pensamiento del agresor, como una forma de éxito. Dentro de estos mecanismos identifica la coerción, la acomodación y la conversión Conversión, adaptación, coacción no violenta (Sharp, 1968: 102)- sólo se retomaran la acomodación y la coacción por el abarque teórico de este estudio.

La acomodación; habla de un proceso mediante el cual el opositor o el agresor, al darse cuenta de la asimetría de fuerzas contra él, opta por generar otras salidas, entre ellas la negociación y el compromiso. Desde el ámbito del resistente civil, la batalla es físicamente posible y continuable y desde el punto del agresor también, pero ven conveniente la idea de un arreglo por los costos políticos y económicos tan elevados que se han generado durante toda la situación, del mismo modo, se nota dentro de toda esta gama de circunstancias que el agresor puede llegar a tener una derrota final (Randle, 1998:118).

En cuanto a la coerción; hace referencia a aquella situación en que la voluntad del agresor o adversario se ver forzada y de manos atadas a causa de las acciones de resistencia civil que se han

38

venido presentando, según Randle, (retomando los postulados de Sharp) esto se puede dar por tres circunstancias; la primera, porque la lucha se ha extendido tanto que es casi imposible reprimirla. La segunda, es porque durante todo el proceso se han venido presentando cambios sociales, políticos y económicos no manejables y el tercero que el agresor es sofocado, independientemente de la voluntad de los resistentes (Randle, 1998:118).

Desde otro ámbito, los ciudadanos en su búsqueda por librarse de la opresión que ejercen ciertas fuerzas estatistas, conforman agremiaciones, acciones colectivas y movimientos sociales, que se reúnen en un acto de resistencia contra dichas relaciones de poder que se vienen manejando entre el Estado y los ciudadanos. Estas relaciones de poder generalmente evidencian sensaciones y sentimientos de insubordinación, opresión y deslegitimación ante los entes gubernamentales, que de cierta forma es ilegítimo, en la medida en que ellos han sido elegidos por los ciudadanos para que los representen ante instancias jurídicas y para salvaguardar sus derechos, que en últimas resultan siendo vulnerados por estos mismos. Estas conformaciones ciudadanas, se pueden denominar como formas públicas organizadas28 de manifestación, que se agrupan para dar a conocer (y sentir) ante la opinión pública y los demás ciudadanos el peso de su posición y, al mismo tiempo, presionar a las autoridades y al propio Estado para que cambien ciertas decisiones que van en contra vía de los derechos de los ciudadanos, en un acto de resistencia. Muchas veces, estas agrupaciones en medio de sus manifestaciones, obstaculizan con la presencia de sus cuerpos la realización de algún acto autoritario. Normalmente, no se ciñen a los canales marcados por la ley ya institucionalizados, pero esto no quiere decir que necesariamente están en contra de ellos, simplemente juegan con lo que tienen para hacerse visibles ante los demás. Como diría Michael Randle (1998:114); “La resistencia civil procura desafiar la autoridad y legitimidad del gobierno (…) la resistencia civil desafía el derecho del gobierno a mandar y puede poner incluso en entredicho el sistema entero político y social dentro del que se desenvuelve.”

Sin embargo Foucault (1988:19) argumenta que si bien hay situaciones de poder y dominación

28

Idem. pág. 14

39

ante los otros, estas no siempre llegan a desencadenar, actos y prácticas de resistencia, sino, actos de obediencia ya sea voluntaria o involuntaria. Identificando que ésta resistencia siempre está ahí y que sólo se hace presente cuando los sujetos o colectivos sienten la necesidad y ven la oportunidad para enfrentarse a dicho poder establecido.

Por consiguiente, no es suficiente que haya un contexto de poder o de injusticia social, política o económica, para que aflore la resistencia y se exprese; es necesario que tal contexto sea percibido por los sujetos y éstos articulen bajo formas abiertas o sutiles expresiones colectivas de rechazo e inconformidad (Foucault, 1988:19).

Estas sensaciones de opresión, insubordinación y deslegitimación, por lo regular son pasadas de largo por los ciudadanos o regularmente son acalladas por ciertas prácticas y discursos utilizados por el Estado con el ánimo de mantener a estas poblaciones en actitudes de sumisión y subordinación, que de alguna forma legitiman y naturalizan dichas acciones. La utilización de estos discursos por parte de los gobernantes, es definido por James Scott como: El ―discurso público‖, que no es más que ―el autorretrato de las elites dominantes donde estas aparecen como quieren verse a sí mismas. Tomando en cuenta el conocido poder que tienen para imponer a los otros un modo de comportarse (…) Aunque no es probable que se trate sólo de una maraña de mentiras y deformaciones, sí es una construcción discursiva muy partidista y parcial. Está hecha para impresionar, para afirmar y naturalizar el poder de las élites dominantes, y para esconder o eufemizar la ropa sucia del ejercicio de su poder (Scott, 2004:42)

Dadas estas circunstancias, la población civil y para este caso los estudiantes, comienzan a despertarse del letargo y en un acto de legitimar, reivindicar y visibilizar sus derechos, comienzan a idearse formas de resistirse, llegando a estrategias no violentas como las marchas, los video foros, el abrazatón, besatón, cabalgatas, graffitis, teatro, performance, entre otras. Que para éste caso, fueron ideadas para ir en contra u oponerse a ciertas leyes y normatividades como es la ley 30 de 1992 reforma de educación superior que radicó el gobierno colombiano.

40

Este tipo de expresiones o estrategias artísticas no violentas, están altamente cargadas de un discurso simbólico que genera un impacto emocional tanto en los participantes como en el público, son una forma de «propaganda mediante hechos» (Boserup y Mac, citados en Randle, 1998:125), que comunican a un nivel más profundo, es decir, que queda más en la memoria y en el corazón de las personas, los objetivos de lo que se está llevando a cabo y la posibilidad que el cambio es posible por estas vías, la vía de la resistencia civil. ―De ese modo pueden contribuir a la solución de un problema con el que tiene que enfrentarse cualquier grupo o movimiento que desafíe el statu quo‖ (Boserup y Mac, citados en Randle, 1998:125).

Del mismo modo, Boserup y Mac (citados en Randle, 1998:125), clasifican este tipo de expresiones como acciones no violentas o ―acciones simbólicas‖ que cumplen al menos una función triple:

El simbolismo desempeña un papel crucial en la definición y consolidación de una comunidad. Las manifestaciones simbólicas —que pueden abarcar una extensa gama de actividades— desempeñan una función triple: llaman la atención de la gente hacia una reivindicación o un agravio; constituyen una expresión de la unidad y determinación de la resistencia; y desafían a los no participantes a que adopten una postura respecto a la misma.

Foucault (1988:27), evidencia tres criterios de la acción no violenta; el primero de ellos, hace alusión a que las estrategias, en este caso artísticas, son designadas como medios empleados para la consecución de cierto fin o de cierto objetivo; el segundo habla de cómo estas acciones entran en un juego especulativo, de acuerdo a lo que se espera de las acciones de los otros (Estado), buscando tener ventajas sobre él y viceversa; y tercero, habla de la designación de ciertos procedimientos que serían utilizados en una situación de confrontación con el fin de despojar al otro de sus medios de lucha y forzarlo a dejar la lucha.

Estos tres significados se reúnen en las situaciones de enfrentamiento - guerra o juego- donde el objetivo es actuar sobre un adversario de modo tal que la lucha le sea imposible, el punto más importante es obviamente la relación entre las relaciones de poder y las estrategias de enfrentamiento. (…) Puesto que si bien

41

es verdad que en el corazón de las relaciones de poder y como condición permanente de su existencia, hay una "insumisión" y libertades esencialmente obstinadas, no hay una relación de poder sin resistencia, sin escapatoria o huida, sin un eventual regreso(…) dándose una eventual dominación29

Estas estrategias no violentas utilizadas por el movimiento estudiantil en un acto de resistirse ante los poderes gubernamentales, es a lo que Scott (2004:45) suele llamar ―discurso oculto‖ como una forma de lenguaje político y de resistencia, que se encuentra ―fuera del escenario, donde los subordinados se reúnen lejos de la mirada intimidante del poder‖ donde ―es posible el surgimiento de una cultura política‖ diferente en el que las personas, movimientos o agremiaciones se reúnen para discutir asuntos pertenecientes a su realidad, estos espacios permiten que éstas personas se expresen y discutan acerca de lo que está pasando en su contexto. Tal es el caso del movimiento estudiantil, que utiliza las asambleas como espacios de deliberación donde no están siendo observados y donde se llega a acuerdos con respecto a las decisiones y actuaciones que se van a tomar en contra o a favor de. Que en algún momento ―termina manifestándose abiertamente, aunque disfrazado‖ (Scott, 2004:21) de estrategias culturales, enmarcadas dentro de las artes escénicas, la música, las danzas, los graffitis, entre otros. ―como vehículos que sirven, entre otras cosas, para que‖ los estudiantes ―insinúen sus críticas al poder al tiempo que se protegen en el anonimato o tras explicaciones inocentes de su conducta‖ (Scott, 2004:22).

Siguiendo esta línea y entendiendo la resistencia civil no como un concepto opuesto, sino derivado a la sociedad civil, se toma ésta, como un acto público, razonado y no violento por medio del cual una gran parte de la sociedad presentan una serie de argumentos que los lleva a resistirse ante una acción o una ley que va en detrimento y perjuicio de sus intereses grupales, dimensionando en ellos la capacidad que tienen de ejercer una acción contra quienes están en el poder (Zambrana, 2011:17). En otros términos, ―resistencia civil equivale, en un comienzo, a

29

la dominación es una estructura global de poder cuyas ramificaciones y consecuencias pueden encontrarse a veces hasta en la trama más tenue de la sociedad; pero es al mismo tiempo una situación estratégica más o menos adquirida y solidificada en un enfrentamiento de largo alcance histórico entre adversarios (Foucault: 1988: 27).

42

sociedad civil en relación con un marco específico de acción y de conflicto, definido por una relación de defensa y oposición frente a regímenes autoritarios o dictatoriales que vulneran o ponen en riesgo los derechos y autonomía de la ciudadanía‖30 (Nieto, 2004:13).

La resistencia civil entonces, se ubica dentro del concepto amplio de la acción no violenta, siendo ésta una categoría general que incluye diversas técnicas y estrategias de protesta. La lucha planteada puede ser de tipo político, cultural, económico y social, en niveles locales, nacionales e internacionales. De este modo la acción no violenta comprende desde actos de resistencia individual como la objeción de conciencia y las subjetividades políticas, hasta las luchas sociales de carácter colectivo a nivel nacional, asimismo, de las luchas transnacionales dadas por los ambientalistas, feministas y defensores de derechos humanos.

Entendidas estas subjetividades políticas, como la capacidad que tienen los sujetos de leer, discernir, reflexionar de forma crítica sobre su realidad para poder actuar sobre ésta, a partir de un punto de vista histórico y político que le permita ir en contra o resistirse a órdenes establecidos, posibilitándoles el planteamiento de utopías que lleven al cambio de las estructuras de poder (Alvarado, 2008: 29-30).

Lo anterior implica la lucha ciudadana como un discurso constante desde lo político encaminado a derrocar la dominación que se asume como poder hegemónico a través de acciones de represión que vulneran el ser ciudadano en sus derechos, de esta manera ―la resistencia civil pueden limitarse a la búsqueda de algunas reivindicaciones ―menores‖, o ir encaminados al cambio de régimen o de todo un sistema socio político. Si bien la resistencia civil no exige necesariamente conciencia o interiorización de una ética pacifistas, si es claro, que sus métodos no deben ser violentos‖.31(Pardo, 2005:24).

30

Según algunos teóricos, el concepto de resistencia civil se conoció inicialmente como deber de los súbditos antes de configurarse propiamente como derecho de los ciudadanos; “la orden de autoridad cuyos contenidos no guardaran correspondencia con los mandatos de la iglesia, debía ser resistida por los súbditos. Más que un derecho de resistencia se hablaba de un “deber” en sentido estricto”. Cfr. Ernesto Abril, Las Limitaciones del Soberano. Fontamara. México, 1998. La resistencia como derecho es posteriormente incorporada a la narrativa del liberalismo político. 31 Desde una perspectiva pragmática, se exige al activista la no utilización de la violencia, más como un criterio indispensable para el éxito de la estrategia general de la resistencia y defensa civil, que como un principio de vida.

43

Es así como la resistencia civil se asume como actor que reivindica la democracia, que en primera instancia se hace protagonista de ciudadanía en las obligaciones cívicas, generalmente buscando el derecho a la soberanía, constituyéndose en una acción perteneciente a la esfera de lo público.

De forma más precisa y en palabras de Erika Zambrana Grandi (2011: 54-60)

La Resistencia Civil debe ser una acción colectiva que evita cualquier recurso a la violencia que se genera y es ejercida por la población civil que requiere para su eficacia, un proceso organizativo y de planeación y por último, debe sustentarse en un elemento de fuerza moral que la legitime. Así, para Rawls, la Resistencia Civil busca inducir a un cambio en normas jurídicas o políticas gubernamentales que se consideran ilegítimas a la luz de los principios que rigen la vida social; es decir, ésta pretende identificarse con los fundamentos constitucionales del Estado democrático: asimismo, dicho cambio se logra porque a través de la protesta se apela al, sentido de justicia de la mayoría, esto es, a ciertos valores que son comúnmente compartidos por los ciudadanos.

Para terminar; más que una forma de actuar, de pensar y de posicionarse ante la vida, la resistencia civil, es un arte clave a la hora de entender que somos desde lo oculto, estrategas de la resistencia en contra de la dominación, que constantemente nos atraviesan sentimientos de protección a nuestros derechos en la vida cotidiana, que nos resistimos sin saber que lo hacemos en todos los momentos y ámbitos de nuestras vidas, es como si la sociedad misma hubiera nacido para resistirse y hacernos resistir; porque en el discurso oculto es donde nos planteamos como hacer lo que no nos es permitido por la regularización de nuestras conductas, pero que al final, ese discurso laboriosamente construido desde nuestra clandestinidad, surge de forma tan natural y espontánea, que pareciera que se tratara de una acción cotidiana escondida tras la palabra del cuento, la poesía o el mismo danzar del cuerpo con el propósito que se quiere decir algo sin que se sienta la desobediencia, pero que al final constituye la respuesta ante la subordinación, que no es más que la resistencia32

32

Este argumento si bien no es una réplica fehaciente del texto de los dominados y el arte de la resistencia de James Scott, si fue una inspiración para poder entender la resistencia desde estos parámetros.

44

3. MARCO CONCEPTUAL

3.1. Medios Alternativos De Comunicación

La comunicación alternativa surgió y se desarrolló en contraste con el progreso del hombre y de la comunicación social, debido a la necesidad inminente de la población de comunicar de formas distintas lo que otros quieren informar a su modo y de acuerdo a sus intereses. Es así, como se han encontrado vestigios de la comunicación alternativa desde el México prehispánico, donde el discurso del poder se encontraba inmerso en la comunicación denominada ―oficial‖ y el cual se plasmaba en los muros de los edificios y las plazas, sin embargo, los comerciantes trataban de tergiversar esta verdad, construyendo desde su discurso y la compilación de información, la verdadera realidad social e impartiéndola durante sus viajes comerciales generando con esto, movimientos sociales y guerras. (Corrales y Hernández, 2010:4) Otro ejemplo, se da en la revolución, cuando las mujeres de casa quienes no se involucraban con las ―soldaderas o adelitas‖, realizaban reuniones secretas con el pretexto de realizar el rosario y pasarse el día orando, se intercambiaban información y documentos referentes a la lucha social, sirviendo esto como comunicación alternativa (Corrales y Hernández, 2010:5)

No obstante, es hasta el siglo XX en que los estudiosos de la comunicación se hacen conscientes de su existencia, por el auge de estos durante las décadas de los setenta y los ochenta que fueron momentos de cambios ideológicos, políticos y estructurales en el mundo, que llevaron a la población directamente implicada a buscar otras formas o nuevas formas de comunicarse desde lo alternativo y la participación. Surgiendo desde allí, la necesidad de comunicar la vida social de estos hombres por medio de unos métodos alternos participativos que tenían como fin último; la construcción de un nuevo orden social donde toda la población tuviera cabida. Y que posteriormente significaría para muchos; una esperanza que se materializaría en “documentos, imágenes, videos y audios que dan la palabra a los individuos que

en

un

intento

de

movilización social buscan la concientización por las vías del convencimiento informativo e ideológico” (Corrales y Hernández, 2010:3).

45

Particularmente, en Latinoamérica, la comunicación alternativa en los años 70 y 80 estuvo comprometida con los movimientos sociales y las críticas a la sociedad que imperaba, dando paso al conocimiento del mundo popular y la importancia que este tenía en la sociedad, así como una apuesta para la organización democrática de las poblaciones. Permitiendo todo esto, que las personas que vivían en los sectores marginados de la sociedad y que a su vez eran invisibilizados por el Estado, se convirtieran en partícipes y protagonistas de su realidad, donde sus voces eran escuchadas y tenidas en cuenta para el cambio y la transformación social que buscaban (García, 2006:1).

Entonces, dadas las condiciones del contexto, las poblaciones se han visto obligadas a generar nuevos formas de informarse y de comunicarse y como lo dijo Peter Lewis (1995:17) hace 15 años; los medios alternativos son como una especie de “anticuerpos producidos... como protección contra el descuido, la insensibilidad y la irracionalidad de los medios tradicionales‖. Y al día de hoy así lo concibe; ―Los años siguientes han confirmado el acierto general de una metáfora que da a entender que los sistemas mediáticos de masa inadecuados o represivos (y, podríamos añadir, las sociedades que los producen) parecen generar inevitablemente medios alternativos” (Lewis, 1995:17).

Dado lo anterior, se infiere, que la comunicación humana depende en toda medida de factores como los económicos, culturales, políticos y sociales que la permean y las transversalizan en todo momento; caso análogo a la comunicación alternativa, que es tocada por todas estas dimensiones pero con una finalidad diferente, informar la verdadera realidad social a toda la comunidad. Pareciera entonces, como una opción que surge de y para la comunidad; originada en sus propias mentes, inspiradas por esa realidad que quieren mostrar, realidad ajena al poder y a la transmitidas por los medios tradicionales de comunicación, una realidad más crítica y constructora de identidad, amor, lucha y resistencia.

Esta comunicación alternativa, difiere en forma, función y contenido a la propuesta comunicacional del sistema dominante, que generalmente está guiada por las relaciones de gobierno y sus intereses, mediatizada para alcanzar fines diferentes a los de las comunidades; y que para alcanzar dichos fines, utilizan estos medios tradicionales para difundir sus ideologías y

46

propuestas que parecieran ser verdades absolutas. De ahí el gran acierto de la comunicación alternativa, es que nace en contraposición a este tipo de información, pero desde la visión de los propios individuos, ―aquéllos que en su diario existir son participes de la realidad social‖ (Corrales y Hernández, 2010:4).

Como se expone, la comunicación alternativa ha acompañado al existir de la humanidad como opción discursiva de una propuesta social diferente, rompiendo con los esquemas de la comunicación regulada por normas, autoridades y contextos políticos; nace de aquellos individuos que intentan hacer oír sus pensares y sueños, y es en muchos casos la voz que nos dice que otros mundos son posibles (Corrales y Hernández, 2010:5).

Ya para los años 90, la comunicación alternativa, desde lo teórico, comenzó a ser definida por lo que no eran más que por lo que realmente mostraban, es decir, siempre se tenía como base para su concepción a los medios masivos de comunicación; entonces, si los medios masivos de comunicación eran verticales, los alternativos eran horizontales, si los masivos eran hegemónicos, los alternativos eran contestatarios; si servían a las élites, los otros servían a las comunidades y así consecutivamente (Navarro, 2010:34).

Esta comunicación comienza a ser nombrada entonces de diversas formas, recogiendo para su nombramiento más de 45 maneras de hacerlo, entre las más difundidas se encuentran; medios comunitarios, medios alterativos, marginales, participativos, de contrainformación, paralelos, populares, libres, disidentes, de resistencia, piratas, clandestinos, autónomos, jóvenes, radicales, ciudadanos, underground, la ―otra‖ y micro – medios (Navarro, 2010:34).

A la comunicación alternativa se le ha atribuido la capacidad de informar desde la otra cara u otra perspectiva (creyendo que la hay), diferente a la de los medios hegemónicos de comunicación, utilizando para ello, la participación de la gente, su voz y su pensamiento. En tanto pueden participar de ellos toda la comunidad, es decir, es allí donde convergen las voces de los campesinos, niños, niñas, amas de casa, jóvenes, indígenas, estudiantes, obreros, entre otros. Quienes han sido vistos por los medios tradicionales y el Estado como meros consumidores, pero

47

que al día de hoy, se han convertido en sujetos participativos, dueños de su realidad y cambio social a través de la narración de sus vidas, de su comunidad y quizás del mundo (García, 2006:1). Según Jeanine El‘Gazi (Citada en García, 2006:2), Colombia es unos de los países más avanzados en cuanto a legislación de medios de comunicación se refiere, pues se le da reconocimiento y aceptación desde la Constitución Política de 1991, en el artículo 20, en el que se estipula que las personas tiene la libertad de expresar, difundir, opinar, informar y recibir información que sea veraz e imparcial. Al mismo tiempo se tiene derecho a fundar sus propios medios de comunicación que no deben ser expuestos a la censura, de forma tal, que se expresen en ellos sus propios discursos y sus sueños.

A la comunicación alternativa se le han atribuido varias características, que hacen de ella el medio idóneo para que las comunidades expresen su sentir frente a las problemáticas sociales que los aquejan y a partir de allí encontrar, desde sus propios pensamientos, la solución a estos. Estas características serán retomadas desde los postulados de Hilda Gabriela Hernández y Fernanda Corrales García (2010: 7-8):

a)

Propósito, Razón de ser: Nace de una necesidad social ya sea política, económica,

ambiental, educativa, ideológica, etc. Que busca cambiar las circunstancias actuales, llevando a la movilización social, cuyo propósito es promover e incentivar ideologías en los que los interesados, es decir, la comunidad, puedan manifestar libremente su percepción frente a la realidad social. Comúnmente, los medios alternativos son utilizados para controvertir, ampliar, aclarar o mejorar la información transmitida por los medios masivos de comunicación. Dentro de estos también se permite la controversia y el debate entre sus mismos integrantes.

b) Objetivo: Buscan la concientización social por medio de la participación y el empoderamiento de quienes participan, y al mismo tiempo generar la retroalimentación entre el medio creado y la audiencia de una forma continua, de tal manera que permita, la construcción y deconstrucción de la verdadera realidad social.

48

c) Mensaje: Su mensaje cambia de acuerdo a las circunstancias que estén enfrentando una comunidad. Pero por lo regular, éste difiere en forma, función, contenido y elaboración al de los medios hegemónicos de comunicación; pues desde éste medio, se encierra la mirada propia de la comunidad no la de ciertos grupos de poder

d) Organización: Su organización depende de la comunidad que los articula, toda población tiene derecho a hacerlo. Y en su producción, control y difusión pueden participar todas las personas que así lo consideren, sin detrimento o limitantes profesionales, todas las apreciaciones son importantes para estos, es por ello que la han denominado, una organización de tipo horizontal y democrática. e) Enfoque: ―Su enfoque

puede ir de lo local a lo global, dependiendo del contenido que

este exponga. Muchas veces los medios alternativos surgen de la necesidad de expresar una realidad social específica y local, pero con el paso del tiempo son capaces de evolucionar

a expresiones más globales, las cuales encierren causas más generales, como la

lucha contra el neoliberalismo‖ (2010:8).

f) Financiamiento: Sus fuentes de financiamiento son diversas y pueden ir desde fundaciones, organizaciones sin ánimo de lucro, e instituciones, hasta su autofinanciamiento, es decir, la misma comunidad la financia. Lo único que tienen en claro para su sostenimiento, es que nunca sus fines serán comerciales Entonces siendo la comunicación alternativa una iniciativa y creación de los mismos miembros de una comunidad, es sólo para su uso y no para el beneficio de otros, además de ser un medio de fácil acceso y participación para todos por su bajo costo y mantenimiento. Permite además la construcción de comunidad y tejido social, claro está, siendo utilizados de una manera idónea. (Alcaldía de Medellín, 2006:4)

Otra de la virtudes que poseen estos medios de comunicación es la de permitir la retroalimentación, que en definitiva no es más que la comunicación asertiva, es decir, que las y los participantes de la comunicación sean receptores y emisores de información para que puedan

49

transformarla, abriendo todo el abanico de posibilidades, que los lleve a dimensionar la información y adaptarla a su entorno. Caso contrario el que presentan los medios masivos de comunicación, pues éstos sólo proyectan la información en un solo sentido, sin producir o recibir respuesta del receptor, es decir, no hay comunicación, y solo se da el proceso de informar (Alcaldía de Medellín, 2006:4).

Para Germán Rey (citado en Alcaldía de Medellín, 2006:4): ―los nuevos movimientos sociales y las minorías demandan ser reconocidos antes que representados, es decir, hacerse visibles en su diferencia así, el papel de los medios en la creación del espacio público pasa por la visibilidad de actores y temas, pero sobre todo por la circulación de puntos de vista, por la articulación de la libertad de información con los otros derechos fundamentales por la ampliación de las fuentes y el ingreso de la ciudadanía a la producción de la información. Para Rey -el paso de consumidores a ciudadanos dibuja concretamente las exigencias públicas de los medios-, en tal sentido, los medios de comunicación y otras herramientas comunicacionales que penetran la vida cotidiana de los ciudadanos y ciudadanas deben utilizarse -como estrategias para promover procesos de diálogo, redes de conversación, intercambios de mundos simbólicos y expresivos que generen capitales axiológicos comunes, ayudando a construir el nosotros que toda sociedad requiere-‖.

Los medios alternativos de comunicación no son solo posibilidades que están al alcance de toda la comunidad que quiera fortalecer la comunicación entre sus miembros, sino también estrategias de visualización y empoderamiento de sus propias realidades. Se les denomina ―alternativos‖ porque de alguna forma, son alternativas frente a los medios de información masivos como la televisión, la radio y la prensa, que no están a nuestro alcance por las exigencias técnicas y económicas que pueden llegar a representar (Alcaldía de Medellín, 2006:5).

Los medios alternativos más comunes y de más fácil acceso son los escritos, como: la cartelera, el volante, el boletín, el periódico comunitario, el periódico mural y el comunicado de prensa. También existen las emisoras comunitarias, canales televisivos barriales, vallas, hasta líneas telefónicas y páginas web para uso de determinada comunidad.

50

―Existen otras alternativas que permiten fortalecer la comunicación y son las que podemos utilizar para difundir mensajes a las personas a la vez que propiciamos un encuentro entre ellas. Estas pueden ser las obras de teatro, la proyección de películas, la realización de festivales de poesía, de baile o de canto y otras expresiones socioculturales propias de cada comunidad. En toda ellas podemos compartir información que sea de interés común, a la vez que propiciamos la interlocución y la convivencia en el encuentro físico de todos‖ (Alcaldía de Medellín, 2006:6).

La comunicación alternativa, se puede entender entonces; como una expresión democrática, participativa, concientizadora, constructora de sociedad; que busca en su ejercicio de coocreación, plantear y mostrar las verdaderas realidades sociales

que aquejan a ciertas

comunidades y al mundo, para así intentar construir personas y sociedades libres. Teniendo siempre como fin último, la transformación de la sociedad, y con ella la equidad para todos. Esta comunicación alternativa es “respuesta

y

resistencia

implícita

al neoliberalismo y al

imperialismo cultural, personificando la esperanza como constructores de sociedades más sanas, más justas, plurales y tolerantes, en la que todo individuo tenga cabida” (Corrales y Hernández, 2010:24-25).

3.2. Medios Ciudadanos De Comunicación:

Los medios ciudadanos de comunicación, son una nueva propuesta de la doctora Clemencia Rodríguez, para nombrar lo que se ha denominado comúnmente como medios alternativos, populares, de Contrainformación, entre otros. No resulta igual hablar de uno u otro, pues los medios ciudadanos le apuestan a procesos de producción simbólica, donde la gente pueda designar, pero también explicar el mundo que los rodea en sus propios términos, donde se les permite ser los corresponsales, los actores, los interlocutores de su propia comunicación e información.

Esta creación propia de su realidad, implica que en su entramado se creen imágenes, códigos, signos que le permite identificarse con el otro, ganando identidad, una identidad que no es impuesta por otro externo; implica transformarse en el narrador de su propia historia, con su

51

propia voz, donde reconstruye un autorretrato de su cultura y comunidad para que sea conocida por el público en general, es decir, para que sea puesta en la arena de lo público y poder observar allí su comportamiento.

Producir uno mismo sus productos mediáticos implica tener la oportunidad de crear las propias imágenes de sí mismo y del entorno; implica poder recodificar la propia identidad con signos y códigos elegidos por uno mismo, irrumpiendo así en la aceptación pasiva de identidades impuestas por sujetos externos; implica convertirse en el relator de la propia historia y recobrar así la voz propia; implica reconstruir el autorretrato de la comunidad y sus culturas; implica explorar las posibilidades semánticas infinitas del propio cuerpo, del propio rostro, para crear expresiones faciales (una nueva codificación del rostro) y lenguajes no verbales (una nueva codificación del cuerpo) nunca antes vistos; implica sacar los lenguajes propios de su escondite habitual, para ponerlos en la esfera pública y ver cómo se comportan, cómo derrotan otros lenguajes, o cómo son derrotados por ellos. Lo que importa es que, por primera vez, los tímidos lenguajes propios, aquellos que se usan para lo familiar y lo privado, participan en la arena de lo público, de los lenguajes y el discurso (Rodríguez, 2009:17).

El surgimiento del término ―medios ciudadanos‖, nace de la necesidad teórica de ―superar los esquemas y categorías binarios que tradicionalmente se usan para analizar los medios alternativos‖ (Rodríguez, 2009:19). En tanto los medios alternativos suelen ser definidos en base a lo que no son, es decir, siempre se tiene en cuenta los medios masivos de comunicación para definirlos, entonces los medios alternativos son; no comerciales, no institucionalizados, no profesionales, no verticales, no hegemónicos, entre otros. Mientras, el término ―medios ciudadanos‖ se definen con base en lo que pueden generar, crear, organizar: procesos de transformaciones y cambios de quienes participan de ellos. Además, el concepto de ―medios ciudadanos‖ se aleja de la definición binaria y reduccionista de poder, según la cual el panorama mediático está habitado por los poderosos (los medios dominantes) y los que no tienen poder (los medios alternativos). En vez de limitar el potencial de los medios alternativos a su capacidad para resistir los grandes conglomerados mediáticos, el concepto da

52

cuenta de los procesos de empoderamiento, concientización y fragmentación del poder que resultan cuando los hombres, las mujeres y los niñas/os tienen acceso a y se reapropian de sus propios medios. (Rodríguez, 2009:20)

Es así, como se asume que los medios ciudadanos apuntan al cambio y la transformación de situaciones sociales y de quienes participan de ellos; por medio de procesos argumentativos, el diálogo y el reconocimiento de los otros como interlocutores de su realidad, que persiguen el cambio social. Otorgándoles a estos participes, una resignificación de su estatus, es decir, pasan de ser meros espectadores de su contexto, a ser los propios protagonistas de su vida (Navarro, 2010:35).

Pero esta comunicación, ligada al cambio social, supone unas condiciones de equidad, correspondencia y apertura. En tanto, la participación está dispuesta para todo aquel que quiera expresar, desde su pensamiento, el mundo que desea. Así pues, las personas que hacen parte de éste tipo de comunicación se definen como ciudadanos políticos capaces de expresarse, mostrarse, ser escuchados sin ningún detrimento, pero con la capacidad de escuchar. “En este sentido, comunicar es construir red, tejido social, interacción e interconexión” (Navarro, 2010:39)

Sin embargo, para hablar de medios ciudadanos habría que hacer hincapié a las teorías sobre democracia radical y ciudadana de la politóloga Belga, Chantal Mouffe y retomados luego por Clemencia Rodríguez (2009:18) en los que proponen el término de “medios ciudadanos” como más adecuado para nombrar los procesos de cambio social y democratización que los medios alternativos hacen posible. Es decir, el término ―medios ciudadanos‖ define los procesos comunicacionales en pro de los cambios y las transformaciones sociales, donde los sujetos hacen parte y construyen por medio de la palabra, el símbolo y su pensamiento; una nueva realidad social. Además, el término ciudadano da más posicionamiento a estos medios en la medida en que los denomina por lo que generan. Por el contrario lo alternativo, es reactivo a los medios masivos comunicacionales, es decir, se le adjudica un estatus menor y por lo tanto, para otros son menos confiables.

53

Así pues, al acuñar el término ―medios ciudadanos‖, buscaba redirigir el análisis alejándolo de cualquier comparación con los medios masivos, los medios comerciales, para concentrarse más bien en los procesos culturales y sociales que se desencadenan cuando las comunidades locales se apropian de las tecnologías de información y comunicación‖ (Rodríguez, 2009:17).

Entonces, Mouffe (citado en Rodríguez, 2009:18) al hablar de ciudadanías, se aleja de las que la definen; como un estatus otorgado por un Estado o por pertenecer a un territorio determinado, ni muchos menos las obligaciones institucionales que se tienen en un país. La reivindicación del término ciudadano, buscado por esta autora, parte de mirar al ciudadano o ciudadana desde sus acciones y del compromiso político que estos tuviesen en su cotidianidad, como si se tratase de una identificación, un tipo de identidad política, que debe construirse, buscarse; no un estatus que es otorgado o negado. Los ciudadanos y ciudadanas son todas aquellas personas que asumen una postura política mediante su participación en prácticas de decisiones cotidianas, y que a su vez, esta cotidianidad está transversalizada por una serie de interacciones sociales y además culturales; es decir, estas prácticas que se tienen cada día con la familia, los vecinos, los amigos, los colegas y otros afines. En tales prácticas, estas personas adquieren ―diferentes porciones de poder —poder simbólico, psicológico, material y político—‖ (Rodríguez, 2009:18)

A partir de la definición de ciudadanía de Mouffe, yo propongo el término ―medios ciudadanos‖ para nombrar los medios alternativos, comunitarios o radicales que facilitan, desencadenan y mantienen procesos de construcción de ciudadanía, en el sentido del término empleado por Mouffe. Así, “medios ciudadanos” son aquellos que promueven procesos simbólicos que le permiten a la gente designar y expresar el mundo en sus propios términos. (…) el poder que tienen las comunidades para nombrar el mundo en sus propios términos se relaciona directamente con su poder para intervenir en acciones políticas (Rodríguez, 2009:18).

