Comprension, Analisis Y Produccion De Textos Parte Dos Resumenes

  • July 2020
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Recursos argumentativos (ejemplos) Son recursos que el autor emplea para reafirmar su hipótesis y guiar al lector a una determinada conclusión. •

La comparación: “El castellano se caracteriza por su riqueza, así como el ingles por su concisión.”



La explicación: “El resultado fue el fracaso, porque no es posible aprisionar el pensamiento; tampoco un idioma se impone por ley, sino por el uso y las costumbres.”



El ejemplo: “Como confirmado que la historia se repite, es posible recodar que a mediados de la década del cuarenta se prohibió el lunfardo en las letras de los tangos.”



La generalización: “Un idioma no se impone por ley, así como cada vez que se intento forzar por ley una determinada manera de pensar, el resultado fue el fracaso”.



Establecimiento de causas y efectos: “Prohibir o reprimir esas expresiones en respuesta a algún abuso, seria demorar innecesariamente la evolución natural del lenguaje”



Contra argumentación: “Quien piensa que es posible reprimir el habla, seguramente piensa en la forma de que exista una y solo una manera de pensar”.

Una araña en el zapato. Por Augusto Albajari.

Capitulo 10. “Escribir un ensayo” QUE. Una hipótesis. Las acotaciones al margen: en ese espacio periférico se carga y se inscribe la subjetividad del autor, desencadenan la interpretación y la asociación libre. Su historia.

El surgimiento del ensayo puede ubicarse en la última mitad del siglo XVI con la publicación de la obra de Michel de Montaigne. Apareció desprendiéndose de la minuciosa comprobación y verificación. Recién en Montaigne se lee explícitamente lo personal y lo subjetivo, su modalidad se oponía a la del positivismo. En nacimiento del ensayo en nuestro país puede ubicarse simultáneamente al de la Nación. Para la literatura argentina el género ensayístico tiene nombres propios como Mariano Moreno o Juan Bautista Alberdi e hitos como “Facundo” de Domingo Sarmiento y “Radiografía de la pampa” El genero El ensayo es una prueba antes que algo definitivo. Este género no acepta una definición univoca: necesita de una descripción. “La brevedad, el empleo de la prosa, la naturaleza informal de la exposición”: son pinceladas del ensayista Jaime Rest. En los ensayos no son necesarios las formulas, los cuadros y los gráficos. Es un género huidizo, mimético, y hasta puede llegar a ser metarreferencial. Es justamente en éste donde reina la postura de mirarse adentro: escribir sobre un problema. Alfonso Reyes: “el centauro de los géneros”: mitad lirico, mitad científico. Es un género abierto a la divagación y la critica. Conclusiones Al liberarse de la idea tradicional de verdad, el ensayo se acerca a la literatura. Se rebela contra la idea de totalidad; no se presente nunca como creación, sino como recreación. Expresa lo que a uno le ocurre. Para la Ciencia, la critica alardeada por el ensayista, esta condenada ya que es cómplice de la subjetividad (y el ensayista no lo niega). Lo que el ensayista tampoco niega es que el ensayo por definición es descartable: nadie se responsabiliza tanto por el texto. Lo falible y lo provisional son algo más que las características del género. El ensayista recorre los baldíos del conocimiento y, desde el margen, apedrea el edificio de la Ciencia: intenta, atenta y tantea. La intención. El ensayista suele entrever en los primeros párrafos del escrito su motivación. Es preciso que quien se presta a redactar un ensayo, lo haga como primer paso

(aunque luego decida no explicitarlo en la versión final) ya que esta idea será el motor de su labor. La investigación La exploración debe realizarse en función de un planteo original e ir incorporando para ilustrar, contrastar o comparar, las ideas de otros autores. La hipótesis Es inherente a si mismo que un ensayo proponga una hipótesis. También puede postular varias, y en ese caso, lo que se acostumbra es jerarquizarlas. El plan de texto El esquema resultante es producto de la creatividad. Ejemplos: Esquema 1. •

Presentación de la doxa (saberes aceptados, imaginarios institucionalizados) sobre el tópico del ensayo (la idea de la narración)



Oposición a partir del trabajo de campo (entrevistas)



Reformulación conclusión.

del

concepto

clave

(narración-

identidad)

como

Esquema 2. •

Formulación de hipótesis a partir de la bibliografía.



