La Europa Del Conocimiento

OPINIÓN

22 LA VANGUARDIA

LUNES, 24 NOVIEMBRE 2008

Màrius Carol

Presidente-Editor:

Director:

JAVIER GODÓ, José Antich CONDE DE GODÓ

Vicedirector:

Alfredo Abián

Directores adjuntos:

Jordi Juan, Enric Juliana, María Dolores García Manel Pérez José Alberola (Arte) Alex Rodríguez Miquel Molina

Redactores jefes: Enric Sierra (Web), Eugeni Madueño (Nuevos Contenidos), Joaquín Luna (Internacional), Jordi Barbeta (Política y Actualidad), Susana Quadrado (Tendencias), Albert Gimeno (Vivir), Llàtzer Moix (Cultura), Dagoberto Escorcia (Deportes), Ramon Aymerich (Economía), Carles Esteban (Continuidad), Celeste López (Redacción Madrid), Mariángel Alcázar (Casa Real), Jaime Serra (Infografía e Ilustración), David Airob (Fotografía), Núria García (Diseño), Josep Carles Rius (Magazine) y Fèlix Badia (Estilos de Vida).

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Secciones: Elisenda Vallejo (Internacional), Xavier Batalla (Corresponsal Diplomático), Isabel Garcia Pagan (Política y Actualidad), Pau Baquero (Opinión), Rosa M. Bosch (Tendencias), Ketty Calatayud (Vivir), Ignacio Orovio (Cultura), Juan B. Martínez (Deportes), Dolors Álvarez (Economía), Mariano Guindal (Madrid), Albert Aymamí (Fotografía), Francesc Puig (Diseño), Magí Camps (Edición), Albert Molins (Producción) y Carles Salmurri (Documentación). Consejeros de Dirección: Carlos Sentís y Jaime Arias.

La Europa del conocimiento

A implantación del llamado proceso de Bolonia ha provocado algunas protestas, muy minoritarias, entre los estudiantes y sigue suscitando prevenciones y un animado debate entre los profesores universitarios. La creación del futuro espacio europeo de educación superior es un proyecto de gran calado que trata de superar las fronteras estatales en beneficio del intercambio de conocimiento y la libre circulación de docentes, investigadores y alumnos, en un marco que favorezca la innovación, la mejora de la rentabilidad social de las inversiones educativas y el acercamiento de la sociedad y la esfera académica. La universidad tiene un papel insustituible en el desarrollo de nuestras sociedades, como tradicional espacio del saber crítico y como entorno catalizador de energías y recursos para formar profesionales de alto nivel y desarrollar investigaciones de largo alcance, cuyo beneficio general no siempre puede ser inmediato ni finalista. Todas las universidades de los países de la Unión Europea hacen frente a esta reforma histórica que, a pesar de sus puntos más controvertidos, debe ser saludada como un paso de gigante y una apuesta por la modernización. Caminar hacia un espacio universitario común obliga a una cierta armonización, lo cual rompe inercias y altera esquemas, a la vez que entran en crisis conceptos y herramientas usados hasta ahora. La convergencia de titulaciones, métodos, becas y sistemas de evaluación reclama una revisión a fondo de todo lo que se está haciendo, buscando la excelencia y la optimización de todos los circuitos y vigilando los riesgos de un incremento de la burocratización. De todo ello deberá salir, tarde o temprano, un cambio de mentalidad de profesores y estudiantes. El camino es complejo pero

E

Subdirectores:

su plausible objetivo merece orillar corporativismos y recelos, toda vez que se aborda un debate racional y tranquilo acerca de su concreción y de sus costes. En este sentido, hay que recordar que las premisas del proceso de Bolonia reclaman más esfuerzo inversor por parte de los gobiernos, extremo que ahora choca con el general recorte presupuestario en el marco de la presente crisis económica. No obstante, y pensando más allá del contexto inmediato, todas las administraciones españolas, tanto la central como las autonómicas, están comprometidas con el éxito de esta iniciativa y ello coloca este asunto en prioridad alta. Una universidad de calidad exige mayores aportaciones y mejores sistemas de aprovechamiento de los recursos. España, retrasada en relación con la media europea de inversión en este campo, no puede levantar el pie del acelerador, dado que el esfuerzo público en Educación no es algo que pueda comprenderse de manera aislada. Baste recordar que el indicador europeo de abandono prematuro de estudios señala que el 31% de los jóvenes españoles de entre 18 y 24 años no sigue sus estudios más allá de los ciclos obligatorios, frente al 14,8% del conjunto de la UE. Cuando se habla de los bajos niveles de instrucción, no se insiste lo bastante en la necesidad de prestigiar todos los niveles educativos, combatiendo sus eslabones más débiles. Es imprescindible que las administraciones y las autoridades universitarias expliquen a la sociedad en qué consiste exactamente el proceso de Bolonia para que se disuelvan muchos malentendidos y rumores acerca de este proyecto, y para que la discusión acerca de su implantación no esté dominada por los lugares comunes, las consignas fáciles y la demagogia, sino por la búsqueda de consensos que potencien la labor de profesores y estudiantes.

