LA
EDAD
DE
LA
TIERRA
Cuando el libro del Presidente Joseph Fielding Smith “El hombre, su origen y destino” fue publicado, algunos fueron de la idea de que se deberia dar como curso en instituto. Uno de los profesores de instituto vino a mí y me dijo: “Si tenemos que seguir ese libro en forma exacta, [entonces nosotros] vamos a perder algunos de nuestros jóvenes.” [nota del traductor: JF Smith sostenia que la edad de la tierra es de 7mil+5mil años aprox. y por otro lado solo citaba escrituras y lideres que apoyaban la posicion de Smith haciendo caso omiso de material publicado por la iglesia de otros lideres como Talmage o Wisdoe] Le respondi: “No creo que debiera preocuparse.” Pensé que era una buena idea hablar de este tema en publico, a la siguente vez que tuve que ir a la reunion de la junta general de la escuela dominical, me levante y testifique de que la evidencia era muy fuerte a favor de que la edad de la tierra era de entre cuatro y cinco mil millones de años. Esa semana, el Presidente Smith me llamo y me pidio ir a verlo. Hablamos aproximadamente por una hora y me explicó sus puntos de vista. Le respondi: “Hermano Smith, he leído sus libros y conozco su punto de vista y entiendo como usted ve este tema. Es solo que se ve un poco diferente para mi.” Al terminar el me dijo: “Bueno, Hermano Eyring, me gustaría que pudiese venir y dejarme hablar con usted en algun momento cuando no este tan entusiasta.[when you are not quite so excited]“. Hasta donde yo pude ver, nosotros nos despedimos en el mejor de los terminos. Quisiera decir que yo sostuve al Presidente Smith como mi líder de la Iglesia al cien por ciento. Creo que el fue un gran hombre. El tuvo un background y una formacion diferente [a mi] en este tema. Quizas el tenía razón. Creo que el estaba en lo correcto en la mayoría de las cosas y que si tu le seguias, el te llevaria a lograr el reino celestial. Las escrituras registran los tratos de Dios con sus hijos desde un “comienzo” unos seis mil años atrás, pero no se ocupa del largo prólogo anterior excepto en unos breves párrafos. Las Escrituras nos hablan de seis períodos de creacion seguidos por un período de descanso. Durante estos períodos la Tierra se organizó y esencialmente obtuvo su forma actual. En la Versión King James de la Biblia, la expresión de estos periodos creativos se lee como “días.” El uso de este término ha dado lugar a por lo menos tres interpretaciones. En la primera, los “días” se interpretan en el sentido habitual del día de veinticuatro horas. En la segunda, los días de la creación se interpretan como mil años en base a declaraciones en las escrituras como 2 Pedro 3:8: “Un día es en el Señor como mil años y mil años como un día.” La tercera interpretación pone a los “períodos creativos” como tiempos de duración indeterminada y ve en el estudio de la tierra en como dar un nuevo significado a la extremadamente breve expresion de las escrituras. En otras épocas en el mundo cristiano todos estaban en apoyo por una o la otra de las dos primeras interpretaciones. Esto ya no es cierto. En las escuelas y en publicaciones seculares, la tercera es la interpretación generalmente aceptada. Por consiguiente, sea cual sea el punto de vista que podamos tener, tenemos que conocer el punto de vista presentado a nuestros hijos si queremos ser consejeros eficaces para ellos. El espesor acumulado de las rocas puestas en forma de sedimentos es de 130 kilometros. La tasa de deposición varía enormemente en el tiempo y el lugar, pero no es irrazonable darse una tasa promedio de unos 33 centimetros cada 250 años. Esto
conduce a una estimación aproximada de 112 millones de años como el tiempo necesario para depositar todos los sedimentos conocidos. Además, en mi opinión, la ordenada estructura de capas sedimentarias que se extienden horizontalmente, con sus fósiles, se presenta como una fuerte evidencia en contra de que la tierra ha sido armada en tiempos relativamente recientes, desde los escombros de mundos anteriores. Una manera cuantitativa de obtener la edad de los estratos y otras estructuras de tierra es mediante el uso de la desintegración radiactiva de diversos elementos. Una analogía de cómo funciona desintegración radiactiva puede ser útil. Si uno pudiera ver un incendio y notar que la mitad de la madera se quema la primera hora y que una hora después la mitad de lo que quedaba se ha quemado tambien, entonces se podría decir que el fuego obedece a la ley de desintegración radiactiva. Esta ley establece que en un determinado lapso de tiempo la misma fracción del combustible se quema, independiente de las circunstancias. Por lo tanto yendo hacia atras, mediante la medición