LA CRISIS FINANCIERA DE WALT STREET
Durante las últimas semanas hemos presenciado probablemente la peor crisis financiera en la historia reciente de Wall Street - y persiste una tremenda incertidumbre respecto a la economía de los Estados Unidos y sus repercusiones en los mercados globales. Sin duda éste ha sido un año extraordinario, con una campaña presidencial en EE.UU a punto de definirse, con sorpresas de la talla de la inclusión de Sarah Palin en la campaña de McCain (hasta ese momento prácticamente una desconocida a nivel nacional), y pareciera que no hay día que pase en que no nos encontramos con nuevos giros en la economía o la campaña presidencial de EE.UU. Sin ir más lejos, con fecha de hoy finalmente se aprobó el plan de rescate de US$700 billones después de haber sido rechazado sorpresivamente a principios de semana por la Cámara de Representantes del Congreso de EE.UU creando una crisis de proporciones en los mercados mundiales. Pero el punto de este artículo es cómo la crisis financiera ha afectado a Silicon Valley y si el estatus de esta región como centro de innovación y emprendimiento a nivel norteamericano y global se encuentra en peligro. Por mucho tiempo Silicon Valley parecía inmune a la crisis financiera. Entre otros argumentos se decía que las empresas de tecnología locales no dependían mucho de deuda o créditos porque ya contaban con mucho efectivo en sus balances, los inversionistas de capital de riesgo (VCs) ya habían levantado un monto importante de capital (US$35 billones durante 2007), los inversionistas en estos fondos permanecían comprometidos a largo plazo y que las crisis de corto plazo no afectarían mayoritariamente a esta industria (algunos notaban que Cisco fue financiada en octubre de 1987, "después" de la crisis de ese año). Sin embargo, un tema que sí viene afectando a la industria del capital de riesgo es la falta de liquidez vía mercados de capitales (IPOs), ya que sólo 6 empresas financiadas por VCs se han abierto a la bolsa en 2008
recaudando la “relativamente baja" suma de US $500 millones, en comparación al año pasado donde 86 empresas financiadas por VCs recaudaron US $10.3 billones a través de IPOs. Hace algunas semanas, en una entrevista a Eric Schmidt (CEO de Google), éste señalaba que la crisis financiera no afectaba mayoritariamente a Google ni a la región. En general, Silicon Valley parecía inmune a la crisis de Wall Street. Pero a medida que la crisis financiera se ha hecho más profunda, una nube de dudas ha aparecido en la región. Hace una semana, el diario NY Times señalaba que "por ahora" la crisis habia apenas afectado a Silicon Valley pero en un artículo de hoy ya estaban transmitiendo más pesimismo "gloom in Silicon Valley", señalando que la pregunta ya no es si la crisis va a afectar a la región, sino que es un tema de plazo. Las acciones de empresas emblemáticas de la zona como Apple, Yahoo!, Google, eBay, etc. están todas a la baja. Pareciera de sentido común señalar que si la crisis financiera empeora es inevitable que afecte a esta región, con la posibilidad que inversionistas de capital de riesgo empiecen a retirar su capital o limitar su aporte, lo que afectaría notablemente al emprendimiento e innovación local por la menor cantidad de capital disponible. Sin embargo, una industria que se mantiene muy estable (aunque no inmune) y que ha levantado a la región es la industria de la energía renovable (“clean tech”), la que se concentra cada vez más en Silicon Valley. Las cifras son interesantes: empresas en esta industria levantaron US$ 2.6 billones en el tercer trimestre de 2008, y 42% de este monto se invirtió en empresas californianas. Los cinco mayores inversionistas de dicho trimestre se encuentran en Silicon Valley: cuatro fondos de capital de riesgo y Google. El monto de inversiones durante este año - US $6.6 billones - ya excede todo el dinero invertido en 2007. Las inversiones crecieron 17% durante el segundo trimestre y 37% durante el tercer trimestre, en comparación al año pasado. En un interesante artículo títulado "Is Clean Tech Just an Investment Bubble About to Burst?", Josh Green - socio de la firma de inversiones Mohr Davidow Ventures - explica cómo el mayor costo energético mundial está afectando prácticamente a todas las industrias ("the era of cheap energy is over") y que la respuesta a esta realidad está en el desarrollo de nuevas tecnologías que solucionen este problema - y define a la industria del clean tech (definición que me parece increíblemente vaga) como "tecnologías que permitan la transformación masiva de las industrias más grandes del planeta" y que por eso, a su juicio, esta industria no es una burbuja, aunque estará expuesta naturalmente a altos y bajos. En parte, este artículo me hizo recordar una charla que dio John Doerr en una conferencia TED, donde terminó a lágrimas describiendo la seriedad del tema del cambio climático. En definitiva, no cabe duda que la crisis financiera puede llegar a afectar la capacidad de emprendimiento e innovación de EE.UU y por eso estamos todos pendientes de la situación económica mundial, aunque pareciera que Silicon Valley tiene una notable capacidad para seguir innovando en tiempos de crisis
– es cosa de notar su liderazgo en el auge de la industria clean tech - e historias como la de Tesla Motors, que acaba de anunciar la construcción de una planta de US$ 250 millones para construir autos eléctricos de lujo en Silicon Valley, otorgan cierta cuota de esperanza para continuar innovando y creciendo.