Son Ecos De Amor

Soneto: “ Brisa de Abril “ Y en el instante más inesperado Tuve que dialogar con mi destino, Cayendo en el error de ser cretino Al suponer que estaba enamorado.

Quise vivir junto a lo deseado Pero tuve que elegir un camino Por el cual la duda y el miedo vino Al actuar de un modo equivocado. Ahora la brisa de abril nos remoja Con la historia de la Rama y el Río, Que fueron queridos desde el estío Por una soñadora y verde hoja, La cual no pudo aceptar su fortuna Por desear a dos y no solo a una. Soneto: “ Oráculo “ Desde el espacio toda la ingenuidad Se abarca y se endereza con el viento, Pero su más leve desfallecimiento Produce una reacción de inseguridad. Ya que Eolo te enfrenta a la soledad Para que pugnes contra el sentimiento, Aceptando con todo consentimiento Tu única y verdadera oportunidad: Por un lado añoras a esa Rama Embaucadora de aquello que es tuyo; Y por otro, te atrae tanto ese Río Que rechazas todo consejo mío, Siguiéndolo a un sitio donde no excluyo Que acabes con la vida de quien te ama.

Décimas: “ Sabia “ “ Dejas este lugar fijo Para ir junto a esa corriente Que te ha observado la mente, Ofreciendo regocijo Y un apetitoso alijo De suculentas pasiones Y falsas motivaciones,

Que te llevarán a un final Donde tanto el bien como el mal Se junten en sensaciones Repletas de tentaciones. Conmigo estás muy segura, Y aunque sea exigente y dura, Tendrás mis palpitaciones En todas tus emociones Porque a través de ti miro, Hablo, oigo y también respiro. Gracias a mí puedes vivir, Pero al mismo tiempo morir Si alguna vez me retiro. Recuerda que mis ojos son El alimento de tu savia, La palabra de tu labia, Lo único evidente que con Humildad puedes llamar don. Yo soy tu viaje de ida, Y en esa misma medida He conseguido dar calma A tu dubitativa alma; Por lo tanto soy tu vida. No olvides el aviso de hoy Ya que lo oriento al mañana, Cuando un día esté lejana Y conozca que ya no soy La reina de donde ahora estoy; En ese trágico día Podrás ver al mediodía Como mi cuerpo se seca, Al tiempo que el tuyo peca Con esa corriente fría “.

Décimas: “ Duramen “ “ Eres tan presuntuosa Que la arrogancia te ciega; O acaso tu savia niega Que si eres la más hermosa Y también la más dichosa Ha sido por ensalzarte

De tal manera que darte Un beso es un sueño loco, Es crear lo que no toco, Es imaginar amarte; Es, triste definitiva, Soñar con lo que no tengo, Pensar que soy de realengo Y que por una misiva Paso a tu belleza altiva… Sin embargo sabes muy bien Que en lo profundo de tu sien Solo se encuentra mi esencia, Ensimismada en la creencia De que tus ojos también me ven… Por ti sola no eres nada Más que una menuda Rama; Una voz que en vano exclama El ruego de ser amada; Una maleable bobada De una mente oscurecida Por tu persona prohibida; Una reina sin corona Que ante mí se envalentona Siendo solo una imagen fingida “.

Décimas: “ Resina “ En cambio su bello semblante, Su sinuosa figura Y su perpetua dulzura, Hacen que cualquier amante, Incluso el insigne Dante,

Rehuse el más fiel dolor Y dedique todo su amor A la diosa de los ríos, A los nuevos ojos míos, A la imagen del Creador. Ya que en la dulce corriente Se hace real lo soñado, Aunque sobre lo malvado Y falte lo que tu mente Concede a toda esa gente Que por ti y en ti soñamos: Sinceridad porque amamos; Ternura porque sentimos; Consuelo porque quisimos; Y quietud porque lloramos…

Décimas: “ Síncope “ “ Malvada es esta odisea Que oscurece mi destino, Haciendo largo el camino Y forzando a que me crea Que eligiendo a la que sea Voy a continuar hiriendo. No quiero seguir viviendo Si la perversa fortuna Me castiga con más de una Cuando no lo estoy pidiendo “

Décimas: “ Limoso “ “ Termina el viaje iniciado A fin de poder descansar Sobre este reducido mar, Para ver lo idealizado De un modo más acertado, Advirtiendo que su simpleza No se acota a su belleza

