Sainete Digital1

Sainete (La acción transcurre en un despacho cualquiera, con un fondo cualquiera y unas fotos cualquiera. Dos personajes trajeados. Uno se sienta detrás de la mesa y el otro pasea por la sala, investigando un decorado que ya le es conocido)

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¿Cuánto tiempo llevas conmigo Martínez? No recuerdo exactamente señor, pero creo que desde el 85. ¡Ah! El 85, que buenos recuerdos me traen aquellas fechas. Sí señor. Son ya más de 20 años juntos, inseparables. Y tú Martínez qué haces exactamente, ¿Qué eres? Soy su asesor señor, su asesor. ¿No lo recuerda? Sí, sí, mi asesor, es verdad, pero ¿asesor de qué? ¿Tú qué eres? Nada señor, sólo soy asesor de todo en general. Me trajo aquí porque un día se encontró con mi tío en la calle, y me dijo que me viniera, que había un puesto de asesor libre y aquí me presenté. Ya pero… ¿Tú serás algo no? ¿Qué me asesoras tú? Señor ¿Ya no lo recuerda? Informática, educación, nuevas tecnologías, todo lo que se pone de moda, lo que surja, lo que salga. Nosotros fuimos los que dotamos de ordenadores a todos los mayores de 90 años. Salimos en los periódicos. Fuimos el municipio de España con más ordenadores por cabeza, para mayores de 90 años. Fuimos casa por casa entregándolos. La pena es que no nos abrieron ninguna y aún los tenemos embalados en el almacén, pero salimos en todos los periódicos y usted dio su primera rueda de prensa con éxito. Recuerdo la cabecera del periódico perfectamente: Todos los ancianos de más de 90 años tendrán un ordenador personal para hacer sus gestiones. ¿Se acuerda ya señor? Yo fui su asesor en ese tema. Sí, es verdad Martínez, qué éxito, qué éxito, aún lo recuerdo: micrófonos, flashes, cámaras, cabeceras de diarios… Qué éxito. Pero ¿qué más? ¿qué más hemos hecho Martínez? Señor nosotros fuimos los primeros en dotar a todas las familias de un CD interactivo para anunciar las fiestas, ¿no se acuerda? Ése del que aun tenemos

