COLEGIO “CRISTO REY” – Jesuitas / CIENCIAS SOCIALES / PROMOCION BERCHMANS 2008 / 5º B / AJRR
“EL CLAVEL NEGRO” (CINE FORUM)
Y de repente, sin que nadie se lo pida, aparece el héroe. Puede darse cita en cualquier época, pero tiende a hacerlo en los tiempos en los que la destrucción y el caos azotan un lugar y a una sociedad; cuando la muerte se ensaña con un grupo de gente indefensa. Es un personaje de extremos, pues surge durante un terremoto, una inundación o cualquier otro cataclismo. Pero especialmente brilla cuando el desastre es provocado por la estupidez y rapiña tan propias del ser humano. Tal es el caso de Harad Edelstman, "El Clavel negro". Personaje bon vivant, seductor y aristócrata que tenía la costumbre de aparecer en los lugares en donde el hombre se cebaba con sus semejantes
Como parte del cuerpo diplomático de Suecia, estuvo en Noruega y en Berlín durante lo más crudo del nazismo, apoyando a la resistencia y protegiendo judios perseguidos por la locura facista; se hizo presente también en Guatemala ayudando a la guerrilla que peleaba durante una de sus muchas dictaduras militares Sin embargo, muy especialmente, se le recuerda por la gallardía que mostró en los meses posteriores al golpe de estado que derrocó (Y asesinó), a Salvador Allende, en la República de Chile. La película El Clavel negro (The black pimpernel, 2006), narra esos días sangrientos que precedieron al primer 11-S, cuando Edelstman ya había sido nombrado embajador de Suecia. Al personaje se le presenta como un ser humano, con fallas y vicios, pero también como un hombre de increible valor, capaz de arriesgar el pellejo abriendo las puertas de la embajada sueca a los perseguidos, tratando de proteger a la embajada de Cuba -la cual fue atacada luego de que Pinochet subió al poder-, o visitando el lóbrego estadio nacional para tratar de salvar la vida de su joven ayudante o de una cincuentena de prisioneros uruguayos.
La película tiene ciertas partes en donde se aprecia la intención del guionista de llevar la historia por los caminos del melodrama, entre ellos destacan la relación que entabla con la Comandanta (una solvente Kate del Castillo) o cuando la misteriosa Ana (la siempre cumplidora Lumi Cavazos), le revela su verdadera identidad. Estas partes son las más débiles del filme. Afortunadamente, la contundencia de los hechos y de las acciones del Edelstman histórico son lo suficientemente fuertes como para soportar estas licencias.
El verdadero Harald Edelstman (1937-1989)
La película, a pesar de estos baches, es memorable en muchos sentidos. Destacable y conmovedora la escena en que el funcionario sueco abre las puertas de la representación diplomática para dar refugio a los perseguidos políticos; enorme la actuación de Daniel Jimenez Cacho como un militar con alma (eso es actuar y no mamadas); pero, sobre todo, soberbio el actor Michael Nyqvist en el papel del Clavel Negro. Tal vez lo que más estremece es que la mayoría de los hechos más espeluznantes de la película fueron reales, incluso que furon filmados en los mismos lugares en donde ocurrieron (el estadio nacional, por ejemplo) Entre muchos otros méritos que tiene la película, el más importante es que nos recuerda que hubo un tiempo -no tan lejano como nos gusta creer-, en el que un gobierno legítimo podía ser derrocado por una runfla de bestias capaces de sacrificar miles de vidas en aras de un supuesto progreso o para eliminar un ficticio peligro para el país (¿A qué me suena, a qué me suena?). Por fortuna, donde aparecen estos horrores, siempre aparecen los Edelstman, dispuestos a defender el valor máximo, ese que está por encima de ideologías, colores o doctrinas: La vida humana. A PARTIR DE LA VISUALIZACION DE LA PELICULA Y LA LECTURA DEL PRESENTE ARTICULO, UNA VEZ CULMINADA, DESARROLLAREMOS UN FORUM PARA CONVERSAR AL RESPECTO, TANTO SOBRE LOS ELEMENTOS HISTORICOS COMO TECNICOS DE LA MISMA. http://yoatecutli.blogspot.com/2007/10/el-clavel-negro.html