Madre Amalia Martín de la Escalera
¡Oh, Dios mío! No sé yo quien os debe más, si aquel que cayó, y Vos lo levantasteis o aquel a quien quitasteis los tropiezos del camino para evitarle que dada su debilidad cayera.
¡Cuánto os debo Señor! Y que malos he pagado y os pago los cuidados que habéis tenido y tenéis con mi pobre alma.
Gracias, Señor; porque en los momentos más dificiles y duros de mi vida, has puesto cerca de mí quien con caridad me prestara su ayuda y me diese ánimos para caminar entre penas y oscuridades.
Gracias, Señor, por tu gran bondad para con mi pobre alma ya que has querido que al final de mi vida no me falte quien con caridad me sea medio para ir a Ti.
En los días de prueba pusiste cerca de mí quien en tu nombre me ayudase a buscar y poner toda mi confianza en Ti.Bendito seas Señor porque en tu gran bondad miras desde tu altura con amor de Padre a los más pequeños y necesitados.
Señor, te doy gracias por lo que he sufrido y te pido la ayuda de tu Gracia para seguir sufriendo por Ti.