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todas las cajas embaladas en el almacén señor. Es que encargamos 300.000 ejemplares y como solo somos 1.000 vecinos y encima no pudimos repartir los ordenadores para los mayores de 90 años, pues sobraron unos cuantos, pero… fuimos el primer municipio del país en hacer un CD interactivo sobre los dos días de fiestas. ¿Se acuerda? En todos los periódicos, en todas las emisoras de radio, todas plagadas de noticias. No las pudimos ver en Internet porque aquí no llega, pero fuimos a la ciudad y lo vimos en aquel bar que tenía ordenador. ¿Se acuerda? Sí, sí, perfectamente, perfectamente. Un CD interactivo, con una flecha que salía y que yo manejé ese día delante de todos los periodistas, ¡qué maravilla! Le pulsabas, salía una música y luego unas fotos nuestras. La ciencia lo que hace. Claro que me acuerdo. Pero además de todo eso ¿qué más Martínez? ¿qué más? Señor, nosotros dimos a la escuela 45 ordenadores con router y 45 impresoras, hace unos años. ¿No se acuerda señor? Lo que pasa es que como sólo teníamos tres alumnos, y encima eran de educación a distancia, aún no se los hemos podido dar, porque ya sabe eso que la distancia es el olvido, pero no se preocupe que están bien guardados en el almacén. Salimos en todos los medios de comunicación señor. ¿Lo recuerda? El primer municipio del País con un ordenador para cada alumno. Una auténtica maravilla de la educación moderna, de nuestro siglo. Los más innovadores y punteros, los más tecnológicos, los más de los más. Con ellos nuestros alumnos, cuando los recojan, serán los más inteligentes, listos y preparados de todos los pueblos que nos rodean, de todos. Cosas de la tecnología señor. Claro, claro… Espectacular aquellos ordenadores, con su teclado, su ratón, su pantalla y el rou, rou ése que has dicho, me acuerdo perfectamente, con luces de colores. Por cierto que lo tengo puesto encima de mi televisor y cuando lo enchufo da otro ambiente a mi casa, más confortable, agradable, moderna. Eres un genio Martínez y todo esto gracias a tus dos títulos de especialización, tus tres licenciaturas y un máster, qué buena propuesta me hizo tu tío en el 85, no me equivoqué desde luego. Pero… ¿qué más Martínez? Porque ¿aquí hemos hecho más cosas o no? Sí señor, hemos hecho muchas otras cosas. Hemos utilizado siempre el presupuesto en hacer cosas señor, todo con inteligencia para el bien del pueblo. Hace dos años encargamos aquellos libros sobre nuestros monumentos y los repartimos por todas las casas, con otro CD interactivo dentro del libro. ¿Se acuerda señor? Tampoco nos abrieron y encima el problema, como aún tenemos los ordenadores de los mayores de 90 años embalados en el almacén, porque no tenemos ninguna empresa que los quiera repartir y los de los estudiantes a distancia no han pasado a recogerlos porque están muy lejos, aún están en sus cajas, no hemos podido enseñárselos a nadie. Pero fue una publicación espectacular. ¿Se acuerda señor? 300 páginas, un CD con sus dibujos y su sonido, un libro a 500 tintas. 300.000 ejemplares por lo que pudiera pasar. Algo espectacular. Fuimos el primer municipio en hacer aquel libro. La pena es que sólo tenemos la iglesia y la plaza pero… qué iglesia y qué plaza señor. Más de 600 fotos en todos los colores y un CD serigrafiado con ISBN; con su flecha, con sus dibujos, llevaba de todo, y que salían cuando lo metimos en aquél ordenador que trajeron los periodistas. Le dabas al campanario y sonaban las campanas. Ponías la flecha en la fuente de la plaza y de corría el agua que daba gusto. Qué gran trabajo señor, qué gran trabajo.

