Carpintero Su Propia Casa

Un carpintero viejo estaba listo para retirarse. Entonces le dijo a su patrón de sus planes para dejar el negocio de construir casas, vivir una vida más tranquila con su esposa y disfrutar de su familia. Extrañaría seguramente el cheque de pago, pero necesitaba retirarse. De todos modos, podrían sobrevivir sin problemas. El contratista se sintió apenado porque su excelente obrero se iba, y le preguntó si podría construir sólo una casa más, como un favor personal. El carpintero dijo que sí, pero al poco tiempo era notorio que su corazón no estaba en su trabajo. Desganado, acudió a la habilidad falsa y utilizó materiales de inferior calidad. Era una manera infortunada de acabar su carrera. Cuando el carpintero terminó su trabajo, el constructor vino a inspeccionar la casa. Le dio la llave de la puerta delantera y le dijo al carpintero: "¡Esta es su casa, mi regalo para usted" ¡Qué verguenza! Si él hubiera sabido que estaba construyendo su propia casa la habría hecho tan diferente!. Ahora temía vivir en una casa que no había construido bien. Así pasa con nosotros: construimos nuestras vidas de una manera distraída, reaccionando en lugar de actuando, poniendo lo menos en vez de lo mejor. A los puntos importantes, no damos nuestro esfuerzo. Entonces, con susto miramos la situación que hemos creado y hallamos ahora que estamos viviendo en la casa que nos hemos construido. Si hubiéramos comprendido eso, la habríamos hecho tan diferente! Piensa en ti mismo como el carpintero. Piensa acerca de tu casa. Cada día martillas un clavo, pones una tabla, eriges una pared. Construye sabiamente. Es la única vida que alguna vez tu construirás. Aún cuando la vivas sólo un día más, ese día merece ser vivido cortésmente y con dignidad. La placa en la pared dice, "La Vida es un proyecto, hágalo usted Mismo". ¿Quién podría decirlo más claramente? Tu vida hoy es el resultado de tus actitudes y opciones en el pasado. Tu vida mañana será el resultado de tus actitudes y las opciones que haces hoy. -------