Impacto Social - Control de Mascotas de la ZMG El proyecto que se busca realizar es lograr un registro de animales en todos los hogares de la zona metropolitana de Guadalajara. Y uno de contención para todos los animales en situación de calle. Para así ayudar al ciudadano en la crianza de su mascota Lo cual conlleva a la implementación de nuevos servicios los cuales servirán para facilitarle al ciudadano el cuidado de sus queridas mascotas; otorgándoles acceso a una atención médica con el fin de darles una vida más sana y duradera. Esa atención médica será controlada a través de una cartilla animal que le será entregada al momento de registrar su o sus mascotas a la institución encargada de este proyecto, cartilla que podrá tener seguimiento de vacunas, antirrábico, resultados de consultas en veterinarias realizadas periódicamente. Se busca crear un hospital veterinario, homologando lo hecho en la Ciudad de México con un hospital especializado para perros y gatos que tiene a la disposición de los ciudadanos para sus mascotas los siguientes servicios: * Orientación médica sobre cuidados generales * Sensibilización para una sana convivencia entre la mascota y el propietario * Desparasitación * Rayos X * Ultrasonido * Endoscopia * Laboratorio Clínico * Farmacia Veterinaria * Cirugía General * Cirugía de Especialidad * Consulta General * Consulta de Especialidad * Hospitalización * Esterilización Dicho hospital ha sido todo un éxito en la capital del país El Hospital Veterinario del Gobierno de la Ciudad de México atendió en 2016 a más de 30 mil 743 perros y cuatro mil 96 gatos, en promedio cerca de tres mil al mes, lo que representa un incremento significativo, pues en los primeros días de trabajo comenzó con 100 consultas por día y a unas semanas se cumplió la expectativa de 150. En la actualidad rebasó la meta con más de 220 diarias. Tras ser inaugurado con el propósito de garantizar la atención médica de las mascotas, se detalla mediante un comunicado, que de febrero a diciembre se refieren a 18 mil 283 consultas médica veterinaria general y de especialidad a las mascotas, cinco mil 637 desparasitaciones y 11 mil 538 actividades de sensibilización a los propietarios. En cuanto a procedimientos quirúrgicos e internamiento, tuvo un total de cinco mil 321 pacientes hospitalizados, se practicaron mil 252 cirugías de tejidos blandos y de ortopedia por padecimientos, lesiones y traumatismos sufridas y, para cuyos diagnósticos, se hicieron 11 mil estudios. Además, se llevaron a cabo mil 27 cirugías de esterilización, las cuales se hace bajo previa revisión de las mascotas y deberán ir limpias. Las zonas de hospitalización son diferenciadas y especializadas para perros y gatos, y para pacientes con enfermedades infecciosas. También cuenta con áreas de terapia intensiva y de rehabilitación física, investigación clínica y farmacia veterinaria abierta al público en general.
Cabe señalar que el personal veterinario ofrece orientación médica sobre cuidados de perros y gatos, enfocados a la higiene, alimentación y ejercicio, poniendo énfasis en la sensibilización de los propietarios sobre el manejo conductual, para una sana convivencia en lo familiar y social. Con el modelo hecho en la Ciudad de México y tras su evidente éxito que tuvo por ser el único en su clase que cubría una necesidad real, con gran demanda y muy pocos métodos de solución al problema. Pensamos ahora trasladar esa idea al estado de Jalisco ya que la ciudadanía tapatía se tiene envuelta en la misma necesidad ya que estamos hablando de una densidad de población, puramente canina, inmensa aún más que en la capital del país como lo dice en la siguiente nota del periódico “El Informador” En la Zona Metropolitana de Guadalajara hay más perros vagabundos que bajo el cuidado humano, pues se calculan que unos 350 mil deambulan en las calles. Según un estudio realizado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y una compañía trasnacional de alimento para mascotas, que facilitaron la cifra, en la metrópoli vive un perro por cada seis habitantes. El mismo estudio indica que en la Zona Metropolitana del Distrito Federal deambulan alrededor de 450 mil canes sin dueño, de manera que, proporcionalmente a la población humana, Guadalajara tiene mayor concentración de animales callejeros por persona que la Ciudad de México, y ésta se agudiza en la periferia de la ciudad “Los problemas que acarrea tener perros en la calle son las heces, parásitos... ahora que se acerca el calor, el problema de las garrapatas en algunos lados es grave y es de cuidado, porque la garrapata en un momento de infestación puede morder al humano, también las pulgas y otro tipo de parásitos que son transmisibles al hombre, eso es desde el punto de vista de salud pública”, explica Maricarmen Portilla, directora de la asociación civil Pet Help, que labora de la mano con la UNAM y la compañía de alimento. Agrega que la población de gatos es cuenta aparte, y que posiblemente se trate de una cifra similar, debido a que los felinos entran en periodos fértiles con más frecuencia y se reproducen rápido, pero no son tan visibles como los perros, porque son más escurridizos. Para esta problemática ahora pensamos en la idea de crear pequeñas perreras que recojan todos estos perros en situación de calle y ponerlos en condiciones de adopción después de un debido acondicionamiento vacunando, bañando y desparasitando al animal resguardado. Para así ponerlo en adopción y pueda formar parte de una familia Dicho proyecto es una clara réplica de las medidas utilizadas en Estados Unidos para los animales callejeros y que tiene décadas en funcionamiento. Utilizando como base el modelo norteamericano, se reduciría notablemente la cantidad de perros y gatos que se encuentran fuera de un hogar y así evitar lo que llamaría “vandalismo animal” que sería que perros o gatos provoquen accidentes de tránsito por andar en las calles, “marquen su territorio” en cada esquina, hurguen en la basura en busca de comida, provocando así que esparzan la basura por toda la calle. Y todo eso sin un responsable directo y reparador del daño que podría ser su dueño, si este tuviera uno. Y al no poder responsabilizar a nadie ya que la peor consecuencia que puede recibir el animal es un golpe o patada para desquitarse, indebidamente, que le pueda dar el ofendido; no podría haber una reparación del daño real. Y lo que buscamos con estas perreras y recolección de animales callejeros es reducir todo esto.
Por esa situación también es importante llevar un registro animal. Ya que un perro que si tenga hogar pero que solo se encontraba paseando en la calle puede prestarse el criterio de que también es callejero y por lo tanto los perreros deben realizar su trabajo. Eso se puede solucionar con un sencillo collar y placa, pero estás se podrán entregar después de un debido trámite de registro