Por otro lado, para dar mayor credibilidad a este concepto de medios ciudadanos, Clemencia Rodríguez (2009:19), quien se apoya en las teorías de nuevos movimiento sociales;

54

―conciben el poder y la resistencia como fenómenos estrechamente vinculados a asuntos de reconocimiento de identidad, voz, capacidad de acción y narración, elementos clave de la representatividad política. Según estos enfoques, el poder de resistencia del subalterno no se limita a alinearse detrás de una determinada agenda política. Por el contrario, el poder de resistir se constituye en la capacidad colectiva de articular una visión del futuro, expresada a través de una voz lo suficientemente fuerte para formar parte de la esfera pública y adquirir poder político‖

Dado lo anterior, un medio ciudadano implica: • Tener la oportunidad de crear, construir y moldear las propias imágenes de sí mismo, de su comunidad y de su entorno mediato e inmediato. • Tener la capacidad de recodificar su propia identidad a partir de signos y códigos elegidos por ellos mismos, que permita la irrupción de identidades impuestas por sujetos externos. ―La radio, el video, la televisión, o la fotografía son medios que sirven para reproducir signos, códigos, imágenes y sonidos capaces de contar la realidad en términos propios‖ (Navarro, 2010:40). • Tener la posibilidad de convertirse en el protagonista y relator de su propia historia, recobrando así un lugar y permitiendo que su voz sea escuchada y tenida en cuenta a la hora de las decisiones. Esto permite la reconstrucción de su autorretrato, el de su comunidad y el de su cultura. • Tener la facultad de explorar las distintas e infinitas expresiones corporales a través de sus propias manos, de su rostro; que permitan codificarlas en un sistema de símbolos, en unas categorías no verbales, que permitan mostrar a los demás su realidad. • Tener la ocasión propicia para exponer sus propios lenguajes fuera de su entorno familiar y ponerlos en la arena pública para ver cómo se comportan, es decir, como pueden llegar a derrotar otro tipo de lenguajes o a la vez ser derrotados por estos, con la posibilidad de aprender de ello y reconstruir a partir de sus desaciertos (Navarro, 2010:40).

55

A los medios ciudadanos, también se le pueden adjudicar unas funciones concretas; que van desde asumir un rol de ciudadanía, en el sentido de transformar e intervenir el panorama mediático establecido que los rodea; hasta, desafiar códigos sociales, identidades legitimadas por otros y relaciones sociales mediadas por lo institucional; que llevan a las personas o comunidades influidas por éstas, a ser una parte más de los objetos serializados, cosificados, instrumentalizados y homogeneizados. Caso contrario a lo que busca la comunicación ciudadana; que busca generar en los individuos y comunidades una esfera pública fragmentada que a su vez sea multicultural, conflictual y radical, y que de cómo resultado en ellos, una construcción en comunidad desde la interacción, la discusión y el reconocimiento del otro como aquel que puede ser edificador de su propia realidad social (Navarro, 2010:41).

Asimismo, los

medios

ciudadanos

como

productores de comunicación ciudadana y

edificadores de realidades sociales, ―a través del arte, el folklor, las costumbres, la recuperación de la oralidad, el teatro, el arte y la producción cultural‖ (Navarro, 2010:42), pueden ayudar a subsanar las secuelas dejadas por la violencia armada y Estatal sobre las poblaciones y sus vidas; por medio de la comunicación, como aquella que permite crear procesos políticos diferentes a los establecidos por el autoritarismo, el totalitarismo y el instrumentalismo, como cosificadores de la interacción social. En esta medida, los medios de comunicación ciudadanos, ayudan en los procesos de construcción de espacios comunicativos de las comunidades y para las comunidades, que permitan la interacción, el reconocimiento del otro y la resignificación de su propia realidad social (Navarro, 2010:42) Por lo tanto, los ―medios ciudadanos‖ son aquellos que facilitan la transformación de individuos y comunidades en aquello que Mouffe llama ―ciudadanos‖ y que Martín Barbero define como subjetividades empoderadas, con voz propia. Los medios ciudadanos son emisoras, televisiones comunitarias, iniciativas de internet, todos aquellos medios que abren espacios de comunicación donde hombres, mujeres, niñas y niños aprenden a manipular sus propios lenguajes, códigos, signos y símbolos, y adquieren poder para nombrar el mundo en sus propios términos. Los medios ciudadanos activan procesos a través de los cuales individuos y comunidades recodifican tanto sus contextos como su propia identidad. En últimas, estos procesos mediáticos brindan a los ciudadanos la oportunidad de transformar sus

56

identidades en subjetividades empoderadas, fuertemente ancladas en sus culturas locales e impulsadas por utopías bien definidas (Rodríguez, 2009:19)

3.2.1. El Graffiti Desde la prehistoria el hombre manifestó su arte pintando en las paredes de las cuevas, en las piedras y en los techos. Ésta necesidad se traduce en la necesidad de trascender en el tiempo a través de pigmentos. Sin embargo, el hombre moderno utiliza otras herramientas como el spray para lograr el mismo cometido. Dejar mensajes en lienzos callejeros que podrán ser entendidos por quienes deseen ir un poco más allá considerando al graffiti como una manifestación, sino artística, al menos visualmente atractiva. Rodríguez y Días, 2001:7

La aparición del graffiti en la historia del hombre es bastante amplia, porque desde que el hombre existe vio la necesidad de comunicarse ante otros, en un inicio, por medio de garabatos o dibujos, que le permitiera expresar lo que podía decir en una palabra o una idea como elemento abstracto de su pensamiento concreto, actualmente, por medio de aerosoles, intentan mostrar este mismo pensamiento pero ya con una postura ideológica y política que pretende revelar a los demás lo que está pasando en el mundo. Ellos, siempre han buscado un soporte externo que les permitiera comunicarse en situaciones informales con los demás; es decir, utilizaron los muros, piedras y hasta montañas, como ―elemento expresivo y comunicacional para dejar testimonio de sus pasos‖ (Gándara, 2002: 512) y de lo que viene aconteciendo en su realidad.

La palabra graffiti proviene entonces de las inscripciones e incisiones hechas en diversas partes del mundo con materiales como el carbón y el grafito que eran muy comunes en aquella época (de ahí deriva su nombre). En tanto, toda inscripción fue hecha en espacios públicos ―no autorizados‖ para tales acciones. ―Los elementos técnicos a emplear dependen de la tecnología de cada época, que van a la par con lo político, lo cultural y lo económico. Estos escritos con carbones, inscriben sus desbordes en una jerga común, con un lenguaje sugestivo, en forma gratuita y sin censura‖. (Kozak, 2004:35) Dado lo anterior, el graffiti se ha utilizado como un medio para ―expresar inconformidad, amor, arte o simplemente vandalismo. A pesar de los diferentes mensajes que pueda contener tiene un aspecto común: busca que sea visto por la gente. No es una forma privada ni directa de

57

establecer comunicación. Los receptores del mensaje son todos aquellos que lo vean y esto lo vuelve público‖. (Candia y Rodríguez, 2011:4-5)

Entonces, los graffiteros han hecho uso del dibujo y la escritura para plasmar sus

textos,

imágenes, símbolos, marcas de cualquier clase y hasta la firma de su grupo, para expresar su pensamiento. Estos han utilizado una variedad de recursos (pinturas, aerosoles, papelógrafos, clavos, y otros), sobre los muros de la ciudad u otras superficies resistentes (láminas, plásticos, fibras, que por lo regular cubren edificaciones). ―Imágenes, frases, consignas, chistes, caben dentro de esta categoría, y en tanto actividad humana, sus diversas manifestaciones acusan variedad de motivaciones —expresivas, de comunicación política, de demarcación territorial— y de formas de producción: individuales o colectivas, más o menos sistemáticas o espontáneas‖ (Sandoval, 2002: 4).

Si bien los graffitis están en una superficie, cualquiera que sea, es porque algún sujeto decidió hacerlo, de ahí que el graffiti se convierte en una intervención y producto de la acción de un determinado sujeto o sujetos sociales. Dándole una nueva perspectiva que lo lleva a cumplir distintas funciones, claro está, que narra la motivación o motivaciones de sus autores, que posteriormente surgirán y permitirán lecturas33, haciendo de estos un instrumento de ―comunicación o como canal de expresión simbólica‖ (Sandoval, 2002: 6)

Estas motivaciones de los sujetos, surgen desde diferentes ámbitos (político, religioso, social o cultural), que van de la mano con su condición social particular, remitiendo tanto a identidades como a intereses de diversa índole y particulares. Estos graffitis, por lo regular están reforzados por un fuerte elemento visual pasando a ser parte de ―las imágenes a través de las cuales sus habitantes construyen sus propias representaciones, contribuyendo a producir el texto urbano, la realidad de la ciudad, material y simbólica. Se trata de una práctica significativa que interviene, (re) produce y construye la urbe, instalándose material y simbólicamente sobre el cuerpo urbano‖ (Sandoval, 2002: 7)

33

Estas lecturas pueden ser positivas o negativas dependiendo de quién lo lea y del contexto donde se encuentre, además de sus posturas políticas o ideológicas.

58

Históricamente, esta construcción del cuerpo urbano se viene dando en las ciudades desde los años sesenta, identificando en el mundo occidental dos movimientos principales que impregnaron en la memoria de la gente, un momento crucial de cada una de las ciudades donde se vivió.

El primero de ellos hace alusión al graffiti que se desarrolló en mayo de 1968 propiamente en París (Francia); era como una clase de movimiento dirigido por estudiantes universitarios liderados por Daniel Cohn-Bendit, que buscaban tras sus consignas impresas en las paredes de este país; una mayor libertad individual, social y política, además, de ir en contra de la sociedad de consumo y el desempleo que se vivía en esos momentos. A este movimiento estudiantil, se sumó luego la clase trabajadora y los sindicalistas que conformaron masivas huelgas, que se fueron multiplicando, hasta desencadenar un levantamiento popular a nivel nacional y continental. Los graffitis impresos en los muros de parís, fueron inscritos por distintos grupos radicales (trotskistas, anarquistas, socialdemócratas, marxistas, situacionistas, etc.) en contra del gobierno de Charles Gaulle, que han pasado a la historia como el mejor símbolo de la revuelta de ese mayo francés. Esto es corroborado por Beatriz Sarlo (Diario la Nación, 1998), quien dice: Las consignas del Mayo francés han alcanzado una clacisidad incomparable. Traducidas a todas las lenguas, mantiene hasta hoy su potencia sugestiva como condensación poética del deseo revolucionario, y tienen un aire de familia con el rechazo absoluto que luego formará parte de otras tribus de la cultura juvenil.

El segundo de ellos hace alusión al graffiti Hip – Hop, asociado a la ciudad de Nueva York, que surgió en los albores de los setenta como un instrumento de expresión del movimiento cultural contra la violencia, la droga y el racismo ―Universal Zulu Nation‖ creado por el pionero en Hip – Hop de África Bambaataa en 1973, quienes ofrecían una alternativa diferente ―pacifista‖ a las otras pandillas que controlaban la mayor parte de los barrios marginales de Nueva York, que después de la formación de la Universal Zulu Nation, empezaron a parecer en estos lugares unos ―rayados‖ altamente elaborados, que manejaban unos códigos y se hacían complejos para quienes los quisieran leer. (Sandoval, 2002:11) Los graffitis realizados por este movimiento eran hechos con pinturas de diversos colores en espray que los hacía diferentes al resto y reconocidos por

59

ellos mismos. Éste movimiento de baile y graffiti, luego de su aparición en Nueva York, en 1980 llega a Francia, posteriormente a Alemania y luego a nivel mundial.

Luego de estos dos movimientos occidentales, que se catalizaron a nivel mundial, se ha reconocido una gran influencia del graffiti en las ciudades latinoamericanas con varias particularidades que van desde los contextos específicos de estas ciudades hasta sus culturas, mostrando una gran variedad de pensamientos y de expresiones que dimensionan diversas realidades en los muros de estas ciudades y que justifican de algún modo la lectura de estos graffitis. Sin embargo, ―se ha señalado que los graffiti del tipo que proliferaron en las ciudades latinoamericanas en los años 60 y 70 tenían un carácter eminentemente político e ideológico, a diferencia de los graffiti que se extendieron en los 80 y 90, más bien de corte expresivosimbólico‖ (Sandoval, 2002:6).

Beatriz Sarlo (Diario la Nación, 1998), así lo reconoce:

El Mayo argentino tuvo lugar en 1969, un año después del francés; un año antes, en 1967, había muerto el Che comandando un movimiento guerrillero. Estas dos fechas enmarcan al Mayo francés y lo convierten en el volante de un tríptico formado por la revolución campesina y juvenil iniciada en Cuba, la revolución estudiantil de Francia, la insurrección obrera y estudiantil del Cordobazo. Las tres fechas quedan unidas imaginariamente por la juventud de sus protagonistas. [...] Es lo que se llama un clima de época. Ese final de la década del 60 fue un tiempo de síntesis arrolladoras

Entonces en los sesenta se dio un contexto que permitió localizar ese momento particular del graffiti en Latinoamérica, que estuvo marcado por movimientos revolucionarios de estudiantes y de obreros que buscaron escenificar en los muros de las ciudades sus proyectos políticos y utópicos. En este período se habría producido según Antonio Cornejo (1994:12), sus literaturas particulares donde era el ―tiempo de la ‗nueva narrativa‘, de la poesía conversacional, del teatro de creación colectiva, pero también de los himnos callejeros y los graffiti que pintaban de esperanza todas nuestras ciudades‖

60

Posteriormente, Armando Silva, considera una tercera etapa del graffiti, como un nuevo movimiento en el mundo contemporáneo occidental, mostrando como desde los 80 se habría desarrollado un tipo de graffiti con una dimensión más lúdica, plástica e irónica que la que se veía anteriormente que era de un corte más revolucionario, político e ideológico. Y que éste graffiti se desarrolló propiamente en ciudades como Buenos Aires (Argentina), Sao Paulo (Brasil), Asunción (Paraguay), Lima (Perú), Caracas (Venezuela), Santiago de Chile y México. Silva argumentó además, que esta nueva forma de graffiti jamás había perdido de vista la denuncia política ni la carga ideológica que se había presentado en América central de ese entonces (Silva, 1989:7)

A partir de los anteriores argumentos y de sus estudios sobre graffitis en América Latina, Armado Silva, ha propuesto una teoría en la que plantea que el receptor del graffiti sería el ciudadano, y si el receptor es el ciudadanía terminaría cualificándose, el graffiti, como público en la medida en que su exposición a la mirada de esos otros ciudadanos, lo hace de éste modo. Convirtiéndolo al mismo tiempo en una operación colectiva, es decir, que no se dirige solamente a un ciudadano individual, sino a toda la ciudadanía que se encuentra inserta en un territorio determinado

Aquello que especialmente nos interesa como problema de la mirada sobre el graffiti es, precisamente, la relación con lo que muestra, lo que se representa en el escenario graffiti, aquello inquietante y siniestro, que puede asimilarse a lo obsceno y prohibido. Ver lo obsceno, aquello socialmente restringido, por principio, al campo de la visión, ya por sí mismo es chocante, pero ver lo obsceno en calidad de provocación pública, como exhibición para todos los ojos ciudadanos, complica aún más el ejercicio visual y lo hace una operación colectiva (Silva, 1987:68).

Silva, además muestra como el graffiti se convierte en una estrategia de gran impacto social o ciudadano que busca no solamente chocar y provocar al espectador sino concientizarlo del mundo ―real‖ frente al mundo ―creado‖ por los medios de comunicación, llevando esto a controvertir el orden establecido y ha desideologizarse de esa cultura dominante.

En

principio,

el

movimiento

semántico

del

graffiti pretende

el

impacto

ciudadano, busca chocar al espectador-observador, respecto a aquello que los

61

otros circuitos de comunicación 'oficial' lo tienen cautivado; por esto: el registro de enunciación graffiti se propone como descautiverio de la ideología dominante (Silva, 1987:70).

De aquí lo que el autor Marcelo Meléndez Peñaranda, comienza a identificar como el graffiti contracultura o en contra de la ―cultura oficial‖, que es actual y que va de la mano con las resistencias a los valores de la sociedad imperante. Puntualmente Meléndez describe a la contracultura34 como:

una manifestación que se generó como opción y, en su marginalidad, como añadidura de la cultura preponderante, colectivamente preservada y endosada por reducidos grupos sociales, los cuales en su momento han sido absorbidos por el sistema, que los mimetiza convirtiéndolos en formas inofensivas (domesticación cultural). (Meléndez, 2007:87)

Meléndez además dice, que en tanto el graffiti es contracultura, al mismo tiempo es cultura de resistencia a las ideologías de la sociedad hegemónica. Para explicarlo, el autor retoma del pensamiento de Pierre-Charles, quien argumenta que la resistencia está directamente vinculada a la historia del sujeto que lucha día a día para no ser ni sentirse subordinado drásticamente a una cultura ajena, no solamente desde lo particular sino también desde lo oficial, hasta que éste se permita alcanzar cierta autonomía y reafirmación personal. Todo lo anterior apunta entonces, a que la contracultura existe constantemente en contextos donde el sistema cultural está determinado por la relación dominante – dominado, convirtiéndolo en una lucha hegemónica (Meléndez, 2007:87).

Armando Silva aunque no lo denomina graffiti contracultura, si argumenta la acción del graffitero como una de las expresiones que utiliza el hombre para ir en contra de los mecanismos

34

José Agustín Ramírez, identifica la contracultura como: una continuación de pensamiento y expresión cultural, familiarmente juvenil y colectiva, que extralimita, resiste, se aparta, se enfrenta o trasciende la cultura institucional. Todo lo institucional se da a entender como cultura dominante, regida, adquirida y con permutas para que nada cambie, muchas veces irracional, generalmente contractual, deshumanizante, que refuerza al status quo y ahoga, si no es que destruye las posibilidades de una expresión auténtica entre jóvenes, además de que estimula la opresión, la represión y la explotación por parte de los que ejercen el poder. (Citado en Meléndez, 2007: 88)

62

de represión (Sandoval, 1992:10). En tanto, otros autores, revelan que estas acciones por lo regular van en contra de un poder central sea éste político, económico e ideológico; dándole esta interpretación, el graffiti podría definirse entonces como; ―una de las maneras de recobrar la palabra, una práctica popular y creativa de agrietar los discursos monolíticos del poder y las instituciones‖35

Este mismo autor, señala además, que el graffiti como escritura se instala en el espacio público, señalando éste, no sólo como el primer formato de manifestación, los muros de las calles, sino también hace alusión a los baños públicos, los muros de entidades oficiales, las sillas del transporte público, los pupitres y las paredes de las universidades y colegios, entre otros. Identificado estas locaciones como espacios comunes al espacio público donde habitualmente transita la gente y lo puede notar y también, porque estas son locaciones que no representan responsabilidad o propiedad de uso y por lo general no se transgrede la norma, caso diferente a los muros de entidades privadas o muros ―francos‖ que poseen un límite de propiedad y que quien pinte sobre ellos, estaría trasgrediendo la ley (Meléndez, 2007:88).

El espacio público ha sido utilizado entonces innumerables veces por aquellos que quieren dar a conocer lo que está pasando en su mundo, en su realidad. A partir de allí, no sólo quieren informar, sino mostrar su descontento a todos los ciudadanos, en este caso, sobre las formas hegemónicas de poder que están transgrediendo constantemente los derechos, las voluntades y las voces de los pueblos. Éste es el caso común de los movimientos sociales, las acciones colectivas, agrupaciones, agremiaciones y particularmente del movimiento estudiantil, que se la ha venido jugando desde los sesenta con esta forma particular de informar y concientizar a la ciudadanía en general de lo que viene aconteciendo.

Sin embargo, actualmente, se le han venido presentando diversas problemáticas a la hora de informar por este medio, ya que se la tienen que ingeniar para desviar la mirada y neutralizar el constante ataque del sistema de signos políticos y comerciales, señales de tránsito y otras formas

35

Sin autor, “Nuestra historia fragmentada” En: Graffiti http://www.guegue.net/graffitti/historia.html. consultada 15 de septiembre de 2012.

en

América.

[Online]

63

semánticas que quieren perturbar el o los mensajes de los otros, intentando cambiar su significado y subordinar a los demás a esta lógica. Dándose entonces, unos conflictos entre las fuerza sociales: ―entre el mercado, la historia, el Estado, la publicidad, y la lucha popular por sobrevivir‖ (García Canclini, 1992:314-315).

En tanto, la búsqueda de formas distintas de intervenir y tratar de solucionar los conflictos, otorga a este tipo de expresiones artísticas un lugar muy notorio en lo que a desenvolvimiento político se refiere; es decir, estas estrategias artísticas visibilizan más que las mismas acciones sociales, llevando a destacarse con ellos también aspectos teatrales y ―rituales de lo social‖ Cuando no logramos cambiar al gobernante, lo satirizamos en las danzas del carnaval, en el humor periodístico, en los grafitis. Ante la imposibilidad de construir un orden distinto [...] la lucha entre clases o entre etnias es, la mayor parte de los días, una lucha metafórica. A veces, a partir de las metáforas, irrumpen, lenta o inesperadamente prácticas transformadoras inéditas. (García Canclini, 1992:326)

3.2.2. El Performance El cuerpo habla incluso cuando uno no quiere que hable. Pierre Bourdieu La estética corporal y las intervenciones en el propio cuerpo, son formas de hablar de algo más que un gusto estético, dialogan sobre miedos, esperanzas, hablan de luchas, de creencias; los jóvenes por medio de su cuerpo, parecen haber encontrado un nuevo idioma. Rossana Reguillo

La práctica de pintar o transformar el cuerpo, ya sea transitoria o permanentemente en los grupos humanos, desde la prehistoria36, ha significado una cierta necesidad por parte de los sujetos de asemejarse o parecerse a los demás con los que interactúa en su ámbito social, en un deseo por

36

Uno de los vestigios más antiguos del ejercicio milenario del tatuaje fue el hallado en los Alpes italianos en 1991, donde un cazador conservado en el hielo desde la época neolítica ya mostraba marcas en su piel (específicamente en su espalda y rodillas), en la cual se lograban distinguir gran parte de los 55 tatuajes que cubrían su cuerpo. (López, 2007:105)

64

sentirse agradable e identificado con ese otro, pero también diferenciado y notorio, haciendo de sí, un sujeto aceptado y comprendido por esos otros que han practicado tal experiencia y que comprenden sus códigos y sus símbolos. “Tal apreciación la podemos observar ya en las comunidades humanas más antiguas, las bandas, las cuales utilizaban la modificación corporal como un nexo estético, cosmético y político, con la finalidad de reconocerse entre sí a nivel grupal” (López, 2007:105).

Con el paso del tiempo el pintarse el cuerpo o generar cambios en él, fue adquiriendo un estatus social, que era anhelado y respetado por el resto de la tribu o grupo social al que se pertenecía. De acuerdo a cada forma o color en la pintura de estas personas, eran las funciones y las relaciones entre ellos. Este arte en el cuerpo fue aprovechado posteriormente por la clase dirigente para ―inculcar ideas religiosas de obediencia y santificar el status quo‖ (Harris, 2001:399). Caso disímil al actual, en donde el arte de pintarse el cuerpo es visto como una forma de transgredir la norma y poner en evidencia el monopolio que maneja la hegemonía. Pero al mismo tiempo, está siendo utilizado para ―hablar de dramas sociales y prácticas corporales‖ (Taylor y Fuentes, 2011:7). Las expresiones artísticas no todas, por supuesto, al ―retirarse‖ de la esfera tradicional de lo público, configuran órdenes alternos y su alcance es un principio de resistencia; por lo tanto, tienen un carácter político en cuanto plantean un conflicto de poder, cuestionan la hegemonía (Restrepo, 2006: 54).

Este fue quizá el surgimiento del body Art, que prontamente derivó en el performance, identificando este como una especie de ―arte en vivo‖ o ―arte en acción‖ (Taylor y Fuentes, 2011:8) que nació en los sesenta y setenta como una forma que permitía romper los lazos tanto institucionales, económicos y elitistas que excluían a ciertos artistas de lugares comunes para el arte como; galerías, teatros y espacios donde se comercializaba este. Convirtiéndose así, en una estrategia artística que iba en contra de poderes como las instituciones, el comercio y las élites.

El performance, antinstitucional, antielitista, anticonsumista, viene a constituir una provocación y un acto político casi por definición, aunque lo político se entienda más como postura de ruptura y desafío que como posición ideológica o dogmática. El

65

performance, como acto de intervención efímero, interrumpe circuitos de industrias culturales que crean productos de consumo (Taylor y Fuentes, 2011:8).

Otros autores, también argumentan su surgimiento en esta época, por ser un período donde se estaba erigiendo una aguda convulsión de la sociedad moderna. En tanto, residió en el fortalecimiento y afianzamiento de la música popular y la televisión como ―fenómenos de masas‖ (Sedeño, 2010:3), así como las revueltas del mayo parisiense en el 68 y otras a nivel mundial que estaban relacionadas con la necesidad sentida y emergente de identidades sexuales y raciales que hasta el momento habían sido silenciadas. Dado este punto, el performance nace entonces, ―como arte para la resistencia, tendente a lo político, y se aleja del debate sobre individuos aislados y las reflexiones sobre el talento artístico‖ (Sedeño, 2010:3). Emergiendo con esto, una nueva mirada del arte en acción, es decir, a partir de aquí y por los últimos cincuenta años, el performance, se ha caracterizado por la utilización del cuerpo, como una herramienta primordial para la construcción de identidades sexuales, sociales, étnicas y políticas, como símbolo de la relación con el otro u otros en sociedad junto a esa emergencia del cuerpo como lenguaje y elemento artístico. Éste arte en acción, a partir de allí, podía surgir en cualquier lugar y momento, el performancero37 sólo necesitaba de su cuerpo, sus palabras y la suficiente imaginación para hablar y actuar ante cualquier público, que se encontraría sorprendido e interpelado al ser y hacer parte de esta acción. El artista en este momento u otro no necesitaría, en ningún caso, de textos, editoriales, directores u otros actores (acompañamiento técnico), ni de espacios especiales (Teatros, escena, etc.) para realizar su acción, simplemente necesitaría de su cuerpo y la presencia de un público que estaría expectante a lo que allí pueda suceder (Taylor y Fuentes, 2011:8).

Eloy Tarcisio, citado en Cruz Velásquez (2004:12), adjudica al performance una filosofía del contacto directo, es decir, ―un lenguaje de signos y símbolos complejos que se relacionan con el

37

Uso performancero/a para referirme a gente que hace performance art o arte en vivo, aunque también hay mucha flexibilidad en este término que se puede usar para hablar tanto de gente que hace cabaret como de un agente social que usa performance para su propuesta o auto-presentación (por ejemplo, el presidente de la República es un gran performancero). Jesusa Rodríguez, brillante performancera mexicana, juega con la palabra al referirse a los artistas y los públicos de performance como “performenzos” (Taylor y Fuentes, 2011:8).

66

espectador de forma inmediata y que, al enfrentarse el artista y el espectador provoca una reacción esperada pero desconocida para ambas partes” como si se tratara de una conversación de tú a tú, donde el performancero tiene la capacidad de tener un contacto directo con el espectador, con la posibilidad de interactuar con él al mismo tiempo y hacerle ver lo que él quiere y entender lo que el artista quiere que entienda, transmitiendo un mensaje que quedará en la memoria de éste por la forma en que fue asimilado.

Para el caso concreto de América Latina, el performance se manifestó de diferentes maneras, en un inicio ―sacando el teatro del teatro‖, luego trasladando el arte de las galerías al espacio público y por último borrando la barrera que había entre actos artísticos y el drama cotidiano de la vida real. Estas propuestas, fueron abanderadas por el chileno Alejandro

Jodorowsky, quién lo

justificó, argumentando que ―el performance, como acción, va más allá de la representación (…) y puede dejar huellas de un acto real‖ (Taylor y Fuentes, 2011:9) convirtiendo todo a su alrededor en un espacio propicio para el arte del performance.

A nivel mundial los sesenta y los setenta fueron años de grandes revueltas y cambios de ideologías y paradigmas, caso análogo a Latinoamérica, donde se presentaron masacres, desapariciones y grandes convulsiones por la lucha de los derechos de los trabajadores y los estudiantes, que llevaron hasta el punto de ser fulminados por medio de golpes militares. Queriendo decir con esto, que la acción del performance, si bien nació en este contexto sociopolítico, también fue permeado por éste haciéndolo una acción incluso de resistencia, pues mientras todos los medios de comunicación radio, televisión, prensa, editoriales, fueron controlados y manipulados por la hegemonía, los cuerpos de los ciudadanos no, quienes en un acto mínimo, por minúsculo que fuera, por medio de sus gestos podían rechazar tales situaciones (Taylor y Fuentes, 2011:11).

Mientras los artistas buscaban formas de interrumpir el espectáculo hegemónico de dominación cultural y política, los intelectuales y estudiantes se rebelaban en contra del militarismo, del racismo, del sexismo de sus sociedades y contra las instituciones identificadas con el poder: las universidades entre otras (Taylor y Fuentes, 2011:12).

67

Igualmente es importante evidenciar que gran parte del desarrollo del performance se debe a la necesidad de resistirse que tienen los artistas, de pertenecer a los grupos de poder, de resistencia en contra de gobiernos de turno, a la sociedad Homogenizante, contra sí mismos por transformarse en monstruos víctimas y partícipes del consumismo y la corrupción. Entonces surge como una manifestación cultural que encuentra en las artes una forma de hacer “crítica a las esferas del poder y del arte convencional, pero a la vez, realiza, una propuesta innovadora y llamativa que explota más allá de sus condición de ser-cuerpo” (Cruz, 2004:16) Como ya se había dicho antes, para que el performance se haga real y visible necesita de su materia prima, el cuerpo, visto no como algo transparente o neutro, sino como materia que ha sido producto y copartícipe de fuerzas sociales que lo permean al igual que lo subjetivo, lo personal. El cuerpo ha sido fruto de nociones de género, raza, clase, sexualidad y de posturas políticas:

Así, es posible pensar que el cuerpo mismo es un lugar político, y que lo político puede tener lugar en el cuerpo, en cuanto el cuerpo es la forma en/desde la cual se gestan modos de sentir y de decir, de ver y de hacer ver las cosas, modos que son a la vez discursivos y no discursivos. Ese conjunto formal que es el cuerpo, a sus modos de decir (se), ver (se), sentir (se) y concebir (se), en un sentido amplio, pertenece al dominio de la estética. La estética tiene que ver con los procesos de formación de la subjetividad, en la medida en que corresponde a la forma de ser de esta y de hacerse ver de esta última (Yepes y Cabrera, 2010:87).

Dado lo anterior resulta, que la estética del cuerpo en la política escapa al ejercicio habitual del poder o a la lucha por obtenerlo, estableciéndose en un mundo personal y una forma específica de experiencia, a través de la cual, se materializan subjetividades. ―Además, las manifestaciones estéticas tales como el performance, la danza o el teatro evidencian la emergencia de nuevas formas de poder, nuevas en el sentido de que antes no habían sido tenidas en cuenta a pesar de que existieran, que se producen y reproducen en contextos no institucionalizados, mediante mecanismos de visibilización de sentidos fundamentados y, en el caso del performance, en la observación directa” (Restrepo, 2006: 54).

68

Ahora bien, el cuerpo ha sido el pre-texto ideal de la obra de arte a lo largo de la historia, ya que ha asumido una considerable importancia en cuanto a la expresión y demostración de sentimientos, pensamientos, temores, ideas, entre otros, en lo público. Sin embargo, actualmente el cuerpo padece una radical transformación en cuanto a lo representativo, es decir, éste ya no busca presentar lo que ya está presente (representación), sino manifestar su presencia tal cual se imprime en la realidad como si se tratara de una esencial desnudez (Taylor y Fuentes, 2011:20).

Siendo de este modo, el performance funciona como un acto vital de transferencia, en la medida en que transmite un saber y este saber es social mediante la memoria y el sentido de identidad a ―través de acciones reiteradas, o lo que Richard Schechner llama “conducta realizada dos veces” [twice-behaved behavior]. Performance en un nivel, constituye el objeto de análisis de los estudios del performance.” (Taylor y Fuentes, 2011:20) Dado esto, varios autores suelen decir que una danza o un ritual es un performance, cuando en la práctica estas actividades, para llevarlas a cabo, cuentan con unas normas o reglas de juego. Mientras, por el contrario, el performance lleva inserto en su ser el romper la norma, transgredirla es la norma del performance. Entonces, el performance es ―una experiencia en la que existe una interacción directa entre el espectador y el creador (…) es una forma de crear creativamente, que surge de la inquietud por transmitir un mensaje, por cualquier modo posible y hacer que el que se enfrenta a esa experiencia reflexione a partir de ese encuentro (…) es una experiencia con iniciativa creadora y, en el caso de esta propuesta, una resistencia a lo que se quiere imponer del exterior hacia el individuo (…) es una experiencia que trasciende el momento en que se haya vivido y en la que se actúa directamente con el que la propone, directa o indirectamente, y el que la recibe. Una experiencia en la que no se diferencia entre el creador y el participante todos se involucran y la crean o la reconstruyen en ese momento‖ (Cruz, 2004:13)

Podemos hablar entonces del performance como una forma de construcción artística que se crea y particulariza desde diferentes contextos de una ciudad, y que en algunos casos, son mirados por los ciudadanos como extravagancias, pero que éstas tienen insertas una creatividad y un constructo de pensamientos contemporáneos desde el arte, que trasciende en lo cotidiano y que

69

busca otras formas de explorar su significado en la realidad desde diferentes contextos. Lo más importante para éste, es la simbolización y el significado que muestra a través de la expresión del cuerpo.

