Machote De Boletin No.26

Año 12 No. No. 12, 26, Abril Febrero 2009 Año de de 2008

La Filosofía Juche es una Original Filosofía Revolucionaria

CAMARADA KIM JONG IL El gran Dirigente Kim Jong Il, Secretario General del Partido del Trabajo de Corea y Presidente del Comité de Defensa Nacional de la RPDC de Corea publicó el 26 de julio de 1996 la clásica obra “La filosofía Juche es una original filosofía revolucionaria”. En dicha obra, el gran Dirigente Kim Jong Il, gran ideólogo y teórico, aclaró las correlaciones entre la filosofía Juche y la marxistas argumentando que la primera es una original radicalmente diferente de la precedente. Al haber aclarado por primera vez en la historia las características esenciales del hombre sobre fundamentos científicos, la filosofía Juche valora al hombre como el ser superior y más poderoso en el mundo y plantea un nuevo criterio sobre el mundo: el mundo es dominado y trasformado por el hombre. La filosofía Juche es la filosofía revolucionaria, filosofía política del Partido del Trabajo de Corea que aclara el fundamento filosófico de su ideología rectora, la idea Juche y los principios fundamentales de la revolución.

El gran Dirigente Kim Jong Il señalo, en su obra, que debíamos sentir un alto orgullo y dignidad por tener una gran filosofía política como la Juche y, estudiando con profundidad sus principios, aplicarlos al pie de la letra en las actividades prácticas para la revolución y la construcción y subrayó que al estudiar y divulgar con amplitud y profundidad la filosofía Juche, de acuerdo con el propósito del Partido, todos los sociólogos debían dar mayor brillo a su grandeza y aumentar más su fuerza de atracción. A continuación, damos a conocer el contenido principal de esta obra: La Filosofía Juche es una doctrina original que está desarrollada y sistematizada con sus propios principios. Su mérito histórico en el progreso de las ideas filosóficas no está en haber desarrollado la dialéctica materialista marxista sino en haber definido nuevos principios filosóficos centrados en el hombre. Al haber aclarado por primera vez en la historia las características esenciales del hombre sobre fundamentos científicos, la filosofía Juche valora al hombre como el ser superior y más poderoso en el mundo y plantea un nuevo criterio sobre el mundo: el mundo es dominado y transformado por el hombre. Partiendo del principio filosófico humanocéntrica la filosofía Juche estableció la concepción jucheana de la historia social y se registró un cambio radical en el criterio y concepción sobre ésta. Al aplicar a la historia social las leyes generales del desarrollo del mundo material la filosofía marxista estableció la concepción dialécticomaterialista sobre ésta, el punto de vista materialista de la historia. Por supuesto, no negamos el mérito histórico del concepto materialista en cuanto a la historia. El hizo una importante contribución a combatir las reaccionarias concepciones de la historia social carentes de fundamentos científicos que se basaban en el idealismo y la metafísica. Por otra parte, como el hombre vive en el mundo material objetivo y la sociedad está inseparablemente ligada a la naturaleza, es cierto que también en los fenómenos sociales actúan las leyes generales del desarrollo del mundo material. Pero, si las leyes generales del desarrollo del mundo material se aplican tal cual están a los fenómenos sociales, sin ver que en el movimiento social actúan sus propias leyes, la comprensión de la historia social no puede resultar menos que unilateral. En fin, la diferencia esencial de la filosofía Juche y la precedente parte de la comprensión diferente del hombre.

