Lamarckism O

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Lamarckismo Lamarckismo es el término usado para referirse a la teoría de la evolución formulada por Lamarck. En 1809 en su libro Filosofía zoológica propuso que las formas de vida no habían sido creadas ni permanecían inmutables, como se aceptaba en su tiempo, sino que habían evolucionado desde formas de vida más simples. Describió las condiciones que habrían propiciado la evolución de la vida y propuso el mecanismo por el que habría evolucionado. La teoría de Lamarck es la primera teoría de la evolución biológica, adelantándose en cincuenta años a la formulación de Darwin de la selección natural en su libro El origen de las especies.1 2 3 Lamarck en su teoría propuso que la vida evolucionaba “por tanteos y sucesivamente”, “que a medida que los individuos de una de nuestras especies cambian de situación, de clima, de manera de ser o de hábito, reciben por ello las influencias que cambian poco a

Retrato de Jean-Baptiste Lamarck.

poco la consistencia y las proporciones de sus partes, de su forma, sus facultades y hasta su misma organización”.4 Sería la capacidad de los organismos de adaptarnos al medio ambiente y los sucesivos cambios que se han dado en esos ambientes, lo que habría propiciado la Evolución y la actual diversidad de especies. Como mecanismo para traducir esos presupuestos en cambios evolutivos, propuso el mecanismo conocido como “herencia de los caracteres adquiridos”, refiriéndose a la, hasta el día de hoy no demostrada, capacidad de los organismos de trasladar a la herencia los caracteres adquiridos en vida. Esta herencia no sería ni directa ni individual, sino que sería tras largo tiempo de estar sometidos a parecidas circunstancias y afectarían al conjunto de los individuos del grupo sometido a esas circunstancias. La teoría de Lamarck no fue tenida en cuenta en el momento de su formulación, siendo 50 años más tarde, con la publicación de El origen de las especies, cuando los evolucionistas y el propio Darwin la rescataron para intentar cubrir el vacío que la selección natural dejaba al no proponer la fuente de la variabilidad sobre la que actuaría la selección. A principios del siglo XX, con la formulación de la barrera Weismann, que enuncia la imposibilidad de transferencia de información entre la línea somática y la germinal, el lamarckismo fue desechado considerándolo erróneo. No obstante, durante el siglo XX han existido evolucionistas que han defendido el lamarckismo, existiendo en la actualidad voces desde la biología y el evolucionismo que reivindican su reformulación. Lamarck, su Filosofía zoológica (actualmente sería teoría zoológica) me parece el libro más importante de la biología que se haya escrito jamás. Lamarck fue el que aplicó el concepto de biología al estudio de los seres vivos dotándole de una base teórica para que tuviera consistencia. [...] Era una persona que tenía una capacidad impresionante de comprensión de la Naturaleza, tenía una visión bellísima de la Naturaleza...

Máximo Sandín, La evolución a 150 años de Darwin, conferencia en la Universidad de Oviedo, 16/11/2009.5 En la actualidad, el lamarckismo ha quedado simplificado como la teoría de la «herencia de los caracteres adquiridos». La síntesis (neodarwinismo) formulada en los años 1930, según la cual, la vida evoluciona a consecuencia de mutaciones aleatorias en el ADN fijadas por la selección natural, es considerada, por la mayoría del estamento académico, más satisfactoria para explicar la evolución.

Índice Contexto histórico

Teoría de la evolución de Lamarck Concepto de evolución Sobre la forma en que se evoluciona Ciencia y religión La complejidad creciente de los organismos La herencia de los caracteres adquiridos Adaptación al medio Gradualismo y lamarckismo Los organismos, agentes de su propia evolución Recepción y alcance de la teoría Referencias Bibliografía Enlaces externos

Contexto histórico A diferencia del pensamiento evolucionista de Darwin, al que se le puede atribuir una influencia directa de su abuelo Erasmus y del propio Lamarck,6 y un ambiente en el que la filosofía zoológica habría generado una cierta inquietud evolucionista,7 los antecedentes en Lamarck son difusos y tuvo que elaborar su teoría en un contexto que la recepción de su obra demostró hostil. Es obvio que el pensamiento evolucionista solo fue posible tras establecerse el método científico y su empeño por describir el mundo con explicaciones que el propio mundo pudiera darnos, sin recurrir a causas externas a él. La Ilustración, el espíritu de L'Encyclopédie, y el apoyo de Buffon harían posible que Lamarck desarrollase sus trabajos sobre Historia Natural, botánica y acometiese el estudio de los invertebrados. También, habrían existido pequeños destellos evolucionistas que cuestionarían el fijismo en Diderot y Maupertuis y, anteriormente, en Leibniz;8 el avance en la geología habría posibilitado que Lamarck se plantease la imposibilidad de que la Creación hubiese previsto todas las formas de vida que se observaban en la naturaleza, perfectamente adaptadas a unos cambios que se habrían dado con posterioridad a esa creación. En todo caso, el fijismo estaba perfectamente establecido y su propuesta evolucionista tuvo que enfrentarse al dogma religioso de la Creación y al pensamiento científico del muy influyente Cuvier que justificó los descubrimientos que los fósiles proporcionaban sobre formas de vida diferentes a las actuales, como especies sin conexión con éstas, extinguidas por los sucesivos cataclismos que se habrían producido a lo largo de la historia geológica.9 10 Lamarck tuvo que esbozar su teoría en un tiempo en el que el estado de las ciencias naturales era “caótico”, "formuladas en una época en que ni siquiera se podía entrever la posibilidad lejana de fundarlas sobre hechos evidentes"11 Momentos en los que se admitía que la vida surgía por generación espontánea y se desconocía todo sobre la herencia biológica. La experiencia en la enseñanza me hizo sentir de qué modo una filosofía zoológica, es decir, un cuerpo de preceptos y de principios relativo al estudio de los animales y hasta aplicables á las otras partes de las ciencias naturales, nos sería útil en la actualidad, dados los progresos que se han realizado en estos últimos años en nuestros conocimientos de los hechos zoológicos.

Filosofía zoológica, introducción.

Teoría de la evolución de Lamarck El asunto relativo al examen de los animales no consiste únicamente en conocer las diferentes razas ni determinar entre ellas todas las distinciones, fijando sus caracteres particulares, sino también el de llegar a conocer, además, el origen de las facultades de que disfrutan, las causas que los hacen existir y mantienen

su vida., y por último, las de la progresión notable que presentan en el orden de su organización, y en el funcionamiento lo mismo que el desarrollo de aquellas facultades.

Filosofía Zoológica. Lamarck lamentó que en su tiempo la historia natural se limitase a la clasificación de las diferentes formas de vida. Esa labor, que consideró importante, debería fundamentarse en una “filosofía” que indagase en estas formas de vida, en su naturaleza y sus conexiones: “llegar a conocer bien un objeto, hasta en sus más mínimos detalles, consiste en comenzar por considerarle en su totalidad, examinando, por de pronto, ya su masa, ya su extensión, ya el conjunto de las partes que lo componen; por indagar cuál es su naturaleza y su origen, cuáles son sus relaciones con los otros objetos conocidos; considerarle desde todos los puntos de vista que puedan ilustrarnos sobre todas las generalidades que le conciernen”. De ese modo, el conocimiento científico se establecería, rectificándose y ampliándose; 12 acercándonos a conocer el “plan de la Naturaleza” y sus leyes.

La observación de la gran variedad de especies existentes y su “perfecta” adaptación a las circunstancias en que se desarrollaban le llevó a formular una disyuntiva: o todas las especies se habían creado adaptadas a las diferentes condiciones existentes en la Tierra y estas condiciones no se habían alterado desde esa creación, como era aceptado en su época, o las especies habían evolucionado para adaptarse a los diferentes cambios que habrían experimentado los hábitat en los que se desarrollaron. todo demuestra que el conjunto de las formas vivas no ha podido constituirse al mismo tiempo. Cada uno de los cuerpos vivos ha sufrido cambios más o menos grandes en el estado de sus órganos y en sus relaciones mutuas. En consecuencia, la especie no puede constituir un cuadro rígido formado de una vez para siempre y donde vienen a instalarse los individuos de las generaciones sucesivas. «Lo que se llama especie... sólo tiene una permanencia relativa en su estado, que no puede ser tan antiguo como la naturaleza.»

Jacob citando a Lamarck,Lógica de lo viviente, Cap. 3-El tiempo.

Concepto de evolución Dobzhansky, uno de los fundadores del neodarwinismo, 130 años después de que Lamarck formulara la teoría de la evolución, sin otorgarle el debido reconocimiento, definiría la evolución en estos términos: El estudio científico de la diversidad orgánica y adaptación empieza por la necesidad de descripción y clasificación. Al principio de su existencia como una ciencia, la biología obligadamente se redujo a constituir un sistema racional sobre la variedad aparentemente ilimitada de las formas de vida. En el décimo octavo y décimo noveno siglo, la sistemática y la morfología, dos disciplinas predominantemente descriptivas, dominaron las ciencias biológicas. Pero la descripción es sólo el primer paso a la pregunta científica. Sin embargo, grande puede ser la satisfacción en un investigador la observación y la fijación exacta de los hechos, más pronto o más tarde sintió el deseo de inquirir en las conexiones causales entre los fenómenos observados. La teoría de evolución se levantó en el décimo noveno siglo a través de la generalización y inferencia de un cuerpo predominantemente sistemático y datos de morfología. Construyendo un armazón racional para el pensamiento biológico. La teoría de evolución afirma que:

1.— los seres que ahora viven han descendido de seres diferentes que vivieron en el pasado; 2.— los cambios evolutivos son graduales, tanto que si pudiéramos reunir a todos los organismos que han habitado en la Tierra, reconoceríamos una serie continua de formas. 3.— los cambios han sido predominantemente divergentes, los antepasados de las formas vivientes actuales eran en general menos diferentes de lo que hoy son; 4.— todos estos cambios se han levantado de causas que ahora continúan estando en funcionamiento, y que por consiguiente puede estudiarse experimentalmente. Dobzhansky, Genética y el origen de las especies, 1937 También destacó la sorprendente adaptación de los organismos a su medio: “La adaptación de organismos a sus ambientes es sorprendente. Las estructuras, funciones, y modos de vida de cada especie son por lo menos tolerablemente consonante con las demandas de su ambiente. Cada organismo se ajusta, ocupa y se aprovecha de ciertos hábitats”, atribuyendo a Darwin la observación de esa gran capacidad de los organismos para adaptase al medio y su gran diversidad como respuesta a esa adaptación: "Uno siempre se ha fascinado por la gran diversidad de organismos que viven en el mundo [...] Darwin fue el primero en inferir que esa diversidad orgánica es una contestación de la materia viviente a la diversidad de ambientes en nuestro planeta.13 Lo expuesto por Dobzhansky perfectamente podría servir para sintetizar el concepto de evolución en la teoría de Lamarck: Lamarck defendió que las formas de vida actuales eran las descendientes de otras formas diferentes existentes en el pasado. Se enfrentó al dogma de la Creación y a Cuvier que defendiendo el fijismo, impuso en su época que las formas de vida del pasado diferentes a las actuales, se trataba de formas sin conexión con éstas, formas extintas en los diferentes cataclismos geológicos sufridos en la iTerra. Lamarck formuló que los cambios serían imperceptibles, que precisamente esa característica de la evolución era la que hacía que desde nuestra perspectiva del tiempo antropocéntrica nos fuera imposible apreciar tal evolución. Lamarck ilustró la evolución mediante un diagrama en el que los “infusorios”, las formas más simples, se distanciaban en ramas para acoger la diversidad conocida en su época. Lamarck, más que ningún otro evolucionista, dado los escasos conocimientos paleontológicos de la época, tuvo que fundamentar su teoría en el estudio de la naturaleza tal y como la observó como botánico y como especialista en invertebrados. Fueron estos estudios, y los incipientes conocimientos sobre la historia la Tierra que la geología estaba aportando, lo que le llevó a formular su teoría. Y puso especial énfasis en la sorprendente adaptación de los or ganismos a sus ambientes. A medida que los individuos de una de nuestras especies cambian de situación, de clima, de manera de ser o de hábito, reciben por ello las influencias que cambian poco a poco la consistencia y las proporciones de sus partes, de su forma, sus facultades y hasta su misma organización; de suerte que todo en tales individuos participa, con el tiempo, de las mutaciones experimentadas. En el mismo clima, situaciones y exposiciones muy diferentes hacen por de pronto simplemente a los individuos que se encuentran expuestos a ellas; pero con la sucesión de los tiempos, la continua diferencia de las situaciones de los individuos de quienes hablo, que viven y se reproducen sucesivamente en las mismas condiciones, produce en ellos diferencias que llegan a ser, en cierto modo, esenciales a su ser; de suerte que si se han sucedido los unos a los otros, estos individuos, que pertenecen originariamente a otra especie, se encuentran al fin transformados en una especie nueva distinta de la otra.