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Es verdad Martínez, aún lo recuerdo, qué gran trabajo. Estupendo aquello. Por cierto que a lo mejor me llevo uno. Tengo que ir a la capital y le puedo dar uno a mi sobrino, que sabe de informática muchísimo y esas cosas le gustan mucho, todo un cracker que dicen ahora El otro día sin ir más lejos estaba jugando al tenis en su casa, él sólo moviéndose de lado a lado del comedor, delante de la televisión, con su mando en una mano, un genio ya le digo Martínez, yo creo que ese muchacho llegará lejos, sin duda. Le daré el CD y se pondrá muy contento. Además mi hermana le acaba de comprar un PCMCMJK el último modelo que ha salido y una conexión ALSDHI que dicen, maravillosa en el anuncio, maravillosa. Todo lo tiene en su habitación, allí se encierra horas y horas dice mi hermana y… no lo puede molestar nadie. Seguro que está concentrado y es el más listo de la escuela, horas y horas estudiando desde que mi hermana le compró ese aparato que tiene en su habitación, por no ir ya ni va a la escuela, total… no le hace falta, lo tiene todo en casa. Un poco pajizo si se está poniendo pero… ya vendrá el verano. Si le doy este CD seguro que se convierte más listo aún, un fenómeno, será un número uno como usted y como yo, Martínez, un número uno y todo gracias a este CD que hicimos usted y yo Martínez, solos usted y yo… bueno y su primo, qué gran personaje su primo, todo lo que nos enseñó. Deberíamos nombrarlo también asesor de algo, ya veremos de qué, pero nombrarlo algo, que no se nos olvide, que eso siempre viste mucho, ya me lo recuerda. Un gran primo y un gran sobrino tenemos, no hay duda. Sí señor, su sobrino es un genio, ya me di cuenta yo y sólo con doce años. Sí señor, ese niño promete. Tiene todo lo que un estudiante puede desear para ser una persona de éxito señor: ordenador, Internet y una habitación. Qué genial es su hermana señor, una gran hermana, con grandes ideas, qué gran madre. Por cierto Martínez, tú crees que eso del tenis en casa delante de la TV puede ser llamativo. ¿Se imagina? Es deporte no cabe duda; deporte, modernidad, ejercicio para todos y en casa. ¿Qué le parece? Sería algo novedoso e impactante para nuestra próxima campaña. Pues… ahora que lo dice es una brillante idea señor, una brillante idea diría yo. No me diga nada más, me lo estoy imaginando. La prensa, las cámaras otra vez… Primer municipio con deporte informático en casa para la franja de ciudadanos de 95 a 100 años. Señor; me parece genial. En la capital estarán orgullosos de nosotros otra vez. Los primeros, los únicos, los más innovadores, los más de lo más, por décimo año consecutivo. No habrá ni una sola casa, con ciudadanos en esa franja de edad, sin ese aparato con su mando y sus botones. Y lo mejor de todo, una inversión a años vista porque aún no tenemos ciudadanos de esa edad, pero seguro que algún día tendremos. Qué previsión señor, qué previsión. Magnífico, brillante, qué modelo de gestión a imitar. Visión de futuro que le dicen ahora. Que no se nos olvide el mando que eso viste mucho y quedamos muy bien. El mando Martínez, el mando es básico, recuérdelo. Todas las cajas con su mando y si es en colores mejor que mejor. Y que le pongan los botones que luego vienen sin botones y hay que devolverlos, como la última partida de mandos a distancia para la TV que compramos, y luego hay que devolverlos para hacerles el agujero, poner los botones y poder apretar. Aún no los han devuelto pero no pasa nada, tampoco tenemos televisiones y nadie se queja. Yo creo que lo de apretar botones es de lo mejor que nos aporta la tecnología, cuántos botones, no podría imaginar un mundo sin ellos.

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Sí señor. No habrá problema, ya lo apunto. Aparato y mando con botones. Ya está. En cuanto llegue a la ciudad lo envío por correo electrónico, desde casa, porque desde aquí no podemos. Recuerda que compramos toda la dotación para poder hacerlo pero como no hay línea de teléfono, ni nada que se le parezca, ni falta que nos hace, aún no podemos usarlo. Pero no se preocupe, después de cinco años sin montar, ya ni nos acordamos. ¿Cuántos pido? ¿Cómo se llama exactamente? No sé Martínez, no sé. Se lo preguntaré a mi sobrino, que es un genio. En una feria del ganado interactiva también lo disfruté pero no me acuerdo como se llama. Ponga unas seis mil unidades. Que no falten, no deben faltar, más bien que sobren. Ya le preguntaré en nombre a mi sobrino. No se olvide del mando Martínez que es lo más importante, con botones grandes, muy grandes. Descuide señor, descuide. ¿Algo más? No, yo creo que en principio ya está bien por hoy. Estoy aún disfrutando, imaginando los titulares de los periódicos. Seremos en todo los primeros, no hay duda. ¡Qué genial idea, qué genial idea hemos tenido! ¡Qué gran asesor es usted! Aunque aún le tenemos que buscar algún área más para asesorar, recuérdemelo. Mejor dicho; asesore todas, a partir de ahora asesorará todas la áreas que le plazca. Bien señor, gracias por la confianza. Si se le ocurre algo más no dude de llamarme a casa. Hoy duermo en la ciudad. Recuerde que aquí no tenemos cobertura para móvil ni línea telefónica, pero sí una instalación de las últimas, que se puso hace cinco años, para cuando llegue la señal, conectarnos a la gran red de redes, lo último de lo último nos dijeron aquellos de la empresa que vinieron. ¿Se acuerda? Si, otra genial iniciativa. Gracias Martínez, usted si que es un gran asesor. Otra cosa más… el otro día escuché que en una escuela de Estados Unidos hicieron una excursión y los niños usaron un artilugio para volar que se llamaba parapente. ¿Qué le parece? ¿Se le ocurre algo? Los niños veían desde el cielo su ciudad. ¿Qué opina? Fantástico señor, otra gran idea. Me parece algo perfecto. ¿Compramos unos parapentes para cuando construyamos nuestra escuela? Ya tengo el eslogan señor: Ningún niño sin parapente en nuestro municipio. Es lo más espectacular que he escuchado nunca. También lo apunto. Pediré unos 1000 por si se rompe alguno. Todos los niños con parapente y si sobra alguno se los podemos dar a los de educación a distancia, así podrían venir por sus ordenadores cuando quisieran, para retirarlos del almacén, aquellos que les compramos. Y si siguen sobrando, lo mismo lo pueden usar los ciudadanos de la franja de 95 a 100 años, cuando los tengamos, y disfrutar de las maravillas de nuestro municipio. Lúcido Martínez, más que lúcido, brillante. Es usted todo un asesor. El mejor que he tenido, el mejor. Bueno ya puede retirarse, me marcharé que me esperan en la ciudad. ¿Cierra usted? Por cierto, Martínez cuando tenga usted tiempo, a ver si me coloca un ordenador en mi despacho, que lo veo como si faltara algo y ya que tenemos embalados en el almacén desde el 85, qué buena cosecha, lo mismo podemos usar alguno. Nada complicado, nada del otro mundo, además mi suegra hace unos tapetes de ganchillo que podemos colocar encima. Con sus puntillas y todo. No lo olvide Martínez, no lo olvide.

