Memoria De Mi Estancia En Leizig Marina Sastre

Memoria de mi estancia en LEIZIG (Alemania). Marina Sastre Ibáñez Estuve durante todo el mes de julio en la ciudad de Leipzig (Alemania) y en general tengo que decir que la experiencia ha sido increíble y que la recomiendo para todo el mundo. La oportunidad es única y además conoces a un montón de gente, ves nuevas cosas, conoces nuevas culturas y todo esto siempre enriquece. Cada persona de intercambio tenía en Leipzig una persona encargada de ella, eran nuestros “contact persons” y en todo momento estaban disponibles si teníamos algún problema o si tenías alguna duda. La ciudad: yo no conocía la ciudad de Leipzig y realmente me sorprendió. Es una ciudad del Este de Alemania y resultó ser una ciudad de estudiantes. Es muy acogedora y como no es muy grande se puede llegar bien a los sitios sin tardar mucho y además hay tranvía por toda la ciudad. Tiene unos lagos que en verano los utilizan como “playas”, tiene zoo, una zona (no muy amplia) de fiesta y varias cosas para visitar interesantes. No es una ciudad muy cara y aunque en la ciudad tampoco hay demasiadas cosas que hacer esta cerca de muchísimos sitios para visitar los fines de semana. Alojamiento: Mi “contact person” me consiguió una residencia de estudiantes en Leipzig. La residencia era bastante grande y vivían un montón de estudiantes. En la residencia nos alojábamos varios de los de intercambio y otros vivían en piso, todo dependía del alojamiento que te buscara la persona encargada de ti allí. La habitación de la residencia era bastante grande, compartía baño con dos habitaciones más y cocina también. No estaba muy lejos del hospital pero me prestaron una bici para todo el mes y no tardaba nada en llegar, allí todo el mundo se mueve en bici. La comida supuestamente estaba incluida pero como no la daban lo que hicieron era darnos 50 euros cada semana para que los administráramos nosotros. Prácticas en hospital: Estuve en un servicio de cirugía general en el hospital universitario de Leipzig. Los médicos eran todos muy agradables, y desde el primer día me dejaron lavarme y participar activamente en las cirugías. Me quedé sorprendida de la cantidad de cosas que te dejan hacer para ser estudiante allí, además les interesa mucho la docencia y siempre intentan explicarte todo. Como es de esperar los alemanes trabajan sin parar, tenía que estar allí a las 7 de la mañana y no me iba hasta bien tarde porque cuando salía de una operación me metía en otra y podía durar horas. La verdad es que aprendí mucho pero no paré en todo el mes. Otra cosa que me sorprendió es que allí las enfermeras no sacan sangre sino que lo hacen los estudiantes y me tocó aprender. Los médicos y el personal del hospital en general no hablan mucho en inglés, por eso es conveniente saber algo de alemán por lo menos para no sentirte perdido ya que estuve con gente que no sabía nada de alemán y lo pasó un poco mal en este sentido. Programa social: los estudiantes de la organización de Leipzig estuvieron en todo momento pendientes de nosotros. Nos organizaban eventos y alguna salida que otra y alguna de ellas pagada por la organización. Luego los fines de semana organizábamos nosotros por nuestra cuenta viajes, estuvimos en Berlin, Praga y Dresden.