San Agustin De Hipona

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  • Words: 1,726
  • Pages: 14
Portafolio Filosófico

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0   ` M stín de Hipona fe el más rande de los padres de la i lesia

latina. Nació el 13 de noviembre de 354 d.C., en la cidad de Ta aste, qe actalmente se llama SoMras y pertenece a Mr elia. M stín recibió na edcación qe lo izo sabio en retórica y ramática. Conoció a profndidad a los randes pensadores de las cltras rie a y romana. Fe profesor de retórica y a los treinta años de edad se convirtió al catolicismo. Once años más tarde, por aclamación poplar fe ordenado sacerdote y en el año 395 es consa rado obispo de Hipona. S vida la dedicó a enseñar, a investi ar, a escribir. Creó na obra fecnda, qe lo llevó a ser el más importante maestro de la i lesia primitiva. S ori inalidad, niversalidad y creatividad de ideas acen qe s pensamiento si a siendo valioso para nosotros. Por ss méritos fe canonizado por la I lesia qe lo centa entre ss más randes santos y padres.

›  C        "a relación de los primeros pensadores cristianos con la filosofía fe compleja. Mientras nos mostraron s ostilidad acia la filosofía, considerándola enemi a de la fe, otros vieron en la filosofía n arma para defender con la razón ss creencias reli iosas. "as características de la filosofía rie a, qe los latinos no acen sino se ir, no permitían espera na fácil síntesis entre ambas. El planteamiento rie o del tema de Dios, por ejemplo, se limitaba a s interpretación como inteli encia ordenadora, como casa final, o como razón cósmica, tal como aparece en Mnaxá oras, Mristóteles y los estoicos, respectivamente. "os cristianos, sin embar o, por Dios entenderán n ser providente, preocpado por los asntos manos; n ser encarnado, qe adopta la apariencia mana con todas ss consecencias; n ser creador, omnipotente, único, pero también paternal. Y reslta difícil, por no decir imposible, encontrar tal visión de Dios en nin ún filósofo rie o. ` los pensadores cristianos encentran con el platonismo (y con el neoplatonismo, pero también con al nas teorías estoicas) al nas coincidencias qe les animan a inspirarse en dica corriente filosófica para jstificar, defender, o simplemente comprender s fe. `

 ›   ›  No ay na distinción clara entre razón y fe en la obra de San M stín, lo qe marcará el discrrir de todo s pensamiento. Existe na sola verdad, la revelada por la reli ión, y la razón pede contribir a conocerla mejor. "Cree para comprender", nos dice, en na clara expresión de predominio de la fe; sin la creencia en los do mas de la fe no podremos lle ar a comprender la verdad, Dios y todo lo creado por Dios (la sabidría de los anti os no sería para él más qe i norancia); "comprende para creer", en clara alsión al papel sbsidiario, pero necesario, de la razón como instrmento de aclaración de la fe: la fe pede y debe apoyarse en el discrso racional ya qe, correctamente tilizado, no pede estar en desacerdo con la fe, afianzando el valor de ésta. Esta vinclación profnda entre la razón y la fe será na característica de la filosofía cristiana posterior asta la neva interpretación de la relación entre ambas aportada por santo Tomás de Mqino, y spone na clara dependencia de la filosofía respecto a la teolo ía.

   Mnqe sin lle ar a elaborar na teoría del conocimiento San M stín se ocpará del problema del conocimiento, tratando de establecer las condiciones en las qe se pede dar el conocimiento de la verdad, se ún el ideal cristiano de la búsqeda de Cristo y la sabidría San M stín considerará fndamental la crítica del mismo. Nie an los escépticos la posibilidad de alcanzar certeza al na. Mnte ello San M stín replica afirmando la necesaria certeza de la propia existencia: ¿pedo razonablemente ddar de mi existencia, an sponiendo qe todos mis jicios estvieran siempre eqivocados? No, dice San M stín, ya qe an en el caso de qe me en añarse no dejaría de existir (al menos el jicio "si fallor, sm" sería siempre verdadero, ase rando la certeza de mi existencia); pero la certeza es triple, ya qe el ombre existe, vive y entiende.

Distin irá San M stín varios tipos de conocimiento, ase rada s posibilidad:

El conocimiento sensible

el conocimiento racional, a s vez, podrá ser inferior y sperior.