del combustible restante en un incendio y la cantidad de cenizas ya producidos, se puede deducir la fracción del combustible consumido y así estimar cuánto tiempo el fuego ha estado prendido. Todos los elementos radiactivos se comportan como nuestra hipótesis de incendio. Independiente de las condiciones existentes, la misma fracción de los elementos radiactivos es siempre transformado a otro elemento en un determinado intervalo de tiempo. El nuevo elemento es las cenizas de los incendios radiactivos, por ejemplo, la mitad del potasio (peso atómico cuarenta) presente en un momento en cambiar a argón cuarenta lo hace en un plazo de 1300 millones de años, y la mitad de lo que queda se demora en cambiar otros 1300 millones de años, y así sucesivamente. Este período de 1300 millones de años se llama la vida media del potasio cuarenta. Cuando un mineral que contiene potasio cristaliza, normalmente no contiene nada de gases de argón. Con el paso del tiempo, el potasio 40 cambia a argon 40 a una tasa determinada por su vida media. Si el cristal no tiene quiebres entonces el argon liberado se conserva en el interior del cristal. Uno puede fundir el cristal, medir la cantidad de potasio y la cantidad de argón, y así determinar la edad del cristal. Si hay cantidades iguales de argon 40 y potasio 40, entonces la cristalización se produjo 1300 millones de años atrás. Si sólo hay una parte de potasio y tres partes argón, 2600 millones de años han transcurrido desde la cristalización del mineral original y así sucesivamente. Es evidente que cualquier mineral que contiene potasio constituye una piedra con un reloj incorporado que podemos usar para leer cuando fue el momento de la formación del mineral cristalino. Hay muchas complicaciones que pueden hacer al reloj dar tiempos incorrectos. Si algo de argón fue atrapado en el cristal cuando se formó, el reloj dara una medida de tiempo muy larga. Si algo del argón se ha escapado desde que se produjo la cristalización, el tiempo que indicara el reloj será demasiado corto. No obstante, teniendo cuidado de elegir los elementos adecuados con vidas medias y de una cuidadosa selección del cristal utilizado y usando mas de un tipo de “reloj” al mismo tiempo, se ha logrado una razonable consistencia en la escala de tiempo dada para la formación de los distintos estratos en la tierra.
Los relojes radiactivos, junto con la forma ordenada de muchos sedimentos que contienen fósiles han dado como resultado un acuerdo entre la mayoría de los científicos sobre la edad de la tierra de aproximadamente cuatro y medio mil millones de años. Por otro lado, la edad exacta de la tierra es aparentemente tan poco importante religiosamente que las Escrituras al esbozar la historia en la tierra lo hace solo en breves terminos. La acalorada controversia religiosa actual acerca del tema, sin duda sera resuleta en el tiempo y entonces nos parecera tan pintoresco como los argumentos medievales acerca de la forma de la tierra nos parecen ahora. A mi juicio, cualquiera que niega la ordenada disposición de sedimentos con sus propios relojes radiactivos se coloca a si mismo en una posición insostenible científicamente. En realidad, la antigüedad de la tierra no era un problema para dos de nuestros más grandes lideres y cientificos Santos de los Ultimos Dias: John A. Widtsoe y James E. Talmage. Sin embargo, hay grandes diferencias en la formación y los antecedentes de los miembros de la Iglesia. Por lo tanto, estoy completamente de acuerdo en que hay espacio en la Iglesia para las personas que piensan que los períodos de la creación fueron de 24 horas, mil años, o millones de años. Creo que es bueno debatir estas cuestiones y que cada individuo a trate de convencer a otros a lo que él piensa que es correcto. Es justo advertir a los padres y los maestros que nuestros jovenes se veran enfrentados a un muy importante volumen de evidencia científica apoyando la edad de la tierra en millones de años, y que un joven podría “tirar el niño fuera con la bañera” [nota del traductor: No tengo idea que dicho es ese, en ingles es "throw the baby out with the bath"] a menos que se le permita a buscar la verdad, cualquiera sea la fuente, sin ningun prejuicio. El Señor hizo el mundo en alguna maravillosa manera que yo solo puedo, en el mejor de los casos, solo tenuamente comprender. A mí me parece sacrílego suponer que realmente entiendo y que se como El lo hizo. El solo puede decirmelo en un lenguaje simbolico que yo puedo entender solo tenuemente, pero que espero comprender mas completamente en las eternidades por venir. Él creó el mundo y mi fe no se basa en los detallados procedimientos de como lo hizo.