No se puede dejar a una lado el contexto social, cultural y político, que han sido bases para que en cada espacio - tiempo la creación artística lleve impregnada una inquietud por la experiencia de nuevas posibilidades de innovar en lo artístico, que de algún modo permitan exaltar nuevas propuesta, propuestas que a la vez se fueran transformando y desarrollando en la medida que sea necesario hacerlo y de acuerdo con las complejidades y cambios sociales. Esto nos muestra como el arte no es estático, sino que se ―encuentra en constantes transformaciones, encuentros y desencuentros con su condición expresiva, experimental, y por supuesto, con su condición expresiva, experimental y por supuesto, con su condición de manifestación de ideas a través de una serie de canales de comunicación‖. (Cruz, 2004: 14). En otro plano, el performance también se establece como una ―lente metodológica‖ que permite observar, investigar y analizar eventos transcurridos en la vida cotidiana de los sujetos como performance. ―Las conductas de sujeción civil, resistencia, ciudadanía, género, etnicidad, e identidad sexual, por ejemplo, son ensayadas y reproducidas a diario en la esfera pública. Entender este fenómeno como performance sugiere que performance también funciona como una epistemología. Como práctica incorporada, de manera conjunta con otros discursos culturales, performance ofrece una determinada forma de conocimiento‖ (Taylor, García y Muscari, 2005:3-4).

Entonces las formas artísticas que se están presentando como estrategia política desde el movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia, en especial el performance, se configura como una de las formas artísticas de resistencia, que se expone a manera de construcción política de los mismos estudiantes, es lo vivido y lo que se ha venido viviendo por los cambios ocurridos desde el protagonismo en el marco de la reforma a la ley 30 de 1992. Y que tuvieron y tienen la finalidad de aprovechar el espacio público donde se proyectan, como un lugar estratégico para la comunicación ciudadana, vale decir, como un espacio destinado a producir ―una intervención

70

simbólica que resignificará el sentido de lo político y lo comunal‖ (Vich, 2004:2). Pero también en la utilización de este espacio público, definieron su campo de batalla sobre algunos de los soportes imaginarios del país ―y así terminaron por constituirse como prácticas altamente metafóricas acerca de cómo podrían constituirse las nuevas relaciones entre la sociedad civil y el Estado‖ (Vich, 2004:2).

Por todo lo anterior el performance se ha vivificado como forma de respaldar las luchas en los diferentes movimientos sociales del país, que retoman nuevas formas de resistencia desde lo artístico y las diferentes amalgamas del arte, como la lucha violenta que en épocas pasadas fue el protagonista de las movilizaciones por la reivindicación de los derechos desde la izquierda, atrás queda un panorama violento, y la conciencia del estudiante pone en evidencia el empezar a crear desde la curiosidad de la acción en la protesta, la marcha o los plantones, la dignificación de resistencia a través del performance.

Entonces podemos decir que el performance construye el valor político desde cada contexto de resistencia, en este caso en la marchas, la protesta en cualquier rincón de ciudad, donde se destaque el valor imaginario del cuerpo por querer demostrar el desacuerdo, o simplemente el valor de la vida desde el inconformismo estatal .El performance adquiere en la escena de lo artístico la dimensión que construye legitimidad frente a la disparidad política que se vive en el momento por la dignificación de los diferentes derechos.

3.2.3. La Música ―No me pidan poemas de amor, cuando quiero cantar la verdad, es la vida la que hay que enfrentar, yo no puedo esconderla en la flor… El niño que amamanta, en las tetas resecas, de la madre del tiempo, con canciones de lucha, quiero verlo crecer, con canciones de lucha, con canciones de pan, y por menos sufrir le cantaré a los hombres con guitarra y fusil.‖ Alí Primera38

38

Alí Rafael Primera Rossell, músico, compositor, poeta y activista político comunista venezolano. Entre sus principales canciones están: "Casas de cartón", "Abrebrecha", "Mama Pancha", entre muchas otras.

71

La música ha sido clasificada innumerables veces como un medio de expresión universal, se relacionan sus orígenes desde el mismo nacimiento del hombre y sus relaciones con el otro, que hicieron de sus voces un acto comunicacional y al mismo tiempo, una relación con sus culturas.

El hombre desde tiempos atrás, ha expresado o sentido la necesidad de una transformación social, cualquiera que fuera ésta, a través del uso de instrumentos musicales, letras y diferentes cantos, en un inicio, muy rudimentarios y en la actualidad, más avanzados con el progreso de las tecnologías. Es decir, ―las diferentes revoluciones sociales que ha experimentado la raza humana desde

la edad de piedra hasta la vanguardista revolución electrónica que estamos

experimentando en la actualidad; han estado acompañadas de cánticos, trovas, canciones, himnos, poesías musicales y composiciones orquestales que expresan los sentimientos de la sociedad ante estos cambios; y muchas veces hasta han allanado el camino para dar paso a revoluciones necesarias” (García, 2007:1)

La música, desde este punto de vista, de la diferencia social, surge directamente del pueblo, no de la clase dirigente; como unas de las formas de levantar sus voces de forma audible, sonora y a la vez significativa, intentaban mostrar su descontento a esta clase dominante, con el único instrumento de producción gratuito, su voz. Mostrando con ella, su necesidad de expresión y su necesidad de cambio social, dándose así una relación entre Revolución y Música. ―Las revoluciones sociales sin música, sin himnos, sin lemas sonoros y de fácil aprendizaje; serían revoluciones sordomudas, que nadie escucharía o recordaría. Pero al escucharse y comprenderlas queda grabada en la memoria histórica de los pueblos‖ (García, 2007:2)

Teóricamente, la música aparte de ser el arte de conjugar sonidos de una forma agradable al oído, también, es un compendio de poesía y literatura (García, 2007:2) que representa a cada cultura, es de ahí, que no pueda darse una definición única de música, pues ésta depende en gran medida, de la connotación que quiera darle desde su seno cada cultura; que al mismo tiempo tiene que ver con las afectaciones psicológicas, sociales, culturales e históricas (Cruces, 2009:67) de quién las interprete. Sin embargo, no debe desconocerse el papel importante que ha jugado en los diversos procesos culturales y políticos a nivel mundial. Pero para conocer como en la práctica social se ha

72

definido esta corriente cultural, es necesario describir su historia desde sus orígenes hasta el día de hoy.

Históricamente la música no tiene muestras fehacientes de cómo fue su surgimiento, sin embargo, se argumenta su nacimiento desde las culturas antiguas que utilizaban primordialmente su voz, luego su cuerpo y especialmente sus manos para producir sonidos y comunicarse de otra forma con las entidades superiores (dioses), hasta el punto de utilizarse para alejar espíritus, enfermedades y pedir la lluvia. Posteriormente empezaron a utilizarse otros instrumentos más tecnificados elaborados con cuero de animales bien tensionados y cuerdas desde diferentes niveles de altura que pudieran garantizar distintos sonidos. Por lo regular estas creaciones musicales, eran transmitidas de generación en generación desde la tradición oral, llevando esto, a que muchos de esos sonidos y peticiones se fueran perdiendo en el tiempo (García, 2007:3)

Se puede decir, que los primeros intentos musicales se dieron en la cultura egipcia, con el surgimiento de instrumentos musicales en el año 2500 (AC). Luego en la Roma y Grecia Antiguas, con la práctica musical meramente vocal, con la ayuda de instrumentos de percusión, cuerda y viento, hacia el siglo V (AC). Posteriormente, se da un salto hacia la era Cristiana siglo V (DC), que trajo consigo los cantos litúrgicos y alabanzas a su Dios que han colonizado el mundo hasta su la actualidad. En la Edad Media florecieron los cantos gregorianos como la manifestación musical más importante de la época (Cruces, 2009:69).

En la música posteriormente, comenzó a identificar la diferencia de clases sociales, que iba de la mano con la intelectualidad, es decir, quienes hacían parte de las élites sociales o clase dominante, quienes además de escuchar música europea, saber de cantantes y de códigos musicales, eran las personas más cultas de la época y por ende intelectuales

Los sectores sociales dominantes representados por la iglesia, el cabildo, las familias patricias y los sectores agrícolas terratenientes, mantuvieron una severa vigilancia y defensa de su capital simbólico y delegaron la responsabilidad de su continuidad y longevidad a la familia.

73

La forma más conocida fue denominada la velada social o tertulia social y a ellas se asistía por rigurosa invitación, eran organizadas por los dueños de casa quienes aprovechaban la situación para exhibir su bienestar económico, cumpliendo así, un tradicional protocolo de ostentación que rigió la vida cultural de la época (…) Las tertulias no sólo eran un encuentro con la música, sus asistentes se encargaban de las letras, eran las tertulias un ámbito de discusión y polémica para las nuevas intelectualidades criollas39.

El origen del canto profano, permitió una ruptura con la sociedad dominante y eclesiástica de la edad media, llevando al mismo tiempo, a un despertar de la conciencia social hacia la expresión libre de sus propios pensamientos, sentimientos y disidencias con esa ―otra‖ clase, quienes se habían convertido no sólo en la clase dominante, sino en los subordinadores del arte de aquella época, que no era más que la expansión y expresión de los intereses de dicha clase (García, 2002:4).

Propiamente en América Latina, el arte de la música ya se conocía desde los indígenas quienes antes de ser colonizados exaltaban en sus composiciones a la mujer amada, a su tierra, a sus dioses de la naturaleza, a los favores recibidos y otros. Sin embargo, después de ser colonizados sólo se escuchaban en sus cantos “la influencia de elementos característicos de la desolación, la barbarie, la tristeza, la necesidad de auxilio y la vivencia de una religión impuesta a la fuerza, con técnicas de dominación que ya muchos conocemos, pero que no tenían otra opción que asimilar y alabar a un dios ajeno, un dios que ni conocían. Estos cánticos demostraban esa revolución interna, silenciosa, pero que fue calando profundamente en los pueblos americanos producto del sufrimiento de nuestros aborígenes a manos del sometimiento de la espada y la cruz europeas” (García, 2002:5)

En la edad moderna, se comienza a ver una forma diferente de cantar o hacer música, muy de la mano con la música de la edad media, pero ésta ya remitida a las revoluciones populares como

39

Video: La música en Mendoza: Expresión de la Cultura de Dominación y Resistencia. Bloque 1. Duración: 9 m 47sd. [Online] http://bdigital.uncu.edu.ar/1844

74

símbolo, imagen y ejemplo de las revoluciones americanas. Ejemplo de ello, es la revolución Francesa, en la cual se entonaban himnos para hacer un llamado popular de unirse a la lucha, reclamar injusticias y pedir victorias. Se da entonces un descontento social, que posteriormente desencadenó los eventos sociales revolucionarios de la edad moderna y la posmoderna con una bandera que los identificó, la música y el surgimiento de ésta desde el ámbito y contenido social revolucionario, que prontamente se convirtió en himnos populares entonados por grandes multitudes enardecidas de población civil (García, 2002:6)

Ya para finales de la década de 1950, surge el germen de lo que ulteriormente sería denominada ―La nueva canción latinoamericana‖, como resultado del despertar político de las poblaciones menos favorecidas en la agudización de los conflictos sociales. Y que sería el instrumento político y artístico para difundir a la población la ideología que habría que cambiar y transformar su realidad en aras de la búsqueda del ―hombre nuevo‖ que reivindicaría las clases socialmente menos favorecidas (Osorio, 1969:139). El origen de la Nueva Canción Latinoamericana40 se da entonces, con el surgimiento de una serie de trabajos musicales que se gestaron en toda América Latina en los años 50 y los 60. Varios autores se refieren a esta generación de canto de protesta social al ―Nuevo Cancionero en Argentina, al Nuevo Canto en Uruguay, a La Peña de los Parra Chilena, a Carlos Puebla y la Nueva trova Cubana, a la Bossa Nova y el Tropicalísimo‖ (Velasco, 2007: 147) que fueron fundados y que después convertido en un movimiento continental de alto impacto por: Atahualpa Yupanqui, Mercedes Sosa y Facundo Cabral en Argentina; Geraldo Vandré, Tom

Jobim,

Giberto Gil, Milton Nascimento, Chico Buarque y Caetano Veloso en Brasil; Víctor Jara, Quilapayun, Inti-Illimany, Violeta Parra y sus hijos en Chile; Carlos Puebla, Noel Nicola, Pablo Milanés y Silvio Rodríguez en Cuba; Amparo Ochoa y Oscar Chávez en México; Tania

40

“Por su parte, la Nueva Canción Latinoamericana nace en un momento histórico de conflictos y de necesidades políticas y sociales. Se erige como canal de reacción y expresión en contra de la dictadura, a favor de los derechos de los ciudadanos, en contra del imperialismo, sobre la base de la sabiduría de un pueblo que es inspiración y, a su vez, baluarte de la identidad que urge ser rescatada. Así, la Nueva Canción Latinoamericana se convierte en un símbolo de consciencia latinoamericana, expresada en la continuidad y consonancia de ideas compartidas sobre el destino que deben tener los pueblos de América Latina. No obstante, la dinámica de este proceso pareciera indicar una necesidad de uniformar las ideas desde arriba, desde la élite intelectual que creía poseer la fórmula ideológica y cultural necesaria para la emancipación del pueblo” (Velasco, 2007:145).

75

Libertad y Susana Baca en el Perú; Alfredo Zitarrosa, Daniel Viglietti y Los Olimareños en Uruguay; Soledad Bravo, el grupo 145 Ahora, Alí Primera y Gloria Martín en Venezuela; entre muchos otros (Velasco, 2007:147). Los años sesenta fueron entonces, el punto inicial de los cambios ideológicos mundiales que marcaron la conciencia social del pueblo y de sus jóvenes, llevándolos a expresar su descontento por medio de la música de protesta en ese cambio de paradigmas que los llevaron a tomar una postura frente a este entramado de revoluciones. Para el caso concreto de América Latina, Cuba en el año de 1959 acababa de dar inicio a su revolución en aras de la esperanza, la libertad y la lucha contra imperio, que para ese entonces, era anhelada y admirada por todos los grupos de izquierda que comenzaban a proliferar en Latinoamérica. En Brasil, se estaba engendrando un proceso de modernización y reformismo que llevaría a cabo un proyecto nacional desarrollista. Situaciones similares se fueron dando a lo largo de toda América Latina, donde comenzaba a darse una innovación en las estructuras económicas y sociales. Estos cambios llevaron a una constante represión, violencia, persecución y censura (Velasco, 2007:142) de los participantes de izquierda y de sus protestas, haciendo que estos buscaran otras formas de expresión para sus descontentos, de ahí que el arte y especialmente la música se convirtieron en un vehículo idóneo para expresar de forma distintas las inconformidades que se venían presentando debido a la imposición de estas nuevas estructuras.

Esta década fue el caldo de cultivo ideológico que movilizó a centenares de jóvenes ansiosos por reformas y revoluciones políticas y sociales, influenciados por los nuevos planteamientos de la teoría social crítica, el

anarquismo,

el

trotskismo,

el

marxismo-leninismo, el nuevo paradigma del estructuralismo y la ―dialéctica de la liberación‖ de Herbert Marcuse, por citar sólo algunas de las ideas que calaron en la juventud. En este contexto, los movimientos contraculturales comenzaron a proliferar sobre la base de múltiples sistemas ideológicos, logrando una admirable capacidad de organización y acción social, sobre todo en el caso europeo. Los sesenta estuvieron marcados por la crítica a las instituciones,

al modo de

producción capitalista y, sobre todo, estuvieron signados por la reacción colectiva frente a un sistema sociopolítico considerado represivo. (Velasco, 2007:142)

76

Para esta misma época, emerge el rock and roll en los Estados Unidos como una nueva forma de expresión contestaría y en contra de los poderes hegemónicos y de producción que estaban llevando a la desigualdad social. Para este entonces, Estados Unidos atravesaba por una crisis social, política y financiera, derivada de las dificultades no resueltas en la década anterior, es decir; de la purga comunista del 46 al 56, la guerra de Corea del 50 al 53 que agravó las tensiones provocadas por la sucesión de la Guerra Fría (guerra por los derechos civiles), la crisis de los misiles en Cuba en el 62 y otras que ubicaron a Estados Unidos como la principal potencia agresora y hegemónica de todo occidente (Velasco, 2007:143).

Sumado al movimiento rock and rollero se comenzó a desarrollar el movimiento contracultural Hippie que defendía la no violencia y condenaba la guerra de Vietnam, y que al mismo tiempo se solidarizaba con grupos socialmente discriminados y oprimidos. Paralelo a este proceso se desarrolla otro tipo de música denominado la Folk Music que estaba marcada por un contenido político más moderado, es como una especie de nuevo canto social, en el que estuvieron medianamente comprometidos activistas políticos como; Jimmy Hendrix, Simón and Garfunkel, los Beatles, Pete Seeger, Joan Báez, Bárbara Dane y Bob Dylan en sus inicios. Los temas de sus canciones patrocinaban los derechos humanos, condenaban la guerra, exaltaban las luchas por la liberación de la pobreza y el hambre y pedían la paz (De la Hoz, 1997:137). ―No obstante, con los años, y debido a las concepciones de la lógica del mercado, este movimiento pasó a ser un mero producto, perdiendo así su carga contestataria y crítica” (López, 1976:13).

El Naciente Rock and Roll, de hecho posee grandes influencias de la música blues y gospell negroide, que provenía de la misma música cantada a escondidas por los esclavos africanos en Norteamérica al hacer sus ritos religiosos y culturales a espaldas de su patrón yanqui; eran protestas alegres, llenas de esperanza e inentendibles por los patronos, estas melodías llenas de ritmo y pasión fueron acogidas placenteramente por el rithm and blues, el funk, el rap, el rock and roll y hasta los mismos ritmos afrocaribeños, cantos de tambores sur americanos y hasta tonadas campesinas (García, 2002:11).

Europa no estuvo distante de este movimiento musical. En el caso europeo también se estaban gestando nuevas formas musicales que buscaban una transformación del paradigma político

77

represivo que aún vivía después de la guerra y que buscaba la igualdad de oportunidades sociales y una mayor democratización de las estructuras que los regían. Ejemplo de esta búsqueda de transformaciones sociales fueron; el Mayo Francés y la frustrada Primavera de Praga en el 68, como formas de inconformidad colectiva, que dieron chispas al surgimiento de manifestaciones musicales que contenían un alto índice de compromiso popular y político, como fue el caso de la Nueva Canción Catalana, abalada por Joan Manuel Serrat; y a mediados de ésta década, se gesta la Canción del Pueblo, que estuvo representada por Elisa Serna, José Luis Leal, Ignacio Fernández Toca y Jesús Munarraíz. ―Este movimiento se masificó al penetrar en el mundo universitario y luego en el mundo obrero‖ (Velasco, 2007:144) Dado todo este panorama histórico, demuestra que ―la música revolucionaria sólo podía provenir de hombres revolucionarios, identificados con el pueblo y vinculados con la realidad social que los envolvía. El cantor y compositor debía devolverle al pueblo su legítima identidad cultural, definida por lo autóctono latinoamericano y enmarcada en la sensibilidad poética propia de cada país” (Velasco, 2007:147) El pueblo al que le cantan los músicos es un pueblo socialista por definición, cuyas necesidades sólo son comprendidas por los grupos revolucionarios que luchan por la liberación. Así, el pueblo es sólo aquella fracción de la población que se identifica ideológicamente con la revolución, lo que explica la imposibilidad de la disidencia, siempre entendida como resabio pequeñoburgués al servicio del imperialismo mundial (...) De esta manera, el músico, a través de sus investigaciones y canciones, le devuelve al pueblo la identidad robada por el colonialismo cultural y le hace consciente de su realidad (Velasco, 2007:148).

En el siglo XXI hay también un surgimiento de diferentes géneros musicales como; la música popular, el reggaetón, el pop, música alternativa, cristiana, etc. Que han entrado a ser parte de lo que hoy se ha denominado música ―Neutral‖. Esta música neutral o de neutralidad ha llevado a quienes la escuchan a estar en un estado de tranquilidad que le impide pensar más allá de sus afectos personales dejando que muchos otros tomen las decisiones que ellos, en su estado de complacencia, no se toman la libertad de tomar.

78

Dado esto, entonces, la música actual, no sólo es el arte de mezclar sonidos que sean placenteros para el oído, también es el arte que expresa todo el mundo en que es construido. En este sentido sirve para diversas cosas: expresar inconformidad, generar denuncia, resistencia, esperanza, o también para organizar posiciones críticas frente a la sociedad de la cual es producto. En ese sentido también podría ser solo para disfrutar un momento tranquilo sin preguntarse por condiciones de existencia, ante lo cual han pretendido llamar, como se decía antes, ―neutralidad‖ (Molina, 2009:17).

Esa neutralidad es bien promocionada por los gobiernos que lo que realmente buscan es la indiferencia, esa neutralidad tan inexistente. Pero no se sabe qué es peor: que alguien no esté comprometido o que lo promueva su ―neutralidad‖ como valor fundamental y en este caso de la música, desconociendo y parándose de este modo sobre tantos cantores que dieron su vida por sus diferentes pueblos, sufrieron torturas, desapariciones y muerte (Molina, 2009:17).

Otros autores, suele denominar este tipo de música, como música popular; en la cual se hace referencia a expresiones musicales y de canto, que por lo regular adquieren una enorme difusión y comercialización a nivel local, nacional o quizá global, por lo general, este tipo de música emplea formatos musicales sencillo, en los que se evidencian ritmos bailables y pegajosos con una relación sin sentido, mientras otros aluden a una temática vinculada con la vida cotidiana de quién la interpreta y que en muchos casos se asemeja a la de muchas otras personas, en cuestiones que tienen que ver con sus relaciones afectivas, estilos de vida e historias fatídicas.

La música es hoy un hecho social en el que participan no sólo la notación y los instrumentos, sino toda una serie de fenómenos sociales. Según indica, la gente utiliza la música, especialmente la popular, para responder a cuestiones referentes a su propia identidad y a su propio hedonismo (Adell, citado en Cruces, 2009:90).

Dada esta connotación de música, parece paradójico escuchar que una creación y expresión tan importante como lo ha sido la música a través del tiempo, en la actualidad sea denominada como un discurso musical que ―está ahora a disposición de todo poseedor de discos o casetes, quien de este modo se convierte en dueño absoluto de iniciar o suspender su concierto cuando

79

quiera‖ (Cruces, 2009:92) y que de alguna forma, una expresión tan importante del alma y de identidad de muchos ciudadanos, se haya convertido en lo que es hoy, un negocio. En cuanto a la otra clasificación que aquí interesa, hace alusión a la música folklórica, que se identifica ―con los estilos culturales que caracterizan a ciertos núcleos o grupos humanos. La designación se origina en la palabra inglesa folklore, subdividida en el término ―folk‖ que puede considerarse equivalente al grupo humano que constituye la población de un ámbito determinado; y ―lore‖ que alude a lo que es un producto cultural originario de ese grupo humano, ya sea de índole literaria, principalmente poética, o musical‖ (Cruces, 2009:93).

Se hace alusión a éste tipo de musicalidad porque según lo que se ha podido observar en la utilización de música por parte de los estudiantes en sus protestas y marchas, denotan una amplia relación con éste tipo de música, ya que se evidencia no sólo la pertenencia a éste grupo sino que es un producto propio, construido en la inmediatez de sus luchas donde se da un surgimiento de sonidos y consignas que buscan la visibilización de los demás ciudadanos y al mismo tiempo apoyo. Además de querer mostrar una realidad distinta a la que se han encargado de difundir otros medios no solamente artísticos, sino de comunicación. Entonces el folklore es utilizado por los estudiantes como una estrategia artística que quiere comunicar a la sociedad una realidad, parcializada por otros, que más que un medio de expresión, ésta música es un modo de resistirse a las relaciones de poder que se vienen generando entre Estado y ciudadanía en la actualidad. La música popular (encasilla los nuevos ritmos musicales como el rock, el reggaetón, la música romántica, la música de despecho, alternativa, entre otras.) por el contrario, sólo muestra las relaciones de mercado y de consumo que maneja el modelo capitalista imperante, que vende a consta de construcciones de la vida cotidiana de la gente, que terminan siendo trágicas y que de alguna forma hacen referencia a alguna faceta de sus vidas, he de ahí, el gran interés de la mayoría de la ciudadanía por estas, que de alguna forma, terminan opacando y disminuyendo las anteriores.

En cierta medida suele existir una superposición entre esas categorías; sobre todo porque entre la producción musical, que modernamente se encuentra fuertemente impulsada por la incidencia de las formas tecnológicas de difusión o mejor denominadas, medios hegemónicos de

80

comunicación (el disco, la radio, la televisión, el cine), si bien una gran cantidad tiene un limitado período de popularidad (en nuestro idioma coloquial, que pasan de moda), en otros casos como el folklore o construcciones culturales van conformando un acervo de éstas que identifican ciertos grupos poblacionales y muestran sobretodo realidades de lucha y de desigualdades sociales, al igual que características de su cultura o grupo, diferentes a las otras que muestran realidades parcializadas, además de ser un entretenimiento vacío y sin ningún objetivo.

Por lo tanto Los modernos medios masivos de comunicación sitúan a nuestro alcance un número indefinido de culturas musicales nacidas en cualquier parte del planeta, que no dejan nada a nuestro pensamiento y a nuestra educación, además que no informan, ni transfieren conocimiento. Hoy en día, lo que se busca, es la creación de música que contenga una práctica comunicativa y expresiva imprescindible, cercana a cualquier individuo y frecuente en cualquier cultura, una práctica que, lejos de ser exclusiva de una clase social, forma parte de la vida cotidiana de todos los individuos de nuestra sociedad, en especial de los jóvenes y de sus realidades, al igual que de sus luchas y de sus identidad tanto personales como sociales.

3.3. Movimiento Estudiantil

Abarcar el movimiento estudiantil es hacer un recorrido desde la fundamentación teórico - histórica que marcó la diferencia por cada una de las luchas a las que se vio enfrentado por la reivindicación de los derechos estudiantiles, pero es importante resaltar que el movimiento estudiantil lo define la lucha por lo social, y que dentro de su intermitencia política no establece una líneas normativas dentro de su propia organización, por decirlo de otra manera, son discursos políticos que no son regidos por estamentos gubernamentales que cohíban el accionar estudiantil, y que de una u otra manera pueden ser propios de intereses individuales.

En su desarrollo el movimiento estudiantil, en un inicio por las reivindicaciones sociales ahora por sus propias luchas, se ha debatido en lo teórico, si es o no un movimiento social, y aunque esta no es la discusión a la que hace referencia esta investigación, se tratara de dar un pequeño debate para mostrar ambas apreciaciones desde varios teóricos que permita identificar, a la valoración de cada quién, si estas luchas estudiantiles se pueden enmarcar dentro del concepto de movimiento social estudiantil o activismo

81

estudiantil41, aunque hay más teorías que pueden dar explicación a este fenómeno42. Sin embargo, a nuestro entender, casi todas estas teorías se quedan cortas a la hora de explicar lo que viene pasando con las pugnas estudiantiles, que al día de hoy han desbordado la imaginación y la teoría.

3.3.1. Movimiento Social Hacia la primera mitad del siglo XX, tuvieron mayor impacto y predominancia los denominados movimientos sociales tradicionales o clásicos; en los que se incluyen los movimientos campesinos, el movimiento obrero43 y los movimientos políticos (comunistas, democrático-liberales, nacionalistas y populistas), especialmente en Europa y Estados Unidos, que impulsaron las luchas antiimperialistas de liberación nacional o las luchas contra las dictaduras. También hicieron parte de éstos, de una manera importante, los movimientos estudiantiles, en un inicio con mayo del 68 en Francia, que jugaron un papel decisivo frente a la movilización política e impulsaron importantes reivindicaciones (Sánchez, 2006:41).

Aun así, en esos inicios, los movimientos sociales eran vistos, por la escasa información y teoría que se tenía sobre ellos, como:

Por los historiadores como motines, revueltas o rebeliones; para los politólogos, se trataba de movimientos de protesta, y para los sociólogos, de diferentes formas de acción colectiva o de conflicto social. Sin embargo para todos los cientistas sociales, se trataba de un fenómeno social de importancia, que hacía visibles expresiones de malestar en la sociedad, formas de actuación política no institucionalizada, manifestaciones de tensiones subyacentes o, podían presentarse también el auténtico ‗motor de la historia‘ (Garcés, 2012:27)

De ahí en adelante la producción en cuanto a querer explicar dicho fenómeno ha surgido en distintas partes del mundo, aunque se expondrán las de mayor trascendencia, a continuación se mostrara algunas bases teóricas norteamericanas:

41

La palabra activismo estudiantil, utilizada por Carlos Medina Gallego, no desconoce las luchas, ni mucho menos las reivindicaciones que han ganado los estudiantes en sus disputas sociales o particulares, simplemente trata de encajar dichas luchas en un marco teórico que permita explicar su trasegar en el tiempo. 42 Teorías como las acciones colectivas, las subjetividades políticas, las resistencias ciudadanas, teoría de los movimientos sociales, la teoría de los nuevos movimientos sociales, entre otras. 43 En muchos casos, el movimiento obrero era sinónimo de movimiento social, pues en ese momento era quién mejor encajaba en dicha teoría.

82

La primera teoría que surgió con respecto a este fenómeno, mantuvo su vigencia durante mucho tiempo, sin embargo fue desacreditada por George Rudé. Ésta hacía alusión o postulaba que los movimientos sociales eran una especie de ―creencia colectiva‖, asociándolos a rebeliones y motines, describiendo a los actores que allí participaban como una masa sin racionalidad. Rudé por el contrario, aseveró que quienes participaban de estas ―rebeliones y motines‖ era gente del común que tenía motivos racionales suficientemente fundamentados para hacerlo. En adelante varios estudiosos del tema fueron anexándole a esta definición varios apócopes, ejemplo de ellos Smelser añadió las ―determinantes sociales‖ para protestar como, las tensiones estructurales, grupos coordinados, factores que las precipitaran, entre otros. Del mismo modo, se fueron dando varias teorías; la de la ―privación relativa‖44, ―la teoría de las movilización de los grupos con intereses económicos‖45, el ―free rider‖46, la ―teoría de la elección racional‖ y ―la movilización de recursos‖ 47 (Garcés, 2012:34)

A partir de la década de los sesenta, la naturaleza de los movimientos sociales comenzó a cambiar con las luchas por los derechos civiles y los movimientos estudiantiles anti-guerra. Surgieron nuevos actores sociales que cambiaron el consumo colectivo de las ciudades en un asunto político, nuevos movimientos sociales (NMS) fueron la expresión más visible de la oposición, la inconformidad, el descontento y protesta de los y las ciudadanas que se organizaron a la vanguardia de nuevos comportamientos y actitudes. Las luchas obreras en un principio, y después, el ecologismo, el feminismo, el pacifismo, el anti-militarismo, el antirracismo, la exigencia de una democracia más participativa, los movimientos populares y los nacionalismos ―demuestran la diversidad de las reivindicaciones de los grupos humanos, su persistencia y siempre vigente actualidad‖ (Sánchez, 2006:41).

El sociólogo Charles Tilly (citado en Garcés, 2012:34) definió a los movimientos sociales, cambiando la mirada hacia el foco de los enfrentamientos;

la acción colectiva que reúne a la gente para actuar a favor de sus quejas, esperanzas e intereses compartidos (…) donde la gente no sólo se reúne para actuar a favor de sus intereses, sino que además lo hace en forma que afecta de una manera directa, visible y significativa a la realización por otros individuos de sus propios intereses

44

Disparidad producida por los enfrentamientos entre las expectativas y las realidades Ejemplo de ellos son los sindicatos (movimiento obrero) 46 Hace alusión al aprovechamiento del esfuerzo de unos sobre otros, es decir, sobre el esfuerzo de los demás 47 De acuerdo a esto, los sujetos actúan conforme a los motivos que se presenten en contextos de tensiones estructurales 45

83

posteriormente, Sydney Tarrow, en los 90 reelaboro las proposiciones de Tilly, planteando un énfasis en lo que él denominó ―oportunidades políticas‖, es decir, ―los movimientos tienden a actuar en contextos políticos que les pueden resultar más o menos favorables‖ esto se da ―cuando el contexto puede llegar a actuar como aliado‖ (Garcés, 2012:35)

El poder de los movimientos se pone de manifiesto cuando los ciudadanos corrientes unen sus fuerzas para enfrentarse a las élites, a las autoridades y a sus antagonistas sociales. Crear, coordinar y mantener esa interacción es la contribución específica de los movimientos sociales, que surgen cuando se dan las oportunidades políticas para la intervención de agentes sociales que normalmente carecen de ellas. Estos movimientos atraen a la genta a la acción colectiva por medio de repertorios conocidos de enfrentamiento e introducen innovaciones es torno a sus márgenes. En su base se encuentran redes sociales y los símbolos culturales a través de los cuales reestructuran las relaciones sociales. (Tarrow, 1997:17)

Del pensamiento latinoamericano en cuanto a los movimientos sociales se encuentran representantes como Alain Touraine y Alberto Melucci, quienes dieron a conocer sus teorías en los años noventa. Alain Touraine (1993:239), argumenta que los movimientos sociales son “acciones

colectivas

organizadas y entabladas contra un adversario social definido y por la gestión de los medios y recursos, mediante las cuales una sociedad en particular actúa sobre sí misma y sobre sus relaciones con su entorno”. Años después, Touraine complementa esta apreciación, diciendo que los movimientos sociales tenían una tendencia a articularse en torno a tres principios:

El de la identidad (las propias elaboraciones que un grupo social hace de sí mismo); la oposición (es decir, la definición de sus oponentes), y el principio de totalidad (el proyecto global de transformación que articula un grupo social en movimiento) (citado en Garcés, 2012:37) Melucci, argumenta que los movimientos sociales son ―un comportamiento conflictivo que no acepta los roles sociales impuestos por las normas institucionalizadas, anula las reglas del sistema político y/o ataca la estructura de las relaciones de clase en una sociedad dada‖.