Exposición del trabajo de campo (entrevistas)



Confirmación, refutación, ampliación o reformulación de la hipótesis inicial. Hipótesis personal.

Esquema 3. •

Descripción del trabajo de campo (entrevistas)



Análisis de rasgos recurrentes o significativos



Confrontación de los conceptos teóricos



Formulación de la hipótesis personal.

La redacción

1- Interesar al lector. El ensayo debe atrapar desde su inicio. El neoperiodismo, postula que el texto debe abrirse de manera llamativa, sorpresiva, o bien, provocativa. Una alternativa para llamar la atención del lector es encabezar el cuerpo del texto con un epígrafe. 2- Explicitar el propósito. Breve mención de la tesis general (aunque ni la hipótesis) que se busca a dar a conocer. 3- Capitulizar. Dividir los tópicos desarrollados. Mediante la numeración o el subtitulado, se ordenan los temas. Anticipar el lector la división o repasar los puntos (o subtítulos) por tratar, puede predisponer a la comprensión y permite seguir el hilo expositivo más sencillamente. 4- Ordenar la información. El orden cronológico: esta forma de disponer la información domina por ejemplo, la referencia de hechos históricos, los procesos de elaboración o transformaciones de productos. Nexos: inicialmente, usualmente, posteriormente, finalmente, de inmediato, después, con anterioridad, al principio, seguimiento, al final, antes, entonces, mas tarde, acto seguido, con posterioridad, luego. El orden comparativo: razonamientos que contrastan ideas. Nexos: por otra parte, mas bien, contrariamente, antes bien, ahora bien, a diferencia de, no obstante, sin embargo, en contraposición, en cambio, con todo, por el contrario, de todas maneras. El ordenamiento por causa-efecto ayuda a exponer de manera repetida, por ejemplo, las razones y las consecuencias de una situación. Nexos: por tanto, en consecuencia, debido a ello, por esto, como resultado de ello, porque, ya que, visto que, a causa de, con motivo de, gracias a, considerando que, teniendo en cuenta que, con que, por consiguiente, pues. 5- Recapitulizar: Algunos dedican una sección con el titulo “Conclusión”. Siempre se repasan o se unen los puntos que hayan quedado sin unir. 6- La revisión: Organización. Contenido. Forma.

Las claves de la argumentación. Weston Anthony. Capitulo VII. “La composición de un ensayo basado en argumentos”

A. Explorar la cuestión. Explore los argumentos sobre todos los aspectos de la cuestión. Su tarea es dar una opinión bien informada que pueda ser defendida con argumentos sólidos. Explorando la cuestión encontrara argumentos a favor y en contra de estas afirmaciones. Comenzara también a formular argumentos propios. Los argumentos deductivos también pueden ser útiles. Cuestione y defienda las premisas de cada argumento. La regla es: cualquier afirmación que da lugar a dudas razonables necesita al menos alguna defensa. Cuando hay limitaciones de espacio o de tiempo, argumente fundamentalmente en favor de sus afirmaciones más importantes y/o controvertibles. Aun entonces, cite al menos alguna prueba o autoridad a favor de cualquiera otra afirmación que permanezca debatible. Revise y considere los argumentos tal como aparecen. Su argumento inicial tendrá que ser mejorado. Los argumentos cortos deben ser mejorados y ampliados: añadiendo ejemplos a un argumento mediante ejemplos; citando y explicando la cualificación de una autoridad. Capitulo VIII. “La composición de un ensayo basado en argumentos” B. Los puntos principales de un ensayo. Organizar su ensayo. Comience por presentar la pregunta que quiere responder. Considere su audiencia, ella puede no ser consciente de la cuestión, o de la gravedad del problema; su tarea es hacer que tomen consciencia de ello. Formule una propuesta o afirmación definitiva. Sea específico. Exponga, en primer lugar, su afirmación o interpretación de una manera simple. Después ofrezca tantos detalles como sea necesario. Desarrolle sus argumentos de un modo completo. Si hace una propuesta, tiene que mostrar que resolverá el problema con el cual comenzó. Tendrá que argumentar acerca de causas y efectos, mediante ejemplos. Si arguye a favor de su interpretación de un texto o suceso, este es el lugar para explicar los detalles de ese texto o suceso, y para explicar su interpretación detenidamente. Examine las objeciones. Usted tiene que examinar que desventajas puede tener su propuesta. Argumente que las ventajas superan las desventajas. Si escribe un trabajo académico, busque las criticas a su afirmación o interpretación en los textos asignados para e curso.