Filosofía zoológica, pp. 56-57. Lamarck formuló que los seres vivos evolucionan adaptándose a las condiciones, circunstancias y ambientes en los que se desarrollan, y la diversidad de situaciones a la que pueden estar sometidos habría propiciado la gran diversidad de formas de vida actuales. Aportó como prueba la existencia de fósiles de formas de vida diferentes a las actuales, razonando sobre la imposibilidad de que éstas no fuesen sino formas intermedias entre las actuales y las primigenias. Basando, también, su afirmación en lo observado en la naturaleza: sabemos positivamente en la actualidad que un cambio forzado y sostenido en las zonas de habitación y en los hábitos y la manera de vivir de los animales, operan, después de un tiempo suficiente, una mutación muy notable en los individuos que se encuentran sometidos a ellos.

Filosofía zoológica, p. 64. Estos hechos han sido, posteriormente, sobradamente demostrados.

Sobre la forma en que se evoluciona La Naturaleza habría obrado produciendo las formas más simples (la creencia general en aquella época era que la vida surgía por generación espontánea, siendo Pasteur quien, a mediados del siglo XIX, refutara tal creencia) y la evolución habría actuado complicando sucesivamente la organización de estas formas, diversificándolas y dotándolas de órganos que en principio serían rudimentarios, hasta la complejidad que presentan los organismos en la actualidad. Cada especie “ha recibido de la influencia de las circunstancias en las cuales se ha encontrado, los hábitos que conocemos y las modificaciones en sus partes que nos muestra la observación”.14 La forma en que esto habría sucedido sería “por tanteos y sucesivamente”.15 Resumiéndose su teoría en: las circunstancias crean la necesidad, esa necesidad crea los hábitos, los hábitos producen las modificaciones como resultado del uso o desuso de determinado órgano y los medios de laNaturaleza se encargan de fijar esas modificaciones. Describió esta evolución como consecuencia de seis puntos: 1.- Todos los cuerpos organizados (organismos) de la Tierra han sido producidos por la naturaleza sucesivamente y después de una enorme sucesión de tiempo. 2.- En su marcha constante, la Naturaleza ha comenzado, y recomienza aún todos los días, por formar los cuerpos organizados más simples, y que no forma directamente más que estos. Es decir, que estos primeros bosquejos de organismos son los que se ha designado con el nombre de generaciones espontáneas. 3.- Estando formados los primeros bosquejos del animal y del vegetal han desarrollado poco a poco los órganos y con el tiempo se han diversificado. 4.- La facultad de reproducción inherente en cada organismo ha dado lugar a los diferentes modos de multiplicación y de regeneración de los individuos. Por ello los progresos adquiridos se han conservado. 5.- Con la ayuda de un tiempo suficiente, de las circunstancias, de los cambios surgidos en la Tierra, de los diferentes hábitos que ante nuevas situaciones los organismos han tenido que mantener, surge la diversidad de estos. 6.- Los cambios en su organización y de sus partes, lo que se llama especie, han sido sucesiva e insensiblemente formados. Por lo que la especie no tiene más que una constancia relativa en su estado y no puede ser tan antigua como la Naturaleza.16 Formulando dos leyes, lo que hoy se conoce como “herencia de los caracteres adquiridos”: Así, para llegar a conocer las verdaderas causas de tantas formas diversas y de tantos hábitos diferentes como nos ofrecen los animales, es preciso considerar que las circunstancias infinitamente diversificadas, en las cuales se han encontrado los seres de cada raza, han producido para cada uno de ellos necesidades nuevas y cambios en sus hábitos necesariamente. Reconocida esta verdad, que nadie podrá negar, será fácil percibir cómo las nuevas necesidades han podido ser satisfechas y los nuevos hábitos adquiridos, si se presta alguna atención a las dos siguientes leyes de la Naturaleza, que siempre ha comprobado la observación: Primera ley: En todo animal que no ha traspasado el término de sus desarrollos, el uso frecuente y sostenido de un órgano cualquiera lo fortifica poco a poco, dándole una potencia proporcional a la duración de este uso, mientras que el desuso constante de tal ór gano lo debilita y hasta le hace desaparecer. Segunda ley: Todo lo que la Naturaleza hizo adquirir o perder a los individuos por la influencia de las circunstancias en que su raza se ha encontrado colocada durante largo tiempo, y consecuentemente por la influencia del empleo predominante de tal órgano, o por la de su desuso, la Naturaleza lo conserva por la generación en los nuevos individuos, con tal de que los cambios adquiridos sean comunes a los dos sexos, o a los que han producido estos nuevos individuos.

Lamarck, Filosofía zoológica, pp. 175-176.

Para Lamarck, la adaptación de los organismos al ambiente en el que viven es fundamental para su evolución."Esta interferencia, que se produce constantemente entre las facultades mismas de lo viviente y las circunstancias exteriores, deriva de lo que Lamarck considera una de las propiedades más indiscutibles de los seres: la adaptación a sus condiciones de vida, la concordancia entre el organismo y su entorno".17 Lamarck entiende que ese ambiente comprende todas las circunstancias a las que los organismos se encuentren expuestos. Para que un ser viva, para que respire y se alimente, es necesario que se establezca un acuerdo entre los órganos encargados de estas funciones y las condiciones exteriores. Es necesario que la organización reaccione ante lo que Lamarck llama «las circunstancias». Por circunstancias se entienden los hábitats de la tierra o del agua, los suelos, los climas y las otras formas vivientes que rodean a los organismos, en suma toda «la diversidad de los medios en los que habitan».

Jacob, Lógica de lo viviente, Cap. 3-El tiempo. El orden general de la naturaleza se mantendría, “la multiplicación de las pequeñas especies de animales es tan considerable, que ellas harían el globo inhabitable para las demás, si la Naturaleza no hubiese opuesto un término a tal multiplicación. Pero como sirven de presa a una multitud de otros animales, y como la duración de su vida es muy limitada, su cantidad se mantiene siempre en 18 justas proporciones para la conservación de sus razas […] y ello conserva a su respecto la especie de equilibrio que debe existir”.

Ciencia y religión Sin entrar en valorar las posibilidades que Lamarck hubiese tenido en su época de protagonizar con éxito un enfrentamiento directo con la Iglesia y la creencia en un ser todopoderoso, Lamarck no cuestionó la existencia de Dios, ni que todo fuese su “Obra”; pero encontró una vía para poder exponer su pensamiento evolucionista, procurando evitar ese enfrentamiento. Nada existe, en efecto, sino por su voluntad; pero ¿podemos asignarle reglas en la ejecución de ella y fijar el modo que ha seguido a este respecto? ¿Su poder infinito no pudo crear un orden de cosas que diese sucesivamente la existencia a todo lo que vemos como a todo lo que existe y no conocemos? Ciertamente, cualquiera que haya sido su voluntad, la inmensidad de su poder es siempre el mismo, y de cualquier manera que se haya ejecutado esta voluntad suprema, nada ha podido disminuir su grandeza. Respetando, pues, los decretos de esta sabiduría infinita, yo me circunscribo a encerrarme en los límites de un simple observador de la Naturaleza. En esto caso, si llego a vislumbrar alguna cosa en la marcha que ella ha seguido para operar sus producciones, diré, sin temor de equivocarme, que plugo a su Autor que la Naturaleza tenga esta facultad y este poder.

Filosofía zoológica, pp. 52-52 Lamarck, sin cuestionar la existencia de Dios, delimitó las creencias religiosas personales, separándolas de lo que él consideró sería espacio reservado a la ciencia, afirmando poder probar que “la Naturaleza posee los medios y las facultades que le son necesarios 19 para producir por sí misma lo que admiramos en ella”.

La naturaleza, al no ser una mente, ni siquiera un ser, sino un orden de cosas que constituyen un poder en todas partes sujeto a las leyes. La naturaleza, digo, por tanto, no es el mismo DIOS. Es el sublime producto de su voluntad omnipotente, y para nosotros, es entre los objetos creados el mayor y más admirable. Así, la voluntad de DIOS se expresa en todas partes por la ejecución de las leyes de la naturaleza, ya que estas leyes vienen de él.

Histoire naturelle des animaux sans vertèbres, pp. 325

La complejidad creciente de los organismos Trataré de demostrar, citando en apoyo de ello hechos conocidos en todas partes, que al componer y complicar cada vez más la organización animal, la Naturaleza ha creado progresivamente los diferentes órganos especiales, así como las facultades de quelos animales disfrutan.

Filosofía Zoológica, introducción. Un problema para la correcta interpretación del lamarckismo consistiría en que los términos utilizados por Lamarck pudieran tener un significado diferente en su época al que podríamos asignarle en la actualidad. Así pasa con el término «filosofía», así podría pasar con otros muchos términos usados por él y éste podría ser el caso de término «perfección», profusamente utilizado por Lamarck. Habla de «animales menos perfectos», de «perfeccionamiento de órganos y especies»,... que en la naturaleza podemos observar «la organización animal más simple hasta la del ser humano, que es la más compleja y la más perfecta». Desde la formulación de la teoría de la evolución por Lamarck, el término «perfección» ha sido el principal caballo de batalla de las posiciones creacionistas, argumentando que la perfección de la naturaleza únicamente podría se obra de un ser superior.20 Hoy se admite que la evolución no es un proceso que tenga como fin la perfección, también se admite que el término «perfección» es inadecuado para describir a organismos o tratar temas evolutivos. No se considera a la especie humana la más «perfecta». Probablemente el término «complejo» sea el más adecuado para referirnos a las diferencias entre organismos, podríamos hablar de organismos simples, o menos complejos, y organismos complejos.21 «Si bien es cierto que todos los cuerpos vivos constituyen productos de la naturaleza, no puede negarse que ésta los ha producido de manera sucesiva y no todos a la vez en un tiempo sin duración; pero si la naturaleza los ha formado sucesivamente, cabe pensar que ha comenzado por los más simples, dejando para el final las organizaciones más complejas.» En consecuencia, menos perfeccionado significa también menos complejo y anterior. He aquí la relación que permite la transformación de la serie de organizaciones en el espacio en una serie isomorfa de transformaciones en el tiempo. Recorrer la cadena continua de los seres, del más simple al más complejo, equivale exactamente a seguir la marcha de la naturaleza a través del tiempo, a reconstruir la sucesión de transformaciones que ha originado las distintas formas de vida. En la escala de los seres, las formas más rudimentarias pasan entonces a ocupar un lugar privilegiado, pues en ellas dio comienzo la organización. En consecuencia, es en los organismos más simples, en los «animales sin vértebras», donde pueden discernirse con mayor claridad las variaciones y analizarse más fácilmente las exigencias de la organización.

Jacob citando a Lamarck,Lógica de lo viviente, Cap. 3-El tiempo. Lamarck utiliza el término «perfecto» en contraposición a «simple» y en sus escritos puede leerse: «De ello se sigue que si una de las extremidades del orden presenta los cuerpos vivientes más perfectos, aquellos cuya organización es más compuesta, la otra extremidad del mismo orden deberá necesariamente ofrecer los cuerpos vivientes más imperfectos, es decir, aquellos cuya organización es más simple». En Ayala(1994) puede leerse: «Según Lamarck, los organismos evolucionan necesariamente a través del tiempo en un proceso que pasa de manera continua de formas más simples a otras más complejas»22 En todo caso, Lamarck utiliza el término perfecto como un «comodín» para referirse a las complejas especies actuales en contraposición a las primigenias que él sostuvo surgieron en un estado de simpleza o “imperfección”, refiriéndose a «los más imperfectos de los animales», para referirse a los más simples; y los «más perfeccionados», para referirse a los más complejos y actuales. Esta abundante utilización del término «perfección» ha llevado a que recurrentemente se considere el lamarckismo una teoría finalista; esto es, una teoría según la cual la evolución respondería a un «fin» preestablecido. Si interpretamos la observada por Lamarck, tendencia de los organismos a aumentar su complejidad y «perfección», no como el intento de sistematizar un hecho supuestamente constatado, sino como un destino final de la evolución, deberemos considerar el lamarckismo una teoría finalista. No obstante, ese supuesto finalismo, nunca enunciado por Lamarck, se llevaría mal con la que él propone causa de la evolución según la cual la Naturaleza habría obrado por «tanteos y sucesivamente».23

cuando después vemos que, desde que el animal más imperfecto, que no tiene ningún órgano particular, y consecuentemente ninguna otra facultad que aquellas peculiares de la vida, hasta el animal más perfecto y más rico en facultades, la organización se complica gradualmente, de tal modo que todos los órganos, incluso los más importantes, nacen los unos después de los otros en la extensión de la escala animal, perfeccionándose en seguida sucesivamente por las modificaciones que sufren, y que los acomodan al estado de organización de que forman parte.

