El Sincretismo Religioso EDITORIAL
Mucho se habla hoy de Ecumenismo, y las Iglesias Evangélicas tienen el temor de caer en él, pero hay un mal oculto y más peligroso, que quizá muchas iglesias están descuidando, se llama sincretismo. Sincretismo se define como la Aceptación de varias religiones en un mismo culto. En otras palabras el sincretismo es una equivalencia. Un ejemplo de sincretismo es lo que pasó en la colonización, fue la mezcla de las similitudes entre los dioses mayas y los dioses de los conquistadores. Por eso vemos cristos negros, que es la amalgama entre el cristo de los católicos y el negro que representa al dios del comercio maya. Otro ejemplo es la Santería. La Santería es una práctica religiosa‐diabólica que surgió pre‐ cisamente del sincretismo (equivalencia) entre los dioses paganos o demonios de las cre‐ encias haitianas y cubanas, con los ídolos católicos que se fusionaron (mezclaron de la si‐ guiente manera): Dioses Paganos de Haití y Cuba
Equivalentes Católicos
Agayú
San Cristobal
Babaluayé
San Lázaro
Eleggua
San Antonio de Pádua
Ibeji
San Cosme / San Damián
Inle
San Rafael
Obatala
N. Sra de las Mercedes
Ogún
San Pedro
Olokún
Nuestra Sra de la Regla
Orula
San Francisco
Osanyin
San José
Oshosi
San Nolberto
Oshún
N. Sra de la Caridad
Oya
N. Sra de Candelaria
El Sincretismo religioso en América se da con la conciliación y fusión de diferentes creen‐ cias de las civilizaciones precolombinas con las creencias que impusieron los españoles. Veamos ahora el caso de la hija de Mahomá, que se llamaba Fátima y según sus creencias dicen que ella guarda de su dios, y por otra parte la iglesia católica tiene a la virgen de Fátima que también según el catolicismo recibió revelaciones de ciertos secretos de dios.
Esto es un sincretismo religioso. En otras palabras creen lo mismo, solo que con diferente presentación. Por último, la peor a mi parecer de las muestras del sincretismo religioso es la celebración de fiestas paganas dentro del cristianismo. En nuestros días es el caso de la fiesta pagana en honor a la diosa afrodita, llamada Aprire o apertura de la primavera, que se celebra dis‐ frazada de semana santa y que desata sobre los pueblos una ministración negativa que se refleja en lascivia y borracheras. En el mes de diciembre la fiesta de halloween y días de los santos y difuntos, son una copia de las festividades druidas en honor a Samhaim, dios de la muerte celta. La Navidad celebra en realidad el nacimiento del dios sol mitra, el sol invicto y su llamado día del sol (Sun‐day) es festejado por miles de cristianos alrededor del mundo. Hoy en día los cristianos debemos redefinir nuestra identidad a la luz de la biblia y saber que quiere Dios que practiquemos y de que quiere que nos abstengamos. Dios les bendiga.
Contenido
Marzo 2009
Editorial El Origen de la Pascua El Día que Jesús Murió Nada es Difícil para Dios Los Siete Panes
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El Origen de la Pascua El origen de la Pascua, una fiesta asociada con la observancia de la resurrección de Jesucristo, se basa en realidad en una celebración pagana antigua. El origen de la Pascua data a los tiempos antiguos, no mucho después del diluvio global relatado en Génesis 6‐9 de la Biblia. Nimrod, el nieto de Noé, había dejado de seguir al Dios de su abuelo y había llegado a ser un gobernante tirano. Según el relato bíblico, como rey, Nimrod creó a Babel, Nínive, Azur, Calla, y otras ciudades, todas conocidas por un estilo de vida que promovía una mal‐ dad incalificable y la perversión. Cuando Nimrod murió, su esposa, la reina Semiramis, lo deificó como el Dios del Sol, o el Dador de Vida. Más adelante, llegaría a ser conocido como Baal, y los que siguieron la religión que Semiramis había creada en su nombre serían llamados los adoradores de Baal. Ellos llegaron a ser asociados con la idolatría, la adoración de demonios, el sacrificio humano, y otras