Sin embargo, el Puss pronto creció cansado de su nuevo hogar. Era demasiado grande, frío, y reservado, nada como el molino acogedor y caliente. Ella anhelaba el hogar simple que ella conocía una vez. Puss fue a su amigo, el hijo del molinero (quién ahora era un príncipe), y preguntó él si ellos podían volver a su hogar anterior. “Absurdo!” él gritó. “¿Por qué debemos salir este castillo hermoso, volver a un molino viejo y desmantelado? Vas loco, Puss.” Quizás tiene razón, pensó Puss. Debo lo olvidar. Pero pronto, Puss recordaba la diversión que ella tenía en el molino; persiguía los ratones, tomaba siestecitas en los bolsos mullidos de la harina, yacía en la luz del sol caliente por la tarde… Ella decidía que ella volvería al molino, con o sin el príncipe. Ella la embaló los bolsos que noche, y sistema apagado para el molino. El Puss salió de una nota para el hijo del molinero, diciéndote de su decisión, y pidiendo que él vuelva al molino con ella. Pero cuando él no la ensambló en su viaje, ella asumió que él se había olvidado simplemente de ella. Pues el Puss hizo su manera casera, ella notó algo impar. Estaba extrañamente absolutamente en las maderas; ella no había oído ni había visto un solo animal con todo en su viaje. Repentinamente, ella vio algo funcionado en frente más allá de ella. Antes de que ella supiera qué sucedía, el Puss sentía algo golpearla en la cabeza. Ella se cayó abajo y se ennegreció hacia fuera. Cuando ella despertó, sierra del Puss en alguna parte la llevaban dentro de un bolso, el mismo tipo de bolso que ella cogía los animales pulg. Antes de que ella lo supiera, el bolso fue abierto, y la sacudarieron fuera de él. Ella miraba para arriba, no creyéndola los ojos. Antes de que ella estuviera parado el ogre ella había matado. Por lo menos, eso era lo que ella pensó, hasta que ella realizó que el ogre era un maquillaje más gordo y que usaba. “Cómo el atrevimiento tú mata a mi marido!” gritaron los ogress. “Él nunca hizo cualquier cosa a
ti!” ¡“Señora, él terrorizing la aldea! Alguien tuvo que hacer algo!” Pero los ogress no escucharían. ¿“Qué sobre esos animales? Ese conejo y esos faisanes no hicieron ningún mal!” ¡“Sí, solamente eran simplemente bichos, ajuste solamente a ser una comida! ¡Si ese te incomoda, hay mil cazadores que han matado a muchos más animales que mí! Ir los incomodan!” “Deciros eso!” los ogress clamaron contra, señalando a una arboleda de árboles en la su derecha. En las plantas, casi cientos pájaros y liebres ocultaban. En los ogress durar las palabras, ellas cargó en el Puss. Ella funcionó tan rápidamente como ella podría escaparlas, pero ganaron constantemente en ella. Entonces, de ninguna parte vino un fuerte ruido. Alguien soplaba en un cuerno de la guerra en las colinas próximas. Los animales congelados, al igual que Puss, como de “los caballos todo el rey y hombres de todo el rey” vinieron funcionando abajo de la colina. Asustaron de los animales. Los ogress, que habían estado mirando, intentaron funcionar lejos, solamente los caballeros te mataron. Sacudarido, Puss dado vuelta a la mirada en la tapa de la colina, de donde los caballeros habían venido. ¡Había su amigo, el príncipe! Él sonrió en ella, y montó abajo de la colina para saludarla. “I pensó que te olvidaste sobre mí!” Puss gritado. ¿“Cómo podría abandonar siempre por el amigo? Debo haber escuchado ti antes. Adelantado, dejarnos el hogar de vuelta.” “Al castillo?” ella pidió. “No,” él dijo, “al molino.”