Filosofía zoológica, p. 75. Lamarck, para recorrer la evolución de la vida efectúa un estudio inverso al que hoy es costumbre.24 Hoy se estudia la Evolución desde su origen hasta nuestros días. En tiempos de Llamarck, en los que no se reconocía la evolución de la vida, habría sido imposible realizar el estudio desde su origen (origen que no se reconocía como tal). Lamarck parte del actual estado de las especies y organismos, y desde ese estado postula que según vayamos descendiendo hasta el origen de estas especies y organismos se observará una degradación en sus órganos y sus facultades hasta su desaparición, momento que supondría el origen de estos órganos y facultades: En seguida observamos que, salvo las anomalías, cuya causa determinaremos, reina, de un extremo a otro de esta cadena, una degradación sorprendente en la organización de los animales que la componen y una disminución proporcionada en el número de las facultades de estos animales. De suerte que si en una de las extremidades de la cadena de que se trata, se encuentran los más perfectos de los seres, se ve necesariamente en la otra extremidad los más simples y los más imperfectos. Por último, uno se convence por este examen de que todos los órganos especiales se simplifican progresivamente de clase en clase, se alteran, se empobrecen y se atenúan poco a poco, hasta que pierden su concentración local, si ellos resultan de primera importancia, y que acaban por aniquilarse completa y definitivamente antes de haber alcanzado la extremidad opuesta de la cadena. […] La progresión en la composición de la organización sufre aquí y allá, en la serie general de los seres, anomalías operadas por la influencia de las circunstancias de habitación [hábitat] y por la de sus hábitos adquiridos.

Filosofía zoológica, pp. 106-107. «Es porque Lamarck sigue viendo una serie lineal en el mundo vivo por lo que puede ver en él el resultado de una serie cronológica de eventos. Es porque la naturaleza no da saltos por lo que las relaciones de vecindad pueden conectarse con las de descendencia. “La naturaleza sigue un orden fácil de reconocer, porque es exactamente el inverso del que observamos al recorrer los seres desde el más perfecto hasta el más simple”».26 Lamarck tuvo que enfrentarse, no solo al fijismo religioso, sino también al fijismo científico. Cuvier, desde su posición de autoridad como gran anatomista, formuló que la vida estaba constituida por grandes grupos perfectamente diferenciados, sin posibilidad de que desde un grupo se pudiese llegar a otro.27 Lamarck consideró fundamental "conectar" todas las especies entre sí. Debía convencer a sus contemporáneos de la evolución de la vida auxiliado únicamente de la observación de las especies entonces conocidas y muy escasos datos paleontológicos. Desconociéndose todo sobre la herencia biológica y en ausencia de argumentos empíricos, tuvo que articular reglas que refutaran el figismo de Cuvier. Debía «conectar» todas las especies sin excepción, o justificar su falta de conexión. La constatación de una especie que no pudiera conectarse con el resto cuestionaría el hecho de la evolución. De ahí su obsesión en demostrar la gradación continua entre todas las especies y, esa gradación, trasladarla a su evolución en el tiempo. No obstante, sobre todo en el reino animal, muchas de estas divisiones parecen realmente formadas por la propia Naturaleza, y es indudable que durante largo tiempo costará mucho trabajo el creer que los mamíferos, que las aves, no resulten clases bien aisladas constituidas por la Naturaleza. Pues esto no es más que una ilusión y a la vez un resultado de los límites de nuestros conocimientos acerca de los animales que existen o han existido, porque a medida que avanzan nuestros conocimientos de observación, más

pruebas adquirimos de que los límites de las clases, hasta las de aquellas que parecen más aisladas, resultan borrados por nuevos descubrimientos. Ya los ornitorincos y los equídeos parecen indicar la existencia de animales intermedios entre las aves y los mamíferos.

Filosofía zoológica, p. 32. Lamarck postuló que la vida experimenta en su evolución un incremento en su complejidad y que esta complejidad está condicionada por las diferentes circunstancias a las que los organismos han estado expuestos.28 lo correcto o incorrecto de este postulado de Lamarck dependerá de que aceptemos o no que la evolución de los organismos haya tendido a la complejidad, que pueda inferirse que esa tendencia se mantiene para explicar una probable evolución de la vida en un Aplicando la metodología de Lamarck, descubiertos diferentes restos de nuestros ancestros, si los ordenamos atendiendo a la «escala gradual» por él postulada, debería, como así ocurre, proporcionarnos el orden en el que han evolucionado, reconociéndose en ellos sus «conexiones».25 (Representación esquemática ideal).

futuro. Gould (2002), para obviar en el incremento de la complejidad de los organismos una tendencia innata de éstos, consecuencia de su voluntad, que él considera se desprendería del lamarckismo,29 lo que significaría en cierto modo un finalismo, confiere una propiedad meramente mecánica a esa tendencia, visualizándola en la metáfora del borracho y el bordillo de la acera: un borracho iría dando tumbos de un lado a otro de la acera hasta sobrepasar el bordillo y alcanzar la calzada. Una vez ocurrido esto, al borracho le resultaría difícil volver a retomar la acera. Los organismos irían «dando tumbos» adquiriendo diferentes grados de complejidad (bajando bordillos) que posteriormente les sería difícil volver a subir. Esta metáfora hermana la constatada tendencia de la vida a la complejidad con una

30 visión azarosa darwinista de su evolución. Esa tendencia no tendría por qué suponer ningún tipo de finalismo.

Si ciertos tipos de organizaciones se asemejan, esto ya no sucede en virtud de una pretendida armonía preestablecida más allá del conocimiento humano, sino debido al hecho de que han atravesado una o más etapas comunes en el proceso de transformación. Para clasificar los seres naturales ya no basta, por lo tanto, con reconocer las similitudes en el espacio; es necesario establecer cuál ha sido la sucesión en el tiempo.

Jacob citando a Lamarck,Lógica de lo viviente. Desde el Lamarckismo, una creciente complejidad de la vida podría entenderse como una consecuencia mecánica de la adaptación de los organismos a las «circunstancias», no como algún tipo de finalismo.31 El símil del desarrollo de sistemas y programas informáticos puede servir para explicar cómo una tendencia a la complejidad puede ser meramente mecánica. Existe una tendencia de estos sistemas y programas a «crecer»; parece inevitable que las versiones que remplazan a otras anteriores se compongan de un código más extenso. Sin embargo, no existe en estos sistemas la finalidad de crecer. En cierto modo, los programas se adaptan constantemente a las nuevas «circunstancias» y su crecimiento en complejidad no es un fin, ni siquiera es deseable, pero parece inevitable. Hæckel entendió así el pensamiento de Lamarck: Todos los fenómenos vitales [en su teoría] son debidos a causas mecánicas, ya físicas, ya químicas, que tienen su razón de ser en la constitución de la materia orgánica. […] La obra de Lamarck es verdaderamente, plenamente y estrictamente monística, es decir , mecánica.

Ernesto Hæckel, Prólogo de Filosofía zoológica. Aunque autores han querido ver en el pensamiento de Lamarck una especie de vitalismo que sería el que propiciaría ese aumento de la complejidad: «Esa fuerza innata postulada por él no ha sido validada por la ciencia experimental y no constituye una contribución científica empírica».32

La herencia de los caracteres adquiridos Superficialmente, las generaciones sucesivas de los cuerpos de insectos-palo parecen constituir un linaje de réplicas. Pero si se modifica experimentalmente a un miembro de dicho linaje (por ejemplo, quitándole una pata), el cambio no pasa a la siguiente generación.

Dawkins, El gen egoísta. Estrictamente no puede hablarse de «la herencia de los caracteres adquiridos» ya que en aquel tiempo se desconocían los mecanismos de la herencia biológica, y porque el postulado de Lamarck, exactamente, fue que las transformaciones que operan las diferentes circunstancias a las que están sometidos los organismos, los medios de la Naturaleza se encarga de fijarlas en el grupo que se encuentra sometido a estas circunstancias, con tal de que se mantengan en el tiempo. En ningún caso puede considerarse lamarckismo que una característica contraída en vida por un organismo, pase directamente a su descendiente. Es obvio que si se circuncida a alguien, esto no significará que sus descendientes nazcan circuncidados. Lamarck habló de ciertos fluidos que se encargarían de fijar esas adaptaciones,33 lo que permite pensar que suponía en los organismos la capacidad de fijar evolutivamente las soluciones encontradas a los problemas planteados por las circunstancias. «Todo cambio de un ser que lo transforma en otro ser, implica […] satisfacer una necesidad concreta, una mayor capacidad de respuesta a las exigencias vitales».34 Quizá, más correcto sería decir que si durante generaciones todos o la mayoría de los individuos de un grupo se viesen sometidos a un traumatismo como la amputación de un miembro, con el transcurrir de su evolución, tal circunstancia sería menos traumática y las soluciones encontradas para sobrevivir en tales circunstancias, con el paso del tiempo, podrían encontrase presentes en el pool genético del grupo. O, también, si hubiesen logrado eludir la amputación, estandarizándose una estrategia, igualmente se habría fijado. Hoy en día esto no es aceptado; pero, para resolver casos parecidos a éste, en los que queda demostrado una respuesta de la especie al ambiente, se acepta como 35 posible solución el “efecto Baldwin”, mediante el cual, la selección natural fijaría esas respuestas adaptativas.

«Tomemos dos ejemplos chocantes: el alcohol y la leche. La habilidad para digerir grandes cantidades de alcohol depende en cierta medida de la excesiva producción de unas enzimas llamadas alcohol deshidrogenasas llevada a cabo por un conjunto de genes del cromosoma 4».36 Existe una relativa tolerancia al alcohol en los individuos de las sociedades occidentales que debe suponerse producto de su contacto con el alcohol y que no se da en los nativos de América del norte y de Australia. Desde el lamarckismo, la explicación sería que siendo el alcohol una circunstancia a la que han estado sometidos los organismos, con el tiempo, estos organismos habrían adquirido una mayor tolerancia. los organismos se habrían habituado al consumo de alcohol y esta característica, con el tiempo iría fijándose en el grupo de individuos que ha estado en contacto con el alcohol. La explicación darviniana sería que en el transcurso de los años que hemos estado separados genéticamente (entre 35.000 – 15.000 años),37 aproximadamente 800 generaciones, los individuos con mayor tolerancia al alcohol habrían adquirido la suficiente ventaja biológica como para imponer en el pool genético esa característica de su genoma. Cabe también suponer, dado que en occidente la tolerancia al alcohol puede representarse mediante una campana de Gauss, que se han producido sucesivos errores genéticos en el sentido de aumentar la tolerancia al alcohol que restaurase la variabilidad inicial, desplazando la campana a posiciones de mayor tolerancia. Como desde el darwinismo no se puede suponer tal direccionalidad, el "efecto Baldwin" vendría a auxiliar a la selección natural para salvar este escollo, la selección natural habría favorecido los hábitos adquiridos. Algo similar ocurre con un gen del cromosoma 1, el gen de la lactasa. Esta enzima es necesaria para la digestión de la lactosa, un azúcar que abunda en la leche. Cuando nacemos todos tenemos este gen activado en nuestro sistema digestivo, pero en gran parte de los mamíferos —y por lo tanto en gran parte de las personas— se desactiva durante la infancia. […] Sin embargo, de vez en cuando el gen que controla la desactivación del gen de la lactasa sufre una mutación y la producción de lactasa no se detiene al final de la infancia. Esta mutación permite a su portador beber y digerir la leche a lo largo de toda su vida. Los hechos indican que, en primer lugar, tales personas emprendieron una vida de pastoreo y posteriormente desarrollaron una capacidad para digerir la leche en respuesta a ella, no que emprendieran una vida de pastoreo porque estuvieran genéticamente dotadas para ello.38 Este es un descubrimiento significativo, un ejemplo de cambio cultural que conduce a un cambio evolutivo y biológico. Se pueden inducir cambios en los genes voluntaria y conscientemente. Al emprender el estilo de vida razonable de los pastores de ganado

lechero, los seres humanos crearon sus propias fuerzas evolutivas. Suena casi como la gran herejía lamarckiana que confundió el estudio de la evolución durante tanto tiempo: la idea de que un herrero que a lo largo de su vida ha adquirido unos brazos musculosos tenía hijos con brazos musculosos. No es eso, pero es un ejemplo de cómo la acción voluntaria y consciente puede modificar las fuerzas evolutivas sobre una especie, concretamente sobre nuestra especie.

Matt Ridley, Genoma, pp.220-221. Lamarck formuló, como mecanismo por el que las especies se adaptaban a las circunstancias, la transferencia de las modificaciones experimentadas por los organismos en vida al conjunto de la especie mediante un proceso lento y sostenido. Sostuvo que si una «raza» (esto es, un grupo de organismos) estaba sometida a las mismas condiciones ambientales y estas condiciones se prolongaran durante mucho tiempo, se transformarían adaptándose a ese ambiente. Como mecanismo, propuso que las trasformaciones que los organismos experimentamos en vida sometidos a los diferentes ambientes, con el tiempo se fijarían en su descendencia, lo que hoy conocemos como transferencia horizontal. Advirtió que ese proceso es un proceso tan lento que desde nuestra capacidad de observación pasaría inadvertido. Según las dos leyes que formuló, los cambios se producen no en el individuo sino en la población (no en uno o varios individuos, sino en el conjunto de individuos del grupo) y no son cambios inmediatos sino que se fijarían a lo largo de un prolongado proceso.39 Las variaciones en las circunstancias para los seres vivientes, y sobre todo para los animales, producen cambios en sus necesidades, en sus hábitos y en el modo de existir, y si estos cambios dan lugar a modificaciones o desarrollos en los órganos o en la forma de sus partes, se debe inducir que insensiblemente todo cuerpo viviente cualquiera debe variar en sus formas o sus caracteres exteriores, aunque semejantes variaciones no llegasen a ser sensibles más que después de un tiempo considerable. […] En cada lugar donde los seres pueden habitar, las circunstancias que establecen en él un orden de cosas permanecen largo tiempo siendo las mismas y no cambian en realidad más que con una lentitud tan grande, que el hombre no puede advertirlas directamente. Está obligado a consultar los monumentos para reconocer que en cada uno de aquellos lugares el orden de cosas establecido no ha sido siempre el mismo. Las razas de animales que viven en cada uno de ellos deben conservar en él largo tiempo sus hábitos. De aquí para nosotros la aparente constancia de las razas que llamamos especies, constancia que hizo nacer en nuestro pensamiento la idea de que las razas son tan antiguas como la Naturaleza.

