Asegurando nuestros alimentos para el futuro Revista Ambiente Cumbre Social La seguridad alimentaria se define comúnmente como: “Aquella situación que se da cuando existen las condiciones materiales, sociales y económicas para que toda persona tenga acceso en todo momento a alimentos sanos y nutritivos, suficientes para satisfacer sus necesidades y preferencias alimentarias a fin de llevar una vida saludable y activa.” El concepto de seguridad alimentaria surge directamente de la crisis mundial de alimentos experimentada a principios de la década de los setenta. Dicha crisis fue causada por el vertiginoso aumento en el precio de la gasolina. Las prácticas agrícolas convencionales, así como la industria de los alimentos, no son sustentables y dependen principalmente del petróleo. Por ello no debe asombrarnos que el precio de los alimentos pueda dispararse en cualquier momento. La situación en Puerto Rico es particularmente delicada porque más del 90% de nuestros alimentos se importan de afuera. Este nivel de dependencia es uno de los más altos del mundo. Lo peor de todo es que la calidad de los productos que nos llega es relativamente pobre. Muchos de estos “alimentos” carecen de nutrientes, están desnaturalizados, son contaminados con residuos químicos y en última instancia son dañinos a nuestra salud. Entre los factores que complican el estado actual de nuestra agricultura se destacan el que la producción de alimentos frescos es alarmantemente baja y la perdida constante de terrenos agrícolas y agricultores. De continuar esta tendencia, la agricultura local podría verse en “peligro de extinción”. Para revertir este sombrío futuro es necesario hacer cambios fundamentales. Nos urge fomentar una educación agrícola de avanzada, conocer más sobre la agricultura sustentable/ecológica y apoyar el desarrollo de fincas modelos alrededor de la Isla. Una agricultura progresiva supone desarrollar modelos y prácticas sustentables, el aumento en la diversidad biológica y genética, así como el entendimiento holístico que incluye, pero no se limita a la ética, la ecología y la sociología. Los primeros pasos para acercarnos al principio de la auto-suficiencia alimentaria son cambiar el modelo de
monocultivo por el policultivo y auspiciar los pequeños y medianos mercados agrícolas en vez de aumentar las ganancias de las grandes corporaciones que controlan la producción de alimentos. En la actualidad sólo estamos sembrando una pequeña fracción de lo que requerimos para una dieta balanceada de granos, vegetales y frutas tropicales. Al presente no producimos ningún grano y la diversidad de vegetales y frutas es mínima, a pesar de que existen cientos de especies tropicales importantes que todavía desconocemos y que bien podríamos añadir a nuestra dieta. Un análisis sistemático y un resumen de los principios de seguridad alimentaria en Puerto Rico han sido descritos en el libro Oro Verde: Securing the Future of our Food, publicado recientemente. Otro concepto importante que debemos estudiar e implementar en Puerto Rico es el de agricultura urbana. Esta antigua tradición se ha revivido en décadas recientes. Ciudades en Asia, Latinoamérica y África están demostrando lo exitoso que podría ser la agricultura urbana si ésta se planifica adecuadamente. Por ejemplo, HanoiVietnam produce 80% de sus vegetales frescos. En Shangai-China, 60% de los vegetales y más del 90% de la leche se origina en las ciudades. En Bangkok-Tailandia, la mayor parte de los vegetales también crece en la ciudad. En Cuba, alrededor del 90% de los alimentos frescos consumidos en la Habana crecen en, y alrededor de, la ciudad. No debemos continuar negando el hecho de que nuestra agricultura está descarrilada y que tenemos que aceptar nuestra extrema dependencia de alimentos. Si estamos verdaderamente preocupados por fomentar un mejor futuro, entonces tenemos que entender y admitir nuestra precaria situación agrícola. Además, debemos estudiar e investigar posibles soluciones y cooperar con todos aquellos que buscan seriamente implementarlas. Tanto el gobierno como el sistema educativo han fracasado en este importante renglón económico, pero nosotros, los ciudadanos de esta Isla, debemos asumir nuestra responsabilidad de crear y asegurar un futuro seguro en cuanto a la producción de alimentos. Este ha sido el precioso legado que han dejado nuestros ancestros generación tras generación. Sadhu Govardhan es consultor en agroecología, eco-agricultor y autor del libro Oro Verde: Securing the Future of our Food