84

En adelante, han habido un sinnúmero de significados para este fenómeno, Sin embargo, recientemente en el 2012, Mario Garcés, ha entrado a dar una nueva definición de movimiento social, de acuerdo a lo que venía pasando en el mundo con la ola de movilizaciones y reivindicaciones sociales, especialmente en Chile y mencionando algunas características de los movimientos Colombianos.

Los movimientos sociales son diversas formas de acción colectiva que surgen de la sociedad civil y que dan cuenta tanto de contradicciones fundamentales de una sociedad, normalmente de las disposiciones de clase, pero más ampliamente de una diversidad de tensiones estructurales, relativas a la desigualdad, la discriminación sociocultural, el consumo, las relaciones de género, al medio ambiente, etc. Y que dan lugar a diferentes iniciativas y proyectos de cambio social con sentido emancipatorio.

La constitución de un movimiento social supone necesariamente el desarrollo de alguna forma de organización y redes de organizaciones sociales, así como de recursos culturales e identitarios que se irán modificando según se desenvuelve la propia acción colectiva. Movilizar recursos propios, en el sentido de la organización y de los repertorios de acción para confrontar a sus oponentes, en contextos más o menos favorables, son los derroteros más frecuentes de los movimientos sociales. En su mayor desarrollo, los movimientos sociales pueden encarnar proyectos de cambio social que afectan parcial o globalmente el sistema de dominación (Garcés, 2012:45).

3.3.2. Movimiento Estudiantil O Activismo Estudiantil Para hablar de movimiento estudiantil es necesario hacer la diferencia entre sector estudiantil, activismo estudiantil y movimiento estudiantil, en la medida en que permite aclarar y orientar la conceptualización de éste, dadas las transformaciones actuales que se vienen presentando al interior de las universidades, es decir, en la misma comunidad universitaria, que han hecho que se dé el cambio en la mirada y permita dar otras lecturas de las luchas estudiantiles.

85

Dado lo anterior habría que entender inicialmente que los estudiantes no son una clase social 48, aunque hagan parte de estas, en otras palabras, los estudiantes son un Sector social porque en ellos confluye toda la variedad de clases sociales que se encuentran en el país, es decir, en las universidades normalmente confluyen personas de distintas clases, de distintos estratos socioeconómicos que configuran la población estudiantil y el sector estudiantil dentro de la comunidad universitaria (Medina, 2000:8) En concreto, el sector estudiantil. Es un sector social compuesto por distintos intereses, por distintos modos de vida, que pueden confluir en una propuesta que en lo particular puede ser cultural, social, política o de cualquier otra naturaleza. (Medina, 2000:10)

Sin embargo en la actualidad se viene dando cada vez más esa diferencia de clases sociales por la elitización que se está presentando en las universidades públicas, en tanto, que en años pasados se trató de mantener los estratos en uno, dos y tres y ahora se pueden encontrar hasta cinco y seis. Es decir, hay un cambio importante en lo que se refiere a la composición social interna de la universidad pública y al mismo tiempo se está dando una especie de privatización de la educación por la ―vía de la competencia estratificada‖ (Medina, 2000:9). A propósito de esto, Rubén Darío Zapata49 argumenta, que además de la nueva estratificación social dentro de las universidades, se le está dando importancia sobre todo a las carreras que tengan que ver con ingenierías; de petróleos, de minas, porque es la locomotora actual y además mueve mucha plata, pero entonces esto comienza también con el acrecentamiento en

las

matrículas que obviamente las personas de bajos recursos no pueden pagar. Sin dejar a un lado que la educación básica primaria está llegando a un nivel tan deplorable que muchos no pueden lograr cupos en las universidades públicas debido a su bajo rendimiento académico, dejando estos cupos, a gente que puede pagar en universidades privadas el doble o quizás más de lo que paga en una universidad pública.

48

La clase social está determinada por el lugar que ocupa cada persona o en este caso los estudiantes, en los procesos productivos. 49

Tomado de: Entrevista Rubén Darío Zapata, Editor de Periferia prensa alternativa. realizada el 13 de julio de 2012

86

llega un momento en que la matricula en la universidad es tan cara que los pobres no tienen acceso, pero además de eso, esto también es estratégico porque la educación en el colegio es tan mala, de los colegios oficiales, que ninguno o muy pocos de los que pasan por el colegio oficial tiene la posibilidad de pasar a la universidad, entonces se va dando una recomposición social en la universidad, cada vez, quienes entran a la universidad son menos hijos de la clase popular son los mismos que podría pagar en una universidad privada, pero que les interesa la pública porque es mejor, porque algo menos podrán pagar50

En cuanto al activismo estudiantil; como ―el conjunto deformas de pensar y actuar diversas que se nutren ideológica y políticamente de un proyecto político u organización política que desarrolla su actividad en el sector bajo determinados lineamientos‖ (Medina, 2000:10).

En el activismo estudiantil, Medina (2000:11-12) reconoce dos rasgos fundamentales; el primero deviene de la manera en que se concibe la militancia política51, que en Colombia no ha sido bien tomada en la medida en que ha llegado a generar no sólo tragedias, sino dogmatismo, sectarismos, distanciamientos, rupturas, deconstrucción de unidad, llevándola a un romanticismo o a un simple actuar sin conciencia y crítica social. El segundo rasgo habla de la existencia de un independentismo52 donde se hacía una distorsionada lectura del leninismo llevada igualmente, al

50 51

Idem.

Por el contrario la militancia tiene que partir de la potenciación de la autonomía personal, de la capacidad de juicio, crítica y actuación razonada. Que permita establecer formas de bases políticas conscientes, responsables y coherentes (en la medida de lo posible). Dado esto, es primordial que la militancia sea efecto de un proceso político y personal-comunitario, en el que no haya una división de ambos lados. En la actualidad, el ámbito personal-comunitario se ha convertido en una prioridad, dada la desintegración que se ha venido presentando de incontables lazos sociales. “En este sentido, es necesario combinar la militancia «dura» (cuestionadora, antiautoritaria, con visión global y radical...) con un «tocar tierra» que desarrolle espacios de sociabilidad y fraternidad, además de habilidades manuales y conocimientos generales en ámbitos cercanos (…) Es preciso, por tanto, unir militancia a valores y ejemplo, desarrollando referencias concretas donde la gente se pueda identificar más allá de las palabras (…) Refiriéndose a lo que suelen ser los espacios más amplios de intervención política, hablar de una militancia no alienada tiene que ver con la asunción consciente de los contenidos de esa luchas, con la valoración de su capacidad de cuestionamiento de las estructuras de dominación y de generación de una respuesta social no manipulada ni populista, así como con la posibilidad de que las personas puedan aprender, incidir y realizarse de forma autónoma”. Tomado de: TORTUGA (Grupo antimilitarista Elx - Alacant). Algunas Notas sobre Militancia política. Ekintza Zuzena – Martes, 23 de mayo de 2006. [Online] http://www.nodo50.org/tortuga/Algunas-notas-sobre-militancia 52 el independentismo de izquierda, se cree que la liberación de la nación sólo se puede concretar con la creación de un nuevo estado, que oponga un nuevo aparato administrativo-represivo al del estado central. La obtención de este estado, no es una reafirmación popular ante el poder, es decir, no existe un estado propio, ni desde una perspectiva nacional ni desde una social. La institución estado existe siempre por encima y contra la población que gobierna.

87

sectarismo y dogmatismo romántico, en la medida que si no se hacía parte de un partido político, no se era nadie. Éste llegaba hasta el punto de identificar discursos entre estos partidos políticos.

Dado lo anterior, entonces se generaba un activismo en torno a grupos políticos, que permitía identificar no solamente discursos, sino también formas de actuar y pensar de cada uno de ellos. Actuando, los estudiantes, a partir de las propuestas y los marcos estratégicos de cada agremiación o partido político, como quisieran llamarlo, orientado obviamente por los objetivos y la propuesta política de cada uno de ellos, dejándose a un lado el propio desarrollo del movimiento estudiantil, en la medida que no se pensaba en sus propias reivindicaciones, su propia construcción de un bienestar y hasta su propia construcción de una calidad de vida. Además sus pensamientos no iban dirigidos desde la propia base, la sociedad, sino desde el partido político al que perteneciesen Dicho de otra forma por Rubén Darío Zapata53, y dándole un poco la importancia que tienen estas organizaciones en cuanto al cambio intergeneracional, que permite la continuidad del movimiento estudiantil, pero que no permite que se lleven a cabo luchas particulares del movimiento, sino el cumplimiento de objetivos de las mismas agremiaciones: Un problema son las organizaciones que hay en las universidades el MOIR (…), la FEU (…), la FUN (…), en la Nacional la Fuerza Común (…). Que es de las organizaciones, que esto podría garantizar la continuidad del movimiento estudiantil y que estas organizaciones no son organizaciones estudiantiles, sino, organizaciones políticas, entonces a estas organizaciones está llegando continuamente gente. Es decir, hay una continuidad en términos de organización, ¿Cuál es el problema? Que estas organizaciones están pensando en su fuerza y no en el proceso, piensan en acumular para su fuerza como interlocutores políticos frente al Estado, frente a las instituciones y piensan mucho menos en la Universidad comunitaria.

Cualquier estado es siempre el apartado de unos grupos dominantes. Los diferentes estados pueden ejercer su dominación sobre diferentes territorios, o en nombre de diversas ideologías y clases. La dominación revestiría diferentes formas y sería ejercida por otros grupos sociales, pero esencialmente continuaría siendo la misma. La idea de independencia, con todo el contenido ruptural liberador que puede tener, se ve así ahogada por la idea de estado. Tomado de: grupo IKARIA. Independentismo y anarquismo.1987 [Online] http://www.nacionandaluza.info/biblioteca%20internacional/INDEPENDENTISMO%20Y%20ANARQUISMO.pdf) 53 Tomado de: Entrevista Rubén Darío Zapata, Editor de Periferia prensa alternativa. realizada el 13 de julio de 2012

88

Ignacio Bastías (2004: 1-2), también apunta a este falso independentismo, que se ha dado en la mayoría de movimientos estudiantiles a nivel casi qué mundial, por la pertenecía de los estudiantes a agremiaciones o partidos políticos que hacen su presencia ante el estado para forjarse como organizaciones, pero que los estudiantes quedan a la deriva pues no se está luchando por sus ideales sociales, sino por los objetivos de otros. La relación de las dirigencias del movimiento estudiantil con los partidos y organizaciones políticas, es una cuestión que cruza el movimiento estudiantil de dos formas. Una es la simple dirección del movimiento por parte de una organización política, por mecanismos burocráticos o de adhesión, situación que genera cruces de identificación, tales como: ―para ser dirigente de la federación hay que ser comunista‖, o ―habría que ser anarquista‖, o bien, si se es dirigente del movimiento estudiantil inmediatamente se es identificado como de izquierda. Otra forma, que es más compleja, es cuando el movimiento estudiantil, o su parte más consciente, resuelve conformarse ellos mismos en (o sumarse a) un movimiento o partido político

Por último, la concepción de movimiento estudiantil, que será vista desde la tesis que propone Carlos Medina Gallego, en el foro de discusión ―Sobre el Movimiento Estudiantil‖ (2000:13) que dará bases para mirar en cuáles de los argumentos anteriores (Movimiento Social Estudiantil o Activismo Estudiantil) se pueden ubicar las luchas estudiantiles para poderlas explicar. El movimiento estudiantil es un movimiento social, cohesionado entorno a unos fundamentos que guían su accionar de tipo reivindicativo y político

y

esos

fundamentos tienen tres componentes que le son determinantes: primero, tienen una organización estable y permanente, sin organización nada es posible; segundo, están articulados nacionalmente, y tercero, tienen un programa mínimo y un plan de trabajo nacional. Si no es así, no es movimiento estudiantil. Hay grupos que pertenecen a los partidos y a los movimientos políticos, que tienen su propia organización, tiene su propio programa y su propio plan de trabajo. No obstante, no representan un autentico movimiento estudiantil, para que sea así, tienen que salirse de su condición de movimiento político y encarnar el movimiento social, como un movimiento pluralista

89

y democrático, en el que confluyen y se expresan las más diversas tendencias sociales y políticas.

Sin embargo, Ignacio Bastías (2004:1), identifica el movimiento estudiantil como una lucha social en la que participan estudiantes tanto de educación secundaria como universitaria en la que se identifican expresiones organizadas política y socialmente. Que a lo largo de su participación han tenido unos objetivos explícitos dirigidos al cambio de las condiciones socioeconómicas, de estudio y del sistema educacional. Que ha buscado también transformaciones en la administración de los gobiernos, de las instituciones educativas y los contenidos mismos de la enseñanza.

Además de esta concepción, Bastías reconoce que durante su devenir histórico, el movimiento estudiantil, ha estado permeado por tres ejes fundamentales (la clase, la política y la composición etárea54 de sus elementos) que los pueden caracterizar y al mismo tiempo, lo pueden hacer ver incluso como una clase de activismo estudiantil: En el primero de ellos, la clase, se ha considerado que el movimiento estudiantil es parte de los movimientos populares, aunque por así decirlo, pertenezcan a un ala extraña del pueblo, pues se pueden posicionar en un sector un poco más acomodado en la cuestión que a composición de clase social se refiere55(si se habla de los universitarios), sin desconocer claro está, que gran parte de ellos pertenecen a clases sociales bajas. También es importante señalar, que parte de estos estudiantes en aras de responder a una clase social elitista se han alejado del movimiento popular por no entrar a jugar con ciertos parámetros que los contraponen.

El segundo tiene que ver con la relación que tiene el movimiento estudiantil con los partidos o agremiaciones políticas, que ya se había descrito anteriormente cuando se habló de independentismo. Y el tercero de ellos, es el cruce constante que se hace, no es que así lo sea, de movimiento estudiantil y juventud confundiéndolo muchas veces como una ―Movimiento de los

54

Etárea, hace referencia a grupos de edad en los que se puede dividir la población, normalmente se hacen la división de cinco en cinco, para identificar en estos grupos ciertas características o simplemente simplificar los grupos. 55 Como se decía antes, la elitización de la universidad por medio de la introyección de estudiantes de clase social alta.

90

Jóvenes‖ (Bastías, 2004:2), es decir, convirtiéndolo en un movimiento que no se puede alejar o desvincular de la cultura juvenil. ― Y así como no puede independizarse del ser joven, tampoco puede relacionarse sin asperezas con su juventud pues se instala en un terreno propio de ―los viejos‖: la política (tanto institucional como simplemente organizacional). (Bastías, 2004:2)

Hay un elemento muy importante del movimiento estudiantil y es que el brío, la lúdica, el entusiasmo, que es de los jóvenes, porque los viejos andan y andamos en otro cuento con un montón de resabios, con un montón de dificultades, los estudiantes todavía tienen la capacidad de pensar más allá de ellos56.

Todos los elementos anteriormente mencionados y otros más, han sido utilizados para tratar de describir, estudiar e incluso hacer avances científicos de teorías políticas sobre el movimiento estudiantil, pero este movimiento ha llegado a unos alcances tales, que ha dejado estas teorías sin piso suficiente para explicar las actuaciones de los estudiantes en la esfera social a través de un proceso histórico que ha tenido relevancia. Sin embargo, y como se había dicho con antelación éste trabajo investigativo sólo se centrara en definir la resistencia civil no armada del movimiento estudiantil en el marco a la reforma de la ley 30. 3.4. Ley 30 De 1992 Preocupados sólo por el crecimiento económico, tratamos la educación cada vez más como si su objetivo primario fuera enseñar a los estudiantes a ser productivos económicamente, más que a pensar críticamente y a formarse como capaces de aprender de su experiencia y de comprender a las instituciones y a sus conciudadanos. Esta visión tan corta acerca de la utilidad de la educación y de nuestras urgencias, ha socavado nuestra habilidad para criticar la autoridad, ha reducido nuestra simpatía con los marginados y diferentes, y ha pervertido el sentido de nuestras capacidades para ocuparnos de problemas globales complejos. Y la pérdida de estas “competencias” básicas pone en riesgo la salud de las democracias y la esperanza en un mundo decente. Guillermo Hoyos Vásquez

Colombia por ser un país que se encuentra en vía de desarrollo y que quiere responder a unas lógicas de mercado y de globalización, para supuestamente, lograr una

56

―cultura abierta al

Tomado de: Entrevista Rubén Darío Zapata, Editor de Periferia prensa alternativa. realizada el 13 de julio de 2012

91

cambio,‖ y pensar en su futuro de una forma diferente, se ha estado enmarcando en una realidad donde los sistemas económicos que está implementando, cada vez exige más producción de nuevos bienes, productos y servicios que propendan el conocimiento y la innovación. Llevando de alguna forma, a que se creen unas necesidades en cuanto al desarrollo de habilidades y competencias comunes a todos los ciudadanos del país, que les permita a su vez ser competentes en éste mercado.

Dados los planteamientos anteriores, lo que se quiere, es que cada país, esté en la capacidad de enfrentar estos nuevos condicionamientos para poder entrar de lleno en las economías mundiales de globalización y que para poderlo hacer realidad, necesita de elementos indispensables como la educación, que es el elemento clave a la hora de formar personas, pero desde el ámbito del mercado, donde las habilidades de pensamiento crítico – sociales, sean reemplazadas por habilidades mecánicas, de producción en masa, donde lo importante es generar ingresos para el país. Mostrando siempre un panorama agradable a las personas, con discursos desarrollistas y de potencialización de habilidades de los ciudadanos, en aras de la innovación y los talentos colectivos como principal herramienta para la ―competitividad‖. El sentido actual de la universidad

57

es entonces lo que Gustavo López (2004:9) denomina,

―presión de adaptación‖ en la que la universidad entra a sobre – adaptarse a unas lógicas de Formación e investigación que respondan oportuna y eficazmente a exigencias y demandas técnicas, económicas, ambientales o administrativas de la época y, a adoptar y conformarse con las últimas recetas del mercado, los últimos métodos y modelos y las últimas herramientas, dejando enteramente de lado o, muy relevada a la cultura humanista, la verdadera y genuina formación integral (López, 2004:9)

Este ha sido el discurso, con el que el gobierno de Santos ha querido introducir la reforma de a la ley 30 de educación superior y que ésta, sea aceptada por la ciudadanía en general, ya que el

57

“La universidad es el lugar del pensamiento por antonomasia. Es el lugar para crear con gran libertad conocimientos, ideas y valores. Es también la memoria del legado cultural. Por eso, es capaz de responder a los desafíos del futuro, en parte gracias a todo lo adquirido en el pasado. Esta capacidad es de suma importancia porque nos encontramos hoy en día ante fuerzas de desintegración cultural, múltiples y potentes. La universidad tiene que defender los valores intrínsecos a la vida universitaria, entre ellos "la autonomía de la conciencia"” (López, 2004: 25).

92

discurso que se está utilizando para avalarlo, deja muy poco que argumentar en su contra, si hablamos del conocimiento general que tiene la gente sobre esto. Sin embargo, estudiosos de todos los ámbitos de educación no han querido ―tragar entero‖ y se han dado a la tarea de desarrollar elementos escritos como; documentos, panfletos, carteleras, graffitis (pintas), han utilizado también medios estratégicos como; Marchas, performances, actos culturales (besatón, abrazatón), actos musicales, entre otros,58 para develar la verdadera forma de educación, la universidad que quiere el gobierno para Colombia. Sin tener en cuenta que quienes deben forjar un modelo de educación para el país son los mismos estudiantes, que son quienes están inmersos en ella. La Ley 30 de 1992, estipulada como la ley que regula el servicio público de la educación superior de Colombia, desde su formulación ha desarrollado específicamente aspectos fundamentales como el principio de autonomía universitaria, el estatuto orgánico, el funcionamiento tanto de las instituciones de educación superior públicas como privadas y estableció una regulación respecto a los organismos asesores de la educación superior, promoviendo la estructura del sistema nacional de acreditación, el sistema nacional de información, y en su vigencia se ha venido consolidando lo que hoy es el Sistema de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior, conformado por organizaciones como el ICFES, el ICETEX59, CNA60, COLCIENCIAS, CESU, SUE, FODESEP, pero realmente quien aprueba o da luz verde a los procesos es El CONACES (ley 30 de 1992).

Esta ley fue formulada hace 18 años y nadie niega la necesidad imperativa de una reforma en su articulado, debido a las complejidades que ha alcanzado la realidad, en cuanto a problemáticas dentro de ésta se refiere. Sin embargo, no se esperaba que ésta decisión fuera tomada sólo por el ente gubernamental colombiano, sino también que se hubiera tenido en cuenta a toda la ciudadanía, en especial los estudiantes que en últimas, era quienes iban a estar directamente afectados.

58

Las estrategias de información antes descritas hacen referencia a lo que nosotros queremos mostrar como medios ciudadanos de comunicación. 59 ICETEX: Instituto Colombiano de Crédito y Estudios Técnicos en el Exterior 60 CNA: Consejo Nacional de Acreditación

93

Dado lo anterior y para que nuestros argumentos tomen fuerza, se mostrará a continuación de que se trata esta reforma.

3.4.1. Reforma Ley 30 De 1992

Hablar de la Ley 30 de 1992 es hablar de cambios estructurales en la educación pública de Colombia, no es en vano que en pleno siglo XXI el fenómeno de la globalización ha generado nuevos desafíos para todos los países del mundo, los nuevos retos son de características tecnológicas y científicas que imponen las nuevas políticas en pro del desarrollo, que vienen imponiendo unos nuevos modelos o paradigmas, desde otros países más desarrollados.

Esta nueva realidad vislumbra todo un proceso de cambios, sujetos a formas de producción fundados en la competencia de mercados abiertos a nivel global, esto correspondería a equipara cargas y ponerse al día con aquellos países que ejercen el poder mundial en la economía, pero también se hace inminente adquirir nuevas potencialidades en aras del desarrollo con el único objetivo de crear bases solidas que le permita seguir funcionando idóneamente, al sistema capitalista, con los otros países de mayor desarrollo tecnológico.

De lo anterior, pueden deducirse unos cambios a nivel cultural y por ende a nivel educacional para entrar a competir con los mercados globales y que mejor forma que hacerlo mediante la educación; de ahí el hecho que el gobierno colombiano quiera ponerse al día en cuanto a reformas en educación se refiere, adaptando de lleno la educación Colombiana en pro del desarrollo de competencias como fuente de capacidades de innovación, que sería su principal herramienta para la competitividad.

Lo que se pretende entonces, con este nuevo modelo de educación, según el gobierno Colombiano, es modernizar la educación para ponerla a tono con las tendencias mundiales y con el desarrollo de las nueva tecnologías. Sin mencionar, claro está, que esta ―modernización‖ va de

94

la mano con tendencias neoliberales61 globales que predican la venta de cualquier servicio público, entre ellos la educación superior, y que para llevarlo a cabo se necesitaría de mucho dinero, dinero que saldría propiamente de las universidades públicas, direccionando esto a una inminente privatización de la educación superior. Faltando con ello al artículo 67 de la constitución política de Colombia: ―la educación como un derecho y un servicio público con función social, que busca el acceso al conocimiento, a la ciencia, a la técnica y a los demás bienes y valores de la cultura”. Lo que hay que dejar claro, es que la reforma a la educación no es algo nuevo que sólo se presentó en el 2010, la reforma a la ley de educación se ha venido presentando en un proceso continuo desde su fundación, pero específicamente la ley 30 de 1992, se ha venido planteando su reforma desde 1999 con el gobierno de Andrés Pastrana de la mano de los planes de desarrollo, que planteaba desde ellos la demanda y no la oferta educativa, es decir, ya no se financia la educación pública, no se cubren sus gastos, sino que se financian a cada estudiantes mediante créditos bancarios. La reforma a la ley 30 empezó con Pastrana, esta reforma es un retoque simplemente y con Pastrana el Movimiento Estudiantil fue muy fuerte, eso fue en el 99 y después en el 2001. En el 99, fue contra la reforma a la ley 30 y en el 2001 fue contra el recorte de las transferencias.(…) Lo que venía haciendo el Estado era que financiaba la universidad pública, entonces le daba recursos a la universidad pública y entonces con esos recursos la universidad abría una oferta para presentarle los programas a los estudiantes, ahora no, lo que financia es la demanda, es decir, financian a cada estudiante para que estudie donde le dé la gana, cierto, pero lo financian con créditos, el ICETEX se convertía y ya lo ven, en un banco de segundo piso para financiar, y ahorita dicen es que inclusive tiene intereses62

61

La lógica de lo neoliberal es el mercado transable que ligue a países de poco conocimiento tecnológico a que se involucre en la nueva tendencias educativas como forma de asumir la privatización como el nuevo paradigma que debe regir en el mundo. 62

Tomado de entrevista a Rubén Darío Zapata, Editor de Periferia prensa alternativa; realizada el 13 de julio de 2012

95

Con esta reforma, el gobierno de Santos quiere entonces, postular la educación a una tendencia en boga, y es de apurar el capital privado nacional e internacional para que se una y apropie de un ―negocio‖ tan lucrativo como es la educación, promoviendo la instauración de las ―instituciones con ánimo de lucro‖, además de la creación de entidades mixtas público-privadas.

Es cuestionante entonces, que desde los gobiernos específicamente de Álvaro Uribe Vélez y Juan Manuel Santos se argumenten retóricas de cambios estructurantes en el sistema educativo para mejorarlo, pero lo realmente cierto, es que con estas políticas de gobierno que van de la mano con sus programas de estado, lo que se busca es reducir el gasto público y aumentar los aportes para la guerra. Estos gobernantes han asumido una posición radical en la que no tienen en cuenta las diversas posiciones de todos los estamentos universitarios (rectores, profesores y estudiantes) y la población civil.

Esto, paradójicamente ha provocado el estallido de estos estamentos llevándolos a que se resistan y se visibilicen a través de marchas carnavalescas impregnadas por el folclore y la alegría donde se observan diferentes expresiones culturales y educativas en contra de la intransigencia de un gobierno neoliberal que lleva impreso el objetivo de privatizar la educación colombiana.

El lunes 3 de Octubre de 2011 la ministra de educación María Fernanda Campo y el Presidente de la República Juan Manuel Satos, radicaron ante el Congreso de la República la última versión de la propuesta de ley que procura sustituir la Ley 30 de 1992. Ello después de haberse presentado con antelación tres versiones del proyecto de ley 112 de 2012: la primera el 10 de marzo, la segunda el 20 de julio y la tercera 21 de septiembre. La última propuesta que fue radicada en el Congreso se compone de 165 artículos en ocho títulos y que a través de ellos se abordan: 1. El Sistema de Educación Superior 2. De la prestación del Servicio de la Educación Superior 3. De la Formación y la Comunidad Académica 4. De la Investigación y la Innovación 5. Del Sistema de Calidad de la Educación Superior 6. De las relaciones del Sistema de Educación Superior y de este con el Entorno

96

7. De la Financiación de la Educación Superior

y, por último,

8. Otras Disposiciones. (proyecto de ley 112 de 2011).

Del mismo modo, esta ley contiene una lógica argumentativa en todo su articulado que va de la mano con conceptos que la transversalizan y le dan sentido a las intensiones gubernamentales: la educación es un derecho, un bien común y un servicio público, ética, autonomía, institución de educación superior estatal, privada o mixta, público,

investigación

regulación de la prestación del servicio

e innovación, calidad, conocimiento, competencias, relaciones y

financiación (proyecto de ley 112 de 2011).

Tomando lo anterior y siendo mirado de una forma minuciosa y crítica, lo controvertido de la reforma, en este caso para los estudiantes, es que por medio de esta se quiera vender a la empresa privada; el saber, la imaginación, la creación y la propuesta generada por la comunidad académica y que es propia de toda la sociedad Colombiana, llevando esto a hundir el país en una sumisión y una decidía63, porque se le impediría a las personas pensar, proponer, crear, ser críticos sociales, mejorar sus condiciones de vida y obviamente tener un saber propio. Entretanto, la propuesta o el modelo de universidad que el gobierno propone a los estudiantes, evidencia también el modelo de país que se quiere y si se tiene al día de hoy una universidad “para la venta, para la expropiación, para la sumisión y para la muerte como se ha venido evidenciando, que pasa en los diferentes campos universitarios y que se evidencia en la nueva propuesta de educación superior, ¿qué va pasar entonces con el país?, va a pasar exactamente lo mismo…” 64 El proyecto de ley 112 de 2012 final, denominado ―educación de calidad, el camino a la prosperidad”, consta entonces de 165 artículos, de los cuales se puede argumentar, a partir de lo visto por la opinión pública, los estamentos estudiantiles y demás población. Desde tres elementos, los objetivos a los que está llamada esta propuesta: 63

Tomado de la Intervención del estudiante de la Universidad Nacional e integrante de la MANE: Jaime Andrés Rivera, en el debate sobre la ley reforma a la ley 30 (Control Político), en el Senado de la República [Online]: http://www.youtube.com/watch?v=gviIDGY3Q3A 64 Idem.

97

El primero de ellos hace alusión a la cobertura, es decir, a la precaria financiación estatal que actualmente tienen las universidades públicas colombianas, que definitivamente transversalizan toda la educación, porque a partir de la financiación se ve comprometida la autonomía universitaria, el bienestar, la calidad, la oferta, entre otros muchos elementos. Como lo explicaba Jaime Andrés Rivera en el debate a la Reforma de la ley 30; La precaria financiación que actualmente se le da a la universidad, es decir, con los recursos adicionales que tiene actualmente la universidad pública, en los próximos tres años, lo único que podríamos tener son 25 mil nuevos cupos, si no se invierte ni en investigación, ni en extensión y ni en absolutamente nada más. Compárese esto con la meta que tiene el Ministerio de educación Nacional de 605 mil nuevos cupos, (…) lo que realmente se está proponiendo no es rentable, digamos para la comunidad universitaria, ni mucho menos para el país

(…) ya vimos en las cifras la poca financiación que tiene un estudiante de universidad pública en este país para desarrollar sus estudios y sin embargo la universidad hace unos esfuerzos, pero los esfuerzos llegan a un tope material y ese tope material es el que tenemos al día de hoy y es el que tenemos que cambiar, es el que hay que cambiar, no por medio de la empresa privada, sino por el contrario, por medio de una adecuada financiación Estatal que al día de hoy no existe y que ha venido causando, no ahora con la propuesta, sino desde hace mucho tiempo problemas supremamente graves a la universidad.

De igual forma, pero desde el elemento de la autonomía universitaria, Sergio Fernández65 afirma: Lo más preocupante sin duda alguna, es el menoscabo a la autonomía Universitaria que está implícito en la reforma, pues implica que dichos recursos se asignarán solamente para algunas Universidades que aumenten cobertura, que ofrezcan ciertos programas –no sabemos cuáles-, bajo ciertas metodologías. Hecho sin duda alarmante, teniendo en cuenta el proceso de pauperización académica de las Universidades, pues

65

Tomado de la ponencia de Sergio Fernández. Representante Estudiantil ante el Consejo Académico Universidad Nacional de Colombia Organización Colombiana de Estudiantes – OCE - 2011.

98

seguramente se privilegiará la formación técnica y tecnológica como ya lo anunció la Ministra María Fernanda Campo66.

El segundo elemento, se refiere necesariamente a la deserción estudiantil; en los últimos años el Estado Colombiano ha venido haciendo hincapié en la demanda y no en la oferta, es decir, y como se decía anteriormente, los gobiernos de turno han olvidado que la educación es un servicio público y como un Estado Social de Derecho que es Colombia, el Estado debe responder al compromiso de dar una educación pública gratuita y de calidad. Caso contrario a lo que viene ocurriendo con la oferta y la demanda; las universidades públicas ya no tienen suficiente presupuesto para ofertarle a los futuros estudiantes educación superior gratuita, y toman de la extensión, la investigación y de otros tipo de proyectos para solventar los gastos que tienen, minimizando esto la oferta de cursos dentro de las instituciones educativas.

Mientras, la demanda ha llevado al endeudamiento masivo y a largo plazo de quienes quieren estudiar, pues el gobierno le está dando al ICETEX la mayoría de los recursos en educación, para que quienes quieran estudiar, obviamente, tramiten un crédito que les permita llevar a cabo sus estudios profesionales. En últimas, el estudiante Colombiano cuando termine sus estudios superiores saldrá a laborar para liquidar la deuda que tiene con esta entidad. Este caso ha llevado, en muchas ocasiones, al retiro o deserción de mucha población joven que quiere estudiar y principalmente de quienes pertenecen a una estratificación socioeconómica baja. Frente al tema de deserción cada vez más los estudiantes vemos como se profundiza el subsidio a la demanda y cada vez hay menos presupuesto para las universidades, eso es sumamente claro. Y está cifra la dio la ministra de educación cuando nos presentó a todos en las primeras presentaciones la reforma: de 2012 a 2014 habrá recursos adicionales por 410 mil millones de pesos para el recurso de la oferta y por 774 mil

66

“Artículo 3. A partir del año 2011 la Nación asignará recursos adicionales al ministerio de Educación Nacional para que sean distribuidos entre las universidades del Sistema de Universidades del Estado, SUE, según el grado de complejidad de las instituciones. Estos recursos estarán destinados a financiar: a. La generación de nuevos cupos teniendo en cuenta el área del conocimiento, y el nivel y la metodología del programa respectivo. b. La ampliación de la cobertura con base en programas de regionalización y presencia en zonas de frontera” (proyecto de ley 112 de 2011).