Lamarck, Filosofía zoológica, pp. 69, 174. Lamarck, para explicar esa consolidación de las modificaciones que experimentaban los ganismos, or habló de una especie de “fluido” presente en ellos. No existiendo en aquellos momentos ningún tipo de conocimiento sobre los mecanismos de la herencia, sobre genética; esta parte de la teoría carece de interés; y podría decirse que quedó inexplicado como podría transferirse a la herencia tales caracteres adquiridos. El problema para aceptar la herencia de los caracteres adquiridos sigue siendo el mismo, ofreciendo aún más dificultades desde la genética de Mendel y desde el actual paradigma genético, donde un carácter sería la expresión de un gen o un conjunto de genes. Esa transferencia difusa que operaría durante largo tiempo, no se contempla. La herencia de los caracteres de Lamarck supondría para las especies la respuesta que con el tiempo se daría en la Amazonía como consecuencia de la combustión de miles y miles de automóviles funcionando en Europa, simultáneamente y de forma sostenida en el tiempo. Estos automóviles, por sí solos no modificarían sustancialmente las condiciones en la Amazonía, pero el efecto conjunto y sostenido sí se haría sentir en ella. Desde nuestro actual paradigma genético esto es imposible, no se contempla esta acción difusa. Habría que recurrir a explicaciones holísticas como la esbozada por Casilda Rodrigáñez basándose en la Simbiogénesis postulada por Lynn Margulis y que existiese la posibilidad de que en esas interacciones participaran los mecanismos de la herencia, posibilidad no aceptada en la actualidad desde el estamento académico:

El proceso evolutivo que dio lugar a los organismos vivos complejos se ha llamado simbiogénesis.40 Una simbiosis quiere decir que dos formas de vida autónomas, con su capacidad de autorregulación y su ecosistema propio, se unen promoviendo una autorregulación conjunta y un ecosistema común en el que ambas quedan englobadas, manteniendo cada cual su propio funcionamiento autorregulador. Esto explica que una célula no deja de ser una célula porque forme parte de un tejido. Es decir, la simbiogénesis explica que en un organismo hipercomplejo cada sistema que lo forma tiene una capacidad de autorregulación propia, y por eso se dice que es un ‘sistema cerrado’ en su organización, y al mismo tiempo “abierto” en su relación ‘informacional’ con los otros sistemas. Tan importante es que se mantenga el cierre organizativo de un sistema (su autorregulación), como su apertura informacional y relación con los demás (autorregulación común). Los sistemas orgánicos están continuamente enviándose señales entre sí y en todos los sentidos y direcciones, y cada vez se encuentran más enzimas, fijadores, moduladores, etc. que forman parte de los procesos, así como los ‘receptores’ de las señales…

Casilda Rodrigáñez, Sobre la función orgánica y social de la sexualidad. No siendo aceptable la simplificación de la herencia de los caracteres en «el brazo del herrero», no se corresponde con el mecanismo 41 formulado por Lamarck; tampoco este mecanismo puede considerarse viable desde el actual paradigma de genética. la

Adaptación al medio La adaptación de las especies al entorno es fundamental en su evolución. Si bien desde el darwinismo también se acepta la estrecha relación entre especies y ambiente, una diferencia sustancial entre lamarckismo y darwinismo es la forma en que los organismos se adaptan a esas diferentes circunstancias. En el lamarckismo, primero son los cambios en los hábitos forzados por las circunstancias y, posteriormente, la respuesta a esas nuevas necesidades conllevaría una lenta adaptación de los organismos que, con el paso del tiempo, quedaría fijada genéticamente. El que un grupo de animales o plantas se viesen obligados a cambiar sus hábitos, forzaría cambios orgánicos para adaptarse a las nuevas circunstancias. Por el contrario, en el darwinismo, y concretamente en el neodarwinismo, es un error genético anterior lo que posibilita la adaptación a las nuevas circunstancias; posteriormente, enfrentado el grupo a esas nuevas circunstancias, la descendencia del individuo portador de la mutación adecuada, proliferaría en detrimento del resto del grupo (el darwinismo se basa en ese capacidad diferencial de reproducirse de ese individuo portador de la mutación). El darwinismo implica que los más aptos desplazan al resto del grupo y el lamarckismo implicaría la evolución conjunta del grupo que paulatinamente iría adaptándose a las nuevas circunstancias. No son los órganos, es decir, la naturaleza y la forma de las partes del cuerpo de un animal, los que han dado lugar a sus hábitos y a sus facultades particulares, sino que por el contrario, sus hábitos, su manera de vivir y las circunstancias en las cuales se han encontrado los individuos de que proviene, son los que con el tiempo han constituido la forma de su cuerpo, el número y estado de un órgano, y las facultades, en suma, de que goza. […] Se sabe que este animal [la jirafa], el más alto de los mamíferos, vive en el interior del África, donde la región árida y sin praderas le obliga á ramonear los árboles. De este hábito, sostenido después de mucho tiempo, en todos los individuos de su raza, resultó que sus patas delanteras se han vuelto más largas que las de atrás, y que su cuello se ha alargado de tal manera, que el animal, sin alzarse sobre las patas traseras, levanta su cabeza y alcanza con ella a seis metros de altura.

Filosofía zoológica, pp. 187-188.

La culebra Thamnophis elegans se desarrolla en dos diferentes hábitats, estando los diferentes grupos de tal modo adaptados a sus hábitats que cada grupo muestra preferencias alimenticias innatas coincidentes con las presas que se encuentran en esos diferentes hábitats. Uno de los grupos se alimenta habitualmente de babosas. En experimentos con ejemplares jóvenes de ambos grupos, sin que ninguno de ellos hubiese entrado en contacto con babosas, mediante algodones impregnados con aroma de esas babosas, quedó demostrado que las culebras del grupo que se alimentaba con babosas habían adquirido una conducta específica, solo estos ejemplares mostraron interés por los algodones.42 La explicación Lamarckiana es que al haber evolucionado estas culebras en un hábitat con diferentes recursos, habrían aprendido a explotar esos diferentes recursos y con el paso del tiempo este aprendizaje se habría fijado en el genoma del grupo. La explicación darviniana sería que un error genético habría posibilitado a las culebras explotar ese nuevo recurso, y la descendencia del individuo que sufrió ese error, con el tiempo, se habría impuesto sobre el resto. Este postulado de Lamarck, según el cual, los organismos nos adaptaríamos al entorno, parece ineludible incluso desde el darwinismo. El darwinismo, según el cual, primero serían los cambios genéticos y posteriormente la ocupación de nuevos espacios o la adquisición de nuevos hábitos, se ve superado por diversos aspectos de la evolución. Así, desde el darwinismo se ha llegado a aceptar el postulado lamarckista, adaptándolo a su paradigma seleccionista. Para ello, se considera plausible el conocido como 43 «efecto Baldwin», un efecto que simularía la herencia de los caracteres lamarckiana.

En principio, el efecto Baldwin explicaría como el aprendizaje llevaría a fijar genéticamente lo aprendido mediante un proceso de selección natural. Se admite que el aprendizaje puede llegar a fijarse en la herencia, pero sería mediante un error genético y, posteriormente, la descendencia de ese individuo impondría ese error adaptativo en el grupo. Se acepta que la ventaja de no tener que aprender algo y nacer con ese conocimiento ya aprendido, adquirido mediante un error genético, es suficiente ventaja para que los descendientes de este individuo desplacen al resto del grupo y lo que hasta entonces se adquiría por aprendizaje, se habría fijado genéticamente. Este efecto explicaría desde el darwinismo los demostrados casos en los que comportamientos, en principio aprendidos, pasasen a la herencia.44 No obstante, como existirían otros casos en los que el orden de sucesos postulado por el darwinismo son difíciles de modelar, el efecto Baldwin se ha extendido a otros aspectos de la evolución. Así, por ejemplo, para explicar las callosidades presentes en los individuos de numerosas especies se recurre al efecto Baldwin. Las líneas de las palmas de nuestras manos, y que aparentan ser pliegues producto de su movimiento, no pueden explicase mediante la prelación de hechos darviniana, no puede considerarse en esas líneas un efecto que produzca una ventaja reproductiva al portador que mediante un error genético las hubiese adquirido. Así habría que suponer, como en el caso de las callosidades, que fue primero el uso de las manos y después esas marcas. Desde el darwinismo, auxiliado por el efecto Baldwin, esas líneas habrían sido posteriores al uso de las manos, producidas por errores genéticos que vendrían a facilitar su movilidad y por consiguiente, sus portadores adquirieron la suficiente ventaja biológica como para imponer estos genes en el pool genético del grupo.45 El lamarckismo ofrece una única explicación para todos estos fenómenos: desde el cuello de la jirafa, pasando por los cambios en su sistema vascular, la fortaleza de su corazón, su propia estructura,... cambios sin los que sería imposible adquirir un largo cuello, o el rabo, su forma y su tamaño, o aquella parte de su comportamiento que estuviera fijada genéticamente,... todo sería producto de la adaptación paulatina de los organismos a los diferentes ambientes. En nuestro caso, las líneas de expresión, las líneas de la palma de las manos,47 en general todo en nosotros, según la teoría de Lamarck, sería testimonio del "uso" que le hemos dado a nuestro cuerpo a lo largo de nuestra historia evolutiva.

Gradualismo y lamarckismo

La jirafa es prisionera de su historia evolutiva. Su morfología, según Lamarck, sería testimonio de esa historia. Descendiente de un gran antílope, hereda la conformación de sus extremidades, comprometiendo su evolución en altura. Sin un potente y especializado sistema de bombeo del riego sanguíneo no habría podido alcanzar sus actuales desarrollos.46

Darwin llegó a decir que la validez de su teoría sobre la selección natural dependía de que los cambios fuesen graduales.48 Este hecho se entiende puesto que para el darwinismo estos cambios son aleatorios. Desde el darwinismo, la variabilidad sobre la que actuaría la selección natural debe generarse por pequeños cambios, únicos verosímiles si son considerados cambios aleatorios. «Goldschmidt (1878-1958) publicó en 1940 un libro, titulado The Material Basis of Evolution, en el que ponía de relieve que las numerosas variaciones pequeñas de Darwin planteaban inmensas dificultades. En primer lugar, existe una tendencia a volver a una población promedio, aunque hayan aparecido mutaciones. En segundo lugar, en todos los experimentos de selección, nos encontramos con la gran dificultad de corregir cambios más allá de ciertos límites definidos: los intentos de ir más allá llevan casi invariablemente a la esterilidad y la extinción».49 No obstante esas dificultades, las dificultades planteadas por los «monstruos esperanzados» postulados por Goldschmidt50 son aún mayores: la posibilidad de que reordenaciones o cambios complejos y aleatorios en el ya complejo ADN sean cambios viables para los organismos, es despreciable. Tales cambios podrían explicar un acontecimiento único e insólito, pero no un proceso guiado por acontecimientos de este tipo; motivo por el que tal teoría fue desechada, incluso ridiculizada. Así, el gradualismo para el darwinismo es un requisito indispensable y la apreciación de Darwin puede considerarse vigente. La resistencia desde el neodarwinismo a aceptar elequilibrio puntuado sería la constatación de su vigencia. Lamarck, para describir el modo en el que se habían formado las especies, postuló «que con la ayuda de un tiempo suficiente, de las circunstancias que han sido necesariamente favorables, de los cambios que todos los puntos del globo han sufrido en su estado; en una palabra, del poder que tienen las nuevas situaciones y lo nuevos hábitos para modificar los órganos de los cuerpos dotados de vida, todos los que existen en la actualidad fueron insensiblemente formados tal como los vemos». Y también, que el que «sigan un orden semejante de cosas, los cuerpos vivientes, experimentando cambios más ó menos grandes en el estado de su organización y de sus partes» demostraría que «lo que se llama especie entre ellos ha sido sucesiva e insensiblemente así formada, no teniendo, por lo 51 De modo que para Lamarck el tanto, más que una constancia relativa en su estado, y no puede ser tan antigua como la Naturaleza».

gradualismo es una observación de cómo habría trascurrido la evolución de la vida y su constatación serviría para refutar el fijismo de las especies.52 Para Lamarck, el gradualismo es un hecho constatado en la Naturaleza, desde nuestra visión antropocéntrica la evolución pasaría inadvertida, produciéndose los cambios cuando los organismos se ven sometidos a nuevas circunstancias, siendo esas circunstancias las que determinarían el ritmo y la característica de estos cambios. Entre las consideraciones que interesan a la filosofía zoológica, una de las más importantes es aquella que concierne a la degradación y a la simplificación que se observa en la organización de los animales, recorriendo de un extremo a otro la cadena de los seres, desde los más perfectos hasta los que resultan más simplemente organizados. Pues se trata de saber si este hecho puede ser realmente comprobado. En tal caso nos aclarará mucho respecto del plan que ha seguido la Naturaleza, poniéndonos sobre el camino de descubrir muchas de sus leyes que importa conocer .

