Las Catanas que defendieron bestias: Akira Kurosawa y sus 7 Samurái Esteban Galindo El Camino del Samurái reside en la muerte. Cuando hay que tomar una decisión crítica, sólo queda escoger en seguida la muerte. La elección no es particularmente difícil; sólo se necesita tener valor y actuar. –HAGAKURE Tsunetomo Yamamoto.
Bushido literalmente significa el camino del guerrero en japonés, bushi guerrero y do camino. La pregunta que nos hace el maestro Akira Kurosawa, es ¿para quién vamos a la guerra y a que costo? Los 7 samuráis es una profunda reflexión sobre aquellos que travesean por el camino de la guerra. La premisa del filme es muy simple pero poderosa, durante la era sengoku un grupo de campesinos son asaltados por bandidos que quieren quitarles su cebada y arroz. En un acto de desesperación contratan 7 samurái a defender su humilde aldea. Los 7 pelearan hasta el último hombre. Detrás hay es un subtexto muy complejo. Kurosawa quiere explorar el sentido de la tradición japonesa, la estructura de clases y la nacionalidad que Kurosawa y todos los japoneses enfrentaron a raíz de la guerra del Pacífico, la ocupación extranjera y la posterior "reinvención" de Japón para occidente. En 1954 cuando la película fue estrenada las cicatrices de la segunda guerra mundial aún estaban frescas, una humillante derrota con un costo de vida humano innombrable como fue las dos bombas nucleares de Hiroshima y Nagasaki. Los 7 y los aldeanos son humanos no héroes épicos sino deben enfrentarse a retos que son épicos en su tragedia como es matar. Kurosawa tiene esto muy claro y no presenta la guerra como heroico y ni algo glorioso. La guerra es cruda, cruel y despiadada, sin embargo, es importante luchar por la defensa del bienestar común. Aquellos que se sacrifican por la dignidad y bienestar de otros son los verdaderos héroes. Así mismo paradójicamente aquellos que van a la guerra lastiman a la misma gente por la que luchan. El mejor ejemplo es el personaje de Kikuchiyo, protagonizado por el grandioso Toshiro Mifune, una especie de vagabundo guerrero que sigue a los 6 samurái y actúa como uno sin pertenecer a la casta guerrera.
En una
conmovedora escena cuando explica sobre la naturaleza engañosa y oportunista de los campesinos. Dice lo siguente “Pero,¿quién ha hecho que sean unas bestias así? ¡Vosotros! ¡Los samuráis! Quemáis sus aldeas, destruís sus casas, les robáis la comida, les obligáis a trabajar. Seducís a sus mujeres y las matáis si se resisten. ¿Qué queréis que hagan?»
Kikuchiyo no es un aldeano ni samurái sino un hombre que el mundo ha vuelto una bestia. Los hombres y mujeres somos esclavos de nuestros roles sociales, contexto y tiempo. Es esto que produce la oscuridad de la condición humana. Kurosawa es crítico del samurái y como este es la espada contratada de los ricos señores feudales y su interés económico. Sin embargo, como me pasa a mí, él puede ver belleza en estos antiguos espadachines. Es por eso que el hecho de que los samuráis están estén es cuidando un mísero pueblo arrocero y no el gran castillo de algún señor de la guerra. Es como si nos quisiera quizás decir que debemos honrar y aprender de los valores del bushido, pero no para repetir los errores del gobierno nacionalista de ultra derecha de la pre guerra o los violentos tiempos feudales sino ver a el campesino y el samurái como uno mismo. Proteger esa gran aldea que se llama humanidad. En conclusión 7 samuráis es una obra sublime no solo de cine sino del arte. Confieso que ver a ese montículo fúnebre con las cuatro espadas me da una sensación que no puede explicar. Es quizás el samurái dentro de mí que llama, que lucha contra la bestia…
Bibliografía https://philosophynow.org/issues/55/Seven_Samurai Prince, Stephen, 1955- The warrior's camera: the cinema of Akira Kurosawa / by Stephen Prince. http://www.jonathanlack.com/2012/05/appreciation-of-akira-kurosawas-seven.html Título original: Hagakure: The Book of the Samurai Tsunetomo Yamamoto, 1979 Editorial: Isliada Editores http://www.isliada.org