Cambio en la traducción de la fórmula de la consagración del pan y del vino En la solemnidad de la Asunción de la Santísima Virgen María a los Cielos en cuerpo y alma, el reciente 15 de agosto, se promulgó el Nuevo Misal Argentino. Dicho Misal, que ya se puede utilizar, será obligatorio en todo el territorio argentino, afectando a la licitud de la celebración de la Santa Misa, recién a partir del primer domingo de cuaresma de 2010. En el mismo se producen, entre otros, dos cambios significativos. 1- Se dejará de usar el “vosotros” y se utilizará el “ustedes”, como ya en muchos lados se viene utilizando. Esto afectará también a la fórmula de la consagración del pan y del vino. 2- Quizá el cambio más importante, que responde a un pedido del santo Padre Benedicto XVI del 17 de octubre de 2006, es el siguiente: en la fórmula de consagración del cáliz se cambiará la expresión “…que será derramada por todos…” por “…que será derramada por muchos…” (pro multis). A continuación una breve explicación teológica de dicho cambio. El texto, correspondiente a las palabras pro multis, entregado por la Iglesia a lo largo del tiempo –que constituye la fórmula que ha sido de uso en el Rito Romano desde los siglos más tempranos- en los últimos 30 años, en algunos textos aprobados en lengua vernácula ha sido traducido en el sentido interpretativo de “por todos” o equivalentes. No hay duda, en cualquier caso, sobre la validez de las Misas celebradas con el uso debidamente aprobado de la fórmula que contiene una formula equivalente a “por todos”, como la Congregación para la Doctrina de la Fe ha declarado ya. Verdaderamente, la fórmula “por todos” seguramente correspondería a la intención del Señor expresada en el texto. Es dogma de fe que Cristo murió en la cruz por todos los hombres y mujeres (cfr. Jn 11,52; 1Cor 5,14-15; Tit 2,11; 1Jn 2,2). Hay, sin embargo, muchos argumentos a favor de una traducción más precisa de la fórmula tradicional pro multis: Los Evangelios (cfr. Mt 26,28; Mc 14,24) hacen una referencia específica a “muchos” por los cuales el Señor está ofreciendo el Sacrificio. Sería completamente posible que los Evangelios hubiesen dicho “por todos” (cfr. Lc 12,41); pero, la fórmula de la narración de la institución dice “por muchos”, y estas palabras han sido fielmente traducidas por la mayoría de las versiones bíblicas modernas. El Rito Romano en latín siempre ha dicho pro multis y nunca pro ómnibus. Las anáforas de los distintos ritos orientales, sea el griego, el siríaco, el armenio, el eslavo, etc. Contienen fórmulas verbales equivalentes al latín “pro multis” en sus respectivos idiomas. “Por muchos” es una traducción fiel de “pro multis” en tanto que “por todos” es más bien una explicación más adecuada a la catequesis. La expresión “por muchos”, mientras permanece abierta a la inclusión de cada uno de los seres humanos, refleja, además el hecho de que esta salvación no es algo mecánico, sin el deseo o la participación voluntaria de cada uno; por el contrario, el creyente es invitado a aceptar por la fe el don que le es ofrecido y a recibir la vida sobrenatural que es dada a los que participan del misterio, viviéndolo en sus vidas de modo tal que sean parte del número de los “muchos” a los que se refiere el texto. Pbro. Mil. Juan Lisandro Scarabino