Examine las alternativas. Debe mostrar que es mejor que las otras maneras plausibles de resolver el problema, bajo las circunstancias dadas. Capitulo IX. “La composición de un ensayo basado en argumentos” C. Escribir el ensayo. Siga su esquema. Formule una introducción breve. Vaya al grano. Exponga sus argumentos de uno en uno. Exponga un argumento por párrafo. De al lector una idea clara de hacia donde quiere ir. Luego, explique y defienda este argumento, y dedique un párrafo a cada premisa. Un buen ensayo primero explica la importancia de la cuestión, luego formula la conclusión y finalmente dedica un párrafo (o, a veces, varios párrafos) a cada una de las premisas. Claridad, claridad, claridad. Es esencial explicar las conexiones entre sus ideas, aun si le parecen absolutamente claras. Apoye las objeciones con argumentos. No afirme más de lo que ha probado.

El manual de la lengua. La argumentación Textos argumentativos. Los temas sobre los que se argumenta deben ser polémicos. La argumentación puede aparecer en ensayos, artículos filosóficos, históricos e, incluso, en la conversación cotidiana. La argumentación es un procedimiento discursivo que tiene por objeto convencer o persuadir sobre un tema particular mediante la presentación de distintas razones llamadas “argumentos”. Las características de los textos argumentativos: a. Persuasión: influir sobre el receptor. b. Estrategias. El emisor utiliza recursos lingüísticos y discursivos para convencer a los receptores de su posición.

c. Organización textual. De los argumentos presentados, se extrae una conclusión. d. Temas polémicos. Desarrollan aquellos temas que son discutidos en una sociedad. e. Destinatario. Se dirigen a un sector determinado. La estructura de los textos argumentativos. Tema: es el punto de partida para plantear su punto de vista. Hipótesis o tesis: es la opinión o el punto de vista del autor del texto, sobre un tema particular Demostración. Por medio de la presentación de argumentos (hechos, pruebas, datos). Defiende su hipótesis. Conclusión. Cierra la argumentación y coincide con la idea planeada en la hipótesis. Los recursos argumentativos. Tienen como finalidad guiar al lector a una determinada conclusión de los hechos analizados, que se desprende de las opiniones expresadas en el artículo. La comparación, el ejemplo, la explicación, la generalización, establecimiento de causas y efectos y la contraargumentacion.

el

Los organizadores argumentativos. Recursos léxicos que se denominan “conectores” y sirven para encadenar los argumentos. a. Argumentativos: aunque, no obstante, así, del mismo modo, sobre todo, incluso b. Ordenadores lógicos: en primer lugar, para finalizar, para resumir, finalmente, en conclusión. c. Explicativos: porque, por eso, dado que, de esta manera, del mismo modo, es decir. Los organizadores de la argumentación. Los dos organizadores más comunes son: los organizadores de la argumentación secuencial y de la argumentación dialéctica. La argumentación secuencia:

