Así.
Comencé a ver cosas increíbles Como las maravillas que los náufragos Idearon para entretener al rey amenazante
Ya estoy acostumbrado a lo torcido A lo revuelto de los juicios Y a la mezcla inseparable de la verdad con la mentira
He aprendido a medir a los seres humanos Por las implicaciones y consecuencias de sus conductas Sus pensamientos que no me importan me son inaccesibles
De pronto se rasga el velo del templo de Salomón Chirriando raro se abre un cofre y salen añejos fantasmas Que jamás volverán a estar escondidos
Entonces me doy cuenta de que algo tremendo está por ocurrir En un azorado segundo la malla de la ideología se deshace Las analogías se multiplican entre dos espejos y mueren
Yo estoy aquí En la mitad de todo Despierto dentro de un sueño.