Lucas Lenz y el museo del universo – Pablo De Santis CAPÍTULO 1: Oficina de objetos perdidos Lucas Lenz cuenta su habilidad, desde niño, para encontrar cosas perdidas. Lucas nos muestra un poco como era de niño y como ahora le va con su local de... buscador de cosas perdidas. No le va bien con el local y se encuentra desanimado. Un día un hombre llamado Raval busca sus servicios y lo contrata y Lucas acepta la misión. Cuando es grande, alquila una oficina para trabajar con su habilidad: la oficina de objetos perdidos. CAPÍTULO 2: El Museo del Universo El señor Raval lo contrata para que encuentre a Lulú, la tortuga más grande y vieja del mundo. La única pista que le dio Raval es que hacía 25 años había sido modelo para una estampilla. En el Instituto Filatélico encontró al señor Faber que la había dibujado. Él recordó que el dueño era un loco que vivía en el hotel La Giralda. En el hotel La Giralda, la dueña recordó que el loco se llamaba Franco Yhabía muerto hacía 10 años. No sabía nada de la tortuga. En el sótano tenía un baúl lleno de papeles que había dejado Franco. Revisando papeles viejos encontró que Franco llevaría a la tortuga Lulú al Museo del Universo. Lucas ubicó el museo en la zona sur de la ciudad y parecía un hospital abandonado. En una sala encontró al señor Raval que le mostró la tortuga. Le dijo que Le había hecho esa prueba para saber si era astuto y valiente. Lo felicitó. Por él supo que el Museo del Universo era un proyecto secreto, ideado por 12 hombres para juntar piezas valiosas y únicas pero entre ellos había un traidor que, con una banda, había robado casi todo. CAPÍTULO 3: La Pluma-vampiro Días después el señor Raval le llevó una vieja revista literaria donde escribieron sobre un gran escritor de esa época: Alcides Lancia,autor de “El Nictálope” (noctámbulo que ve mejor de noche que de día). Lancia era especial porque escribía su obra con su propia sangre. Para ello había inventado la Pluma-vampiro: era una lapicera con un tubo fino y largo que se conectaba con las venas del autor. Alcides Lancia llegó a escribir 8 tomos de su obra pero quedó tan débil que no pudo terminarla. Decidió donar la Pluma-vampiro al Museo del Universo. Luego desapareció y la pluma fue robada del museo. Su trabajo iba a ser encontrarla. La única pistaque tenía Raval era el nombre de un admirador del escritor: Mateo Rinaldi, dueño del cabaret “El Dragón Rojo”. Lucas llegó al cabaret. En el fondo había una gran habitación de doble altura, con una gran cama en el medio, suspendida del techo por cuatro gruesas cadenas . En ella dormía Rinaldi con peligro de caerse y matarse. Rinaldi había buscado la pluma sin encontrarla. Le dijo que había solo dos personas más que sabían del tema: el señor Horowitz y el señor Vidor. Lenz fue a la casa de Horowitz, que era cerrajero. Él tenía los 8 tomos de El Nictálope, pero a él le interesaba la pluma. También le dijo que Vidor había sido el primer editor de Lancia y quería que escribiera más y más. Vivía en una estancia llamada La Ley. El buscador fue a la estancia. Vidor negó saber de la pluma y lo invitó con un té extraño que lo narcotizó. Cuando despertó estaba atado a una silla y frente a él estaba Alcides Lancia con la Pluma-vampiro. Estaba escribiendo el noveno y último tomo de su obra pero el escritor estaba ya muy débil y le faltaba sangre. El plan de Vidor era terminar la obra con la sangre de Lucas. Alcides sorprendió a Vidor, le clavó la Pluma-vampiro en el cuello y lo derribó. Con la sangre del editor terminó el libro y le entregó la pluma a Lucas para que la lleve al Museo del Universo.
1
Nunca más se supo de Lancia. Lo que sí apareció fue el último tomo de El Nictápole en las librerías. CAPÍTULO 4: La piedra negra Lucas lenz siguió recuperando objetos perdidos del Museo, hasta que Raval le pidió que buscara algo muy difícil: La Piedra Negra. Era una piedra mágica que absorbía la luz, era muy fría y se podían realizar brujerías con ella. La única pista era la Sociedad de las Brujas que investigaba sobre brujería, su directora se llamaba Inelda y había comprado la Piedra Negra. Lucas encontró la dirección de la sociedad pero ahora era un negocio que vendía dulces. Su dueña era Mirna, hija de Imelda que ya había muerto. Mirna recordaba que la madre escribía sus hallazgos de brujería en un gran cuaderno. Allí contaba que había tenido una experiencia horrible con la Piedra Negra y por ello la había guardado muy bien en el sótano. Bajaron al sótano. Vieron un círculo con un promontorio lo rompieron con un martillo y encontraron la Piedra Negra. Lucas compra la Piedra Negra para el Museo. El traidor Maestro rapta a Mirna y como rescate le pide a Lucas que lleve la piedra negra a su guarida. Lenz va a la fortaleza del Maestro, ubicada en una zona de fábricas abandonadas y al costado pasaba un arroyo de agua negra y podrida. Maestro lleva a Lucas a una construcción llena de humedad, donde todo se pudría y destruía. Eso era lo que le gustaba al dueño, que decía: soy el señor de la Humedad. El buscador entrega la Piedra Negra pero Maestro los traiciona y lleva a un túnel largo y deteriorado por la humedad para que se mueran y destruyan. A Mirna se le ocurre la idea de tentar a Maestro para que mire la piedra. Ella dice las palabras mágicas. Se produce la horrible brujería y el señor de la humedad se desmaya. Los prisioneros aprovechan para escapar pero Maestro se despierta y los persigue. En ese momento, el túnel se derrumba y el río podrido lo inunda y destruye todo el museo de cosas podridas. Sin embargo, el señor de la humedad logra escapar. La Piedra Negra quedó en el túnel inundado. Lenz le contó sus aventuras a Raval que quería que siguiera buscando cosas perdidas. Lucas se fue del Museo hasta el auto donde lo esperaba Mirna. Lucas no puede rescatar la Piedra Negra, pero conoce a Mirna que lo acompaña.
2