El autor presenta su tesis al comienzo del texto y va incorporando distintos argumentos para demostrarla. No se introducen contraargumentos para ser refutados y, asi, se guía al lector a una única conclusión, que puede no estar explicita en el texto, pero que es fácilmente deducible. La argumentación dialéctica: Presenta, junto con la tesis del autor, otros puntos de vista que son refutados. Este, luego de presentar todos los argumentos, destacara aquellos que le sirvan para defender su punto de vista y descartara los contrarios. Tipos de razonamientos argumentativos. El razonamiento deductivo. La conclusión debe inferirse necesariamente de los argumentos expuestos. La conclusión no agrega nada nuevo a lo ya dicho en los argumentos. Premisa 1 “Todos los hombres son mortales” Premisa 2 “Juan es un hombre” Premisa 3 “Por lo tanto, Juan es mortal” La conclusión no se infiere necesariamente de los argumentos. Por eso, no siempre es valido. Y1 es C Y2 es C Y3 es C Por lo tanto, todo Y es C. Existen dos tipos de razonamiento inductivo: el completo o perfecto y el incompleto o imperfecto. •

En el completo o perfecto, es posible abarcar la totalidad de los individuos del conjunto de que se trata, lo que hace posible el examen completo de sus miembros, por ejemplo:

El gorrión es ovíparo. La paloma es ovípara. El águila es ovípara. Todas las aves son ovíparas.



En el razonamiento inductivo incompleto. Se presenta un numero determinado de casos y, a partir de allí, se realiza la generalización. La imposibilidad de comprobar la totalidad de los casos puede desembocar en que la conclusión, alguna vez, deje de ser verdadera.

La oveja A es blanca. La oveja B es blanca. LA oveja C es blanca. Todas las ovejas son blancas. Razonamiento por analogía. La conclusión se desprende de la comparación entre características semejantes que pertenecen a dos o más objetos conocidos. La conclusión que se infiere en este tipo de razonamiento expresa probabilidad. Se diferencia de los dos anteriores porque demuestra su validez en una forma lógica, sino que se mantiene en el nivel de la sospecha o de lo probable. Hacia una definición del ensayo. Montaigne fue el primero en usar el término “ensayo”. El lo define como un “instrumento” eficaz para analizar cualquier tema que le interese investigar al autor. El ensayo. Es un tipo de composición escrita en prosa, relativamente breve, y en el cual se expone con cierta profundidad una interpretación personal sobre un tema. Los ensayistas utilizan un lenguaje subjetivo. Redactar un ensayo. Definir un tema. La estructura del ensayo. No posee una estructura rígida, en el ensayo prevalece lo estético. El objetivo del ensayista es problematizar el tema que analiza sin la pretensión de imponer una postura ni de ser exhaustivo. El ensayo se acerca más a una obra literaria que a un tratado científico. Aunque las subdivisiones en el ensayo no son explicitas, conviene tener en cuenta que suele organizarse en introducción, desarrollo y conclusiones. La introducción

Los autores vuelcan los datos que sirven para situar al lector con respecto a las características del ensayo, las circunstancias que motivaron su escritura y los objetivos que se persiguen. El desarrollo Contiene el análisis y la consideración de las ideas que se desean transmitir. Se caracteriza por: •

Lenguaje subjetivo.



Originalidad.



Discurso argumentativo.



Planteamiento de nuevas ideas.

Las conclusiones Después de haber desarrollado las ideas que constituyen la sección expositiva, se escribe las conclusiones. Se trata de un resumen del desarrollo expuesto en el cuerpo principal. El autor trata de destacar los aspectos más importantes del trabajo y que permiten obtener una apreciación global de los resultados obtenidos. Los paratextos Estos elementos sirven para situar al lector con respecto al autor del trabajo, la estructura interna y las fuentes consultadas que sirvieron de base para la elaboración del ensayo. Los paratextos más importantes son: •

La portada



El índice



La bibliografía

Citar la bibliografía. •

Los libros: primero se coloca el apellido del autor, luego, separado por una coma, el nombre. A continuación se coloca punto y el titulo del libro en itálica o cursiva. Por ultimo, luego de un nuevo punto, el lugar de edición, la editorial y la fecha, separados por comas. Por ejemplo:

Sarmiento, Domingo F. Facundo. Civilización y barbarie. Paris, Hachette, 1874.