El conocimiento racional

El conocimiento sensible es el rado más bajo de conocimiento y, anqe realizado por el alma, los sentidos son ss instrmentos

este tipo de conocimiento sólo enera en mí opinión, doxa, tipo de conocimiento sometido a modificación, dado qe versa sobre lo mdable (pede observarse la clara dependencia platónica del pensamiento a stiniano); al depender del objeto (mdable) y de los sentidos (los instrmentos) calqier deficiencia en ellos se transmitirá al conocimiento qe tiene el alma de lo sensible. El verdadero objeto de conocimiento no es lo mdable, sino lo inmtable, donde reside la verdad. Y el conocimiento sensible no me pede ofrecer esta verdad

 › El tema qe más ocpa a San M stín es el tema de Dios. S filosofía es predominantemente na teolo ía, siendo Dios no sólo la verdad a la qe aspira el conocimiento sino el fin al qe tiende la vida del ombre, qe encentra s razón de ser en la beatitd, en la visión beatífica de Dios qe alcanzarán los bienaventrados en la otra vida, para cya obtención será necesario el concrso de la racia divina. ` San M stín no se preocpa, sin embar o, de elaborar prebas sistemáticas de la existencia de Dios, anqe propone diversos ar mentos qe ponen de manifiesto s existencia, aciéndolo con esa estricta intención. Entre ellos se encentran los qe, a partir del orden observable en el mndo, conclyen la existencia de n ser spremo ordenador, o los basados en el consenso, qe recalcan la niversalidad de la creencia en dioses por parte de todos los peblos conocidos. `

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También encentra a Dios en el interior del ombre, a donde San M stín acostmbra a diri irnos para encontrar en nosotros la verdad. Es precisamente por ese camino por el qe vamos a encontrar la qe sele considerar con propiedad la demostración de la existencia de Dios a partir de las ideas o verdades eternas: el fndamento de tales verdades inmtables no pede estar en las cosas creadas, qe son cambiantes, sino qe a de estar en n ser inmtable y eterno, a s vez, es decir, en Dios.

 ` "a ética a stiniana, anqe inspirada directamente por los ideales morales del cristianismo, aceptará elementos procedentes del platonismo y del estoicismo, qe encontramos también en otros aspectos de s pensamiento. Msí, compartirá con ellos la conqista de la felicidad como el objetivo o fin último de la condcta mana; este fin será inalcanzable en esta vida, dado el carácter trascendente de la natraleza mana, dotada de n alma inmortal, por lo qe sólo podrá ser alcanzado en la otra vida.

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(si Dios es la sma Bondad ¿por qé lo permite?) la solción se alejará del platonismo, para qien el mal era asimilado a la i norancia, tanto como del maniqeísmo, para qien el mal era na cierta forma de ser qe se oponía al bien; para San M stín el mal no es na forma de ser, sino s privación; no es al o positivo, sino ne ativo: carencia de ser, noser. Todo lo creado es beno, ya qe el ser y el bien se identifican.

   › ` racias a la ley de Dios todo tiene orden y sentido. "a paz es

resltado de se ir la ley natral divina. Cando ay concordia entre los sentimientos, el conocimiento y la acción, ay paz en el corazón mano. Cando ay na debida concordia entre los cidadanos, la paz reina en la cidad. ` El ser mano se aya amenazado por la corrpción de la natraleza qe lo inclina al mal; en cambio, la racia de Dios lo lleva al bien. Para San M stín el desorden y la rina de las cidades se deben a qe los seres manos acen mal so de la libertad. Se dejan llevar por el or llo, el instinto, el sentimiento de atosficiencia, por atenerse a ss propias re las, sin observar la ley de Dios. ` "a istoria de la manidad, se ún San M stín, a sido la eterna dispta entre la cidad de los ombres y la cidad de Dios. En esta última se observa el bien, el amor entre las personas, la solidaridad, porqe ay piedad, obediencia a los valores del Evan elio. ` Para salvarnos de la rina personal y social, propone San M stín, volvernos a la vida de Dios. Hacerlo al o vivo en nestro corazón y en nestro trato con los demás. Msí reinarán el amor y la verdad, qe es el mejor so qe podemos dar a nestra libertad.

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San M stín a dejado na obra inmensa de la qe citamos a continación al nos de ss títlos más si nificativos.

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"a cidad de Dios 400 Pblicación de las "Confesiones". De Trinitate (15 libros, conclida en el 416). 401 De enesi ad litteram (12 libros). 410 De Urbis excidio (sermón elaborado tras el saqeo de Roma). 413 De civitate Dei (22 libros, terminada en el 426). 415 De natra et ratia contra Pela im. 417 De estis Pela ii. 418 De ratia Cristi et pecato ori inali. 419 De anima et eis ori ine, De ratia et libero arbitrio, Md Valentinm, Retractationes.

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›› ` ©No vayas fera, velve a ti mismo. En el ombre interior

abita la verdaddz. ` "Mma y az lo qe qieras. Si callas, callarás con amor; si

ritas, ritarás con amor; si corri es, corre irás con amor; si perdonas, perdonarás con amor. Si tienes el amor arrai ado en ti, nin na otra cosa sino amor serán ts frtos.© ` "No vayas mirando fera de ti, entra en ti mismo, porqe

la verdad abita en el interior del ombre."

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