Principios básicos de apertura del ajedrez. Controlar el centro
Para los jugadores nuevos, aprender numerosas defensas, ataques y variaciones de aperturas de ajedrez pueden parecer una tarea imposible. Intentar aprender líneas detalladas de apertura no es solamente innecesario para los principiantes, sino también contraproducente. En cambio, los jugadores nuevos deberían aprender los principios básicos de las aperturas de ajedrez. Esos principios no sólo establecen una buena guía general de cómo jugar una apertura, sino que también ayudan a comprender una teoría de apertura más avanzada. Nuestro primer principio de apertura es controlar el centro . El centro, particularmente los cuadros e4, d4, e5 y d5 son la zona más importante del tablero de ajedrez. Controlar el centro permite mover más las piezas así como un acceso más fácil a todas las partes del tablero. Los ataques en el centro suelen ser los más efectivos. Estos factores suelen convertir a la apertura en una feroz batalla por el control del centro entre ambos lados. En el diagrama de arriba, las blancas hicieron un trabajo excelente al establecer el control del centro. Sus peones en e4 y d4 controlan muchos cuadros, mientras que los caballeros en f3 y c3 están bien posicionados para saltar rápidamente cuando sea necesario. A la inversa, las negras jugaron pobremente los primeros movimientos. Sus peones en a5 y h5 no tienen influencia en el centro y sus caballeros en a6 y h6 tienen limitados sus movimientos. 02 de 05
Seguridad del rey
En la apertura es crucial mantener la seguridad del rey en mente. El debilitamiento de la posición del rey puede dar lugar a pérdidas rápidas o forzar el sacrificio de material para mantener a nuestro rey a salvo de un jaque mate. Del mismo modo, si el rey del oponente parece vulnerable, es importante aprovechar esto antes de que pueda encontrar una posición más segura.
A menudo, el peón f (f2 para las Blancas, f7 para las negras) es el punto más débil en la apertura de cada lado. El diagrama de arriba se presenta después de los movimientos 1. e4 e5 2. C3 f6? 3. Cxe5 fxe5 4. Dh5+ . La blanca toma ventaja de la diagonal débil e8-h5 creada por el segundo movimiento de las negras y tiene una gran ventaja. A veces, estas debilidades pueden incluso resultar en un jaque mate rápido. Un ejemplo que trabaja con la misma idea de la debilidad por la diagonal del rey es el Mate del loco . 03 de 05
Seguridad del rey - Enrocar
Como la seguridad del rey es tan importante, normalmente se aconseja enrocar tempranamente, especialmente a los principiantes. Un rey enrocado está por lo general más seguro que uno en el centro del tablero, y enrocar usualmente previene los mates rápidos que pueden ser frustrantes para los principiantes. En el diagrama de arriba, ambos jugadores han enrocado en los primeros 5 movimientos del juego. Ambos reyes están bastante seguros, por lo que ninguno de los jugadores tiene que temer un rápido jaque mate. También cabe señalar que las posiciones alrededor de los reyes -- específicamente los tres peones en frente de los reyes enrocados, no han sido movidos. Mover estos peones en la apertura por lo general vuelve al rey muy vulnerable, ya que se abren líneas de ataque para las piezas del otro jugador. 04 de 05
Desarrollo
Cuando comienza el juego, las piezas tienen poca influencia. Los caballos son las únicas piezas que pueden salir de la posición de partida; las demás necesitan que se muevan los peones para poder salir al campo de batalla. El proceso de sacar las piezas de la posición inicial y extenderlas en el tablero es conocido como desarrollo . Es importante desarrollarse rápido, el jugador que esté más desarrollado tendrá mejores oportunidades ya que puede atacar y ganar la iniciativa .
El desarrollo es mucho más que sólo mover piezas. Hay muchos principios a tener en cuenta cuando uno desarrolla.
Los caballos y alfiles se deben desarrollar primero. En general las piezas menores deben ser usadas antes que las piezas mayores . Los alfiles y caballos son útiles en el centro del tablero y menos vulnerables que las torres o la reina. No uses a la reina más de la cuenta al comienzo. Siguiendo este principio mover a la reina al comienzo por todos lados es frecuentemente un error. Mientras que la reina es valiosa, también es vulnerable; cada vez que es atacada por una pieza más débil se debe mover para evitar ser capturada. Después de todo, cambiar una reina por un alfil o un caballo no es una buena idea. No muevas las mismas piezas muchas veces en la apertura a menos que sea inevitable. Es más importante poner muchas piezas en juego y atacar sólo con las que sean realmente efectivas. Desarrolla con amenazas Amenazar las piezas adversarias obligará a tu oponente a tomar acciones defensivas, en lugar de continuar su propio desarrollo.
En el diagrama de arriba (al que llegamos tras 1. e4 e5 2. Qg4 d6 3. Qh5 Nf6 4. Qf3 Bg4 5. Qa3 d5 6. Qa5 Nc6 7. Qa4), las blancas sólo han desarrollado a su reina, quedando muy rezagadas con respecto a las negras. Mientras tanto, las negras han seguido los principios de desarrollo correctamente, llevando tres piezas al ataque y amenazando continuamente a la reina blanca. 05 de 05
Libertad
La libertad está relacionada con el desarrollo. En la apertura, es importante permitirle a las piezas que se muevan libremente por el juego, facilitando un desarrollo correcto. Cuando las piezas o los peones centrales están bloqueados se hace mucho más difícil desarrollar correctamente. Las piezas también deberían ser desarrolladas a espacios donde tengan gran libertad de movimiento. Una pieza que tiene movimiento muy limitado no es mucho mejor que una aún colocada en su espacio de inicio. Un error común que hacen los principiantes es desarrollar una pieza a un cuadrado que bloquea el movimiento de las otras piezas. En el diagrama de arriba, ambos jugadores han desarrollado su alfil del lado del rey al cuadro en la parte delantera de su peón-d (d3 para las blancas, d6 para las negras). Mientras que el desarrollar un alfil es buena idea, colocar estos alfiles bloquea a cada jugaror poder mover su
peón-d, volviendo más difícil el desarrollar sus peones del lado de la dama o ganar más control sobre el centro. Además, ambos alfiles están algo bloqueados por sus propios peones-e, que bloquean sus movimientos en una diagonal. Por ejemplo, el alfil blanco hubiese estado mejor desarrollado en c4 o e2, donde tendría libertad de movimiento en dos direcciones. De igual manera, el peón negro hubiera tenido más libertad en c5 o e7.