prácticas consideradas malvadas. El origen de la Pascua involucra el nacimiento del hijo ilegítimo de Semiramis, llamado Tammuz. De alguna manera, Semiramis convenció al pueblo que Tammuz era Nimrod renacido. Ya que la gente había estado esperando un salvador prometido desde el principio de la humanidad (vea Génesis 3:15), ellos fueron persuadidos por Semiramis a creer que Tammuz era ese salvador, y aun que él había sido concebido sobrenaturalmente. En poco tiempo, añadiendo a la adoración de Tammuz (o Nimrod renacido), la gente también adoraba a Semiramis misma como la diosa de la fertilidad. En otras culturas, ella ha sido llamada Ishtar, Ashtur, y sí, Pascua. Vea lo que dice el Diccionario Católico acerca de la Pascua: El término inglés para Pascua, Easter, según Beda el Venerable (De temporum ratione, I, V), se relaciona con Estre, una diosa teutónica de la luz naciente del día y de la primavera, deidad que, sin embargo, es por lo demás desconocida, incluso en los Edda (Simrock, Mythol., 362); en anglosajón, eâster, eâstron; en el antiguo alto alemán, ôstra ôstrara, ôstrarun; en alemán, Ostern. Abril se llamó easter‐monadh. En otras pala‐ bras Astarté. La diosa madre o Astarté es conocida con varios nombres alrededor del mundo: Ve‐ nus, Diana, Ishtar, Afrodita e Isis. El origen de la Pascua tiene que ver con el rito de la primavera instituida por Semiramis después de la muerte de Tammuz, quien, según la tradición, fue matado por un verraco (cerdo) salvaje. La leyenda dice que a través del poder de las lágrimas de su madre, Tammuz fue “resucitado” en la forma de la nueva vegetación que apareció sobre la tierra. Según la Biblia, fue en la ciudad de Babel que la gente edificó una torre para desacatar a Dios. Has‐ ta ese tiempo, toda la gente hablaba un solo idioma. La edificación de la torre llevó a Dios, tal como es relatado en Génesis 11:7, a confundir sus lenguas para impedirles a llegar a ser aun más unidos en sus creencias falsas. Al irse a otros paises, muchos de ellos llevaron sus prácticas paganas con ellos. Las tradiciones contemporáneas, tal como el Conejo de Pascua y los huevos de pascua, también tienen sus raices en las prácticas establecidas por Semiramis. Por su naturaleza prolífica, los cone‐ jos han sido asociados por mucho tiempo con la fertilidad y su diosa, Ishtar. Los babilonios anti‐ guos creyeron una fábula acerca de un huevo que cayó al río Eufrates desde el cielo y del cual la reina Astarte (otro nombre para Ishtar o Semiramis) fue “sacada del cascarón.”
Como una Leyenda alternativa se dice que la diosa venus, nació de la espuma del mar. Espuma en griego se dice aphrós, que luego se convierte en aphrilis y más tarde en el nombre del cuarto mes del año: Abril. El Nombre de Venus en Griego, Aphrodíte, lleva dentro la palabra espuma. Desde la antigüedad, el conejo era un símbolo de la fertilidad asociado con la diosa fenicia Astartè, Astartea, o Astorea, o Istar, o Ischtar, Dedicada a la pujanza de la naturaleza (de Roma, Asía Occi‐ dental y África) divinidad sirio fenicia similar a la Venus de los griegos, la estrella de suave fulgor. Deidad a quien simboliza la mujer. Diosa de la caza y del mar. La paloma; uno de los animales divi‐ nizados que adoraban los babilonios. "Los hijos amontonan la leña, los padres le prenden fuego y las mujeres amasan la harina para hacer las tortas de la Reina del Cielo y libar a los dioses extraños, pa ra darme pesadumbre." –Jeremías 7, 18‐ La "Reina del Cielo" era Istar, la estrella Venus, la gran di‐ vinidad de los semitas. a quien además estaba dedicado el mes de abril. El huevo ha sido símbolo de la creación para los griegos, chinos y persas. Los chinos, ya en el año 900 antes de nuestra era, intercambiaban huevos rojos en la fiesta de la primavera que denomina‐ ban la "Fiesta del Huevo Rojo". Como es público y notorio, las tradiciones y fiestas paganas, se "cristianizaron". Así la Fiesta del equinoccio