Filosofía zoológica, p 105. La degradación de que hablo no es siempre matizada ni regular en su progresión. Con frecuencia tal órgano falta o cambia súbitamente, y en sus cambios adquiere algunas veces formas singulares que no se ligan con ninguna otra por grados perceptibles. […] Si la causa que tiende sin cesar a componer la organización fuese la única que tuviera influencia sobre la forma y los órganos de los animales, la composición creciente de la organización estaría en progresión muy regular por todas partes. Pero no hay nada de esto; la Naturaleza se encuentra obligada a someter sus operaciones a las influencias de las circunstancias que obran sobre ellas, y en todas partes estas circunstancias hacen variar los productos. He aquí la causa particular que ocasiona acá y allá, en el curso de la degradación que vamos a comprobar, las desviaciones muchas veces insólitas que nos ofrecen en su progresión.

Filosofía zoologica, p 106.

El lamarckismo, al no fundamentar la novedad biológica en cambios aleatorios, no requiere un estricto gradualismo.

Los organismos, agentes de su propia evolución Admitir que los organismos propicien su propia evolución no es intuitivo. Si bien podríamos asumir esa capacidad en los animales superiores, encontramos dificultades en admitir parecidas capacidades en organismos como amebas o bacterias. Se entiende esa capacidad como producto de la voluntad de los organismos.53 Asociada «la voluntad» al sistema nervioso, la pregunta sería ¿cómo, entonces, habría surgido el sistema nervioso? Los organismos carentes de ese sistema nervioso quedarían fuera de una posible evolución lamarckiana.54 55 Son muchos los historiadores del evolucionismo que han visto como causa de la evolución postulada por lamarck, la «voluntad» de los organismos. Para explicar el lamarckismo se insiste en esa «voluntad» como fuerza que conduciría su evolución: «Lamarck defiende con reiteración que las circunstancias ambientales producen necesidades nuevas, y que a éstas el organismo responde con nuevas acciones. Mas lo que no siempre formula es su pretensión de la voluntad del animal cumple una función primaria en ese encadenamiento de causas».56 Lamarck postuló que las diferentes facultades de los organismos son el producto de sus diferentes órganos;57 considerando la «voluntad» como la facultad que emana del sistema nervioso, negó tal voluntad a las plantas, para sólo admitirla en determinados animales. Difícilmente, Lamarck, pudo fundamentar su teoría, que abarca a animales y plantas, en la voluntad de unos organismos a los que en su mayoría les niega tal facultad:58 Las acciones de los animales no se ejecutan más que por movimientos excitados y no por movimientos comunicados de impulsión. Sólo la irritabilidad es para ellos una facultad general, exclusiva y fuente de sus acciones. No es verdadero que todos los animales gocen del sentimiento, así como de la facultad de ejecutar actos de voluntad.

Filosofía zoológica, p. 71. La plasticidad de los organismos y la interacción entre organismos y ambiente están perfectamente documentadas, ya se trate de animales superiores o bacterias. No se considera que esa plasticidad de los organismos sea producto de su voluntad. Tampoco se ve en esta plasticidad algún tipo de intencionalidad o vitalismo. Se acepta que los organismos, como respuesta a los estímulos externos, experimentamos cambios, nuestro sistema inmunológico sería una buena prueba de ello, siendo ésta una cualidad puramente orgánica.41 Lo que resta es que esa plasticidad alcance a los mecanismos de la herencia; algo que, al día de hoy, no se admite desde el dogma de la genética.59 El lamarckismo no contempla el protagonismo del genoma en la evolución. Actualmente se admite que los errores en la replicación del ADN son la causa de novedad biológica, siendo éste el paradigma neodarwinista aceptado por la mayoría del estamento académico. Para el lamarckismo son los organismo los que, directa o indirectamente, han ido imprimiendo y ampliando el ADN. Proyectándolo a la actualidad, el Lamarckismo posiblemente se fundamentaría en la transferencia horizontal, transferencia que cada vez cuenta con mayores evidencias.60 El paso de procariotas a eucariotas mediante sucesivos procesos simbióticos de bacterias de vida libre (endosimbiosis seriada) posibilitó uno de los más importantes hitos en la evolución de la vida y, actualmente, se contempla 61 a los virus como agentes de transferencia genética.

De este modo serían los organismos los que propiciarían su propia evolución y el producto de esa evolución quedaría plasmado en el genoma. La mutaciones en el ADN, que son testimonio de que los or ganismos sufren modificaciones de generación en generación, no serían aleatorias. Una metáfora para visualizar la diferencia entre lamarckismo y darwinismo podría ser Wikipedia y una enciclopedia tradicional. El lamarckismo sería Wikipedia, evoluciona mediante múltiples aportaciones de los consultores que la van modificando, los wikipedistas representaríamos a los organismos que irían modificando el ADN y los casos de vandalismo podrían asimilarse a los errores genéticos. Las enciclopedias clásicas representarían el darwinismo siempre que quedasen desatendidas y evolucionasen mediante los errores que se produjesen al imprimirlas; la selección natural se encargaría de desechar todos los errores y mantendría los aciertos, aquellos errores que en lugar de suponer una ilegibilidad, supusieran una más adecuada y más extensa definición de los conceptos.62

Recepción y alcance de la teoría Las ideas de Lamarck no fueron tenidas en cuenta en su época, aunque su libro filosofía zoológica, donde plasmó su teoría, circuló por Francia y también por Inglaterra, obra a la que tuvo acceso el propio Darwin.63 Fue después de formulada la teoría de la Selección Natural cuando los evolucionistas retomaron el pensamiento de Lamarck intentando suplir el vacío que la Selección Natural dejaba al no explicar la fuente de la variabilidad sobre la que tal selección actuaba. El propio Darwin, al tiempo que denostaba la teoría de Lamarck, intentó cubrir ese vacío postulando la «pangénesis», un mecanismo de transferencia horizontal lamarkiano.64 Y sería a principios del siglo XX cuando Weismann lo refutara con la formulación de la conocida como «barrera Weismann» por la que se consideraba que existiendo dos líneas, la germinal y la somática, no cabría la posibilidad de transferencia de información entre la una y la otra. Malinterpretando a Lamarck desarrolló un experimento que supuestamente refutaba su teoría: cortó el rabo a sucesivas generaciones de ratones para demostrar que sus descendientes no nacían con el rabo cortado.65 Desde entonces, el Lamarckismo se ha simplificado con argumentos que vienen a caricaturizarlo: «En pueblos donde el herrero hereda el oficio de su padre, su abuelo y su abuelo, se pensaba que heredaba también unos músculos bien desarrollados. sólo los 66 67 68 Ya en vida, Lamarck se tendría que heredaba sino que los desarrollaba más con el ejercicio, y pasaba estas mejoras a su hijo».

defender de argumentos parecidos: No obstante, se objeta todavía que todo lo que se ve anuncia, relativamente al estado de los cuerpos vivientes, una constancia inalterable en la conservación de su forma, y se piensa que todos los animales cuyo recuerdo nos ha transmitido la historia resaltan siempre los mismos y no han peerdido ni adquirido nada en el perfeccionamiento de sus órganos y en la forma de sus partes. […] «No se puede por menos —dicen los autores— de contener los vuelos de la imaginación, cuando todavía se ve conservado con sus menores huesos, sus menores pelos y sus menores detalles tal animal que antes tenía en Tobas ó en Menfis sacerdotes y altares. Pero sin extraviarnos en todas las ideas que hacen nacer semejantes aproximaciones, limiténse a exponer que estos animales son perfectamente semejantes á los actuales» (Anales del Museo de Historia Natural.) […] Nada existe, por tanto, en la observación que acaba de ser citada que resulte contrario a las consideraciones que llevo expuestas sobre este asunto, ni que pruebe que los animales de que se trata hayan existido en todo tiempo en la Naturaleza, pues demuestra solamente que vivían en Egipto hace dos ó tres mil años. Y todo hombre que posee el hábito de reflexionar y de observar al propio tiempo los documentos de la enorme antigüedad que muestra la Naturaleza, aprecia en su verdadero valor la insignificante cifra de tres mil años con relación a las épocas geológicas.

Lamarck, Filosofía zoológica. Durante el siglo XX el lamarckismo ha sido defendido por diferentes evolucionistas,69 70 y el conocido como “efecto Baldwin” (enunciado por James Marck Baldwin y C. Loyd Morgan a finales del siglo XIX), una versión edulcorada de lamarkismo según la cual los hábitos sostenidos de las especies, por selección natural, se fijarían en la herencia, se mantiene como plausible para resolver algunas dificultades del neodarwinismo.71 72 Avanzado el siglo XX, la “barrera Weismann” se ha mostrado franqueable, sin poderse probar que los caracteres adquiridos no puedan llegar a ser heredables.73 74 La transferencia horizontal se ha demostrado en casos, y se ve en los virus, con su capacidad de intercambio genético, a los posibles actores de tales transferencias. También, en la simbiosis, se ha demostrado la existencia de transferencia genética, y en su grado de máxima integración, la simbiogénesis, ha demostrado la eclosión de nuevas individualidades, quimeras que integran a sus simbiontes. El paso deprocariotas a eucariotas, descrito en la endosimbiosis seriada, fue consecuencia de estos procesos simbiogenéticos; aunque Mayr y Maynard Smith en los años 90 opinaban que estos procesos nada tienen que ver con el Lamarckismo. Gould (1977) diría: «Dudo que el lamarckismo pueda volver a experimentar un resurgimiento como teoría viable de la evolución».75

Al día de hoy (2009), en mayoría, la comunidad científica considera el paradigma neodarwinista satisfactorio para explicar la evolución biológica, no considerando válido el lamarckismo. No obstante, Lynn Margulis, entre otras y otros, considera que «una sugerencia principal para el nuevo siglo en biología es que el difamado eslogan del lamarckismo, “la herencia de los caracteres 76 adquiridos” no debe ser todavía abandonado: tan sólo debe ser refinado cuidadosamente»”.

También, hay que citar a Margulis en la revolución silenciosa que encabeza77 cuando asegura que "en la evolución no hay azar, como dijo Darwin, sino adaptación al medio ambiente […] Un organismo por sí mismo no evoluciona, sólo se desarrolla. La evolución es un cambio en poblaciones de individuos a través del tiempo. No es selección natural en un individuo por sí mismo, nunca".78

Referencias 1. Entrevista con Lynn Margulis, Muchas de las cosas que nadie sabe de Darwin han pasado en Chile, SINC, 27/11/2009 (http://www.oei.es/divulgacioncientifica/entr evistas_052.htm)

Mención

aparte

merece

el

naturalista francés Jean Baptiste Antoine Pierre de Monet, conde de Lamarck (1744-1829). Aunque denostado por el darwinismo por

La primera teoría integral de la evolución

fue

presentada

a

comienzos del siglo XIX por JeanBaptiste de Monet de Lamarck, quien, en buena medida, era un producto de la Ilustración, tanto por su determinación de ofrecer una explicación naturalista de la evolución como por su enfoque sistémico. Dominó acabadamente la física, la química y la geología antes

de

embarcarse

en

la

búsqueda de evidencia de que la evolución biológica había ocurrido realmente. También sugirió un mecanismo de la evolución, por el cual

podían

surgir

nuevas

especies a través de cambios en la relación entre el organismo y su ambiente durante la búsqueda del primero

por

necesidades

satisfacer básicas,

sus y

su teoría de los rasgos adquiridos, fue

uno

de

los

mayores

defensores y divulgadores de las ideas evolucionistas antes de Darwin. Fue de los primeros que explicó la variedad y cambios morfológicos en los organismos: la función crea el órgano, a través del tiempo y las condiciones oportunas.

Acuñó

el

término

Biología y estableció la diferencia básica

entre

vertebrados

e

invertebrados. Eugenia Ramírez Goicoechea, Evolución, Cultura y complejidad.

4. Filosofía zoológica, p. 56. 5. Máximo Sandín, La evolución a 150 años (luz) de Darwin. Conferencia en la Universidad de Oviedo, 16/11/2009. Una visión crítica de la teoría de Darwin. (formato vídeo), 13:15 (http://mediateca.uniovi.es/visor 2/-/journal_content/56_INSTANCE_iV9s/10910/15658 8)

la

producción en consecuencia de nuevas modificaciones en sus

Creo que Lamarck tuvo mucha

características, las que se vuelven

más influencia sobre Darwin de lo

hereditarias luego de muchas

que reconoce la tradición (un

generaciones.

punto avanzado también por otros historiadores de la ciencia: véase

Mae-Wan Ho, 1988, «Genetic engineering», p. 90.

