Sobre Algo Que Nadie Le Habia Preguntado

Sobre algo que nadie le habia preguntado ... Difícil atajar el vandalismo de las calles, y más difícil es localizar el problema. Unas veces se niega, otras veces se amplifica, otras veces se ignora, nunca se enfoca el problema correctamente. Es la mira de ambigüedad con la que nos enfrentamos día a día. ¿Los contenedores se prenden fuego solos? siendo un poco profesionales, ¿entran los contenedores en rango de inflamabilidad a temperatura ambiente?

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Parece un poco pedante, pero el enfoque político social de la cuestión puede ser más flatulento. El que gobierna no quiere ni oír hablar de ningún problema, y el que está en la oposición pretende ver el infierno de Dante en las calles. Está claro que ni por falta, ni por exageración, la cuestión queda pendiente de abordaje. Quizás la mejor idea aproximada es la de "las estadísticas" ¿cuántos incendios por contenedores anuales, sean de basuras, vidrios, sobre todo de papel? "Farenheit 451 la temperatura de auto ignición a la que arde el papel o más bien, la temperatura al menos en literatura, a la que arden las ideas" ver; Leer libros hace pensar, historia de un bombero pirómano.

Un ser humano es el mono sin pelo, sin cola y sin vergüenza, a lo más con un rabo que no sabe usar. Se dice del humano que es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra y le echa la culpa a la piedra. Se afirma también que es el único animal capaz de perder la razón y el único que es infeliz teniendo dinero. Es el único ser de la Tierra que

Pero esta quema de Ninots callejeros -que es un mal endémico de toda urbe que se precie- al margen de su consciencia o inconsciencia del problema real, y los medios que ponga para atajarlo o pasarlo por alto (esa es otra cuestión) ¿de quién es la culpa?. Yo me inclino a que los coches abandonados, los colchones en las calles, las basuras en general, los contenedores de vidrios, de papel, ... y todo ese mobiliario urbano -en esencia material combustible- no sale ardiendo por las buenas en presencia del comburente (el oxígeno) sin una fuente de ignición. No descarto que entre el 100% de los casos, por mezcla de productos químicos acumulados en las basuras, condiciones medioambientales y fruto de la conjunción de varias casualidades, alguno de estos incendios (un 0´01 de los casos) podamos hablar de incendios fortuitos, dejando el margen de la casualidad, pero retomando el enfoque de la causalidad (causa efecto). Me temo que es un problema en el seno familiar.

Si puerta por puerta pudiéramos cotejar, ¿quién prende estos pequeños conatos urbanos? obtendríamos que nadie ha sido, tendríamos que retornar o la idea de que "el infierno son los otros" o dar dos patadas a la fenomenología física de los incendios y dar por bueno que la auto ignición, el rango de inflamabilidad de los materiales, va a su libre albedrío. Lo cierto es que es una cuestión Bizantina ¿carente de todo interés? veamos ¿cuándo puede llegar a interesar este tipo de "Combustiones espontáneas"?. A la Opinión Pública cuando le alcance de lleno, en la conciencia individual la respuesta es clara, cuando se pretenda movilizar, sensibilizar al grueso de la opinión pública bajo el epígrafe del sensacionalismo, cuando haya algo que ganar (el interés material, que ya ni personal). Esa es nuestra ética, es decir, las normas de valores y conductas que nos impulsan en nuestra vida diaria. ¡Por el interés te quiero Andrés! * conste que ahora mismo no recuerdo a ningún Andrés, para los que

hilan fino

Si lo enfocamos desde el prisma político-social, apaga y a otra cosa mariposa, y más impensable es pensar que nosotros por pasivos, por activos, unas veces incluso testigos mudos ¿qué hacer si somos testigos del inicio de uno de estos incendios? . Por experiencia y por mal que suene mi consejo a los románticos ¡lo mejor mirar a otro lado! los cínicos, los que practican esta forma de ser, negarán lo que hacen; pero en esta vida aprendes que quien comete faltas está mejor mirado que quien pretende cumplir las normas. La vida civil, administrativa, penal, está llena de ejemplos que confirman esta "dolorosa" regla; lo fácil siempre es señalar culpables (los puritanos) a esferas más altas, alejar el problema de nosotros cual mecanismo de defensa...

Si un perro muerde y la noticia causa sensación en la opinión pública, se buscará cualquier acercamiento perro y "persona" -si es niño mejor- y será la moda. Si se le puede dar un enfoque étnico y/o racial mejor, empezaremos con una riña y terminaremos hablando de bandas organizadas callejeras. Si ese problema fuere real y te pillan en la calle y te abrasan como un contenedor a palos, ni dios habrá visto ni oído nada.

Y no es un problema ¿quién dice problema? que se trate de un pequeño e insignificante contenedor -de basura, de vidrio o de papel- o un coche abandonado, es un "problema" de base entre comillas; no es siquiera un "problema" de vecindad, ni de guardar normas de urbanidad. En una organización te pueden cocer a palos ¿dónde está el problema ? ante la pasividad del resto ¿problema? ¡je! ¿qué problema ? ¡mientras no vengan a por mi! ¿o no pensamos así? ¿no es acaso nuestra base ética? ¿para qué pensar en los demás como un bien en uno mismo? ¿dónde reporta eso beneficio y autoestima? ¡para qué moverme! el día que me toque pasar por el trance ¿quién me auxiliará? quizás haya algún incauto concienciado de paso; de momento, lo mejor es " MIRAR A OTRO LADO", en realidad no sé si es lo mejor, pero sí que es la opción más aceptada y puesta en práctica por la mayoría...

En esta vida hay tres tipos de personas: los que saben contar y los que no. Lo cuenta CARACONEJO un sábado, septiembre 29, 2007