de la Primavera se convirtió en la Pascua. Para San Agustín (considerado como el primer gran talento filosófico desde la filosofía griega clásica), el huevo representaba la resurrección de Cristo, como símbolo de la retirada de la piedra que cubría el sepulcro. A partir del siglo IX, la Iglesia prohibió comer huevos durante la Cuaresma puesto que los consideraba producto animal impuro por ser un animal cuyas extremidades tocan la faz de la tierra. Esta norma eclesiástica duró hasta 1784. Para poder conservarlos mejor, se cocían y se pin‐ taban, para diferenciarlos de los frescos, para consumirlos en Pascua. Los Huevos de Pascua se consideraban antiguamente (y aún hoy día en algunos ambientes rurales) como un medio para aumentar la potencia sexual y como un encantamiento de la fertilidad. Tanto en Persia, como en Grecia y Roma, era muy común pintar huevos y comerlos en las fiestas en honor a la primavera. Su símbolo de vida nueva hizo que por miles de años, se dieran huevos como regalo en los festivales de esta estación florida, llena de vida, de sol y naturaleza. En Francia, por ejemplo, los estudiantes organizaban la "Procesión de los Huevos". Se reunían en parques y plazas y de allí partían hasta la iglesia principal. Durante el trayecto, golpeaban las puertas de las casas, para que cada familia les regalara huevos, que a posteriori serian bendecidos por un Cura párroco. como el ayuno era obligatorio, se adopta la costumbre de cocer huevos y almacenarlos. Recién en la época del rey Luis XIV, se introdujo la idea de pintarlos, para después venderlos. Algunos logran ver en esta celebración una copia de los rituales de celebración de la diosa Isis (que murió un viernes y resucitó un domingo) mediante el cual los sacerdotes eleusinos daban a los fieles una hostia mediante la cual estos últimos recibían el cuerpo de la diosa dentro de ellos. Por lo anterior podemos decir confiadamente, la Pascua católica no es ni será una fiesta cristiana digna de respetarse o celebrarse.
Fuentes: http://es.wikipedia.org/wiki/Pascua http://www.allaboutjesuschrist.org/spanish/el‐origen‐de‐la‐pascua.htm http://ec.aciprensa.com/p/pascua.htm
El día que Jesús murió Por Luis Fernando Alvarez Cuevas
En Daniel 7.25, refiriéndose al Anticristo, dice: “Y él proferirá palabras contra el Altísimo y afligirá a los santos del Altísimo, e intentará cambiar los tiempos y la ley”. Ahora bien, la Biblia dice en 1 Juan 4.2 y 3: “En esto conocéis el Espíritu de Dios: todo espíritu que con‐ fiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios; y todo espíritu que no confiesa a Jesús, no es de Dios; y este es el espíritu del anticristo, del cual habéis oído que viene, y que aho‐ ra ya está en el mundo”. El Espíritu del Anticristo ya está actuando en el mundo, pero no está revelado. La Biblia le llama a esto el misterio de la Iniquidad (2 Tesalonicenses 2.6‐7). Es claro entonces en la palabra de Dios que uno de los trabajos del espíritu del Anticristo es negar la venida de Jesucristo en carne, y una de las formas en que se manifiesta esto es que él ha tratado de cambiar los tiempos y la ley, porque al hacer esto lleva cautivos a los cristianos sin conocimiento y los hace pecar. Pero nosotros tenemos que seguir el ejemplo de la Iglesia de Berea (Hechos 17.11) que incluso cuando Pablo les predicaba, ellos iban a las escrituras a ver si las cosas eran así, así lo hacemos nosotros, “para que Satanás no gane ventaja alguna, pues no ignoramos sus maquinaciones” (2 Corintios 2.11) Satanás va a tratar de negar la venida de Cristo en carne y ante todo su muerte y resurrec‐ ción. ¿Por qué? Pablo lo contesta así en la primera carta a los Corintios 15.17: “Si Cristo no resucitó, vuestra fe es vana; aún estáis en vuestros pecados”. ¿Como entonces Satanás va a negar la resurrección de Jesús? Pues cambiando los tiempos y la ley. ¿Por qué? Porque al cambiar los tiempos, puede él probar que la historia de la