Corsi, 1978; Mayr, 1972, pág. 90) […] Darwin dijo poco de Lamarck en sus publicaciones. La única referencia explícita a la teoría

lamarckiana en el Origen es un

determinación de las especies

cicatero elogio en el prefacio

físicas

histórico añadido a las ediciones

proporcional

posteriores a la primera. Pero

conocimientos.

sabemos que Darwin estudió a

es

provisional a

y

nuestros

Harris, 1981, Evolución. Génesis y revelaciones.

Lamarck intensamente y no le gustó lo que leyó. Tenía un ejemplar de la edición de 1830 de la Phiiosophie zoologique (véase Hull, 1985, pág. 802) que leyó al

Desgraciadamente, el

menos dos veces y del que tomó

social que rodeaba a Lamarck no

gran cantidad de notas. Lo que

era el adecuado para que su

quizá sea más importante es que

teoría tuviera una gran acogida. A

Lamarck proporcionó a Darwin

principios

del

una introducción al tema de la

Ciencias

Naturales

evolución a través de la imparcial

lideradas en Francia por Georges

pero crítica exégesis de Lyell en

Cuvier, quien había elaborado,

sus Principies of Geology.

sobre un enorme volumen de

Goul, 2002, p. 219-221

7. "La teoría de la transmutación de especies [la teoría de Lamarck], considerada en el último capítulo, ha encontrado algunos apoyos en muchos naturalistas". Charles Lyell, Principles Of Geology, Volume II, The University of Chicago Press, Ltd., London, Originally published in 1832 by John Murray, London, University of Chicago Press edition 1991, p.18.

contexto

siglo

XIX

las

estaban

concienzudos datos, su teoría de los

cataclismos

creaciones

y

para

sucesivas

explicar

los

cambios observados en las faunas fósiles. Lamarek, anciano y solo, fue vapuleado científicamente por un

joven

y

brillante

Cuvier,

catedrático de Historia Natural, de Anatomía Comparada y secretario

Además de la Ilustración, también fue importante para el desarrollo del evolucionismo en Francia el pensamiento de Gottfríed Wilhelm

de la Academia de Ciencias de París. Sandín, Lamarck y los mensajeros, p. 31.

Leibniz. De hecho, incluso el propio Liebniz había especulado en un trabajo suyo poco conocido, Protogaea (1691), que tal vez en algún momento o en algún lugar del universo, las especies de animales estén o estuvieron o estarán, más sometidas al cambio de lo que en el momento lo están en el nuestro; y varios animales que tienen algo del gato, como el león, el tigre y el lince, fueran hace tiempo de la misma raza y constituyeran subdivisiones

hoy de

nuevas la

antigua

especie de los gatos. Por tanto, siempre regreso a lo que ya más de una vez he dicho, que nuestra

La idea de que los seres vivos actuales son el resultado de un proceso

evolutivo

de

transformación en el tiempo, en oposición

al

concepto

de

inmutabilidad o fijismo de las especies,

no

es

totalmente

intuitiva y ha tenido que ser descubierta. Antonio Fontdevila, Andrés Moya, 2003, p. 58.

Las opiniones expresadas por

modificaciones

Lamarck, en 1809, en estas

variaciones a las cuales estos

teorías,

asombrosamente

objetos están sujetos, cuáles son

atrevidas; son, además, amplias,

las analogías entre sí y con los

grandiosas, y fueron formuladas

otros que se conocen, etc., etc.

en una época en que ni siquiera

[…] Porque aquellos que no se

se podía entrever la posibilidad

han consagrado más que al

lejana de fundarlas sobre hechos

estudio

evidentes, como podemos hacer

perciben sino muy confusamente

hoy. Ya lo veis; la obra de

las conexiones generales entre los

Lamarck

verdaderamente,

objetos, ni perciben de ningún

estrictamente

modo el verdadero plan de la

monística, es decir, mecánica; así

Naturaleza ni ninguna de sus

la unidad de las causas eficientes

leyes.

son

es

plenamente

en

la

y

naturaleza orgánica

y

anorgánica, la base fundamental

de

o

las

de

las

especies

no

Filosofía zoológica, Introducción, p. XXII

de estas causas atribuida á las propiedades físicas y químicas de la materia; la ausencia de una fuerza vital especial ó de una causa

final

procedencia

orgánica;

la

todos

los

de

organismos de un corto número de formas antepasadas, salidas por generación espontánea de la materia;

la

interrumpida geológica;

perpetuidad de la

la

no

evolución

ausencia

de

revoluciones y especialmente la inadmisibilidad de todo milagro; en una

palabra,

todas

las

proposiciones más importantes de la biología monística están ya formuladas en

la

FILOSOFÍA

ZOOLÓGICA. Ernesto Hæckel. Filosofía zoológica, (prólogo).

13. Dobzhansky, Genética y el origen de las especies, 1937, (3ª edición, 1951). 14. Filosofía zoológica, p. 175. 15. "Con relación a los cuerpos vivientes, la Naturaleza ha procedido por tanteos y sucesivamente". Filosofía zoológica, introducción, p. XVIII 16. Lamarck, Filosofía Zoológica. 17. Jacob, Lógica de lo viviente. 18. Filosofía zoológica, pp. 83-84. 19. Filosofía zoológica, p. 61. 20. Las posiciones de Chambers no pueden considerare creacionistas, pero aunque admitía la evolución de la vida propuesta por Lamarck, achacaba esa evolución a la intervención de un ser superior. A principios de este siglo, M. Lamarck, un naturalista del más alto carácter, sugirió la hipótesis de

progresos

orgánicos

que

merecidamente recibió burlas, a pesar de que contenía un atisbo de la verdad. Él conjeturó, y se esforzó, con una gran cantidad de ingenio, para demostrar que uno ha avanzado en el curso de las

Si no se obstinasen en no ver en los objetos observados más que su forma, su dimensión, sus partes externas, su color, etc., y si los que se entregan a semejante tarea no desdeñasen elevarse a consideraciones superiores, como indagar cuál es la naturaleza de los objetos de que se ocupan, cuáles son las causas de las

generaciones,

de

otro;

en

consecuencia, sólo su experiencia y el ejercicio de sus facultades en una dirección particular, por la que se llevó a cabo los nuevos desarrollos proponiendo

de

los

órganos,

que

estas

variaciones son suficientes para constituir una nueva especie.

Así, pensaba que un pájaro sería

clasificación de

impulsado por la necesidad de

como se muestra en los sistemas,

buscar su alimento en el agua, y

es totalmente incompatible con la

que, en sus esfuerzos para nadar,

idea de que sea meramente

habría desplegando sus garras y

consecuencia de las necesidades

daría lugar a la expansión de la

y deseo de los propios animales.

sustancia

de

Si tal hubiese sido el caso, todo

membranas, y se convertirá así en

habría sido irregular, como las

palmípedas. Es posible que la

cosas arbitrarias necesariamente

voluntad y el ejercicio de las

lo son. Pero, he aquí, todo el plan

facultades han entrado de alguna

de la vida es como simétrico como

manera en la producción de los

el plano de una casa, o el trazado

fenómenos que hemos estado

de un antiguo jardín. Esto debe

considerando, pero sin duda no en

necesariamente

la manera propuesta por Lamarck,

diseñado

cuya

obviamente

antemano. Y lo que observamos

insuficiente para dar cuenta de la

es una previsión antes de la

aparición de los reinos orgánicos,

concepción. Observemos solo por

que solo se puede colocar con

un momento cómo las diferentes

piedad entre las locuras de los

condiciones físicas en que viven

sabios.

los animales de clima,

Si se hubieran conocido las leyes

suelo, temperatura, tierra, agua,

del desarrollo orgánico en su

aire, las peculiaridades de los

tiempo, su teoría podría haber

alimentos, y las diversas formas

sido

intermedia

noción

es

de

naturaleza

y

los

animales,

haber

sido

preparado

de

más

en las que se que se pretende; las

importante. Hipótesis actualmente

peculiares circunstancias en las

establecida.

Aprovechando los

que el negocio de la reproducción

medios naturales existentes, es

y el cuidado de con el que los

posible

los

jóvenes tienen que ser atendidos,

la

todas estas deben de tenerse en

ayuda simple y fácil de una ley

cuenta, y miles de animales que

superior, que quizás todavía esté

se han formado adecuados en la

operando en una escala limitada.

organización y carácter mental de

También va más allá del filósofo

las preocupaciones de que éstos

francés

tengan

producir

todos

organismos existentes

en

un

con

punto

muy

con

sus

distintas

importante, la concepción divina

condiciones y circunstancias –este

original de todas las formas de la

es el caso de un diente preparado

vida, que esta ley natural era

para aplastar frutos de cáscara,

único

su

una garra equipada para servir

La

como

instrumento

elaboración

y

en

realización.

un

gancho

para

la

realidad de tal concepción está

suspensión;… […]- Todos estos

demostrada

con

descubrimientos

de

los

animales serían producto de un

Macleay,

plan llevado a cabo. Cada uno

Vigors, y Swainson, con respecto

como cada una de las partes de

a las afinidades y las analogías de

esa gran variedad, en su conjunto

los animales (y por implicación, de

rigurosamente regular, solo debe

los vegetales) y los organismos.

considerarse estas cosas para

Esta regularidad en la estructura,

decretar

como podemos llamarla, de la

implican tal grado de la sabiduría

que

las

leyes

que

solo puede atribuir a la grandeza eterna.

¿Cómo

una

tímida

reflexión filosófica puede hacernos

Recorrer la cadena continua de

retroceder ante la investigación de

los seres, del más simple al más

las obras de Dios, hacernos

complejo, equivale exactamente a

infravalorar su grandeza y olvidar

seguir la marcha de la naturaleza

su carácter paternal? ¿No les

a través del tiempo, a reconstruir

parece que nuestras ideas de la

la sucesión de transformaciones

Divinidad sólo pueden ser dignas

que ha originado las distintas

de

formas de vida.

él

avanzando

en

el

conocimiento de sus obras y las formas, y que la adquisición de este

conocimiento

consiguiente,

es

un

medio

por

Jacob citando a Lamarck, Lógica de lo viviente, Cap. 3-El tiempo.

a

disposición nuestro cada vez más en un respeto genuino por él?

Desde

Robert Chambers, Vestiges of the Natural History of Creation (1844)

que

en

nuestras

distribuciones de las producciones de

la

Naturaleza

hemos

experimentado la necesidad de tomar en cuenta las conexiones, no somos ya dueños de disponer Lamarck proclamó a los cuatro

la serie general como nos plazca,

vientos

que

y el conocimiento que adquirimos

estricto

y

era que

mecanicista se

proponía

de día en día de la marcha de la

explicarlo todo en términos de

Naturaleza nos fuerza y nos

causas y fuerzas mecánicas; y sin

arrastra a conformarnos con su

embargo, el lector moderno no

orden.

puede evitar interpretar su teoría

obtenido por el empleo de las

de que el cambio evolutivo lleva

conexiones en la colocación de

inevitablemente a la perfección

las

como una adhesión subconsciente

distribución general es que las dos

al principio (no mecanicista) del

extremidades del orden deben

perfeccionamiento.

ofrecer

Mayr, Así es la biología.

El

primer

masas

para

los

resultado

formar

seres

una

más

desemejantes, porque son los más alejados.

22. p. 25.

Filosofía zoológica, pp.92-93.

26. Jacob, Lógica de lo viviente, Cap. 3 - El tiempo. Sin embargo, los hechos siguen siendo tozudos. A pesar de que el argumento básico para explicar la

Cuvier fue todavía más lejos en su

aparición de las especies hijas es

invalidación de la escala de la

el azar, las tendencias evolutivas

naturaleza.

hacia una mayor complejidad,

habilidad

eficacia

descrivió

o

diversidad,

son

Usando como cuatro

su

gran

anatomista, planes

evidentes en las secuencias de

anatómicos generales diferentes

sucesión

para todos los animales que

Sandín, Lamarck y los mensajeros, p. 31.

denominó (vertebrados),

Vertebrata Mollusca

(moluscos), Articulata(antrópodos)

lo que se refiere al orden de la

y Radiata (animales con simetría

Naturaleza,

radiada). La escala natural estaba

secundario, porque la existencia

rota y era imposible pasar de un

de un orden no impone ipso facto

eslabón a

la de un fin.

otro

por

cambios

adaptativos.

es

un

problema

Grassé, El hombre ese dios en miniatura, pp. 43-44, 36.

Antonio Fontdevila, Andrés Moya, 2003, p. 31.

Negándose en redondo a ver en el Esta interferencia, que se produce

mundo vivo el resultado de una

constantemente

las

intención, la realización de una

facultades mismas de lo viviente y

meta por una potencia suprema,

las

Lamarck atribuye a la vida animal

deriva

entre

circunstancias de

lo

exteriores,

que

Lamarck

una

«causa

primera

y

considera una de las propiedades

predominante» que le otorga el

más indiscutibles de los seres: la

poder de complicar y perfeccionar

adaptación a sus condiciones de

gradualmente la organización.

vida, la concordancia entre el

Jacob, Lógica de lo viviente.

organismo y su entorno. Jacob, Lógica de lo viviente, Cap. 3El tiempo.