Victoria épica del tenis español

L tenis español culminó ayer el mejor año de su historia al lograr la Copa Davis 2008 en la ciudad argentina de Mar del Plata. Esta gesta deportiva –la tercera vez que se consigue– consagra a España definitivamente como uno de los grandes del tenis mundial, después de haber logrado la medalla de oro en los Juegos Olímpicos celebrados en Pekín y de haber colocado a su mejor tenista, Rafa Nadal, en el primer lugar del ranking internacional de jugadores profesionales. La baja de Rafa Nadal del equipo español de la Copa Davis, a causa de su lesión en la rodilla, hizo pensar en un principio que se perdían todas las posibilidades de salir victoriosos de la contienda, no sólo por la calidad del equipo contrario, sino porque además, al jugar en casa, los argentinos habían diseñado una pista rápida adaptada a las cualidades de sus jugadores. El hecho de haber ganado a Argentina sin Rafa Nadal, y con todo en contra, ha puesto de manifiesto el gran nivel del conjunto de los jugadores españoles y la acertada dirección del equipo por parte de Emilio Sánchez Vicario, que ha sabido gestionar con eficacia el gran capital deportivo del país, pese a las tensiones

con el presidente de la Federación Española de Tenis. Un torneo, la Copa Davis, que se juega a lo largo de todo el año, no sólo se gana cuando hay buenos jugadores, sino cuando, además, se trabaja en equipo, como ha sido el caso. En la final de Mar del Plata los héroes han sido Feliciano López y Fernando Verdasco, que tanto en sus partidos individuales como en el doble, han hecho vibrar estos días con su buen juego y con su esfuerzo a todos los aficionados del país. Ha sido la tercera vez que España consigue hacerse con la mítica ensaladera, el preciado trofeo de la tradicional y prestigiosa competición del tenis mundial. La gesta ha sido impresionante porque, además, la final se ha jugado en campo contrario y bajo una alta presión del público. Las finales de las otras dos copas Davis anteriores que ha ganado España se jugaron, en el año 2000, en el Palau Sant Jordi de Barcelona, y en el 2004, en Sevilla. Los triunfos del tenis español no son casualidad. Son fruto del esfuerzo de los deportistas, de su buena preparación técnica y de una afición constante y creciente desde que el mítico Manolo Santana logró sus primeras victorias en los grandes torneos internacionales.

Imágenes manipuladas

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l diario Le Figaro manipuló una fotografía de la ministra de Justicia francesa, Rachida Dati, para ocultar un anillo de Chaumet, valorado en más de 15.000 euros. El diario L'Express ha publicado la imagen original en la que se la ve con un aro de oro y brillantes en el dedo anular. El diario conservador ha argumentado que borró la sortija porque podía distraer al lector y perjudicar la imagen de la ministra. Pocas veces un periódico se ha disculpado tan mal de algo tan difícilmente defendible, porque trata a su clientela y a la política como menores de edad a los que hay que proteger aunque no lo hayan pedido. Es la segunda vez en pocos meses que la prensa francesa queda en evidencia por su afán de alterar la realidad, retocando fotografías. En aquella ocasión, fue la revista Paris-Match quien consiguió unos retratos del presidente Sarkozy remando en bañador en mitad de un lago. Como la foto remarcaba un michelín en la cintural del líder galo, la dirección de la publicación decidió hacerle un lifting gráfico en agradecimiento a su amistad con el editor. El uso de los programas de Photoshop suelen ser un mal negocio para

‘Le Figaro’ borró un anillo de Rachida Dati, pero ya Velázquez suprimió al conde duque de un óleo la prensa seria. El diario británico The Daily Telegraph recogió las veinte fotografías falsas más sorprendentes o polémicas aparecidas en los últimos años, la más célebre de las cuales es la foto trucada de Georges Bush sosteniendo un libro al revés junto a un escolar en la visita a un colegio. No menos escandalosa fue la manipulación del corresponsal libanés de la agencia Reuters, que durante la guerra entre Israel y Líbano del verano del 2006 exageró los ataques israelíes a golpe de ratón, ampliando las nubes de humo que cubrían Beirut. En julio del mismo año, el Gobierno iraní quiso demostrar al mundo su potencial armamentístico con la foto de nueve misiles lanzados al mismo tiempo. Como uno se retrasó, un simple retoque adelantó el despegue, sin que lo advirtiera el Financial Times o el Chicago Tribune, que la llevaron a sus portadas. En la historia moderna son numerosos las manipulaciones de los dictadores para esconder sus barbaridades o ensalzar su figura: Mao eliminaba a sus ex amigos de las fotos, Stalin borró de los retratos a Trotsky. Mussolini hizo desaparecer a un joven que cogía su caballo para dar aspecto heroico a la imagen. Pero incluso antes de inventarse la fotografía, tenemos el caso del óleo de Velázquez titulado La lección de equitación, donde, al lado del primogénito de Felipe IV, aparecía el conde duque de Olivares. Sin embargo, en una copia posterior del cuadro fue suprimido al haber caído en desgracia el valido. Dice una máxima del periodismo amarillo: no dejes que la realidad estropee un buen reportaje. Pero ello conlleva el riesgo de que la realidad se imponga y el periodista (y el medio) pierdan la credibilidad. Que es el valor que da sentido a la prensa.c