re‐ surrección nunca pasó. La Señal del Profeta Jonás Jesús dijo: “La generación mala y adúltera demanda señal; pero señal no le será dada, sino la señal del profeta Jonás. Porque como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres no‐ ches”. (Mateo 12.39) La expresión tres días y tres noches se refiere en el lenguaje Judío de la época a un período de setenta y dos horas. Porque digo esto: Leamos Juan 11.9: “¿No tiene el día doce horas? El que anda de día, no tropieza, porque ve la luz de este mundo”. Entonces para los judíos el día, es decir, el período de luz, tiene 12 horas y obviamente la noche tiene 12 horas que suman las 24 horas de un día calendario. Entonces tres días y tres noches, se refiere a un período de setenta y dos horas. Cristo siempre hablo claro. Sin embargo Babilonia, el sistema del anticristo que ahora actúa en misterio bajo el nombre de Iglesia Católica Romana, enseña que Jesús muere viernes a las tres de la tarde y resucita el domingo en la madrugada. Si esto es así, Jesús pasó en la tumba la mitad del tiempo que la Biblia dice, es decir 36 horas. Con base en la afirmación que Jesús hizo sobre que resucitaría al tercer día, algunos dicen que estos se cumplieron así: viernes, un día;
sábado, segundo día; domingo, tercer día. Esto es antibíblico, es un concepto religioso que lleva el cumplimiento perfecto de la resurrección y lo hace imperfecto. Esta teoría es ignorante y diabólica. La señal es perfecta: Jesús estaría en el corazón de la tierra 3 días de 12 horas (36 horas) y tres noches de 12 horas cada una (36 horas), por lo que para que se cumpliera la señal debía pasar 72 horas. Ni más ni menos. El día que resucitó Cristo Este punto es menos problemático si se entiende desde la perspectiva de Dios y no la de los hombres. La Biblia deja ver claramente que Jesús debía dar su vida en una fecha en particular, durante la celebración de una fiesta judía, la Pesach o pascua. Ahora entonces es fácil fechar según el calendario judío cuando murió Jesús. La Pesach se celebra el catorce del primer mes del calendario judío, el mes de Nisán y en esa fecha Jesús ofreció su vida sobre la cruz por todos nosotros. Algunos estudiosos dicen que no pudo haber muerto durante la pascua, pues él celebró la pascua la noche anterior (última cena), entonces como es posible que fuera la pascua tam‐ bién el día siguiente. Fácil, si lo entendemos en el contexto judío. Para nosotros el día co‐ mienza a las cero horas o doce de la noche, pero para el judío, el día comienza a las seis de la tarde y termina a las seis de la tarde del día siguiente. Entonces si Jesús cenó con sus discípulos la noche en que empezaba el 14 de Nisán, el período de luz que le seguía sería también 14 de Nisán hasta las seis de la tarde. Entonces puede ver que Jesús murió exacta‐ mente el 14 de Nisán durante la Pesach. Proféticamente el Señor debía cumplir con cada una de las siete fiestas establecidas por Dios en la ley. Es decir, cada fiesta nos habla de un evento trascendental en la vida de Jesús. Se lo explico así:
Pesach (Pascua)
Su muerte
Hag HaMatzah (Panes sin levadura)
Su sepultura
Bikkurim (Primicias)
Su resurrección
Shavuot (Pentecostés)
La venida del Espíritu Santo
Yom Teruah (Trompetas)
Su Parusía
Yom Kippur (Expiación)
Su segunda venida
Sukkot (Tabernáculos)
Su Nacimiento
Si leemos la Biblia al día siguiente de la pascua era día de reposo, o sábado según traducen nuestras versiones, pero cuando analizamos Juan 19.31 dice que no quería que el cuerpo de Jesús quedara en la cruz, pues era la víspera del gran sábado (Biblia del oso). Este no era un Shabbat, sino un gran Shabbat o como se llamaría en Hebreo un Shabbaton o en griego un mega sabatum. Al respecto Eddie Chumney, autor del libro “Las siete fiestas del Mesías” explica: “La Fiesta de los Panes Sin Levadura (Hag HaMatzah) es un gran sábado. En hebreo un gran sábado es llamado shabbaton. Durante la Pascua, hay un sábado extra, además del sábado regular. Estos sábados son llamados "grandes sábados" o sábados san‐ tos. Podemos leer acerca del gran sábado de Panes Sin Levadura en Juan 19:31.” Entonces
