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BOTULISMO

Definición: El botulismo es una enfermedad extraña y grave, causada por la bacteria

Clostridium Botulinum. La bacteria puede entrar en el cuerpo a través de heridas o puede vivir en la comida enlatada o indebidamente preservada. Localización: Clostridium es encontrado en la tierra y en el agua no tratada de todas las partes del mundo. Descripción: Este produce esporas que sobreviven en comida enlatada o inadecuadamente preservada donde producen su toxina. Cuando es ingerida, incluso en cantidades mínimas, esta toxina puede conducir a una intoxicación severa. La comida que comúnmente es más contaminada son los vegetales enlatados en casa, cerdo o jamón serrano, pescado crudo o ahumado, y el jarabe de miel y maíz. El botulismo también puede manifestarse en el organismo a través de heridas abiertas y producir sus toxinas allí. Incidencia: El botulismo infantil es un tipo especial en donde la bacteria o sus esporas son ingeridas y crecen en el tracto gastrointestinal del infante. La causa más común de botulismo infantil es por la ingestión de jarabe de maíz y de miel.

Clostridium también se encuentra normalmente en las heces de algunos infantes. Aproximadamente 110 casos de botulismo ocurren en los Estados Unidos por año. La falla respiratoria causada por la debilidad en los músculos que controlan la respiración puede causar la muerte del cual un 7% está relacionado con la comida contaminada.

Síntomas: Dificultad para deglutir y del habla, debilidad progresiva con parálisis, nauseas, vómitos, calambres (cólicos) abdominales, resequedad en la boca, visión doble, dificultad para respirar que puede llevar a una insuficiencia respiratoria, ausencia temporal de la respiración, sin fiebre. Signos: Dificultad del habla, perdida de la función muscular, parpados caídos (ptosis palpebral), ausencia o disminución del reflejo nauseoso, ausencia o disminución de los reflejos tendinosos profundos (reflejos osteotendinosos), parálisis intestinal, constipación severa (estreñimiento), retención de orina en la vejiga con incapacidad para orinar. Diagnóstico: Examen de sangre para identificar la toxina, análisis de laboratorio de la comida en sospecha de contaminación y cultivo de heces (coprocultivo). Tratamiento: Hospitalización de emergencia es recomendable en casos de problemas respiratorios. La meta del tratamiento es despejar las vías respiratorias, ayudar a respirar al paciente, aplicar la antitoxina botulínica y proveer terapia de apoyo. Si la dificultad respiratoria se desarrolla, la intubación (un tubo insertado a través de la nariz o boca hasta la tráquea para proveer de oxígeno a las vías aéreas) y la ventilación mecánica son aplicadas. Al persistir la dificultad para deglutir se puede administrar líquidos intravenosos.