Las revistas: primero el apellido y nombre del autor. Luego, después de un punto, el titulo del articulo entre comillas. A continuación, el nombre de la revista en itálico o cursiva, su numero y la fecha de publicación. Por ejemplo:

Diez, Tania. “Deshilvanar los vestidos: mujeres solteras en la literatura argentina”. En: Aula abierta, N° 104, junio de 2001.

Como analizamos relatos infantiles y juveniles. Gemma Lunch II. Segunda fase. Antes de empezar el relato. Los paratextos Genette los defiende como un elemento que ayuda al lector a introducirse en la lectura facilitando las primeras instrucciones sobre el contenido del libro, lo considera un elemento auxiliar, un accesorio del texto que funciona como una puerta de entrada, de transición y de transacción. En el caso de la literatura infantil consideraríamos también paratextos a las manifestaciones icónicas, así como las ilustraciones, el número de páginas o la tipología elegida. Principales tipos de paratextos: Fuera del libro: catálogos, crítica literaria, propuestas de lectura, publicidad, etc. Los más visibles: portadas, lomo, formato, número de páginas, indicadores de edad, nombre y anagrama, etc. Dentro del libro: titulo del libro, titulo de los capítulos, prologo, dedicatorias, tipografía, etc. Los paratextos que se sitúan fuera del libro Los catálogos se dirigen a los profesores que recomiendan comprar el libro; no a los niños. Es un paratexto con una finalidad comercial. Ofrecen datos sobre la edad recomendada del lector, el tema y el argumento. Los paratextos más visibles Los paratextos más visibles son comunes al conjunto de libros que se publican en una colección. Desde un punto de vista comercial, la colección busca la repetición del acto de compra y la identificación o la fidelidad del lector. La colección necesita individualizarse e identificarse, y para conseguirlo analiza

una serie de paratextos pensados y diseñados para repetirse en todos los libros que forman una colección. El formato del libro (cuadrados, cantos ovalados, etc.). Durante las primeras edades, a partir de los 6 años se mantiene el formato del libro de bolsillo. El numero de páginas. Los indicadores de la edad del lector del libro. La portada que se repite en cada libro de la colección es el paratexto que más información acumula: el nombre del autor y del ilustrador, el titulo, la ilustración, el nombre y el anagrama de la colección y de la editorial. La portada posterior se reserva para el resumen del argumento. El lomo es lo primero que ve el comprador. El nombre. Además de las características físicas, las colecciones se individualizan a través de un nombre propio: “Sopa de Libros Anaya”, “Clásicos Universales Juveniles”. El anagrama. Esta identificación aparece en los lugares mas visibles: el lomo o la portada; se utiliza un vocabulario de colores o de formas geométricas que consiguen identificar gráficamente la colección. Las series. Marcan detalladamente la edad del lector potencial del texto y, por lo tanto, la proporción entre imagen y texto, y el número de páginas. Se mantiene el diseño general de la colección con la utilización de un color diferente en las portadas. La tipografía. Lectores más pequeños, la elección del tipo de letra o la disposición del tipo de letras en las páginas es fundamental. Los paratextos dentro del libro El titulo de la narración se dirige al comprador y cumple diferentes funciones: la identificación, ya que la obra adquiere identidad a partir del titulo. El titulo del capitulo adquiere importancia en la literatura infantil. Otros paratextos, los prólogos que, aunque en la literatura adulta canónica tienen una gran importancia, en la infantil son casi inexistentes. Las dedicatorias, destacan una relación afectiva entre el autor y la persona a quien va dirigida, habitualmente del círculo familiar. Para Genette la ilustración es un paratexto.