99

millones de pesos para el subsidio de la demanda, es decir, casi el doble de los recursos del subsidio a la oferta los va a tener la demanda, es decir, los va a tener el ICETEX. Esto es una evidencia absolutamente clara de en lo que se ha venido convirtiendo la universidad pública y privada y en lo que se viene convirtiendo el saber, es decir, lo que estamos viviendo ahora y a lo que estamos asistiendo es la expropiación del saber, en efecto, eso no lo dice la reforma, eso no está explícito en ningún artículo, pero la magia de este tipo de reformas no es lo que dicen, sino lo que ocultan, lo que subyace a ellas67

El tercer y último elemento es el de la calidad académica, elemento en el cuál se ha abanderado la reforma, bajo éste se ha tratado de legitimar y de defender la propuesta de reforma de educación superior avalada por la empresa privada, que intenta mediar en la formación académica, para que se formen estudiantes mecanicistas que sólo siguen instrucciones (como en un recetario) pero que no piensan, no imaginan, no crean y mucho menos son críticos de la realidad social, es decir, se ha confundido la calidad académica con la pertinencia o aptitud laboral68. Esta aptitud laboral, se busca entonces por medio del anclaje o del ―fortalecimiento de la relación universidad-empresa para lograr una mayor pertinencia de la educación superior con respecto a las necesidades del sector productivo‖69, esto es, formación de estudiantes que sean ―competentes‖ para el sector productivo tanto a nivel nacional como internacional. De este modo, la estructura en la que se basa dicha propuesta de reforma a la educación, en aras de la calidad, entra con el subrepticio de un solo concepto, el de las ―Competencias‖, emplazado en casi todo el articulado y propuesto como un imaginario mental para todos, visto desde esta óptica como una clase de mensaje subliminal, que vende la idea de una educación de calidad e idónea para toda la población Colombiana. Además es paradójico y quizá extraño, que el

67

Tomado de la Intervención del estudiante de la Universidad Nacional e integrante de la MANE: Jaime Andrés Rivera, en el debate sobre la ley reforma a la ley 30 (Control Político), en el Senado de la República [Online]: http://www.youtube.com/watch?v=gviIDGY3Q3A 68 En palabras más coloquiales, lo que va referido a la calidad académica o más bien la pertinencia laboral, es a lo que se le suele llamar “el idiota o idiotas útiles” que es lo que se quiere de los estudiantes 69 Ministerio de Educación Nacional. Pertinencia en lo académico y lo laboral. En: Al Tablero (el periódico de un país que educa y que se educa). [Online] http://www.mineducacion.gov.co/1621/article-184024.html

100

Ministerio de Educación Nacional (MEN) con el respaldo del gobierno de Juan Manuel Santos quiera desvincularse de la responsabilidad de inspección, vigilancia y control de algunas organizaciones encargadas de la educación en el país. Así, lo destaca Harold Galvis Parrasi (2011:5 - 6):

El concepto fundamental, el grial del modelo propuesto, es el concepto de Calidad. Es el substrato de todo el articulado. En su seno todo lo arma y lo relaciona. De él emana el poder y es quien delega el control, la vigilancia y el castigo. El entramado del sistema lo conforman

organizaciones como el ICFES, el ICETEX, CNA,

COLCIENCIAS, CESU, SUE, FODESEP, pero ellas se deben al Consejo Nacional de Aseguramiento de la Calidad, el producción económica

CONACES. Es el eslabón para el modelo de

neoliberal. El CONACES es el que pone y quita, certifica,

aprueba, dice quien es o no de alta calidad, censura y le dice al ministerio que ejecute el reconocimiento, el premio o el castigo. El ministerio de educación sólo queda con funciones de inspección y vigilancia, lo propio dentro de un modelo neoliberal. El CONACES - la calidad-es la oscuridad vestida de luz. (…) ¿Qué quiere decir Calidad? En el contexto de la propuesta y en el sentir del modelo neoliberal calidad dice de los diferentes niveles del conocimiento, desde una simple técnica hasta un programa doctoral, y de todos los procedimientos adecuados y eficientes que ayudan a enriquecer el crecimiento del modelo económico neoliberal. El problema radica entonces en su fundamentación ideológica y política, así como en sus fines, pues sólo ganan los reguladores del mercado. De hecho, no está en discusión el que las universidades públicas y los organismos del Estado sean mejores,

cumplan eficientemente y a cabalidad sus misiones. Que manejen

pulcramente sus diferentes recursos, etc. Lo que está en discusión es que con un término tan bello reduzcan al Estado, disuelvan las instituciones

pilares de la

democracia y representativas de la justicia y de la equidad social, que se disuelvan las clases sociales, la salud, la educación y al sujeto mismo. El neoliberalismo está logrando disolver en tan sólo tres décadas lo que le costó a la cultura occidental siglos de construcción.

101

De ahí que los estudiantes empiecen a preguntarse entonces por: ―¿Qué tipo de empresa va a financiar las humanidades y las artes?, ¿les interesa?, ¿nos interesa a nosotros que una empresa privada financie la producción crítica del conocimiento?, ¿Qué tipo de calidad académica construye la empresa privada?‖70 Estas y otras interrogantes son las que se han estado haciendo los estudiantes para debatir tan controvertida reforma, sin embargo, en su utópico pensamiento está el hecho de construir (y que está en proceso de construcción) para toda la nación, una ―Ley Alternativa de Educación‖, que no sólo busca cambiar la estructura de la educación Colombiana, sino que trata de cambiar y buscar un país en el que se tenga la capacidad de Crear, Imaginar y Proponer.

Sin embargo, los estudiantes, para lograr esto, deben empezar por identificar qué clase de educación es la que están defendiendo y la que están buscando para todo el país, pues según Carlos Medina Gallego (2000:26), existen dos enfoques desde donde se puede mirar la educación o se puede defender la educación pública; el primero de ellos hace alusión a la educación pública oficial, es decir, la educación del Estado, que es la educación privada porque obedece a los intereses del Estado, y los intereses del Estado son los intereses de las clases sociales altas, es decir, los intereses del capital que son los intereses del desarrollo y la acumulación.

El segundo y quizá el más importante para los estudiantes y que a nuestro entender debe ser el ideal utópico de la educación pública, hace alusión a la educación pública del pueblo y para el pueblo, que es aquella que Encarna el interés nacional, es la que expresa el concepto de la Nación, como multiplicidad étnica, cultural lingüística y regional, pero además, la que encarna los intereses del pueblo, es la educación que construye el pueblo como alternativa de poder porque responde a sus particulares condiciones de vida y bienestar, y no a los intereses del desarrollo y la acumulación.

Entonces hay que ir por una educación pública que deslinde campos con lo institucional y que construya una nueva percepción de universo de los saberes

70

Idem.

102

tradicionales y los saberes populares, una verdadera apropiación de los saberes científicos, de tal manera que la educación esté al servicio de la solución de los problemas del hombre y la sociedad. Ustedes creen que la Universidad cumple ese propósito... a mí me parece, que nuestros profesionales están formados para servir a otros propósitos, totalmente distintos, más cerca de los intereses del capital y muy lejos de los intereses del hombre. Permítanme decirlo con cierto sentimiento de vergüenza, de los intereses del pueblo. (Medina, 2000:26 - 27).

103

4. DOCUMENTO ANALÍTICO

Es evidente que la mayor novedad del año 2011 y parte del 2012 ha sido el impacto que generó el movimiento estudiantil colombiano y particularmente, el caso de este estudio, el movimiento de la Universidad de Antioquia71. Pero este movimiento habría que mirarlo en el contexto que emerge, donde el gobierno de Juan Manuel Santos venía enfrentando, con graves dificultades, varías situaciones que ponían en tela de juicio su liderazgo y gestión dentro de las instancias de poder. En efecto, el país venía pasando por una infinidad de altibajos que denotaban la inconformidad de la sociedad, manifestada en diversas movilizaciones que se gestaron alrededor de estos dos años; las movilizaciones del sector salud, la de los indígenas, en contra de la mineroenergía, contra el TLC, contra la reforma de la ley 30, la reforma a la justicia y actualmente por la reforma tributaria y la inconformidad por el fallo de la Haya 72. Sin dejar de lado el cambio de agendas institucionales por el denominado proceso de paz con las FARC.

Los problemas de credibilidad y de gestión del gobierno, se fueron agudizando, no sólo por el manejo que le estaba dando al país, sino porque los colombianos comenzaron a demostrar su descontento de diversas formas, las más notoria; las movilizaciones. Éstas se fueron gestando por el déficit en el sector salud, la restitución de tierras, venta del país a las multinacionales extranjera, entre otras. Paralelamente, pero con mayor persistencia, las movilizaciones estudiantiles, que desde el 7 de abril de 2011 hasta el 10 de noviembre del mismo año (la toma a Bogotá), se estuvieron sucediendo con tanta insistencia (una o dos por semana) que casi todo el país se volcó en apoyo a esta situación, permitiendo así, que se sumaran otros sectores de la sociedad civil.

Las movilizaciones en Colombia y particularmente Medellín, comenzaron sumando para el mes de abril 20.000 personas, para mayo unas 30 mil, para julio 40 – 50 mil personas y finalizando las

71

En el transcurso de este escrito, pareciera que se estuviera haciendo un análisis del movimiento estudiantil colombiano, más que del movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia. pero parece imposible hacer un análisis de sólo este movimiento, porque las actuaciones llevadas a cabo por los estudiantes se generalizaron casi que en todo el país, debido a la creación de la Mesa Amplia Nacional, quien logró articular casi todo el movimiento (menos los independientes) en una sola causa y a la vez mediados por las mismas estrategias. 72 Resolución de los países bajos, en donde Colombia pierde cerca de 75.000 kilómetros del mar Caribe con Nicaragua

104

protestas, es decir, para noviembre en la toma a Bogotá, convocada por la MANE, se reunieron miles de estudiantes pertenecientes a instituciones privadas y públicas de Antioquia, Cauca, Valle, Tolima, Meta y Caldas, que sumaron cerca de 800 mil personas. Esto sin contar con las movilizaciones que se registraron en cada ciudad, de aquellos estudiantes que no pudieron trasladarse a la capital del país; las consecutivas tomas a colegios y universidades con espacios de deliberación asamblearios, grupos de discusión en las instituciones de educación superior, los actos culturales, las brigadas de salud, las diversas estrategias artísticas que se han utilizado. Para cerrar, un paro nacional de 32 universidades públicas, que no sólo evidenciaron la resistencia de los estudiantes a tan ofensiva propuesta, sino que llevaron al gobierno a retractarse de ella. Dado lo anterior, se fue configurando en el país un ―cuadro social y político con dos componentes fundamentales: un movimiento social potente, el de los estudiantes, y un gobierno ensayando débiles estrategias de salida al conflicto, pero sobre todo que comenzaban a ser víctimas de una crisis de credibilidad” (Garcés, 2012:16). Pues en la mayoría de medios de comunicación sólo se escuchaba la noticia de las marchas pacíficas de los estudiantes, del beso y el abrazo al policía, de la cantidad de estudiantes que habían salido a marchar, de los padres de familia que se habían unido; que universidades públicas y privadas estaban luchando por un mismo ideal, la creación de la MANE y de sus alcances como organización estudiantil, etc. Y más ampliamente se comenzaba a percibir en la opinión pública, una crisis de legitimidad del sistema político73 colombiano.

Cuando se generan estas movilizaciones estudiantiles, se comienzan a hacer más evidente la crisis de credibilidad por la que está pasando el gobierno de Santos. Sin embargo, la mayoría de estas propuestas estudiantiles, no logran resolver el problema de fondo, modificar la estructura del sistema educativo nacional; sólo llegan a modificar asuntos como el desmonte de la reforma de educación del Congreso, que era ciertamente apremiante. Aunque se está comenzando a

73

Se denomina crisis del sistema político, porque desde hace muchos años se viene mostrando el descontento de la mayoría de la sociedad por la forma de actuar de los gobiernos de turno y de las circunstancias en las que se encuentra, que los ha llevado de una u otra forma a conformar grupos, agremiaciones o quizá movimientos sociales para mostrar su descontento y luchar por lo que se les ha negado.

105

construir de parte de los estudiantes, profesores y trabajadores un documento74 como propuesta, que permita una nueva educación para las próximas generaciones colombianas, que indudablemente entraría a hacer parte de un cambio estructural, al sistema educativo.

Durante esta lucha universitaria, se presentaron cuatro fases por las cuales fueron transitando los estudiantes en el desarrollo de sus luchas en la coyuntura 2011 y 2012: En la primera de ellas, El gobierno de Juan Manuel Santos y la Ministra de Educación, parecían no escuchar las demandas y propuestas que se tenían desde el sector estudiantil para resolver el problema de la crisis educativa. Además, que no se abrían espacios de discusión y negociación, sino que solamente había una necesidad por parte del gobierno nacional de socializar y ―vender‖ en diferentes instituciones del país el proyecto de ley neoliberal de educación superior.

En la segunda fase, se entra a un proceso de cuasi-arreglo, eso creía el gobierno, pues uno de los puntos que más debatieron los estudiantes y otros sectores sociales, fue el ánimo de lucro75 (el caballito de batalla como ellos lo denominan). Como se notó que era un punto tan controvertido y que generó tantos opositores, se llegó a la decisión, por parte del gobierno, de retirar el ánimo de lucro del proyecto de ley 112 de 2011. Sin embargo, eso no era lo que buscaban los estudiantes; pues luego hicieron hincapié en lo de la autonomía universitaria, en lo de los cupos, en la calidad de la educación, en la financiación, y otras tantas, que demostraron que no sólo, se estaba en

74

El documento de trabajo para la construcción de la nueva ley de educación superior, “es producto de la III Sesión de la Comisión Académica Nacional, llevada a cabo en la Universidad Distrital Francisco José de Caldas – Sede tecnológica y la Universidad Nacional sede Bogotá durante los días 6 y 7 de octubre” de 2012. (MANE. Documento De Trabajo Para La Construcción De Nueva Ley De Educación Superior Para Un País Con Soberanía, Democracia Y Paz. [Online] http:/issuu.com/mane.academica. pág. 1) 75

El contenido de la “versión final del proyecto ha sido calificada por la Comunidad Universitaria como mas de lo mismo: No reconocimiento de la deuda y desfinanciamiento paulatino de la Educación Pública (arts. 143 y 145), degradación de la calidad formando en competencias y no en conocimientos (art 68) continúa la antidemocracia en la composición de órganos rectores (art 138), mas pertinencia para ajustar los contenidos a las locomotoras (art 90, 100..etc esta regado por todo el articulado), violación de Autonomía Universitaria por medio de la Acreditación (art 95), inserción del sistema educativo colombiano en la división internacional del trabajo (art 94 b), recursos sujetos a condicionamientos (art 101), desmonte del Bienestar Universitario a cambio de créditos para manutención (art 156) no control de las matrículas en universidades privadas (art 151), además no desaparece el ánimo de lucro pues se le cambia la naturaleza jurídica al Fondo de Desarrollo de la Educación Superior, FODESEP el cual pasa a ser Sociedad Anónima y se continua con el modelo de subsidio a la demanda (art 152)etc. OCE. LA REFORMA QUE NO FORMA, LA REFORMA QUE DEFORMA. Martes, 11 de octubre de 2011. [Online]: http://www.ocecolombia.com/2011/10/la-reforma-que-no-forma-la-reforma-que.html

106

contra del proyecto que reforma la educación superior, sino de toda la ley 30 en general, y aún más, de todo el sistema educativo colombiano.

La tercera fase, se entra en proceso de discusión y debate, donde los estudiantes universitarios se ganan el derecho a incursionar en los espacios de poder del gobierno, es decir, se entra al Congreso de la República a controvertir la reforma con argumentos tan válidos y preparados, que el gobierno no supo cómo responder a ello. Obviamente, este proceso de discusión, fue acompañado desde varias ciudades con protestas masivas, no violentas y que irrumpían creativamente el orden; en una apuesta por llevar a la práctica, una nueva forma de hacer política desde lo alternativo, es decir, desde las diferentes formas de hacer resistencia artística.

En la cuarta y última fase los estudiantes le han ganado varias batallas al gobierno. La primera, la incursión en los espacios públicos de poder, es decir, en el Congreso de la República; La segunda, situar de su lado los medios masivos de comunicación, además del apoyo de los alternativos; La tercera, la pérdida, en cierta medida, de credibilidad y legitimidad de la opinión pública al gobierno de Santos; La cuarta, obligar a la radicación en el congreso el 11 de noviembre, la retirada del proyecto de ley 112 de 2011 que intentaba comercializar la educación superior en Colombia.

El tiempo en que se vivió toda esta coyuntura, los universitarios además de ganar las batallas anteriormente mencionadas. También alcanzaron importantes logros; el primero de ellos fue articular de una forma organizada y contundente a la mayoría de estudiantes universitarios en una Mesa Amplia Nacional Estudiantil (MANE). El segundo logro, fue articular a sus luchas diversos sectores de la sociedad colombiana e incluso el movimiento popular. El tercero, legitimar sus protestas, en la medida que se utilizaron medios ciudadanos de resistencia artística. El cuarto, fue desde lo simbólico, y especialmente el lenguaje, poniendo sobre la mesa la pregunta; ¿cuánto puede valer un soldado y cuanto un estudiante?76; Y el último, fue mostrarle a la sociedad colombiana, que la democracia es posible y debe hacerse en las calles con la gente y para la gente.

76

Un soldado en Colombia cuesta 18 millones de pesos, un estudiante sólo 3.

107

En el desarrollo y organización del movimiento estudiantil universitario, en favor de la educación pública, se comenzó a mostrar a la sociedad colombiana que en el país, se han venido gestando dos miradas diferentes y contrapuestas a la hora de hablar del sistema educativo; Por un lado, la mirada del Estado, que es una mirada más desde el ámbito comercial, avalado por un modelo neoliberal, en la que pueden ser partícipes el sector privado, obviamente porque la educación es tan necesaria en la humanidad que generaría muchas ganancias y al gobierno sólo le correspondería un ―rol regulador de los negocios educativos y subsidiario de los más pobres‖ (Garcés, 2012:20). Además, que con la nueva modificación a la ley 30 de educación, se instauraría con más fuerza la figura del ICETEX, que entraría a ―beneficiar‖ a los estudiantes y sus familias, realizándole créditos condonables a 15 ó 20 años, después de terminar sus estudios; liberando al Estado de su función y anclándose aún más la modalidad de la demanda77 y no de la oferta educativa.

Por el otro, la mirada de los estudiantes, quienes por medio de las resistencias artísticas, se la han venido jugando con clásicas y novedosas estrategias, con las cuales han creado nuevos formatos de movilización, para defender la educación pública como un derecho inalienable y que debe ser garantizado por el Estado. En tanto, los universitarios han venido evolucionando en el marco de esta reforma, y han concentrado sus fuerzas en; buscar un mejor país, con soberanía, democracia y paz, por medio de un nuevo modelo educativo, en el que se les permita crear, imaginar y soñar.

Sin embargo, las actuaciones de los estudiantes no han sido suficientes, ni mucho menos están determinadas por su accionar y capacidad de lucha. Sino más bien, que están supeditadas a las respuestas que les pueda dar el gobierno nacional. Aquí es donde entra en juego la inteligencia de los estudiantes, quienes se la han sabido jugar desde lo artístico y lo no convencional, para hacer que el gobierno cumpla sus peticiones. Pues éste, siempre se ha mostrado reacio, a cambios de base en el sistema educativo y cualquier otro sistema; buscando constantemente, dilatar arreglos

77

Con la demanda, lo que se busca es que el Estado se libere de la responsabilidad de darles a las instituciones de educación ciertas sumas de dinero para que estas puedan ofertarle cursos a los estudiantes. La demanda, tendría entonces la función de darle a cada estudiante lo que este necesita para sus estudios, mediante créditos por medio del Icetex.

108

para desgastar al movimiento estudiantil universitario y cansar a la opinión pública. Logrando introducir posteriormente, mejoras parciales y focalizadas; que mejoran su imagen ante la sociedad colombiana.

Dado lo anterior, se puede especular, un suceso no muy satisfactorio para ambos lados. Si los estudiantes no desisten de sus luchas por la gratuidad y calidad de la educación; el gobierno nacional, contaría con todos los medios institucionales y represivos para bloquear el movimiento universitario y apostarle a un desgaste consecutivo, que iría desapareciendo el movimiento estudiantil en el tiempo. Para impedirlo, los estudiantes deben mantenerse en resistencia, movilizados y sumar esfuerzos tanto de la sociedad nacional como internacional para no perder visibilidad y legitimidad, y alcanzar reformas significativas en el sistema educativo actual.

Lo anterior denota, que el movimiento estudiantil, aunque en el tiempo se ha valido de reivindicaciones gremiales; en la actualidad, para que su éxito sea permanente, deben tener conciencia que su destino depende, en cierta medida, del apoyo del movimiento popular en Colombia. Pero desde una mirada más amplia, no solamente del movimiento popular colombiano, sino del movimiento popular latinoamericano. Y en las movilizaciones del 2011 y parte del 2012, se estaba evidenciando un poco esta solidaridad, en especial con el caso chileno, de donde se retomaron diversas estrategias creativas, además de ser el espejo de lo que sucedería con la educación en el país, si esta reforma se aprobara. Y es que, a partir de lo que viene sucediendo en el continente, no sólo con la educación, sino con la mayoría de los derechos; se ha empezado a despertar una conciencia hacia una articulación social continental, que se oponga a los vejámenes de quienes emplean el modelo neoliberal.

Pero este despertar continental, tiene una causa de fondo y es el agotamiento que han venido presentando las sociedades latinoamericanas con respecto al modelo neoliberal; que los ha llevado a despertar de un prolongado letargo, obligándolos de alguna manera, a articularse y a generar nuevas formas de movilización, o al menos hibridarlas, para que respondan a necesidades y contextos actuales. Se diría que éste, es el momento por el cual están pasando los movimientos sociales y para nuestro caso, el movimiento social colombiano y el de la universidad de Antioquia.

109

A través de esta coyuntura, se ha podido identificar la importancia que ha tenido el movimiento estudiantil en el marco a la reforma educativa, ley 30 de 1992; y se la ha direccionado en dos sentidos:

El primero, fue una imperiosa necesidad de reivindicar, no sólo ante los estudiantes, sino también ante todo el país; la educación como el pilar fundamental de toda sociedad. Haciendo referencia a una educación ―con calidad educativa, popular, científica, humanista, artística, democrática, autónoma, crítica, intercultural, pluriétnica y antipatriarcal que garantice la independencia tecnológica, científica y cultural de la sociedad colombiana‖78.

El segundo y quizá el que se reconoce como más importante; fue la posibilidad de mostrarle a la comunidad colombiana; la posibilidad de cambiar la cultura política de un país, es decir, cambiar la forma de hacer las cosas y tomando la historia de cada uno en sus manos para deconstruirla y volverla a construir, en un deseo por ser los creadores de su propia realidad. Antes de las movilizaciones del 2011 en Colombia, diversas personas pensaban, que las movilizaciones sociales no servían de nada y las estudiantiles menos por la carga estigmatizante que recae sobre estas acciones colectivas de resistencia, que para muchos, no tenían ningún sentido. ¿Pero como no reconocer en la movilización el camino idóneo para hacer democracia en Colombia?; pues se ha identificado que la movilización es un camino idóneo y más en un país como Colombia en la que no existe la democracia, sino más bien un simulacro de la participación. Y a partir de esta coyuntura, es un elemento clave que la población del país comienza a identificar.

Asimismo, la coyuntura vivida en el 2011 y parte del 2012, responde a un momento histórico en el país, y es que actualmente Colombia viene pasando por un proceso de profundización del neoliberalismo, en el que se ha comenzado a cambiar el discurso de los derechos por el discurso de los servicios. Un discurso más que legitimador de este modelo, que pretende hacer que los colombianos paguen por todos aquellos cosas que debieran ser gratuitas y que al día de hoy se vienen privatizando; dirimiendo una vez más, a los Estados de sus obligaciones. En este orden de

78

MANE. Documento De Trabajo Para La Construcción De Nueva Ley De Educación Superior Para Un País Con Soberanía, Democracia Y Paz. [Online] http:/issuu.com/mane.academica. pág. 3

110

ideas, la reforma sobre la ley 30 que se estaba planteando, era un modo de ajustar la educación del país a ese modelo de saqueo, desigualdad, discriminación, distanciamiento social, explotación y marginalidad que se viene implementando desde hace varias décadas en la población colombiana. ―En síntesis, (…) los problemas sociales y políticos se superponen; por una parte, los movimientos sociales adquieren nuevos desarrollos, así como mayor visibilidad, y por otra parte, el sistema político, alejado de la vida cotidiana de los ciudadanos, pierden su débil legitimidad – de origen y de ejercicio-, y es progresivamente horadado por el sentir ciudadano, especialmente cuando éste adquiere expresión pública‖ (Garcés, 2012: 17).

Dado lo anterior, durante todo el proceso de análisis, surgieron diversos puntos analíticos que a la hora de compararlos con los objetivos de la investigación, daban respuesta consecuente a estos, de ahí, que en adelante se hará alusión a estos aspectos para analizar, los medios ciudadanos de comunicación artísticos como el graffiti, el performance y la música, utilizados por el movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia, como estrategias de lucha, legitimidad y resistencia civil no armada en su búsqueda por la reivindicación del derecho a la educación en el marco a la reforma de la ley 30.

4.1. Preparación De Los Estudiantes Para Enfrentar La Reforma De La Ley 30 De Educación Superior

La reforma a la ley 30 de educación superior, no es nueva, ni propia del 2011, la reforma a esta ley venía preparándose desde el mandato de Pastrana en 1998, pero propiamente con Álvaro Uribe Vélez; se le modificaron algunos artículos en cuanto a financiación se refiere.

Luego de este suceso, los estudiantes ya venían desarrollando algunos encuentros denominados ENEU (Encuentro Nacional de Estudiantes Universitarios). Los ENEU, recogían principalmente organizaciones estudiantiles que se habían venido conformando en Colombia a través de los años. Entre ellas se encuentran; la OCE (Organización Colombiana de Estudiantes), la FUN (Federación Universitaria Nacional), la FEU (Federación de Estudiantes Universitarios), la CEU,

111

Identidad Estudiantil y otros que son más de ámbito local. En cuanto al ámbito local, particularmente la Universidad de Antioquia, tiene una diversidad de colectivos enormes; el colectivo desde el 12, el de identidad estudiantil, los independientes, los del 8 y 9 de junio, los de la facultad de medicina, los de ingeniería, los de derecho y otros tantos que se han ido fundando dentro de la institución.

En el ENEU realizado el 19 y 20 de marzo de 2011, los estudiantes propusieron conformar una Mesa Amplia Nacional Estudiantil (MANE), y a la vez en cada ciudad se formarían otras mesas locales. Para el caso de Antioquia, se conformó la MAREA (Mesa Amplia Regional de Estudiantes de Antioquia), que se encargaría luego de asistir a los encuentros de la MANE.

Para el 7 de abril, fue convocada desde la MANE, la primera movilización por la educación pública en Colombia, a esta movilización se unieron algunos sindicatos; que incluyeron a esta protesta elementos adicionales como el derecho a la salud y al empleo, entre otros. La movilización ya tenía un sentido; el conocimiento de la propuesta de reforma a la ley 30 de educación y los impactos negativos que esta traía consigo.

Para el caso específico de la MAREA, en el segundo semestre del 2011, nació tras una iniciativa y confluencia de redes sociales, dándose incluso de una forma espontánea su surgimiento. En ella, confluyeron 14 instituciones de educación superior, que comenzaron un proceso de articulación, orientación y coordinación de las actividades que se realizarían en el transcurso de esta coyuntura, además de presentarse a los encuentros a nivel nacional, específicamente a los encuentros de la MANE. Habría que hacer una claridad; la Marea, surge incluso antes que el proceso organizativo de la MANE.

Nos juntamos un grupo de personas e hicimos una reunioncita, buscamos en redes sociales en las instituciones de educación superior y allí nos articulamos, pues hacemos una marcha, una cosa muy simple. A la convocatoria llegaron como 14 instituciones de educación distintas y eso no se podía desaprovechar y conformamos una marcha y les dijimos encontrémonos en el parque de los deseos, hubo gente del ITM, de la María Cano, de la de Medellín, de la Eafit. Después de eso, muy a lo colombiano que no nos pueden dar papaya y les dijimos ―vea ombe no nos podemos ir de aquí sin conformar

112

un espacio donde nos podamos articular todos‖ y de ahí salió la Marea, la Marea es un espacio que empezó a funcionar incluso antes que la MANE79.

Del mismo modo, en esta preparación, los estudiantes comenzaron a identificar una nueva forma de hacer política desde lo artístico, retomando del graffiti, el performance, la música, el chiste, la parodia, los videos, los encuentros culturales y otros más, una forma de hacer presencia y más que presencia, resistencia ante los procesos de dominación del poder Estatal.

4.2. Importancia De La MANE (Mesa Amplia Nacional Estudiantil) En El Desarrollo Del Movimiento Estudiantil Del 2011 Y 2012

En cuanto a la MANE, en el desarrollo de la lucha estudiantil contra la reforma de la ley 30, cumplió un papel fundamental; articular en un solo movimiento los diversos sectores estudiantiles a nivel nacional y local, sin excluir a ninguno de ellos, a no ser que este se autoexcluyera, como efectivamente sucedió con el colectivo de los ―independientes‖ de la Universidad de Antioquia.

La MANE, se construyó como un espacio que reúne organizaciones y estudiantes de diversas instituciones de educación superior, incluyendo la educación técnica y tecnológica, reconociéndose como un escenario amplio, democrático y pluralista de trabajo y lucha por la defensa de la educación pública en Colombia, como un derecho fundamental.

En este espacio han confluido diferentes sectores de la comunidad colombiana con diversas opciones políticas e ideológicas que están en la búsqueda de una mejor educación para el país, entre ellos se encuentran; el Polo Democrático, el Congreso de los pueblos, el partido Verde, Juventudes religiosas, Movimiento Político Marcha Patriótica, sectores liberales, el Movimiento Progresista y un importante componente de estudiantes independientes, sin partido y abstencionistas, entre otros; que hacen parte de la MANE.

79

Víctor Javier Correa Alvares (estudiante de 10º semestre de Medicina, UdeA), perteneciente a la MAREA (Mesa Amplia Regional Estudiantil de Antioquia). Entrevista realizada el 23 de julio de 2012

113

A los estamentos estudiantiles propiamente dichos, se sumaron diferentes procesos organizativos de 32 universidades públicas del país, además del SENA y por lo menos la mitad de las 48 universidades privadas que existen en Colombia. Sin dejar a un lado, el acompañamiento del sector de los estudiantes de secundaria, los profesores y trabajadores. Esta articulación lograda por la MANE, hace parte de un hito histórico para Colombia, en tanto, logró conformar un movimiento unitario, que desde hace cuarenta años no se veía en el país.

Por primera vez en mucho tiempo a nivel nacional se construye una dirección unificada del movimiento universitario, particularmente la MANE, la MANE es lo más cualificado, los más avanzado que ha producido el movimiento estudiantil en los últimos 40 años. Porque primero logra dar espacio a todas las múltiples expresiones colectivas de los universitarios a nivel nacional, prácticamente ningún sector de los universitarios quedó por fuera, a no ser que se autoexcluyera, como en parte paso con un sector estudiantil de la Universidad de Antioquia, pero la MANE fue un espacio abierto, muy democrático, muy pluralista abierto a las expresiones diversas del movimiento estudiantil, no sólo a nivel nacional, sino incluso a nivel local80.

Otro logro alcanzado por la MANE, tienen que ver con la conformación del ―Programa Mínimo de los Estudiantes‖, muy parecido al programa mínimo de los años setenta, conformado así mismo por seis puntos; Financiación, Autonomía y democracia, Calidad, bienestar, libertades democráticas y relación universidad - sociedad81. Que muchos, hasta los mismos estudiantes identificaron como simples arengas, excepto el sexto punto; relación universidad-sociedad. Pero que en definitiva era un avance importante en cuanto a discusión y debate se refiere.

80

Entrevista Jaime Rafael Nieto López: Sociólogo de la Universidad de Antioquia (1987), Magister en Ciencia política de la Universidad de Antioquia (1996), Doctor en Pensamiento político, democracia y ciudadanía de la Universidad Pablo de Olavide (2011) y especialista en el tema de resistencia civil. Actualmente docente de la Universidad de Antioquia. Entrevista realizada el 3 de septiembre de 2012 81

MANE. Declaración reunión Mesa Amplia Nacional de Estudiantes – MANE. Bogotá, Agosto 20 y 21 Universidad Distrital. [Online]: http://feucolombia.org/index.php?option=com_content&view=article&id=85:declaracion-reunionmesa-amplia-nacional-estudiantil-mane-del-20-y-21-de-agosto-de-2011&catid=39:quienessomos&Itemid=78

114

Sin embargo, este programa mínimo iba de la mano con los objetivos de las siguientes movilizaciones que se llevarían a cabo en todo el país, para el hundimiento de la reforma a la ley 30. En los cuales, la propuesta crucial fue un paro nacional de 32 universidades públicas, el cual entraría en vigencia, en la denominada ―hora cero‖.

Agenda de movilización: i) rechazo integral y hundimiento a la propuesta de Nueva Ley de Educación Superior; ii) construcción de una propuesta alternativa de universidad; iii) el fortalecimiento del movimiento estudiantil y iv) el desarrollo de un Paro Nacional Universitario82.

A pesar de ser un espacio tan legítimo para muchos estudiantes, la MANE, también tiene sus contradictores. Unos aluden a decir, que va en contra de algunas ideologías, en tanto los estudiantes no son representados; otros, por cuestiones de popularidad, pues unos quieren ―darse el pantallazo‖ y aparecer como los representantes en los debates y discusiones ante los medios de comunicación. Asimismo, hay contradicciones en cuanto a las decisiones tomadas por la MANE, pues hay quienes argumentan que no son democráticas y obedecen a necesidades particulares de algunos sectores. Lo cierto, es que la MANE, como cualquier otro espacio de discusión y debate, tendrá sus opositores, pero el papel que esta organización cumplió y está cumpliendo actualmente con la creación de la política pública a favor de un nuevo modelo educativo para el país, es un avance grandísimo en cuanto a estrategias de organización, coordinación y resistencia civil del nuevo movimiento estudiantil se refiere.