confirmamos que Jesús fue sepultado después de las 3 de la tarde (Jesús murió a la hora novena) y antes de las 6 de tarde (Inicio del gran Sábado de Panes sin levadura). Entonces Jesús permanece sepultado desde poco antes de la fiesta de panes sin levadura y resucita 72 horas después. Si recordamos la señal que dio el Señor a la gente, él dijo que era necesario que como Jonás él permaneciera 3 días y 3 noches en el corazón de la tierra. Hagamos un conteo de tiempo y encontraremos la fecha en que resucitó:
Pesach Hag HaMatzah (14 de Nisán) (15 de Nisán) (16 de Nisán)
Bikkurim (17 de Nisán)
Noches
Última Cena
1era Noche
2da Noche
3ra Noche
Días
Crucifixión
1er Día
2do Día
3er Día
Note que la cuenta nos lleva a decir que si Jesús fue sepultado entre las tres y las seis de la tarde del día 14, antes de Hag HaMatzah o fiesta de los panes sin levadura y debió resuci‐ tar durante el lapso que queda entre las tres y las seis de la tarde del día 17 de Nisán. Lo más impresionante es que ese día se celebraba otra fiesta: Bikkurim o la fiesta de las pri‐ micias. El reino del Anticristo ha querido cambiar la ley El espíritu del anticristo va a tratar de cambiar la ley y moverla a su antojo. Babilonia, la Iglesia católica Romana, sin duda alguna para respaldar su doctrina la ha insertado dentro de las escrituras haciéndola pasar como palabra de Dios. Esto parece evidente en un pasa‐ je en particular Marcos 16.9. Veamos lo que sucede con este pasaje. Lo que pasa es que en diversas versiones se afirma que Jesús resucitó el primer día de la semana muy de maña‐ na, cosa que no pudo suceder. Eso pasa en versiones católicas y algunas que se dejan lle‐ var por esta tradición: Veamos el caso de la Biblia Católica llamada de Jerusalén: “Jesús resucitó en la madrugada, el primer día de la semana, y se apareció primero a María Magdalena, de la que había echa‐ do siete demonios”. Así también lo dice la Biblia Reina Valera revisión de 1960: “Habiendo, pues, resucitado Jesús por la mañana, el primer día de la semana, apareció primeramente a María Magdale‐ na, de quien había echado siete demonios”. Este error de traducción sucede también en la Biblia Dios habla hoy, Nueva Versión Inter‐ nacional, y las Revisiones de la Biblia Reina Valera. Ahora, entonces ¿Cuál es el problema si la mayoría de Biblias lo dicen? El problema es que están equivocadas. Las versiones publicadas más recientemente y sin compromisos con ninguna religión, sino con llevar la palabra con fidelidad, por ejemplo: La Biblia de las Américas, la Reina Valera Actualizada y la Nueva Biblia de los Hispanos dicen otra cosa. Estas Biblias dicen a una voz lo siguiente: “Después de haber resucitado, muy temprano el primer día de la semana, Jesús se apareció primero a María Magdalena, de la que había echado fuera siete demonios”. ¿Cuál es la diferencia? Que el texto no dice que Jesús resu‐ citó en la madrugada del domingo, sino que este evento (la aparición a María Magdalena) sucedió el primer día de la semana muy de mañana. Obviamente aclara que eso fue des‐
pués de que Jesús resucitara. Veo el un paralelo muy claro al leer el evangelio de Mateo, en su capítulo 28 y verso 2. Leamos: “Pasado el día de reposo, al amanecer del primer día de la semana, María Magdalena y la otra María vinieron a ver el sepulcro. Y he aquí, se produ‐ jo un gran terremoto, porque un ángel del Señor descendiendo del cielo, y acercándose, removió la piedra y se sentó sobre ella. Su aspecto era como un relámpago, y su vestidura blanca como la nieve; y de miedo a él los guardias temblaron y se quedaron como muer‐ tos. Y hablando el ángel, dijo a las mujeres: Vosotras, no temáis; porque yo sé que buscáis a Jesús, el que fue crucificado. No está aquí, porque ha resucitado, tal