PARATEXTO. Maite Alvarado. Naturaleza del paratexto Las variaciones tipográficas y de diagramación o disposición de texto y grafica (cuadros, gráficos, ilustraciones, etc.) en la página, son cuestiones morfológicas, que hacen a la forma en que el texto se presenta a la vista. Un aparato de recepción Son paratextuales los textos bibliográficas, índices, epígrafes.

subsidiarios,

como

notas,

referencias

El paratexto se define como un aparato montado en función de la recepción (Genette, 1987). Primer contacto del lector con el material impreso, el paratexto es un instructivo, una guía de lectura. Los márgenes del texto Genette define el paratexto como lo que hace que el texto se transforme en libro y se proponga como tal a sus lectores y al público en general. Además de los elementos verbales (prefacios, epígrafes, notas, etc.), Genette incluye manifestaciones icónicas (ilustraciones), materiales (tipográfica, diseño) y puramente factuales (hechos que pesan sobre la recepción, información que circula por distintos medios acerca de un autor). Etimológicamente, “paratexto” seria lo que rodea o acompaña al texto (para = junto a, al lado de) Daniel Jacobi lo define como el “conjunto de elementos del contexto a los que el propio texto puede remitir por un sistema de referencias señalizadas como “ver fig. 1”. Paratexto y comunicación escrita Aseguran la coherencia textual, ayudan a separar lo que no debe estar junto y unir lo que si, a indicar cambios de tema, a resaltar los conceptos mas importantes, a completar la información que brinda el texto sin interrumpir su continuidad. El estatuto de la escritura Para Saussure, la escritura era un código seguro, cuya función no era otra que producir el habla. A la escritura, por lo tanto, no le queda otro destino que la transcripción de esos sonidos.

La escritura objetiva del mensaje Ese objeto inscrito en una superficie se puede recorrer en distintas direcciones, tachar, borrar, corregir, e incluso destruir: el sujeto ejerce un control sobre lo escrito que no es posible sobre lo oral. Barthes afirma que el habla solo puede corregirse agregando mas habla.

La recepción del mensaje escrito es deferida En el enunciado escrito, el valor semántico de los términos dependerá mas del entorno verbal que del contexto. La comunicación escrita es deferida, recepción y emisión no son simultaneas sino que media tiempo entre ellas. Posibilidad y necesidad del paratexto Los elementos que integran el paratexto dependen del carácter espacial y autónomo de la escritura: bibliografías, índices, serian impensables en forma oral. Los elementos del paratexto cumplen, en buena medida, una función de refuerzo, que tiende a compensar la ausencia del contexto compartido por emisor y receptor. El texto escrito –impreso o manuscrito- busca evitar, por los medios a su alcance, los efectos del diferimiento de la comunicación. Paratexto y texto impreso Según Marshall McLuhan, “el libro impreso creo el mundo moderno, ya que prolongo la voz y la mente del hombre y puso fin, psíquica y socialmente, al parroquialismo y al tribalismo en el espacio y en el tiempo”. Si la invención de la escritura significo, para la palabra, la conquista del tiempo, la invención del libro lo fue del espacio, ya que confirió movilidad al escrito, primero bajo la forma de volumen (rollo de hojas de papiro), luego de codex (folios de pergamino cosidos), hasta asumir, con la llegada del papel a mediados del siglo XIII, una forma mas cercana a lo que actualmente conocemos. La lectura silenciosa Hasta bien entrada el siglo XIV, la forma mas corriente de publicación era la lectura pública. El auditorio comenzó siendo selecto, pero rápidamente se fue ampliando y diversificando. Para el siglo XIII, la lectura publica ya había caído en descredito entre los sectores ilustrados, que se inclinan por la lectura silenciosa, en principio en el mundo universitario y eclesiástico.

Este cambio en l.as técnicas de lectura estuvo favorecido por ciertas transformaciones del manuscrito, como la separación de palabras, y modifico sustancialmente la relación con el libro, ya que la lectura silenciosa permite operaciones sobre el texto de carácter analítico que de otra manera no tendría cabida; es el origen de notas, índices y otros elementos paratextuales. Elementos del paratexto Parámetros de clasificación Paratexto icónico, porque consideramos que tanto las ilustraciones y la grafica como los elementos que se engloban en la composición ponen el acento en lo perceptivo. Genette distingue el peritexto del epitexto, según se trate de elementos paratextuales que rodeen el texto dentro de los límites del libro (peritexto) o fuera del libro (epitexto): dentro de este último. Gacetillas, entrevistas al autor, afiches, presentaciones, reseñas en medios de prensa; incluso los catálogos pueden considerarse parte del epitexto.

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