La MANE por mas críticas que puedan hacerle algunos sectores a ese espacio, la MANE fue el eje articulador del Movimiento. Si no (…) se hubiera creado un espacio como la MANE, no se hubiera podido lograr esa articulación y esa coordinación nacional como la que se logró. Porque muchas veces que pasaba, las principales universidades se movilizaban, las que históricamente son las más rebeldes, la de Antioquia, la del Valle y la Nacional, salían a marchar y el resto por allá la de Pamplona calladitos, calmaditos, por ahí uno que otro que salía a marcha. ¿Qué pasó acá?, la MANE logró convocar todos esos sectores de las universidades públicas: La

82

Ídem.

115

Amazonía, la de Nariño, un montón de universidades, institutos técnicos y tecnológicos, las universidades privadas (…), empiezan a construir todos esos espacios y nos empezamos a reunir local y nacional y empezamos a coordinar trabajo político, porque había que construir, analizar, estar en la movida, de cómo confrontar eso83.

La conformación de la MANE, podría denominarse desde la resistencia civil, como una forma pública organizada de manifestación, que surgió para dar a conocer ante la opinión pública, su posición frente al proyecto de ley 112 de 2011 y el deseo de los estudiantes por librarse de la opresión que ejerce el Estado colombiano ante el sueño de una educación de calidad y gratuita para toda la población del país. Obedecen también, a la necesidad de poner en lo público los sentimientos de insubordinación, deslegitimación, discriminación, persecución, estigmatización y vulneración de sus derechos, de los cuales han sido objeto desde hace varias décadas.

En esta búsqueda, los estudiantes asumen otra de las características de la resistencia civil no armada; enfrentarse en reiteradas ocasiones a las autoridades, para presionar al Estado a retirar del congreso la reforma de la educación, que para este caso, estaba yendo en contravía de sus derechos como ciudadanos.

4.3. Percepción De Las Movilizaciones Estudiantiles En El 2011 Las movilizaciones realizadas por el movimiento Estudiantil de la universidad de Antioquia en el los años 2011 fueron de tipo más cultural más enfocadas al arte, legitimadas por la no violencia. Este movimiento cultural, tenía un acercamiento desde lo teóricamente definido a la categoría de nuevos movimientos sociales, que incluso le permitió relacionarse y entenderse con otros movimientos sociales (cumbre de los pueblos, marcha patriótica, etc.) y movimientos de universidades incluso privadas.

83

Felipe Cardona Restrepo (Estudiante UdeA, perteneciente al Colectivo de Identidad Estudiantil) Entrevista realizada el 27 de septiembre de 2012

116

Su éxito, no sólo se debe a la nueva forma de lucha estudiantil, las resistencias artísticas, sino también; a las garantías ofrecidas por el ―Estado democrático Colombiano‖. Es decir, dentro de estas garantías estaba el derecho a la movilización y aunque esta fuera, en todos los casos, custodiada por los mecanismos de represión del Estado, fueron posibles. Lo importante, fue la forma como desde la resistencia, se la jugaron los estudiantes para hacer de estas marchas restrictivas un punto y una estrategia a su favor, es decir, si bien estas marchas tenían dentro de su ejercicio unas restricciones establecidas por el Estado (ruta establecida, no utilizar violencia, no dañar patrimonio público y privado, no rayar las paredes, etc.), los estudiantes supieron jugarse esas restricciones y protestar dentro de ese orden establecido para ganar visibilidad; por medio de marchas culturales en las cuales se podían observar diversas manifestaciones artísticas, combinadas incluso con plataformas antiguas; estaban las marchas, la forma más tradicional de protesta,

pero estas marchas tenían en su interior expresiones performanticas, musicales,

teatrales, con alto contenido simbólico y artístico; que trataban de alterar el orden, pero dentro de ese mismo orden establecido.

En algunos postulados de Michel Randle, se puede identificar la forma de actuar de los estudiantes; como una forma de desafiar la ―autoridad y legitimidad del gobierno‖ (Randle, 1998:114) poniendo en entredicho su gestión e incluso desprestigiando el sistema político y social en el cual se desenvuelven los gobernantes de turno.

precisamente lo que pasa en ese tipo de movilizaciones es que se trata de alterar el orden pero dentro de lo tangible es decir entonces si utilizan la violencia el aparato es suficientemente fuerte para reprimir y no dejar prosperar esa violencia los estados liberales democráticos de hoy en día están especializados en la represión y no es un paradoja de eso se trata, son democráticos y te permiten actuar pero dentro de esas casillas que ellos ya han formado, si vos te salís de esas casillas hay un aparato represivo que te lo va a impedir eso ya está establecido, que es lo que tratan de hacer muchos de esos movimientos se tratan de mover ahí pero dentro de eso establecido alteran lo que pueden alterar, entonces la marchas es pacifica pero suenan 20 petos durante la marcha, no era tan pacifica (…) pero son los límites con los que juegan los

117

manifestantes y como van jugando con esas movilizaciones, siempre es jugando al límite84.

Desde la resistencia, la idea de este movimiento era jugar con los mecanismos de control y de represión del Estado hasta el punto de dejarlos sin armas suficientes para atacarlos, es decir, este movimiento tuvo la capacidad de no sólo sacar las personas que trataban de dañar la movilización, sino de mantener ese orden necesario, que evitaría cualquier tipo de ataque y represión por parte de la policía, entonces se puedo ver como estudiantes abrazaban y besaban los policías, como se los atacaba pero con bombas de pintura (quizá una forma de agredir artísticamente), haciendo de ellos un elemento más de la movilización y un elemento más sumado a la legitimación de la comunidad en general por la forma de actuar.

Algunos creen que hablar así de estas movilizaciones de año pasado puede sonar un poco romántico, pero los logros alcanzados por este movimiento estudiantil, haciendo no sólo alusión al movimiento de la universidad de Antioquia, sino a todo el movimiento Estudiantil Colombiano, fue histórico y demostraba lo que realmente ellos estaban buscando, es decir, fueron escuchados y tendidos en cuenta en un país donde la criminalización de la protesta social ha estado en su furor desde hace muchos años, en tanto, todo aquel que altera el orden está en contra del Estado, y a estos inmediatamente se les reprime con la policía y el ejército y luego con la cárcel. Y si hablamos del contexto particular de la Universidad de Antioquia se termina amenazando los líderes que hacen parte activa del movimiento, tratando de alguna forma de desarticular las organizaciones que aquí se encuentran. Pero este movimiento, con todo y estas dificultades, logró tumbar una reforma que incluso ya estaba radicada en el Congreso.

Pero la actuación de los estudiantes no se puede basar solamente en lo evidente, es decir, las movilizaciones todos los días transmitidas por los diversos medios de comunicación. También es importante mostrar y mencionar como estos estudiantes tuvieron la capacidad de incursionar en

84

James Gilberto Granada Vahos, Trabajador Social de la Universidad de Antioquia (2003), Segundo pregrado en Comunicación Social UdeA, Magister en Ciencia Política de la Universidad de Antioquia (2008). Actualmente docente de la Universidad de Antioquia. Entrevista realizada el 9 de septiembre de 2012

118

los propios escenarios de poder del Estado, como el Congreso de la República, mostrando su capacidad de discernimiento, su preparación y conocimiento con respecto a la ley 30 y su reforma; las discusiones que ellos llevaron a este recinto pusieron a tambalear las apreciaciones que había dado la Ministra de educación María Fernanda Campo, que en muchos casos demostró saber poco de lo que se había planteado en la reforma.

Otra lectura que se le ha hecho a las movilizaciones del 2011 y específicamente a los estudiantes de la Universidad de Antioquia, no son tan románticas pero demuestra el otro lado de la realidad del Movimiento Estudiantil. Las luchas del año pasado dentro la universidad de Antioquia, habría que mirarlas más en su incidencia por fuera de la universidad que dentro de ella, pues al interior existen espacios de discusión y dentro de ellos está la asamblea, los foros, las reuniones por organización, entre otras. Pero si se habla concretamente en lo que hacen estos estudiantes dentro de la universidad es seguir reivindicando pequeñas, pero importantes cosas dentro de lo institucional como el aumento de matrículas, la implementación de la TIP, la imposición de torniquetes a la entrada y la salida de la institución, el uso de bolillo por parte de quienes implementan la seguridad, entre otras, que hacen parte de las dinámicas de la universidad.

Al exterior de la universidad se vieron unos estudiantes más comprometidos e interesados en cambiar la realidad que los aquejaba, en cuanto a la reforma, pero la lectura que se hace, es que si bien los estudiantes llevan a cabo sus luchas no lo hacen por su misma generación, sino por generaciones posteriores, diferente a otro tipo de movimientos sociales, que si bien tienen sus luchas reivindicativa lo hacen por ellos mismos y por quienes están a su alrededor y que éstas a la vez perduraran en el tiempo. Los estudiantes no, los estudiantes son transitorios y regularmente se encuentra en una universidad por 5 o 7 años, lo que demuestra que la implementación de la reforma, no les sería aplicada a ellos, sino a generaciones posteriores, indicando esto, que las luchas estudiantiles son luchas sectoriales y no particularistas.

Ahora la otra particularidad, no tan romántica, es que los estudiantes cuando tratan de hacer apuestas reivindicativas no sólo de los estudiantes, sino de otros gremios y que esto se note a nivel nacional; de alguna forma, resultan instrumentalizados por otras agremiaciones y conformaciones nacionales. Entonces, en muchos casos resultan instrumentalizados por los

119

sindicatos, por diversas agremiaciones y en algunas ocasiones por organizaciones políticas que sólo buscan el fortalecimiento de su organización tanto dentro de la institución como por fuera de ella, más no del Movimiento Estudiantil como tal.

Entonces una ventaja es que todavía tienen la capacidad y el brío para ponerse en función de otros, cierto, que no son particularistas; pero una desventaja es que generalmente son instrumentalizados por este tipo de organizaciones, e incluso organizaciones políticas, entonces usted va a ver en la universidad que está el MOIR, usted va a ver en la universidad que está el POLO, que está la JUCO y generalmente ellos no funcionan en la perspectiva de un movimiento estudiantil, sino en el fortalecimiento de su propia organización dentro de la universidad85.

4.4. Elementos Novedosos Identificados En El Movimiento Estudiantil Durante el desarrollo de las movilizaciones y todas las actividades que se llevaron a cabo, hubo una infinidad de estrategias que en cierta medida pueden denominarse novedosas, en tanto son una combinación de las formas tradicionales de protesta vinculadas con lo cultural, no es que se hayan abandonado las clásicas formas de movilización establecidas desde 192086, sino que se han modificado y agrupado en un conjunto para lograr cambiar aspectos normativos y hasta estructurales de la realidad colombiana. Es de aclarar, que estas resistencias artísticas han sido invisibilizadas, porque no se han identificado como acciones políticas de transformación social, sino como meras apariciones creativas de los estudiantes universitarios para oponerse a una decisión estatal.

Las expresiones artísticas siempre han sido parte del Movimiento Estudiantil, inclusive, el teatro, del que yo tengo como datos (…) o la música – la canción social era como (…) música andina, grupos de música latinoamericana, eran muchos los que

85

Entrevista Rubén Darío Zapata, Editor de Periferia prensa alternativa. realizada el 13 de julio de 2012 Esto se puede inferir de la búsqueda teórica que se hizo acerca de la historia del movimiento estudiantil, si se quiere ahondar más en el asunto puede ser consultado el anexo A (Historia del Movimiento Estudiantil de La Universidad de Antioquia) 86

120

se armaban desde las universidades (…) expresiones artísticas siempre han intentado acompañar el Movimiento Estudiantil87.

Esta modificación o agrupación de estrategias artísticas en el desarrollo de las movilizaciones hace alusión, a que si bien en el pasado, estas formas alternativas o ciudadanas de comunicación se desarrollaban individualmente, apartadas y a la vez esporádicas; con las movilizaciones del 2011 y parte del 2012 se evidenció; que los medios ciudadanos de comunicación utilizados por los estudiantes de la Universidad de Antioquia, no son nuevos y mucho menos surgieron con lo que aconteció en el 2011, son formas clásicas de hacer protestas, pero reeditadas y con una carga más cultural, además de un factor o elemento muy importante y es una ―nueva fuerza‖ que no sólo legitimo estos espacios como aptos para mostrar su inconformidad, su resistencia; sino que permitió sumar otras fuerzas desde la comunidad en general. Entonces estaban los estudiantes de universidades públicas y privadas, los estudiantes de secundaria, padres de familia, profesores, un sector importante de la tercera edad, entre otros (medios de comunicación masivos, policías y hasta el mismo gobierno), que aunque no quisieran hacerlo sirvieron a la causa estudiantil; apareciendo aquí, la figura de lo que Gene Sharp denomina desde la resistencia, judo político.

Desde la movilización social clásica, las marchas adquirieron una dinámica muy interesante porque se abrió el espacio para las iniciativas creativas y culturales entonces se veían los estudiantes disfrazados, al dragón gigante, a los bailarines, a los zanqueros, todo esto se comenzó a dar, los barristas, los barristas del nacional salían con sus pancartas del nacional tocando su tambor con sus consignas pero muy ligadas a la educación, entonces dentro de todas esa parte de la movilización se siguió dando, pero se entró en una dinámica de innovar un poquito eso de las marchas, se hicieron bailatones, besatones, abrazatones y otra cantidad de tones más, cierto, ya eso fue un proceso donde se estaban buscando otras formas88.

Pero lo que más llama la atención en esta coyuntura fue el formato novedoso de la movilización, ese formato del desfile convencional con las consignas y pancartas

87

Eberhar Cano Naranjo (Estudiante UdeA, perteneciente al Colectivo de Identidad Estudiantil) Entrevista realizada el 27 de septiembre de 2012 88 Víctor Javier Correa Alvares (estudiante de 10º semestre de Medicina, UdeA), perteneciente a la MAREA (Mesa Amplia Regional Estudiantil de Antioquia). Entrevista realizada el 23 de julio de 2012

121

convencionales, fue un formato que conjuga eso convencional con expresiones novedosas en el baile, en lo festivo, un poco en lo carnavalesco y aquí hubo una cosa muy bonita que no estuvieron muy presentes en otros sectores; porque al lado de la marcha convencionales irrumpen grupos con canciones, con música, con baile con tribillos, etc., que le ponen un tono muy carnavalesco a la marcha a la movilización89

En tanto, lo nuevo es precisamente esa gran participación de varios sectores de la sociedad, donde lo más fuerte fue lo artístico, lo lúdico, lo simbólico, lo cultural. Esas formas ciudadanas que recodificaron discursos y los pusieron a disposición de los otros para que entendieran lo que querían decir los estudiantes. Ya no se veía con frecuencia circular los discursos contestatarios de los años 60, 70 y 80, ya se percibían discursos más cotidianos, coloquiales, en palabras tan comunes, que cualquier persona sin educación avanzada pudiera entender, esto en gran medida también permitió que se sumaran nuevas fuerzas a las protestas estudiantiles.

Otro aspecto importante que hace parte de lo novedoso dentro de las movilizaciones, es que los estudiantes ya no se piensan como estudiantes que reclaman determinados aspectos particulares, como el alza en las matrículas, no a los ICFES, no a los ECAES, no reelección del director universitario, etc. Sino que los estudiantes se pensaron y pusieron dentro de sus metas; construir un proyecto alternativo de universidad para el país, que no sólo busca una nueva educación para los colombianos, sino un nuevo país para las próximas generaciones.

Los espacios ganados por los estudiantes en diferentes lugares de discusión y toma de decisiones políticas, también ha sido novedoso, en la medida en que permitió incursionar en los propios escenarios institucionales y de poder del Estado colombiano, los líderes estudiantiles abanderados por la MANE, entraron al Congreso de la República e hicieron una fundamentación teórica y política de su protesta, no solo contra la reforma de la ley 30, sino contra la misma ley 30 que hace muchos años ha estado en detrimento de la educación pública y de la autonomía de las

89

Entrevista Jaime Rafael Nieto López: Sociólogo de la Universidad de Antioquia (1987), Magister en Ciencia política de la Universidad de Antioquia (1996), Doctor en Pensamiento político, democracia y ciudadanía de la Universidad Pablo de Olavide (2011) y especialista en el tema de resistencia civil. Actualmente docente de la Universidad de Antioquia. Entrevista realizada el 3 de septiembre de 2012

122

universidades. Con ello, buscaron no sólo deslegitimar un proyecto que buscaba vender la educación, sino plantear un nuevo modelo educativo para el país donde se permita crear, imaginar y proponer.

Como se decía anteriormente, lo simbólico jugó un papel muy importante a la hora de concientizar y llamar la atención de la población en general, y aunque lo simbólico siempre ha acompañado al Movimiento estudiantil, en el desarrollo de las protestas del 2011, la carga simbólica que se podía inferir en ellas era tan superior a la anteriormente utilizada por el movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia, que logró llamar la atención de otras personas, legitimar su discurso y enganchar a los otros sectores de la sociedad a las dinámicas que se estaban realizando; además que alcanzó a impactar en los espectadores el mensaje que se quería dar a conocer.

El mensaje no era dado como por el tradicional megáfono o la pancarta así grande con la súper frase, sino que era una cosa muy simbólica que lo vimos desde el teatro, el maquillaje, la puesta en escena. Entonces por ejemplo, una de las fotografías que a nosotros más nos visitaron y nos compartieron y comentaron como unas 25.000 veces, fue una fotografía de un par de chicos en medio de la protesta disfrazados de payasos. Una chica y un chico y era una cosa aparentemente muy simple, pero eso que se explicara que esos eran los estudiantes, que no estaban, pues la fotografía lo decía, no estaban encapuchados, no estaban haciendo un acto de violencia, de fuerza. Simplemente estaban disfrazados de payasos y a través de eso estaban haciendo protesta y eso fue muy clave y muy claro a la hora de llamar la atención (…) la forma en que los chicos representaban que si la Reforma se aprobaba nos quedábamos sin educación pública. El estudiante amarrado las manos o el libro destruido o el dibujo del libro de las gafas, pues lo que significa como la intelectualidad o el conocimiento en llamas. Como te digo, todo lo simbólico que es muy poderoso para la mente humana, más allá de un discurso o de unas palabras que uno puede no comprender o no interesarle90.

90

Catalina Vásquez Guzmán corresponsal periódico alternativo argentino “Página 12” y Editora del periódico ¿Qué pasa UdeA? Entrevista realizada el 8 de agosto de 2012

123

Dado lo anterior y desde el análisis de Mead (Citado en Blúmer, 1982:7), sobre la interacción simbólica, demuestra que esta es importante en la medida que está permeada por los gestos y que estos gestos a su vez esperan una repuesta de la persona que los percibió; es decir, un gesto encierra dentro del acto una pequeña parte donde expone su significado del acto mismo, la persona a la cual va dirigida y que es aquella que debe responder, organiza su respuesta de acuerdo al significado que estos gestos encierran para él. La persona que realiza dichos gestos se sirve de ellos como signos o indicaciones de lo que quiere dar a entender o lo que proyecta hacer, para que el otro haga o comprenda lo que este quiere. Por lo tanto, los gestos tienen significado, no sólo para las personas que los produce sino para aquel al que van dirigidos. En tanto, cuando el significado es análogo para ambas partes éstas se comprenden mutuamente.

Al principio cuando nos dieron el caballito de batalla que era lo del ánimo de lucro. Entonces juguemos con eso el símbolo de peso, cosas muy sintéticas, muy desde el símbolo (…) El lenguaje, recrear el lenguaje es fundamental91

El último elemento novedoso identificado dentro de esta investigación, no es que así lo sea, fue el uso constante de diversos estudiantes de las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación), para dar a conocer su situación a nivel incluso mundial, pero propiamente en Colombia y específicamente dentro de la Universidad de Antioquia, los estudiantes hicieron uso de estos medios ciudadanos de comunicación por medio de las redes sociales, en facebook, twitter, My Space y otras; no solamente para convocarse ellos mismos a las movilizaciones, espacios de reunión y discusión; sino también para dar a conocer su situación ante la comunidad colombiana. Entonces se convocaba a una marcha y quienes no podían asistir estaban rotando las fotos y los videos por estos medios de lo que acontecía en la ciudad. Aquellas personas que utilizaban sus celulares por medio del pin e incluso por medio de redes compartían al igual fotos y videos de lo que estaba pasando; la televisión, la radio y la prensa (también prensa alternativa) igualmente, fueron aliados en ese momento de los estudiantes universitarios. La mayoría de la población medellinense y colombiana hablaba de los estudiantes y había pocos lugares de la

91

Felipe Cardona Restrepo (Estudiante UdeA, perteneciente al Colectivo de Identidad Estudiantil) Entrevista realizada el 27 de septiembre de 2012

124

ciudad y el país, en donde no se mencionara lo que los estudiantes de la universidad estaban haciendo.

4.5. Surgimiento De Lo Artístico En Las Movilizaciones Lo artístico, lo lúdico, lo cultural y lo no violento dentro de la movilizaciones, puede obedecer a diversos factores; el primero de ellos, hace alusión al contexto local, nacional e internacional; el segundo, a cuestiones más de índole subjetiva, más de forma de hacer las cosas, de cambio de generaciones, nuevas subjetividades políticas; y como un tercer factor, la forma correcta de dar el mensaje, no permitiendo que este sea tergiversado por otros y mostrando su verdadera intencionalidad.

En cuanto al primero de ellos el contexto; hace referencia a lo actual, al surgimiento de lo artístico en las movilizaciones, denota que en Colombia, la población está cansada de la violencia, la muerte, la persecución, los falsos positivos y otras tantas, que han sido implementadas a través de los años por los gobiernos de turno, su fuerza represora, las guerrillas, los paramilitares, los narcotraficantes, sin dejar de lado las pandillas barriales y otras conformaciones violentas (BACRIM), que han aparecido en toda la historia del país. Pero hay otro componente activo que hace parte de la violencia y es la televisión colombiana que sólo transmite desde su programación y específicamente los noticieros, un discurso militarista y violento. Entonces, una población cansada por toda esta violencia y los abusos del poder; consecuentemente, legitimaría y aprobaría estrategias de tipo no violento y cultural, para la defensa de los derechos.

En estos casos de la no violencia, es posible que las personas tiendan a ser parte de las protestas y se sumen al descontento que se viene presentando. Lo artístico y lo cultural, se vuelve divertido, ameno y llamativo para aquellas personas que han estado casi toda su vida en contextos de violencia. Estas expresiones además de causar un gran impacto, llevan a la población incluso a la lúdica y al juego, pero no un juego por el juego, sino un juego con sentido, un juego cargado de contenido y este a su vez de símbolos y estos símbolos, a ejercer resistencia.

125

Este viro en el desarrollo de las movilizaciones, de las formas de protestas, de las maneras de organizarse y de la creatividad que tuvo el movimiento estudiantil, también obedece a las situaciones del contexto internacional. Un contexto cargado de descontentos sociales debido al monopolio constante de aquellos que tienen el poder sobre la población; que hizo estallar en diversas partes del planeta, protestas de todo tipo de movimientos sociales, acciones colectivas y resistencias; tales son los casos de Túnez, Egipto, Sahara Occidental (primavera Árabe), en Estados Unidos (los Ocuppy de Wall Street), en Europa (en Grecia ,España, con el M 15 y diversas movilizaciones por la recesión económica en que se encontraban el continente europeo). Otros países propiamente con movilizaciones estudiantiles como Puerto Rico, Europa con el plan Bolonia, Chile por el ánimo de lucro en la educación, Canadá por una mejor educación y Colombia por la reforma de la ley 30 de educación superior.

Todo este contexto, cargado de tanta inconformidad nacional e internacional, mostró a los estudiantes colombianos y entre ellos los de la Universidad de Antioquia, que quizá era el momento oportuno para llevar a cabo sus protestas en contra no solo de la ley 30 y su reforma, sino de todo el modelo educativo colombiano. Las condiciones nacionales e internacionales estaban dadas para llevar a cabo las protestas estudiantiles, e incluso se llegó a creer que en el 2011 estaba de moda marchar y protestar a nivel mundial. Lo que más reivindico las luchas estudiantiles fue el caso análogo de los chilenos, un movimiento estudiantil que estaba peleando porque en este país se estaba implementando el ánimo de lucro en la educación, estos chilenos fueron los suficientemente creativos para llevar a cabo sus protestas e incluso ser el catalizador ideal para que el movimiento estudiantil no sólo de la Universidad de Antioquia, sino el colombiano, retomara de ellos los asuntos más interesantes y creativos para implementarlo en el contexto local.

Por ahí dicen que los momentos históricos tienen que ser constituidos internacionalmente y localmente o necesita unas condiciones internacionales o locales y estaban dadas. El año pasado, estaban dadas, había condiciones internacionales92

92

Johan Giraldo Ospina (Estudiante de 4º semestre de Derecho UdeA) perteneciente al movimiento de la UdeA representante de la Facultad de Derecho. Entrevista realizada el 26 de septiembre de 2012

126

Nosotros veníamos de ver por la televisión y las redes sociales el proceso de movilización chileno, los chilenos empezaron con todo el asunto, creo que el año pasado, parte del éxito de la movilización estudiantil en Colombia (…) Aquí la marcha también estaba como muy en el ambiente, la gente, el intercambio de movilizaciones, entonces ahora sí era necesario93

El segundo aspecto, muestra como no solo el contexto y los factores externos, medían la forma de responder a situaciones críticas de la realidad social, la posición política, ideológica, ética y generacional de la persona también hace parte de esta forma de responder a escenarios de represión.

La coyuntura 2011 y propiamente la reforma que se venía gestando contra la ley de educación superior, llevaron a los jóvenes estudiantes, se dice jóvenes porque en su mayoría lo fueron, a buscar nuevas formas de mostrarse en lo político, ya no desde una acción rebelde y contestataria como las de los 70 y 80, sino más cultural y simbólica, que pudieran ser entendidos por aquellas personas que no hacen parte de los círculos donde circunda distintas ideologías. Además que en la política actualmente; los universitario ya no la evidencian como aquella hecha por la vía convencional, la del activista político que debe estar de la mano de un partido político, sino más desde la confluencia de saberes, desde la unión, desde otras expresiones culturales y sociales como las que se muestran en diversos movimientos y como la que vivieron ellos en esta coyuntura, en la medida en que sumaron esfuerzos con el movimiento popular colombiano y en alguna medida latinoamericano.

Hoy, los estudiantes de la Universidad de Antioquia, hicieron un llamamiento a lo cultural, a lo reformateado94, a lo nuevo, a lo hibridado, a las nuevas formas de expresión que impulsaron lo festivo, lo lúdico, lo carnavalesco; para intentar desdramatizar las situaciones vividas, además

93

Víctor Javier Correa Alvares (estudiante de 10º semestre de Medicina, UdeA), perteneciente a la MAREA (Mesa Amplia Regional Estudiantil de Antioquia). Entrevista realizada el 23 de julio de 2012 94

Se quiere decir con ello, que el movimiento estudiantil de la UdeA y el colombiano, a través del tiempo han utilizado formas de lucha que se habían llegado a convertir en un formato convencional y desgastado, que en la mayoría de las ocasiones la sociedad ya no aceptaba. Dadas las movilizaciones del 2011 se comenzaron a identificar nuevos formatos de lucha y movilización que cambiaban o reformateaban los anteriores, desde un ámbito más lúdico y artístico.

127

que permitió recuperarle un sentido a estas desde lo no esquematizado, lo no formateado, lo no encasillado, que posibilitó de alguna forma; ese cambio de subjetividades, de mentalidades y que estos cambios en las mentalidades, han llevado también a reformular lo político y la forma de participar en lo político, ya no esto político queriendo eliminar e invisibilizar lo cultural, sino esto político cargado de sentido cultural. Los estudiantes lograron oponerse al gobierno y ganarle una batalla desde esta nueva forma de vivir lo político, es decir, desde lo cultural, lo artístico, lo lúdico, lo no violento y lo legitimado por la comunidad colombiana. Que en cierta medida podemos denominar, resistencias artísticas.

por un lado que la subjetividad de los estudiantes ha cambiado no es la misma subjetividad de hace 30 ó 40 años, hace 30 ó 40 años, la subjetividad estudiantil, digo universitaria, era

profundamente politizada e ideologizada, muy, muy politizada,

ideologizada tiene que ver obviamente con las corrientes marxistas, nacionalistas, revolucionarias que estuvo muy presente no sólo en Colombia sino en América Latina no, es una época de esplendor de la revolución cubana, de la revolución vietnamita, la revolución china, el che Guevara, el ascenso de la revolución, osea, ese gran esplendor, ese romanticismo revolucionario, eso marcó mucho los años 70.

Pero yo creo, que a finales del siglo XX comienzos del siglo XXI, las subjetividades juveniles y particularmente las subjetividades de los jóvenes universitarios ha cambiado mucho, se nutren de otros referentes, sobretodo ligado al campo de la cultura ya no vinculado tanto a la política, no es que no se interesen por la política, sino que la política ya no tiene ese referente tan fundamental que tuvo en períodos anteriores, ahora ya hay espacio y mucho espacio para otras formas de vivir y proyectar la existencia de relacionarse con los otros más vinculado con la música, más vinculado con el baile, más vinculado con la moda, con los estilos de vida, con las comunicaciones, con las redes. Osea, ahora hay otros referentes que cuestionan y les dan vivensidad a los jóvenes, particularmente a los universitarios y ya no solo el referente político y de lo ideológico95.

95

Entrevista Jaime Rafael Nieto López: Sociólogo de la Universidad de Antioquia (1987), Magister en Ciencia política de la Universidad de Antioquia (1996), Doctor en Pensamiento político, democracia y ciudadanía de la Universidad Pablo de Olavide (2011) y especialista en el tema de resistencia civil. Actualmente docente de la Universidad de Antioquia. Entrevista realizada el 3 de septiembre de 2012

128

El tercer aspecto, es la tecnificación y la rapidez actual que tienen los medios de comunicación para hacer saber una noticia en un segundo puede tener elementos en contra y a favor de las luchas sociales. Particularmente para el caso estudiantil, era una realidad que los medios de comunicación, si son de la gente del poder, durante sus movilizaciones, estarían del lado del poder. Por eso no se podían arriesgar a utilizar la violencia en sus protestas; porque cualquier forma de acción violenta sería transmitida de inmediato por estos medios y se comunicaría a la opinión pública un mensaje diferente al que ellos querían dar. La forma de desestabilizar estos medios y poder transmitir su verdadero mensaje, fue por medio de nuevos formatos de movilización, en los que la violencia no tiene cabida, en los que la creatividad desborda lo conocido. Nuevos formatos que desvincularan cualquier tipo de violencia.

Se sabe de la estigmatización que sufre la protestas social y sobretodo la estudiantil que ha sido criminalizada desde su nacimiento, es por esto que los estudiantes, sabiendo la situación tan crítica que estaba viviendo la educación en el país, no podían darse el lujo de incursionar en revueltas que apartaran y espantaran la comunidad, sino más bien hacerles entender que la educación no es sólo un problema para los estudiantes, sino un problema de todo el país y sus generaciones futuras. La idea era mostrarle a la sociedad colombiana, que la educación es el pilar de un país y sin ella, difícilmente mejorarían las condiciones de vida. Mostrarles que la democracia se hace con la gente y con una verdadera participación en las calles.

De ahí, que surge el aspecto artístico y lúdico; de la necesidad de convocar, legitimar y hacer partícipes a los padres de familia, los niños y niñas, los ancianos, jóvenes, asociaciones comunitarias, es decir, toda la población que se pudiera adherir a las luchas estudiantiles y que posibilitaran una concienciación de la realidad colombiana, pues difícilmente bajo lógicas de violencia se hubiera alcanzado el impacto y la aceptación que tuvo este movimiento.

El surgimiento de estas expresiones artísticas, no se dimensiona desde un pacto o un acuerdo explicito para llevarlas a cabo, fueron actividades que iban naciendo durante el tiempo, el tipo de

129

contexto, además del tipo de movilización que predominó. Ejemplo de ello, los abrazos y los besos a los policías, los ataques no con piedras sino con pinturas, la flor que se entregaba a los policías, el estudiante disfrazado de payaso o de claun, las obras de teatro improvisadas, la música, los graffitis, los perfomances, el dragón carnavalesco, entre otras estrategias. Que buscaban llamar la atención de la población, la intensión de proponer nuevas formas de movilización y democracia, además de buscar ser llamativas en la medida que pudiera venderse la idea de un movimiento diferente, comprometido con la realidad social del país, un movimiento pacífico que buscaba ganarse un derecho por las vías ―legales‖.

Lo anterior, denota que los estudiantes de la Universidad de Antioquia y los universitarios colombianos, si alcanzaron a dimensionar el alcance de la utilización de estos medios ciudadanos artísticos, lúdicos, de construcción con la comunidad, en tanto alcanzaron a legitimar su posición y su lucha. Estos medios artísticos, aunque improvisados en algunas ocasiones, de antemano ya tenían un significado y una intencionalidad previa; la de llamar la atención, generar impacto en los medios masivos de comunicación, convocar otros sectores de la comunidad, legitimar sus actuaciones, tumbar la reforma de la ley 30 y construir con los trabajadores y profesores, una nueva ley alternativa de educación para Colombia.

Esto más que un acuerdo al que se llegó explícitamente, son cosas que se dieron con el tiempo y con el tipo de movilización que predominó. Por ejemplo, los abrazos a los policías que se vio en Bogotá, aunque eso tendría su discusión, cierto, pero son cosas que no se veían y llamaron la atención de la gente y eso es pues algunas de las cosas que se realizaron que tenían la intensión de proponer algo, ser llamativos, vender, acá en unos términos un poquito mercantilistas, no de vendido, sino de vender la idea, al movimiento y para eso necesitábamos ser creativos, llamativos, que dijeran, ―ve que bonito lo que están haciendo‖, y eso llevó a que todo mundo buscara las estrategias para eso96.