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También en el análisis de los problemas filosóficos, el gran Líder, camarada Kim Jong Sung, siempre partió de la exigencia de la práctica revolucionaria y, en el curso de dar respuestas científicas a los urgentes problemas ideológicos y teóricos que ésta presentaba, concibió la filosofía Juche. Nuestro Partido la sistematizó, profundizó y desarrolló integralmente, generalizando las fecundas y hondas experiencias acumuladas en la práctica revolucionaria. La práctica revolucionaria es la lucha por la realización de La independencia de las masas populares, y éstas son las encargadas de ella, razón por la cual en la búsqueda filosófica es importante desplegar la teoría reflejando con acierto sus exigencias y aspiraciones y generalizando sus experiencias en la lucha, y convertirla en su patrimonio. En la sociedad explotadora la clase gobernante reaccionaria trata de utilizar la filosofía para defender y justificar su régimen de dominación y de hacer de ésta un objeto monopolizado por los filósofos que representan sus intereses, considerando a las masas populares como seres ignorantes que no tienen nada que ver con la filosofía, ni pueden comprenderla. Al reflejar las exigencias y las aspiraciones de las masas populares y generalizar sus experiencias de lucha, partiendo del punto de vista y la posición de que ellas son las dueñas de todas las cosas y los entes más inteligentes, nuestro Partido logró formular, profundizar y desarrollar la filosofía Juche y convertirla en su arma para la lucha. He aquí precisamente la razón por la que la filosofía Juche sea verdad absoluta apropiada a las exigencias y aspiraciones de las masas populares en cuanto a la independencia, y sea una filosofía popular que éstas comprenden con facilidad y toman como arma para su lucha. Esta es la filosofía revolucionaria, filosofía política de nuestro Partido, que aclara el fundamento filosófico de su ideología rectora, la idea Juche, y los principios fundamentales de la revolución. Cómo la traten no es un mero problema relativo a la teoría filosófica, sino un problema vinculado con el criterio y la posición hacia la ideología del Partido. Se procurará que asimilen como verdad absoluta la ideología del Partido, la defiendan con firmeza y la conviertan en convicción revolucionaria para comprender, interpretar y divulgar de manera correcta la filosofía Juche. Debemos sentir un alto orgullo y dignidad por tener una gran filosofía política como la Juche y, estudiando con profundidad sus principios, aplicarlos al pie de la letra en las actividades prácticas para la revolución y la construcción. Y tenemos que analizar y juzgar todos los fenómenos de la sociedad en estricta adhesión a los principios de la filosofía Juche y aglutinar con firmeza a las masas populares en torno al Partido y elevar el papel del sujeto según las exigencias de ella, impulsando así con fuerza el proceso revolucionario y constructivo. Al estudiar y divulgar con amplitud y profundidad la filosofía Juche, de acuerdo con el propósito del Partido, todos los sociólogos deben dar mayor brillo a su grandeza y aumentar más su fuerza de atracción.

COREA EN EL SIGLO XX LOS 100 HECHOS MÁS RELEVANTES SURGE A LA LUZ LA IDEA JUCHE La Conferencia de cuadros dirigentes de la Unión de la Juventud Comunista y la Unión de la Juventud Antiimperialista fue celebrada durante los días comprendidos del 30 de junio al 2 de julio de 1930 en Kalun, China. En ella Kim Il Sung leyó su histórico informe ‘‘El camino a seguir por la revolución coreana’’, en el cual hizo un análisis integral de la situación política y las lecciones históricas aprendidas del movimiento anterior y dilucidó los principios de la idea Juche. En esa ocasión señalo: ‘‘Las masas populares son las protagonistas de la lucha revolucionaria, y sólo si son organizadas y movilizadas puede alcanzarse la victoria en esta lucha.’’ Dijo que para conducir la revolución a la victoria debían com penetrarse con las masas populares, organizarlas, movilizarlas, así como solucionar de forma independiente y realista y con responsabilidad todos los problemas que surgieran en el camino de la revolución; puso énfasis en la necesidad de mantener una posición y actitud firmes de que los coreanos son los ejecutores de su revolución y deben realizarla, en cualquier circunstancia apoyándose en la fuerza del pueblo y de acuerdo con la realidad del país. A partir de los principios de la idea Juche, dilucidó que el principal objetivo de la revolución coreana era lograr la independencia del país derrotando al imperialismo japonés e implantar la democracia después de liquidar todas las relaciones feudales, y que el carácter de la revolución era democrático, antimperialista y antifeudal. Continuó explicando que en esa etapa de la revolución podían participar amplias fuerzas antimperialistas entre otras, obreros, campesinos, jóvenes estudiantes intelectuales, pequeños propietarios e incluso los capitalistas y creyentes religiosos con conciencia nacional, y que todas las fuerzas antijaponesas debían movilizarse para derrotar al imperialismo japonés y a sus secuaces como los terratenientes, capitalistas, projaponeses y traidores a la nación y lograr la liberación y la independencia nacionales. A continuación, Kim II Sung plantea los asuntos estratégicotácticos para lograr el objetivo mencionado: la línea para organizar la lucha armada antijaponesa, la línea de formación del frente unido nacional antijaponés que agruparía a todas las fuerzas de ideas antijaponesas y la orientación para fundar un partido revolucionario independiente. La exposición de los principios de la idea Juche y la original línea para llevar a cabo la revolución coreana en la Conferencia de Kalun, constituyó un histórico evento, pues declaró el nacimiento de la idea Juche y la línea revolucionaria basada en esta doctrina. La idea Juche se desarrollaba y se enriquecía cada vez más en las difíciles y complicadas luchas que se desarrollaron en varias etapas transitadas por la revolución incluso la Lucha Armada Antijaponesa y hoy es una ideología filosófica perfecta dotada con un sistema único donde se unen ideología, teorías y método. La Conferencia de Kalun fue el preludio que dio inicio a que la lucha de liberación nacional antijaponesa y el movimiento comunista se libraran según los preceptos de la idea luche, filosofía rectore más científica y revolucionaria, y la original línea revolucionaria.

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