Distinguimos las siguientes clases de oraciones según la modalidad: 1.- ENUNCIATIVAS: Denominadas también aseverativas o declarativas; expresan la conformidad o disconformidad objetiva del predicado con el sujeto. El hablante sólo enuncia que el predicado conviene o no al sujeto:
Pedro viene La silla es blanca Se caracterizan por el empleo del modo indicativo y la ausencia de recursos lingüísticos que marcan las restantes modalidades. Se dividen en afirmativas o negativas, poseyendo estas últimas alguna marca de negación:
Pedro no viene
Nunca paga el café
2.- INTERROGATIVAS: Corresponden a enunciados que esperan respuesta verbal por parte del interlocutor. Las dividimos en los siguientes tipos: · totales: donde el hablante pregunta por todo el contenido, es decir, pretende saber si el predicado conviene o no al sujeto. La respuesta sólo puede ser sí o no o locuciones equivalentes:
¿Pedro viene? ¿Tienes ganas de dejar esto? · parciales: donde se pregunta por un elemento del enunciado. El hablante solicita información sobre un hecho que conoce de modo incompleto; por esto construye la oración con un morfema interrogativo que el oyente es invitado a sustituir por la información requerida. La respuesta es un sintagma que contiene esa información:
¿Quién ha venido? ¿Cuándo nos vamos a casa? · interrogativas equivalentes a mandatos: y solicitan del oyente una respuesta no verbal; generalmente, cuando pedimos algo de una “forma indirecta”:
¿Tiene fuego?
.
Interrogativas indirectas:
Al hacer depender una oración interrogativa de un verbo de lengua o entendimiento, se origina una oración compuesta denominada interrogativa indirecta:
¿Viene Pedro? ¿Cuánto vale?
/ /
Ignoro si viene Pedro Te pregunto cuánto vale
3.- EXHORTATIVAS Expresan orden, mandato o prohibición. Su contenido se presenta como algo que tiene que realizar el oyente, y el hablante no espera una respuesta verbal; generalmente se construyen con imperativo o subjuntivo con valor de imperativo:
Ven aquí
/ Traed eso
/
No cierre usted la puerta.
El sujeto está implícito en la persona verbal (tú, vosotros) o explícito (usted). Muchas veces puede aparecer mencionado mediante un vocativo:
Ana, sigue leyendo También se pueden utilizar otras formas verbales: ·
presente o futuro de mandato:
Me echas esta carta al correo No matarás. ·
en un nivel coloquial; infinitivo o gerundio:
¡A jugar! Copiando 4.- OPTATIVAS También denominadas desiderativas; expresan el contenido de la oración como un deseo. Se caracterizan por el verbo en subjuntivo, adverbios de deseo y la conjunción que:
Ojalá que llueva café en el campo Que le parta un rayo Según el tiempo verbal utilizado, la realización del deseo se considera más o menos probable:
Ojalá apruebe / aprobase / haya aprobado /
hubiese aprobado
lengua 5.- DUBITATIVAS: Se presenta el enunciado como dudoso. La incertidumbre se plasma con el subjuntivo y adverbios de duda; si empleamos indicativo, la duda se presenta como atenuada:
Acaso está enfermo. Tal vez apruebe. Otras formas de expresar la duda son con futuro o condicional de probabilidad:
Serían las diez Habrá ganado mucho dinero 6.- EXCLAMATIVAS Marcan una especial afectividad ante lo enunciado.
¡Ha venido Pepe! ¡Qué lo cuelguen! Enunciados exclamativos de estructura no oracional: Mediante éstos el hablante desahoga un sentimiento (alegría, dolor, sorpresa...) o simplemente constata la presencia de algo que le afecta:
¡Ay! A estos enunciados pertenecen las interjecciones y las exclamaciones: · interjecciones propias: en realidad, son secuencias fónicas, al margen incluso del sistema fonológico de la lengua:
¡Ay!, ¡ brrr!, ¡ uf!, ¡ pssst!, ¡ eh!.....
· interjecciones impropias: son palabras existentes en la lengua, que ocasionalmente se habilitan con intención exclamativa perdiendo su significado propio:
¡Cielos!, ¡Cáscaras!, ¡Arrea!.... ·
exclamaciones: son sintagmas acuñados con finalidad exclamativa.
¡Dios mío!, ¡Virgen santa!, ¡Madre mía!, ¡Por todos los demonios!....