Sino que también se extiende, Y en eso tu vida pende, Por su vacía cabeza. Desciende para conocer La alegría menos pura, La más milagrosa cura, Que supera el simple placer, Haciéndote siempre creer Que eres lo único del mundo Que bajo mi agua nunca hundo, Pese a que no seas mi rey Y no acepte jamás tu ley Al ser un río vagabundo. Ella no es más que un letargo; Es solo algo imaginario Que muchas mentes a diario Se imaginan a su cargo, Andando un camino largo Que no va a lugar alguno; En cambio el mío lleva a uno Donde lo dulce y lo salado Está al principio mezclado Dando un sabor que ninguno De los vivos ha probado. Olvídala y se al fin infiel, Descansando sobre mi piel, Que será un trono ocupado Hasta que seas expulsado. Acepta mi frío infierno Antes que su dulce invierno, Porque aquí podrás ser feliz Librándote de esa raíz Que solo te ofrece lo eterno… Decide tu posición, Olvidando tu idealismo Y aceptando con realismo Que si de ella es tu corazón, Mía es la última decisión De su manejada mente. Yo tengo la sed que miente Y controlo la del amor: Ambas engendran el dolor Y dominan a la gente “ . Décimas: “ Tempestad “

Y en esta absurda ingravidez He de decidir mi duro Y despiadado futuro, En el cual me encuentre tal vez Con la que ha sido más soez, Y al mismo tiempo perspicaz Por lograr creerme capaz De decidir por aquella, Que además de ser mi estrella, Iba a proporcionarme paz. Mas en esta extraña estancia Es difícil elegir dueña, Y mi escasa mente sueña En acortar la distancia Entre ambas con ignorancia… - Sin embargo la congoja Se hace señora de esta hoja, Sometida a su fortuna Que le impide elegir a una Sin que se ponga antes roja – “ Qué hacer si lo único cierto Es saber que no sé nada; Si en mi inutilidad cada Momento es un desconcierto; Si vivo en un Río muerto Y adoro a una seca Rama; Qué hacer si mi alma solo ama A dos sicarias del diablo; ¿ Qué hago según lo que hablo Sino morir en la llama …? Y sobre mi Río el cejo Cae e impide que mi vista Observe el trecho que dista Hasta la Rama que dejo, Y sé que mientras me alejo Algo extraño está ocurriendo, Porque sin verla estoy viendo Que mi Rama desolada Al sentirse abandonada No quiere seguir viviendo. Y en un instante parte Hacia el oscuro universo, Donde el más infeliz verso

Se transforma en castizo arte Por el hecho de admirarte, Deseando en todo momento Corroborar que no miento Cuando afirmo que no quiero Verla porque soy sincero Al decir que nada siento… Mientras que en breve me pierdo Por el largo y amplio lecho, Es sin duda real el hecho De que soy solo un recuerdo Que deja de vivir cuerdo, Aceptando su templanza, Cuando a ella nunca alcanza Aunque ande a contracorriente Y sepa que la que miente Le recuerda que no avanza… Si la vista no me engaña Mi pobre Río celoso Me abandona en el gran foso, Donde Neptuno me daña Y todo el agua se ensaña Para terminar conmigo. Aún ahora en el fondo sigo: Me han robado mi fortuna Y ni siquiera con una He llegado a ser amigo. “

Décimas: “ Calma “ ( Acróstico final ) “ ¿ Son locuras de mi mente O simplemente reflejan Narraciones que solo alejan Ecos de un pobre indigente ?

Casi temo que la gente, Obstinada por destruir, Sepa que uno para vivir De ilusiones se alimenta, E incluso a veces inventa Amores que te hacen sufrir. Mas en mi perpetua infancia, Ocasionada por el miedo Reparador de mi credo, Protegida en la ignorancia, Alma de mi breve estancia, Retuve siempre el momento Altruista de nuestro cuento; Logré divisar el cielo, Al mismo tiempo que el suelo Ufano hundió lo que siento, Realizando por todo ello Aquello que es fariseo Y adulador según creo. Bacanal instante sello, Esperando que lo bello Adquiera un significado Todavía aún ignorado; Recordando que la historia, Inaudita y rara noria, Zarandea en lo olvidado . “