96

Víctor Javier Correa Alvares (estudiante de 10º semestre de Medicina, UdeA), perteneciente a la MAREA (Mesa Amplia Regional Estudiantil de Antioquia). Entrevista realizada el 23 de julio de 2012

130

Desde la resistencia, el surgimiento de lo artístico en las movilizaciones; se debe a que estas expresiones o estrategias culturales no violentas, contienen una carga inminentemente simbólica que genera un gran impacto en la población a nivel emocional, llevando el mensaje a un nivel más profundo; el de la memoria y los sentimientos. Según Boserup y Mac (citados en Randle, 1998:125), las actuaciones estudiantiles están estipuladas en lo que ellos denominan ―propaganda mediante hechos” en la que los universitarios, dejaron en la comunidad claros sus objetivos y la convicción que la mejor forma de alcanzar cambios y transformaciones, es por medio de las resistencias artísticas.

Del mismo modo, Boserup y Mac, identifican en las resistencias artísticas utilizadas por los estudiantes universitarios, un gran contenido simbólico en que se permite alcanzar tres funciones, que fueron más que evidentes en la coyuntura 2011; la primera es que llama la atención de la gente, en este caso, hacia la reivindicación de un derecho como la educación pública; el segundo, es que estas estrategias se constituyeron en la expresión de la unidad y la resistencia de los estudiantes universitarios; y la tercera fue que llevaron a la población civil, a los medios de comunicación, a la fuerza pública y hasta el mismo gobierno a adoptar una postura respecto a las acciones estudiantiles y sus objetivos.

4.6. Medios Ciudadanos De Comunicación Utilizados Por Los Estudiantes, En El Marco Del Proyecto De Ley 112 De 2011 En el transcurso de las movilizaciones estudiantiles del año 2011, se identificaron una variedad de medios ciudadanos ―artísticos‖, que innovaron la forma clásica de protesta universitaria. En ellos, se evidenciaba un deseo de transmitir a los colombianos las vicisitudes por las cuales estaba pasando la educación en el país. Una educación, como se había mencionado antes, que estaba entrando a hacer parte de la comercialización de derechos; que respondan a los elementos fundamentales del modelo neoliberal.

Para transmitir este mensaje, los universitarios se idearon formas creativas, lúdicas y artísticas, que generaran resistencias pacíficas y que a la vez estuvieran cargadas de un sistema de códigos e imágenes impactantes y representativas, que evidenciaban el alto simbolismo al que hacían

131

alusión. Entonces se veía a los estudiantes disfrazados de muerte y cargando un ataúd que tenía por nombre educación (la educación ha muerto), unos estudiantes disfrazados de claun, de payasos, otros tantos de zanqueros, los encapuchados con gorritos navideños, otros de títeres manipulados por una figura de Juan Manuel Santos, sin mencionar aquellos que pintaban sus cuerpos desnudos con frases alusivas a la reforma. Además se encontraban los carnavales con dragones, las campañas de salud concientizadoras, las abrazatones, las besatones, las bailatones, el cacerolazo, la marcha de antorchas, las actividades político – culturales. También es necesario identificar dentro de las marchas tradicionales, variedad de instrumentos musicales de aire, de percusión, de cuerda; ejemplo de ellos, las trompetas, las guitarras, los pitos, las carrascas, los tambores, las flautas, entre otros; que en la mayoría de los casos conformaban chirimías.

Estas formas creativas, lúdicas y artísticas de generar resistencia, son denominadas por James Scott como ―discurso oculto‖, en la medida, en que las expresiones utilizadas por los estudiantes ante la opinión pública manejan un discurso disfrazado, que anteriormente fue deliberado ocultamente y que surge a flote pero con un nuevo discurso; enmascarado en las artes escénicas, musicales, de pintura, danza, entre otros. Que han servido, para mostrar sus críticas al poder establecido por el gobierno de Santos, pero que al mismo tiempo preservan en el anonimato otras explicaciones a su accionar.

En cuanto a medios de comunicación electromagnéticos se refiere; se encontraba entonces los videos, uno que fueron producción propia de los universitarios, otros manipulación de propuestas hechas por el gobierno; estaban los flashmob, la conformación de diversos blog, de diversas páginas en facebook, otras en twitter (redes sociales), la comunicación por celulares. También, la utilización de medios más tradicionales como la pinta (Graffiti), el panfleto, asambleas permanentes y por último el paro.

Fuimos a plazas públicas a ver como se estaba viendo allá, montamos unas brigadas de salud universitarios, entonces se conformó una brigada de salud para los barrios que aquí se llamó el ―carnaval de la vida‖(…) Lo que se vivió el año pasado en términos de la movilización estudiantil marca un hito, porque se desliga un poco de la resistencia violenta y empieza a buscar otras formas de participación y una función diferente y

132

comenzamos a ver como el estudiantado en Colombia se comienza a organizar bajo una serie de dinámicas que incluían estrategias de diferente orden.

Por un lado estrategias comunicativas; vinculadas directamente con la difusión y transmisión visual y auditiva, la cantidad de videos, informes, chistes y cosas que salieron en ese período, salía de todo, salían los chistes de la ministra, el contra ataque de los estudiantes contra la presión mediática del gobierno, falsificando los mismos videos del gobierno, una cantidad de cosas desde los comunicativo. Desde la movilización social clásica, las marchas adquirieron una dinámica muy interesante porque se abrió el espacio para las iniciativas creativas y culturales entonces se veían los estudiantes disfrazados, al dragón gigante, a los bailarines, a los zanqueros, todo esto se comenzó a dar, los barristas, los barristas del nacional salían con sus pancartas del nacional tocando su tambor con sus consignas pero muy ligadas a la educación, entonces dentro de todas esa parte de la movilización se siguió dando, pero se entró en una dinámica de innovar un poquito eso de las marchas, se hicieron bailatones, besatones, abrazatones y otra cantidad de tones más, cierto, ya eso fue un proceso donde se estaban buscando otras formas.

Otra actividad que hicimos fue los cacerolazos, que son como replicas de lo que se venía haciendo en otros países del mundo, las marchas de antorchas, los carnavales nocturnos, que aquí realizamos un carnaval nocturno, que era nacional, pero que aquí lo realizamos, es decir, en el país lo hicieron con marcha, nosotros acá nos fuimos para la Oriental, prendimos como 2000 0 3000 no me acuerdo muy bien, antorchas estuvimos y en medio de los semáforos pasábamos a la gente con las antorchas y ese montón de vehículos que normalmente transitaban porque el objetivo era estar ahí, que nos vieran, pero no bloquear la vía para poder informar. Que fue una dinámica pues distinta a la marcha, eso como a nivel grande pues de las estrategias que se utilizaron y se veía más97. Y el último elemento – como la frutilla del postre - el paro. Siempre dijimos ese es el último mecanismo. La UdeA es un caso aparte, como podríamos decir, en otro tema,

97

Víctor Javier Correa Alvares (estudiante de 10º semestre de Medicina, UdeA), perteneciente a la MAREA (Mesa Amplia Regional Estudiantil de Antioquia). Entrevista realizada el 23 de julio de 2012

133

pero dijimos, vamos a hacer un paro nacional articulado. En el mismo momento vamos a salir todas las universidades a paro y obviamente el paro, ya tiene otros elementos que también tenían que hacer otro tipo de presión98.

Todas las estrategias, novedosas, artísticas y no violentas descritas anteriormente, hacen alusión a las dinámicas que se gestaron en el marco a la reforma de la ley 30; pero para el caso particular de esta investigación, los medios de comunicación ciudadanos a los que se hará referencia son el Graffiti, el Performance y la Música, como medios que ayudaron a la reivindicación y legitimación de las actuaciones estudiantiles a favor de la educación pública. Estas estrategias, como ya se había mencionado, no son nuevas ni propias de la coyuntura 2011, son elementos utilizados por el movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia y el colombiano a través del tiempo, pero que han sido retomadas y reeditadas para ajustarlas a esta nueva realidad.

4.6.1. Graffiti

El Graffiti, o la pinta como mejor la denominan los estudiantes de la Universidad de Antioquia, es visto como un graffiti contracultura en la medida que a partir de él, no solo muestran su inconformidad, sino que son expresiones de resistencia que utilizan para ir en contra de un orden central establecido y sus mecanismos de represión. También es visto como una forma de recobrar la palabra ante el constante acallamiento que viven, además de ser una forma popular y creativa de romper los discursos monolíticos del Estado y de sus instituciones.

Los graffitis identificados en las movilizaciones estudiantiles, no solamente iban en contra de la nueva reforma a la educación, también hacían alusión a los malos manejos del Estado, contra la religión, el desempleo, contra el TLC, contra las elecciones, contra la ley 100, por el derecho a la salud; entre otros asuntos. A continuación se hará referencia a algunos de los graffitis utilizados por los estudiantes en las protestas del 2011:  ―Salud y educación pública, al servicio del pueblo‖

98

Felipe Cardona Restrepo (Estudiante UdeA, perteneciente al Colectivo de Identidad Estudiantil) Entrevista realizada el 27 de septiembre de 2012

134

 ―No queremos caridad, luchamos por la dignidad‖  ―+ educación, - represión‖  ―Educación como derecho, no como limosna‖  ―Educación informal para el empleo inmediato‖  ―Si la U pública la vuelven empresa, volvemos las aulas trincheras‖  ―El pueblo unido, funciona sin partidos‖  ―Si es ilegal decir la verdad, entonces seré clandestino‖  ―querer tener el poder, significa odiar al pueblo‖  ―Ministra le tenemos protesta, pero también propuesta‖  ―El Estado se está gastando tu dinero en armas y no en libros‖  ―Donde hay educación, no hay distinción de clases‖  ―Si los de abajo nos movemos, los de arriba se caen‖  ―No seas parte de la generación que entrega la educación a los corruptos de la Nación‖  ―Del salón de clases, a la lucha de clases‖  ―La educación no es mercancía, así que no le sume el IVA‖  ―Nuestros sueños no caben en sus urnas‖  ―Iglesia: orden represivo‖ ―Dios bendiga este negocio‖  ―Si la iglesia es el opio del pueblo, Santos es la burundanga‖  ―Morirán personas, jamás ideas‖

4.6.2. La Música

La música, ha sido otro medio de comunicación ciudadano, que ha acompañado el movimiento estudiantil desde su nacimiento. La música para los estudiantes es tomada desde la diferencia social, como un elemento que surge propiamente del pueblo, no de las élites y mucho menos de la clase dirigente. En sus protestas, ha sido una forma de mostrar su descontento de una manera significativa, llamativa y como un dispositivo de resistencia.

La música para los universitarios, denota una imperiosa necesidad de cambio social y cambios estructurales, como es el caso de la reforma de la ley 30 de educación y la utopía de crear una

135

nueva educación para el país, además de ser un elemento extremadamente convocante que ayuda a integrar otros sectores y comunidades a las luchas estudiantiles.

En la coyuntura 2011, las movilizaciones estudiantiles siempre iban acompañadas de una comparsa, una chirimía, lemas, canciones creadas, otras editadas a su propia necesidad, que mostraron a la comunidad lo que estaba sucediendo con la educación colombiana. Asimismo, se generó una memoria histórica, en la medida que muchos de estos lemas y de estas canciones quedaron grabadas en las mentes de aquellos que las escuchaban. Lo que ratifica, que no hay revoluciones sociales, en este caso estudiantiles, que sean sordomudas y que gracias a esto, permanecerán en el tiempo.

Una de las creaciones más impactantes del movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia, en cuanto a música de protesta contra la reforma de educación planteada por Santos, se refiere, es ―la cumbia del estudiante‖ del artista universitario; Zafarrancho. En ella, se plantea la actual situación de los estudiantes en cuanto a las garantías que se tienen en el país para poder estudiar en una institución de educación superior. Quizá, esta canción fue el lema y el símbolo que identificó las protestas universitarias en el 2011 y particularmente a los estudiantes de la UdeA.

La cumbia del Estudiante:

Aún sigo despierto no pude descansar Porque hoy debo enfrentarme a un duro parcial. Desde las cinco a.m. se despertó mamá Para hacerme la coca que yo he de almorzar.

La mañana es fría y aún no sale el sol El bus nada que pasa tengo preocupación Llegué tarde a la U entro rápido al salón Y una cara agria me hace el profesor

136

Esta es mi vida a diario, mi voz nada oculta Pero en los noticieros la falsedad abunda Por eso yo respondo de manera rotunda Cuando en la calle me preguntan Coro ¿Quién es usted? Soy estudiante No lo escuche, soy estudiante Una vez más, soy estudiante Soy, soy estudiante soy Yo quiero estudiar Para cambiar la sociedad

Ahora de nueve a doce, en clase magistral Tomando bien la nota de cálculo integral Mi cerebro se cansa y empiezo a pestañear Pues la noche anterior me toco trasnochar Si guardo pa‘l pasaje, no tengo pa‘ comer Y creo que ya nada de esto se va a poder Porque el profesor nos mando a leer Un largo documento y la plata se fue

De esta manera expreso como mi vida es dura Y que no es la misma que en la calle murmuran Yo sueño ver mi tierra sin tanta dictadura Y responder tranquilo a quienes me preguntan (Coro) Políticos de turno quieren empantanarnos Porque somos pensantes y no nos conformamos Pa‘ qué diablos comprar armas de alto calibre Si no nos educamos, nunca seremos libres

137

De México, Argentina se unen los estudiantes Queriendo un mundo nuevo, buscando echar pa‘lante Y no nos rediremos si no entienden tu mente Que somos estudiantes, no somos delincuentes ESTUDIANTES DE TODO EL MUNDO VAMO A LA LUCHA99

4.6.3. El Performance

Las acciones performanticas, no podrían denominarse como estrategias novedosas en la coyuntura actual, ya que se vienen utilizando desde los años sesenta como una forma de oponerse al orden establecido. Gradualmente, este performance se fue imponiendo como un elemento clave a la hora de resistirse, por medios artísticos, a lo institucional, lo elitista y lo consumista; convirtiéndose prontamente en un acto de provocación política. Los estudiantes, lo han asumido de igual forma, pero con otros tantos componentes; como el de legitimar sus actuaciones, llamar la atención de la comunidad y como un elemento simbólico que quiere insinuar y mostrar más de lo que las mimas palabras pueden explicar.

El performance, realizado por los estudiantes de la UdeA, irrumpía en las movilizaciones y captaban la atención de los asistentes y de quienes se encontraban alrededor, en un acto efímero que quiere concientizar e informar sobre lo que venía sucediendo con la educación pública en el país. Estos cuerpos casi desnudos y pintados, además querían protestar por las imposiciones de un Estado, enmarcado dentro de un modelo neoliberal, que pretendía dejar sin futuro a las próximas generaciones.

Este arte en acción, representado por los universitarios, unas veces como mimos, otros como payasos, algunas veces como claun, otras tantas como marionetas y muchas veces como lienzos vivos. Montaban pequeños escenarios dentro de las protestas, mostrando una realidad, quizá

99

Zafarrancho. La Cumbia del Estudiante. http://www.youtube.com/watch?v=EeUHkUgjJns

Duración;

4:16.

Producción;

Afrovisual.

[Online]:

138

cruda, pero verdadera; que trataban de exponer versiones diferentes a las establecidas por los medios masivos de comunicación, en un proceso de construcción propio, donde ellos eran los protagonistas de esa realidad escenificada.

Esta forma de resistencia, al igual que la música, el graffiti y otras tantas utilizadas por los estudiantes, denotan la necesidad de resistirse ante las decisiones de un gobierno, como el de Santos, que quiere vender el bien más preciado de la sociedad, la educación. Asimismo, de convertirse en una crítica a este tipo de vejámenes, no a través del arte convencional, sino a través de nuevas propuestas que se ajusten a la complejidad del nuevos contextos.

4.7. Propósito De Las Movilizaciones Estudiantiles El objeto de esta investigación hace alusión a la resistencia civil no armada desde los medios ciudadanos de comunicación utilizados por los estudiantes de la U de A en contra de la reforma de la ley 30, pero si se quiere hacer una lectura más analítica de lo que realmente se vio en el 2011 con el Movimiento Estudiantil, sería muy difícil ubicar las actuaciones estudiantiles únicamente en contra de la reforma de la ley 30 de educación. Más bien se denominaría como un genérico, porque estás luchas no sólo se reducían a esto, no sólo era un movimiento contra reforma de la ley 30, resulta un poco arriesgado mirarlo desde estos parámetros pero por cuestiones metodológicas era necesario, pero se hace la claridad que es impreciso ubicar estas actuaciones en tal sentido.

El movimiento Estudiantil de la Universidad de Antioquia y también el colombiano, era un movimiento por muchas cosas; contra el sistema educativo, contra el sistema capitalista, contra la desigualdad, contra la represión de la protesta pacífica, contra la ley 30 y necesariamente contra la reforma de la ley 30, y otras cosas más. Pero sobre todo era un movimiento en búsqueda de un nuevo modelo educativo para el país, en búsqueda de un mejor país para las generaciones futuras y que mejor forma de hacerlo, según ellos, que por medio de la educación.

139

El punto es que la lucha estaba, y se dijo ombe100, vamos a transformar la educación en Colombia, el sueño estaba, vamos a tumbar la reforma pero sin violencia, buscamos un país mejor, una educación mejor del tamaño de nuestros sueños. No es lo que hay, queremos un país distinto y si lo podemos construir a través de la educación, lo construiremos a través de la educación, eso no estaba, lo bueno de este movimiento es que a pesar de las dificultades a perdurado, porque dimensionó en ese momento el alcance de poder tumbar esa reforma y sin una nueva universidad, no hay una nueva educación101.

En muchas ocasiones se dimensionó el movimiento Estudiantil de la UdeA, en contra de la reforma de la ley 30, ni siquiera en contra de la ley 30, sino solamente de su reforma, esto se podía notar en los anuncios de la prensa como el Colombiano, el Tiempo, el País y otros, en los canales regionales RCN y Caracol se escuchaba los mismo, en la radio y en todos los lugares se escuchaba que los estudiantes se encontraban protestando en contra de la reforma a la ley de educación superior.

Estudiantes marcharon contra Reforma de Ley 30: Las universidades públicas y algunas privadas se sumaron a una marcha común para protestar contra la reforma a la educación superior (El país, 2011:A7).

Realmente los estudiantes marchaban y protestaban, como se dijo anteriormente por diversas cosas, pero en la que más hacían hincapié, era la búsqueda de una nueva educación para el país, una educación construida por los estudiantes, una educación para la sociedad, una educación como derecho no como servicio, una educación autónoma, crítica, transformadora, creadora. Que sea Universal y popular102, democrática103, pluriétnica, científica, humanista, artística, intercultural. Una educación con proyección social.

100

La palabra ombe es un coloquialismo de la ciudad de Medellín y de otras regiones del país, pero desde lo que nos quería expresar nuestra fuente, está haciendo alusión a la palabra hombre 101 Víctor Javier Correa Alvares (estudiante de 10º semestre de Medicina, UdeA), perteneciente a la MAREA (Mesa Amplia Regional Estudiantil de Antioquia). Entrevista realizada el 23 de julio de 2012 102 “Es universal y popular, por cuanto debe garantizar, en términos de equidad, el libre acceso, la permanencia, el disfrute y el goce de ella, a toda persona sin distinguir su condición física, étnica, sexual, de género, social, económica o política, así como responder de manera eficaz a las necesidades e intereses nacionales y populares colombianos” (MANE. Documento De Trabajo Para La Construcción De Nueva Ley De Educación Superior Para Un País Con Soberanía, Democracia Y Paz. [Online] http:/issuu.com/mane.academica. pág.: 3)

140

La educación superior es un proceso que reconoce el desarrollo de la capacidad crítica, creadora y transformadora de los sujetos, así como la pluralidad de los contextos, los territorios y los saberes. Además es portadora de un proyecto académico, político, social y cultural de país con soberanía, democracia y paz. La educación superior garantiza la apropiación, construcción, creación y producción de conocimiento; la formación de sujetos políticos que participen de manera activa en la transformación de la realidad, la cultura y en la solución de las necesidades de la sociedad a través de las funciones misionales de docencia, investigación y proyección social104. ―No estábamos defendiendo la Ley 30, pero tampoco estábamos de acuerdo con esa Reforma… entonces que era lo que nosotros queríamos, hay que hundir ese articulado de Ley pero para que construyamos uno desde los estamentos universitarios que son los que realmente conocemos, sabemos las necesidades, podemos proponer‖105.

4.8. Papel Ejercido Por Los Medios De Comunicación En lo que tiene que ver con los medios masivos tradicionales de comunicación y con los medios alternativos o ciudadanos, el tema de las movilizaciones estudiantiles tuvo un gran impacto en lo que a agenda pública se refiere, pues a veces es muy difícil que un medio de comunicación como RCN, Caracol, Teleantioquia, el Tiempo, el Colombiano, el Espectador y otros; capture este tipo de noticias para su agenda pública. Es decir, es evidente que los temas sociales y particularmente el tema de las protestas reivindicativas de derechos no son de interés para este tipo de medios comunicativos porque no son sucesos comerciales y regularmente, estos medios obedecen a

103

Es democrática dado que sus procesos de elaboración, creación, potenciación, intercambio, desarrollo, transmisión, apropiación y aplicación del conocimiento que deben estar presididos por el diálogo constructivo entre la comunidad educativa y la sociedad, en orden a formar sujetos integrales, emancipadores y críticos, en función de garantizar el buen vivir, bajo condiciones de garantía y respeto por la libertad de pensamiento y de expresión. Idem. Pág. 3 104 MANE. Documento De Trabajo Para La Construcción De Nueva Ley De Educación Superior Para Un País Con Soberanía, Democracia Y Paz. [Online] http://issuu.com/mane.academica. pág. 3 Capitulo primero: definición y carácter de la educación superior 105

Eberhar Cano Naranjo (Estudiante UdeA, perteneciente al Colectivo de Identidad Estudiantil) Entrevista realizada el 27 de septiembre de 2012

141

dinámicas de mercado. Estás, la mayoría de las veces, por no decir que todas, buscan instaurar estereotipos de estilos de vida, de belleza, de amor, de pensamiento y otros; en la búsqueda de responder a unas lógicas de mercado y de consumo. Dejando a un lado lo social, lo educativo y lo más importante, lo informativo. Estos medios ―hegemónicos de comunicación‖ olvidan, por lo regular, su labor de informar a la sociedad colombiana lo que viene pasando en el país, es por esto que se ven todos los días menos personas informadas en la realidad de su sociedad.

Dado lo anterior, el manejo de discurso que utiliza los medios masivos de comunicación, se puede denominar en lo que James Scott llama ―discurso público‖, en la medida en que los dueños de estos medios, saben el poder de influencia que tienen sobre la población colombiana y mediante ellos transmite lo que quieren transmitir, deformando la información; además de querer impresionar por medio de imágenes parcializadas cierta realidad. Asimismo, con ellos y como dice Scott (2004:42), se busca naturalizar el poder de quienes dominan y tratan de esconder lo sucio de su accionar en el poder.

Entonces, se ha creado una invisibilización, discriminación y criminalización hacia las protestas sociales, que utilizando los denominados medios masivos de comunicación; le venden al país la imagen que estas protestas están mediadas por fuerzas guerrilleras, paramilitares y narcotraficantes, no dejando otra cosa que imaginarse; que quienes participan allí son unos delincuentes y unos violentos.

Los medios de comunicación. No entendidos como unos entes allí puros, que están flotando en el aire, sino que tienen lógicas comerciales, intereses económicos, y están concentrados (…) eso afecta el derecho a la información. ¿Por qué lo afecta?, porque es un ambiente de mercado, en donde las lógicas comerciales son las que mandan (…) por ejemplo en los noticieros (…) hay cada vez más elementos en las estructuras del noticiero que son elementos que obedecen a lógicas de mercado (…) me preocupan las que llamo yo ―las niñas pechugonas del final de los noticieros‖

Ahora, hay que saber que la televisión es un medio en el cual predomina la imagen. Esto es inevitable, pero si uno se pone a ver la BBC, cómo presenta la noticia y compara, a fin de ver cómo la presenta aquí cualquiera de nuestros noticieros, uno se

142

da cuenta de que hay diferencias, y esas diferencias obedecen a que la BBC no tiene lógicas comerciales ni deja entrar a las niñas pechugonas a sus noticieros, (…) le garantizo que en los países industrializados y en otros países latinoamericanos sería imposible permitir que estas niñas de farándula penetraran en los noticieros como lo están haciendo acá106

En cuanto a los medios alternativos de comunicación o la prensa alternativa, trataron de mostrar la otra cara de la realidad social, creyendo que esta existe, y muestran desde una mirada más crítica y más real las situaciones que estremecen al país. Estos medios, se encuentran en constante vínculo con la sociedad, ya que en muchos casos son creados por ellos mismo, pero estos tienen una debilidad, y es que no son tan leídos y comercializados como los ―otros‖ medios de comunicación, dándose una desventaja en cuanto al tipo de información que adquiere la sociedad colombiana. Sin embargo, estos medios siempre estuvieron presentes en la noticia de apoyo al movimiento estudiantil, de apoyo en la medida que trataban mostrar la verdadera situación de los universitarios. Pero siempre en las agendas de diversas publicaciones alternativas y populares estaba presente el Movimiento Estudiantil de la Universidad de Antioquia, tal es el caso de plano sur, Periferia, ¿Qué pasa UdeA?, De la Urbe, Desde el 12 entre otros.

Entonces empezaron los medios alternativos que son los medios de contrainformación y empezaron a mostrar todo lo otro que estaba pasando; los procesos de construcción, los procesos de organización estudiantil, los procesos que no recogían esos medios, entonces empezaron los medios alternativos a hacer todo eso y hubo un momento donde los medios masivos no pudieron con todo eso107

Dado lo anterior, se puede mostrar entonces, el logro que alcanzaron los estudiantes universitarios vinculando sus protestas a la noticia del día; aunque no fue una batalla fácil de ganar, ni siempre fue tan idílico para el movimiento. Al inicio de las movilizaciones, los medios

106

HERRÁN, María Teresa. HERNÁNDEZ Galindo, José Gregorio. OSPINA García, Laura. MÁRQUEZ Vásquez, Clara Inés. COLOQUIO SOBRE CONSTITUCIÓN Y MEDIOS DE COMUNICACIÓN. Instituto de investigaciones Jurídicas de la UNAM. [Online] http://www.juridicas.unam.mx/publica/librev/rev/juicio/cont/6/cnt/cnt14.pdf. Págs. 270 al 272 107 Víctor Javier Correa Alvares (estudiante de 10º semestre de Medicina, UdeA), perteneciente a la MAREA (Mesa Amplia Regional Estudiantil de Antioquia). Entrevista realizada el 23 de julio de 2012

143

masivos de comunicación comenzaron a informar a la sociedad colombiana que se estaba gestando un movimiento con influencias del ELN, deslegitimando la protesta que se venía generando, había que mostrar una cara errónea del movimiento para que su accionar no tuviera tanto impacto, pero ahí fue donde se la jugaron los estudiantes, ideándose la manera perfecta de mostrar su descontento a la sociedad en general y que ésta, de alguna forma los apoyara. Al igual, había otro factor con el que tuvieron que pelear los estudiantes; y fue el desconocimiento casi qué general de lo que estaba pasando con los estudiantes.

Al principio hubo mucha desinformación ¿Cierto? O sea, como comúnmente dicen los Medios, que hay una información muy superficial y que se tiende más a estigmatizar, lo que te decía ahora de la protesta social. Entonces al principio, yo me acuerdo, que empezaron como a tratar de infiltrar rumores como de, hay no, es que esos movimientos están es infiltrados por grupos de izquierda o grupos ilegales. Pero rápidamente los voceros, particularmente la MANE, hicieron un papel muy importante, muy estratégico y muy serio de tomarse los Medios de Comunicación y explicar, o sea, se hicieron un lugar y les dieron la voz y la oportunidad de explicarse. Y el país y los Medios de Comunicación al escuchar esas voces, se dieron cuenta de que era una protesta auténtica, que de verdad ahí si había un Movimiento Estudiantil que estaba reivindicando unas causas justas.

Entonces ya era muy común, por ejemplo, en 6:00 AM de Caracol, el Programa de radio más escuchado por la mañana, escuchar un representante del MANE explicando la situación. Incluso a veces en confrontación con la Ministra de Educación; o que en el Programa ―La Luciérnaga‖ les dedicaran un tema. O que las columnas de domingo, en Semana y el Espectador tomaran de rebote las declaraciones de la información que los pelaos decían. Entonces yo creo que ese lugar que se guerriaron los movimientos estudiantiles, fue muy estratégico. Porque si no hubiera habido voceros, ni gente que saliera a dar la cara a decir ―mire esto es lo que está pasando y esto es lo que estamos exigiendo‖ entonces invisibilizan el asunto político y social que hay detrás de eso108.

108

Catalina Vásquez Guzmán corresponsal periódico alternativo argentino “Página 12” y Editora del periódico ¿Qué pasa UdeA? Entrevista realizada el 8 de agosto de 2012

144

Cuando se intentaba mostrar, desde diversos medios comunicativos, las diferentes movilizaciones con supuestos infiltrados guerrilleros y que además eran violentas, pero que en la realidad era totalmente diferente. Las personas comenzaron a percatarse de ello, es decir, notaban que lo que mostraban dichos medios comunicativos tenían poco o nada de parecido a lo que ellos estaban viendo en su contexto inmediato. Esto comenzó a generar un descontento por parte de la población informada y a la vez una deslegitimación de los medios de comunicación, cómo medios idóneos para tales fines. Además, que a partir de esto, se mostró un poco las verdaderas intensiones, según Rubén Darío Zapata, de los medios masivos comunicativos colombianos; quienes responden a intereses particulares y que estos intereses particulares están vinculados con quienes se encuentran en el poder.

En tanto, para que el proyecto de ley 112 de 2011 fuera ratificado en el Congreso sin ningún esfuerzo y luego aplicado en las instituciones de educación superior del país, había que desarmar los estudiantes y venderle a la sociedad colombiana, que ésta era la mejor propuesta de educación para sus familiares, allegados, vecinos y toda la sociedad en general. Con lo que no contaba el gobierno fue con la reacción de los estudiantes quienes, después de saber lo que se les venía encima, retomaron todo su proceso histórico de luchas y de las estrategias utilizadas, reeditándolas y agregándole un toque novedoso, de tal forma que se ajustara a los requerimientos de este nuevo contexto.

la prensa nació como parte del proyecto de la ilustración pero obviamente en una sociedad de clases, los medios son los que representan el interés general, eso dicen, pero en una sociedad de clases no hay interés general, en una sociedad de clases existen los intereses particulares y los que se imponen son los interese de los poderosos, y los medios no sólo representa los intereses de los poderosos, sino que se doblegan y son de los poderosos, ejemplo el Espectador, RCN es de Ardila Lülle, Caracol es del Grupo Prisa que supuestamente es Español, pero que el Grupo Prisa es una multinacional. Entonces los medios de comunicación se configuraron como un gran emporio, cierto el Tiempo es del presidente y del grupo planeta que es otra multinacional, entonces es eso (…) los medios son una empresa, primero, los medios se comportan como empresa, segundo, los medios que son estratégicamente

145

importantes para los dueños del poder, son de los dueños del poder, cierto, nosotros no podríamos esperar nada de ellos109

Para dar explicación a lo anterior desde la resistencia civil, la estrategia utilizada por los universitarios de la Universidad de Antioquia, para virar la información que estaban manejando los medios comunicativos colombianos, se puede denominar desde las apreciaciones de Gene Sharp, ―Judo político‖ (Sharp, 1968:41). Pues los estudiantes aprovecharon toda la represión, criminalización y desprestigio que los medios comunicativos estaban haciendo uso, para ponerla en su contra. Llevando esto, a una perdida consecutiva de credibilidad de los medios y de quienes los manejan, además de una pérdida de simpatía hacia estos. Otra de las explicaciones que se pueden dar desde el ―Judo político‖, es que el gobierno de Santos estaba esperando, como en otras ocasiones, que los estudiantes (aunque no siempre son los estudiantes) actuaran de una forma indebida para mostrar tales manifestaciones violentas ante la población colombiana, y evidentemente en un inicio lo hizo, focalizaron algunos momentos de desorden dentro de las movilizaciones; pero los estudiantes fueron lo suficientemente inteligentes para jugar con estos factores y desvincularon los brotes de violencia de sus manifestaciones y así lograron, en cierta medida, de una aceptación de la sociedad colombiana.

Desde otra perspectiva, los medios masivos de comunicación, se vieron en la necesidad de cambiar de formato a la hora de informar sobre las protestas estudiantiles, porque si no cambiaban su discurso ―sesgado‖ de los acontecimientos universitarios, entrarían en un momento de quiebre, pues la noticia del momento eran los estudiantes y era la noticia que vendía, entonces si no, se adaptaban a esta realidad, entrarían en desuso. Asimismo, los estudiantes supieron ―vender‖ sus manifestaciones, supieron hacerse públicos, ¿cómo no mostrar movilizaciones tan masivas? ¿Cómo ocultar algo tan evidente? ¿Cómo deslegitimar algo tan pacífico y cultural? Para los medios de comunicación era casi imposible hacerlo.

Además como ocultar algo que era tan evidente en las redes sociales como facebook, twitter, my Space, otros blogs creados por los estudiantes como; estudiantesudea.blogspot.com/,

109

Entrevista Rubén Darío Zapata, Editor de Periferia prensa alternativa. realizada el 13 de julio de 2012

146

manecolombia.blogspot.com, laeducaciónhamuerto.blogspot.com, entre otros que fueron utilizados por los estudiantes para informar y hacer partícipe a toda la opinión pública colombiana. Es decir, los estudiantes se idearon la forma de hacer público todo lo que venía pasando y las propuestas que se tenían desde el movimiento estudiantil de la UdeA. Ellos, se dieron a la tarea de hacer público el tema de la reforma.