como dijo. Venid, ved el lugar donde yacía”. Se da cuenta, cuando el ángel removió la piedra, ya Jesús no estaba. La piedra fue removi‐ da no para que saliera Jesús, sino para que los de afuera pudieran saber que él ya había resucitado. Además, para terminar de corroborar la resurrección de Jesús durante el Shabbat sema‐ nal, podemos leer lo que traduce la Biblia del oso, la versión original de la Reina Valera: “Mas como Jesús resucitó por la mañana, el primero de los sábados, apareció primeramen‐ te a María Magdalena, de la cual había echado siete demonios”. Creo que la traducción pa‐ ra el tiempo de Casiodoro de Reina es muy sincera, pero para el tiempo actual con los últi‐ mos descubrimientos en cuanto a manuscritos del nuevo Testamento es deficiente. Sin embargo, note que él traduce, no domingo o el primer día de la semana, sino sábado. Es‐ toy seguro que si no le he aclarado la duda respecto al tema, al menos le he dejado inquie‐ tado a investigar. Por favor hágalo. La historia contada desde el punto de vista romano Hay un dato que me di a la tarea de sacar en cuanto al día que murió Jesús. El dato al que me refiero, es que fecha y día de la semana era cuando murió Cristo. La cronología romana lo contabilizaría así: Era el año 785 AUC (Desde que Roma fue fundada), el año 30 de nues‐ tra era, el 14 de Nisán por la noche para los judíos, era el martes 2 de abril. Esa noche el Señor celebró su última cena con sus discípulos. Esa noche fue arrestado y pasó hasta casi el medio día del día miércoles 3 de abril en por lo menos 2 juicios, uno religioso judío y otro penal romano. Antes del medio día de ese miércoles es llevado a la cruz y muere aproximadamente a las tres de la tarde. Es sepultado ese mismo día miércoles. Pasa el jue‐ ves 4 de abril en la tumba, el viernes 5 y resucita el sábado 6 antes de las 6 de la tarde para cumplir lo establecido referente al tiempo que debía permanecer en la tumba. Pasa sin no‐ tarse su ausencia la noche del sábado y el domingo muy de mañana mientras María Mag‐ dalena y la otra María van a la tumba un ángel se les aparece y les anuncia que Jesús ya había resucitado. Quiero que note que coincide la fecha romana con la afirmación de que el día después de que Jesús resucitó era Domingo o Primer día de la Semana. Esto nos asegura una vez más que lo que la Biblia dice es 100% verídico y comprobable históricamente.
El propósito del Shabbat Marcos 2.27 y 28 dice: “El día de reposo se hizo para el hombre, y no el hombre para el día de reposo. El hijo del hombre es Señor del día de reposo.” Los que veo aquí es que Dios está diciendo: No crean que yo cree el día de reposo para que el hombre descansara, sino porque yo tengo un propósito para ese día. Y cuál es ese propósito: Leamos Lucas 14.5: Si uno de ustedes tiene un hijo* o un buey que se le cae en un pozo, ¿no lo saca en seguida aunque sea sábado? La idea original del pasaje es esta: ¿Si tu hijo cae en el abismo, no lo sacas en sábado? Lo que Dios quería mostrarnos al resucitar en un Shabbat, es que él es nuestro reposo. Conclusión Puedo decir para terminar, a la luz de las pruebas bíblicas e históricas, que Jesús resucitó el sábado 6 de abril del año 30, el 17 de Nisán de 3790 para los Judíos, durante la fiesta llamada de las Primicias, dándonos así la promesa más tarde redactada por su siervo Pa‐ blo en 1 Corintios 15.20 y 21: “Mas ahora Cristo ha resucitado de entre los muertos, primi‐ cias de los que durmieron. Porque ya que la muerte entró por un hombre, también por un hombre vino la resurrección de los muertos”. Amén
Nada es difícil para Dios Manuel y Tony (Dejando Huella)
C G Am F Él es Jesús, quien venció en la cruz C G Am F Fue quien cargó, quien llevó nuestro dolor C G F G Am Jesús resucitó y por su sangre, sus heridas, nos sanó C Am G F Am G F Nada es difícil para Dios, Todo es posible al que cree C Am G F G C Hoy las montañas por la fe se moverán por su poder.