32. Antonio Fontdevila, Andrés Moya, 2003, p. 30.

Solamente nos habla de «fluidos internos» que actúan sobre «los Después asciende una escala de

constituyentes

complejidad, motivada por «una

animal»

fuerza que tiende incesantemente

desplazar

a complicar la organización». Esta

incluso

opera a través de la respuesta

palabras, para modelar poco a

creativa de los organismos a

poco la forma de los cuerpos.

para

plásticos trazar

masas órganos.

y En

del

canales, construir pocas

«necesidades sentidas». Gould, El pulgar del panda, pp.67-68.

Jacob, Lógica de lo viviente, Cap. 3 El tiempo.

34. Jacob citando a Lamarck, Lógica de lo viviente, Cap. 3 - El tiempo. El ojo posee una finalidad de hecho, su función consiste en ver, pero ignoramos si se ha sudo construido o si se ha formado él mismo para ver. La distinción es clara,

sin

ambages.[…]

Comprobar que en el mundo viviente la presencia de una finalidad inmanente no conduce obligatóriamente a reconocer la existencia de causas finales. […] Pero en el fondo, la finalidad, por

He aquí lo que se preguntó a sí mismo [Balwin]: ¿cómo puede ser que los animales individuales, resolviendo problemas durante toda su vida, puedan cambiar las condiciones de competición para sus

propios

descendientes,

haciendo que estos problemas sean más fáciles de resolver en el futuro?

Dennett, La peligrosa idea de Darwin, p.1177.

periodo

inmenso,

cuando

en

realidad no permiten contemplar más que estados estacionarios,

36. Matt Ridley, Genoma, p. 220.

intervalos entre los cambios que afectan

al

mundo

vivo.

Sin

La ocupación de las dos américas,

embargo,

aunque

cuya fecha todavía no está clara,

modificaciones que sufren los

pero puede situarse casi con

seres nos resulten imperceptibles,

seguridad hace entre 35.000 y

aunque

15.000 años.

encontrarnos en el Egipto de hoy

las

las

formas

que

no se diferencien en nada de las Luca y Francesco Cavali-Storza, ¿Quiénes somos? Historia de la diversidad humana, p. 143.

que vivían hace tres mil años, la lentitud

del

proceso

de

transformación es compensada por su enorme duración. Para que pueda nacer toda la diversidad del De diez mil años acá el hombre

mundo vivo a partir de eventos tan

empezó a producir su propio

lentos, es necesario y suficiente

alimento, cultivando vegetales y

que se acumule el tiempo. «En

criando animales.[…] durante las

comparación con las duraciones

400 o 500 generaciones que se

que se nos antojan grandes en

han sucedido en este período, la

nuestros cálculos ordinarios, sin

población mundial ha aumentado

duda fue necesario un tiempo

mil veces o más.

enorme

Luca y Francesco Cavali-Storza, ¿Quiénes somos? Historia de la diversidad humana, p. 143.

y

una

variación

considerable de las circunstancias que se han sucedido, para que la naturaleza haya podido llevar la organización animal al grado de complicación y desarrollo que

Para

que

esta

transformaciones

serie haya

de

podido

efectuarse, tiene que haberse desarrollado

a

lo

largo

de

períodos muy largos. Todo lo que

observamos.» Jacob, Lógica de lo viviente, Cap. 3El tiempo.

40. Margulis, L, Sagan, D. ¿Qué es la vida?, Tusquets, 1996.

se encuentra sobre la superficie del globo cambia progresivamente de forma y estado. Todos los

Los efectos del uso y desuso

cuerpos de este planeta sufren

significan simplemente que, si el

«mutaciones»

organismo hace uso habitual de

rápidas

de

más

o

acuerdo

menos con

su

una parte de su cuerpo, esa parte

naturaleza y según las fuerzas

se desarrollará y funcionará mejor;

ejercidas

por

sobre

ellos.

La

el

contrario, se

toda

parte

estabilidad que ve el hombre en la

subutilizada

naturaleza es sólo aparente. La

encogerá.

razón de esto es que el ser

personas que se entrenan para

humano tiende a referir todos los

correr maratones tendrán fuertes

eventos a la duración de su propia

músculos en las piernas y no se

vida, de manera que unos cuantos

fatigan

miles de años le parecen un

inverso,

Por

atrofiará ejemplo,

fácilmente. los

De

o las

modo

astronautas

no

pueden tolerar por mucho tiempo

tendencia genética a adquirir una

bajas condiciones de gravedad sin

característica en

que sus músculos comiencen a

estímulos ambientales conduce a

sufrir una degeneración debida al

la

desuso. Los efectos del uso y

sensibilidad

desuso

estímulos del medio ambiente, y la

se

encuentran

bien

evolución

de a

la

mayor

los

documentados en la actualidad;

emancipación de

pero no se sabe todavía si sus

necesidad de ellos.

efectos se heredan.

respuesta a

propios

la

eventual

Dawkins, The extended phenotype, p. 284.

Mae-Wan Ho, 1988, Genetic engineering

El psicólogo James Mark Baldwin Las culebras americanas recién

había

nacidas

aprendizaje

muestran

marcadas

propuesto podía

que

el

guiar

la

diferencias específicas en sus

evolución precisamente del modo

respuestas a diversos alimentos

en

que están en línea con las

proponían, y crear así una ilusión

preferencias

adultos.

de evolución lamarckiana sin que

Incluso en el Seno de una misma

realmente fuera una evolución de

especie, las poblaciones pueden

tipo lamarckiano. Con todo, nadie

diferir.

de

había demostrado que esa idea,

Thamnophis elegans que viven

conocida como efecto Baldwin, en

cerca del mar en California se

realidad

especializan en comer babosas,

Nowlan demostraron por

mientras que las de tierra adentro

podía funcionar. La aptitud para

comen ranas y peces. Es posible

aprender

probar

preferencias

evolutivo al punto que, de buscar

alimentadas en las serpientes

una aguja en un pajar, se pasa a

recién

buscar la misma aguja con alguien

de

Las

los

poblaciones

las nacidas

comprobando

que

Hinton

y

Nowlan

funcionara.

altera

Hinton

el

y

qué

problema

cuantos movimientos de la lengua

que nos dice cuándo estamos

se

más cerca de encontrarla.

producen

ante

extractos

impregnados en algodón.

Pinker, Cómo funciona la mente.

P. J. B. Slater, El comportamiento animal, p. 107

Otro fenómeno que lleva toda una Efecto

Baldwin

/

Waddington

propuesto por primera vez por Spalding

en

evolutivo

en

hipotético

1873.

Proceso

gran

medida

(también

llamado

asimilación genética) por el cual la selección natural puede crear una ilusión

de

la

herencia

características Selección

en

de

adquiridas. favor

de

una

serie de nombres incluido el de «efecto

Baldwin»

y

el

de

«asimilación genética», parece ostentar

un

carácter

lamarckista, igualmente

pero bien

más encaja

en

una

perspectiva darwinista. Por elegir la

ilustración

clásica:

los

avestruces tienen callosidades en las

patas

donde

suelen

arrodillarse sobre un suelo duro;

se

número ingente de variaciones

desarrollan ya dentro del huevo,

muy pequeñas. Supuso que, de

antes de que puedan ser usadas.

vez

¿Acaso no requiere esto un

mutaciones grandes que, aunque

escenario

Unos

en su mayoría sean letales, por lo

lisas

que se ven eliminadas, algunas

empezaron a arrodillarse y a

veces sobreviven. De este modo,

adquirir

explicaba

pero

las

callosidades

lamarckista?

antepasados

de

patas

callosidades

adaptación

genética,

cuando,

tanto

aparecen

el

carácter

del

genuino de las diferencias como

mismo modo que nosotros, según

también el carácter obvio de

nuestra profesión, desarrollamos

parentesco entre las diversas

callosidades

formas vivas. Consideraba esas

plantares.

no

como

en

de

escritor,

Estas

o

callosidades

fueron seguidamente heredadas como

adaptaciones

grandes

mutaciones

«monstruos prometedores».

genéticas,

Popper, 1972, p. 257.

formándose mucho tiempo antes de ser utilizadas.

como

51. Filosofía zoológica, p. 59.

Gould, El pulgar del panda, p 171.

46. En este punto coinciden lamarckismo y darvinismo. Gould llamó a estas limitaciones que impone la constitución de los organismos «constricciones históricas». Gould, 2004, Cap.: 10. 47. Darwin ya habló de las líneas de expresión que son producto de la expresión de nuestras emociones. «dejó bien sentado» que se debían a tres principios: «Habitos útiles asociados […], princípio de antítesis, […] acciones debidas al sistema nervioso con independencia de su voluntad y en cierta medida independientes también del hábito». Charles Darwin, La expresión de las emociones en los animales y en el hombre, Alianza Editorial, 1984, 1998, edición de bolsillo Nº 1011. 48. La simbiogénesis es la fuente de innovación en la evolución, entrevista de Xavier Pujol Gebellí a Lynn Margulis (junio de 2009) (http://www.sebbm.com/pdf/16 0/e160.pdf) 49. Popper, 1972, p. 257.

Siempre que el hombre pretende estudiar

la

Naturaleza

se

encuentra obligado á emplear medios particulares. En primer término, para poner orden entre los objetos infinitos y variados que trata de examinar, después para distinguir sin confusión, entre la inmensa multitud de estos objetos, ya los grupos de aquellos que desea conocer, ya cada uno de estos grupos en particular; y por último, para comunicar y transmitir á sus semejantes todo lo que ha visto, observado y pensado en tal estudio. Pues los medios que el

La explicación ortodoxa consiste en decir que, si tomamos períodos muy

grandes,

posible

entonces,

acumular

es

variaciones

pequeñas y que, sobre todo, la separación

geográfica

suele

impedir el restablecimiento de una población

media.

Goldschmidt

consideraba que estas ideas eran insuficientes y, sin romper con la idea de la selección natural, abandonó la idea de que todo cambio revolucionado hubiese de ser explicado en términos de un

hombre

emplea

perspectivas

en

estas

científicas

constituyen lo que yo llamo las partes del arte en las ciencias naturales, partes que hay que guardarse mucho de confundir con las leyes y los actos mismos de la Naturaleza. Filosofia zoológica, En relación al estudio de las especies.

Esta regularidad en la estructura,

mutar las células sexuales en

como podemos llamarla, de la

direcciones específicas. ¿Cómo

clasificación de

animales,

podría un clima más frío «decirle»

como se muestra en los sistemas,

a los cromosomas de un óvulo o

es totalmente incompatible con la

un espermatozoide que produzcan

idea de que sea meramente

mutaciones

consecuencia de las necesidades

longitud del pelo?

los

para

y deseo de los propios animales Robert Chambers, Vestiges of the Natural History of Creation (1844)

una

mayor

Gould, 1980, p. 69-70.

56. José Luis González Recio, 2004.

Los

diferentes

animales

que

¿Es pura retórica o de verdad

existen

puede creerse que las amebas,

distinguidos unos de otros, no sólo

los hongos, las bacterias o las

por las particularidades de su

plantas (por no hablar de las

forma exterior, de la consistencia

esponjas o de los corales), por

de

medio de sus «elecciones» son

etcétera., sino además por las

responsables de su evolución? ¿O

facultades de que están dotados.

la

«presión de

[…] Estos hechos asombrosos

mutación» se aplica sólo a los

cesan de sorprendernos cuando

animales «superiores», a los que

ante todo reconocemos que cada

tienen un sistema nervioso central

facultad obtenida es el resultado

bien desarrollado?; y si sólo se

de un órgano especial ó de un

refiere a éstos, ¿que «presión de

sistema de órganos que da lugar á

mutación»

ella.

teoría de la

ha

producido

ese

su

están

evidentemente

cuerpo,

de

su

talla,

sistema nervioso? Filosofía zoológica, p. 75. Arsuaga, El enigma de la esfinge, Debols¡llo, 2002, ISBN 84-9759-1577 p, 452.

Todos los fenómenos vitales [en su teoría] son debidos a causas El requerimiento lamarckista de

mecánicas,

que los caracteres han de ser

químicas, que tienen su razón de

adquiridos con fines adaptativos,

ser en la constitución de la

porque el lamarckismo es una

materia orgánica. […] La obra de

teoría de la variación dirigida. Yo

Lamarck

no tengo noticia de que ninguno

plenamente

de estos mecanismos bioquímicos

monística, es decir, mecánica.

lleve

a

preferencial

la de

incorporación información

ya

es

físicas,

ya

verdaderamente, y

estrictamente

Ernesto Hæckel, Prólogo de Filosofía zoológica.

genética favorable.[…]Pero, hasta el momento, no hemos hallado nada en el funcionamiento del mendelismo o en la bioquímica del

El dogma central parece ser una

ADN que nos anime a creer que

justificación directa de la teoría del

los ambientes o las adaptaciones

germoplasma de Weismann, que

requeridas sean capaces de hacer

desde entonces se conoce como

la «barrera de Weismann». Se

herencia de caracteres adquiridos

supone que esta barrera prohíbe

(mediante virus como vehículo) y

estrictamente que las influencias

de mutaciones como respuesta a

ambientales,

estímulos

o

cualquier

ambientales

(sólo

experiencia durante la vida del

constatables

organismo,

en bacterias y, al parecer, también

afecte

en

forma

experimentalmente

directa (es decir, predeciblemente)

en

sus genes, en especial en las

interpretación que el conjunto

células germinales, por lo que las

sugiere, de una tendencia en la

«características adquiridas» no se

evolución

heredan.

complejidad biológica, en la que el Mae-Wan Ho, 1988, p 123.

levaduras),

hacia

cerebro capacidades

como

una

humano son

en

la

mayor (cuyas

inexplicables

como resultado de la Selección Natural) sería, por el momento, el Recientemente se han realizado descubrimientos en las bacterias que

han

inquietud

provocado porque

cierta pueden

«despertar los viejos fantasmas de la evolución lamarckiana»: las

punto culminante. Sandín, Lamarck y los mensajeros, p. 31.