Lo otro importante que destacó a los estudiantes con el manejo de los medios de comunicación; es que si bien, de alguna forma habían utilizados los medios masivos de comunicación y ponerlos en un momento dado a su servicio, tenían claro que prontamente este romanticismo con ellos acabaría. Entonces comenzaron a idearse la forma de comunicar pero de una forma alternativa. Empiezan a surgir entonces, unos medios de comunicación propios, una apuesta de construcción de medios ciudadanos propios como los blogs anteriormente mencionados, los videos, los clic, las imágenes fotográficas difundidas por internet y otras estrategias artísticas más desde la acción que sirvieron como complemento para informar a la opinión pública lo que venía pasando.

Estos medios de comunicación utilizados por los estudiantes universitarios, entran hacer parte de lo que Clemencia Rodríguez denomina, medios ciudadanos de comunicación (2009:17), en la medida que estos durante su desarrollo le apostaron a una propia construcción, una construcción transversalizada por lo simbólico, pretendiendo designar y explicar lo que venía pasando con la educación en Colombia en unos términos tal coloquiales que hasta la persona menos ilustrada pudiera entenderlos. Aquí, los estudiantes no fueron utilizados ni instrumentalizados para hacer la noticia, ellos fueron los actores e interlocutores de sus propias protestas, de sus propias propuestas, de sus propios sueños. Generaron además, unos códigos propios para sintetizar la información que se quería dar a conocer a la opinión pública.

4.9. Medios Ciudadanos De Comunicación, Como Estrategias De Resistencia Artística

En la configuración de las protestas estudiantiles, contra la reforma de la ley 30 de educación superior el contexto, las situaciones, las personas, los medios de comunicación y el deseo de ser legitimados y escuchados; llevaron a los estudiantes de la universidad de Antioquia y de Colombia, a pensarse una forma diferente de movilizarse y expresar su descontento ante las

147

arbitrariedades del gobierno nacional, en contra de la educación pública.

Estas nuevas formas de expresión artísticas, reivindicaron y legitimaron las luchas estudiantiles de la coyuntura 2011 y parte del 2012; en tanto, en su entramado plantearon un conflicto de poder, cuestionando las decisiones de un gobierno que buscaba ―vender‖ la educación al mejor postor. Estas expresiones artísticas, al ser utilizadas a favor de un derecho inalienable, se configuraron como órdenes alternos, que lograron la resistencia. Las ―resistencias artísticas‖, como se denominaran de ahora en adelante para este estudio, evidentemente llevan explícito el arte como factor necesario, que permitió llegar a esos espacios de mayor sensibilidad de la condición humana; de la comunidad, a la que se pretendía convocar. Porque el arte, posee la particularidad de sensibilizar, desdramatizar y a la vez dramatizar (ridiculizar, en este caso), las situaciones de tensión, que se generan cuando hay una confrontación de posiciones.

Las expresiones artísticas tocaron esa puerta, el corazón de la gente, y una vez la puerta está abierta, es más fácil hablar. Lo que pasa es que el estudiante tenía la puerta cerrada, porque la gente lo que tenía en el imaginario los estudiantes son esto, los capuchos son esto y lo otro, y las expresiones artísticas, le abrieron la puerta al corazoncito de la gente para permitirnos dialogar con ellos110

Además estas resistencias artísticas, llevan consigo otro componente; son llamativas y permiten convocar a la comunidad a hacer parte de ellas. Pero también, es posible hacer otro trabajo; simbolizar todas estas actuaciones, de forma que permitan codificar y recodificar, símbolos establecidos y transformarlos para que hagan parte de cúmulo de expresiones estudiantiles que van en contra, en este caso, de la reforma a la ley 30. Dentro de lo simbólico, tienen mucho contenido, (…) y una de las cosas que nos caracteriza como seres humanos es el poder de lo simbólico, el poder de simbolizar,

110

Víctor Javier Correa Alvares (estudiante de 10º semestre de Medicina, UdeA), perteneciente a la MAREA (Mesa Amplia Regional Estudiantil de Antioquia). Entrevista realizada el 23 de julio de 2012

148

eso es lo que nos diferencia a nosotros los seres humanos de los animales, es el asunto de los simbólico. El arte es entonces esa puerta que permite que la gente nos escuche. La otra estrategia es esa, la ridiculización de lo del otro, ―ombe, ustedes creen que eso es mucha cosa para nosotros, eso es nada‖ la ridiculización del otro entra a perder fuerza y poder111.

La utilización del arte, en estas resistencias, va vinculada con la NO utilización de la violencia y podrían leerse desde lo que Gene Sharp (1968:41) identifica dentro de los tres tipos de acciones no violentas, como; la protesta y la persuasión, que son acciones de resistencia no violentas, con un alto contenido simbólico y que convence sin ser identificados como tal. Estos actos artísticos y simbólicos, incluso tienen más poder que una palabra; entonces se veía en diversas movilizaciones un estudiante disfrazado de títere y el titiritero era Santos, varios estudiantes semidesnudos y en su espalda pintado ―no reforma ley 30‖, el estudiante pintado de payaso pero disfrazado de policía, otros disfrazados de Esmad, pero con cara de marrano. Es decir, con el arte también se entró en el juego de ridiculizar los cuerpos de represión del Estado, como una forma más de restarles poder y legitimidad a su actuar. Sin dejar de lado, su nula respuesta a este tipo de acciones de resistencia.

Las formas artísticas de resistencia anteriormente mencionadas, también pueden ubicarse dentro de las 54 acciones típicas de protesta y persuasión identificadas por Sharp (1968:43), pero que particularmente, las que el agrupa en los actos públicos simbólicos; como lo fueron la mayoría de movilizaciones planteadas por el estudiantado; el drama y la música, que fueron desarrollados de distintas forma dentro de las protestas; y las asambleas públicas, que han hecho parte del movimiento estudiantil desde su nacimiento y que al día de hoy todavía existen, pero con diferentes personas, diferentes diálogos, diferente contexto y diferentes lógicas de lucha.

En tanto, las expresiones artísticas de resistencia, han acompañado al movimiento estudiantil de la universidad de Antioquia desde su nacimiento. Y aunque en su implementación, han sido esporádicas e individuales, no dejan de ser actos de resistencia. Quizá en el pasado, individualizadas una de la otra, no demostraron ser parte de este tipo de actos, pero si estas 111

Ibíd.

149

acciones son estudiadas en el tiempo y sumadas una a una, en el día a día, de la cotidianidad de los estudiantes; pueden demostrar que la resistencia de este movimiento es permanente. Sin embargo, en la coyuntura del año pasado, estas estrategias artísticas se sumaron en un solo conjunto, que permitieron identificar, lo que en este estudio se denominan ―Resistencias Artísticas‖. El proceso de resistencia, podría llamarse ―Movimiento Estudiantil‖, si podemos llamarlo movimiento, cierto. Por ejemplo ahí podríamos hacer un análisis movimiento es una expresión estudiantil y esas expresiones estudiantiles se valieron de medios, pero realmente un proceso de resistencia que siempre ha estado permanente, de diferentes formas pero, en diferentes épocas, diferentes tácticas, pero siempre la universidad pública ha estado presente ahí112.

Del mismo modo, esta suma de resistencias artísticas, los graffitis en su conjunto, la música en su conjunto, los performances en su conjunto, las actividades político culturales en su conjunto, entre otras. Todas sumadas, no sólo demuestran un gran acto de resistencia, sino también una red de resistencias; que irán vinculando cada vez a más personas y legitimando cada vez más, los discursos y las actuaciones de los estudiantes, hasta llegar al punto, y como se ha empezado a evidenciar, de generar un movimiento social continental, en el cual la base para oponerse a un orden establecido, sea la resistencia por medio del arte.

pero cuando vos empezás a sumar no es solamente un mural, sino que es una forma de una gente que se está expresando en el mundo, precisamente haciéndole contrapeso a los grandes discursos en el mundo, es un discurso que vos en cada muro es una universalidad ,estoy hablando de los murales, mas los grafitis hechos a mano, cierto, que esos sí que vinculan procesos en la universidad, (…) más los panfletos que a veces circulan, mas el conciertico que hacemos allí, mas el sancocho, los que pusieron música o dictan cátedra en una marcha , vos empiezas a ver un montón de expresiones, no tienen mayor importancia pero que sumada te muestran un movimiento estudiantil

112

Eberhar Cano Naranjo (Estudiante UdeA, perteneciente al Colectivo de Identidad Estudiantil) Entrevista realizada el 27 de septiembre de 2012

150

vivo y que se mantienen en resistencia, están ahí permanentemente, está en el juego, en lo público113.

Un elemento particular, de las expresiones de resistencia por medio del arte, es que más que expresiones y apuestas artísticas; estas son una posición política de los estudiantes para generar procesos de construcción con el otro. No es simplemente el arte por el arte, es un arte intencionado hacia la participación y la concientización de la sociedad colombiana. Se trata más bien de una apuesta política que los compromete con la educación y con otros asuntos que tengan que ver con lo social; no es ―instrumentalizar‖, es “pensarse en lo artístico, pensarse en lo popular, pensarse en lo alternativo, que va ligado también a la posición política que nosotros tenemos que tener con nuestros procesos, con lo que (…) propendemos como estudiantes”114.

Al hablar de resistencias artísticas, es necesario hacer una claridad; no todo lo que es arte es resistencia, ni todas las resistencias son artísticas, ni mucho menos el símbolo de la resistencia es el arte. Lo que hace al arte resistencia son los sujetos, las subjetividades, la intencionalidad de los sujetos que se expresan por medio del arte, es su postura política frente a las situaciones que están afrontando; es el objetivo que lleva inserto dichas estrategias artísticas, es el discurso, lo que hace del arte, un medio por el cual se puede hacer resistencia.

Se ha visto que es una forma de comunicar, de dar el mensaje, una forma de integrar y movilizar. Pero realmente es el Movimiento, es esa gente la que está construyendo propuestas, es lo que hace eso una acción de resistencia115.

Entonces, el arte más que resistencia, fue el medio utilizado por los estudiantes para expresar su oposición a la reforma neoliberal de educación, reforma ley 30 de 1992. Fue el medio idóneo de acuerdo al contexto, a las subjetividades y a las necesidades de los estudiantes, para hacer visible su inconformidad frente a la amenaza de pérdida, de una educación pública con calidad para las

113

James Gilberto Granada Vahos, Trabajador Social de la Universidad de Antioquia (2003), Segundo pregrado en Comunicación Social UdeA, Magister en Ciencia Política de la Universidad de Antioquia (2008). Actualmente docente de la Universidad de Antioquia. Entrevista realizada el 9 de septiembre de 2012 114 Felipe Cardona Restrepo (Estudiante UdeA, perteneciente al Colectivo de Identidad Estudiantil) Entrevista realizada el 27 de septiembre de 2012 115 Idem. Felipe Cardona Restrepo.

151

generaciones futuras. Además, de la pérdida de un sueño, luchar para tener un país con soberanía, democracia y paz

En palabras de Jaime Rafael Nieto, especialista en el tema de resistencia:

Son expresiones sin duda de resistencia de rechazo de disentir y también de construcción, construcción de sujeto, de actores. Fíjate, la MANE no es posible sin este trasegar de la resistencia y viceversa, la resistencia no es posible sin dotarse también de instrumentos de acción y de coordinación, entonces lo que uno observa allí es que efectivamente el movimiento universitario se configura en una de la expresiones más vitales, más vigorosas de la resistencia en el 2011, yo me atrevería a decir que se constituye en el centro gravitacional de la resistencia el año pasado116.

116

Entrevista Jaime Rafael Nieto López: Sociólogo de la Universidad de Antioquia (1987), Magister en Ciencia política de la Universidad de Antioquia (1996), Doctor en Pensamiento político, democracia y ciudadanía de la Universidad Pablo de Olavide (2011) y especialista en el tema de resistencia civil. Actualmente docente de la Universidad de Antioquia. Entrevista realizada el 3 de septiembre de 2012

152

CONCLUSIONES Cuando el oprimido se rebela legítimamente contra el opresor, en quien identifica la opresión, se lo califica de violento, bárbaro, inhumano, frío. Es que entre los incontables derechos que se adjudica para sí la conciencia dominadora incluye el de definir la violencia, caracterizarla, localizarla. Y si este derecho le asiste, con exclusividad, no será en sí misma donde encontrará la violencia. No será a sí mismo a quien llamará violento. Paulo Freire. La educación como práctica de la libertad

1. El movimiento estudiantil de la Universidad de Antioquia y el colombiano han demostrado durante su historia, la necesidad de reivindicar los derechos de la sociedad, en especial la gratuidad de la educación. Las movilizaciones del 71 han dejado una huella imborrable en la sociedad; sin embargo, las protestas y la lucha de este movimiento en el año 2011, marcaron un hito histórico en la realidad del país con la configuración y articulación de una Mesa Amplia Nacional Estudiantil, que postuló la educación como el pilar fundamental de la sociedad colombiana a través, en un inicio del programa mínimo de los estudiante colombianos, y luego con la creación de un borrador de la ley alternativa de educación; que busca cambiar desde su estructura, el sistema educativo del país.

2. El contexto actual, ha llevado al movimiento estudiantil de la universidad de Antioquia a pensarse nuevas formas de movilización que se ajusten a la realidad del país. Dado esto y en aras de informar adecuadamente y convocar a la sociedad colombiana; los estudiantes se vieron en la necesidad de tomar sus clásicas formas de protesta e hibridarlas, reformatearlas o actualizarlas, de forma tal, que fueran llamativas, creativas, artísticas y que transmitieran por medio del símbolo, el mensaje de una mejor educación para las generaciones futuras.

3. Puede parecer desafortunado el hecho que el accionar del movimiento estudiantil, se encuentres supeditado a las respuestas del gobierno nacional; que le ha apostado durante años, al desgaste y desaparecimiento de éste. Sin embargo, es una prueba de fuego, que lleva a los estudiantes a idearse nuevas formas de lucha y visibilización que los mantenga en pie, movilizados y sumando esfuerzos, procurando con ello, generar cambios estructurales en el sistema educativo a través de las resistencias artísticas.

4. A partir del año 2010, se comenzó a generar en el mundo un sinnúmero de movilizaciones que mostraban el descontento de la mayoría de la sociedad, hacia la implementación del modelo neoliberal. En el 2011, esta oleada de movilizaciones llegó a Colombia de la mano de los estudiantes universitarios en contra del proyecto de ley 112 de 2011 que buscaba la comercialización de la educación. De lo anterior, se puede suponer, que se ha empezado a despertar una conciencia universal

153

en contra de dicho modelo mercantilista que ha llevado, en algunos casos, a una articulación social continental, que se está oponiendo a los vejámenes de quienes emplean dicho modelo.

5. Las resistencias artísticas, han acompañado al movimiento estudiantil de la universidad de Antioquia desde su nacimiento. Y aunque en su ejecución, han sido utilizadas eventual e individualmente, no dejan de ser vistas como actos de resistencia, aunque no demostraran ser parte de ello. Pero, si por el contrario, estas acciones son estudiadas en el tiempo y sumadas una a una, en el día a día, de la cotidianidad de los estudiantes; se pueden demostrar como actos inminentes de resistencia.

6. No todo lo que es arte es resistencia, ni todas las resistencias son artísticas, ni mucho menos el símbolo de la resistencia es el arte. Lo que hace al arte resistencia son los sujetos, las subjetividades, la intencionalidad de los sujetos que se expresan por medio del arte, es su postura política frente a las situaciones que están afrontando; es el objetivo que lleva inserto dichas estrategias artísticas, es el discurso, lo que hace del arte, un medio por el cual se puede hacer resistencia.

154

BIBLIOGRAFIA ALVARADO, Sara Victoria; OSPINA, Héctor Fabio; BOTERO, Patricia; MUÑOZ, Germán. Las tramas de la subjetividad política y los desafíos a la formación ciudadana en jóvenes. Revista Argentina de Sociología, Vol. 6, Núm. 11, noviembre-diciembre, 2008.

BASTÍAS, Ignacio. Apuntes para una reflexión histórico-política sobre movimiento estudiantil. Abril 2004

BONILLA, Elssy.

RODRÍGUEZ, Penélope. Más allá del dilema de los métodos. La

investigación en las ciencias sociales. Ediciones Uniandes. Editorial Norma. Buenos Aires (Argentina), 1997.

BORRERO CABAL, Alfonso. La Universidad: Estudio Sobres sus Orígenes, Dinámicas y Tendencias. Tomo IV, Historia Universitaria: Los Movimientos Estudiantiles. Bogotá: Editorial Pontificia Universidad Javeriana. 2008

CAMELO BOGOTÁ, Alfredo. Germán Arciniegas, Otro Gran Orfebre de América. En: Revista Deslinde (Revista del Centro de Estudios del Trabajo, Cedetrabajo). Edición No. 28, Mayo – Julio del 2000.

CANDIA Gajá, Paulina. RODRÍGUEZ Espínola, Amanda. Graffiti como manifestación de disidencia en América Latina, En: Cultura, identidad y diversidad en América Latina,

CORNEJO Polar, Antonio. Escribir en el aire. Ensayo sobre la heterogeneidad cultural de las literaturas andinas, Lima: Horizonte. 1994

CORRALES García,

Fernanda; HERNÁNDEZ flores, Hilda Gabriela. La Comunicación

Alternativa En Nuestros Días: Un Acercamiento A Los

Medios

Participación. En: Revista Razón y palabra. Número 70. México. 2010

De La Alternancia Y La

155

CRUCES Martín, María del Carmen. Implicaciones De La Expresión Musical Para El Desarrollo De La Creatividad En Educación Infantil. Universidad de Málaga. 2009. CRUZ Velázquez, C. A. La Violencia En Los Medios Masivos De Comunicación: Una Propuesta Artística A Partir De La Imagen Recontextualizada. Tesis para optar al título: Licenciatura en Ciencias de la Comunicación, Universidad de las Américas Puebla, México, Diciembre 2004.

DE LA HOZ, Pedro. La Nueva Canción Treintañera. Casa de las Américas. La Habana. Octubre – Diciembre de 1997.

ECHEVERRI ECHEVERRI, Sandra Marcela. GAVIRIA, Edgar Alexander. Estudiantes De La Universidad De Antioquia Y Fuerza Pública: Los Enfrentamientos, El Abuso De Autoridad Y La Recuperación De La Memoria Histórica. Monografía para optar al título de Trabajadores Sociales. Medellín: Universidad de Antioquia. 2007

EL COLOMBIANO. Trabajadores ponen al gobierno contra el paredón (Jornadas de protesta en Medellín). Sección 3a, Plana tres. Medellín. Viernes 29 de mayo de 1992. EL COLOMBIANO. Vargas Velásquez, Alejo. Las protestas sociales globales. Sección 4a. Medellín 17 de agosto de 2011. FOUCAULT, Michel. El sujeto y el poder. Revista Mexicana de Sociología, Vol. 50, No. 3. (Jul. - Sep., 1988)

GALEANO MARIN, María Eumelia. Estrategias De Investigación Social Cualitativa: el giro en la mirada. Medellín: la carreta. 2009.

GÁNDARA, Lelia. Graffiti; Enciclopedia Semiológica. Buenos Aires, Eudeba: México. 2002

GARCÉS Duran, Mario. El Despertar de la Sociedad. Los Movimientos Sociales en América Latina y Chile. Santiago de Chile: LOM ediciones, 2012

156

GARCÍA Canclini, Néstor. Culturas Híbridas. Estrategias para entrar y salir de la modernidad, Editorial Sudamericana, Buenos Aires. 1992

GARCÍA Morales, Mariana. Medios Ciudadanos Y Comunitarios En América Latina. Centro de Competencia en Comunicación para América Latina. Colombia, 2006.

GARCÍA, Miguel Ángel. La Revolución en la Música Y la Música en la Revolución. Universidad Pedagógica Experimental Libertador, República Bolivariana de Venezuela, enero 2007

HARRIS, Marvin. Antropología cultural. Editorial Alianza, Madrid, 2001

IAMAMOTO, Marilda. La investigación en servicio social en el contexto latinoamericano: la experiencia brasileña. En: Revista cátedra Paralela. N. 2. Año 2005

KOZAK, Claudia. Contra la pared; sobre graffitis, pintadas y otras intervenciones urbanas. Buenos Aires, Libros del Rojas. 2004

LEWIS, Peter. Medios de comunicación alternativos: La conexión de lo mundial con lo local. Ediciones UNESCO y Centro de Investigaciones sobre Políticas de la Comunicación (City University Londres). Reino Unido.1995.

LÓPEZ Barrios, Francisco. La Nueva Canción en Castellano. Madrid: Ediciones Júcar, 1976.

LÓPEZ Ospina, Gustavo. Una Mirada Integral Que Permita Descubrir El Sentido Y Respuesta De La Universidad En El Futuro (2005 - 2010). UNESCO (Organización de la Naciones Unidas Para la Educación, la Ciencia y la Cultura). Quito – Ecuador. Noviembre de 2004

157

LÓPEZ Vergara, Ricardo. Cuerpos Transgresores/Cuerpos Transgredidos: Carne Y Memoria Marcadas. Los Jóvenes Y Sus Prácticas De Modificación Corporal. En: Revista Última Década Nº26, Cidpa Valparaíso, Julio 2007.

MELÉNDEZ Peñaranda, Marcelo. El Lenguaje No Oficial. Vestigium, 3, (2). Julio- diciembre de 2007, Corporación Universitaria Unitec. 2007 México, abril de 2011

MINISTERIO DE EDUCACIÓN NACIONAL, Decreto 80 de 1980, por el cual se organiza el sistema de educación post-secundaria. Enero 22 de 1980

MOLINA, Antonio. Música, Paz y Resistencia. En: Periferia, Prensa Alternativa. Edición 46. Noviembre de 2009.

MONCAYO, Víctor Manuel. Universidad Nacional. Espacio crítico. Editorial Aurora. Bogotá. 2005

NAVARRO Díaz, Luis Ricardo. Una Reflexión Sobre Los Medios Ciudadanos: Esferas Públicas, Movilizadores De Identidades Y Contraidentidades De Los Sujetos Políticos En Colombia. Universidad Autónoma del Caribe. En: Encuentros No. 15. Junio de 2010.

NIETO LÓPEZ, Jaime Rafael. Guerra, Neoliberalismo Y Resistencia Civil En Colombia. Ensayos. Medellín. 2004

NIETO López, Jaime Rafael. Resistencia, capturas y fugas del poder. Desde Abajo. Bogotá. 2008 OSSORIO, José María. Encuentro de la Canción. Protesta. Casa de las Américas. La Habana. Noviembre – Diciembre 1969.

PARDO SANTAMARÍA, Rubén Darío. Procesos Locales De Resistencia Para La Defensa Civil No Violenta En Contextos De Conflicto Armado. Estudio De Caso: Comunidad De Paz San José De Apartado, Colombia. Pontificia Universidad Gregoriana. Diciembre de 2005.

158

POSADA, Consuelo. Los Años Setenta en la Universidad de Antioquia. En: Utopía Siglo XXI. Vol. 2, No. 7, Noviembre 2001

Programa Mínimo del Movimiento Nacional Estudiantil. 1971 (Crisis universitaria colombiana, 1971. Itinerarios y documentos. Medellín, 1971)

RANDLE, Michael. Resistencia Civil: la ciudadanía ante las arbitrariedades de los gobiernos. Editorial: Paidós. Barcelona, Buenos Aires, México. 1998

REFORMA a la ley de educación superior, proyecto de ley 112 de 2011 RESTREPO CUARTAS, Jaime. Historia de la Nueva Universidad de Antioquia 1971 – 2004. Medellín: 8 de Junio de 2004. Folleto RESTREPO, Adrián. Aproximación teórica a las prácticas artísticas de los jóvenes como expresión política. En: Revista Trabajo Social, No. 3, Medellín, enero-junio 2006.

RODRIGUEZ Aristiguieta, Mariann. DIAZ Miralles, Cristina. Una Mirada Curiosa al Graffiti como Movimiento Artístico en la Ciudad de Caracas. Universidad Católica Andrés Bello. Tesis de Grado para optar al título de Licenciatura en Comunicación Social. 2001

RODRÍGUEZ, Clemencia. De Medios Alternativos A Medios Ciudadanos: Trayectoria Teórica De Un Término. Facultad De Comunicaciones, Universidad De Antioquia. Folios 21 Y 22. Diciembre De 2009

RODRÍGUEZ, Clemencia. De medios alternativos a medios ciudadanos: trayectoria teórica de un término. En: Folios 21 y 22, 2009, Facultad de Comunicaciones, Universidad de Antioquia.

RUIZ OLABUENAGA, J.I. y M.A. Ispizua .La decodificación de la vida cotidiana. Medios de investigación cualitativa. Bilbao, Universidad de Dausto. (1989).

159

SÁNCHEZ Gómez, Olga Amparo. Nuevas Formas de Resistencia Civil de lo Privado a lo Público. Movilizaciones de la Ruta Pacífica 1996 - 2003. Bogotá: PNUD, 2006.

SANDOVAL Espinoza, Alejandra. Para una Lectura de Graffitis en las ciudades de América Latina. Magíster en Estudios Latinoamericanos Facultad de Filosofía y Humanidades Universidad de Chile, Julio 2002 SARLO, Beatriz. ―Mayo 68/ mayo 98. Tríptico revolucionario‖. En: Diario La Nación, 12 de abril de 1998, Buenos Aires, 1998

SCOTT, James C. Los Dominados y el Arte de la Resistencia, En: colección problemas de México, Era ediciones. México. 2004.

SEDEÑO Valdellós, Ana. Cuerpo, Dolor Y Rito En La Performance: Las Prácticas Artísticas De Ron Athey. En: Nómadas. Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas. N 27 vol. 3 de 2010. Universidad de Málaga.

SERBIA, José María. Diseño, muestreo y análisis en la investigación

cualitativa.

Hologramática, Facultad de Ciencias Sociales UNLZ. Año VI. Número 7. V2.

SHARP, Gene. La Lucha Política No-Violenta; Criterios y Métodos. Ediciones Chile - América CESOC. Santiago de Chile. 1968 (resumen basado en el libro de Gene Sharp titulado La Política de la Acción No-violenta) lo preparó Jaime González Bernal y lo editaron Caridad Inda y Gene Sharp.

SILVA, Armando. Punto de visa ciudadano: focalización visual y puesta en escena del graffiti, Instituto Caro y Cuervo, Bogotá. 1987 SILVA, Armando. ―La ciudad como comunicación‖. En: Diálogos de la comunicación Nº23, Federación Latinoamericana de Facultades de Comunicación Social, Lima. 1989

160

TARROW, Sydney. El Poder en Movimiento. Los Movimientos Sociales, la Acción Colectiva y la Política. Madrid: Alianza, 1997

TAYLOR, Diana y FUENTES, Marcela. Estudios Avanzados de Performance. Fondo de Cultura Económica, Primera edición, México, 2011.

TAYLOR, Diana. GARCÍA Wehbi, Emilio. MUSCARI, José María. Teatro y performance. Picadero: Instituto Nacional de Teatro. Publicación cuatrimestral, septiembre, octubre, noviembre y diciembre de 2005.

TOURAINE Alain "Critica de la Modernidad" Madrid: Ediciones Temas de Hoy, 1993 URIBE DE HINCAPIE, María Teresa. Universidad de Antioquia: historia y Presencia. 1ª edición. Medellín: Universidad de Antioquia, 1998.

VELASCO,

Fabiola. La Nueva Canción

Latinoamericana.

Notas

sobre

su

origen

y

definición. En: Presente y Pasado. Revista de Historia. Año 12. Nº 23. Enero-Junio, 2007. VÉLEZ BOTERO, Darío. El Movimiento Político en la Universidad de Antioquia 1974 – 1994. Medellín: Universidad de Antioquia. Enero 12 de 2006

VICH, Víctor. Desobediencia simbólica Performance, participación y política al final de la dictadura fujimorista. En: La cultura en las crisis latinoamericanas. Alejandro Grimson. CLACSO, Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina. 2004. YEPES Muñoz, Rubén Darío. CABRERA, Marta. La Política Del Arte: Cuatro Casos De Arte Contemporáneo En Colombia. Maestría En Estudios Culturales, Facultad De Ciencias Sociales, Pontificia Universidad Javeriana, 2010.

ZAMBRANA Grandy, Erika D. Resistencia civil y Estado constitucional, en: Compás empresarial, vol. 3, numero 6, año 2011

161

CIBERGRAFIA

BARROS, Enrique F. VALDÉS Horacio. BORDABEHERE, Ismael C. SAVAGO, Gumercindo. CASTELLANOS, Alfredo. MÉNDEZ Luis M. BAZANTE, Jorge L. GARZÓN MAEDA, Ceferino. MOLINA, Julio. SUÁREZ PINTO, Carlos. BIAGOSCH, Emilio R. NIGRO, Ángel J. SAIBENE, Natalio J. MEDINA ALLENDE, Antonio. GARZÓN, Ernesto. MANIFIESTO DE CÓRDOBA: reforma universitaria de 1918, La Juventud Argentina de Córdoba a los hombres libres

de

Sudamérica.

21

de

junio

de

1918.

[Online]:

http://www.ccee.edu.uy/ensenian/catderpu/material/cordoba.PDF GALVIS Parrasi, Harold. Estructura interna de la de reforma a la ley 30 de educación superior, propuesta de principios. Departamento de administración y organizaciones, facultad de ciencias de

la

administración

universidad

del

valle.

Cali.

2011.

[Online]

http://administracion.univalle.edu.co/Comunidad/Egresados/PL30ESTRUCT.INTERNA%20%20HAROLD%20GALVIS.pdf

GRUPO

IKARIA.

Independentismo

y

anarquismo.

1987

[Online]

http://www.nacionandaluza.info/biblioteca%20internacional/INDEPENDENTISMO%20Y%20A NARQUISMO.pdf)

Ley 30 de 1992. [Online]: www.mineducacion.gov.co/1621/article-86437.html

MARTÍNEZ Miguélez, Miguel. La Etnometodología y el Interaccionismo Simbólico. Sus aspectos metodológicos específicos. [Online]: http://prof.usb.ve/miguelm MEDINA Gallego, Carlos. ESCUELA DE FORMACIÓN DEL GRUPO ENFOQUE. Conferencia

Del

Profesor

Carlos

Medina

Gallego

―SOBRE

EL

MOVIMIENTO

ESTUDIANTIL‖. 19 de Diciembre de 2000. [Online] http://es.pdfcoke.com/doc/30651235/SobreEl-Movimiento-Estudiantil-Carlos-Medina-Gallego

162

Ministerio de Educación Nacional. Pertinencia en lo académico y lo laboral. En: Al Tablero (el periódico

de

un

país

que

educa

y

que

se

educa).

[Online]

http://www.mineducacion.gov.co/1621/article-184024.html MOVIMIENTO CIUDADANO POR LA DEMOCRACIA. Resistencia Civil Pacifica: el poder activo

de

los

ciudadanos.

[Online]

http://www.psicosocial.net/gl/centro-de-

documentacion/doc_details/200-resistencia-civil-pacifica-el-poder-activo-de-los-ciudadanos ORDÓÑEZ B., Luis Aurelio. De Los Contestatarios De Ayer A Los Indignados De Hoy. Fenalprou (Federacion Nacional de Profesores Universitarios. Por la Defensa de la Universidad Pública).

2011.

[Online]

http://www.fenalprou.org.co/debate-ley-30/academia/368-de-los-

contestatarios-de-ayer-a-los-indignados-de-hoy.html

PARDO, Miguel Ángel, URREGO, Miguel Ángel. El movimiento Estudiantil de 1971 en Colombia. 28 de febrero de 2011. [Online] Artículo publicado en: Universidad Pública Resiste.

QUINTANA PEÑA, Alberto. Metodología de Investigación Científica Cualitativa. [Online] http://www.unmsm.edu.pe/psicologia/documentos/documentos2007/libro%20eap/04LibroEAPQ uintana.pdf Sin

autor,

―Nuestra

historia

fragmentada‖

En:

Graffiti

en

América.

[Online]

http://www.guegue.net/graffitti/historia.html. Consultada 15 de septiembre de 2012.

TOLEDO Micó, Ruddy. SILVA Pupo, Mercedes y BERTOLÍ Velázquez, Beatriz. El arte como expresión de la identidad cultural en América Latina. En revista electrónica: Enfocarte N. 4. 24 [Online] http://www.enfocarte.com/4.24/pensamiento3.html

TORTUGA (Grupo antimilitarista Elx - Alacant). Algunas Notas sobre Militancia política. Ekintza Zuzena. Martes, 23 de mayo de 2006. [Online] http://www.nodo50.org/tortuga/Algunasnotas-sobre-militancia

163

VIDEO: Intervención del estudiante de la Universidad Nacional e integrante de la MANE: Jaime Andrés Rivera, en el debate sobre la ley reforma a la ley 30 (Control Político), en el Senado de la República [Online]: http://www.youtube.com/watch?v=gviIDGY3Q3A VIDEO: La música en Mendoza: Expresión de la Cultura de Dominación y Resistencia. Bloque 1. Duración: 9 m 47sd. [Online] http://bdigital.uncu.edu.ar/1844

VILLANUEVA MARTÍNEZ, Orlando. El Movimiento estudiantil en los sesenta. Publicado en: Revista Espacio Crítico, No. 5 julio – diciembre 2006. [Online]: www.espaciocrítico.com ZULUAGA, María Paola. El movimiento estudiantil: ayer y hoy. Domingo, 09 de octubre de 2011. En: de la urbe radio [Online] http://delaurbedigital.udea.edu.co/index.php/de-la-urberadio/2341-el-movimiento-estudiantil-ayer-y-hoy

Related Documents


More Documents from ""