Trivia Bíblica Recorta las 9 Tarjetitas y espera los próximos números para completar la colección. Cortesía de Presencia Divina
Los Siete Panes Apóstol Sergio Enríquez
Todo lo que hacemos en la iglesia del Señor Jesucristo, tiene una razón de ser, todo tiene un propósito; cuando participamos de la Santa Cena, es un acto profético que debido a su gran importancia para nuestra vida; debe de ser explicado. El Señor Jesucristo hacia milagros, hablaba parábolas y luego llamaba a sus discípulos y les explicaba lo que habían visto u oído. Vemos también que el apóstol Pedro se tiene que levantar por el Espíritu Santo, y explica lo que había ocurrido en el aposento alto. Hechos 2:14 Entonces Pedro, poniéndose en pie con los once, alzó la voz y les declaró: Va‐ rones judíos y todos los que vivís en Jerusalén, sea esto de vuestro conocimiento y prestad atención a mis palabras. La Biblia nos dice que Jesucristo era el pan que había descendido del cielo: Juan 6:51 Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno come de este pan, vivirá pa‐ ra siempre; y el pan que yo también daré por la vida del mundo es mi carne. En el Antiguo Testamento que fue escrito en el idioma hebreo, para decir “pan” hay siete palabras distintas para describir cada tipo de pan; y cada uno de esos tipos de “pan” tipifi‐ ca lo ocurrido al “pan” que descendió de los cielos, es decir El Señor Jesucristo. 1. 3899 lechem
2. 5692 uggah
3. 4682 matstsah
4. 2471 challah
5. 6742 tseluwl
6. 1690 debelah
7. 6720 tseydah
Génesis 14:18 Entonces Melquisedec, rey de Salem, sacó pan y vino; él era sacerdote del Dios Altísimo. El sacerdote Melquisedek le dio del pan Lechem y Abraham se pudo enfrentar al “tentador” tipificado en el Rey de Sodoma. 1ª. Reyes 19:6 Entonces miró, y he aquí que a su cabecera había una torta cocida sobre pie‐ dras calientes y una vasija de agua. Comió y bebió, y volvió a acostarse. Al profeta Elías le fue ministrado el pan Uggah y le dio fuerzas, lo saco de la depresión y el desear aun morirse. Y esta clase de pan, fue hecho sobre piedras calientes, dando a enten‐ der que el pan que iba a descender del cielo, el Señor Jesucristo iba a descender a la pro‐ fundidad de los infiernos y quemarse en el lago de fuego, se estaba anunciando el holo‐ causto del Señor Jesucristo.
Éxodo 12:8 Y comerán la carne esa misma noche, asada al fuego, y la comerán con pan sin levadura y con hierbas amargas. Esta clase de pan, Matstsha debía ser sin levadura, nos habla de Santidad, quiere decir que cuando participamos de la Santa cena y comemos del pan, estamos comiendo la capacidad para poder ser santos, y la santidad nos conduce al arrebatamiento. Éxodo 29:2 y pan sin levadura, y tortas sin levadura amasadas con aceite, y hojaldres sin levadura untados con aceite; los harás de flor de harina de trigo. Este pan llamado Callah es un pan herido, nos habla del Señor Jesucristo que fue herido por nosotros (Isa. 53) y este pan era usado en la ordenación de sacerdotes, cuando partici‐ pamos de este pan, nos ayuda a realizar las cosas que hacían los sacerdotes que ministra‐ ban en el Tabernáculo de Moisés. Jueces 7:13 Cuando llegó Gedeón, he aquí que un hombre estaba contando un sueño a su amigo, y decía: He aquí, tuve un sueño; un pan de cebada iba rodando hasta el cam‐ pamento de Madián, y llegó hasta la tienda y la golpeó de manera que cayó, y la volcó de arriba abajo y la tienda quedó extendida. Este pan llamado Tseluwl era un pan de cebada, y es el que aplasta a nuestros enemigos, a nuestros adversarios que han robado, que han matado, que han extorsionado a los hijos de Dios. 1ª. Samuel 25:18 Entonces Abigail se dio prisa y tomó doscientos panes, dos odres de vino, cinco ovejas ya preparadas, cinco medidas de grano tostado, cien racimos de uvas pasas, y doscientas tortas de higos, y los puso sobre asnos. Cuando Abigail puso del pan llamado Debelah es el que se hacia a base de higos, quiere decir que este pan trae sanidad y además trae salvación a la casa. Salmo 78:25 Pan de ángeles comió el hombre; Dios les mandó comida hasta saciarlos. Este es el pan Tseydah que lo que significa es abundancia, quiere decir que este pan, nos ayuda a ser prosperados, no solo en lo espiritual, también en la material. Por eso es que cuando participamos del pan, en la Santa Cena, nos estamos comiendo es‐ tas siete facetas que se cumplieron en el pan que descendió del cielo, se cumplieron y están vigentes en nuestro Señor Jesucristo.