62. Fundación Cristóbal Gabarrón (http://web.archive.org/ web/http://gabarron.org.dnnmax.com/Default.aspx?tabi d=1912)

mutaciones dirigidas y la herencia de caracteres adquiridos. Se ha podido

comprobar

cómo

Creo que Lamarck tuvo mucha

determinadas bacterias, ante una

más influencia sobre Darwin de lo

fuente de alimento que no podían

que reconoce la tradición (un

utilizar, sufrían mutaciones (en

punto avanzado también por otros

este caso dos independientes que

historiadores de la ciencia: véase

por sí solas no conferían ningún

Corsi, 1978; Mayr, 1972, pág. 90)

beneficio) que hacían posible esta

[…] Darwin dijo poco de Lamarck

asimilación. La probabilidad de

en sus publicaciones. La única

que se produjeran conjuntamente

referencia explícita a la teoría

(simultáneamente)

forma

lamarckiana en el Origen es un

espontánea sería prácticamente

cicatero elogio en el prefacio

nula.

toda

histórico añadido a las ediciones

probabilidad, es una respuesta a

posteriores a la primera. Pero

las condiciones del medio, es

sabemos que Darwin estudió a

decir,

Lamarck intensamente y no le

Es

decir,

una

de con

mutación

postadaptativa. Sandín, Lamarck y los mensajeros, p. 31.

gustó lo que leyó. Tenía un ejemplar de la edición de 1830 de la Philosophie zoologique (véase Hull, 1985, pág. 802) que leyó al menos dos veces y del que tomó gran cantidad de notas. Lo que

En definitiva, se trata de un

quizá sea más importante es que

modelo en el que los procesos

Lamarck proporcionó a Darwin

más trascendentales tienen un

una introducción al tema de la

claro contenido lamarckiano, tanto en los aspectos concretos de la

evolución a través de la imparcial

habría hecho que los niños judíos

pero crítica exégesis de Lyell en

nacieran hoy en día sin prepucio.

sus Principies of Geology.

Con

Goul, 2002, p. 219-221

todo,

profundo

el

problema más

es

que

lamarckiana, aun

la

teoría

cuando,

en

general, hubiera resultado ser correcta, no La

teoría

de

ampliamente

Lamarck

fue

malinterpretada

como tan sólo la herencia de caracteres

adquiridos,

caricaturizada

como

o

sería

capaz de

explicar la complejidad adaptativa. En primer lugar, el hecho de usar un órgano no hace, por sí mismo, que el órgano funcione mejor.

cambios

Pinker, 1995

resultantes de la voluntad de realización de los organismos. Medio

siglo

más

tarde,

sin

embargo, Charles Darwin incluiría

¿Y qué decir de otra notoria

algunas de las ideas de Lamarck

herejía, el lamarckismo, es decir,

en su propia teoría de la evolución

la

por

hereditario de las características

selección natural, sin

el

correspondiente reconocimiento. Mae-Wan Ho 1988.

creencia

bastante

más

planteada

por

“otro

autor” mas adelante, sino a los efectos, a largo plazo, de las circunstancias naturales que

ambientales produzcan una

respuesta del organismo (y cortar la cola a cientos de ratones, la supuesta

demostración

de

Weissman de la falsedad del lamarckismo, no sólo no es una influencia ambiental, sino que es una simpleza cruel e inútil).

carácter

interesante.[…]

Veamos un ejemplo. La violinista magnífico

veremos

el

adquiridas. Aquí la situación es

desarrolla

Una idea bastante simplista que

en

con

asiduidad

vibrato,

un

gracias

fundamentalmente a los ajustes conseguidos en los tendones y ligamentos izquierda

de

su

muñeca

completamente

diferentes de los que poseen su muñeca derecha, la de la mano que coge el arco. La receta para hacer una muñeca en el ADN humano produce ambas muñecas a partir de un solo conjunto de instrucciones que se aprovecha de la reflexión especular (a ello se debe que las muñecas sean tan parecidas) así que no habría un

Sandin, 2006, Cap. Una nueva biología para una nueva sociedad.

modo simple de cambiar la receta de la muñeca izquierda sin hacer el mismo cambio (no deseado) en

66. Dawkins, El relojero ciego.

la muñeca derecha. Dennett, 1999, pp.529-533.

Baste, por ejemplo, con señalar que si, en realidad, se pudieran heredar los caracteres adquiridos, el hecho de haber aplicado a

En este sentido, el lamarckismo

varios

de

siguió siendo una teoría popular

circuncisión

hasta bien entrado nuestro siglo.

centenares

generaciones

la

Darwin ganó la batalla en favor del

teorías

hecho de la evolución, pero su

coexistencia)

teoría acerca del mecanismo (la

conocimientos en genética. Pero

selección natural) no obtuvo una

también

popularidad amplia hasta la fusión

como Waddington o M.F. Burnet,

de las tradiciones de la historia

han sido partidarios, desde un

natural y la genética mendeliana

punto

en los años de la década de 1930.

científico, de la idea lamarckiana

Más aún, el propio Darwin jamás

de la evolución. En la actualidad

rechazó el lamarckismo, aunque

parece

lo consideraba subsidiario a la

biólogos una sensación creciente

selección

como

de que no sólo es posible aceptar

mecanismo evolutivo. Incluso ya

las ideas de una tendencia en la

en

evolución hacia la complejidad y

natural

1938,

por

ejemplo,

el

(competición que

biólogos

de

frente

sus

prestigiosos,

vista

existir

de

a

estrictamente

entre

algunos

paleontólogo de Harvard Percy

de que ésta es, al menos en parte,

Raymond, escribiendo (sospecho)

una respuesta a los estímulos

sobre esta misma mesa que estoy

ambientales, sino

utilizando ahora, dijo acerca de

transmisión

sus colegas: «Probablemente la

caracteres adquiridos es mucho

mayor

más que probable.

parte

de

ellos

sean

lamarckistas de alguna manera; al

de

que

genética

la de

Sandín, Lamarck y los mensajeros, p. 32.

crítico poco caritativo le podría parecer que hay muchos que son más lamarckistas que Lamarck». Hemos

de

continuada lamarckismo

reconocer influencia para

la del

Otro fenómeno que lleva toda una

comprender

serie de nombres incluido el de

una buena parte de las teorías

«efecto

sociales. Sombras de Lamarck de

«asimilación genética», parece

un pasado inmediato, ideas que

ostentar

se vuelven incomprensibles si las

lamarckista,

encajamos a la fuerza dentro del

igualmente

marco darwinista que a menudo

perspectiva darwinista. Por elegir

damos por supuesto que tienen.

la

Goul, El pulgar del panda, p.69.

Baldwin» un

y

el

de

carácter pero bien

ilustración

más encaja

en

una

clásica:

los

avestruces tienen callosidades en las

patas

donde

suelen

arrodillarse sobre un suelo duro; pero A veces, la distancia en los juicios aporta más claridad. El rechazo del darwinismo y el apoyo al lamarckismo

por

parte

de

pensadores como el físico Arthur Kostler, el psicólogo Jean Piaget, el escritor G. Bernard Shaw o el filósofo Henri Bergson, depende muy probablemente más de una actitud filosófica o moral basada en los valores implicados en estas

las

callosidades

se

desarrollan ya dentro del huevo, antes de que puedan ser usadas. ¿Acaso no requiere esto un escenario

lamarckista?

antepasados

de

Unos

patas

lisas

empezaron a arrodillarse y a adquirir

callosidades

adaptación

no

como

genética,

del

mismo modo que nosotros, según nuestra profesión, desarrollamos callosidades

de

escritor,

o

plantares.

Estas

callosidades

lamarckismo— me

parece un

fueron seguidamente heredadas

paso

hacia

como

explicación de tales desarrollos.

adaptaciones

genéticas,

formándose mucho tiempo antes

De modo similar podemos decir que

el

lamarekismo,

la

Karl R. Popper, 1972, pp. 245-249

de ser utilizadas. Stephen Jay Goul, El pulgar del panda, 1980, p.74.

importante

73. "El reverso de la moneda es que tampoco hay ninguna prueba genética fehaciente de la imposibilidad de la herencia de los caracteres adquiridos. Adriá Casinos, prologo de Filosofía zoológica. 74. "No es posible probar que las características adquiridas no se hereden Por la misma razón, no podemos probar que no existen las hadas". Dawkins, El relojero ciego.

especialmente la doctrina según la cual los órganos evolucionan bajo la

influencia

de

su

uso

y

degeneran bajo el influjo de su desuso, se ha visto explicado, en cierto sentido, en términos de selección natural gracias a J. M. Baldwin (un filósofo de Princeton), a Waddigton, a Simpsom y a Frwin

Schródinger.

mostrado

de

[…]

qué

Han

modo

la

evolución lamarckista, mediante la instrucción, puede ser simulada por

la

evolución

darwinista

mediante selección natural. […] La dificultad real del darwinismo es el problema, de sobra conocido, de explicar

los

desarrollos

evolucionistas que aparentemente están dirigidos a un fin, como nuestros ojos, recurriendo a un número de pasos muy pequeños, pues, según el darwinismo, cada uno

de

estos

resultado

de

pasos una

es

el

mutación

puramente accidental. Es difícil explicar

que

mutaciones

todas accidentales

esas e

independientes hayan tenido un valor

de

supervivencia.

Es,

Las teorías lamarckistas perdieron aceptación cuando los genetistas demostraron que la herencia de caracteres adquiridos («herencia blanda») era imposible, ya que las características adquiridas por el fenotipo no se pueden transmitir a la siguiente generación. La caída definitiva de la herencia blanda en el siglo XX la provocó la biología molecular, al demostrar que la información contenida

en

las

proteínas (fenotipo) no se puede transmitir a los ácidos nucleicos (genotipo). El llamado dogma central de la biología molecular privó a los lamarckistas de sus últimos restos de credibilidad. Existe una cierta posibilidad de que

algunos

(puede

que

microorganismos incluso

protistas)

tengan la capacidad de mutar en respuesta a condiciones externas, pero incluso si se confirmara, nunca

podría

ocurrir

en

organismos complejos, donde el ADN

del

genotipo está

muy

separado del fenotipo. Mayr, 1995.

especialmente, el caso de la conducta heredada de Lorena. El “efecto-Baldwin” —es decir, la teoría de un desarrollo puramente darwinista

que

simula

el

¿Cómo se traspasó la creatividad microbiana a las formas de vida de

mayor

tamaño?

Una

sugerencia principal para el nuevo

siglo en biología es que el difamado

eslogan

del

lamarckismo, “la herencia de los caracteres adquiridos” no debe

La microbióloga Lynn Margulis es

ser todavía abandonado: tan sólo

una de los muchos que considera

debe

refinado

el concepto darwiniano de la

cuidadosamente. Nadie, animal o

adaptación demasiado restringido

planta,

para poder explicar todas las

ser adquiere

nuevos

caracteres heredables creciendo, comiendo,

ejercitándose,

apareándose y demás. Por el contrario, bajo condiciones de estrés,

distintos

tipos

de

individuos se asocian físicamente. Más

adelante,

algunos

se

incorporarán a los otros y algunos de

éstos

características de la evolución.

incluso

llegarán

a

fusionar sus sistemas genéticos. Hay muchos modos de fusión, incluyendo las infecciones víricas.

Gianfranco Spavieri, Los Fragmentos del arco iris. El mito de la física, Universidad de Los Andes – Consejo de Publicaciones, Mérida-Venezuela 2005, ISBN 98011-0166-0 Vista parcial en Libros Google (http://books. google.es/books?id=D_V8iLW1nz0C&pg=PA192&dq=L ynn+Margulis&lr=&as_drrb_is=q&as_minm_is=0&as_ miny_is=&as_maxm_is=0&as_maxy_is=&num=100&a s_brr=3&ei=_22ySrqrN5jGM_jllKAD#v=onepage&q=L y nn%20Margulis&f=false) 78. El mercurio, 27/10/2009, Reseña de las conferencias de Lynn Margulis en universidades de Chile.(http://diar io.elmercurio.cl/detalle/index.asp?id={eb9ab022-204247ac-8c49-297b2a619fcd})

Margulis, Planeta simbiótico, p. 32.

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