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Descuide señor. En cuanto pueda le pongo un ordenador en su despacho, aunque aún no tengamos ni luz, viste muchísimo, muchísimo cuando vienen visitas. Descuide señor. Hasta el mes que viene Martínez, ha sido un placer. Estaremos en contacto. Por cierto… me va viendo eso de los libros digitales y me pide cuarto y mitad para la próxima reunión, será lo próximo donde entremos y seremos los primeros. Los primeros en tener libros digitales, ya lo veo en los titulares. En las cabeceras, en primera plana. (Martínez ya saliendo) ¿Libros digitales señor? Como usted diga pero… creo que eso no va por peso, va por unidades. Ah… por unidades. Pues… póngame 3000 en principio y ya veremos el resto. No suena mal… libros digitales… libros digitales. Ningún niño del municipio sin un libro digital. Como mi sobrino, unos superdotados saldrán estos niños, unos superdotados gracias a nosotros y nuestras brillantes ideas. Ahora solo falta que compremos los niños, porque no tenemos, pero… no se preocupe Martínez, no se preocupe, todo se andará. Lo mismo me puede ir pidiendo también 20 niños de prueba, pero ya creciditos, que luego hay que darles de comer y de vestir y en eso se va un dinero, y encima sin contar lo de la educación. Bueno pues nada, lo dicho, hasta el mes que viene, que tenga un buen viaje de vuelta a la ciudad. Y… de paso le da recuerdos a su mujer, que para eso es mi hermana. ¿Se acuerda Martínez? ¿Se acuerda? Vaya boda que montamos, vaya boda, con su CD, con sus fotos, su música, con todo. Vaya boda digital que montamos, la primera boda digital del país. Vaya boda Martínez. Qué bien le asesoré Martínez, todo un ejemplo de competencia. Por cierto (Martínez ya a punto de salir) el mes que viene, cuando nos volamos a reunir, le toca hacer de Concejal de Hacienda y yo haré de Educación, que me ha picado a mí el gusanillo de la informática y me veo muy suelto en estos temas. No se le olvide y vaya ensayando. Usted vale Martínez, vaya si vale.

Sale Martínez por la puerta. Cae el telón.